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TEMA 11 COMÚN

REGULACIÓN DE LA FUNCIÓN PÚBLICA DE LA JUNTA DE


ANDALUCÍA. NORMAS CONSTITUCIONALES. CARÁCTER DE LA
LEGISLACIÓN ESTATAL. LA LEY 6/1985, DE ORDENACIÓN DE LA
FUNCIÓN PÚBLICA DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. ESTRUCTURA Y
CONTENIDO.

1. REGULACIÓN DE LA FUNCIÓN PÚBLICA DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA. NORMAS


CONSTITUCIONALES. CARÁCTER DE LA LEGISLACIÓN ESTATAL.

La expresión función pública alude al conjunto de medios personales de que


dispone la Administración pública para el desarrollo de su actividad.

En concreto, la Función Pública de la Junta de Andalucía es definida normativamente como


aquellas personas integradas en la Administración de la misma y sus Organismos
Autónomos por una relación de servicios profesionales y retribuidos, con exclusión de
los titulares de cargos nombrados por Decreto.

1.1 NORMAS CONSTITUCIONALES

La Constitución Española, fundamentalmente en su Título IV regula la Administración


Pública y concretamente en su artículo 103 en el que establece que:

La Administración Pública sirve con objetividad los intereses generales y actúa de


acuerdo con los principios de:

 Eficacia
 Jerarquía
 Descentralización
 Desconcentración
 Coordinación

con pleno sometimiento a la Ley y al Derecho.

La Ley regulará el estatuto de los funcionarios públicos, el acceso a la función


pública de acuerdo con los principios de mérito y capacidad, las peculiaridades del
ejercicio de su derecho a la sindicación, el sistema de incompatibilidades, y las
garantías de imparcialidad en el ejercicio de sus funciones.

Este precepto además de dar directrices o criterios que deberán incorporarse al citado
estatuto de los funcionarios públicos, realiza una reserva de Ley por la cual habrán de
regularse por ley o norma de igual rango una serie de materias relacionadas con la
Función Pública. Dichas materias reservadas a la Ley son las siguientes:

a) El Estatuto de los funcionarios públicos, donde se regule el régimen jurídico de


los mismos, conteniendo derechos y deberes, así como su relación jurídica con la
Administración a la que sirven.

b) El sistema de acceso a la Función Pública o, al menos las bases del mismo.


Dicho sistema deberá tener en cuenta los principios constitucionales de “mérito y
capacidad”. A ellos hay que unir necesariamente el de igualdad, principio general que
según el art- 9 C.E. es valor superior del ordenamiento jurídico español.

Igualmente ha de tenerse en cuenta la Sección I del Capítulo II del Título I “ De los


derechos Fundamentales y las Libertades Públicas” ya que varios artículos se refieren a la
Administración pública.
Así, el art 23 C.E. regula el derecho de participación de los ciudadanos españoles, al
establecer que “los ciudadanos tienen el derecho a participar en los asuntos públicos,
directamente o por medio de representantes libremente elegidos en elecciones periódicas por
sufragio universal”, y sobre todo en su apartado 2º en relación con la Función Pública al decir
que: “Asimismo, tienden derecho a acceder en condiciones de igualdad a las funciones
y cargos públicos, con los requisitos que señalen las leyes”.

El art 25 in fine de la C.E. establece que la Administración civil no podrá interponer


sanciones que, directa o subsidiariamente, impliquen privación de libertad.

En el art 26 se prohíben los Tribunales de Honor en el ámbito de la Administración civil


y de las organizaciones profesionales.

El art 28 reitera que la Ley regulará las peculiaridades del ejercicio del derecho de
sindicación de los funcionarios públicos.

También en relación con la Administración Pública, es de gran trascendencia la figura del


Defensor del Pueblo que se regula en el art. 54 que establece que dicha institución, como
Alto Comisionado de las Cortes Generales es designado por éstas para la defensa de
los derechos comprendidos en el Título I, a cuyo efecto podrá supervisar la actividad
de la Administración, dando cuenta de sus investigaciones a las Cortes Generales.

Por último no se puede olvidar que el Gobierno es el que, según el art 97 de la C.E.,
dirige la política interior y exterior y la Administración Civil y Militar.

1.2 NORMAS BÁSICAS Y CARÁCTER SUPLETORIO DE LA LEGISLACIÓN ESTATAL

Hasta la entrada en vigor de la Ley 30/1984 había sido tradicional en nuestro régimen
jurídico de la Función Pública la falta de unidad en cuanto a las normas reguladoras de
la misma, ya que cada una de las Administraciones Públicas tenía normas propias y
diferentes de las demás.

Con dicha Ley de Medidas para la Reforma de la Función Pública, las


Administraciones Públicas van a tener que partir de unas normas comunes y de directa
aplicación a las mismas en algunas materias.

La razón que explica la aparición en nuestro Derecho de esas normas comunes, que se
denominan básicas, está en nuestra propia Constitución, en su art 149.1.18, que establece
entre otras, como competencia exclusiva del Estado determinar “las bases del
régimen jurídico de las Administraciones Públicas y del Régimen estatutario de sus
funcionarios, que, en todo caso, garantizarán a los administrados un tratamiento común
ante ellas.

El citado art confiere al Estado la Competencia para determinar las bases o legislación
básica en materia de Función Pública (de cualquier Administración Pública de que se trate),
sea estatal, autonómica o local) y para aprobar las normas que, por ser bases del régimen
estatutario de los funcionarios de dichas Administraciones, sean aplicables a las mismas.

De acuerdo al art 149.3 de la C.E. “El derecho estatal será, en todo caso, supletorio
del derecho de las CC.AA. Esto es así para las materias que sean de competencia
exclusiva de las CC.AA.

De conformidad con el art 47 del Estatuto de Autonomía para Andalucía es una


competencia compartida de la CC.AA. “El régimen estatutario de su personal
funcionario y estatutario, así como de su personal laboral, sin perjuicio de lo dispuesto
en el art 76 de este Estatuto”; estableciendo el art 76 que “corresponde a la Junta de
Andalucía, respetando el principio de Autonomía local:
a) La competencia exclusiva sobre planificación, organización general, la
formación y la acción social de su función pública en todos los sectores
materiales de prestación de los servicios públicos de la CC.AA.

b) La competencia compartida sobre el régimen estatutario del personal al


servicio de las Administraciones andaluzas.

c) La competencia exclusiva en materia de personal laboral, sobre la adaptación


a las necesidades derivadas de la organización admnistrativa y sobre la formación de
este personal”.

El mismo Estatuto de Autonomía en su art 136 establece que “la ley regulará el
estatuto de los funcionarios públicos de la Administración de la Junta de Andalucía, el acceso
al empleo público de acuerdo con los principios de mérito y capacidad, y establecerá un
órgano administrativo de la función pública resolutorio de los recursos que se
interpongan sobre esta materia”

2. LA LEY 6/1985, DE ORDENACIÓN DE LA FUNCIÓN PÚBLICA DE LA JUNTA DE


ANDALUCÍA. ESTRUCTURA Y CONTENIDO.

El Parlamento andaluz aprobó la Ley 6/1985, de 28 de noviembre, de Ordenación de


la Función Pública de la Junta de Andalucía en cumplimiento del artículo 11 de la Ley
20/1984, según el cual “las CC.AA. procederán a ordenar, mediante Ley de sus
respectivas Asambleas legislativas, su función pública propia”.

“La Función Pública de Andalucía está constituida por las personas integradas en la
Administración de la misma y de sus Organismos Autónomos, por una relación de
servicios profesionales y retribuidos, en los términos que en esta Ley se señalan, con
independencia de la Administración Pública de donde, en su caso procedan. No forman
parte de ella los titulares de cargos que sean nombrados por Decreto”. (art 3)

Y a tal fin, esta Ley faculta expresamente al Consejo de Gobierno de la Junta, que
ejerce la función ejecutiva y la potestad reglamentaria en materia de la Función Pública de la
Junta de Andalucía. (art 4).

La Ley 6/1985 pertenece a la categoría de “Leyes institucionales”, concepto que intenta


evocar una función vertebradora y configuradora de los medios básicos para el
ejercicio del poder político.

2.1 ESTRUCTURA

La Ley 6/1985 de Ordenación de la Función Pública de Andalucía se estructura en 6


Capítulos, 50 Artículos, 7 Disposiciones Adicionales, 8 Disposiciones transitorias y 2
Disposiciones Finales
ESTRUCTURA DE LA LEY 6/1985

Capítulo I Disposiciones generales, arts 1 al 3

Capítulo II Atribuciones orgánicas, arts 4 al 9

Capítulo III Estructura de la Función Pública de la Junta de Andalucía, arts 10 al 15

Capítulo IV

Personal,
Selección arts 16 al 34 arts 35 a 34
de Personal,
-- Sección
Sección primera: Funcionarios,
Primera: oferta artspúblico
de empleo 16 al 20
y pruebas selectivas, arts 35
Capítulo V - Sección segunda: Carrera administrativa de los funcionarios, arts 21 al
al 42
- 27
Sección Segunda: Pruebas selectivas y provisión de puestos de trabajo,
- Sección tercera:
arts 43 al 45 eventuales, art 28
- Sección cuarta: interinos y situaciones de interinidad. Arts 29 al 31
- Sección quinta: laborales, arts 29 al 31

Capítulo VI Retribuciones, arts 46 al 50

2.2 CONTENIDO
La función Pública de la Junta de Andalucía se estructura básicamente por medio de la
relación de puestos de trabajo y de las plantillas presupuestarias

Integra a los funcionarios en los cuerpos propios

Se habilita a la Administración para que en un año reajuste su personal a la Relación


de Puestos, estableciendo un mecanismo de traslados forzosos en base a las
necesidades de servicio y a la idoneidad del personal

La Ley acoge a personal eventual y al laboral con una equiparación funcional y


retributiva entre funcionarios y laborales.

Regula detalladamente las competencias en materia de personal, atribuyéndolas a la


Consejería de Presidencia, hoy residenciadas en la Consejería de Hacienda y
Administración Pública.

Posibilita la promoción profesional y derecho a la carrera administrativa a través de la


promoción interna, consolidación de grado y provisión de puestos.

Reconocimiento de peculiaridades por ciertos grupos, para el personal docente,


sanitario e investigador.

Regulación de los sistemas de provisión de puestos, selección de personal, a través


de convocatoria pública para puestos de libre designación, concurso de méritos y cobertura
provisional de puestos.

Regulación del personal eventual e interino.

Regulación de la oferta de Empleo Público: serán objeto de oferta de Empleo Público


las vacantes presupuestariamente dotadas cuya cobertura se considere necesaria y
que no puedan ser cubiertas con los efectivos de personal existentes. Las vacantes
de personal funcionario se agruparán por grupos, cuerpos, especialidades y, en su caso, por
opciones de acceso; y las de personal laboral por grupos y, en su caso, por categorías.

Estructura retributiva de los funcionarios, dividida en retribuciones básicas y


complementarias.

La Ley 6/1985 establece un conjunto de rasgos particulares para adaptarse a la


situación particular de la CC.AA.

a) El sistema se apoya en la relación de puestos de trabajo, que no debe ser un


documento formal, sino que sea la expresión de las necesidades reales
presentes y futuras de la Junta de Andalucía, o sea, el repertorio de los medios
personales que se consideran adecuados para la realización de las tareas que la
Junta asume.
Concebida así la relación como un punto de partida dinámico, a partir de ella se
estructura la Función Pública y se determinan los derechos y obligaciones del
personal, sean funcionarios, laborales o eventuales.

b) La eficacia de la relación de puestos de trabajo encuentra dos dificultades


iniciales:

 Limitaciones presupuestarias

 El ajuste entre los efectivos hoy existentes y las necesidades


definidas

Por ello la Ley establece diferentes mecanismos, cuya novedad merece resaltarse:

 En primer lugar se hablita a la Administración para que en el plazo de


un año, contado a partir de la entrada en vigor de la Ley, proceda a una
reajuste entre el personal y la relación de puestos de trabajo, de tal
manera que puedan ser trasladados a cada puesto los funcionarios más
adecuados para cada uno de ellos, con independencia del que estén
ocupando.

 En segundo lugar, se establece otro mecanismo de adecuación


permanente a través de fórmulas de trabajos forzosos derivados de
las necesidades del servicio y la idoneidad del personal.

c) La Ley se preocupa de precisar el papel que dentro de la Función Pública de


Andalucía van a desempeñar tales cuerpos; para reducirlos estrictamente a un mejor
servicio de los intereses generales.

d) La Ley es una Ley de la Función Pública. Los eventuales, los interinos y los
laborales se encuentran acogidos a esta Ley.

e) Particular atención se dedica a los sistemas de provisión de puestos de trabajo y de


selección de personal. Producida una vacante, habrá de proveerse de acuerdo con
las técnicas de provisión entre los efectivo del personal existente en la Junta de
Andalucía, y las vacantes resultantes se ofertarán al público mediante los
correspondientes sistemas de selección. El acceso tiene lugar de ordinario a través
de los niveles básicos de cada Grupo o Cuerpo, que será el escalón inicial de la
carrera posterior de cada funcionario, y, por otro lado, se conceden facilidades
especiales de acceso a quienes no siendo funcionarios de la Junta de
Andalucía son funcionarios de otras Administraciones Públicas y, en cuanto
tales, disfrutan presumiblemente de unos conocimientos y de una experiencia que
interesa captar a la Función Pública de Andalucía. Las pruebas de acceso a la
condición de funcionario de carrera no han de ser comunes, por lo que los
interinos pueden acceder a la condición de funcionario mediante concurso-
oposición.

La Ley 6/1985 se ha ido desarrollando ampliamente a través del desarrollo reglamentario.

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