GOTA A GOTA…

"No se aprecia el valor del agua hasta que se seca el pozo." (Proverbio inglés) Nuestro
planeta está lleno de recursos, todos ordenados según la región y los climas, sin embargo,
existe uno que domina la mayor parte de su superficie y vital para la vida, el agua. Este
recurso ha comenzado a escasear para el uso humano debido a varios factores y se han
implementado varias acciones para intentar salvar lo que nos queda del vital líquido.
Desde el surgimiento de la civilización humana, una de las más grandes necesidades ha
sido el abastecimiento del líquido, sin embargo esto ha generado en las últimas décadas que
las grandes metrópolis se conviertan en concentradoras de agua, “secando” a los pequeños
pueblos aledaños. Muchos ríos y cuencas hidrográficas están contaminados por productos de
desechos industriales, de la agricultura y de origen humano, en tanto que otras se están
secando porque la gente está utilizando más agua de la que puede reponer la naturaleza
[ CITATION Gru02 \l 2058 ] . El 71 % de la superficie del planeta esta cubierto por agua; millones
de toneladas, en forma de vapor, flotan en la atmósfera y sin embargo grandes regiones
terrestres carecen de ella[CITATION Man97 \l 2058 ]. Otro problema que ha afectado a la
distribución justa del agua es el cambio climático, pues el calentamiento generado por éste ha
propiciado que algunas zonas pierdan la precipitación promedio que recibían, desertificando la
zona, mientras que otras reciben un mayor volumen del líquido creando irregularidades, como
pudo apreciarse cuando se compararon las famosas imágenes “Blue Marble” de la NASA:

Blue Marble 2012

Blue Marble 2001

Como se aprecia en las imágenes, la desertificación que afecta al planeta reduce la

cantidad de vida vegetal en la tierra, lo que ocasiona una reducción de la humedad en el
ambiente, y aumenta el calor, lo que ocasiona a su vez mayor evaporación del agua. Está
abandona mantos acuíferos subterráneos, lagos, ríos, e incluso glaciares y llegan al mar,
mezclándose con el agua salada. Esto ha afectado a la población humana de todo el planeta,
así como su fauna y flora.
Podemos apreciar más fácilmente esto
en ciudades donde la precipitación anual es
casi nula y se ubican en zonas con clima árido
o desértico. Ciudad Juárez por ejemplo,
ubicada en una latitud de 31° 07' - 31° 48' y
longitud de 106° 10' - 106° 48', justo entre los
desiertos de Chihuahua y Arizona. La ciudad
comenzó su crecimiento industrial de una
forma acelerada, creando en pocos años la
necesidad de abastecer a una población cada
vez mayor, que sigue en aumento.
Anteriormente la mayor fuente de agua para
abastecer la población fue el Rio Bravo, sin
embargo a partir de 1906 se firmó un tratado
con Estados Unidos donde solo el 2.8% del
caudal del río se destinaba a México, donde su
primer paradero es Ciudad Juárez, donde sigue
su trayecto a través del caudal hasta llegar al
Golfo de México. El agua del río es usada
principalmente en la irrigación. Otra fuente
importante de agua para nuestra ciudad es el Acuífero del Hueco. “En el año 1999 se
bombearon 235,594.680 m3 de agua de este acuífero, de los cuales 63% fue bombeado por
Ciudad Juárez” [CITATION Men06 \l 2058 ]. Se estima que para el año 2030 el agua utilizable de
este manto se agotará.
Otro gran ejemplo donde el agua escasea es el
continente Africano, donde el norte comprende el
desierto del Sahara, prácticamente seco y los pocos
pozos utilizables para los humanos han sido
contaminados con metales pesados, químicos e
incluso desechos radioactivos, originando una
verdadera guerra por conseguir un poco de esta.
“Además del desierto del Sahara, cuenta con otros
dos desiertos importantes, el del Kalahari y Namib,
que se expanden y disminuyen las reservas de agua
potable”[ CITATION Obs11 \l 2058 ]. Y si el agua no
escasea en zonas donde la pobreza se hace notar,
puede que está se encuentre muy contaminada ya sea
con desechos del hombre o con bacterias y virus que
pueden llegar a causar grandes epidemias, por
ejemplo en Bangladesh, donde en 1974 se hiso un
estudio donde se veía un alto índice de mortalidad
pues en el agua se encontraban enfermedades como la Tifoidea y la Disentería [CITATION
FEu86 \l 2058 ].

Sin embargo no todo es negativo en cuanto al agua, porque aunque existan desiertos
totalmente secos o lugares donde el agua comienza a escasear, la ONU ha propuesto y puesto
en acción varias iniciativas que contribuyen a un mejor aprovechamiento del agua, así como
su reutilización y saneamiento. Unos ejemplos son “2013: Año Internacional de la
Cooperación en la esfera del agua”, que busca mayor cooperación sobre los desafíos que
afronta la gestión del agua debido a una mayor demanda. “Convenio sobre la Protección y
Utilización de los Cursos de Agua Transfronterizos y de los Lagos Internacionales”, donde se
incita a compartir la obligación de cuidar y mantener el agua que se encuentra entre dos o más
territorios de una manera equitativa. “Convención de las Naciones Unidas sobre el derecho de
los usos de los cursos de agua internacionales para fines distintos de la navegación”, firmado
en 1997 es el único tratado que se aplica universalmente a los recursos de agua dulce
compartidos[ CITATION ONU \l 2058 ]. Solo en Estados Unidos, se planea restaurar zonas donde
el agua predominaba, un aproximado de 400,000 millas de ríos y arroyos serán restaurados en
los siguientes 20 años, así como un millón de acres de lagos, sin incluir a los Grandes
Lagos[ CITATION Nat92 \l 2058 ].
Analizando estos aspectos, desde las causas del cambio de distribución del agua, sus
consecuencias en la vida de La Tierra y como los seres humanos nos hemos visto involucrados
en este nuevo problema ambiental, podemos decir que nos encontramos en un punto crítico de
la historia. Y no solo porque la ciencia y la tecnología se encuentran en su edad dorada, sino
porque de no seguirse las medidas ya implementadas y no educar a la población sobre el uso
adecuado de este líquido, nos podríamos ver involucrados en una guerra mundial por el agua,
se convertiría en la cosa más valiosa y nuestra civilización correría el riesgo de desaparecer.
Por eso hay que tomar conciencia, implementar acciones individuales para que en el futuro
sigan existiendo lugares donde podamos disfrutar del agua. Cosas tan simples como bañarse
rápido, cerrar la llave e incluso evitar albercas en zonas desérticas, pueden ser la diferencia
entre un mundo rebosante de vida, o uno donde el agua no sea fuente de vida, sino la portadora
de la muerte.

Bibliografía
Grupo del Banco Mundial. (2002). Acceso a Agua Potable. Obtenido de
http://www.worldbank.org/depweb/spanish/modules/environm/water/print.html

Guerrero, M. (1997). El Agua. México: La ciencia desde México.

McJunkin, F. E. (1986). Agua y Salud Humana. México: Limusa.

National Research Council (U.S.). (1992). Restoration of Aquatic Ecosystems : Science, Technology,
and Public Policy. Washington D.C.: National Academy Press.
Observador Global. (11 de Febrero de 2011). África: la guerra por el agua. Obtenido de Observador
Global.com: http://observadorglobal.com/medio-ambiente/africa-la-guerra-por-el-agua-
11171

ONU-DAES. (s.f.). Cooperación en materia de agua. Obtenido de Decenio Internacional para la Acción
"El agua fuente de vida":
http://www.un.org/spanish/waterforlifedecade/water_cooperation.shtml

Salas-Plata, J. M. (Mayo-Agosto de 2006). Problemática del Agua y Crecimiento Urbano en Ciudad

Juárez, Chihuahua. Recuperado el Noviembre de 2012, de www2.uacj.mx/IIT/CULCYT/mayo-
agosto2006/4ARTAGUA.PDF