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La 

filiación es la relación jurídica que se establece entre padres e hijos y de la que se


derivan una serie de derechos y obligaciones, como por ejemplo:

 Apellidos
 Nacionalidad y vecindad civil
 Alimentos
 Guarda y custodia
 Patria potestad
 Derechos sucesorios

La filiación puede ser:

Natural: cuando se produce de manera biológica o a través de técnicas de


reproducción humana asistida, diferenciándose entre matrimonial y extramatrimonial.

Adoptiva

Sin embargo, en la actualidad no existe ninguna diferencia legal entre hijos naturales
o adoptivos, matrimoniales o extramatrimoniales.

La filiación se determina por inscripción de ésta en el Registro Civil, por


sentencia judicial, por su reconocimiento ante el encargado del Registro Civil en
testamento o en otro documento público, por posesión de estado, o por expediente de
jurisdicción voluntaria según las normas del Registro Civil.

Acciones de filiación:

Teniendo en cuenta que la filiación es la relación jurídica que se establece entre


padres e hijos, se entiende por acciones de filiación aquellas que tienden, mediante
sentencia, a imponer una relación paterno-filial o a destruir la presunta.

Las acciones de filiación pueden ser:

De reclamación cuando pretenden del tribunal la determinación de la filiación a favor


de un progenitor, que puede ser planteada por la madre, el padre y el hijo o hija.

De impugnación, cuando se pretende desvirtuar la filiación presunta, que


corresponde al padre y al hijo, pudiendo ejercerse de manera independiente o
conjunta.

La mujer podrá ejercitar la acción de impugnación de su maternidad justificando la


suposición del parto o no ser cierta la identidad del hijo.

Tanto para resolver tus dudas sobre filiación, procesos de determinación de la filiación
y todas las novedades legislativas que se produzcan al respecto, es importante contar
con abogados especializados en la materia que nos guíen y asesoren, resolviendo
todas las dudas legales que puedan surgir.
El 23 de julio de 2015 con la entrada en vigor de la Ley de Jurisdicción
Voluntaria se introducen modificaciones en el reconocimiento de la filiación no
matrimonial y en los procesos de adopción. Para conocer todos los detalles de
estas modificaciones, puedes consultar nuestra sección de familia, donde encontrarás
otras consultas, noticias y artículos jurídicos que te ayudarán a entender los cambios
producidos.

OTROOOOO

La filiación, es el vínculo jurídico que existe entre dos personas de las cuales una es el padre o
la madre de la otra, si la relación se contempla de la madre al hijo se llama filiación materna
por el contrario si se contempla del padre al hijo se llama filiación paterna, la filiación es el
punto de partida del parentesco, en cuanto a la filiación materna el parto permite conocer con
certeza la relación biológica entre la madre y el hijo que ha dado a luz, en el caso de la filiación
paterna solo puede ser conocida a través de presunciones (Ej. los hijos nacidos dentro
del matrimonio), en caso de disputa, una vez que ha quedado probada la maternidad una serie
de circunstancias de tiempo y lugar nos permite inferir que hombre a engendrado a
aquella persona cuya filiación se trata de establecer.
El concepto de filiación es básico en las sociedades organizadas por parentesco, en la medida
que permite a los miembros de una sociedad reconocer la pertenencia de una persona a un
determinado segmento social, ya que, la finalidad de esta es permitirles a las personas conocer
su verdadera procedencia biológica. Existen diferentes formas de filiación como el caso de la
filiación biológica, la filiación social y la filiación jurídica.
La Filiación Biológica se refiere al hecho natural causado por la reproducción humana; en
este contexto, todo humano tiene una filiación, ya que toda persona es hijo de alguien.
Finalmente, la Filiación Jurídica alude al vínculo jurídico constituido por el Derecho, en
particular, la Ley, En el contexto del Derecho, la que obviamente interesa es la filiación jurídica,
ya que lo que importa es establecer el estatuto que creará y regirá el estado jurídico de las
personas. Esta caracterización tautológica implica las siguientes consecuencias lógicas:
1) que para establecer la filiación jurídica, sólo puede atenderse a las normas jurídicas,
principalmente legales, y secundariamente jurisdiccionales, en la materia; esto significa que
estamos hablando que se trata de una regimentación de atribución de calidades (las cuales
constituyen supuestos normativos que hacen operar las normas del estatuto para la
adjudicación de ciertos derechos y deberes a los individuos involucrados);
2) que no se trata de una deducción desde la relación natural originada por la procreación,
sino, insistimos, en una atribución o adjudicación normativa;
3) que puede ir en contra aun de la filiación biológica; por ejemplo, si alguien siendo padre
biológico, pierde el juicio de reclamación por sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada;
4) para entender la configuración de la filiación, hay que atender a los específicos criterios que
una legislación particular consagre en su interior, en un momento dado, lo que es distinto de
los contextos antes mencionados.
5) que puede que alguien no tenga filiación (que un humano no sea hijo, jurídicamente
hablando, de nadie), dependiendo de los criterios que se adopten. Porque aun cuando exista
una opción por la protección del Derecho a las relaciones de filiación no jurídicas, expresadas
como criterios, dependerá del criterio específico escogido por la ley, y su ámbito, el mayor o
menor alcance de aquella protección"
También coexiste la filiación por naturaleza y por adopción. A su vez la filiación por naturaleza
puede ser matrimonial (cuando el padre y la madre están casados entre sí) y no matrimonial
(cuando el padre y la madre no están casados entre sí, con independencia de que alguno de los
dos, o ambos, estén casados con otras personas). Ha desaparecido así en nuestro Derecho el
concepto de hijo ilegítimo (el nacido fuera del matrimonio) o natural (el nacido de personas
que podían contraer matrimonio entre sí pero no estaban casadas), Actualmente no existe
diferencia alguna entre los hijos por naturaleza, matrimoniales o extramatrimoniales,
o por adopción ya que, según el Código Civil, la filiación matrimonial y la no matrimonial, así
como la adoptiva surten los mismos efectos, para los efectos del apellido se impondrá en
primer lugar el primer apellido del padre y en segundo lugar el primer apellido de la madre,
Según el Código Civil, se presumen hijos del marido los nacidos después de la celebración del
matrimonio y antes de los trescientos días siguientes a su disolución o a la separación legal o de
hecho de los cónyuges. No obstante el marido puede impugnar la paternidad cuando considere
que el hijo no es suyo, pero tendrá él que probarlo.
OTROOOO

1. REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA. UNIVERSIDAD FERMIN TORO.


ESCUELA DE DERECHO. DERECHO CIVIL IV FAMILIA. AUTOR: LUIS CONTRERAS.
SAIA A. TUTOR: ANTONELLA CIANFAGLIONE.
2. 2. LA FILIACIÓN. La filiación es un vínculo jurídico, el cual es existente entre dos personas,
donde por un hecho natural o por un acto jurídico una persona es descendiente de la otra. Dentro
del marco jurídico de la relación filial puede darse que no toda persona tenga una filiación o
estado filial o que la filiación biológica puede perfectamente no coincidir con la filiación
jurídica, toda vez que el derecho extrae un efecto de tipo jurídico del primero que no siempre es
idéntico; por ejemplo, si alguien siendo padre biológico, pierde el juicio de reclamación por
sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada. Importancia: Esta es de suma importancia, ya
que la filiación en el campo del derecho, junto al matrimonio forman los dos pilares
fundamentales de esta rama del derecho. Pues si bien el primero constituye la base de la familia
organizada, la filiación lo es de la estructura familiar: el parentesco, provenga o no de la unión
matrimonio. De la filiación derivan: el parentesco consanguíneo, la patria potestad, los deberes
y derechos alimentarios, el nacimiento de incapacidades. La vocación hereditaria y el apellido.
3. 3. LA FILIACIÓN. Principios de la Filiación. 1. Los efectos de la filiación son independientes
del medio de prueba aportado: Es decir que, probada que sea la filiación, aunque la ley exija
medios específicos en ciertos casos, nacerán todos los efectos que de ella derivan. 2. Los efectos
de la filiación son independientes del momento de su prueba: De tal manera que, probada la
filiación, sus efectos abarcan tanto el presente como el futuro, sin que sea exigible que tal
prueba deba tener lugar en determinado momento. 3. No existe filiación, si ésta no está
legalmente probada: En efecto, nadie puede alegar a su favor los efectos derivados de la
filiación que pretenda respecto a determinada o determinadas personas, si no la ha probado
fehacientemente, por cualquier medio idóneo reconocido por el derecho.
4. 4. LA FILIACIÓN. Determinación de la Filiación. Según el ordenamiento jurídico, la filiación
puede recurrir a ciertos factores que la determinan concreta y puntualmente. Su objetivo es
facilitar la constitución del estado filial, mediante el establecimiento legal de tipos de hechos
relativamente simples de constatar en la práctica, siendo una expresión externa del criterio-base.
Esta materia va a depender de cada legislación nacional para su establecimiento. En Venezuela,
el Código Civil en el Título V, se describe: 1. Capítulo I, De la determinación y pruebas de
filiación materna, artículos 197 al 200; 2. Capítulo II, De la determinación y pruebas de filiación
paterna, artículos 201 al 212, específicamente.
5. 5. LA FILIACIÓN. Determinación y Pruebas de la Filiación Materna. Artículo 197.- La
filiación materna resulta del nacimiento, y se prueba con el acta de la declaración de nacimiento
inscrita en los libros de Registro Civil, con identificación de la madre. Artículo 198.- En defecto
de la partida de nacimiento, son también pruebas de filiación materna: • La declaración que
hiciere la madre o después de su muerte, sus ascendientes, con el fin de reconocer la filiación,
en las condiciones y formalidades que señalan en el Capítulo III de éste libro. • La posesión de
estado del hijo, establecida de conformidad con las reglas contempladas en ese mismo capítulo.
Artículo 199.- A falta de posesión de estado y de partida de nacimiento, o cuando el hijo fue
inscrito bajo falsos nombres, o como nacido de padres inciertos, o bien si se trata de suposición
o sustitución de parto, la prueba de filiación materna puede en juicio con todo género de
pruebas, aun cuando en estos dos últimos casos, exista acta de nacimiento conforme con la
posesión de estado. Artículo 200.- La prueba contraria puede hacerse por todos los medios
propios para demostrar que la persona de quien se trata no es realmente el hijo de la mujer que
el pretende tener por madre.
6. 6. LA FILIACIÓN. Determinación y Pruebas de la Filiación Paterna. Artículo 201.- El marido
se tiene como padre del hijo nacido durante el matrimonio o dentro de los 300 días siguientes a
su disolución o anulación. Sin embargo, el marido puede desconocer al hijo, probando en juicio
que le ha sido físicamente imposible tener acceso a su mujer durante el período de la concepción
de aquél, o que en ese mismo período vivía separado de ella. Artículo 202.- Si el hijo nació
antes de que hubiesen transcurrido 180 días después de la celebración del matrimonio, el marido
y después de su muerte, sus herederos podrán desconocerlo con la simple prueba de la fecha del
matrimonio y la del parto. Artículo 203.- El marido también puede desconocer al hijo que haya
nacido después de 300 días de presentada la demanda de nulidad del matrimonio, la demanda de
divorcio o de separación de cuerpos, o la solicitud de ésta, o antes de que hubieren transcurrido
180 días a contar de la fecha en que quedó definitivamente firme la sentencia que declaró sin
lugar la demanda o terminado el juicio. Artículo 204.- El marido no puede desconocer al hijo
alegando su impotencia, a menos que sea manifiesta y permanente. El desconocimiento no se
admitirá, aún en ese caso, cuando la concepción ha tenido lugar por la inseminación artificial de
la mujer con autorización del marido. Artículo 205.- El marido tampoco puede desconocer al
hijo, alegando y comprobando el adulterio de la mujer a no ser que esta hecho haya ocurrido
dentro del período de la concepción y el marido pruebe además, otro u otros hechos o
circunstancias tales que verosímilmente concurran a excluir su paternidad. Artículo 206.- La
acción de desconocimiento no se puede intentar después de transcurridos 6 meses del
nacimiento del hijo o de conocido el fraude cuando se ha ocultado el nacimiento. En caso de
interdicción del marido este lapso no comenzará a correr sino después de rehabilitado.
7. 7. LA FILIACIÓN. Efectos de la Filiación. 1. Los Apellidos: la filiación determina los
apellidos, que serán, por este orden, el primero del padre y el primero de la madre, aunque el
hijo, al alcanzar la mayor edad, podrá solicitar que se altere el orden de los apellidos. Existe el
proyecto de permitir a los padres desde el principio la alteración del orden habitual de los
apellidos. Si la filiación paterna es la única determinada, los hijos tendrán los apellidos del
padre, en el mismo orden que éste. Si es la materna, cabe invertir el orden. Si posteriormente se
determina la filiación, perderán vigencia los apellidos asignados, aunque cabe solicitar la
conservación de los que se vinieran usando. 2. Los padres tienen especiales funciones de
protección, respecto de los hijos. Las fundamentales se engloban en la patria potestad, que luego
veremos. Sin embargo, ésta no las agota aunque no ostenten la patria potestad, están obligados a
velar por los hijos menores y a prestarles alimentos. 3. Los hijos, aunque no estén sometidos a
patria potestad, deben respetar siempre a los padres. 4. Los hijos tienen en la herencia de los
padres derecho a la legítima. En la sucesión intestada son los primeros llamados. Los padres, a
falta de descendientes del hijo, tienen también derecho a legítima y son llamados a la sucesión
intestada.
8. 8. LA FILIACIÓN. Tipos de Filiación. 1. Filiación Biológica, es el vínculo natural que existe
entre generante y generado. Se da siempre en todas las personas, pues todo individuo es,
necesariamente, hijo de un padre y de una madre. 2. Filiación Jurídica es el vínculo de derecho
existente entre padres e hijos, derivado de la relación biológica que supone la generación. La
filiación jurídica, a diferencia de la filiación biológica, no siempre existe, ya que el Derecho,
para reconocer efectos jurídicos al hecho natural de la procreación, requiere su comprobación.
Clases de Filiación. 1. La Filiación Real: es la que deriva de la relación jurídica de la naturaleza.
A su vez se divide en: A. Filiación Matrimonial: es el vinculo jurídico simultaneo que une al
hijo con su padre y con su madre cuando éstos están casados para la época de la concepción del
hijo o para la fecha de su nacimiento. B. Filiación Extra-Matrimonial: es el vinculo jurídico que
existe entre el hijo y su padre o entre el hijo y su madre cuando los progenitores no estaban
casados ni para el período de la concepción del hijo ni para la fecha de su nacimiento. 2.
Filiación Supuesta: es la que se da en caso de adopción plena.
9. 9. LA FILIACIÓN. Momentos de la Filiación. El Nacimiento. Es un hecho cierto, fácil de
determinar con toda precisión, sin embargo no tiene relevancia para establecer la filiación, ni la
certeza de ésta, con respecto al padre. En cuanto a la madre, si se comprueba la identidad del
producto del parto con la persona que pretende ser tenido como hijo de ésta, habrá quedado
establecida la filiación materna. La importancia del nacimiento es apreciable para el calculo de
la concepción. La Concepción. Es un hecho cuyo momento es casi imposible determinar, y a la
vez, difícil de probar. Es el único hecho capas de servir para establecer la filiación y su certeza,
por lo que el legislador acude a ella como prueba imprescindible para fijar el carácter de la
filiación.
10. 10. LA FILIACIÓN. Prueba de Maternidad. Se prueba por medio del parto y éste es susceptible
de prueba directa. El parto es el elemento fundamental de la prueba de la maternidad, pero no el
único, porque es necesario comprobar, además, la identidad; es decir, que el hijo que dio a luz
determinada mujer en una fecha concreta es una persona determinada, la misma que pretende
ser su hijo. Prueba de Paternidad. Deriva de la concepción pero no es notable ni susceptible de
prueba directa, sino oculto y sustraído a la posibilidad de comprobación directa. Si se trata de
hijos nacidos durante el matrimonio o dentro de los 300 días siguientes a su disolución o
anulación el marido se tiene como padre. La paternidad de los hijos concebidos y nacidos fuera
del matrimonio, se demuestra por declaración voluntaria del padre, o después de su muerte de
sus ascendientes. Y, a falta de reconocimiento voluntario, es prueba de la paternidad de los hijos
concebidos y nacidos fuera del matrimonio, la sentencia definitiva y firme.
11. 11. LA FILIACIÓN. Clasificación de la Filiación. 1. Filiación Materna: La filiación materna
resulta del nacimiento. Es el vínculo jurídico que une a un hijo con su madre. La maternidad
siempre es cierta, porque siempre se sabe quién es la madre. Es un hecho cierto, fácil de
determinar con toda precisión; pero en principio no tiene relevancia para establecer la filiación,
ni aun la certeza de ésta, respecto del padre. Código Civil. Art. 197. La filiación materna resulta
del nacimiento, y se prueba con el acta de la declaración de nacimiento inscrita en los libros del
Registro Civil, con identificación de la madre 2. Filiación Paterna: La filiación paterna es la
relación de parentesco consanguíneo, de primer grado en línea recta, entre un hombre y su hijo o
viceversa. Las pruebas para determinar la paternidad, son distintas cuando se trata de hijos
habidos en matrimonio o fuera de él. Código Civil. Art. 201. El marido se tiene como padre del
hijo nacido durante el matrimonio o dentro de los 300 días siguientes a su disolución o
anulación. Sin embargo, el marido puede desconocer al hijo, probando en juicio que le ha sido
físicamente imposible tener acceso a su mujer durante el período de la concepción de aquél, o
que en ese mismo período vivía separado de ella.
12. 12. LA FILIACIÓN. Presunción Relativa a la Filiación. Aparecen reflejadas en la Sección I del
Capítulo III del Título V del Código Civil Venezolano, en los artículos 213 al 216: 1. Se
presume, salvo prueba en contrario, que la concepción tuvo lugar en los primeros ciento
veintiún días de los trescientos que precedieron al del nacimiento. 2. La posesión de estado de
hijo se establece por la existencia suficiente de hechos que indiquen normalmente las relaciones
de filiación y parentesco de un individuo con las personas que se señalan como sus progenitores
y la familia a la que dice pertenecer. Los hechos principales son: • Que la persona haya usado el
apellido de quien pretende tener por padre o madre. • Que estos le hayan dispensado el trato de
hijo y él, a su vez, los haya tratado como padre o madre, y que haya sido reconocido como hijo
de tales personas por la familia o por la sociedad. • La demanda para que se declare la
paternidad o maternidad, puede contradecirse por toda persona que tenga interés en ello. • El
hijo nacido fuera del matrimonio, una vez reconocido , no puede ser llevado a la residencia
familiar sin el consentimiento del otro cónyuge.
13. 13. LA FILIACIÓN. Presunción Relativa a la Filiación. Filiación Materna. De esta tendremos
las siguientes: Pruebas Primarias y Supletorias: Dependen esencialmente de su prueba y esta
prueba variará según se trate de hijos nacidos de matrimonio o fuera de el, y también según se
deba probar la paternidad o maternidad. Pruebas Primarias: la partida de nacimiento, el
reconocimiento hecho por la madre o pro sus ascendientes, la posesión de estado de hijo. CC.
Art. 197. Pruebas Secundarias: la sentencia recaída en juicio y la declaración de testigos. CC.
Art. 199. Filiación Paterna. De esta tendremos lo siguiente: Pruebas Primarias y Supletorias: Las
pruebas para determinar la paternidad, son distintas cuando se trata de hijos habidos en
matrimonio o fuera de él. 1. Presunción del iuris tantum, que sólo puede ser destruido en juicio
contradictorio, mediante prueba encontrada. 2. Posesión de estado de hijo o se demuestre la
cohabitación del padre y la madre durante el período de la concepción, y la identidad del hijo
con él concebido en dicho período. 3. En caso de paternidad extramatrimonial, caben las
mismas consideraciones referidas up supra con relación a la maternidad. CC. Art. 201 – 212.
Recomendado

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1. REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA. UNIVERSIDAD FERMIN TORO.


ESCUELA DE DERECHO. DERECHO CIVIL IV FAMILIA. AUTOR: LUIS CONTRERAS.
SAIA A. TUTOR: ANTONELLA CIANFAGLIONE.
2. 2. LA FILIACIÓN. La filiación es un vínculo jurídico, el cual es existente entre dos personas,
donde por un hecho natural o por un acto jurídico una persona es descendiente de la otra. Dentro
del marco jurídico de la relación filial puede darse que no toda persona tenga una filiación o
estado filial o que la filiación biológica puede perfectamente no coincidir con la filiación
jurídica, toda vez que el derecho extrae un efecto de tipo jurídico del primero que no siempre es
idéntico; por ejemplo, si alguien siendo padre biológico, pierde el juicio de reclamación por
sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada. Importancia: Esta es de suma importancia, ya
que la filiación en el campo del derecho, junto al matrimonio forman los dos pilares
fundamentales de esta rama del derecho. Pues si bien el primero constituye la base de la familia
organizada, la filiación lo es de la estructura familiar: el parentesco, provenga o no de la unión
matrimonio. De la filiación derivan: el parentesco consanguíneo, la patria potestad, los deberes
y derechos alimentarios, el nacimiento de incapacidades. La vocación hereditaria y el apellido.
3. 3. LA FILIACIÓN. Principios de la Filiación. 1. Los efectos de la filiación son independientes
del medio de prueba aportado: Es decir que, probada que sea la filiación, aunque la ley exija
medios específicos en ciertos casos, nacerán todos los efectos que de ella derivan. 2. Los efectos
de la filiación son independientes del momento de su prueba: De tal manera que, probada la
filiación, sus efectos abarcan tanto el presente como el futuro, sin que sea exigible que tal
prueba deba tener lugar en determinado momento. 3. No existe filiación, si ésta no está
legalmente probada: En efecto, nadie puede alegar a su favor los efectos derivados de la
filiación que pretenda respecto a determinada o determinadas personas, si no la ha probado
fehacientemente, por cualquier medio idóneo reconocido por el derecho.
4. 4. LA FILIACIÓN. Determinación de la Filiación. Según el ordenamiento jurídico, la filiación
puede recurrir a ciertos factores que la determinan concreta y puntualmente. Su objetivo es
facilitar la constitución del estado filial, mediante el establecimiento legal de tipos de hechos
relativamente simples de constatar en la práctica, siendo una expresión externa del criterio-base.
Esta materia va a depender de cada legislación nacional para su establecimiento. En Venezuela,
el Código Civil en el Título V, se describe: 1. Capítulo I, De la determinación y pruebas de
filiación materna, artículos 197 al 200; 2. Capítulo II, De la determinación y pruebas de filiación
paterna, artículos 201 al 212, específicamente.
5. 5. LA FILIACIÓN. Determinación y Pruebas de la Filiación Materna. Artículo 197.- La
filiación materna resulta del nacimiento, y se prueba con el acta de la declaración de nacimiento
inscrita en los libros de Registro Civil, con identificación de la madre. Artículo 198.- En defecto
de la partida de nacimiento, son también pruebas de filiación materna: • La declaración que
hiciere la madre o después de su muerte, sus ascendientes, con el fin de reconocer la filiación,
en las condiciones y formalidades que señalan en el Capítulo III de éste libro. • La posesión de
estado del hijo, establecida de conformidad con las reglas contempladas en ese mismo capítulo.
Artículo 199.- A falta de posesión de estado y de partida de nacimiento, o cuando el hijo fue
inscrito bajo falsos nombres, o como nacido de padres inciertos, o bien si se trata de suposición
o sustitución de parto, la prueba de filiación materna puede en juicio con todo género de
pruebas, aun cuando en estos dos últimos casos, exista acta de nacimiento conforme con la
posesión de estado. Artículo 200.- La prueba contraria puede hacerse por todos los medios
propios para demostrar que la persona de quien se trata no es realmente el hijo de la mujer que
el pretende tener por madre.
6. 6. LA FILIACIÓN. Determinación y Pruebas de la Filiación Paterna. Artículo 201.- El marido
se tiene como padre del hijo nacido durante el matrimonio o dentro de los 300 días siguientes a
su disolución o anulación. Sin embargo, el marido puede desconocer al hijo, probando en juicio
que le ha sido físicamente imposible tener acceso a su mujer durante el período de la concepción
de aquél, o que en ese mismo período vivía separado de ella. Artículo 202.- Si el hijo nació
antes de que hubiesen transcurrido 180 días después de la celebración del matrimonio, el marido
y después de su muerte, sus herederos podrán desconocerlo con la simple prueba de la fecha del
matrimonio y la del parto. Artículo 203.- El marido también puede desconocer al hijo que haya
nacido después de 300 días de presentada la demanda de nulidad del matrimonio, la demanda de
divorcio o de separación de cuerpos, o la solicitud de ésta, o antes de que hubieren transcurrido
180 días a contar de la fecha en que quedó definitivamente firme la sentencia que declaró sin
lugar la demanda o terminado el juicio. Artículo 204.- El marido no puede desconocer al hijo
alegando su impotencia, a menos que sea manifiesta y permanente. El desconocimiento no se
admitirá, aún en ese caso, cuando la concepción ha tenido lugar por la inseminación artificial de
la mujer con autorización del marido. Artículo 205.- El marido tampoco puede desconocer al
hijo, alegando y comprobando el adulterio de la mujer a no ser que esta hecho haya ocurrido
dentro del período de la concepción y el marido pruebe además, otro u otros hechos o
circunstancias tales que verosímilmente concurran a excluir su paternidad. Artículo 206.- La
acción de desconocimiento no se puede intentar después de transcurridos 6 meses del
nacimiento del hijo o de conocido el fraude cuando se ha ocultado el nacimiento. En caso de
interdicción del marido este lapso no comenzará a correr sino después de rehabilitado.
7. 7. LA FILIACIÓN. Efectos de la Filiación. 1. Los Apellidos: la filiación determina los
apellidos, que serán, por este orden, el primero del padre y el primero de la madre, aunque el
hijo, al alcanzar la mayor edad, podrá solicitar que se altere el orden de los apellidos. Existe el
proyecto de permitir a los padres desde el principio la alteración del orden habitual de los
apellidos. Si la filiación paterna es la única determinada, los hijos tendrán los apellidos del
padre, en el mismo orden que éste. Si es la materna, cabe invertir el orden. Si posteriormente se
determina la filiación, perderán vigencia los apellidos asignados, aunque cabe solicitar la
conservación de los que se vinieran usando. 2. Los padres tienen especiales funciones de
protección, respecto de los hijos. Las fundamentales se engloban en la patria potestad, que luego
veremos. Sin embargo, ésta no las agota aunque no ostenten la patria potestad, están obligados a
velar por los hijos menores y a prestarles alimentos. 3. Los hijos, aunque no estén sometidos a
patria potestad, deben respetar siempre a los padres. 4. Los hijos tienen en la herencia de los
padres derecho a la legítima. En la sucesión intestada son los primeros llamados. Los padres, a
falta de descendientes del hijo, tienen también derecho a legítima y son llamados a la sucesión
intestada.
8. 8. LA FILIACIÓN. Tipos de Filiación. 1. Filiación Biológica, es el vínculo natural que existe
entre generante y generado. Se da siempre en todas las personas, pues todo individuo es,
necesariamente, hijo de un padre y de una madre. 2. Filiación Jurídica es el vínculo de derecho
existente entre padres e hijos, derivado de la relación biológica que supone la generación. La
filiación jurídica, a diferencia de la filiación biológica, no siempre existe, ya que el Derecho,
para reconocer efectos jurídicos al hecho natural de la procreación, requiere su comprobación.
Clases de Filiación. 1. La Filiación Real: es la que deriva de la relación jurídica de la naturaleza.
A su vez se divide en: A. Filiación Matrimonial: es el vinculo jurídico simultaneo que une al
hijo con su padre y con su madre cuando éstos están casados para la época de la concepción del
hijo o para la fecha de su nacimiento. B. Filiación Extra-Matrimonial: es el vinculo jurídico que
existe entre el hijo y su padre o entre el hijo y su madre cuando los progenitores no estaban
casados ni para el período de la concepción del hijo ni para la fecha de su nacimiento. 2.
Filiación Supuesta: es la que se da en caso de adopción plena.
9. 9. LA FILIACIÓN. Momentos de la Filiación. El Nacimiento. Es un hecho cierto, fácil de
determinar con toda precisión, sin embargo no tiene relevancia para establecer la filiación, ni la
certeza de ésta, con respecto al padre. En cuanto a la madre, si se comprueba la identidad del
producto del parto con la persona que pretende ser tenido como hijo de ésta, habrá quedado
establecida la filiación materna. La importancia del nacimiento es apreciable para el calculo de
la concepción. La Concepción. Es un hecho cuyo momento es casi imposible determinar, y a la
vez, difícil de probar. Es el único hecho capas de servir para establecer la filiación y su certeza,
por lo que el legislador acude a ella como prueba imprescindible para fijar el carácter de la
filiación.
10. 10. LA FILIACIÓN. Prueba de Maternidad. Se prueba por medio del parto y éste es susceptible
de prueba directa. El parto es el elemento fundamental de la prueba de la maternidad, pero no el
único, porque es necesario comprobar, además, la identidad; es decir, que el hijo que dio a luz
determinada mujer en una fecha concreta es una persona determinada, la misma que pretende
ser su hijo. Prueba de Paternidad. Deriva de la concepción pero no es notable ni susceptible de
prueba directa, sino oculto y sustraído a la posibilidad de comprobación directa. Si se trata de
hijos nacidos durante el matrimonio o dentro de los 300 días siguientes a su disolución o
anulación el marido se tiene como padre. La paternidad de los hijos concebidos y nacidos fuera
del matrimonio, se demuestra por declaración voluntaria del padre, o después de su muerte de
sus ascendientes. Y, a falta de reconocimiento voluntario, es prueba de la paternidad de los hijos
concebidos y nacidos fuera del matrimonio, la sentencia definitiva y firme.
11. 11. LA FILIACIÓN. Clasificación de la Filiación. 1. Filiación Materna: La filiación materna
resulta del nacimiento. Es el vínculo jurídico que une a un hijo con su madre. La maternidad
siempre es cierta, porque siempre se sabe quién es la madre. Es un hecho cierto, fácil de
determinar con toda precisión; pero en principio no tiene relevancia para establecer la filiación,
ni aun la certeza de ésta, respecto del padre. Código Civil. Art. 197. La filiación materna resulta
del nacimiento, y se prueba con el acta de la declaración de nacimiento inscrita en los libros del
Registro Civil, con identificación de la madre 2. Filiación Paterna: La filiación paterna es la
relación de parentesco consanguíneo, de primer grado en línea recta, entre un hombre y su hijo o
viceversa. Las pruebas para determinar la paternidad, son distintas cuando se trata de hijos
habidos en matrimonio o fuera de él. Código Civil. Art. 201. El marido se tiene como padre del
hijo nacido durante el matrimonio o dentro de los 300 días siguientes a su disolución o
anulación. Sin embargo, el marido puede desconocer al hijo, probando en juicio que le ha sido
físicamente imposible tener acceso a su mujer durante el período de la concepción de aquél, o
que en ese mismo período vivía separado de ella.
12. 12. LA FILIACIÓN. Presunción Relativa a la Filiación. Aparecen reflejadas en la Sección I del
Capítulo III del Título V del Código Civil Venezolano, en los artículos 213 al 216: 1. Se
presume, salvo prueba en contrario, que la concepción tuvo lugar en los primeros ciento
veintiún días de los trescientos que precedieron al del nacimiento. 2. La posesión de estado de
hijo se establece por la existencia suficiente de hechos que indiquen normalmente las relaciones
de filiación y parentesco de un individuo con las personas que se señalan como sus progenitores
y la familia a la que dice pertenecer. Los hechos principales son: • Que la persona haya usado el
apellido de quien pretende tener por padre o madre. • Que estos le hayan dispensado el trato de
hijo y él, a su vez, los haya tratado como padre o madre, y que haya sido reconocido como hijo
de tales personas por la familia o por la sociedad. • La demanda para que se declare la
paternidad o maternidad, puede contradecirse por toda persona que tenga interés en ello. • El
hijo nacido fuera del matrimonio, una vez reconocido , no puede ser llevado a la residencia
familiar sin el consentimiento del otro cónyuge.
13. 13. LA FILIACIÓN. Presunción Relativa a la Filiación. Filiación Materna. De esta tendremos
las siguientes: Pruebas Primarias y Supletorias: Dependen esencialmente de su prueba y esta
prueba variará según se trate de hijos nacidos de matrimonio o fuera de el, y también según se
deba probar la paternidad o maternidad. Pruebas Primarias: la partida de nacimiento, el
reconocimiento hecho por la madre o pro sus ascendientes, la posesión de estado de hijo. CC.
Art. 197. Pruebas Secundarias: la sentencia recaída en juicio y la declaración de testigos. CC.
Art. 199. Filiación Paterna. De esta tendremos lo siguiente: Pruebas Primarias y Supletorias: Las
pruebas para determinar la paternidad, son distintas cuando se trata de hijos habidos en
matrimonio o fuera de él. 1. Presunción del iuris tantum, que sólo puede ser destruido en juicio
contradictorio, mediante prueba encontrada. 2. Posesión de estado de hijo o se demuestre la
cohabitación del padre y la madre durante el período de la concepción, y la identidad del hijo
con él concebido en dicho período. 3. En caso de paternidad extramatrimonial, caben las
mismas consideraciones referidas up supra con relación a la maternidad. CC. Art. 201 – 212.
Recomendado

OTROOOOOOOOOOOOOOOOO

Filiación: concepto, efectos, principios constitucionales, clases y


determinación
La filiación consiste sencillamente en la relación existente entre dos o más personas, derivada
precisamente de su respectiva situación en la familia, o si se prefiere, en palabras de la profesora
Cervilla (Derecho civil III en la Universidad de Cádiz), “el vínculo jurídico que une a una persona
con sus progenitores". Nuestro ordenamiento jurídico tiende a hacer coincidir el vínculo jurídico
forjado a través de la filiación con la realidad biológica, si bien, no es infrecuente casos en los que
tal conexión no sucede, pues la filiación deriva de procesos de adopción y reproducción asistida.

- Efectos de la determinación de la filiación


Una vez que la filiación se ha determinado, la filiación da lugar a tres efectos básicos:

+ Determina los apellidos

El artículo 109 remite al Registro Civil para la determinación de los apellidos. Los apellidos
serán los del padre y la madre y en el orden en que establezca la Ley del Registro Civil
(primero el del padre y, después, madre, salvo que los progenitores hayan dispuesto lo
contrario). La ley del Registro Civil derogada hablaba de primero el padre y segundo la madre,
la nueva ley alude a lo que establezcan los progenitores. Si no dice nada, el Registrador dará un
plazo para que decidan qué apellido va primero.

+ La obligación legal de alimentos

Una vez determinada la filiación surge la obligación de alimentos, no solo cuando los hijos
sean menores, sino siempre. La obligación de alimentos, como recordaremos, no solo ha de
entenderse referida a la obligación recíproca que surge en el ámbito de la patria potestad, sino
que se extiende al ámbito de las relaciones familiares en general (artículo 142 y siguientes del
Código Civil).

+ Derechos sucesorios

Determinada la filiación surgen derechos sucesorios de forma obligatoria entre los


descendientes y ascendientes. En este sentido baste decir que son herederos forzosos, según el
artículo 807 del Código Civil, los hijos y descendientes respecto de sus padres y ascendientes,
en caso de falta de descendientes, los padres y ascendientes respecto de sus hijos y
descendientes.

- Principios constitucionales relativos a la filiación


La materia de filiación está presidida por dos principios fundamentales:

+ Principio de igualdad entre los hijos

Nace no solo del 14 de la Constitución que como consagra la igualdad de todos los españoles
ante la ley, sin que en particular pueda «prevalecer discriminación alguna por razón de
nacimiento», sino que además el 39.2 de la Constitución precisa que «los hijos son iguales con
independencia de su filiación». Con ello se destierra el régimen jurídico de los hijos ilegítimos
característico del sistema constitucional.

+ Principio de libre investigación de la paternidad

El último inciso del artículo 39.2 de la Constitución afirma que «[l]a ley posibilitará la
investigación de la paternidad». A ello debemos añadir lo resuelto en el artículo 767.2 de la
Ley de Enjuiciamiento Civil conforme al cual en los juicios sobre filiación será admisible la
investigación de la paternidad y de la maternidad mediante toda clase de pruebas, incluidas las
biológicas.

- Clases de filiación

+ Filiación por naturaleza y filiación por adopción

En primer lugar, hemos de distinguir ya sea determinada la filiación por la existencia de un


vínculo biológico entre padres e hijos, o cuando la inexistencia de tal vinculo biológico sea
remediado por un vínculo jurídico de igual valía. En el primer caso hablaremos de filiación por
naturaleza y, en el segundo, por adopción.

La categoría de filiación por naturaleza podemos a su vez desmembrarla en dos: filiación


matrimonial y no matrimonial en función si la filiación queda determinada por el evento del
matrimonio o fuera del mismo.

Respecto de los efectos, como hemos visto, el ordenamiento prevé una equiparación absoluta
entre uno y otro (nótese como desaparece la referencia a la filiación matrimonio y no
matrimonial de la Ley del Registro Civil). No obstante ello, la importancia de su diferenciación
reside en materia de presunciones. De esta manera, nuestro derecho favorece la determinación
de la filiación matrimonial a través de mecanismos que hacen presumir la misma, no pudiendo,
claro está, arrogar efectos discriminatorios a los hijos por razón del matrimonio en ningún caso.
- Determinación de la filiación

+ Artículo 115 del Código Civil

El primero de los artículos destinados por el Código Civil a regular la « determinación de la


filiación matrimonial» es el artículo 115, conforme al cual la filiación matrimonial quedará
determinada:

1º Por la inscripción del nacimiento junto con la del matrimonio de los padres.

2º Por sentencia firme.

+ Artículo 120 del Código Civil

Por su parte, la enumeración de los modos de determinación de la filiación extramatrimonial se


encuentra recogida en el artículo 120 del Código Civil, cuyo tenor expresa que la filiación no
matrimonial quedará determinada legalmente:

"1.º En el momento de la inscripción del nacimiento, por la declaración conforme realizada


por el padre en el correspondiente formulario oficial a que se refiere la legislación del
Registro Civil.

2.º Por el reconocimiento ante el Encargado del Registro Civil, en testamento o en otro
documento público.

3.º Por resolución recaída en expediente tramitado con arreglo a la legislación del Registro
Civil.

4.º Por sentencia firme.


5.º Respecto de la madre, cuando se haga constar la filiación materna en la inscripción de
nacimiento practicada dentro de plazo, de acuerdo con lo dispuesto en la Ley del Registro
Civil".
Otroooooooo

La prueba técnica ADN en los procesos sobre filiación


Liseth Mojica Gómez*

* Catedrática de la Facultad de Jurisprudencia, Universidad del Rosario. Bogotá, Colombia.

1. INTRODUCCIÓN

Hasta hace algunos años, legislaciones como la inglesa, la española y la francesa


imposibilitaban el reconocimiento de los hijos naturales; hoy en día se puede afirmar que
todas permiten que se reconozcan los hijos extramatrimoniales, al establecer, por una
parte, la posibilidad de que se investigue la paternidad o la maternidad y, por otra, el que
se pueda impugnar la una o la otra, cuando se establece que a quien se le imputó un hijo
como fecundado por él, no es realmente quien lo engendró.

El derecho a conocer la verdadera filiación es el derecho a la identidad de la persona


humana; en la actualidad y gracias a la ciencia el concepto jurídico de filiación legitima, ya
sea matrimonial o extramatrimonial, se encuentra ligado y al alcance de la verdadera y
única realidad biológica.

El establecimiento con certeza de una paternidad o de una maternidad, ante las instancias
judiciales, reclama la existencia de normas que permitan que todo individuo sea tenido
como hijo de quien biológicamente lo procreó o fecundó. En este orden de ideas, todo
ordenamiento legal que obstruya el derecho a la verdad en los asuntos de filiación, atenta
contra los derechos constitucionales. Conocer la verdad biológica frente a una supuesta
paternidad o maternidad es un derecho y para ello se debe acudir al estudio científico que
permite despejar toda duda con certeza absoluta.

Por ser la familia la institución base de nuestra sociedad, los asuntos de filiación (como son
la investigación de paternidad o de maternidad y su impugnación) sólo pueden ventilarse y
fallarse en aras a la verdad biológica, excepción hecha de actos de voluntad que escapan a
esa realidad biológica, como es el caso de los procesos de adopción. Hoy en día, el derecho
a conocer la verdadera identidad personal reclama normas que permitan y agilicen este tipo
de procesos; todo ser humano tiene derecho a ser tenido como hijo de quien
biológicamente lo procreó.

2. EVOLUCIÓN HISTÓRICA

El problema de la determinación de la paternidad es tan antiguo como la humanidad, y


hasta 1900 el único criterio que permitía establecerla o negarla era el parecido físico, a
todas luces un medio poco idóneo y totalmente arbitrario, que conducía a resultados
subjetivos carentes de fiabilidad, y de todo fundamento legal y fáctico.
Posteriormente, se abrió un nuevo sendero con la práctica de pruebas biológicas, acerca de
las cuales no entraremos en detalles, ya que sus connotaciones y particularidades
corresponden a la rama de la medicina. No obstante, a grandes rasgos y de manera
histórica:

En el año 1900 Karl Landsteiner descubrió el sistema de los grupos sanguíneos mediante
los antígenos tipo A o tipo B que podían estar o no asociados a los glóbulos rojos, sistema
éste que se conoce como ABO y que fue reconocido por la comunidad científica hacia el año
1915 y dilucidado como patrón de herencia en el año 1924 por Felix Berstein.

El sistema ABO se utilizó legalmente por primera vez y con gran eco en 1924, en Alemania;
pero su utilización procedía de las justicias italiana, escandinava y austriaca. En los Estados
Unidos de Norteamérica, la asociación médica aprobó el uso de esta técnica en 1937.

Los resultados obtenidos con el sistema ABO dependían de la preponderancia de los grupos
sanguíneos y de las similitudes étnicas de la población: en los casos de poblaciones
diversas, la paternidad queda descartada y su probabilidad, totalmente descartada, esto es,
arrojaba como resultado una paternidad del 0%, pero en los casos de similitud de grupos
sanguíneos y etnia el resultado era el de la probabilidad de la paternidad biológica sin
establecer un índice de certeza; pero entre más común era el grupo sanguíneo, menor era
la probabilidad de paternidad.

Cabe mencionar que no obstante las investigaciones realizadas con el sistema ABO, en
1927 se descubrieron las técnicas MNSs y P.

En 1940 Levine y Stetson descubrieron el sistema Rh, y se empezaron a describir nuevos


subgrupos; sin embargo, con este sistema, al igual que con el anterior, lo único que se
podía establecer con 100% de certeza era la exclusión de la paternidad, es decir, cuando el
pretendido progenitor no era el procreador biológico.

El descubrimiento de los antígenos asociados a los glóbulos blancos, conocido como sistema
HLA, también permite establecer la paternidad mediante patrones hereditarios, pero de una
manera más sofisticada. Cuando se empezó a utilizar la técnica ADN, aplicada a los
antígenos HLA, se llegó a resultados de paternidad probable con índice de certeza
aproximado al 80%, valor que aún era insuficiente para designar inequívocamente al
verdadero padre biológico.

En 1985 se descubrió por primera vez el uso de la técnica RFLP, en la que se utilizan
enzimas llamadas de restricción, para cortar el ADN mediante electroforesis en gel, en
sitios conocidos por su gran variabilidad, en la búsqueda de una secuencia específica, que
varía de una persona a otra.

Con los avances a los que ha permitido llegar la ciencia, la técnica ADN se utilizó por
primera vez en 1987, en los Estados Unidos de Norteamérica, por un tribunal de la Florida.
Esta técnica consiste en un estudio molecular que permite generar perfiles genéticos para
así establecer si el presunto padre o madre debe ser incluido o excluido. La exclusión de la
paternidad o de la maternidad mediante la técnica ADN es irrefutable.

Desde mediados de la década de los noventa, esta técnica se encuentra catalogada como
tecnología de punta, ya que ofrece certeza, permite establecer la verdad y descartar toda
posibilidad de duda; el ácido desoxirribonucleico ADN está formado por un azúcar (2-
desoxiD-ribosa), por ácido fosfórico y por bases nitrogenadas (adenina, guanina, citosina y
timina). La estructura del ADN es de doble hélice y se encuentra en las bases nitrogenadas
(adenina con timina y guanina con citosina), en el interior de la molécula, y los grupos
fosfatos en el exterior.

Las dos hebras que forman las cadenas del ADN presentan orientaciones opuestas y
pueden separarse mediante la acción del calor o de determinadas sustancias químicas,
hecho que da lugar al proceso de desnaturalización, el cual es reversible. El ADN es el
soporte físico que contiene toda la información genética y se define como gen cada una de
las porciones de su molécula que se pueden traducir en una proteína. El ADN que
determina el código genético se encuentra físicamente en el núcleo de las células en
distintos sectores que forman los cromosomas. Las diferencias entre el ADN de los
diferentes individuos se hallan en la porción y en el orden como se suceden los pares de
bases de púricas y pirimidínicas, que son las que establecen la especificidad y la diferencia
para cada individuo.

3. DEFINICIÓN DE LA PRUEBA TÉCNICA ADN EN LOS PROCESOS SOBRE


FILIACIÓN

La prueba de paternidad o de maternidad basada en el ácido desoxirribonucleico ADN es la


técnica médica, biológica y científica que permite establecer la identidad genética (huella
genética única que permite conocer la verdad biológica sin lugar a equívocos) y la relación
filial legítima respecto de quien engendró o procreó. El ADN es el material genético que se
encuentra en las células del cuerpo, por eso es el medio más idóneo en materia de
identificación, es la huella genética de cada ser humano, es vida.

Cada célula tiene 46 cromosomas, a excepción de los espermatozoides y los óvulos que tan
sólo tienen, 23 cromosomas cada uno, por ende es necesaria la unión de estos dos
(espermatozoide y óvulo), que suman 46 cromosomas para procrear una persona. Se
observa así que cada individuo recibe la mitad de su material genético del padre biológico y
la otra mitad de la madre biológica. Los cromosomas son las estructuras del núcleo de la
célula eucariota que consiste en moléculas de ADN que contienen genes y proteínas;
genotipo es el conjunto de genes de un individuo o de una especie (son los genes los que
contienen la información genética hereditaria), y los alelos son las formas alternativas de
cada gen que se heredan del padre o de la madre, los cuales controlan cada rasgo o
carácter.

La prueba de ADN es la prueba más precisa para determinar la paternidad o la maternidad,


según el caso; cuando el hijo no contiene dos o más de los marcadores genéticos del
supuesto padre o madre, significa que biológicamente él o ella no es el padre o la madre;
queda así, gracias a la ciencia, excluida la paternidad o la maternidad, en un 100%, es
decir, con una certeza total, que se traduce en una paternidad o maternidad del 0%.

4. APLICACIONES

Las aplicaciones del estudio de paternidad en lo referente a la filiación son varias, podemos
citar: la determinación misma de la paternidad o de la maternidad, el análisis de paternidad
o de maternidad de progenitores desaparecidos mediante pruebas a los familiares y la
determinación de relaciones familiares (hermanos, abuelos, tíos, etc.).

Cabe mencionar que la técnica del ADN se puede utilizar asimismo para identificar
individuos en actos delictivos, accidentes, violaciones y muchos otros estudios de interés
médico legal.

5. EVOLUCIÓN PROBATORIA EN LOS PROCESOS SOBRE FILIACIÓN EN COLOMBIA


Hasta la década de los sesenta las pruebas para establecer paternidad eran totalmente
indirectas, se basaban en testimonios y en el supuesto trato sexual entre el pretendido
padre y la madre. Una vez establecido el trato personal y social, se infería el trato sexual y
dentro de los límites del artículo 92 del Código Civil se permitía presumir la paternidad e
incluso se declaraba judicialmente.

Como consecuencia de que los avances científicos llegaron a permitir que las pruebas
biológicas descartaran o confirmaran de manera determinante una paternidad o una
maternidad, en la legislación colombiana, mediante el artículo 7º de la Ley 75 de 1968, 1 se
estableció por primera vez la realización de exámenes médico-biológicos en todos los
juicios tendientes a la investigación de la paternidad o la maternidad, prueba ésta que
debía decretarse de oficio o a solicitud de la parte, y respecto de las personas que fueran
necesarias para reconocer pericialmente las características heredobiológicas paralelas entre
el hijo y su presunto padre o madre; asimismo, establecía que se debía ordenar la
peritación antropoheredobiológica, con análisis de los grupos y factores sanguíneos, y de
los caracteres patológicos, morfológicos e intelectuales transmisibles

En este orden de ideas, desde 1968 las pruebas médicas y biológicas venían siendo de
forzosa práctica en todos los procesos de investigación de la paternidad o de la maternidad.
Para la época de la Ley 75 la prueba más importante y reconocida era la de los grupos
sanguíneos, la cual permitía formular paternidades posibles o imposibles, según la
hemoclasificación, con un alto grado de eficacia y de certeza cuando se trataba de
resultados negativos, pero sin ningún índice de seguridad cuando eran positivos. Así, lo
único que quedaba realmente probado como verdad era la paternidad o maternidad
excluida o descartada, cuando el resultado era negativo, ya que frente a resultados
positivos, el presunto padre o madre podía ser o no ser efectivamente. Una constatación
similar, esto es, irrefutable al tratarse de resultados negativos, y con principios de duda en
resultados positivos, era la que quedaba establecida con las técnicas médico-científicas que
se usaron posteriormente y que antecedieron a la técnica ADN, en el establecimiento de la
paternidad o maternidad.

Recientemente, gracias a los avances de la ciencia, la técnica ADN permitió establecer la


paternidad o la maternidad, ya sea compatible o incompatible, con índices de certeza
absoluta en porcentajes superiores al 99,99%. En los asuntos de filiación los avances de la
ciencia han superado y opacado las formulaciones legales, por lo que el juez debe
enfrentarlos, pues no puede desconocerlos en modo alguno y, por el contrario, le prestan
su sapiencia como una herramienta probatoria de gran valor, que supera y se opone a
cualquier otro medio de probatorio. El juez no puede dejar de lado la ciencia cuando la
verdad que predica ha llegado a su conocimiento.

Un primer progreso normativo para la práctica de esta prueba, en todos los procesos
tendientes a establecer filiación, se dio con el Acuerdo 1224 del 27 de junio de 2001, del
Consejo Superior de la Judicatura, en virtud del cual los juzgados de familia y promiscuos
de familia, para establecer la paternidad y a efectos de que se practicara la prueba
genética, debían diligenciar un formulario y remitirlo al Instituto Colombiano de Bienestar
Familiar (ICBF). Este Acuerdo, que hoy en día se encuentra superado por la Ley 721 del 24
de diciembre de 2001, presentaba un gran inconveniente: al no contar el ICBF con
laboratorio de genética, con reactivos, con personal calificado para la práctica misma de la
prueba de paternidad técnica ADN, ésta lo hacía el Instituto de Medicina Legal, donde el
cúmulo de trabajo, y en ocasiones la carencia de reactivos y elementos, hacían que su
realización tuviera más de dos años de espera, contados desde que el juez la ordenaba;
circunstancia ésta que generaba un retardo y una ineficiencia abrupta de la justicia.

La jurisprudencia desarrollada en los últimos años reconoce el valor y el mérito probatorio


de las pruebas científicas de paternidad o maternidad realizadas con la técnica ADN y las
considera como apoyo y pilar del veredicto del juez. Al respecto, consideramos oportuno
citar algunos apartes de una sentencia2 proferida por la Corte Suprema de Justicia, así:

La evidencia palpable de los avances de la ciencia a límites


insospechados, ha puesto en aprietos la tarea del juez, quien so
pretexto de tener ante sí el universo jurídico concebido de manera
que en él quepan cualesquiera situaciones jurídicas, a modo de
plenitud hermética de que ha hablado algún autor, deberá siempre
fallar secundum jus [...]
En el desarrollo de la filiación como institución jurídica y del
derecho fundamental de toda persona a saber quienes son sus
padres, la ciencia ha prestado, quizá como en ningún otro campo,
un innegable apoyo al derecho familiar y probatorio, al punto de
escucharse hoy apresuradas voces que claman porque se defiera
al experto y no al juez la declaración acerca de la paternidad o
maternidad, cuando aquélla o ésta es impugnada o investigada,
no sólo porque, al decir de algunos, ya no es menester contar con
un acervo probatorio que permita "inferir" la paternidad o la
maternidad, sino porque la pregunta sobre la paternidad es, antes
que jurídica, biológica, esto es, científica.
[...]
De allí se desprende, en segundo término, que a pesar de poder
estar consagrada en Colombia la investigación de la paternidad
mediante un sistema restringido de presunciones que rinde culto a
las reglas de la experiencia plasmadas positivamente en la ley,
esa otra fuente de conocimiento sistemático que es la ciencia, no
puede dejarse a un lado por el juez, cuando la verdad que ella
predica ha llegado a su conocimiento...
[...]
Pero debe en primera medida, asumir que en la investigación de la
paternidad, la ciencia actual —a la que debe acudir no sólo en
virtud de lo previsto en el artículo 7º de la Ley 75 de 1968 sino
con miras en la búsqueda de la verdad histórica—, le presta tal
apoyo a su veredicto, que se constituye en pilar de su sentencia.
[...]
Se reitera, hoy es posible destacar que esas probanzas indirectas
(testimonios, cartas, seducción dolosa) no tienen el peso
probatorio de las pruebas biológicas. Porque la paternidad
biológica, esto es, la posibilidad de que un gameto femenino haya
sido fecundado por un determinado hombre [...], es hoy posible
demostrarla con alcances de certidumbre casi absoluta, mediante
procedimientos que el medio científico colombiano ofrece y que
distan hoy mucho de los que el legislador de 1968 pudo tener en
mente.
En efecto, este mismo proceso muestra cómo diversos y cada vez
más seguros exámenes de paternidad se fueron implementando,
al punto de llegar a uno que establece una paternidad en
porcentaje superior al 99%. Pero este avance, que en Colombia se
inició con las pruebas sobre grupos sanguíneos a que hizo
referencia el legislador de 1968, y pasó por sistemas HLA (clase I
—serología— clase I y II —molecular—), VNTR/RFLP, inserciones
ALU, STR, cromosoma Y, etc., no se ha recogido en la práctica
judicial con la importancia que merece ni ha sido, la verdad sea
dicha, comprendido en sus justos alcances. Y así, se le ha dado
(por una suerte de inercia que más que resistencia a los cambios
denota un retraso que históricamente evidencia el derecho frente
a la ciencia) más importancia probatoria a los medios que pueden
llegar a acreditar la relación sexual, cuando miradas las cosas hoy
con la ayuda que la ciencia presta, no puede ser éste el fin de la
investigación judicial, dado que sólo es un paso —de varios
posibles— para llegar a la paternidad.

En los asuntos sobre filiación, la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia, dentro de


la cual se destaca el fallo citado, ha reconocido y avalado las pruebas científicas para
establecer paternidad o maternidad, ya sea que éstas se investiguen o se impugnen, a
punto tal que las coloca por encima de cualquier otro medio probatorio.

Como consecuencia del soporte y ayuda que los avances de la ciencia prestan
probatoriamente en los asuntos de filiación y del reconocimiento jurisprudencial que se ha
hecho a las pruebas de paternidad realizadas con la técnica, se hizo necesario modificar la
legislación nacional y quedaron plenamente reconocidas, plasmadas y exigidas las pruebas
de paternidad o maternidad técnica ADN, para dilucidar de una manera clara, efectiva,
eficiente y rápida los procesos sobre filiación; de esta manera surgió y se expidió la hoy
vigente Ley 721 del 24 de diciembre de 2001, de la cual destacamos:

 En todos aquellos procesos en los que se pretenda establecer paternidad o


maternidad, el juez, incluso de oficio, debe ordenar la práctica de la prueba
científica técnica ADN, que ofrezca un índice de certeza superior al 99,9%, 3 prueba
ésta que atendiendo su naturaleza y especificidad, debe ser practicada por un
laboratorio aprobado por la autoridad competente y que se ajuste a los estándares
internacionales establecidos en la materia.
 En los procesos para establecer filiación, sólo en los casos en que es absolutamente
imposible disponer de la información de la prueba de ADN, se podrá recurrir a las
pruebas testimoniales, documentales y demás medios probatorios que conlleven a
emitir el fallo correspondiente.
 Una vez obtenido el dictamen médico, éste se debe correr traslado a las partes por
tres días, las cuales podrán solicitar dentro de este término la aclaración, la
modificación o la objeción, conforme lo establece el artículo 238 del Código de
Procedimiento Civil. La persona que solicite nuevamente la práctica de la prueba
deberá asumir los costos; en caso de no asumirlo, no se decretará la prueba. Es de
mencionar que la ley dispone que quienes adulteren o manipulen el resultado de la
prueba se hacen acreedores a las sanciones penales correspondientes.
 El costo de la prueba corre a cargo de quien la solicite, salvo que medie amparo de
pobreza, evento en el cual lo asume el Estado.
 El procedimiento de los juicios para establecer paternidad o maternidad debe ser
especial preferente.4 Así, una vez presentada la demanda, en el auto admisorio el
juez debe ordenar la prueba, y en notificación personal al demandado, se le debe
correr un traslado de ocho días hábiles para contestarla. Una vez se tenga el
resultado de la prueba, el juez debe entrar a dictar sentencia. En caso de renuencia
a la prueba, éste, sin más trámites, mediante sentencia, procederá a declarar la
paternidad o maternidad que se imputa.

Hoy en día, en el ámbito internacional, la investigación de la paternidad y de la maternidad


es reconocida y admitida mediante pruebas biológicas y científicas. En ninguna legislación
el juez puede obviar sus resultados, que cuentan con un alto grado, por no decir absoluto,
de confiabilidad y certeza, pues no deja margen de duda.

La práctica de la prueba de paternidad dentro de los procesos de filiación es una


herramienta que sirve, entre otros:

 A un hombre que intenta reconocer o ganar la custodia y los derechos sobre un hijo
 A un hombre que quiere confirmar su paternidad respecto de un hijo que se le
imputa.
 A un hombre o a una madre que quiere entrar determinar la paternidad de una
criatura antes de su nacimiento.
 A una persona que quiere establecer su filiación respecto de un difunto.
 A un descendiente que quiere establecer su ascendencia legítima.

En legislaciones como la española el juez no admite la demanda sin un principio de prueba


de los hechos en que se funde, esto significa que tanto para que se reconozca al hijo
natural como para que se impugne el reconocimiento de un hijo, en el momento de ejercer
la acción se debe presentar una prueba suficiente capaz de fundamentar o de soportar lo
pretendido.

Con la técnica del ADN se ha pasado de presunciones indeterminadas y controvertidas a la


certeza que va más allá de toda duda razonable. Esta prueba permite absolver inocentes
condenados injustamente y condenar culpables que han buscado y logrado eludir la justicia.

Gracias a la técnica del ADN se protegen y se garantizan los derechos fundamentales de la


persona y se permite conocer la verdadera filiación, esto es: al padre saber si es realmente
el progenitor, al hijo conocer la verdad sobre su supuesto padre y a la madre saber quién
es el padre de sus hijos. La prueba genética de paternidad ADN es una prueba reina no sólo
frente a los asuntos de filiación, sino a la promiscuidad de la mujer, tema de difícil prueba
en otras épocas, donde imperaban los testimonios y las probanzas indirectas.

6. PRÁCTICA DE LA PRUEBA DE PATERNIDAD ADN

La prueba de paternidad ADN es tan poderosa, seria y confiable que se puede ejecutar aun
cuando la madre no asiste; la prueba de dúo es legal, efectiva y confiable, en el mismo
grado de certeza que la prueba de trío. La referencia en cuanto a la asistencia de la madre
se establece con fines meramente presenciales, y en especial para procesos dentro de los
cuales el hijo es menor de edad y respecto del cual aún no se ha producido el
reconocimiento por parte del supuesto padre, por eso la madre, como única representante
de su hijo, tiene el derecho a presenciar la prueba.

La toma de muestra a la madre no altera ni afecta el resultado respecto a la filiación entre


el hijo y el supuesto padre. En algunas legislaciones, como la brasileña, la referencia a la
madre se hace con fines meramente administrativos, esto es, de autorización, pero no para
que sea tenida como parte para la toma de muestras. En todo caso, sea cual sea el número
que se tome, el resultado siempre será comparativo de dúo entre las dos personas respecto
de las cuales se pretende establecer la filiación (el hijo y su supuesto padre o madre),
según el caso que se esté investigando o impugnando.

Tratándose de presunto padre, presunta madre o hijos fallecidos, ausentes o


desaparecidos,5 el laboratorio autorizado para realizar la prueba con marcadores genéticos
de ADN, a fin de establecer la paternidad o maternidad, debe utilizar los procedimientos
que le permitan alcanzar una probabilidad de parentesco superior al 99,99%, o la exclusión
de la paternidad o maternidad. Cuando no se alcancen estos valores, el dictamen debe
indicar que los resultados no son concluyentes.

Si es necesario exhumar un cadáver, un juez del conocimiento debe autorizarlo, mientras


que los organismos oficiales correspondientes lo ejecutan en presencia del juez de
conocimiento o su representante, esto, independientemente del laboratorio que vaya a
realizar la prueba, el cual debe designar a un técnico que se encargue de seleccionar y de
tomar adecuadamente las muestras requeridas para la realización de la prueba, y que debe
preservar, en todo caso, la cadena de custodia de los elementos que se le entregan.

Lo importante de la práctica de esta prueba es que es de obligatoria ejecución en todos los


procesos para establecer filiación, y que su dictamen ofrece certeza y seguridad, pues es
una prueba irrefutable que supera y opaca cualquier otro medio probatorio.

Las características hereditarias que trasmite un padre a su hijo se reflejan en la molécula


de ADN, que se encuentra constituida por nucleótidos que se unen y forman estructuras
complejas (ahí se encuentran todos los genes). Es de reiterar que la mitad de la
información genética proviene de la madre y la otra mitad del padre, por lo tanto, no hay
margen de error en los resultados.

El ADN se encuentra en la estructura de las células (boca, huesos, sangre), y es el que


permite establecer la paternidad o la maternidad.

Cuando el ADN se compacta, forma los cromosomas (los seres humanos tienen 46
cromosomas, de los cuales 22 vienen de cada progenitor y los dos restantes son sexuales).
Cada uno se compone de subunidades denominadas genes, que se encuentran constituidas
por ácido desoxirribonucleico (ADN); de esta manera, el conjunto de genes de cada ser
humano se denomina genotipo y el conjunto de características hereditarias que posee cada
individuo de una especie se denomina fenotipo, y la mitad que se recibe o hereda de cada
progenitor se denomina halotipo.

Para la práctica de la prueba de paternidad o maternidad técnica ADN no existen


restricciones en cuanto a la edad. Esta prueba puede ser simple o compleja.

6.1 Prueba de paternidad o maternidad simple

La prueba de paternidad es simple cuando se cuenta con la presencia de las personas


físicas respecto de las cuales se pretende establecer la filiación, en este caso se requiere
muestra de sangre del hijo y del hombre o de la mujer a quien se le imputa la paternidad o
maternidad.

6.2 Prueba de paternidad o maternidad compleja

La prueba de paternidad es compleja cuando al no disponer de la muestra de sangre se


acude para practicarla a muestras de semen, pelo (debe ser arrancado y debe tener el
bulbo), saliva, diente o hueso.
7. DICTAMEN MÉDICO DEL ADN

El dictamen médico del ADN describe los marcadores genéticos moleculares empleados, el
fenotipo y el genotipo obtenido de cada uno de los integrantes del estudio, los cálculos
estadísticos que determinan la probabilidad de paternidad y las conclusiones definitivas.

El dictamen que rinden los laboratorios expertos, y que son autoridad en el tema, garantiza
la confiabilidad y la eficacia de la prueba, por su especial naturaleza y características, así
como por el grado de certeza que ofrece, lo que se traduce en que raya con la seguridad,
por ser una prueba incontestable, y en legislaciones como la española, una vez que se
practica y se obtiene el resultado, se le reconoce plena validez probatoria y judicial.

De conformidad con la Ley 721 del 24 de diciembre de 2001, el dictamen de la prueba


científica técnica ADN que se presente al juez debe contener como mínimo:

 El nombre y la identificación completa de aquellos a quienes se les practicó la


prueba.
 Los valores individuales y acumulados del índice de paternidad o maternidad y una
probabilidad.
 Una breve reseña de la técnica y del procedimiento utilizados para rendir el
dictamen.
 Las frecuencias poblacionales utilizadas.
 La descripción del control de calidad que se realiza en el laboratorio.

8. ACREDITACIÓN Y CERTIFICACIÓN DE LOS LABORATORIOS

Los laboratorios idóneos para realizar pruebas de paternidad cuentan con acreditación de la
Superintendencia de Industria y Comercio, la cual se realiza cada cinco años, pero se hace
una ratificación anual. No obstante, la Ley 721 del 24 de diciembre de 2001 exige que los
laboratorios idóneos para realizar estas pruebas y que han de obrar en las instancias
judiciales deber ser certificados por una comisión especial, la cual fue creada mediante el
Decreto 1562 del 24 de julio de 2002.

En este orden de ideas, por disposición del gobierno nacional, ya se creó la Comisión de
Acreditación y Vigilancia,6 encargada de certificar a los laboratorios autorizados para
realizar las pruebas de paternidad técnica ADN. Esta comisión está integrada por delegados
del Ministerio de Salud, del Ministerio de Justicia y del Derecho, del ICBF, de las Sociedades
Científicas, del Ministerio Público, de los laboratorios privados de genética y de los
laboratorios públicos. La Comisión de Acreditación y Vigilancia deberá garantizar la
eficiencia científica, veracidad y transparencia de las pruebas con marcadores genéticos de
ADN y podrá reglamentar la realización de ejercicios de control y calidad, rigiéndose por los
procedimientos establecidos internacionalmente y por la Comunidad Científica de Genética
Forense.

La acreditación y certificación nacional de los laboratorios debe realizarse anualmente con


sujeción a los estándares internacionales establecidos para pruebas de paternidad o
maternidad. Básicamente, los criterios para evaluar los laboratorios de genética son:

 Imparcialidad, independencia e integridad.


 Sistema de calidad.
 Estructura organizacional, instalaciones y condiciones ambientales.
 Personal idóneo y calificado.
 Equipos y materiales de referencia, trazabilidad metrológica y analítica.
 Métodos y procedimientos.
 Informes y certificados.
 Documentación y registros.
 Manejo de muestras y contramuestras.
 Servicios y suministros internos.
 Auditorías.
 Cooperación con el ente acreditador, con los clientes y con otros laboratorios.

9. CONCLUSIONES

La prueba biológica técnica ADN permite establecer de manera indiscutible, cierta y segura
la verdad en los procesos tendientes a establecer la filiación legitima, ya sea mediante la
investigación o la impugnación. La filiación legitima, bien sea matrimonial o
extramatrimonial, es una sola y debe obedecer a la verdad biológica. Asunto diferente es el
caso de las inseminaciones artificiales y de los alquileres de vientre, donde se deben tener
en cuenta el consentimiento y la voluntad de las personas involucradas; de igual manera, la
adopción obedece a un proceso voluntario y específico que requiere un trámite y unos
requisitos, en estos casos lo que entra en juego y en discusión es el derecho del concebido
artificialmente o por inseminación y del adoptado, a conocer su verdadera ascendencia, sus
raíces biológicas.

Anteriormente, cuando nuestra legislación no consagraba la obligatoriedad de la prueba


biológica de paternidad,7 los procesos contra falsos padres eran abundantes, y en un
número considerable de casos se condenaba a reconocer a inocentes que no habían sido
progenitores de quienes se les imputaba como sus hijos. Asimismo, existía un gran
volumen de procesos en los que padres que realmente habían procreado buscaban eludir el
reconocimiento de sus hijos y lo lograban. Hoy en día se pueden seguir abriendo procesos
contra cualquier hombre a quien se le pretenda imputar una paternidad, pero
afortunadamente se estableció la obligatoriedad del recurso a la ciencia y a la medicina,
recurso éste que es fiable y que permite sentencias justas y seguras, ya que si dos o más
de los marcadores analizados no coinciden la exclusión es del 100% y la probabilidad del
0%.

En materia de impugnación, la ciencia y la medicina también prestan su ayuda y son una


herramienta muy valiosa para quienes, cualquiera que sea el medio, procedían o proceden
aún a reconocer o legitimar hijos que se les imputan y que creen haber procreado; pero
que gracias a los avances científicos de hoy tienen acceso a la real y única verdad acerca
de la paternidad, con lo que cuentan, en consecuencia, con las acciones pertinentes ante la
jurisdicción de familia.

La prueba ADN es mucho más que un examen de sangre, es el método más preciso que
existe para identificar criminales, para resolver enigmas históricos y para efectuar
investigaciones sobre filiación, ya que el ADN de cada persona es único; su resultado es
más preciso que el que requieren las cortes y los jurados, y para practicarla ni existen
requisitos específicos, ni preparación, ni restricción de edad, incluso puede practicarse de
manera prenatal, ya que el ADN queda fijado al momento de la concepción.

NOTAS AL PIE

1
 El artículo 7 de la Ley 75 de 1968 se modificó por el artículo 1º de la Ley 721 de 24 de
diciembre de 2001.
2
 Las pruebas científicas priman sobre las pruebas indirectas. Expediente 6188, sentencia
del 10 de marzo de 2000, magistrado ponente Jorge Santos Ballesteros.
3
 Artículo 1° de la Ley 721 del 24 de diciembre de 2001.
4
 Artículo 7 de la Ley 721 del 24 de diciembre de 2001.
5
 Artículo 2 de la Ley 721 del 24 de diciembre de 2001.
6
 Artículo 9º de la Ley 721 del 24 de diciembre de 2001, reglamentado por el Decreto 1562
del 24 de julio de 2002.
7
 No obstante que la ley se establece tanto para establecer la paternidad como la
maternidad, en Colombia los procesos sobre filiación son básicamente de paternidad, ya
sea para la investigación o para su impugnación.

Otroooo

La filiacion
1. 1. República Bolivariana de Venezuela Universidad Fermín Toro Facultad de Ciencias Jurídicas
y Políticas Escuela de Derecho Nadia Harami C.I.: 23.488.784 SAIA D
2. 2.  Principios que rigen la filiación a) No existe filiación, si ésta no está legalmente probada: En
efecto, nadie puede alegar a su favor los efectos derivados de la filiación que pretenda respecto
a determinada o determinadas personas, si no la ha probado fehacientemente, por cualquier
medio idóneo reconocido por el derecho. b) Los efectos de la filiación son independientes del
medio de prueba aportado: Es decir que, probada que sea la filiación, aunque la ley exija medios
específicos en ciertos casos, nacerán todos los efectos que de ella deriven. Importancia
Especial importancia tiene la filiación en el campo del Derecho de Familia, al punto de
constituir, junto con el matrimonio, los dos pilares fundamentales de esta rama del derecho;
pues si bien el primero constituye la base de la familia organizada, la filiación lo es de la
estructura familiar: el parentesco, provenga o no de la unión matrimonial. De la filiación
derivan: el parentesco consanguíneo, la patria potestad, los deberes-derechos alimentarios, el
nacimiento de incapacidades, la vocación hereditaria ab intestato y el apellido.  Es el nexo o
relación que une al hijo con su padre y con su madre; o sea el vínculo parental consanguíneo de
primer grado en línea recta.  Concepto Filiación
3. 3.  Clasificación de la Filiación Filiación Materna: Se habla de filiación materna cuando se hace
referencia a la relación de parentesco consanguíneo en línea recta, de primer grado, entre una
mujer y su hijo viceversa. Características. 1) Es prioritaria frente a la paternidad. 2) Vale, tanto
para la filiación derivada de uniones matrimoniales, como para las provenientes de uniones
extramatrimoniales. Momentos de la Filiación Son dos: El nacimiento y la concepción El
nacimiento es un hecho cierto, fácil de determinar con toda precisión, pero en principio no tiene
relevancia para establecer la filiación, ni aun la certeza de ésta, respecto del padre. En cuanto a
la madre, si se comprueba la identidad del producto del parto con la persona que pretende ser
tenido como hijo de ésta, habrá quedado establecida la filiación materna. La concepción, no
obstante ser un hecho cuyo momento es de casi imposible determinación y de muy difícil
prueba, es el único hecho capaz de servir para establecer la filiación y su certeza, por lo que el
legislador se ha visto obligado a tomarla como prueba fundamental para fijar el carácter de
filiación. De ahí que, partiendo del hecho cierto del nacimiento, se calcule este momento de la
concepción, fijándolo en uno cualquiera de los 121 días que transcurren entre los 300 y los 180
anteriores al parto. c) Los efectos de la filiación son independientes del momento de su
prueba: De tal manera que, probada la filiación, sus efectos abarcan tanto el presente como el
futuro, sin que sea exigible que tal prueba deba tener lugar en determinado momento.
4. 4.  Caracteres comunes sobre la Filiación 1) Son indisponibles por ser de orden público y, por
tanto, no pueden renunciarse ni relajarse por voluntad del sujeto activo. Lo que significa que
una vez intentada la acción, deberá continuar hasta sentencia definitiva; sin que pueda caber en
este procedimiento la confesión ficta, ni el desistimiento, ni el convenimiento, ni la transacción.
Tampoco tiene cabida la prueba de juramento; y la confesión solo tendría valor de indicio. 2)
Son imprescriptibles, por cuanto el orden público tiene interés en el establecimiento del
verdadero estado familiar y, por tanto, no se limita en el tiempo el derecho a ejercer las acciones
que persiguen tal esclarecimiento. Sin embargo, en aras de la estabilidad del grupo familiar y
ante la incertidumbre que puede derivar del no ejercicio de las acciones, éstas en ciertos casos
están sometidas a lapsos de caducidad.Pruebas. Las pruebas de la maternidad pueden ser
primarias o secundarias. Son pruebas primarias: Partida de nacimiento, el reconocimiento hecho
por la madre o por sus ascendientes, la posesión de estado del hijo. Son pruebas secundarias: la
sentencia recaída en juicio y la declaración de testigos. Filiación Paterna: Así como la
maternidad se refiere a la relación entre una mujer y su hijo, o viceversa, se entiende por
paternidad la relación de parentesco consanguíneo de primer grado en línea recta, entre un
hombre y su hijo o viceversa.
5. 5. 3) En cuanto al procedimiento, todas las acciones relativas a la filiación se tramitan mediante
juicio ordinario, salvo especiales di Entre los efectos extraciviles podemos mencionar: 1. En
derecho penal la filiación puede alterar la punibilidad de un delito, en algunos casos como
excusa legal absolutoria, y en otras bien como atenuante, bien como agravante. 2. En derecho
constitucional e internacional público, la filiación puede comunicar la nacionalidad de los
padres a los hijos de éstos, en los casos de regla de ius sanguinis. Efectos de la Filiación La
filiación tiene importantes efectos jurídicos. Podemos citar, entre los más importantes, los
siguientes: 1. En el caso de derecho de familia, la filiación origina la patria potestad, el que en
algunas legislaciones se divide en la custodia personal del menor y la custodia patrimonial de
sus bienes, la obligación alimenticia en caso de vida separada de los padres, el derecho a la
relación directa y regular entre el hijo y el padre que no tiene la custodia del primero, el deber
de socorro y ayuda mutua, el deber de educar al hijo. 2. En el caso de derecho sucesorio, en
algunos sistemas, la filiación obliga a la reserva de la legítima y es el heredero legal prioritario
(junto con el resto de hermanos). 3. La filiación determina los apellidos de la persona, que se
regirán en función de la legislación concreta aplicable. sposiciones de la ley; ya
personalmente, o a través de mandatario con poder especial, y se deben intentar ante el juez de
Familia del domicilio del hijo, cualquiera que sea la edad de este, con intervención del
Ministerio Público.
Recomendado

Otroooooo

 RECONOCIMIENTOS DE HIJOS EXTRAMATRIMONIALES.


Concepto. Consiste en acto jurídico que contiene una declaración formal de paternidad o
maternidad, hecha por el padre o la madre, con referencia al hijo determinado concretamente,
habido fuera del matrimonio. Tal acto jurídico: unilateral, declarativo autentico, solemne,
irrevocable y que no admite modalidad. Puede ser reconocido por el padre y la madre
conjuntamente, o por uno solo de ellos.
5. CARACTERES ESENCIALES.
El acto jurídico del reconocimiento presenta los siguientes caracteres: es in acto solemne
"adprobationem" porque la ley exige que verifique por medio de un acto autentico
del registro civil, o en una escritura pública o en un testamento. Un acto realizado en un
documento privado solo podría servir como comienzo de prueba escrita para ejercer la acción d
indagación de la paternidad.
Un acto autentico que presente confianza, que sea fehaciente ofrece una certidumbre y una
garantía publica y ofrece fe plena en el momento de la prueba. La presencia de un funcionario
público que autentica el documento es la mejor prueba de que no habrá alteraciones ni fraudes
en la redacción del mismo, y es necesaria esta serie de seguridad por la gravedad de la situación
que establece.
Es un acto unilateral, puesto que solo exige la voluntad del autor el reconocimiento. La
aceptación del hijo extramatrimonial es un acto declarativo, porque se hace con el objeto de
declarar en él la paternidad o maternidad de una persona y se hace con ese solo objeto, pues no
admite modalidad alguna.
Es un acto irrevocable, porque el que lo ha aceptado no puede retratarse. El reconocimiento
hace nacer una serie de derecho de la voluntad del declarante no pueda despojarlo por actos
posteriores.
Es un acto individual, puesto que solo produce efectos entre los padres, o el padre que emanan
y el hijo.
Igualmente, el reconocimiento es incondicional, eso es puro, y simple, porque no esta sujeto a
un plazo, condición o cargo que pueda modificar sus consecuencias jurídicas. El fundamento se
halla en el hecho de que se trata de un estado o situación jurídica que no se puede modificar
por la voluntad de las partes; en todo caso, resultaría nula toda modalidad impuesta.
El reconocimiento es así mismo un acto formal porque requiere el cumplimiento de ciertas
solemnidades establecidas en la ley, ya que un acto de esta naturaleza importa que se deja
constancia de su realización por eso prescribe la ley que los reconocimientos deberá hacerse en
el registro del estado civil.
El código civil atribuye expresamente al reconocimiento los caracteres formal (art.390),
facultativo (art. 388), individual (art.392), puro e irrevocable (art. 395), los demás caracteres
están también implícitamente consagrado en la ley
6. SUJETO ACTIVO DEL RECONOCIMIENTO.
De la circunstancia de que el hijo extramatrimonial pueda hallarse de no haber sido reconocido
por ninguno de sus padres, parece inferirse, lógicamente, que el sujeto activo del
reconocimiento es tanto el padre como la madre.
Tratándose de la madre, el vinculo se revela por hechos físicos tangibles el embarazo y
el parto que no se dan cuando se tratan del padre, ni que, por ese mismo o por la mayor
intensidad del instinto, alternado el caso de la madre que no ha reconocido a su hijo sea mucho
menos tomado en cuenta que el del padre que no lo ha hecho. Esto solo significa que la madre,
en circunstancias normales, tiene acerca del vinculo mayor certidumbre que el padre y que, casi
siempre el hijo gozara respecto de ella del estado constante de tal. Pero puede haber casos
como el de haberse separado de la medre del hijo y haberse roto o interrumpido la relación del
facto u otro semejante en que esa mayor certidumbre desaparece; y, aunque no se trata de
ellos, si no de los casos en que el hijo se ha mantenido en la vida cotidiana cerca de la madre, el
reconocimiento formal y expreso y conferirá estabilidad al status y evitara dudas y
controversias posteriores.
El actual código, los sujetos de reconocimientos son.
1.- Ambos padres u o uno solo de ellos (art.388). El numeral prescribe que el hijo
extramatrimonial puede ser reconocido por el padre o la madre, conjuntamente o por uno de
ellos.
El reconocimiento conjunto se reproduce cuando concurren en un mismo acto las
declaraciones de ambos progenitores en cambio el reconocimiento unilateral cuando esta
sujeto a la limitación de que no podrá rebelar el nombre de la persona con quien se hubiera
tenido el hijo, lo ciertamente no rige respecto del padre que reconoce al hijo simplemente
concebido (Art.392).
De acuerdo con loso dispuesto en el articulo 397 que preceptúa: el hijo extramatrimonial
reconocido por uno de los cónyuges no puede vivir en la casa conyugal si asentimiento del otro.
2.- Los abuelos en las respectivas líneas: (Art.: 389) preceptúa que el hijo extramatrimonial
puede ser reconocidos por los abuelos o abuelas de las respectivas líneas cuando los padres se
encuentran por cualquier causa privada de discernimiento, sean sordomudos, ciego sordos, o
ciego mudo que no pueden expresar su voluntad de modo indubitable (Art.: 43 incisos 2º y
3º)sufran de retardo mental o adolezcan deterioro mental que les impide expresar su voluntan
(Art.44 Inc., 2 y 3), o se hallan en situación de desaparecidos (Art.: 47 c.c).
3.- Los menores de edad; la capacidad para reconocer no se rigen por la s reglas de la capacidad
en general, ya que basta que el sujeto activo tenga capacidad de discernimiento que le permita
darse cuenta de su actitud regeneradora y del acto del reconocimiento. En consecuencia, el
menor de edad esta también en la posibilidad de realizar un reconocimiento valido.
Igualmente, pueden hacerlo los padres que teniendo mas de 16 años halla obtenido titulo oficial
que los autorice una profesión u oficio o que siendo varón mayor de los 16 años o mujer de 14
hallan contraído matrimonio valido casos en los cuales deben reconocer al hijo mediante
testamentos, no obstante que para otorgarlo se requiere haber cumplido mayoría de edad.
Otros casos especiales del reconocimiento:
a) Reconocimiento del hijo extramatrimonial de mujer casada tratándose de la cónyuge o varón
casado puede este efectuar el reconocimiento del hijo adulterino, quedando por cierto a salvo el
derecho de la cónyuge para plantear la acción de separación de cuerpos o de divorcios
por adulterio o efecto de conseguir la desheredación del marido.
Refiriéndose a la mujer casada , no existe inconveniente alguno para que reconozca a un hijo
habido ante de la celebración del matrimonio, caso en el cual queda reservado el derecho del
marido plantear la anulabilidad del matrimonio por ignorar un defecto sustancial que haga
insoportable la vida en común, como es la vida deshonrosa de la mujer; pero, se trata de
resolver el problema del hijo adulterino de la cónyuge, habido dentro del matrimonio y con
tercera persona, sobre el particular de daban los casos:
a) que el reconocimiento se efectué la propia madre.
b) que lo participe el padre.
De acuerdo con el Art.396 que preceptúa: que el hijo de mujer casada no puede ser reconocido
son después de que el marido lo hubiese negado y obtenido sentencia favorable, y si la madre
estuvo casada en la época de la concepción solo puede solicitar la declaración judicial de
paternidad extramatrimonial en caso de que el marido hubiese contestado la paternidad y
obtenido también sentencia favorable, así lo dispone el Art.404 del código civil.
 a) Caso de hijos extramatrimoniales reconocido por otro. Por ultimo, cabe hacer
alusión el caso de quien considerándose progenitor del hijo extramatrimonial de alguien y,
teniendo el propósito de reconocerlo, se hallara con que persona distinta lo ha reconocido.
No existiendo disposición legal alguna sobre este supuesto, se juzga que el segundo
reconocimiento es nulo mientras no se impugne la filiación resultante del primer
reconocimiento para evitar la incertidumbre en el estado del hijo.
7. SUJETO PASIVO DEL RECONOCIMIENTO.
En general, las legislaciones ofrecen diversos criterios en cuanto a si todos los hijos
extramatrimoniales pueden ser reconocidos, o si solos pueden serlo algunos de ellos.
Entre las leyes modernas, hay varias que solo permiten el reconocimiento del hijo natural, esto
es, de aquel cuyos padres no están casados, pero tenia impedimento para casarse al momento
de la procreación, en ciertas situaciones los adulterinos y aun los incestuosos. De acuerdo con
nuestra legislación, pueden serlo todos los hijos extramatrimoniales sin excepción.
De acuerdo a lo dispuesto en el Art.398 el reconocimiento de un hijo mayor de edad no confiere
al que lo hace, derecho sucesorios ni derecho de alimento, sino en caso que el hijo tenga
respecto de el la posición constante de estado consiente en el reconocimiento.
Hijos simplemente concebidos se han suscitados discusión respecto del reconocimiento de una
persona por nacer en razón de que podría rebelarse en nombre de la persona con quien se ha
tenido el hijo(Art.392); sin embargo, ningún problema se presenta si la madre lo reconoce
simultáneamente con el padre(Art.388). La ley dispone que tal restricción no rige respecto del
padre que reconoce al simplemente concebido (Art.392), desde que este es sujeto de derecho
para todo cuanto le favorece.
Hijos premuerto, casi toda las legislaciones permiten que el reconocimiento que el hijo
extramatrimonial puede hacerse cuando esta simplemente concebido, también cuando ya a
muerto siempre que haya dejando descendientes.
El código civil en su articulo394 es suficientemente explicito en cuanto establece: que "puede
reconocerse al hijo que ha muerto dejando descendiente", sin distinguir si estos son
matrimoniales o no.
8. FORMAS DE RECONOCIMIENTO.
El reconocimiento es un acto formal, que exige determinadas solemnidades establecidas por la
ley para que tenga valides y eficacia el fundamento se encuentra en la trascendencia que posee
el acto y en la conveniencia de que sea meditado, indubitado y fehaciente. La ley establece que
el reconocimiento debe constar en el registro de nacimiento, en la escritura pública o en
testamento y no existe otra forma de practicar uno valido.
 1. Reconocimiento en el registro del estado civil .- se debe hacer delante del oficial de
registro en los siguientes casos:
 a) Al asentar la partida de nacimiento del hijo la que tiene que ir firmada por el padre
 b) Por declaración posterior , asentada un acta en el mismo registro por el que la
practica , ante dos testigos y autorizada por el funcionamiento del registro civil o por el
alcalde
 2.  Reconocimiento por escritura pública.- el reconocimiento de un hijo extra
matrimonial puede hacerse delante de un notario por escritura pública. este documento
produce también fe plena debido a la solemnidad con lo que se ha revestido el acto.
 3. Reconocimiento por testamento.- se puede reconocer aun hijo extramatrimonial por
testamento, cualquiera que fuere la forma de este del tal modo que en in testamento cerrado
o ante notario u ológrafo iría contra el principio de que solo por documento publico se debe
reconocer al hijo por baste que el testamento ológrafo este firmado, escrito y fichado por la
mano testador para que sea valido. Es cierto que este medio que es más inseguro y se presta
a una más fácil impugnación, la que contra los otros es casi imposible realizar. Pero el
testamento ológrafo, por otra parte, para que produzca sus efectos tiene que ser
protocolizado y se trasforma en documento publico. Sin embargo, no hay duda de que
puede ser más fácilmente impugnado que los anteriores.
9. EFECTOS JURÍDICOS DEL RECONOCIMIENTO.
Como hemos dicho, la filiación del hijo extramatrimonial, reconocido de forma voluntaria o en
a consecuencia del juicio de investigación de la paternidad otorga los mismos derechos del hijo
de matrimonio, tanto respecto de los padres como de la familia de estos.
El Dr. Cornejo Chávez dice: hay tres principios que rigen universalmente los efectos del
reconocimiento voluntario:
 a) El de que una vez practicado y sin perficio de la acción invalidatoria, el
reconocimiento es irrevocable.
 b) El de que dicho acto jurídico no admite modalidad alguna , plazo, condición o cargo,
por lo cual no es posible recortar los efectos que la ley le atribuyen; y
 c) El de que tales efectos surten respecto del padre o madre reconociente que no
arrastran al que no a efectuado el reconocimiento. El código civil consagra estos tres
principios en los artículos 21,395,421y 818 que a la letra dicen :
Art. 21: "a hijo extramatrimonial le corresponde los apellidos del progenitor que lo haya
reconocido. Si es reconocido por ambos, lleva el primer apellido de los dos".
"rige la misma regla en caso de filiación por declaración judicial".
Art.395: el reconocimiento no admite modalidad y es irrevocable.
Articulo.421: la patria potestad sobre los hijos extramatrimoniales se ejerce por el padre o por
la madre que lo ha reconocido.
Si ambos padres han reconocido al hijo, el juez de menores (juez del niño o adolescente)
determina a quién corresponde la patria potestad, atendiendo a la edad y sexo del hijo, a la
circunstancia de vivir juntos o separados los padres y, en todo caso, a los intereses del menor.
Las normas contenidas en este artículo son de aplicación respecto de la madre, aunque sea
menor de edad. No obstante, el juez puede confiar aun curador la guarda de la persona o de
los bienes del hijo, así lo exige el interés de este, cuando el padre no tenga patria potestad-.
Articulo818: "todo los hijos tienen derecho sucesorios respecto de sus padres. Esta disposición
comprende a los hijos matrimoniales, a los extramatrimoniales reconocidos voluntariamente o
declarados por sentencia…."
 d) Cuando se trata de la representación, el hijo reconocido hereda una cuota igual a la
del hijo matrimonial.
 e) Los padres extramatrimoniales heredan al hijo reconocido; pero si el reconocimiento
se produjo cuanto este era mayor de edad tal derecho solo funcionan si el hijo consintió en
el reconocimiento o tuvo posición constante del estado.
Articulo 398 preceptúa: el reconocimiento de n hijo mayor de edad no confiere al que lo hace,
derechos sucesorios ni derechos a alimento, sino en caso el hijo tenga respecto de el, posesión
constante de estado o consienta en el reconocimiento.
 f) Los parientes de ambas líneas heredan sus casos, al hijo reconocido. Ha de
entenderse, aunque la ley no lo diga expresamente que este derecho no funciona cuando el
reconociendo del hijo mayor de edad se produjo sin consentimiento de esto y sin que
gozaran previamente de la posición constante de estado.
 g) Debe suponerse, así mismo que los padres en este ultimo supuesto tampoco heredad
a los descendientes del hijo.
El reconocimiento produce, además, según se ha dicho, efectos secundarios en cuanto al
apellidos del hijo, en consentimiento para su matrimonio si lo contrae siendo menor, la tutela ,
la cúratela y la formación del consejo de familia.
 a) En cuanto al apellido, de confraternidad en el articulo 21 preceptúa que: "al hijo
extramatrimonial le corresponde los apellidos de los dos, del progenitor que lo halla
reconocido y que si es reconocido por ambos, lleva el primer apellidos de uno y otros".
 b) Con referencia a los efectos que producen el reconocimiento respecto al derecho de
consentir al matrimonio del menor, expreso de los padres; pero si se trata de los hijos
extramatrimoniales, requieren solo autorización del padre que lo hubiera reconocido o, en
su caso de los abuelos paternos, cuando aquel lo hubiera reconocido espontáneamente la
misma regla se aplica a ala madre y a los abuelos en la línea materna.
 c) En cuanto a la tutela a tenor de la formula genérica contenidas en el art.503 Inc., 1º.
Los padres tienen el derecho de designar tutor testamentario o escritura al hijo menor, en el
caso a que esa formula se contrae. a falta de designación, el reconociendo otorga a los
ascendientes el derecho de ejercer la tutela legitima mas esta que sujeta, a diferencia a lo
que ocurre con el hijo matrimonial a la confirmación del juez conforme lo dispone en
Art.507.Los padres pueden excluir de la tutela aciertas personas, sin expresión de causa, así
l estipula el art.515 Inc., 6.
 d) En cuanto a la cúratela, de reconocimiento voluntario confiriere a los padres el
ejercicio del cargo de curadores respecto de los hijos incapaces mentales y minusválido, así
como de los que sufren pena que llevan anexa la interdicción civil. Confiere también el
derecho para pedir la interdicción de los mismos incapaces, así como el derecho de designar
el curador testamentario o escriturario para el hijo enfermo o débil mental o sordo mudo
cuando tenga parientes.
Art. 569: La cúratela de las personas a que se refieren los Art. 43 Inc. 1y2; y 44 Inc. 2 Y 3
corresponde: Inc.: "Alos padres….".
Art. 596: "la cúratela a que se refiere el Art. 595 se discierna por el orden establecido en el Art.
569 y se limita a la administración de los bienes y a la representación de los juicios del penado".
El curador también esta obligado a cuidar de la persona y bienes de los menores incapaces que
se hallaren bajo autoridad de interdicto hasta que se les provea de tutor o de otro curador.
Art. 583: pueden pedir la interdicción del incapaz, su cónyuge, su pariente y el ministerio
público.
Articulo 595in fine: también pueden pedir el nombramiento y el cónyuge los parientes del
interdicto".
Articulo 587: pueden pedir la cúratela del prodigo o del mal gestor, solo su cónyuge, sus
herederos forzosos, y por excepción, el ministerio público de oficio o a instancia de un pariente,
cuando aquellos sean menores o incapacitados.
 e) Finalmente, en relación a consejo de familia los padres están facultados para
designar a los miembros que deben integrarlo, conforme lo dispone el articulo 623, y
también para prohibir la formación de tal organismo de acuerdo con lo establecido en el
articulo 630 o para excluir de el a determinadas personas, así lo preceptúa el articulo 632-
inciso 3º. De código civil. Para se mas comprensible en tema de la referencia consignamos el
articulado del C.C.
Articulo 623: formación de consejo de familia" el consejo pospone de las personas que hayan
designado por testamento o en escritura publica el ultimo de los padre que tubo al hijo bajo su
patria potestad o su cúratela; y, en su defecto por las personas designados por ultimo abuelo o
abuela que hubiera tenido al menor incapaz bajo su tutela o cúratela"
"a falta de las personas mencionadas, forman el consejo de los abuelos y abuelas, tíos y tías,
hermanos y hermanas del menor o del incapaz".
"los hijos del mayor incapaz que no sean sus curadores son miembros natos del consejo que se
formen para el".
Articulo 630:" no habrá consejo de familia para un hijo extramatrimonial cunado el padre o la
madre lo haya prohibido en su testamento o por escritura publica, en este caso el juez de
menores (juez del niño y el adolescente) o el de paz , según corresponda asumirá
las funciones del consejo, oyendo Alos miembros natos que hubiera."
Articulo632: "las personas a quienes el padre o madre, e l abuelo o la abuela hubiese excluido
de est6e cargo en su testamento o por escritura publica…".
El reconocimiento, además atribuye a los parientes del padre o de la madre reconocientes
la función de integrar el consejo de familia legítimo.
De acuerdo con lo dispuesto en el articulo 625: "cuando, entre las personas hábiles para formar
el consejo, hubiera menos hermanos enteros que medio hermanos, solo asisten de estos igual
numero al que aquellos incluyéndose al de menor edad".
10. IMPUGNACIÓN DEL RECONOCIMIENTO.
El Dr. Cornejo Chávez se refiere a la invalidez del reconocimiento se puede producir
en tesis general por dos días: la revocación y la impugnación: La primera, aunque algunos la
involucran dentro de la segunda, se diferencia de esta en su carácter individual: consiste por la
que le mismo reconociente deja sin efecto el reconocimiento que practico, fundándose en que la
relación paterno – filial, materia de ese acto es falsa o, mas simplemente, sin expresar la razón
en que se funda su cambio de voluntad. Esta figura supone que de reconocimiento no produce
prueba cerca de la falsedad de la relación paterno- filial, en el caso de que la alegue no se
habrá debate ni se sigue procedimiento judicial alguno para invalidar procedimiento alguno.
Josserand dice: "el derecho no admite la renovación y consagra, por el contrario, la
irrevocabilidad del reconocimiento; pero no falta, quienes piensan como ya se ha dicho que ese
principio de irrevocabilidad no rige cuando se trata de reconocimiento testamentario; ni
quienes sostienen que el reconocimiento deba tener siempre posibilidad de dejar sin efecto del
acto cuando extraña una falsedad, pues esta no debe jamás prevalecer aunque se funde en una
confesión de parte interesada".
Nuestra legislación civil, sigue el criterio de que el reconocimiento realizado de acuerdo a la ley
lo cual implica discusión o debate judicial.
En cuanto a las formas de impugnación hemos indicado de acuerdo con lo expresado con el Dr.
Cornejo Chávez, se puede invalidar el conocimiento involuntario por dos vías de revocación e
impugnación o negación del reconocimiento:
La impugnación puede basarse en razones que se refieren al fondo mismo del reconocimiento
esto es a la falsedad de la relación paterno-filial (acto nulo o anulable) para cuyo efecto se exige
que se produzca la prueba correspondiente.
Causales que aluden a los elementos esenciales del acto jurídico (agente, objeto, fin, forma);
pero en cualquier caso supone debate y prueba salvo que halla allanamiento con la demanda.
El numeral 399 C.C. Establece que el reconocimiento puede ser negado por el padre o la madre
que no interviene en él, por su propio hijo o descendiente sin hubiera muerto, y por quienes
tengan interés legitimo. Sin perjuicio de lo dispuesto en el articulo 395.
La legislación civil no determina concretamente, las causales en que puede fundarse la
fundación quienes pueden impugnar el reconocimiento: con relación a las personas que pueden
impugnar el reconocimiento; los padres no intervienen en el reconocimiento, luego el propios
hijos y sus descendientes, si el hijo hubiera muerto y finalmente pueden negarlo, todos quienes
tengan interés legitimo, aparte de lo que dispone el numeral 395 en el sentido de que el
reconocimiento no es revocable ni admite modalidad.
El plazo es de 90 días, desde cuando se tiene reconocimiento del acto. Y dentro de un año
cuando la acción la ejercita el hijo menor o incapaz contados desde cuando llega a su mayoría o
desde cuando cesa su incapacidad.
Artículo 400: el plazo para negar el reconocimiento es de 90 días, a partir de que se tuvo
conocimiento del acto.
Artículo 401: el hijo menor o incapaz puede en todo caso negar el reconocimiento hecho en su
favor dentro del año siguiente a su mayoría o a la cesación de su incapacidad.
Se explica esta ampliación del plazo, por que nadie mas interesado que el propio hijo en el acto
de su reconocimiento, de modo que si el mismo quien lo impugna, afrontando los perjuicios
que eventualmente pusiera acarrearle esa impugnación, la ley no pude prohibírselo, pues a
nadie se le puede imponer que acepte como padre o madre a quien no lo es.
En todo caso, el termino es de caducidad y no prescripción, por lo que no admite interrupción
ni suspensión quien.
Quien quiera que fuere el impugnante debe entenderse que esta obligado a acreditar en juicios
las razones o causales de su imanación, las cuales como ya se dijo, pude referirse a l a falsedad
de la relación paterno- filial., a los elementos esénciales del acto jurídico o Alos vicios de
consentimiento.
ARTICULOS PERTINENTES A FILIACION MATRIMONIAL EN EL CODIGO CIVIL
Articulo 386 hijos extra matrimoniales.
Son hijos extramatrimoniales los concebidos y nacidos fuera del matrimonio.
Concordancia:
Constitución de 1993:
Articulo6 (paternidad responsable. Derechos y obligaciones del padre e hijos)
Código civil:
Articulo 361(presunción de paternidad), articulo 2084
(Filiación extra Matrimonial).
Articulo 387 medios probatorios de la filiación extramatrimonial.
El reconocimiento y la sentencia declaratoria de la paternidad o la maternidad son los únicos
medios de prueba de l afiliación extramatrimonial
Concordancias:código civil:
Articulo 402(declaración judicial de paternidad extra matrimonial); articulo 409 (declaración
judicial de maternidad extramatrimonial); articulo 410(carácter inextinguible de la acción
judicial de la filiación extramatrimonial).
Código procesal civil:
Articulo 831.2 (para el inicio del proceso sucesorio, en caso de sucesión encestada, a la solicitud
se acompañaran documento publico que contengan la declaración judicial, si se trata de hijo
extramatrimonial).
Articulo 388 reconocimientos del hijo extra matrimonial.
El hijo extramatrimonial puede ser reconocido por el padre o la madre conjuntamente o por
uno solo de ellos.
Concordancias:
Código civil:
Articulo 389 (reconocimiento del hijo extra matrimonial por los abuelos); articulo 392
(reconocimiento del hijo extramatrimonial por uno de los padres); articulo 414 (en casos del
articulo4002, así como cuando el padre a reconocido al hijo la madre tiene derechos
a alimentos e indemnización, por daño moral)
Articulo 389 reconocimientos por los abuelos.
El hijo extra matrimonial puede ser reconocidos por loa abuelos o abuelas de la respectiva
línea, en el caso de la muerte del padre o de la madre o cuanto estos se hallan comprendido en
los artículos 43, incisos 2y3 y 44, incisos 2y3, o en el articulo 47.
Concordancias:
Código civil
art.443 (incapacidad para el ejercicio de los derechos civiles); articulo 44(incapacidad relativa
para el ejercicio de los derechos civiles).
Código procesal civil: articulo 831(admisibilidad a para el inicio del proceso sucesorio, en caso
de sucesión incestada).
Articulo 390 formalidades del reconocimiento.
El reconocimiento se hace constar en el registro de nacimiento; en escritura pública o en
testamento.
Concordancias:
Código civil:
Artículo y ss. (Los nacimientos se inscriben en el registro de estado civil)
Código procesal:
Articulo 831 (admisibilidad para el inicio del proceso sucesorio, en caso de sucesión intestada).
Articulo 391 actas de reconocimiento en el registro de nacimiento.
El reconocimiento en el registro puede hacerse en el momento de inscribir el nacimiento o en
declaración posterior y mediante acta formada por quien lo practica y autorizada por el
funcionario correspondiente.
Concordancias:
Código civil:
Articulo 70 y ss. (Los nacimientos se inscriben en el registro de estado civil)
Código procesal civil:
Articulo 831 (admisibilidad para el inicio del proceso sucesorio, en caso de sucesión incestada).
Articulo 392 reconocimientos por uno de los padres.
Cuando el padre o la madre hicieran el reconocimiento separadamente no puede rebelar el
nombre de la persona con quien hubiera tenido el hijo. Toda indicación al respecto se tiene por
no puesta.
Este artículo no rige respecto del padre que reconoce al hijo simplemente concebido.
Concordancias:
Código civil:
Articulo 1(la persona humana es sujeto de derechos desde su nacimiento).
393 capacidades para reconocer.
Toda persona que no se halle comprendida en las i8nacapcidades señaladas en el artículo 389 y
que tenga por lo menos 16 años cumplidos puede reconocer al hijo extramatrimonial.
394 reconocimientos del hijo muerto con descendientes.
Puede reconocerse al hijo que ha muerto dejando descendientes.
395 reconocimientos como acto puro e irrevocable.
El reconocimiento no admite modalidad y es irrevocable.
Concordancias:
Código civil:
396 reconocimientos del hijo extramatrimonial de mujer casada.
El hijo de mujer casada no puede ser reconocido sino después de que el marido lo hubiese
negado y obtenido sentencia favorable.
Concordancias:
Código civil:
361(presunción de paternidad); articulo 323(el marido que no se crea padre del hijo de su
mujer puede negarlo) el articulo 366 (causales de improcedencia de la acción contestataria de
paternidad).
397 asentimiento al hijo extra matrimonial para vivir en hogar conyugal.
El hijo extra matrimonial reconocido por uno de los cónyuges no puede vivir en la casa
conyugal sin el asentamiento del otro.
Concordancias:
Código civil:
Articulo 289 (deber de cuavitacion de los cónyuges); Art.:290 (igualdad en el gobierno del
hogar de los cónyuges).
398 derecho sucesorio y alimentario por reconocimiento del hijo mayor de edad.
El reconocimiento de un hijo mayor de edad no confiere al que lo hace derechos sucesorio ni
derechos a alimentos, sino en caso que el hijo tenga respeto de el la posesión constante de
estado o consienta en el reconocimiento.
Concordancia:
Código civil:
Articulo 412(la sentencia de filiación extramatrimonial o el reconocimiento, no confiere al
padre o madre, derechos alimentarios ni sucesorios).
Articulo 399 impugnaciones de reconocimiento.
El reconocimiento puede ser negado por el padre o por la madre que no interviene en el, por el
propio hijos o por sus descendientes si hubiera muerto, y por quienes tenga interés legitimo,
sin perjuicio de lo dispuesto en el Art.395.
Concordancias:
Código civil:
Articulo VII del T.P. (interés legítimo para ejercitar o contestar una acción); art.400 (plazo para
negar el reconocimiento).
400 plazos para negar el reconocimiento.
El plazo por abnegar por reconocimiento es de 90 días, a partir de aquel en que se tuvo
conocimiento del cato.
401 plazos para negación de reconocimiento en caso de cese de incapacidad.
El hijo menor o incapaz puede en todo caso el reconocimiento hecho en su favor dentro del año
siguiente en su mayoría o a la sensación de su incapacidad.
Concordancias:
Código civil:
Articulo 42(capacidad para el ejercicio de los derechos civiles); art.43 (incapacidad absoluta
apara el ejercicio de los derechos civiles); art.44 (incapacidad para el ejercicio de los derechos
civiles); art.45 (los representantes legales de los incapaces ejercen los derechos civiles de
estos); art.46 (capacidad adquirida d e los derechos civiles por matrimonio o titulo oficial)
CAPÍTULO II

Declaración judicial de filiación extramatrimonial


1. INTRODUCCIÓN.
Como hemos expuesto anteriormente, el reconocimiento es un acto voluntario por el que el
padre o la madre de un hijo extramatrimonial declara formalmente la relación paterno – filial.
Impulsado por razones de conciencia, o por la intima convicción de la veracidad del vinculo, o
por cualquier motivo semejantes. El derecho no hace fuente a este acto, sino otorgarle validez
cuando se realiza con ciertas formalidades que le confieren autenticidad y seriedad.
Mas se presenta un problema de ardua solución cuando el padre o la madre un hijo
extramatrimonial se resiste reconocerlo, porque desconfía de la verdad del vinculo de ese
sentido, las leyes dan regla muy diversas para la investigación tanto de la paternidad como de
la maternidad extramatrimoniales ; porque la paternidad, por un lado es un hecho secreto,
misterioso y difícil de establecer; mientras que la maternidad, por el contrario en un hecho
cierto, patente y fácil de comprobarlo, no sin razón se ha dicho (que el fenómeno de la
maternidad es fácil comprobable , mientras que el fenómeno de la paternidad es presumible).
Dice el Dr.: Cornejo Chávez: esta investigación que es en que se basa la declaración judicial del
vinculo paterno – filial, suele ser considerado como una conquista del Derecho moderno, pero
no lo es en realidad. La historia jurídica revela que en el curso de varios siglos se han sucedido
los períodos en que se ha admitido la investigación judicial en referencia y los períodos en que
tal investigación ha sido prohibida, hecho éste que es una de las bases de la "ley" enunciada por
Colín y Capitán, según la que a la mayor o menor liberalidad de la luz y
la identidad del producto de ese alumbramiento con el sujeto de cuya filiación se trate. En
ambos supuestos existe la más amplia libertad de investigación y de prueba.
La legislación Civil dispone que la madre no pueda dejar de reconocer a su hijo; tiene
obligación de que su nombre figure en el acta de nacimiento. Si al presentar al niño al Registro
Civil no se proporciona el nombre de la madre nadie puede darlo sin autorización, ni siquiera el
padre que reconozca, el hijo se asentará como hijo de madre desconocida. El hijo tiene plena
libertad para investigar, en cualquier caso, la maternidad para ello se admite cualquier medio
de prueba, incluso los testigos.
Para probar la maternidad ya sabemos que deberán determinarse dos hechos: el parto, y la
identidad del nacido con el reclamante.
En cuanto a la investigación de la paternidad, sólo puede intentarse cuando ya ha quedado
establecida la maternidad y, a diferencia de ésta, la investigación sólo se autoriza en
determinados casos.
Toda vez que la mujer soltera no tiene deber de fidelidad para con nadie, y que en ejercicio de
su libertad puede tener relaciones sexuales con quien lo desee y aun simultáneamente con
varios hombres, establecer la filiación paterna de su hijo es difícil pero hoy en día es posible
gracias a la prueba del ADN.
La paternidad sólo se establece por el dicho de la madre y, desde el punto de vista jurídico, a
través de presunciones. Sin embargo, partiendo del supuesto de que solo la madre puede saber
quien es el padre de su hijo, antes de la Revolución Francesa de 1789 se admitía la libre
investigación de la paternidad, sólo para el pago de alimentos, pues los hijos ilegítimos no
podían heredar. Esto dio origen a que las solteras escogieran padre de sus hijos al más
conveniente económicamente, circunstancias que llegó a convertirse en una "plaga de
la sociedad", según recuerda Planiol. Como reacción, la Convención revolucionaria prohibió
totalmente la investigación de la paternidad y los tribunales sólo permitían en casos de rapto,
cuando coincidía con las épocas de la concepción.
Esta situación pasó al Código Civil, no fue sino hasta 1912, debido a las críticas sociales y a la
labor de la jurisprudencia, cuando se establecieron cinco causas por las que se permitía la
investigación de la filiación paterna.
En lo que se refiere a la legislación nacional, el código de 1852 reprodujo el art. 340
de Napoleón, prohibiendo la investigación judicial de la paternidad, más reaccionando este
criterio y poniéndose a tono con la nueva tendencia, el código de 1936 y el de 1984 la han
admitido.
2. CONCEPTO.
Denominado también "reconocimiento forzoso", "reconocimiento judicial" y con
mayor propiedad: declaración judicial de filiación extramatrimonial.
Viene a ser un modo específico de emplazamiento de la paternidad o maternidad de una
persona determinada, cuando el padre y/o la madre se resisten a reconocerlo voluntariamente
ya porque desconfía de la verdad del vínculo biológico, ya por mala fe o intención deliberada de
causar daño, casos en los cuales se hace necesario investigar judicialmente.
También se dice que son acciones que permiten la investigación tanto de la paternidad como de
la maternidad extramatrimo-niales con la finalidad de que en su oportunidad el órgano
jurisdiccional declare mediante sentencia la relación paterno-filial existente entre una persona
y sus progenitores (padre o madre), que se han negado a reconocerlo de manera voluntaria. En
este sentido, se exige un pronunciamiento por parte del juez que conoce el asunto.
El Código derogado ni el actual no definen la institución, puede decirse que la declaración
judicial de filiación extramatrimonial es un medio de establecerla en defecto del
reconocimiento (voluntario), por virtud de una sentencia en la que declare, en los casos
expresamente señalados por la ley, que una persona es padre o madre de un determinado hijo.
3. FUNDAMENTO DE LA INVESTIGACIÓN DE LA RELACIÓN PATERNO-FILIAL.
Las razones en las que se funda la prohibición que la paternidad o la maternidad
extramatrimonial sean judicialmente investigadas, pueden reducirse a dos.
1. La dificultad de prueba, derivada de las circunstancias de ocultación o disimulo en que
comúnmente se desarrollan las relaciones sexuales extramatrimoniales; circunstancias que son
más notorias tratándose de la paternidad, porque si cuando se trata de la maternidad la
relación se expresa por hechos tangibles como son el embarazo y el parto; cuanto se trata de la
paternidad no existe, por lo menos en el estado actual de la ciencia, medio alguno de acreditar
indubitablemente la relación de filiación, a excepción de la prueba del ADN que actualmente se
está aplicando.
2. El carácter inmoral, a veces monstruoso o vergonzante de tales relaciones
extramatrimoniales, sobre todo cuanto son la fuente de filiación adulterina, incestuosa,
sacrílega o mancillada, carácter que parecería hacer in aconsejable toda investigación judicial
de la paternidad o de la maternidad, no sólo por lo que tendría de deprimente para los padres y
para el mismo hijo, sino por el escándalo que tal investigación originaria, por la mella que
causaría en las creencias religiosas o morales y hasta en la misma organización social, y por el
daño que podría ocasionar en ciertos casos al perturbar la paz dejas familias y perjudicar los
derechos del cónyuge o de los hijos matrimoniales.
Dice el ilustre maestro Dr. Cornejo Chávez, de estas dos razones, la segunda, que parecía ser la
más difícil de afrontar, ha sido prácticamente superada, a base del argumento de que. aparte de
la actitud hipócrita en que se funda, entraña una grave injusticia para el hijo extramatrimonial,
cuya injusticia no puede ser amparada por el Derecho, que busca precisamente realizar el ideal
de la justicia, amén de que existen ya otras disposiciones legales como las referentes a los
alimentos o el divorcio, en que se
Ha prescindido de análogas consideraciones relativas a la situación vergonzosa de los
interesados o al escándalo moral o social.
En cambio, se sigue reconociendo fuerza a la primera de las razones antes señaladas, porque, si
es muy difícil establecer con certidumbre la paternidad o la maternidad extramatrimoniales
cuando son negadas por los presuntos padres, se corre el riesgo que por evitar la injusticia de
que un hijo quede sin padres legales, se incurra en la injusticia de atribuir a alguien la calidad
de padre o madre de quien verdaderamente no es su hijo, con todas las obligaciones y
responsabilidades que esa calidad conlleva.
El derecho opta hoy por franquear la posibilidad de la investigación con amplitud considerable
si se trata de maternidad, y con severas restricciones si se trata de la paternidad, para evitar
abusos que pudieran revestir a veces el carácter de un verdadero chantaje. Y así, se establece
ordinariamente que procede la declaración judicial de la maternidad sin otro requisito que
acreditar el hecho del parto y la identidad del hijo, pero que precede la declaración judicial de
la paternidad si no en ciertos casos que hacen verosímil esa paternidad. Esta, es, precisamente
la posición del Código Civil vigente.
4. INVESTIGACIÓN JUDICIAL DE LA PATERNIDAD.
Los casos en que se permite la acción de investigación de la paternidad son los expresamente
establecidos por la ley.
Los hijos extramatrimoniales tiene acción en contra de quienes consideren su padre o su
madre, por tanto, la acción investi-gatoria de la paternidad es la que promueve el hijo para
averiguar su filiación por declaración judicial de la misma, a fin de establecer no sólo ese hecho
en si, de indudable valor efectivo, sino también para posibilitar básicamente el derecho
alimentario, el sucesorio y el de llevar sus apellidos.
La investigación judicial de la paternidad es un modo de establecerla a través del órgano
jurisdiccional, en defecto del reconocimiento voluntario y tiene por objeto que se le atribuya el
status de hijo extramatrimonial por virtud de una sentencia y sólo en los casos establecidos por
la ley.
En la investigación judicial de la paternidad se permite utilizar todos los medios probatorios,
los que previa valorización permitirán al juzgador formarse la convicción sobre la procedencia
o Improcedencia de la acción.
El Código Civil en su artículo 402 admite cinco casos de presunciones legales de paternidad o
solamente en casos en los que procede la admisión de la demanda a fin de que durante la
tramitación del proceso puedan ambas partes producir la prueba que consideren conveniente.
En efecto, la ley dispone que la paternidad extramatrimonial pueda ser judicialmente declarada
en los siguientes casos:
1. La paternidad extramatrimonial puede ser judicialmente declarada, cuando existe escrito
indubitado del padre que la admite. No será ni una escritura pública, ni un testamento, que ya
constituirán forma de reconocimiento voluntario. Serán entre otros, por ejemplo: actuados
judiciales por alimentos, o carta del presunto padre a la madre o al presunto hijo, en los que el
padre señale inequívocamente al hijo.
2. Cuando el hijo se halle o se hubiese hallado, hasta un año antes de la demanda "en la
posesión constante de hijo extramatrimonial" comprobada por actos directos del padre o de su
familia. Y es que la posesión de estado implica un verdadero reconocimiento. El padre trata al
hijo como suyo, haciéndolo reconocer como tal ante su familia y más aún, ante la sociedad, la
colectividad. Lo mantiene, lo educa, incluso lleva aún el apellido del padre o presunto padre.
Dice el jurista al que seguimos "que tradicional-mente se expresa la posesión constante de
estado, "por la concurrencia de tres elementos: Nomen, tractus y fama. Tendrá por tanto, esa
posesión, quien haya usado y use el apellido del presunto padre, a quien éste haya dado trato de
hijo -alimentándolo, educándolo, proveyendo a su instrucción- y quien haya sido tenido por tal
en el círculo de las relaciones ordinarias del padre... Esa posesión de estado debe ser probada
por una serie de hechos exteriores que deben ser notorios y públicos, que sean evidentes y que
nadie pueda dudar que se trate de relaciones de padre (inciso 2 del art. 402).
3. Cuando el presunto padre hubiera vivido en concubinato con la madre en la época de la
concepción. Cuando ha habido convivencia marital entre los progenitores; esto es cuando la
madre haya habitado bajo el mismo techo, viviendo maritalmente con el presunto padre. Aquí
se hace necesario que la época de la concepción y la cohabitación coincidan. Para determinar
el tiempo en que pudo tener lugar la concepción se aplica la misma regla que en caso del
matrimonio; se presumen hijos del concubino, los nacidos después de 180 días de iniciada las
relaciones, y antes de 300 días de haber terminado. En este caso, la presunción no opera como
en el matrimonio, en que no es necesaria ninguna declaración del marido, ya que en toda
circunstancia se requiere el reconocimiento voluntario o la sentencia (inciso 3o. del art. 403).
El artículo 403 expresa que la acción es improcedente si durante la época mencionada
(concepción) la madre llevó una vida notoriamente desarreglada o tuvo trato carnal con
persona distinta del presunto.
4. Violación, rapto o retención violenta. El inciso 4 del artículo 402 determina que en los casos
de comisión de estos delitos procede la investigación judicial de la paternidad, siempre de la
época de la concepción.
La violación es el acceso carnal con una mujer fuera del matrimonio contra su voluntad por
la violencia o intimidación. En cambio rapto es el arrebato de una mujer contra su voluntad y
por violencia, o después de haber obtenido su consentimiento por amenaza, fraude o engaño,
para mantener relaciones sexuales.
Conviene hacer notar que conforme es establecido la Corte Suprema corresponde al fuero civil
y no al penal la declaración de paternidad dice el Dr. Cornejo Chávez dice hay una cuestión
dudosa, a saber, si la declaración judicial de paternidad exige que previamente el demandado o
presunto padre haya sido condenado por respectivo delito.
Del texto del inciso 4 bajo estudio parece desprenderse la necesidad de que haya expedido
sentencia penal condenatoria, pues es sólo en ella que quedan establecidas la comisión del
delito y la culpabilidad del encausado.
Problema de solución y a veces imposible es el que se origina en la violación retención o rapto
perpetrados por varios sujetos en agravio de la misma mujer, si esta resulta embarazada de
acuerdo con lo dispuesto en el art. 413 que preceptúa: Prueba del grupo sanguíneo:
En los juicios sobre declaración de paternidad o maternidad extramatrimonial es admisible la
prueba negativa de los grupos sanguíneos u otras de validez científica.
También es admisible la prueba de los grupos sanguíneos a petición de la parte demandante en
el caso del articulo 402 inciso 4, cuando fueron varios los autores del delito. La paternidad de
uno de los demandados será declarado solo si dicha prueba descarta la posibilidad de que
corresponda los demás autores. Si uno de los demandados se niega a someterse a la prueba,
será declarada su paternidad, si el examen descarta a los demás. La obligación alimentaría es
solidaria respecto de quienes se nieguen a someterse a la prueba.
5. Seducción: Según lo dispuesto en el inciso 5o. del articulo 402, procede la declaración
judicial de la paternidad en el caso de seducción de la madre, cumplida con promesa de
matrimonio, en época contemporánea de la concepción, y siempre que la promesa conste de
manera indubitable.
La seducción es la actitud de un hombre que ha inducido a una mujer a entregársele. Cuando la
seducción resulta de maniobras fraudulentas o cuando va acompañada de promesa de
matrimonio, es un delito contra la libertad y el honor sexual cometido en agravio de una joven
mayor de catorce y menor de dieciocho años, de conducta irreprochable, por consiguiente, es
otro caso en el que se apertura la investigación de la paternidad cuando haya seducción
cumplida con promesa de matrimonio en época contemporánea a la concepción, siempre que
tal promesa conste de manera indubitable.
Del texto de la ley se infiere, que para la procedencia de la demanda, se necesita previamente
una sentencia condenatoria contra el presunto padre por el delito de seducción; empero, se ha
dado ejecutorias supremas en sentido contrario, como aquélla que señala que la seducción no
tiene que configurar forzosamente delito para el efecto de la declaración de la paternidad
extramatri-monial o, aquélla que dice, que habiendo probado que las relaciones sexuales,
tuvieron su origen en la seducción de la madre cuando era menor de edad, no es necesario que
exista instrucción por el delito contra el honor sexual.
El supuesto de seducción con promesa de matrimonio en época contemporánea a la
concepción, se da siempre que exista principio de prueba escrita que acredite dicha promesa,
por eso la condena por el delito de seducción sin prueba escrita de la promesa de matrimonio,
no es suficiente para declarar fundada la demanda de declaración judicial de paternidad.
A). DECLARACIÓN JUDICIAL DE PATERNIDAD DEL HIJO DE MADRE CASADA.
El art. 361 dice: "El hijo nacido durante el matrimonio o dentro de los trescientos días
siguientes a su disolución tiene por padre al marido". Por disposición expresa de la ley, si la
madre está casada en época de la concepción, solo puede admitirse la acción en caso que el
habido en el matrimonio tiene por padre al marido y constituye una sanción indirecta del
adulterio.
B). PROCEDENCIA DE LA ACCIÓN DEL HIJO POR NACER.
En aplicación del art. 405 del Código vigente dispone que la acción para que se declare la
paternidad de un hijo extramatrimo-nial puede ejercitarse antes del nacimiento.
De acuerdo con el Código abrogado la paternidad no matrimonial del hijo por nacer no estaba
permitida, por tanto, ahora constituye una significativa innovación en el texto actual, que
permite en adelante a toda mujer que se halle embarazada intentar una acción indagatoria de la
paternidad de su hijo, antes que nazca el mismo.
5. CUESTIONES PROCESALES.
Nuestro ordenamiento jurídico, contiene varias importantes disposiciones referentes al proceso
de investigación de la paternidad, que conviene analizar. Estas disposiciones determinan
quiénes pueden plantear la demanda, contra quiénes debe dirigirse, a quiénes corresponde
contradecirla, cuál es el juez competente para conocer de ella, y dentro de qué plazos es
procedente su interposición.
Conforme al art. 408 dispone: "La acción puede ejercitarse ante el Juez del domicilio del
demandante o demandado", que se justifica por la necesidad de favorecer al hijo.
La ley establece quienes son los titulares de las acciones:
1. La acción corresponde sólo al hijo, porque es el quien tiene interés de buscar el
emplazamiento de su estado.
2. A la madre, aunque sea menor de edad, puede ejercitarla en nombre del hijo, durante la
minoría de éste.
3. Entra el administrador si éste ha sido nombrado y es conocido, contra el defensor
de herencia a falta de herederos declarados; aún cuando la jurisprudencia no ha seguido un
criterio uniforme.
Referente a las personas que pueden contradecir la demanda, el ponente del Libro de Familia
propuso mantener y ampliar la teoría del legítimo contradictor, lamentablemente la Comisión
Revisora la suprimió sin explicar razones, tema importante porque se trata del derecho de
terceras personas interesadas para terciar en la controversia y contradecir la demanda del
presunto hijo.
Los requisitos para interponer una demanda sobre declaración judicial de paternidad
extramatrimonial, son los siguientes:
a) Que haya sido concebido o nacido un hijo extramatrimonial;
b) Que el presunto padre se haya negado a reconocerlo voluntariamente. K
c) Que se de uno o varios casos de investigación de la paternidad contemplado en el art. 402.
d) Que lo declare el órgano jurisdiccional.
En cuanto a los plazos de interposición de la demanda, muchas legislaciones coinciden en fijar
plazos muy cortos para la interposición de la demanda sobre declaración de paternidad. El
Código de 1936, siguiendo la misma orientación, establecía que "no podrá intentarse la acción...
después de transcurrido tres años de la mayoría del hijo. Sin embargo, en el caso del inciso 2o.
del artículo 366 (o sea el de hallarse el hijo en posesión constante de estado), la acción
subsistente hasta la expiración del año siguiente al fallecimiento del presunto padre".
El Código vigente ha uniformado el criterio en ambos casos, al establecer en su artículo 410 que
"no caduca la acción para que se declare la filiación extramatrimonial".
Esta fórmula mejora, por cierto, la posición del hijo, pero puede, eventualmente, perjudicar a
los herederos del pretendido padre si es contra ellos; y muchos años después que se plantea la
demanda en uso de la facultad contenida en el artículo 406, el transcurso del tiempo y el hecho
mismo de que aquellos herederos no tienen originariamente en
su poder los datos y pruebas que acaso hubiera podido utilizar el padre, podrían favorecer la
abusiva pretensión de atribuir al fallecido una paternidad.
6. INVESTIGACIÓN JUDICIAL DE LA MATERNIDAD.
De acuerdo con lo dispuesto en el artículo 409 conceptúa que: "La maternidad
extramatrimonial también puede ser declarada judidicialmente cuando se pruebe el hecho del
parto y la identidad del hijo".
Cuando el hijo extramatrimonial, no reconocido por su madre quiere probar su filiación
materna, no tiene otro camino que entablar acción sobre declaración judicial de maternidad
extra-matrimonial. Es entonces, un medio para establecerla en defecto de reconocimiento
voluntario por virtud de una sentencia en la que se declare la maternidad de un hijo respecto de
la mujer que lo alumbró.
No existe, por tanto, ningún problema en cuanto a los supuestos en que se puede plantear la
demanda, ni trae la ley presunciones de maternidad, ni existe la restricción referente a ser
madre casada (porque esta restricción, contenida en el artículo 404, no tiene por objeto evitar
un esclarecimiento escandaloso, sino soslayar la posibilidad de que el hijo tenga dos padres
legales o de que contraríe en su perjuicio la presunción pater is est).
Contrariamente a lo que ocurre en la investigación judicial de la paternidad, la investigación de
la maternidad procede sin enumeración en algunos casos, siempre que se pueda acreditar el
hecho de parto y la identidad del hijo. Así lo preceptúa el art. 409 que dice que la maternidad
extramatrimonial también puede ser declarada judicialmente cuando se pruebe el hecho del
parto o la identidad del hijo.
El hecho del parto significa la expulsión o salida del claustro materno de un feto viable, o sea en
condiciones de viabilidad, lo suficientemente maduro y en aptitud de vivir fuera del vientre,
mareando el inicio de la personalidad, originándose por lo mismo una serie de derechos y
obligaciones que van acompañar al sujeto recién nacido hasta la hora de su muerte. La
identidad del hijo, en cambio, permite comprobar que el hijo que demanda es el mismo que ha
alumbrado su madre.
En cuanto a las cuestiones procesales examinadas al tratar de la investigación de la paternidad,
las referentes a quienes pueden plantear la demanda, contra quiénes se puede dirigir, quiénes
son jueces competentes para conocer del asunto, la no caducidad de la acción y la procedencia
de la prueba de los grupos sanguíneos, son aplicables a este caso las acotaciones y comentarios
hechos al examinar la declaración judicial de la paternidad.
Conforme a lo estipulado en el art. 411 que dice: "Son aplicables a la madre y a sus herederos
las disposiciones de los artículos 406 al 408". El artículo 410 prescribe que: "No caduca la
acción para que se declare la filiación extramatrimonial". Finalmente el artículo 412 dice: "La
sentencia que declara la paternidad o la maternidad extramatrimonial produce los mismos
efectos que el reconocimiento. En ningún caso confiere al padre o a la madre derecho
alimentario ni sucesorio".
7. ACCIÓN ALIMENTARIA DE RESARCIMIENTO E INDEMNIZATORIA DE LA
MADRE.
Diversas legislaciones conceden a la madre del hijo cxtrama-trimonial, el derecho de reclamar
del hombre con quien ha vivido en concubinato, el reembolso de los gastos del embarazo y
parto.
El art. 414 consagra el derecho de la madre, por una parte, el pago de todos los gastos
ocasionados por el embarazo y alumbra-miento; por otra, a disfrutar de alimentos durante los
sesenta días anteriores y los sesenta días posteriores al parto, así como al pago de los gastos
ocasionados por éste y por el embarazo. También tiene derecho a ser indemnizada por el daño
moral en los casos de abuso de autoridad o de promesa de matrimonio, si esta última consta de
modo indubitable, de cohabitación delictuosa o de minoridad del tiempo de la concepción. La
norma es aplicable tanto en los casos de investigación de la paternidad como al del
reconocimiento voluntario del hijo.
El fundamento de este derecho, en lo que se refiere a los alimentos radica tanto en el estado de
necesidad por el que atraviesa la madre durante un período en que no se halla en condiciones
de dedicarse a ninguna actividad lucrativa, como en la conveniencia social y humana de
favorecer una gestación adecuada del nuevo ser; a través del auxilio alimentario a la madre, es
al hijo a quien realmente se auxilia.
Finalmente, la madre tiene derecho para reclamar una indemnización por el daño moral
irrogado, que se confiere únicamente en aquellos casos en que el acceso carnal se ha producido
dolosamente, mediante abuso de autoridad, promesa de matrimonio, cohabitación delictuosa o
minoridad al tiempo de la concepción. Se funda en la necesidad no solo de sancionar una
conducta dolosa, sino también en el menoscabo que sufre la madre en su reputación y la
frustración y en el desmedro de otras perspectivas matrimoniales, acaso truncadas en definitiva
por el nacimiento del hijo.
Conforme lo dispone el art. 414 in fine: Estas acciones son personales, de tal modo que fallecida
la madre pueden plantearla sus herederos, deben ser interpuestas antes del nacimiento del hijo
o, en su caso, dentro del año siguiente. Es juez competente el del domicilio del demandante o
del demandado y se dirige contra el padre o sus herederos legales. Por último, la acción caduca
si no se interpone dentro del año al nacimiento del hijo.
En cuanto lo expuesto, el periodo durante el cual la madre puede pedir alimentos al padre,
conviene hacer notar que parecería existir una implicancia entre lo dispuesto en el art. 414,
según el cual "la madre tiene derecho a alimentos durante los sesenta días anteriores y los
sesenta días siguientes al parto", y el art. 856 preceptúa "la partición que comprende los
derechos de un heredero concebido, será suspendida hasta su nacimiento. En el intervalo la
madre disfruta de la correspondiente herencia en cuanto tenga necesidad de alimentos".
8. LA PRUEBA DE LOS GRUPOS SANGUÍNEOS.
A través de la prueba negativa de los grupos sanguíneos, se determina la paternidad o la
maternidad, si era coincidente el grupo de sangre del hijo con el del padre o con el de la madre,
según el caso. Sí fuesen varios los posibles padres de la criatura, la paternidad de uno de los
demandados sólo será demandada si el examen descarta a los demás autores.
La filiación puede investigarse y determinarse a través de los siguientes medios:
1. La prueba del tipo bioquímico de la sangre (basada en la propiedad de isoaglutinación de la
sangre);
2. Datos generales del parecido externo;
3. Aplicación de las leyes mendelianas en la transmisión de ciertos caracteres (pigmentación de
la piel, cabellos e iris, por ejemplo);
4. Investigación semiológica o biológica de transmisión de ciertas afecciones o enfermedades;
5. Época de la concepción, duración del embarazo;
6. Estados especiales orgánico de la madre o del padre o de ambos, permanentes o en la época
de gestación.
Concepto: en el sentido amplio, se dice que es un procedimiento científico que consiste en la
extracción de sangre de la madre, del hijo y del presunto padre y en el análisis de éstos
componentes sanguíneos con el fin de establecer el vínculo paterno-filial.
Se ha dicho claramente descartar pero no comprobar, ya que estas pruebas permiten sólo
asegurar que una persona no es el padre. Sobre la configuración genética HLA- A, B, C y DR, se
pueden distinguir tres clases de exclusión de paternidad, así:
1. Una persona puede ser excluida si el niño posee un antígeno que no es portado por la madre
ni por el padre.
2. Una persona puede ser excluida si el niño no posee ninguno de los antígenos de un locus
demostrables en el presunto padre.
3. Una tercera constelación para una exclusión es aquella en la cual el niño ha heredado del
padre dos genes, los cuales el padre presuntivo no lleva en su haplotipo (herencia aplótica).
La prueba negativa de los grupos sanguíneos se halla íntimamente vinculada con la
investigación de la paternidad a través del análisis comparativo de la sangre acerca de la cual se
han dado diferentes criterios.
En cuestiones procesales: tanto para los juicios en que se reclama la declaración de paternidad,
como para aquellos que se exija la declaración de maternidad, se pueden ofrecer hoy en día
toda clase de pruebas que ayuden a esclarecer el asunto. Así lo establece en general, el Código
Procesal Civil, que admite, la actuación de medios probatorios típicos y atípicos. En
consecuencia, y gracias a los avances de las ciencias biológicas es mucho más fácil determinar
la filiación en la actualidad.
La ley sustantiva contiene varias importantes disposiciones referentes al proceso de
investigación de la paternidad, que conviene analizar. Estas disposiciones determinan quiénes
pueden plantear la demanda, contra quiénes debe dirigirse, a quiénes corresponde
contradecirla, cuál es el juez competente para conocer de ella, y dentro de qué plazos es
procedente su interposición.
Acerca del actor, el artículo 407 establece que la acción para que se declare la paternidad no
corresponde sino al hijo, porque se supone, con sobrado fundamento, que nadie es más
interesado que él mismo para buscar el emplazamiento de su estado, de modo que si por
cualquier motivo -acaso relacionado con el comportamiento de su padre- resuelve no plantear
la demanda, nadie más, aun teniendo interés económico o moral, está autorizado para
interponerla.
No contradice esta posición la facultad que el mismo artículo otorga a la madre para que
plantee la demanda en nombre del hijo durante la minoría de éste, pues entonces se presume o
se suple su voluntad ausente o incompleta, como ocurre en todos los casos en que por el
ejercicio de la patria potestad se representa al menor en los actos de la vida civil, 'en aplicación
del artículo 423 inc.Go.
9. HIJOS ALIMENTISTAS.
Los hijos alimentistas son aquellos hijos extramatrimoniales que no pueden reclamar la
declaración judicial de paternidad por no encontrarse dentro de los casos señalados en el
artículo 402 del C.C. Únicamente podrán reclamar de quien tuvo relaciones sexuales con la
madre durante la época de la concepción una pensión alimenticia que disfrutarán hasta que
alcancen la mayoría de edad.
Algunos autores los llaman hijos puramente alimentista. Son los hijos extramatrimoniales no
reconocidos voluntariamente por sus padres, ni judicialmente declarados como hijo de
determinado padre y/o madre.
Se trata, luego, de hijos legalmente sin padres, por tanto, no llevan sus apellidos, no
tienen amparo de la patria potestad, no poseen derechos sucesorios y, sin embargo, la ley no
desconoce su derecho a sobrevivir, razón por la cual les reconoce un derecho alimentario por el
estado de necesidad en que se hallan.
El maestro universitario Dr. Cornejo Chávez expresa que es el hijo extramatrimonial no
reconocido ni declarado por su padre, a quien debe pasar una pensión alimenticia hasta cierta
edad el varón que hubiera mantenido relaciones sexuales con la madre en la época de la
concepción. Entonces, no es como su nombre pareciera sugerirlo de que todo hijo tiene derecho
a alimentos, pues entonces todos los serían en tanto se hallen en estado de necesidad.
10. ACCIÓN ALIMENTARIA DEL HIJO EXTRAMATRIMONIAL.
Como ya se dijo anteriormente, el hijo extramatrimonial no tiene sino dos medios de lograr el
emplazamiento de su estado, el reconocimiento que voluntariamente practiquen su padre y/o
su madre; y la sentencia declaratoria de paternidad o de maternidad.
En consecuencia, el hijo que no ha sido reconocido voluntariamente ni judicialmente declarado
como tal, carece estrictamente de familia y no tiene por eso mismo, derecho alguno frente al
varón y la mujer que sean en la realidad, sus progenitores.
Empero hay una circunstancia de cuya gravedad no puede desentenderse el Derecho, y es el
estado de necesidad en que tal hijo se encuentre y que exige, por razones elementales, que
alguien lo satisfaga de esta consideración surge una vocación alimentaría de tal hijo, que si no
se basa como ocurre, por lo general, tratándose de otros alimentistas, en relación familiar
legalmente establecida, se funda en el derecho a la vida que tiene todo ser humano por el hecho
de serlo. Alguien ha de proveer, pues, a la subsistencia de ese hijo sin padres, de ese ser privado
de status-familiar y del amparo de la patria potestad; y ese alguien, allí donde es el Estado
mismo, por no permitirlo su organización socio-política o sus recursos, no puede ser otro que
aquél a quien, no con certeza y ni siquiera con vehemente verosimilitud o probabilidad, más si
con razonable posibilidad, puede reputarse como el progenitor.
El artículo 415 del C.C. determina que fuera de los casos expresados en el artículo 402, el hijo
sólo podrá reclamar una pensión alimenticia, hasta la edad de dieciocho años, del que hubiera
tenido relaciones sexuales con su madre durante la época de la concepción.
11. CARACTERES DE LA ACCIÓN ALIMENTARIA.
Se desprende del artículo 415, sobre este particular:
1. Consagra una presunción de paternidad sólo para efectos alimentarios, que puede ser
destruida por el presunto padre.
2. Sólo acuerda al hijo un derecho frente al alegado por el padre y no frente a la madre, por
tanto no puede hacerse valer contra los ascendientes ni descendientes en línea paterna.
3. Exige acreditar el hecho de la relación entre el demandado y la madre del actor en época
contemporánea de la concepción.
4. La sentencia que fija alimentos no constituye prueba de paternidad extramatrimonial el
titular de la acción, en aplicación del art. 417 corresponde al hijo alimentista no reconocido ni
declarado por su padre, por tanto, es una acción personal. No obstante ello, esta acción puede
ejercitarse por medio de un representante legal (madre) y se la dirige contra el presunto padre
o sus herederos.
Los herederos, sin embargo, no tienen que pagar al hijo más de los que habría recibido como
heredero si hubiese sido reconocido o judicialmente declarado.
12. PRUEBAS SOBRE LA CONDUCTA DE LA MADRE.
La presunción juris tantum mencionada puede ser destruida por el alegado padre si prueba que
durante la época de la concepción la madre tuvo:
1. Una vida notoriamente desarreglada o tuvo trato carnal con persona distinta del demandado.
2. O si durante la misma época "fue manifiestamente imposible al demandado tener acceso
carnal con la madre", sea porque estuvo privado de la libertad, por encontrarse de viaje,
enfermedad grave u otra causa semejante.
Sobre esta particular, conviene hacer notar que no es la madre quien debe probar que llevó una
vida pública, o que no tuvo trato carnal con el demandado, sino que es, justamente a éste a
quien corresponde acreditar alguna de dichas excepciones. Según esta norma, cuyo objeto es
favorecer al hijo, a éste le basta comprobar que su madre mantuvo relación sexual con el
demandado en la época de la concepción, y recae sobre el presunto padre el medio probatorio
de haber ocurrido alguno de los casos del artículo 403.
En otros términos, probada la relación sexual, se presume la. buena conducta de la madre; y es
al alegado padre a quien incumbe destruir esa presunción.
Asimismo, conviene recalcar que la conducta de la madre debe haber sido, no solo
desarreglada, sino notoriamente desarreglada, para enervar el derecho alimentario del hijo, de
análoga manera que la imposibilidad del demandado para tener acceso sexual con la madre
debe haber sido manifiesta.
De aquí se desprende que la conducta de la madre, aun siendo desarreglada, si no ha sido
notoriamente, no libera al demandado de la obligación alimentaría; y que la duda acerca de la
posibilidad o imposibilidad del acceso carnal tampoco basta para desechar la demanda de
alimentos. En suma, sólo una notoria deshonestidad de la madre o una indubitable
imposibilidad del acceso carnal pueden privar al hijo no reconocido por su padre del derecho
que le otorga el artículo 415, lo que, una vez más, pone en evidencia el propósito del legislador
de favorecer a dicho hijo, exonerándolo cíe una probanza severa y liberándolo, en lo posible, del
riesgo de quedar enteramente desamparado.
También es importante anotar que la deshonestidad de la madre no priva al hijo de lograr
alimentos de su presunto padre, sino solamente cuando tal deshonestidad coincide con la
época cío la concepción, es decir que se produce en los 121 primeros días cíe los 300 anteriores
al nacimiento. Esto significa que si la madre llevó una vida arreglada y no tuvo comercio carnal
con tercero en ese breve lapso de 121 días, su hijo puede demandar alimentos del presunto
padre, aunque antes y después del mencionado período la conducta de la madre hubiera sido
notoriamente deshonesta.
OTROOOO

Presentación
La filiación extramatrimonial es también conocida como filiación ilegitima: es decir, la
derivada de la unión no matrimonial. Esta se da tanto en los casos en que no hay imposibilidad
de matrimonio entre los padres como en aquellos en los que media algún impedimento, ya sea
por matrimonio subsistente de algunos de ellos, relación de parentesco. El articulo 6 in fine de
la constitución política del estado dice: "todo los hijos tienen iguales derechos y deberes. Esta
prohibido toda mención sobre el estado civil de los padres y sobre naturaleza de filiación en
los registros civiles y en cualquier otro documento. En concordancia con el art.10.de código
civil, preceptúa: la persona humana es sujeto de derecho desde su nacimiento. La vida humana
comienza con la concepción. El concebido es sujeto de derecho para todo cuanto le favorece.
Las atribuciones de derechos patrimoniales esta acondicionada a que nazca vivo" dice Dr.
Cornejo Chávez: sin desmedro de la enfática declaración contenida en estos artículos ("todos
los hijos tienen iguales derechos") tres atingencias resultan pertinentes a saber: Los modos en
que el hijo se emplaza en su status y los medios con los cuales acredita su filiación no son, ni
pueden ser iguales.
Como ya se a dicho, en tanto que el hijo matrimonial queda emplazado por la sola virtud del
casamiento de sus padres y la vigencia de la presunción is…. y lo acredita con al presentación
de los certificado de las partidas de matrimonio de aquellos y de su propio nacimiento, el
extramatrimonial solo se emplaza a través del reconocimiento voluntario que practiquen sus
padres (y la prueba de tal emplazamiento decide en el instrumento en que aparezca aquel
reconocimiento)o la sentencia declaratoria de paternidad o maternidad (diferencia esta a la que
puede añadirse la de que el hijo extramatrimonial puede emplazar mediante el reconocimiento
respecto de uno de sus padres y por medio de la sentencia respecto del otro);.
Las denominaciones del ilegitimo (que usaba el código anterior) y extramatrimonial (que
emplea el actual) no constituyen una nota tan banal como pudiera creerse, la primera califica;
la segunda solo describe.
En fin, pese ala declaración legal siempre abra un hijo que no tiene los mismos derechos que
los otros; es el que, consiste explicable equivocacidad, se llama "hijo alimentista", que no es un
hijo cierto como el matrimonial, ni probable como el extramatrimonial si no apenas posible o
verosímil, como se vera mas adelante. La declaración judicial de filiación extramatrimonial
es producto de la acción por la cual un individuo solicita mediante la vía judicial que se declare
hijo de quien aquél asegura es su padre. El artículo 402° del Código Civil establece los casos en
los que puede declararse la paternidad extramatrimonial: Cuando exista escrito indubitado del
padre que lo admita. V.gr.: La carta del padre al hijo o al tercero donde se señale en forma clara
y precisa la calidad de hijo y su identidad. Cuando el hijo se halle o se hubiere hallado, hasta un
año antes de la demanda, en la posesión constante del estado de hijo matrimonial.
Comprobado por actos directos del padre o de su familia. Es decir, dicha posesión representa
un reconocimiento, ya que el padre trata al hijo, dentro de la familia y fuera de ella, como hijo
suyo (lo cría, lo educa, lleva su apellido, etc.).Al haber vivido el presunto padre
en concubinato con la madre en la época de la concepción.
CAPÍTULO I

Filiación extramatrimonial
1. CONCEPTO.
La filiación extramatrimonial es también conocida como filiación ilegitima: es decir, la
derivada de la unión no matrimonial. Esta se da tanto en los casos en que no hay imposibilidad
de matrimonio entre los padres como en aquellos en los que media algún impedimento, ya sea
por matrimonio subsistente de algunos de ellos, relación de parentesco, etc. Así, por filiación
extramatrimonial debemos entender el vinculo que se establece entre padres e hijos cuando los
primeros no están unidos en matrimonio.
Los que dan origen ala filiación extramatrimonial o ilegitima son los hijos de la mujer soltera
provenientes de una relación fuera del matrimonio.
Para el tratadista Guillermo Borda, se refiere. Que son hijos extramatrimoniales los nacidos de
una unión libre de un hombre y una mujer. Por su parte, afirma Arturo Yungano, que todo hijo
nacido fuera del matrimonio sea cual fuere el estado civil de los padres, es considerado hijo
extramatrimonial.
De acuerdo dentro de los alcances del Art.: 386 que doce: "son hijos extramatrimoniales los
concebidos y nacidos fuera del matrimonio". No interesa que los padres sean solteros,
divorciados, viudos o uno de ellos este ligado aun matrimonio, etc.

EXTINCIÓN DEL DERECHO ALIMENTARIO.


El derecho alimentario del hijo extramatrimonial no reconocido ni declarado por su padre, se
extingue por las causales consagradas en el artículo 415 del C.C. siguientes:
1. Por llegar el alimentista a la edad de dieciocho años, salvo que el hijo no se encuentre en
condiciones de proveer a su subsistencia por incapacidad física o mental, en cuyo caso, la
pensión alimenticia continuará vigente mientras dure la incapacidad.
2. La obligación de prestar alimento se extingue por la muerte del obligado o del alimentista,
sin perjuicio de lo dispuesto en el art. 728:
"Si el testador estuviese obligado al pago de una pensión alimenticia conforme al artículo 415,
la porción disponible quedará gravada hasta donde fuera necesario para cumplirla".
3. Por muerte del alimentista, en cuyo caso, sus herederos están obligados a pagar los gastos de
los funerales (Art.486 in fine).
14. EFECTOS JURÍDICOS.
La condición de hijo alimentista tiene consecuencia jurídica en relación con los impedimentos
para contraer matrimonio. Precisamente el inciso primero del art. 242 expresa: el fallo que
condena al pago de alimentos en favor del hijo extramatrimonial no reconocido ni declarado
judicialmente, produce el impedimento matrimonial.
Sin duda, tiene su fundamento en la necesidad de prevenir matrimonios incestuosos aun
cuando parezca que el hijo no tiene progenitores, pero el hecho de que el presunto padre tuvo
relaciones sexuales con la madre en la época de la concepción, ya es un indicio para conjeturar
que es hijo suyo.
LA PRUEBA DEL ADN PARA DETERMINAR LA PATERNIDAD
Y LA FILIACIÓN
1. IMPORTANCIA DE LA GENÉTICA: ADN.
El ADN ha revolucionado las técnicas de la identificación por lo que se presenta como un
colaborador indispensable para el Derecho, pues es utilizado en la indagación
de problemas crimo-lógico como de Paternidad.
Hoy en día una de las ciencias que influye de manera determinante en el Derecho es la
ciencia médica. Así como la biología ha determinado el inicio de la vida humana, el momento
del nacimiento, el da la muerte de una persona y la investigación negativa de la paternidad. El
derecho a través de una coordinación ética-imperativa, regula la vida humana recurriendo al
auxilio de las demás ciencias, a fin de crear un marco eficiente de protección a la persona.
Analicemos previamente algunos conceptos con la finalidad de hallar la conexión del Derecho
con la Genética:
La Genética: es la ciencia encargada de estudiar la herencia biológica, es decir, la
transmisibilidad de los caracteres morfológicos y fisiológicos de generación en generación.
La Ingeniería Genética: es aquella ciencia que se dirige al estudio, trabajo y modificación
del material genético (ADN) en los organismos vivos. Su finalidad es mejorar las condiciones
de vida y las funciones biogenéticas del hombre.
En tal. sentido el Derecho Genético ha surgido como una rama especial que brinda una
protección y seguridad jurídica al ser humano y las relaciones sociales que se derivan de
aquellos avances de la ciencia genética.
El Derecho Genético está íntimamente vinculado con el Derecho Civil puesto que su aplicación
tiene como fin de la persona humana. De allí que el derecho de las personas (el inicio de la vida,
la teoría del concebido, la cesión de sustancia orgánicas ( ), el Derecho de Familia (La filiación y
el Derecho de Sucesiones (la transmisión hereditario del hijo póstumo en la inseminación post
morten) se halla influenciados por esta parte de la ciencia biológica. Producto de esta relación
ha surgido el llamado Derecho Genético Civil.
En este sentido el Derecho Genético a través de estudios genoma humano y específicamente del
ADN, regula la investigación biopositiva indispensable para el Derecho pues se ha utilizado en
la indagación de los problemas criminológicos como de paternidad.
2. EL ADN Y EL DERECHO.
Actualmente el ADN ha revolucionado las técnicas de identificación, por lo que se presenta
como un colaborador indispensable para el Derecho; pues se utiliza en la indagación como
hemos dicho anteriormente en los problemas criminológicos como de paternidad. Su
aplicación en el campo jurídico al comprobarse que la utilización práctica del ADN serviría
como medio de identificación personal y para determinar la paternidad con absoluta certeza.
De allí que sea importante para el Derecho y en el futuro de indispensable utilización su ámbito
de aplicación está dada esencialmente, en el campo penal y civil.
3. EN EL ÁMBITO CIVIL LA GENÉTICA.
Difícil es encontrar en el ámbito del Derecho Privado un problema que se presenta al
mismo tiempo tan complejo e importante como el de la investigación de la paternidad.
a) Filiación y paternidad: La filiación es el vínculo que une al hijo con sus progenitores, mutatis
mutandi. La filiación puede ser: 1) Filiación en el sentido Genético: Vincula do una persona con
todos sus ascendientes y descendientes. 2) Filiación en sentido estricto: Vincula a los hijos con
sus padres y establece una relación de sangre de derecho entre ambos.
Recordemos que la segunda fuente del Derecho de Familia es la procreación; es decir, que una
pareja por unión sexual, tenga hijo hecho que genera un vínculo biológico y un vínculo jurídico
entre los progenitores: padre y madre y el hijo de ambos. Desde el punto de vista jurídico, el
vínculo recibe el nombre de paternidad cuando es vista desde el lado de los padres.
La paternidad y filiación jurídica se basan en la filiación biológica, ya que de ella toman las
presunciones e indicios para establecer tal vínculo. Ahora bien, no siempre ambas filiaciones
coincide, pues biológicamente no puede haber hijos sin padre y madre;
en cambio jurídicamente si ya sea porque los padres se desconozcan, o bien porque no se
cubrieron las formalidades y los requisitos legales para que se establecieran la relación de
derecho.
4. LAS PRUEBAS BIOGENETICAS DE PATERNIDAD.
Las novedosas pruebas de paternidad se sustentan en el análisis de los marcadores genéticos
conformados por los cromosomas, el ADN y los genes que dirigirán la formación y ordenarán
las características, del futuro ser desde la fecundación.
El estudio de los materiales genéticos permite acreditar la relación bio-parental entre el
presunto padre y el hijo, según sea el caso con una certeza absoluta, desechando, así la prueba
hematológica o de los grupos sanguíneos autonómicos en aplicación del artículo 413
del Código Civil.
Al mismo tiempo descarta otras pruebas científicas tales como las de proteína séricas y las
del sistema de histocompatibilidad (HLA) todas ellas son efectivas, pero solo para determinar
una imposibilidad o descarte de la paternidad por hecho de existir una incompatibilidad en los
factores biológicos de los analizados, susceptibles de haberse transmitido por medio de
las leyes de la herencia.
Estas pruebas positivas de la paternidad son la cíe los polimorfismo, cromosómicos y el perfil
de ADN.
La primera se sustenta en un estudio de las características y conformación de algunos
cromosomas, los cuales se presentan regiones propias e individuales identificando la
transmisibilidad dominante del polimorfismo de padre a hijo.
La segunda se basa en la descomposición o hibrildización de la molécula de ADN para obtener
la huella genética o biodigial conformado por la información génica de las células germinales
de los progenitores al momento de la fecundación.
5. DETERMINACIÓN DE LA PATERNIDAD POR LAS IMPRESIONES DIGITALES
DEL ADN.
Es el estudio directo del ADN consondas moleculares producida por Ingeniería
Genética permite la determinación segura (exclusión o inclusión) de paternidad con absoluta
confiabilidad; cada ser humano es genéticamente diferente de todas las otras personas.
La tecnología de Impresiones Digitales del ADN, permite caracterizar directamente estas
diferencias genéticas, por el estudio de moléculas del ADN, que son constituyente químicos de
genes; en otras palabras, existe una complementariedad química entre dos cintas, lo que
permite el acercamiento perfecto y específico.
Estas secuencias repetitivas son llamadas mini-satélites; aparentemente no tiene
cualquier función.
Dice el Dr. Rodolfo Kádagand Lovatón, en su obra Las Pruebas Ilegales y No Legales en
Derecho Procesal Penal. Desde nuestro punto de vista e importancia es que cada persona o
número de estos minisatélites es diferente, o sea, ellos son hipervariables. La utilización de
sondas específicas de ADN, nos permite estudiar directamente el patrón de mini-satélites de
cada individuo, determinando así sus impresiones digitales del ADN.
Para el estudio de las impresiones digitales del ADN. Son necesarias muestras de ADN en todas
las personas envueltas; en la gran mayoría de los casos usamos el ADN, extraído de leucocitos
de sangro periférica, fácil de obtener. Entre tanto la prueba puede ser hecho en tejido que
contenga ADN, como por ejemplo: piel, raíz de pelo, semen, saliva, cartílagos, etc. (pgs. 211).
Para la determinación de la paternidad, son necesarias muestras de sangre de la madre, de la
criatura (hijo (a) y del padre putativo.
6. CASUÍSTICA DE PATERNIDAD ADN.
En el ámbito de las relaciones privadas la prueba de perfil de ADN permite la determinación
positiva de la paternidad, logrando coherencia legal entre la filiación social y la biológica. Un
caso importante fue suscitado en noviembre de 1991, cuando Edson Arantes de Nacimiento
(Pelé), se sometió por disposición de la 6ta. Sala Civil de Justicia de Santos (Sao Paulo), a los
exámenes de impresión genética, que determinara su nexo paternal con Sandra Regina
Machado (expreso 28/12/91).
Tal es el valor absoluto que ofrece la pauta genética del ADN que la negativa de parte de a su
sometimiento puede perfectamente crear una presunción o establecimiento directo de
paternidad. Situaciones judiciales al respecto existen. En marzo de 1990, El Cordobés fue
declarado padre de Manuel Benites Velasco por el Tribunal Constitucional Español ante la
negativa a someterse a las pruebas de paternidad; negativa que a criterio de la "Alta Corte"
constituye base suficiente para que el tribunal establezca el nexocausal preciso para llegar a la
conclusión de la paternidad reclamada. En Octubre de 1992 el cantante Julio Iglesias fue
declarado padre del menor Javier Sánchez, al haberse negado éste a la prueba de paternidad
dictaminada por el 13° Juzgado de Primera Instancia de Valencia (España); la negativa, a
criterio del juez fue "un indicio demostrativo relevante" de su paternidad.
Otro caso de utilidad se presenta en la maternidad dubitada ola sustitución de niños. Así,
vemos la controversia Twiggvs Mays (Florida) en la que se utilizó la/prueba del perfil genético
para determinar la identidad biológica de la niña Arlenc, demostrándose que era hija del
matrimonio Twigg y no Roberts Mays.
Además, esta prueba serviría en el derecho de familia en los casos que considera nuestro
Código Civil de impugnación filial (Art. 363 y 371), en la negación de reconocimiento (Art. 399
y 401), como dispensa al plazo de viudez (Art. 243 Inc. 3) y para probar el adulterio (Art. 333
Inc. 1), etc.
Por lo pronto, este avance biológico es, prima facie, inaplicable en nuestra realidad jurídica y
que si bien se permite la investigación biológica del nexo parental, solo se considera admisibles
las pruebas negativas.
Así, el artículo 413 limita in extremis la aplicación de las experticias here debiológicas positivas
de paternidad.
Por ello, y en tanto analicemos su aplicacación jurídica, estas técnicas deberán encontrar eco en
nuestros jueces, ya que ellos sólo les queda, a falta de marco jurídico adecuado, otorgarle la
validez jurídica, concederla la eficacia procesal y fijar los contextos en los que se pueden aplicar
estas pruebas.
Asimismo, los abogados no pueden esperar una modificación del Código Civil para solicitar su
aplicación, sino que deberán profundizar su estudio y lograr el convencimiento de los
magistrados para su aplicación.
De igual manera, las Cortes no tendrán que paralizar sus decisiones hasta la dacción de una
reglamentación de estas pruebas, sino que deberán interpretar la ley a través de
la jurisprudencia y llenar ese vacío legal que existe en nuestra legislación acerca de la
investigación biopositiva de la paternidad.
Este importante descubrimiento de la joven ciencia genética debe ser normado de inmediato
por una de las disciplinas más antiguas: el Derecho para que su aplicación práctica corrobore
resolviendo los controvertidos juicios de filiación. Contar con una pericia (entiéndase técnica)
de esta naturaleza permitirá determinar, fehacientemente, la paternidad y desechar, en cierta
manera, aquellas pruebas que hoy predominan en el área de la acreditación filial, que son
netamente subjetivas y que le restan sustento al hecho vivo de la investigación de la paternidad.
La misma que debe estar sustentada no sólo en criterios fáetico sino en elementos biológicos.
Una falta de normatividad sustantiva y adjetiva sobre el tema ocasionaría un uso inadecuado
de las mismas, es ante las pruebas genéticas deben servir para cautelar y mantener la armonía
familiar. Esto sería una alternativa eficaz como medio probatorio de la institución de la
paternidad responsable de manera tal que se evite, indirectamente, el trato sexual
indiscriminado y las relaciones furtivas de amor, que solo ocasionan problemas de índole filial.
En este sentido es lógico repensar el esquema de relación paterno filial que establece nuestro
Código Civil, sustentado en un régimen cerrado, donde la paternidad se determina socialmen-
te a través de presunciones de origen romano e hipótesis novelesca (artículos 361 y 402,
respectivamente). Con el avance de la ciencia estas deben recaer por su propio e irrelevante
peso.
La técnica del perfil de ADN como medio de la identificación es infalible ya que testifica un
hecho científico inconstravertibles.
Basado no en teorías ni en doctrina sino en las leyes de la naturaleza. En tal sentido el Derecho
debe dotarle de un marco jurídico adecuado para su correcta aplicación, con ello la hoy dudosa
relación paterno filial y la individualización de la víctima y del criminal será posible llevarla al
campo de la confirmación científica, mediante esta experiencia basada en principios aceptados
y confirmados por al ciencia biomética.
Nota: Obra DERECHO GENÉTICO Principios Generales, autor Dr. Enrique Varsi Rospigliosi
me he permitido extraer este capítulo. La Identificación Genética, porque lo creo muy
interesante para el estudiante de Derecho, en el curso de Familia, lo mismo que para el
Abogado, dado que no se encuentra bibliografía sobre este campo del Derecho Genético que es
muy importante.
ARTÍCULOS PERTINENTES A FILIACIÓN EXTRAMATRIMONIAL EN EL CÓDIGO
CIVIL
Art. 4O2 Declaración judicial de paternidad extramatrimonial.
La paternidad extramatrimonial puede ser judicialmente declarada:
1. Cuando exista escrito indubitado del padre que la admite.
2. Cuando el hijo se halle, o se hubiese hallado hasta un año antes de la demanda, en la
posesión constante del estado de hijo extramatrimonial, comprobado por actos directos del
padre o de su familia.
3. Cuando el presunto padre hubiera vivido en concubinato con la madre en la época de la
concepción. Para este efecto se considera que hay concubinato cuando un varón y una mujer,
sin estar casados entre sí, hacen vida de tales.
4. En los casos de violación, rapto o retención violenta de la mujer, cuando la época
del delito coincida con la de la concepción.
5. En caso de seducción cumplida con promesa de matrimonio en época contemporánea con la
concepción, siempre que la promesa conste de manera indubitable.
Concordancias:
Código Civil:
Art. 141 (Manifestación de voluntad expresa o tácita del acto jurídico); Art.239 (Promesa
recíproca de matrimonio); Art.326 (Uniones de hecho); Art.361 (Presunción de paternidad);
Art.396 (Reconocimiento del hijo extramatrimonial de mujer casada); Art. 403 (Improcedencia
de la acción Judicial de filiación extramatrimonial); Art.404 (Declaración judicial de
paternidad de hijo de madre casada); Art.405 (Procedencia de la acción judicial de filiación
extramatrimonial antes del nacimiento); Art.406 (Demandados en la acción de declaración de
paternidad); Art.407 (Titulares de la acción judicial de filiación extramatrimonial); Art.414 (En
caso del art.402, la madre tiene derechos a alimento c indemnización por daño moral); Art.421
(Patria potestad de los hijos extra-mal rimoniales); Art.647 (Atribuciones del consejo de
familia).
Código Procesal Civil:
Art.229 (Prohibidos para ser testigo); Art.831 (Admisibilidad para el inicio
del proceso sucesorio, en caso de sucesión intestada).
Art. 4O3 Improcedencia de la acción por conducta de la mujer.
La acción, en el caso del artículo 402, inciso 3, es improcedente si durante la época de la
concepción la madre llevó una vida notoriamente desarreglada o tuvo trato carnal con persona
distinta del presunto padre o si en la misma época fue manifiestamente imposible al
demandado tener acceso carnal con la madre.
Concordancia: Código Civil:
Art.326 (Uniones de hecho); Art.363.4 (El marido que no se crea padre del hijo de su mujer,
puede negarlo, cuando adolezca de impotencia absoluta).
404° Declaración judicial de paternidad de hijo de madre casada.
Si la madre estaba casada en la época de la concepción, sólo puede admitirse la acción en caso
que el marido hubiera contestado su paternidad y obtenido sentencia favorable.
Concordancias: Código civil:
Art.361 (Presunción de paternidad); Art.363 y ss (Contestación de la paternidad); Art.396
(Reconocimiento del hijo extramatrimo-nial de mujer casada).
405° Acción de paternidad antes del nacimiento.
La acción puede ejercitarse antes del nacimiento del hijo. Concordancias: Código Civil:
Art. 1 (El concebido es sujeto de derecho para todo cuanto le favorece).
4O6° Demandados. En la acción de declaración de paternidad.
La acción se interpone contra el padre o contra sus herederos si hubiese muerto.
407° Titulares de la acción de declaración de paternidad.
La acción corresponde sólo al hijo. Empero, la madre, aunque sea menor de edad, puede
ejercerla en nombre del hijo, .durante la minoría de éste. El tutor y el curador, en su caso,
requieren autorización del consejo de familia.
La acción no pasa a los herederos del hijo. Sin embargo, sus descendientes pueden continuar el
juicio que dejó iniciado.
Concordancias:
Código Civil:
Art.421 (Patria potestad de los hijos extramatrimoniales).
4O8° Juez competente.
La acción puede ejercitarse ante el Juez del domicilio del demandado o del demandante.
409° Declaración judicial de maternidad extramatrimonial.
La maternidad extramatrimonial también puede ser declarada judicialmente cuando se pruebe
el hecho del parto y la identidad del hijo.
Concordancias:
Código Civil:
Art.2 (Reconocimiento judicial de embarazo o parto).
Art. 410° Carácter extinguible de la acción.
No caduca la acción para que se declare la filiación extramatrimonial.
411° Disposiciones aplicables a la maternidad extramatrimo-nial.
Son aplicables a la madre y sus herederos las disposiciones de los artículos 406 al 408.
412° Efectos de la sentencia de filiación extramatrimonial.
La sentencia que declara la paternidad o la maternidad extramatrimonial produce los mismos
efectos que el reconocimiento. En ningún caso confiere al padre o a la madre derecho
alimentario ni sucesorio.
413° Admisibilidad de la prueba de grupo sanguíneo.
En los juicios sobre declaración de paternidad o maternidad extramatrimonial es admisible la
prueba negativa de los grupos sanguíneos u otras de validez científica.
También es admisible la prueba de los grupos sanguíneos a petición de la parte demandante en
el caso del artículo 402, inciso 4, cuando fueren varios los autores del delito. La paternidad de
uno de los demandados será declarada sólo si dicha prueba descarta la posibilidad de que
corresponda a los demás autores. Si uno de los demandados se niega a someterse a la prueba,
será declarada su paternidad, si el examen descarta a los demás. La obligación alimentaría es
solidaria respecto de quienes nieguen a someterse a la prueba.
Concordancias
Código Civil:
Art. 402.4 (Declaración judicial de paternidad en los casos de violación, rapto o retención
violenta de la mujer)
Código Procesal Civil:
Art. 262 (Procedencia de la pericia cuando la apreciación de los hechos controvertidos requiere
de conocimientos especiales de naturaleza científica, tecnológica, etc.).
Art. 414° Derechos de la madre a alimentos e indemnización por daño moral.
En los casos del artículo 402, así como cuando el padre ha reconocido al hijo, la madre tiene
derecho a alimentos durante los sesenta días anteriores y los sesenta posteriores al parto, así
como al pago de los gastos ocasionados por éste y por el embarazo. También tiene derecho a ser
indemnizada por el daño moral en los casos de abuso de autoridad o de promesa de
matrimonio, si esta última consta de modo indubitable, de cohabitación delictuosa o de
minoridad al tiempo de la concepción.
Estas acciones son personales; deben ser interpuestas antes del nacimiento del hijo o dentro
del año siguiente; se dirigen contra el padre o sus herederos y pueden ejercitarse ante el Juez
del domicilio del demandado o del demandante.
Concordancias: Código Civil:
Art.472 (Definición de alimentos); Art. 1984 (El daño moral es indemnizado).
MODELO Nº 36
DEMANDA DE RECONOCIMIENTO Y FILIACIÓN
Secretario :
Expediente Nº :
Escrito Nº : 01
Cuaderno Principal
Sumilla :
AL JUZGADO DE LA FAMILIA DE LIMA:
TERESA VALDERRAMA CHAVEZ, con L.E. Nº 09743278, con domicilio real en Jr. Las
Castañas Nº 987, señalando domicilio procesal en la Casilla Nº 1567, del Departamento de
Notificaciones Judiciales del CAL. (4to. piso, Palacio de Justicia); a Ud. digo:
PETITORIO:
Que, interpongo demanda de RECONOCIMIENTO Y FILIACIÓN, dirigida contra los
integrantes de:
1. LA SUCESIÓN JOSÉ REQUENA HERRERA: Elena del Mar (cónyuge), domiciliada en Av.
Sevilla Nº 256; José Requena del Mar (hijo), domiciliado en Jr. Carabaya Nº 1321, Lima; Robín
Requena del Mar (hijo), domiciliado en Av. Sucre Nº 980, Pueblo Libre; Carmela Requena del
Mar (hija), domiciliada en Av. Faucett Nº 1298.
2. LA SUCESIÓN RAFAEL DEL CASTILLO DELGADO.
FUNDAMENTOS DE HECHO Y DE DERECHO:
1. Que, la recurrente nació en el Hospital
Maternidad de Lima, con fecha 21 de setiembre de 1941, producto de las relaciones
extramatrimoniales que mantuvieran mis padres biológicos don Hugo Valderrama Soplín y
doña Fausti-na Chávez Urrutia, según aparece en la constancia de nacimiento Nº 1847,
expedida por dicho Hospital.
2. Que, con fecha 08 de diciembre de 1941,
mis padres biológicos procedieron a bautizarme en la Parroquia de Santiago AP del Cercado,
siendo mis padrinos mis abuelos por la línea paterna don Gastón Valderrama Reyes y doña
Eufemia Soplín Tarazona.
3. Que, por prejuicios familiares y sociales propios de la época, por ser hija extramatrimonial de
una pareja tan joven, mis abuelos paternos optaron por presentarme como su hija, y me criaron
como tal.
4. Que, pese a lo referido desde muy pequeña tuve conocimiento de la identidad de mis padres
biológicos, máxime si vivía con mi padre biológico en la misma casa y mi madre biológica
siempre me visitaba y me trataba con mucho cariño y dedicación. Que en el año de 1961, mi
abuela paterna, para sanear lo expuesto en el punto 3 del presente, inicia ante el Juzgado Civil
de Chiclayo, un proceso de inscripción judicial de nacimiento, dictándose con fecha 23 de
agosto de 1961, la sentencia que ordena la inscripción ante el Concejo Provincial de Chiclayo,
pese a que la recurrente nació en la ciudad de Lima.
5. Que, con fecha 27 de febrero de 1964, la recurrente a insistencia de mi abuela paterna,
solicito la rectificación de mi partida de bautismo ante el Provisor Eclesiástico de la Parroquia
de Santiago AP del Cercado de Lima, en lo referido al nombre de la madre, aduciendo que se ha
cometido un error al invertir el nombre de la madre por el de la madrina, no siendo necesario
solicitar la del padre, por cuanto mi padre biológico y mi abuelo paterno tenían el mismo
nombre y apellidos.
6. Que, mi padre biológico Hugo Valderrama Soplín, contrajo nupcias con doña Esperanza
Flores Teco, con quien se casó, procreando Pedro, Esther y Tito Valderrama Flores.
Posteriormente, contrae segundas nupcias con doña María Galarza Pinto, quien conjuntamente
con los hijos del causante, son declarados herederos por el Octavo Juzgado Civil de Lima,
inscrita la sucesión en la Ficha Nº 15860 del Registro de Declaratoria de Herederos de
los Registros Públicos de Lima.
7. Que, mi madre biológica doña Faustina Chávez Urrutia contrajo nupcias con don Tulio
Puquio Tiziano, quien luego fallece el 01 de junio de 1993, siendo declarada como su única
heredera mi madre biológica, al no existir descendientes del causante, inscrita la sucesión en la
Ficha Nº 74556 del Registro de Declaratoria de Herederos de los Registros Públicos de Lima.
8. Que, con fecha 14 de setiembre de 1993, posterior a una penosa enfermedad, en la cual la
recurrente la atendió y cuidó, fallece mi madre biológica, sin regularizar el reconocimiento y
filiación, pese a su intención de efectuarlo.
9. Que, del origen e identidad de mis verdaderos padres fue de amplio conocimiento tanto
familiar como de algunos amigos muy cercanos a mis padres biológicos tales como Fermín
Torres Sifuen-tes y Alfredo Eguren Fuentes, quienes fueron amigos muy cercanos a mi madre
biológica.
FUNDAMENTO JURÍDICO
Amparo la presente demanda en lo dispuesto por los artículos 386, 406, 407, 408, 410, 411 y
demás concordantes del Código Civil sobre declaración judicial de filiación extramatrimonial.
VÍA PROCEDÍ MENTAL
La presente acción deberá de tramitarse como Proceso de Conocimiento.
MEDIOS PROBATORIOS
1. El mérito de la constancia de nacimiento Nº 1847, expedida por el Instituto Nacional
Materno Infantil -Maternidad de Lima. (Anexo 1-A).
2. El mérito de la partida de nacimiento e inscripción judicial de la recurrente (Anexo 1-B).
3. El mérito de la constancia de bautismo Nº 1834934 de la recurrente: expedida por el
Arzobispado de Lima (Anexo 1-C).
4. El mérito de la Ficha Nº 15860 sobre Declaratoria de Herederos de mi padre biológico
(Anexo 1 -d)
5. El mérito del parte relativo a la declaratoria de herederos del cónyuge de mi madre biológica
(Anexo 1-e)
6. Las declaraciones testimoniales que deberán prestar:
6.1. Hugo Torres Esparza, su casa, domiciliado en Av. La Viña Nº 457, San Luís.
6.2. Mario Ticona Huamán, profesor, domiciliado en Av. El Sol Nº 3745.
Quienes declararán según pliegos interrogatorios (Anexos 1 -F y 1-G) sobre los fundamentos de
hecho expuestos en el punto 10 de la presente demanda.
7. Comprobante de pago de la tasa judicial (anexo 1-H)
8. Copia de libreta electoral de la recurrente (anexo 1-1)
Por tanto:
A Ud. pido admitir la presente solicitud, tramitarla de acuerdo a su naturaleza y declararla
fundada oportunamente.
OTRO SI DIGO.- Que, siendo los integrantes de la Sucesión José Requena Herrera
indeterminados o Inciertos, en aplicación de lo dispuesto por el artículo 435 del Código
Procesal Civil, concordante con lo dispuesto por el artículo 65 del mismo cuerpo de leyes,
solicito se notifique a los mismos por edictos.
Lima, 21 de julio de 1997.
MODELO Nº 37
DEMANDA NULIDAD DE RECONOCIMIENTO
Secretario :
Expediente Nº :
Escrito Nº : 01
Cuaderno Principal
Sumilla :
SEÑOR JUEZ ESPECIALIZADO EN LO CIVIL DE LIMA:
Benjamín Lara Torres, identificado con L.E. Nº 08542367, con dirección domiciliaria en la
calle Grau Nº 398 y con domicilio procesal en Av. Arequipa Nº 7564, a usted respetuosamente
digo:
I. PETITORIO:
Que interpongo demanda de Nulidad de Reconocimiento de Paternidad, a fin de que se declare
nulo el reconocimiento que he efectuado el 20 de noviembre de 1995, por ante la Municipalidad
Distrital de Barranco, en el acta de nacimiento de Rafael Lara Mesía; así como también se
declare nulo el reconocimiento que efectué en la misma fecha en la Declaración de Registro que
contiene el Certificado de Nacimiento, la presente demanda la dirijo contra Beatriz Mesía
Múñante y a su menor hijo Rafael Lara Mesía, quien estará representado por su mencionada
madre, ambos con domicilio común en la calle Cuernavaca Nº 746; por los siguientes
fundamentos:
II. FUNDAMENTOS DE HECHO:
1. La demandada Beatriz Mesía Múñante, me ha inducido a error y bajo intimidación me ha
obligado a suscribir el reconocimiento del menor Rafael Lara Mesía el día 20 de noviembre de
1995, en el acta de nacimiento del mencionado menor, ante la Municipalidad de Barranco y en
el certificado de nacimiento expedido por el Hospital "Dos de Mayo", documento que se
encuentra suscrito por el médico Pedro Buendía Ruiz, quien aprovechó mi situación de
alcohólico y ebrio habitual; es así que. el día 20 de noviembre de 1995, la demandada
conociendo mi aflicción patológica a las bebidas alcohólicas, me invitó a libar licor, donde logró
doblegar mi voluntad cuando me encontraba en pleno estado de ebriedad. Es así que, con
angustia fingida me reveló que su hijo recientemente alumbrado no sería reconocido por su
progenitor, quien se negaba a cumplir con su obligada paternidad, persuadiéndome a que por
un acto de humanidad y altruismo asumiera el reconocimiento del mencionado menor, a fin de
que el pequeño indefenso no quedara sin apellido paterno; llegando la demandada, en un
momento de desesperación y prepotencia, a intimidarme, amenazándome con hacer daño a mi
familia en caso me negara al requerimiento, ante éste fundado temor mi voluntad me doblegó y
suscribí los documentos en antes acotados, situación en que no me encontraba en capacidad de
discernir.
2. Soy casado con la señora Petronila Hernández Calle, con quien he procreado un hijo llamado
Roberto, quien actualmente tiene 7 años de edad; en favor de quien me he visto obligado a
solicitar garantías ante la Prefectura de Lima contra la demandada, la cual acredito con la copia
de la correspondiente solicitud.
3. Durante la etapa de concepción del referido menor no he mantenido relaciones sexuales con
la demandada, pero sí me consta que la misma salía en forma frecuente con personas
de sexo masculino, con quienes mantenía relaciones sentimentales, como quedará
fehacientemente probado en el transcurso del proceso; es menester indicar que, con la
demandada recién nos conocemos a partir del mes de junio de 1995, o sea en plena etapa de
gestación de la demandada.
4. En tal sentido, no soy padre del referido menor que la demandada ha dado a luz, hecho que
quedará acreditado con la prueba del Acido Desoxirribonucleico (ADN) del citado menor, de la
demandada y del recurrente, con la finalidad de determinar la paternidad de Rafael Lara
Mesía.
III. FUNDAMENTOS DE DERECHO:
1. El reconocimiento practicado en la referida partida de nacimiento de Rafael Lara Mesía y en
el Certificado de Nacimiento vivo, constituye un acto nulo y anulable por haber sido practicado
por persona que sufría incapacidad relativa en el momento del acto, ya que en dichas
circunstancias me encontraba en estado de ebriedad y además sujeto a violencia e intimidación
de parte de la demandada, como quedará probada en la secuela del proceso que ocasione ésta
acción, pretensión que ampara los incisos 1°, 2° y 3° del artículo 221 del Código Civil e inciso 6°
del articulo 44 del mismo cuerpo de leyes.
2. No existe vínculo consanguíneo entre el demandado Rafael Lara Mesía y mi persona,
circunstancia que exige el artículo 236 del Código Civil, para establecer un parentesco
consanguíneo de relación familiar con el citado demandado, por consiguiente no existe
parentesco consanguíneo con el mismo.
3. El artículo 28 del Código Civil, que establece que nadie puede usar un nombre que no le
corresponde.
IV. VÍA PROCEDIMENTAL:
La presente acción se tramitará mediante el Proceso de Conocimiento de acuerdo al artículo
475 del Código Procesal Civil.
V. MEDIOS PROBATORIOS:
1. El mérito de la copia del acta de nacimiento del menor Rafael Lara Mesía.
2. El mérito de la copia del certificado de nacimiento del menor Rafael Lara Mesía.
3. La declaración de parte de Beatriz Mesía Múñante, de acuerdo al pliego interrogatorio que
adjunto, bajo apercibimiento de ley.
4. La declaración testimonial del Sr. Tomiteo Vera Juscama-yta, de ocupación carpintero, con
domicilio en calle El Yunque N"
786, conforme al pliego interrogatorio que en sobre cerrado adjunto, quien declarará sobre la
condición que tuvo el accionante al momento de suscribir los documentos por el que reconocí
al mencionado menor y que fui intimidado por la demandada para acatar ésta determinación
contra mi voluntad.
5. Estudio del ácido desoxirribonucleico (ADN) de Rafael Lara Mesía, Beatriz Mesía Múñante y
del recurrente Benjamín Lara Torres, para determinar la paternidad y filiación de Rafael Lara
Mesía, para lo cual se servirá designar los peritos médicos a fin de que tome las muestras de
sangre correspondientes. Los demandados deben ser requeridos a someterse a ésta prueba,
bajo apercibimiento de tenerse por cierta la afirmación del demandante, en el sentido de no ser
padre del menor Rafael Lara Mesía, en aplicación del artículo 413 del Código Civil.
6. La pericia grafotécnica que deberá practicarse sobre las firmas que mi persona ha suscrito en
el acta y en el certificado de nacimiento del menor Rafael Lara Mesía, con la finalidad de
acreditar que dichos documentos fueron suscritos en circunstancias en que me encontraba en
estado etílico, para lo cual se servirá designar los peritos correspondientes.
7. El mérito de la solicitud de garantías que efectué en favor de mi persona y mi familia a la
Prefectura de Lima, contra la demandada Beatriz Mesía Múñante.
8. El mérito del certificado médico, donde se establece mi condición de alcohólico,
debidamente suscrito por el Dr. Hermóge-nes Campos Boza.
9. El reconocimiento en su contenido y firma que deberá practicar el Dr. Hermógenes Campos
Boza del documento consistente en el certificado médico; para lo cual deberá notificarse en la
Av. El Centro Nº 856.
10. El mérito de la certificación policial, extendido por el Jefe de de la Delegación Policial de
Barranco.
11. El mérito de las reproducciones de audio, en la que se acredita las amenazas que efectúa la
demandada Beatriz Mesia Múñante en contra de mi familia.
12. El mérito de artículos periodísticos y revistas, sobre la validez científica del estudio del
ácido desoxirribonucleico en la determinación de la paternidad de las personas.
VI. ANEXOS:
1 a. Copia del acta de nacimiento de Rafael Lara Mesía.
1 b Copia del certificado de nacimiento de Rafael Lara Mesía.
1 c. Copia de la solicitud de garantías.
1 d. Copia de certificación policial.
1 e. Copia de publicación periodística.
1 f. Copia de certificado médico.
1 g. Copia de mi libreta electoral.
1 h. Sobre cerrado que contiene el pliego interrogatorio para la declaración de parte de la
demandada.
1 i. Sobre cerrado para la declaración testimonial.
Por tanto:
A usted pido admitir la presente para que en su oportunidad la declare fundada.
Lima, 20 de julio de 1997.

Conclusión
Son hijos extramatrimoniales los concebidos y nacidos fuera del matrimonio. Los únicos
medios de prueba de la filiación extramatrimonial son el reconocimiento y la sentencia
declaratoria de paternidad o maternidad.
El reconocimiento es el acto jurídico unilateral voluntario que expresa una declaración formal
de paternidad o maternidad realizada por el padre o la madre que recae sobre una persona
determinada. Es además un acto declarativo, solemne, irrevocable y que no admite modalidad.
El artículo 390° del Código Civil establece que el reconocimiento debe constar en:
El registro de nacimientos. No es indispensable la participación de testigos, debe realizarse
en el mismo registro en que se inscribiera el nacimiento del hijo que es reconocido.
Escritura pública. Se realiza la declaración ante Notario Público, quien da fe plena de la
misma.
Testamento. Se realiza con el fin de no dejar desamparado por causa de muerte al hijo que se
reconoce. El reconocimiento de un hijo extramatrimonial es irrevocable. En caso de que se
revoque el testamento, esta declaración permanece inalterable, salvo si el testamento se
hubiera otorgado con un vicio de la voluntad. V.gr.: Si fue víctima de coacción, podrá revocar
todas sus disposiciones, incluida la del reconocimiento del hijo, una vez recuperada a plenitud
su capacidad de testar.
Las personas que pueden reconocer al hijo son:
 1 El padre o la madre, en forma separada o conjunta.
 2 Los abuelos o abuelas de la respectiva línea, en el caso de fallecimiento del padre o de
la madre.
 3 Los menores de edad que hayan cumplido los 16 años.
La impugnación del reconocimiento de un hijo extramatrimonial puede ser realizada por el hijo
menor de edad o por el incapaz dentro del año siguiente a su mayoría o al cese de la
incapacidad, respectivamente.
La declaración judicial de filiación extramatrimonial es producto de la acción por la cual un
individuo solicita mediante la vía judicial que se declare hijo de quien aquél asegura es su
padre. El artículo 402° del Código Civil establece los casos en los que puede declararse la
paternidad extramatrimonial:
 1 Cuando exista escrito indubitado del padre que lo admita. V.gr.: La carta del padre al
hijo o al tercero donde se señale en forma clara y precisa la calidad de hijo y su identidad.
 2 Cuando el hijo se halle o se hubiere hallado, hasta un año antes de la demanda, en la
posesión constante del estado de hijo matrimonial. Comprobado por actos directos del
padre o de su familia. Es decir, dicha posesión representa un reconocimiento, ya que el
padre trata al hijo, dentro de la familia y fuera de ella, como hijo suyo (lo cría, lo educa, lleva
su apellido, etc.).
 3 Al haber vivido el presunto padre en concubinato con la madre en la época de la
concepción.
 4 Cuando haya violación, rapto o retención violenta de la mujer, coincidiendo la época
del delito con la de la concepción. Debe haber una sentencia condenatoria definitiva; no
basta que se haya iniciado proceso penal por tales delitos.
 5 En caso de seducción o mediando promesa de matrimonio en época contemporánea
con la concepción, siempre que la promesa matrimonial conste de manera indubitable.
 6 Cuando se acredite el vínculo parental entre el presunto padre y el hijo a través de la
prueba de ADN u otras pruebas genéticas o científicas con igual o mayor grado de certeza.
Ante la negativa de someterse a alguna de las pruebas, luego de haber sido debidamente
notificada por segunda vez bajo apercibimiento, el juez evaluará tal negativa, las pruebas
presentadas y la conducta procesal del demandado y declarará la paternidad o al hijo como
alimentista.
El juez desestimará las presunciones de los casos precedentes cuando se hubiera realizado una
prueba genética u otra de validez científica con igual o mayor grado de certeza.
El titular de la acción de declaración judicial de paternidad es el hijo, y la madre puede
ejercerla en nombre del hijo, aunque ella sea menor de edad. El tutor y curador también
pueden iniciar la acción siempre que cuente con la autorización del Consejo de Familia. La
acción judicial de paternidad no caduca.

OTROOOO

Filiación por Reconocimiento Voluntario


La filiación por reconocimiento voluntario se da cuando el padre o madre reconocen
voluntariamente a sus hijos/as, esta clase de filiación es la más común y general en nuestro
país. A pesar de esto se dan muchos casos en que los padres presentan acciones para impugnar
dicho reconocimiento. En esta entrada explicaremos de manera general la filiación por
reconocimiento voluntario su concepto, características, clases e impugnación. 

Concepto:
Según Roberto Suarez Franco, el reconocimiento voluntario “es la manifestación de la voluntad
encaminada a considerar al reconocido como hijo y de ocupar, respecto de él, la posición
jurídica de padre natural”.
Para Melba Arias Londoño, ´´el reconocimiento voluntario es la confesión espontanea, sin
fuerza ni error, hecha por el padre, en un acto declarativo, por medio del cual el hijo adquiere
la calidad de extra-matrimonial a partir del momento de la concepción´´.
En nuestra legislación el Código de la Familia en el artículo 254 nos lo define de la siguiente
forma: el reconocimiento voluntario de la paternidad es el que realiza el propio padre del hijo o
hija. Para nosotras el reconocimiento voluntario, es una manifestación de voluntad expresa del
padre o la madre, para reconocer como suyo, al hijo o hija, sin que influyan en esa decisión
vicios.
Existen ciertos elementos que son necesarios para que el reconocimiento voluntario tenga
efectos jurídicos, los cuales son:
 Declaración por parte del progenitor: la voluntad debe de ser expresa, consciente y
libre. Exenta de vicios
 La persona debe tener capacidad legal para contraer obligaciones.
 Debe tratarse de una real paternidad.

Características:
Acto Personal: es un acto personalísimo, de manera que quienes pueden ejercitarlo son el
padre y la madre o ambos conjuntamente. Puesto que son los propios sujetos que intervienen
en la procreación quienes deben efectuar los actos conducentes a la inscripción del mismo.  

Acto Voluntario: es un acto jurídicamente espontáneo y libre, por lo que no debe mediar
coacción alguna. El reconocimiento es un acto jurídico eminentemente voluntario que se
caracteriza por la conducta positiva  y favorable del progenitor.

Acto Unilateral: se fundamenta en el hecho de quien ejercita dicha acción es el padre, esto es el
sujeto activo de la misma y no requiere de la aceptación del hijo reconocido, salvo el caso del
hijo mayor de edad.
Acto Expreso: exige que el mismo deba emitirse a través de una manifestación de voluntad lo
suficientemente explícita por parte del progenitor, acerca de su deseo de reconocer su hijo o
hija, de manera que no exista cabida a la duda respecto a su paternidad.

Acto Solemne: exige la existencia de un procedimiento sujeto al cumplimiento necesario de


ciertas formalidades legales dependiendo del mecanismo que se utilice para efectuarlo; ello se
funda en el hecho que debe existir garantías necesarias que revistan a dicho acto, de la seriedad
y autenticidad debida.

Acto Irrevocable: se fundamenta en la naturaleza declarativa del reconocimiento y una razón


moral y de seguridad jurídica, que hace preciso dar estabilidad del estado de las personas, de
manera que su perfeccionamiento hace tránsito a cosa juzgada. 

¿Cómo se puede dar el reconocimiento voluntario?


Según el artículo 255 del Código de Familia esto se puede dar de las siguientes maneras:
  En el acta de nacimiento: es el acta mediante la cual se inscribe el nacimiento de un ser
humano, en la cual hace fe del referido acto  a su vez es productor de efectos jurídicos en donde
se acredita a una mujer, madre de este y a un hombre, padre del mismo. Por lo tanto, el acta de
nacimiento contempla la declaración expresa del progenitor de que aquel es hijo suyo,
surgiendo en consecuencia efectos jurídicos.
 El artículo 256 dispone que sea necesario que concurran los siguientes requisitos:
 Que el acta sea firmada por el padre.
 Que se realice en presencia de dos testigos hábiles, que estos tengan capacidad legal.
 Que la misma sea inscrita en el Registro Civil.

 En el Registro Civil: para que se pueda dar de este modo es necesario que se cumpla con lo
siguiente:
 Que se trate de un menor de edad.
 Que su nacimiento ya se encuentre inscrito en el Registro Civil.
Además el padre que vaya a reconocer a su hijo debe presentar una solicitud por escrito a la
Dirección General o a la Dirección Provincial del Registro Civil y debe tener el consentimiento
de la madre o del representante legal del menor.
En el Acta de Matrimonio: en este caso la ley faculta al padre que reconozca al hijo o hijos
habidos con la mujer con quién está contrayendo matrimonio. La exteriorización de voluntad
se deja constancia en la respectiva acta.
Lo interesante de este modo es que aunque el acto de matrimonio sea declarado nulo, el
reconocimiento perdurará aunque el acto sea revocado.

Ante el Juez Competente: este modo se da solo cuando los hijos que se van a reconocer son
mayores de edad y la paternidad no se haya consignado en la declaración de nacimiento. Los
juzgados seccionales de familia son los competentes para conocer de este asunto; el padre debe
presentar una solicitud ante el juez donde expresa su manifestación de reconocer a su hijo/a la
cual debe estar acompañada del acta de nacimiento y el consentimiento expreso del hijo/a.

En Testamento: se da mediante la manifestación del testador donde expresa su voluntad de


reconocer a su hijo/a indistintamente si es menor o mayor de edad; aunque se declare nulo o
revoque el testamento esto no afectará el reconocimiento del hijo/a al igual que pasa con el acta
de matrimonio cuando se declare nulo.
Para la inscripción en el Registro Civil según el artículo 260, son los siguientes:
 La presentación del acto testamentario.
 El consentimiento del hijo/a si es mayor de edad, o el de su representante legal si es
menor de edad. 

¿Cómo y cuándo se puede impugnar?


Los autores Gustavo Bossert y Eduardo Zannoni nos señalan que “se puede decir que la acción
de impugnación el reconocimiento, diciendo que es la acción de estado de desplazamiento por
la cual se niega que el reconociente sea el padre o la madre del reconocido y que, de prosperar,
deja sin efecto el título de estado que, mediante el reconocimiento se obtuvo, o en su caso,
impide su inscripción en el Registro del Estado Civil”.
Esta acción se regula en el Código de Familia de los artículos 281 al 285.

Los sujetos titulares de esta acción son los siguientes:


 Hijo/a presunto/a.
 La madre o padre supuesto.
 El verdadero padre o quien se encuentre afectado por el acto de simulación de
paternidad.
 Los herederos de aquel o de estos.
Esta acción prescribe según el artículo 282 del Código de Familia en el plazo de un año contado
a partir de los siguientes momentos:
 Desde la inscripción del acta de nacimiento en el Registro Civil.
 Si estuviera fuera del país, se cuenta desde el momento de su regreso al territorio
nacional.
 Si mediare vicio de consentimiento desde el momento en que cesó dicho vicio.

Además, la ley faculta a que los herederos continúen con el proceso en caso de muertes antes
del año de prescripción.
Ahora bien si se reconoce al hijo(a) mediante testamento y haya mediado error, vicio o
intimidación y el señor fallece, los herederos tienen la facultad de interponer la acción de
impugnación de la paternidad la cual prescribirá al año de efectuado el reconocimiento o desde
que cesó el vicio del consentimiento.

Esta acción es imprescriptible para el hijo/a presunto/a, esto quiere decir que el hijo/a puede
interponer la acción de impugnación en cualquier momento, por ejemplo:  una persona que
haya pensado que x persona es su padre pero luego de veinte años descubre que su padre es
otra persona, esta puede interponer la acción de impugnación si así lo desea ya que para ella la
misma no prescribe. 

OTROOOOOO

¿Qué es la filiación?
Esta es la primera y más importante definición sobre esta temática.

La filiación es la relación de descendencia que existe entre dos personas, una de


las cuales es el padre o madre de la otra.

Como producto de esta relación, la filiación establece los derechos y obligaciones


que se tiene frente a la ley en calidad de descendiente (o ascendiente).

El o los padres tendrán las siguientes facultades frente a sus hijos:

 El derecho de usar los bienes del hijo y de percibir sus frutos

 La administración de los bienes del hijo

 La representación del hijo

1.1. ¿Qué tipos de filiación existen?

Existen tres tipos o clases de filiación en nuestra ley (ley 19585):

1. Filiación por naturaleza (la más común de todas).


2. Filiación por técnicas de reproducción humana asistida. Que en la práctica es
más menos lo mismo que la “natural” del punto 1, sólo que con la ayuda de
diversas (y caras) tecnologías que hoy se disponen.
3. Filiación por adopción.

1.2. ¿Cómo determina la ley qué filiación corresponde a


cada quien?

Según la ley chilena, la filiación respecto de una persona, puede determinarse a


través de 3 formas diferentes, según sea el caso:

1. La ley: ésta determina la filiación en base a ciertos supuestos ya definidos en


nuestras reglas. Por ejemplo, según la ley, se presume la paternidad de los hijos
nacidos dentro del matrimonio.
2. El reconocimiento voluntario: que hace el padre, la madre o ambos sobre el
hijo, ante las autoridades competentes.
3. La sentencia judicial: esto es, cuando un tribunal declara la paternidad o
maternidad anteriormente no conocida, o bien cambia una paternidad que ya
estaba determinada en favor de alguien.

1.3. Principios máximos de la filiación en Chile

La ley 19585 que establece la paternidad según tiene en su fondo determinados


principios que dirigen su razón de ser:

 Igualdad de todos los hijos, de modo que no sean discriminados cualquiera que
sea la circunstancia de su nacimiento, es decir, nazcan dentro o fuera del
matrimonio.
 Supremacía del interés superior del niño, lo cual supone considerar al niño
como sujeto de derecho, procurando su mayor realización espiritual y material
posible, guiarlo en el ejercicio de sus derechos esenciales conforme su edad y
desarrollo. El Estado y sus órganos debe garantizar estos derechos, adecuando
la legislación chilena a la Convención de Derechos del Niño.

 Toda persona tiene derecho a la identidad, a conocer su origen biológico, a


pertenecer a una familia. De este principio surge la posibilidad de investigar la
paternidad y maternidad.

1.4. ¿Dónde se tramitan las acciones de filiación?

Los Juzgados de Familia son los competentes para determinar una filiación.
En estos tribunales es posible ejercer todas las acciones que la ley de filiación
chilena establece.

1.5. Acciones de filiación en Chile

Este es un pequeño resumen sobre las demandas de paternidad que se pueden


tramitar en los juzgados de familia, pese a que más adelante veremos en
profundidad cada una de las acciones de filiación en Chile:

 Acción de reclamación de filiación: tiene el fin de conseguir una investigación


de la paternidad o maternidad. Por ejemplo, esto ocurre cuando el hijo no ha sido
reconocido por el padre y se demanda al supuesto padre reclamando su filiación.

 Acción de impugnación de filiación: ésta busca desconocer una filiación que


fue previamente determinada. Esto ocurre, por ejemplo, cuando se ha dicho que
Juan es hijo de Pedro y en realidad no lo es. Por lo que se “Impugna” esta
filiación para que se declare que Juan no es hijo de Pedro (y usualmente se
determine de quién sí lo es).

 Acción de simple desconocimiento de la paternidad matrimonial del hijo que


nace antes de los 180 días desde el matrimonio: esta particular acción procede
en aquellos casos en que estando dos personas casadas, nace un hijo antes de
180 días desde que se casaron y, por lo tanto, se podría presumir que tal hijo no
es del marido.

 Acción de nulidad de reconocimiento de un hijo: Cuando se declara nulo el


reconocimiento de un hijo por parte de una persona, el hijo se quedará con el
reconocimiento anterior que tenía.

Dependiendo del caso en que estés, es la acción que deberás ejercer. Para esto
último es importante que siempre te asesores por un abogado experto en derecho
de familia.

1.6. Demanda de paternidad en Chile

Alrededor de 10 mil demandas de paternidad se interponen en Chile cada año.

Con ellas no sólo se busca evitar que en un hijo crezca sin su padre, sino también
que se determine la filiación (comprobarse la paternidad en juicio de filiación) y
se adquiera un conjunto de derechos tales como: derechos hereditarios, derecho
a pedir pensión alimenticia, derecho a administrar bienes, entre otros.
Más de la mitad de los niños que nacen son producto de filiación no matrimonial,
es decir, nacen fuera del matrimonio. Si bien la calidad de hijo es la misma para
todos, la diferencia está en que aquellos que nacen dentro del matrimonio se
presumen como hijos de los padres, mientras que aquellos que nacen fuera
deben ser expresamente reconocidos.

A continuación revisaremos algunos de los detalles más importantes relacionados


a las demandas de paternidad y las acciones que se pueden realizar en ella.

2. Reconocimiento de
paternidad
Primero que todo: ¿Qué es el reconocimiento de paternidad? o ¿Qué es el
reconocimiento de un hijo?

El reconocimiento de paternidad es el acto por el cual se realiza un


reconocimiento voluntario de la paternidad (filiación) sobre un hijo.

Este acto corresponde realizarlo el sobre aquellos hijos nacidos fuera del
matrimonio (filiación no matrimonial), ya que como te contaba antes, los hijos
nacidos dentro del matrimonio ya suponen su filiación, por lo que asumir
paternidad es un acto casi automático.

Al reconocimiento de paternidad en Chile se le conoce informalmente como una


“acción de reconocimiento de paternidad”, como si fuera un reconocimiento
judicial de paternidad (ante tribunales). Sin embargo, no existe tal cosa como una
demanda de reconocimiento de paternidad, como tampoco etapas judiciales
relacionadas a tal acción (por ejemplo una audiencia de reconocimiento de
paternidad).
La razón de lo anterior, tiene que ver con que la acción de reconocimiento
voluntario no es precisamente una acción que se realice en los tribunales o vía
juicio, sino más bien, el común de la gente lo realiza ante el Registro Civil.

2.1. ¿Qué se necesita para hacer un reconocimiento de


paternidad?

Para ser estrictos con la ley, el artículo 187 del código civil, define que el
reconocimiento tendrá lugar mediante una declaración formulada:

 Ante el oficial del Registro Civil en el nacimiento o en el matrimonio

 En acta extendida en cualquier tiempo ante cualquier oficial del Registro Civil

 Reconocimiento de paternidad por escritura pública, o

 En un testamento.

Además, si es un sólo progenitor quien reconoce, éste no estará obligado a


señalar quién es el(la) otro(a).

El trámite de reconocimiento de paternidad antes el Registro Civil es básicamente


eso, un acto jurídico y no una acción judicial. Así, si el papá de mi hijo no lo quiere
reconocer, lo que corresponde es una acción de reclamación de paternidad.

2.2. ¿Cómo reconocer a un hijo después de años?

El derecho de reclamar la filiación es imprescriptible e irrenunciable, por lo que el


tiempo no es un factor que lo impida.

Si bien el reconocimiento de paternidad es voluntario, habría que analizar si dicho


hijo tiene una filiación previa determinada. De ser así, el acto de reconocer sería
inviable y habría que tomar otras medidas, como por ejemplo, impugnar la
paternidad que dicho hijo tiene.

2.3. Reconocimiento de maternidad


La maternidad en Chile queda determinada legalmente por el parto, según el
artículo 183 del Código Civil “cuando el nacimiento y las identidades del hijo y de
la mujer que lo ha dado a luz constan en las partidas del Registro Civil”.

En caso que lo anterior no ocurriera, se puede determinar vía reconocimiento


(punto anterior) o sentencia de un juicio.

2.4. ¿Qué debo hacer si quiero exigir el reconocimiento de


paternidad?

Para ejercer dicha acción, y suponiendo que no existe una filiación previa,
deberás iniciar un juicio en el tribunal competente a través de interponer una
demanda de reclamación de filiación.

3. Reclamación de
paternidad
La reclamación de paternidad en Chile es la acción judicial mediante la cual pides
que se reconozca la relación filial entre un padre y un hijo.

Esta acción es importante, ya que mientras no exista el reconocimiento, los hijos


no reconocidos por el padre no podrán ejercer los derechos que derivan de la
filiación (pensión de alimentos, derechos de herencia, etc).

El plazo para reclamar la paternidad en Chile, tal como pudiste leer antes, es
teóricamente ilimitado (dependiendo de las circunstancias), ya que este derecho
no prescribe.

3.1. Paso a paso de la demanda de reclamación de


paternidad
Si sabes quien es tu padre, es posible que éste te reconozca de manera
voluntaria y no será necesario un juicio o demanda de paternidad. Sin embargo, si
no es voluntario, debes necesariamente interponer una demanda de reclamación
de paternidad con la finalidad de determinar al supuesto padre.

Así, si la persona a quien demandas reconoce su paternidad, el juez tiene la


facultad de dictar sentencia de inmediato. Ahora bien, si el supuesto padre
rechaza tu demanda, el juez procederá a citar a ambas partes para que rindan las
pruebas pertinentes.

Entre ellas el juez ordenará que las partes se realicen un examen de ADN cuyo
resultado determinará si se te va a conceder o no la demanda de paternidad.

En el caso de que el supuesto padre se negare a practicar dicho examen, se va a


establecer una presunción grave de paternidad. Así, el juez presumirá que el
demandado es el padre del menor, que posteriormente va a calificar.

3.2. Requisitos y eventos de la demanda de paternidad

Tu abogado te podrá explicar bien los pasos y requisitos de la demanda de


paternidad, aquí tienes un resumen de los pasos asociados a la acción de
reclamación de filiación:

1. Se citará a una audiencia para ratificar la demanda y solicitar la prueba de


ADN, citando a ambas partes al Servicio Médico Legal (SML). También son
válidos los test de Biogenetics, que podremos ver más adelante.
2. Si no acude al segundo llamado, se presume que el demandado es el padre, y
además, perderá todos los derechos hereditarios sobre el hijo, pero manteniendo
sus deberes como padre.
3. Realizada la audiencia preparatoria, el juez en su resolución va citar a la
audiencia de juicio en la se dará a conocer el resultado del examen (Aunque lo
más común es que se conoce, antes de dicha audiencia, el resultado de la prueba
de ADN, por medio de la información que le llega al abogado) y el juez dictará
sentencia.
4. ¿En qué consiste la
impugnación de paternidad?
La impugnación de paternidad es el derecho que tienen ya sea el supuesto
padre o el supuesto hijo para solicitar a los tribunales de familia chilenos que se
deje sin efecto una filiación.

La acción de impugnación de filiación busca desconocer una filiación previamente


determinada. Esto ocurre por ejemplo cuando se ha dicho que Juan es hijo de
Pedro y en realidad no lo es, por lo que se demanda de impugnación de
paternidad, para que se declare que Juan no es hijo de Pedro.

4.1. ¿Quiénes pueden impugnar la paternidad de un hijo


nacido durante el matrimonio?

La impugnación de la paternidad puede ser realizada por las siguientes personas:

 Por el supuesto padre. La paternidad del hijo concebido o nacido durante el


matrimonio puede ser impugnado por el hombre dentro del plazo de 180 días
siguientes contados desde el día que tuvo conocimiento del parto, o dentro del
plazo de un año, contado desde esa misma fecha si prueba que a la época del
parto se encontraba separado de hecho de la mujer.

 Por los herederos del marido o por Terceros. Si el marido muere sin conocer el
parto, o antes de vencido el plazo de 180 días o de 1 año señalado en el caso
anterior, la impugnación a la paternidad puede ser hecha por los herederos del
marido, y en general, a toda persona a quien la pretendida paternidad implicase
perjuicio.

 Por el supuesto hijo o su representante. La paternidad del hijo concebido o


nacido durante el matrimonio también puede ser impugnada por el representante
legal del hijo. Asimismo, el hijo podrá interponer la acción de impugnación dentro
de 1 año, contados desde que cumpla 18 años de edad.

4.2. ¿Quienes pueden impugnar la paternidad de un hijo


nacido fuera del matrimonio?
La impugnación de la paternidad puede ser realizada por las siguientes personas
y en los siguientes casos cuando se trata de un hijo nacido fuera del matrimonio:

 Por el hijo: La paternidad determinada por reconocimiento puede ser


impugnada por el propio hijo, dentro del plazo de 2 años contados desde que
supo de este reconocimiento.

 El representante del Hijo: Si el hijo fuera incapaz ante la ley, la impugnación


puede ser hecha por su representante legal en interés de éste.

 Los herederos del hijo: Podrán impugnar la paternidad en los siguientes casos: 
o Si el hijo muere desconociendo el reconocimiento de la paternidad; o

o Si el hijo muere antes de vencido el plazo para impugnar la paternidad.

Los herederos podrán impugnar la paternidad en el mismo plazo que tenía el hijo
o en el tiempo que falte para completarlo, contado desde la muerte del hijo.

 Terceros interesados: También podrá impugnar paternidad determinada por


reconocimiento toda persona que pruebe un interés actual en ello, en el plazo de
un año desde que tuvo ese interés y pudo hacer valer su derecho.

4.3. ¿Cuándo no se puede impugnar la paternidad?

Si bien la ley señala que no procedería la impugnación de paternidad en Chile


cuando exista una sentencia firme que determinare una filiación, puede hacerse
una excepción: “podrá accionar quien se presenta como verdadero padre o madre
del que pasa por hijo de otros, o como verdadero hijo del padre o madre que le
desconoce”.

4.4. Medios que otorga la ley para impugnar la paternidad

Si bien la ley te posibilita que se investigue la paternidad y maternidad mediante


toda clase de pruebas, en la actualidad el método más seguro y más utilizado es
el examen de ADN, el cual permite determinar o excluir ya sea la paternidad o la
maternidad con una certeza de un 99,9%.

4.5. ¿Impugnación y reclamación de paternidad al mismo


tiempo?
Así es. En nuestros procesos judiciales, si estuviese determinada la filiación de
una persona y se desea reclamar otra distinta, el artículo 208 del Código Civil
indica que “deberán ejercerse simultáneamente las acciones de impugnación de
la filiación existente y de reclamación de la nueva filiación”.

Si puedes leer entre líneas, básicamente alguien que ya tiene una filiación, no
puede quedarse sin una.

Una tercera interpretación de lo mismo, indica que no se puede impugnar la


paternidad si es que no existe filiación definida (sería demandar
equivocadamente).

4.6. Paso a paso del proceso judicial de la demanda de


impugnación

Cómo se impugna la paternidad tiene un proceso casi idéntico al proceso de


demanda de paternidad que vimos anteriormente (de reclamación) ya que están,
como te contaba, intrínsecamente relacionados al momento de elaborar una
demanda.

Aquí revisa este resumen de requisitos y etapas de cómo se impugna la


paternidad:

1. Solo podrás demandar de impugnación si el hijo ya tiene una filiación


determinada, es decir, hay alguien más que figura como el padre.
2. Se debe interponer una demanda en el tribunal de familia, luego una vez que
se decrete la impugnación se debe solicitar la reclamación de filiación.
3. Procederá la misma audiencia, en la cual al igual que la anterior, se solicitará
que se realice una prueba de ADN.
4. En este caso se entiende que no corre la presunción, ya que es el padre aquél
que solicita la impugnación de filiación. Sin embargo, si es el hijo quien solicita la
reclamación producto de una impugnación, sí correrá la presunción.
5. ¿Cuánto se demora una
demanda por paternidad en
Chile?
No es posible determinar a ciencia cierta cuánto demora una demanda por
filiación en cualquiera de sus acciones posibles. Sin embargo, al margen del
anterior comentario, casi todos los plazos dependen de lo que uno tarde en
realizar las pruebas de ADN. Si uno es bastante diligente y capaz de adelantar su
prueba de ADN, este proceso judicial podría tomar de 4 a 6 meses.

6. La diferencia entre
reconocimiento, reclamación e
impugnación de paternidad
El reconocimiento, la reclamación y la impugnación de paternidad son temas
procesalmente muy relacionados, pero que no tienen que ver respecto de la
acción u objetivo que se quiere lograr.

La reclamación de paternidad es una acción que consiste y se basa en el derecho


de exigir una filiación a alguien, mientras que la impugnación consiste en la
acción y derecho de dejar sin efecto una filiación que ya existía, para luego definir
la “correcta”.

Muy por el otro sentido, el reconocimiento no es una acción judicial propiamente


tal, sino más bien un acto jurídico voluntario de reconocer una filiación y que la
mayoría de las veces se hace ante el Registro Civil o se asume por defecto
cuando nace un hijo dentro del matrimonio.

7. ¿Qué pasa una vez


terminado el juicio de
paternidad?
La sentencia declarativa del juez sobre la paternidad (filiación) la deberás
suscribir al margen de la inscripción del nacimiento de tu hijo.

8. Medios de prueba para


determinar la filiación
Para conocer la filiación de alguien, el principal medio de prueba utilizado es el
examen de ADN, el cual puede decretar en su aplicación el juez de oficio.

También, como vimos anteriormente, si el demandado se niega a realizarse su


examen de ADN, ya constituye una presunción grave de paternidad, con las
consecuencias que vimos.

En este último apartado antes de las preguntas comunes de nuestros clientes, te


invito a leer sobre la prueba de paternidad esencial.

8.1. ¿Qué es una prueba de ADN?


La prueba de ADN sirve para determinar o excluir la paternidad o maternidad
respecto de una persona.

Muchos clientes me preguntan “¿Qué es una prueba de paternidad?”. Pues la


prueba de paternidad se refiere al examen de ADN, ya que es el medio más
eficaz para cumplir el objetivo que persigue este proceso judicial.

Nuestro Código Civil señala que en los juicios sobre determinación de la filiación,
la maternidad y la paternidad podrán establecerse mediante toda clase de
pruebas, sin embargo, no será suficiente la prueba testimonial para efectos de
determinar la filiación, sino que la principal prueba para este fin será la prueba de
carácter biológico, más conocida como “prueba de ADN”.

8.2. ¿Qué evalúa el test de ADN?

El examen de ADN de filiación, analiza genéticamente las muestras de sangre de


todas las personas involucradas: madre, hijo, presunto/s padre/s. El ADN
contenido en la sangre tiene patrones genéticos individuales que se van
transmitiendo de generación en generación, siguiendo un modelo compartido de
herencia entre los padres y sus hijos.

Existen además laboratorios privados, que no sólo determinan el ADN a través de


la sangre, sino también a través de la saliva e incluso hay otros que pueden hacer
pruebas de ADN analizando uñas cortadas (de manos o pies), colillas de cigarro,
pelos con raíz, cejas, cepillos de dientes, chicles, manchas de sangre,
preservativos, pañuelos con mucosidades, dientes, cordones umbilicales, restos
óseos, tejidos biológicos, etc.

Cómo leer un resultado de ADN queda en manos de expertos, sin embargo esta
tarea no será difícil al momento que tengas el informe reportado.

Sin embargo, la mayoría de los clientes que se enfrentan a esta etapa tienen
dudas respecto de una expresión común: “¿Qué quiere decir exclusión de
paternidad?” Es simple. Esto quiere decir que quien se tomó la prueba, no es el
padre.
8.3. ¿Dónde se lleva a cabo esta prueba de ADN?

La prueba de ADN debe llevarse a cabo en el Servicio Médico Legal (SML) o en


laboratorios idóneos para ello, únicamente designados por el juez.

Es importante que te indique que el examen de ADN en farmacias no es válido


para un juicio. Quizás te puede servir para hacerte una idea antes de un proceso,
sin embargo no será aceptado como una prueba válida y tendrás que ir igual al
SML o al laboratorio autorizado que el juez designe.

Los resultados de ADN del Servicio Médico Legal o del laboratorio particular que
consultes, debes solicitarlos directamente con ellos, tanto sus plazos.

No es factible saber cuánto se demora un examen de ADN, pero se sabe que


aquellos exámenes solicitados por el juzgado en el SML se demorarán mucho
más que uno particular.

8.4. ¿Se puede pedir más de una prueba de ADN?

Las partes de la causa siempre, y por una sola vez, tendrán derecho a solicitar un
nuevo informe pericial biológico.

El juez podrá dar a estas pruebas periciales, por sí solas, valor suficiente para
establecer o excluir la paternidad o la maternidad. Es decir, con esta sola prueba,
sin necesidad de otras, podrá determinar o excluir la paternidad o maternidad
respecto de una persona.

8.5. Consecuencias de negarse a la prueba

Como te contaba anteriormente, se puede exigir una prueba de paternidad, pero


si una de las partes se niega injustificadamente a someterse a ella, este sólo
hecho bastará para presumir legalmente la paternidad o la maternidad, o la
ausencia de ella, según corresponda.

Se entenderá que hay negativa injustificada si, citada la parte dos veces, no
concurre a la realización del examen.
9. Algunas preguntas
frecuentes de mis clientes
Revisa a continuación algunas preguntas que suelo recibir en MisAbogados sobre
este tema.

9.1. No quiero reconocer a mi hijo ¿Cómo lo puedo lograr?

La respuesta a esto tiene 2 formas de abordarlo. Primero: reconocer a un hijo es


un acto voluntario, por lo tanto si no lo reconoces, eso se queda tal cual y no se
genera una relación de filiación entre ambos. Segundo: lo anterior no quita que tu
hijo o hija pueda interponer una demanda de paternidad, específicamente una
acción de reclamación de paternidad, y que te veas enfrentado a un proceso
judicial con examen de ADN y todo incluido.

Si lo segundo es tu caso, comenzaría por consultar con un abogado.

9.2. El padre quiere reconocer al hijo y la madre se niega


¿Qué hago?

Al igual que la respuesta anterior, esto tiene prácticamente 2 perspectivas para


abordarlo (pese a que puedan existir más opciones menos probables):

 Si el hijo en cuestión ya tiene una filiación definida, tocaría al supuesto padre


proceder con una acción de impugnación de paternidad para que se elimine la
anterior filiación y se hagan los exámenes para probar el vínculo.

 Por el contrario, si el hijo no tuviera una filiación definida, es bastante distinto,


ya que no existe una demanda de paternidad por parte del padre que sea
aplicable a este caso. El padre puede ir directa y voluntariamente al Registro Civil
a declarar en acta la filiación. Frente a lo anterior, la madre podría luego oponerse
a esta inscripción, pero tendría que presentar a quien realmente es el padre
(comprobable con examen de ADN).
9.3. Si no soy el padre biológico ¿Puedo reconocer un
hijo?

Sí, lo puede reconocer mediante el acto voluntario que he mencionado a lo largo


del presente artículo. Ahora bien, el padre biológico podría impugnar esta
paternidad, para lo cual, si quisieras mantener esta filiación, deberás valerte de
otros argumentos en juicio (que podrían primar frente al ADN), como es el de la
posesión notoria.

9.4. ¿Puedo presentar una demanda de desconocimiento


de paternidad?

No existe en términos jurídicos tal acción que pueda demandarse, más bien
corresponde al proceso de impugnación de paternidad bajo las causales que
correspondan. Pero, al igual que lo otros procesos, se requerirá de una
reclamación de paternidad que le acompañe.

Si lo que estás buscando es hacer una renuncia de paternidad, tendrías que


buscar nuevamente en los procesos de impugnación tu respuesta.

Otroooooo

La impugnación de la paternidad
Paloma Zabalgo Jiménez
Tribuna 14-09-2016
Los asuntos derivados de la impugnación de la paternidad, son siempre complejos y
arduos, ateniendo no solamente a la regulación del Código Civil, sino también a la
propia complejidad de los sentimientos y emociones que este tipo de asuntos
conllevan, y a las causas derivadas de esta impugnación -  deslealtades conyugales
o infidelidades .

Antes de analizar la acción de impugnación de la paternidad, es necesario realizar


una breve mención sobre la regulación de la filiación en nuestro derecho, en relación
a las acciones de impugnación, por cuanto la determinación de la filiación nos dibuja
el mapa jurídico para conocer la legitimación y los plazos a los que están sujetas las
acciones de impugnación de la paternidad.

La filiación se regula en los artículos 108 y siguientes del Código Civil, produce
efectos desde que tiene lugar, y se acredita por la inscripción en el Registro Civil, por
el documento o sentencia que la determina legalmente, por la presunción de
paternidad matrimonial, y a falta de los medios anteriores, por la posesión de estado
– esto es, el ejercicio constante de la condición de padre o madre y de hijo.

En la determinación de la filiación paterna se distingue:

- La filiación matrimonial viene determinada legalmente por la inscripción del


nacimiento junto con la del matrimonio de los padres y por sentencia firme.

El artículo 116 del Código Civil establece que se presumen hijos del marido los
nacidos después de la celebración del matrimonio y antes de los trescientos
días siguientes a su disolución o a la separación legal o de hecho de los
cónyuges.

Esta presunción puede ser destruida por el marido, si el hijo nace dentro de los 180
días siguientes a la celebración del matrimonio, mediante declaración auténtica en
contrario formalizada dentro de los seis meses siguientes al reconocimiento del padre
(se exceptúan si se ha reconocido la paternidad expresa o tácitamente, o hubiese
conocido el embarazo de la mujer con anterioridad a contraer matrimonio, con la
salvedad establecida en el último párrafo del artículo 117).

La filiación adquiere el carácter de matrimonial desde la fecha del matrimonio,


aunque este tenga lugar después del nacimiento del hijo.

- La filiación no matrimonial queda determinada legalmente según el artículo 120


del Código Civil: 1.º En el momento de la inscripción del nacimiento, por la
declaración conforme realizada por el padre en el correspondiente formulario oficial a
que se refiere la legislación del Registro Civil.2.º Por el reconocimiento ante el
Encargado del Registro Civil, en testamento o en otro documento público. 3.º Por
resolución recaída en expediente tramitado con arreglo a la legislación del Registro
Civil. 4.º Por sentencia firme. 5.º Respecto de la madre, cuando se haga constar la
filiación materna en la inscripción de nacimiento practicada dentro de plazo, de
acuerdo con lo dispuesto en la Ley del Registro Civil.

- La filiación paterna también puede venir determinada mediante el


“reconocimiento” en los casos legalmente establecidos. Consiste en una figura de
construcción jurisprudencial ante la escasa regulación legal existente, y consiste en
un acto personalísimo por el que se declara que ha existido el hecho biológico de la
procreación del que ha nacido el hijo sobre el que recae el reconocimiento. La
jurisprudencia ha definido el “reconocimiento de complacencia” que consiste en que
aún a pesar de conocer que no es el padre biológico del reconocido, reconoce la
voluntad de tenerlo como hijo biológico suyo, distinguiéndolo del reconocimiento por
conveniencia que consistente en crear una mera apariencia sobre la existencia de
dicha relación a fin de conseguir consecuencias jurídicas favorables (sobre
nacionalidad, permisos de residencia, etc).
Expuesto lo anterior las acciones de impugnación de la paternidad, tienen por
finalidad negar la filiación legalmente determinada, con fundamento en el ajuste
de la realidad jurídica con la realidad biológica, y su regulación se establece
según haya sido determinada la filiación:

- La impugnación de la paternidad matrimonial.

Consiste en impugnar la presunción que se establece en caso de matrimonio –


artículo 136 del Código Civil- y puede ser ejercitada por el marido, la madre que
ostente la patria potestad (en interés del hijo) y por el propio hijo:

a) Así, el marido dispone del plazo de un año desde la inscripción, plazo que no
correrá mientras el marido ignore el nacimiento. Si el marido fallece el plazo correrá
desde que lo conozca el heredero.

El plazo de un año puede ser ampliado a cuatro años (según el párrafo segundo del
artículo 136 del Código Civil) si pese a conocer el nacimiento por el marido,
desconociera su falta de paternidad biológica, y el plazo comenzará desde que
tuviera tal conocimiento.

(En este sentido el artículo 136 del CC ha sido modificado, y su actual redacción se
debe a la Ley 26/2015, habiendo declarado la Sentencia del Tribunal Constitucional 
de fecha 26 de mayo de 2005,  que el plazo de caducidad contemplado en el artículo
136 de un año desde la inscripción de la filiación en el Registro, cercenaba el acceso
a la jurisdicción del padre que descubre que no lo es una vez transcurrido dicho
plazo, ampliando el legislador el plazo inicialmente establecido a cuatro años, desde
el momento en que el padre conoce su falta de paternidad biológica )

En ambos casos la acción corresponderá a cada heredero por el tiempo que


corresponda para completar dicho plazo.

b) El hijo puede impugnar la paternidad durante el año siguiente a la inscripción de la


filiación. Si fuere menor o con la capacidad modificada judicialmente el plazo contará
desde que alcance la mayoría de edad o recobrare la capacidad para tener tales
efectos.

Si pese a haber transcurrido dicho plazo de un año, el hijo mayor de edad o con la
capacidad suficiente, desconoce la falta de paternidad biológica de quien aparece
inscrito como su progenitor, el plazo de un año comenzará a contar desde que
tuviera tal conocimiento.

Si el hijo fallece antes de transcurrir dichos plazos, su acción corresponderá a los


herederos durante el tiempo que faltare para completar dichos plazos.

c) La madre puede ejercer la acción de impugnación de paternidad “en interés del


hijo menor” durante el año siguiente a la inscripción de la filiación (así al contrario que
el padre, al que el código civil le otorga legitimación en su propio nombre, la madre
solo puede ejercitarla en nombre del hijo menor de edad)

d) También puede ser ejercitada la acción de impugnación de la paternidad por vicio


del consentimiento en los reconocimientos que determinen conforme a la ley una
filiación matrimonial.

- Impugnación de la filiación paterna (no matrimonial)

Esta acción se encuentra regulada en el artículo 140 del Código Civil, que establece
que cuando falte en las relaciones familiares la posesión de estado, la filiación
paterna o materna no matrimonial puede ser impugnadas por cualquier persona a
quien les perjudique.

Si existe posesión de estado, la impugnación corresponde a quien aparece como hijo


o progenitor y a quien perjudique como herederos forzosos. La acción caduca
pasados cuatro años desde que el hijo, una vez inscrita la filiación, goce de la
posesión de estado correspondiente.

Conforme a lo anterior, la impugnación de la paternidad en caso de matrimonio


se somete a la regla general de un plazo de caducidad de un año, siendo la
regla general en caso de no existir matrimonio el plazo de cuatro años.

- La impugnación de la filiación paterna por reconocimiento.

La reciente Sentencia dictada por el Tribunal Supremo de fecha 16 de julio de 2016,


viene a unificar la doctrina relativa a la impugnación de la paternidad en los
reconocimientos de complacencia: en los cuales el plazo de impugnación de la
paternidad viene determinado si existe filiación matrimonial o no matrimonial (sin
perjuicio de lo establecido en el artículo 138 del Código Civil en cuanto a los vicios
del consentimiento).

En el caso estudiado el impugnante conocía no ser el padre biológico, contrayendo


matrimonio con la madre y efectuando ante el Registro Civil un reconocimiento del
hijo que había tenido su mujer.

La respuesta del Tribunal Supremo es admitir la acción de impugnación, fundada en


el hecho de no ser el padre biológico del reconocido: La acción procedente:

- Será regulada en el artículo 136 (un año de caducidad) si la paternidad determinada


legalmente por el reconocimiento es matrimonial en el momento de ejercicio de la
acción.

Este plazo será también el aplicable en el caso que el autor del reconocimiento de
complacencia y la madre del reconocido hayan contraído matrimonio después del
nacimiento de este, y también en el caso en que el reconocimiento se haya producido
antes del matrimonio, a no ser que hubiera caducado la acción de cuatro años que
regula el artículo 140.II, no admitiendo que el matrimonio pueda abrir un nuevo plazo
de un año.

- Y será la que se regula en el artículo 140.II del Código Civil (plazo de caducidad de
cuatro años) si la paternidad no es matrimonial y ha existido posesión de estado,
aunque ésta no persista en el tiempo.

En definitiva, acciones complejas y sujetas a un plazo determinado, en el intento de


ponderar la realidad biológica con la realidad jurídica, inmersas además en un
complejo marco de relaciones personales y familiares.

En la práctica jurídica podemos observar que existen muchos más procesos


judiciales en los que se ejercen este tipo de acciones de los que se pueda pensar y
fundamentalmente muchos caos, en los que ni siquiera se llega a los tribunales por el
transcurso de los plazos establecidos.

COMENTARIOS
COMENTAR

 L

LBG 23/11/2020

Existe alguna manera legal de DESHACERME de mi progenitor… sin que me tenga que adoptar
nadie?
Quiero renunciar a el.
No quiero su apellido ni nada.

Como lo hago?

Gracias

 H

hector lorenzo 11/11/2020

despues de 5 años la madre puede empezar un juicio de impugnacion de la paternidad con un


supuesto padre biologico? y que el papa legal quede fuera del acta? y si si porque? dodne queda el
articulo 330 de la revocaion de la parternidad de la SCJN

 F

Francisco J. F.S. 10/11/2020
Buenas tardes. De la nueva redacción que da el legislador por la STC de inconstitucionalidad se
desprende que el ejercicio para ejercer la impugnación de paternidad es de 1 año desde que tenga
conocimiento.
Salvo error no veo que diga 4 años.
Un saludo

 P

Paola FP 10/11/2020

Puede el hijo del cujus solicitud una impugnación a la filiación para determinar si corresponde o no una
herencia?

 S

Sixto 22/09/2020

Puede la madre o el hermano del de cujus o del fallecido plantear la acción de impugnación de
filiación?

Otrooooooo

Sección III Establecimiento judicial de la filiación


Código Civil Artículo 226
Código: Sección III Establecimiento judicial de la filiación
Código Civil Artículo 226 Toda persona tiene acción para reclamar el reconocimiento de su
filiación materna o paterna, en las condiciones que prevé el presente Código.

Código Civil Artículo 227


Código: Sección III Establecimiento judicial de la filiación
Código Civil Artículo 227 En vida del hijo y durante su minoridad, la acción a que se refiere
el artículo anterior podrá ser intentada, si no lo hiciere su representante legal, por el Ministerio
Público, por los organismos públicos encargados de la protección del menor, por el progenitor
respecto del cual la filiación esté establecida y por los ascendientes de éste.

Después que el hijo hubiese contraído matrimonio o alcanzado la mayoridad, la acción le


corresponde únicamente a él.

Código Civil Artículo 228


Código: Sección III Establecimiento judicial de la filiación
Código Civil Artículo 228 Las acciones de inquisición de la paternidad y la maternidad son
imprescriptibles frente al padre y a la madre, pero la acción contra los herederos del padre o
de, la madre, no podrá intentarse sino dentro de los cinco (5) años siguientes a su muerte.

Código Civil Artículo 229


Código: Sección III Establecimiento judicial de la filiación
Código Civil Artículo 229 Los herederos o descendientes del hijo que ha muerto sin
reclamar su filiación, no podrán intentar la acción contra los herederos del progenitor
respecto del cual la filiación deba, ser establecida, sino en el caso que el hijo haya muerto
siendo menor o dentro de los dos (2) años subsiguientes a su mayoridad.

Código Civil Artículo 230


Código: Sección III Establecimiento judicial de la filiación
Código Civil Artículo 230 Cuando no exista conformidad entre la partida de nacimiento y
la posesión de estado, se puede reclamar una filiación distinta de la que atribuye la partida
de nacimiento.

Y aun cuando exista conformidad entre las actas de Registro Civil y la posesión de estado,
se puede también reclamar una filiación distinta de la que atribuyen las actas del Registro
Civil si se reclama y prueba judicialmente por cualquier medio, la suposición o sustitución
de parto, o si el hijo fue inscrito bajo falsos apellidos o como nacido de padres inciertos.

Código Civil Artículo 231


Código: Sección III Establecimiento judicial de la filiación
Código Civil Artículo 231 Las acciones relativas a la filiación se intentarán ante el Juez
de Primera Instancia en lo Civil que conozca de los asuntos relativos a los derechos de
familia en el domicilio del hijo, cualquiera que sea la edad de éste, con intervención del
Ministerio Público, y se sustanciarán conforme al procedimiento pautado en el Código de
Procedimiento Civil para el juicio ordinario, salvo las reglas particulares de este Título y
las especiales que establezcan otras leyes.
 
Otrooooo

PRESUNCIONES RELATIVAS A LA FILIACION


Estas presunciones aparecen contenidas en la sección I, capitulo III del titulo V, articulo 213 al
216 del Código Civil, a saber:
 a) Se presume, salva prueba en contrario, que la concepción tuvo lugar en los ciento
veinte un días de los trescientos que precedieron al del nacimiento.
 b) La posesión de estado de hijo se establece por la existencia suficiente de hechos que
indiquen normalmente las relaciones de filiación y parentesco de un individuo con las
personas que se señalan como sus progenitores y la familia a que dicen pertenecer. Los
principales entre estos hechos son: que la persona haya usado el apellido de quien pretende
tener por padre a madre. Que estos la hayan dispensado el trato de hijo y él, a su vez, la haya
tratado como padre o madre, y que haya sido reconocido como hijo de tales personas por
la familia o la sociedad.
 c) La demanda para que se declare la paternidad o la maternidad, puede contradecirse
por toda persona que tenga interés en ello.
 d) El hijo nacido fuera del matrimonio, una vez reconocido, no puede ser llevado a la
residencia familiar sin el consentimiento del otro conyugue.

Pruebas de la filiación
En principio, por la ley natural, todos tenemos un padre y una madre. Sin embargo, desde el
punto de vista del Derecho no es así; pues si bien podemos tener ambos progenitores, puede
suceder también que solo tengamos uno solo de ellos, el padre o la madre, según hayamos
podido probar la vinculación con él o ella. Así pues, la filiación depende esencialmente de su
prueba y esta prueba variará según se trate de hijos nacidos de matrimonio o fuera de él, y
también según se deba probar la paternidad o la maternidad. En efecto, esta ultima depende
del hecho notable del parto (mater Semper certa est), por lo que basta probar la identidad de la
persona con el producto del parto de la mujer que se pretende por madre. La prueba de
paternidad, en cambio, depende de la concepción y requiere demostrar:
 1) Las relaciones carnales del presunto padre con la madre que dio a luz. Y que tales
relaciones tuvieron lugar en la época de la concepción; prueba ésta casi imposible o bastante
difícil.
 2) Que durante la época de la concepción la mujer no tuvo relaciones con otros
hombres; prueba imposible por ser negativa. Por tanto, sólo podrá probarse la concepción
por expresa confesión del padre o como consecuencia de una sentencia judicial que le
establezca.
La filiación del hijo nacido del matrimonio, es un hecho natural reconocida por el derecho
amparado por la Ley. Nuestro legislador favorece esta filiación y el hijo nacido de padres
casados no necesita probar su condición, pues, "el marido se tiene como padre del hijo nacido
durante el matrimonio o dentro de los trescientos días siguientes a su disolución o anulación"
(Art. 201 C.C) (perte is est quem nuptiae demostrant).
Sentado ya que la filiación debe probarse, que esta prueba resulta necesaria en el caso de los
hijos extramatrimoniales, y que en los nacidos del matrimonio existe la presunción iuris
tantum, que solo puede desvirtuarse mediante juicio contradictorio, vamos a comentar
tales pruebas, la primera de las cuales nace de la manifestación del progenitor, expresa o tácita,
en el sentido de reconocer como hijo a determinada persona; y la segunda, de una decisión
judicial que así lo determine.
RECONOCIMIENTO VOLUNTARIO
El reconocimiento del hijo por sus padres, para que tenga efectos legales, de constar:
 1) En la partida de nacimiento del Registro Civil de Nacimientos.
 2) En la partida de matrimonio de los padres.
 3) En Testamento o en cualquier otro acto publico o autentico otorgado al efecto en
cualquier tiempo (Art. 217 C.C); pero puede resultar también tal reconocimiento de una
declaración o afirmación incidental en un acto realizado con otro objeto, siempre que coste
por documento público o autentico y la declaración haya sido hacha de un modo claro e
inequívoco (Art.218 C.C).
El reconocimiento es declarativo de filiación y no puede revocarse, pero podrá impugnarse por
el hijo o por quien tenga interés legitimo en ello (Art. 221 C.C). Para reconocer un hijo mayor
de edad se requiere su consentimiento, y si hubiese muerto, el de su cónyuge y sus
descendientes, si los hubiere, salvo prueba, en este ultimo caso, de que el hijo gozo en vida de
posesión de estado (Art.220 C.C).El reconocimiento hecho separadamente por el padre o por la
madre sólo produce efectos para quien lo hizo y para los parientes consanguíneos de éste. Pero
el simplemente concebido sólo podrá ser reconocido conjuntamente por el padre y la madre
(Art. 223 C.C). El menor que haya cumplido dieciséis años podrá reconocer válidamente a su
hijo; y entes de cumplir esta edad, también podrá hacerlo previamente autorizado por su
representante legal o en defecto de éste por el Juez (Art. 222 C.C.). En caso de muerte del padre
o de la madre, el reconocimiento de la filiación puede ser hecho por el ascendiente o
ascendientes sobrevivientes, de una o otra línea, del grado más próximo que concurran en
la herencia, de mutuo acuerdo si pertenecen a la misma línea, en las mismas condiciones que
han quedado expuestas y con los mismos efectos (Art. 224 C.C).
Cuando la mujer casada ha permanecido separada de hecho de su marido, por mas de cinco
años y obtiene la disolución del vinculo matrimonial de conformidad con lo dispuesto en el Art.
185 – A del Código Civil, el padre verdadero puede reconocer al hijo concebido durante este
periodo, cuando la concepción coincida con dicho periodo. Es así como interpretamos la
confusa redacción del artículo 225 del C.C.*

Establecimiento judicial de la filiación


Cuando no existe el reconocimiento voluntaria, toda persona tiene acción para reclamar
judicialmente su filiación paterna o materna (Art. 226 C.C). esta acción puede ser intentada, en
vida del hijo y durante su minoridad, por su representante legal; y en su defecto, por el
Ministerio Público, por los organismos encargado de la protección del menor por órgano de
quien ejerza su personería, por el progenitor respectivo dl cual la filiación esté establecida, o
por los ascendientes de éste.
Después que el hijo haya contraído matrimonio o alcanzado la mayoridad, la acción
corresponde únicamente a él (Art. 227 C.C.). Estas acciones de inquisición de paternidad y de
maternidad son imprescriptibles frente al padre y a la madre, pero contra los herederos de
éstos no podrá intentarse sino dentro de los cinco años siguientes a su muerte (Art. 228 C.C.). Y
deberá intentarse por ante el Juez de Familia de la jurisdicción a que corresponda el domicilio
del hijo, con intervención del Fiscal del Ministerio Público y conforme
al procedimiento establecido en el C.P.C. para el juicio ordinario, salvo las especialidades
contenidas en el Código Civil y en otras leyes (Art.231 C.C.).
Cuando el hijo haya muerto siendo menor de edad sin haber reclamado su filiación, sus
herederos no podrán intentar la acción contra los herederos del progenitor respecto del cual la
filiación deba ser establecida, sino hasta los años siguientes a la mayoridad de aquél (Art. 229
C.C.).
El reconocimiento del hijo por la parte demandada pone término al juicio sobre la filiación,
siempre que el reconocimiento sea admisible (Art. 223 C.C.). En los conflictos de filiación, el
Tribunal decidirá la filiación que le parezca mas verosímil, en atención a la posesión de estado
y tomando en cuenta los medios de prueba establecidos (Art. 223 C.C.).
Comprobada su filiación, el hijo concebido y nacido fuera de matrimonio, tanto respecto de sus
progenitores como de los parientes consanguíneo de estos (Art. 234 C.C.).

La filiación materna
Conforme a lo expuesto en el tema anterior, se hable de filiación materna cuando se hace
referencia a la relación de parentesco consanguíneo en línea recta, de primer grado, entre una
mujer y su hijo o viceversa.
CARACTERES:
Son dos los caracteres esenciales de la maternidad:
 1) Es prioritaria frente a la maternidad.
 2) Vale, tanto para la filiación derivada de uniones matrimoniales, como para las
provenientes de uniones extramatrimoniales.
En efecto, para determinar la filiación paterna del hijo habido en matrimonio, es indispensable
probar el parto de la mujer y la identidad del individuo con el producto de este parto; con lo
que se establece la presunción "pater is est.".
Mientras que basta probar la identidad del individuo con el producto del parto de la mujer,
para establecer la filiación materna tanto para el hijo habido en matrimonio, como para el
nacido fuera de él.
PRUEBAS:
Base legal ante cualquier caso que amerite la circunstancia ante pleitos diferentes que surja en
la vista del camino.
Las pruebas de la maternidad pueden ser primarias y secundarias.
Son pruebas primarias:
 a) La partida de nacimiento.
 b) El reconocimiento hecho por la madre o por sus ascendientes.
 c) La posesión de estado del hijo.
Y son secundarias, a falta de las primarias:
 a) La sentencia recaída en juicio, y
 b) La declaración de testigos.
PRIMARIAS
 a) La partida de nacimiento; o sea, la copia certificada del Acta de la declaración de
nacimiento inscrita en los libros del Registro Civil, con identificación de la madre, es la
prueba fundamental de la filiación materna (Art. 197 C.C.).
 b) En defecto de la partida de nacimiento, se prueba la maternidad con la declaración
que hiciere la madre, o después de la muerte de ésta sus ascendientes, con el fin de
reconocer la filiación, en las condiciones y con las formalidades que señala el Código civil en
su (v. Capitulo III, Titulo V, Libro Primero del C.C.).
 c) La posesión de Estado se establece ésta por la existencia suficiente de hacho que
indiquen normalmente las relaciones de la filiación y parentesco del hijo con su madre y con
la familia a que pertenece o dice pertenecer. Siendo los principales entre estos hechos:
 1. Que el hijo haya usado el apellido de quien pretende tener por madre;
 2. Que esta le haya dispensado en trato de hijo, y
 3. Que haya sido reconocido como tal por la familia o por la sociedad.
Son estos los tres elementos, denominados nomen, tractatus y famma, bien conocidos ya por
nosotros.
Secundarias:
 a) Sentencia judicial: "cuando el hijo fue inscrito bajo falso nombres, o como nacido de
padres inciertos, o bien si se trata de suposición o sustitución de parto, la prueba de la
filiación materna puede efectuarse en juicio, con todo género de pruebas" (Art. 199 C.C.).
 b) La declaración de testigos para probar la maternidad, sólo será admisible cuando
exista un principio de prueba por escrito, o cuando los indicios resultantes de hechos ya
comprobados, sean bastante graves para determinar su admisión. El principio de prueba
por escrito resulta de documentos de familia, de registros y de cartas privadas de los padres,
de actos privados o públicos provenientes de una de las partes empeñados en la litis o de
persona que tuvieren interés en ella (Art. 199 C.C.).
La prueba contraria puede hacerse por todo los medios propios para demostrar que la persona
de quien se trata no es realmente el hijo de la mujer que el pretende tener por madre (Art. 200
C.C.).
Consideraciones de estos medios probatorios:
 a) Cuando existe partida de nacimiento pero no posesión de estado, puede ejercerse
acción de impugnación de estado, para demostrar que la mujer que se señala como madre
en la Partida no lo es en realidad.
 b) Cuando haya posesión de estado pero no exista partida de nacimiento, bastará esta
posesión para probar la maternidad; los interesados pueden también ejercer acción de
impugnación de estado.
 c) Cuando existiendo partida de nacimiento y posesión de estado ésta se contradicen,
privará la partida en principio; pero el hijo puede siempre ejercer acción de reclamación de
estado para probar su filiación conforme con la posesión de estado, si es que estima que esta
su verdadera filiación.
 d) Cuando coincidiendo la partida de nacimiento con la posesión de estado, necesitare
probar quien es su madre, deberá intentar acción de reclamación de estado, a fin de probar
en juicio su filiación, utilizando cualquier genero de prueba.
 e) Igualmente podrá intentar esta acción, quien no tenga posesión de estado y la
partida de nacimiento fuere falsa o le hiciere aparecer como hijos de padres inciertos.
 f) También podrá intentar quien, careciendo de partida de nacimiento, alegare que su
posesión de estado es falsa por hacerle aparecer como hijo de otra mujer.

La paternidad
Se entiende por paternidad la relación de parentesco consanguíneo, de primer grado en línea
recta, entre un hombre y su hijo o viceversa.
Pruebas de la paternidad
Las pruebas para determinar la paternidad, son distintas cuando se trata de hijos habidos en
matrimonio o fuera de él.
 1) En efecto, la prueba de la filiación respecto del hijo nacido del matrimonio de su
padre, se establece por una presunción iuris tantum, que solo puede ser destruida en juicio
contradictorio, mediante prueba en contrario; según esta presunción, "el marido se tiene
como padre del hijo nacido durante el matrimonio, o dentro de los trescientos (300) días
siguientes a su disolución o anulación" (Art. 201 C.C.). es decir; que a no ser que el marido
pruebe en juicio que le ha sido físicamente imposible tener acceso a su mujer durante el
período de la concepción o que en ese mismo período vivía separado de ella, se le tendrá
como padre del producto del parto de su conyugue.
Esta presunción, según la cual "pater is est quem nuptiae demonstrant" requiere, entonces, la
previa prueba de los elementos: matrimonio y maternidad. Partiendo del principio de que los
cónyuges cohabitan y se guardan fidelidad, el legislador presupone que el hijo de la mujer
casada lo es también de su marido, cualquiera sea la realidad de los hechos; y para desvirtuarlo,
será necesario demostrar lo contrario. Esta presunción es imperativa y esta imperatividad
impone las siguientes consecuencias:
 a) No importa que la partida de nacimiento señale otro padre, y
 b) Funciona aun en los matrimonios anulados, exceptuando sólo el caso en que la
mujer divorciada o viuda no espere el lapso de diez meses para contraer nuevas nupcias, el
caso de bigamia de la madre y el caso de ausencia declarada del padre.
Requisito sine qua non para que la presunción tenga vigencia es la concepción del hijo dentro
del matrimonio. Puesto que si ha tenido lugar antes, aunque el hijo haya nacido durante éste,
no podrá imputársele al marido.
Para determinar el momento de la concepción, por ser éste un hecho imposible de probar, se ha
recurrido a una hipótesis medica, conforme a la cual, el ser humano solo puede nacer vivo y
viable si su gestación ha durado no menos de 180 días (6 meses); y que el máximo periodo de
vida intrauterina es de 300 días (10 meses). Es de acuerdo con esta hipótesis (que sabemos no
siempre es exacta y hay numerosas pruebas de ello), como el legislador venezolano, al que lo de
los otros muchos países, ha establecido (Art. 201 y 202 C.C.) la presunción de paternidad,
ubicando el periodo de la concepción en el lapso de 121 días que corresponde desde los 180 días
mínimos a los 300 días máximo de vida intrauterina. O sea, que si a 300 días restamos 180,
nos quedaran 120; pero se fija el lapso en 121 por que se tiene en cuenta el dies ad quem, que
también debe ser computado.
Los términos de 180y 300 días y también el periodo legal de gestación, son presunciones iuris
et de iure y, por tanto, no admiten prueba en contrario.
 2) La filiación paterna de los hijos concebidos y nacidos fueras del matrimonio, se
establece legalmente por declaración voluntaria del padre. O después de su muerte por sus
ascendientes (Art. 209 C.C.).
Cuando no exista declaración voluntaria del padre, podrá probarse la paternidad judicialmente,
con todo género de pruebas, incluidos los exámenes o las experticias hematológicas y
haredobiologicas que hayan sido consideradas por el demando; siendo de advertir que la
negativa de este a someterse a tales pruebas será considerada como una presunción en su
contra (Art. 210 C.C.).
Así mismo, quedara establecida la paternidad cuando se pruebe la posesión de estado de hijo o
cuando se demuestre la cohabitación del padre durante el periodo de la concepción.
La declaración de la madre no basta para excluir la paternidad (Art. 212 C.C.).

Acciones relativas a la filiación


En torno a la filiación y dada la excepcional importancia de ésta en cuanto a la estructura de la
familia, el legislador ha establecido diversas acciones que confieren a su titular la facultad de
impugnar unas veces, y otras de reclamar determinada filiación, con el objeto de establecer con
toda precisión la que realmente le corresponde
Estas acciones relativas a la filiación, son acciones de estado, porque tienen por objeto obtener
una decisión judicial sobre el estado familiar de una persona; por 10 que más correctamente
podemos afirmar que son acciones declarativas de estado, puesto que la decisión se contrae a
declarar la preexistencia de un estado familiar.
CARACTERES COMUNES:
Las acciones sobre filiación varían, según incidan sobre la paternidad o sobre la maternidad y
según se trate de hijos nacidos dentro o fuera del matrimonio; sin embargo, dada su
misma naturaleza, tienen estas acciones los siguientes caracteres comunes:
l. Son indisponib1es.
2. Son imprescriptibles, y J. Se tramitan mediante igual procedimiento judicial.
1. Son indisponibles por ser de orden público y, por tanto, no pueden renunciarse ni relajarse
por voluntad del sujeto activo. Lo que significa que una vez intentada la acción, deberá
continuar hasta sentencia definitiva; Sin que pueda caber en este procedimiento la confesión
ficta, ni el desistimiento, ni el convenimiento, ni la transacción. Tampoco tiene cabida la
prueba de juramento; y la confesión sólo tendría valor de indicio.
La doctrina se pronuncia, no obstante, por admitir esta indisponibilidad sólo en el caso que
exista interés moral en el sujeto activo; pues cuando haya únicamente interés económico, opina
que sí se puede disponer de la acción; y señala que hay interés económico cuando la demanda
es interpuesta no directamente por el interesado (hijo, padre o madre) sino por los herederos
de éste.
2. Son imprescriptibles, por cuanto el orden público tiene interés en el esclarecimiento del
verdadero estado familiar y, por tanto, no se limita en el tiempo el derecho a ejercer las
acciones que persiguen tal esclarecimiento. Sin embargo, en aras de la estabilidad
del grupo familiar y ante la incertidumbre que puede derivar del no ejercicio de las acciones,
éstas en ciertos casos están sometidas a lapsos de caducidad.
3. En cuanto al Procedimiento, todas las acciones relativas a la filiación se tramitan mediante
juicio ordinario, salvo especiales disposiciones de la ley; ya personalmente, o a través de
mandatario con poder especial, y se deben intentar ante el Juez de Familia del domicilio del
hijo, cualquiera sea 'la edad de éste, con intervención del Ministerio Público (Art. 231 C.C.).

Acciones que inciden sobre la paternidad


Son dos las acciones de filiación que inciden sobre la paternidad:
Una que corresponde al padre y tiene por objeto desvirtuar la presunción de paternidad; es la
Impugnación de paternidad. Y otra que corresponde al hijo y tiene por objeto hacer que el
padre le reconozca su condición de tal: es la Inquisición de paternidad. La primera tiene lugar
sólo en el caso d~ existir matrimonio entre el padre y la madre del hijo cuya paternidad se
impugna. La segunda opera sólo en el caso de hijos extramatrimoniales, cuando éstos
pretenden que su presunto padre les reconozca como tales hijos.
Impugnación de la Paternidad:
De conformidad con lo dispuesto en el Art. 201 del c.c., "el marido se tiene como padre del hijo
nacido durante el matrimonio o dentro de los trescientos (300) días siguientes a su disolución
o anulación". Es esta presunción iuris tantum, que puede ser destruida mediante prueba en
contrario, en juicio contradictorio tendiente a impugnar esta paternidad.
La acción de Impugnación de paternidad deberá intentarse por el presunto padre, dentro de los
seis (6) meses contados desde la fecha del nacimiento del hijo o de conocido el fraude cuando
se ha ocultado el nacimiento; es decir, que está afectada de un término de caducidad, el cual sin
embargo no comenzará a contarse, en caso de interdicción del marido, sino después de su
rehabilitación (Art. 206 C.C.). Si el marido muere sin haber promovido la acción de
desconocimiento, pero antes que haya transcurrido el término útil para intentada, sus
herederos tendrán dos (2) meses para impugnar la paternidad, contados desde el día en que el
hijo haya entrado en posesión de los bienes del de cujus o del día en que los herederos hayan
sido turbados por aquél en tal posesión (Art. 207 C.C.).
La acción de impugnación deberá intentarse conjuntamente contra el hijo y la madre, en todos
los casos; y si el hijo está entredicho, el Tribunal ante el cual se intente la acción le nombrará
un tutor ad hoc que le represente en el juicio (Art. 205 C.C.).
La Impugnación de paternidad procede:
1. En caso de nacimiento del hijo antes de 180 días contados desde la celebración del
matrimonio (Art. 202 C.C.). En este caso, el marido puede limitarse a negar judicialmente su
paternidad, alegando y probando simplemente dos extremos: la fecha de su matrimonio y la
fecha del nacimiento del hijo de su esposa; lo cual podrá hacer mediante las respectivas copias
certificadas de las partidas de Registro Civil, sin que sean descartables otras pruebas que lleven
al ánimo del Juez la convicción de que el demandante no es el padre del hijo que se le atribuye.
Este, por su parte, tiene a su favor las pruebas que pueda aportar, para demostrar que, aunque
no ha nacido dentro del matrimonio, sí es hijo del marido de su madre.
Hay en este primer caso, sin embargo, tres excepciones contempladas en el C.C. (Art. 202), a
saber:
 a. - Si el marido supo antes de casarse, el embarazo de su futura esposa.
 b. Si después del nacimiento el marido ha admitido al hijo como suyo, asistiendo
personalmente o por medio de mandatario especial a la formación del acta de nacimiento o
comportándose como padre de cualquier otra manera; y c. Cuando el hijo no nació vivo. En
estos tres supuestos. No es procedente la acción de impugnación de paternidad.
2. En caso de nacimiento del hijo después de trescientos (300) días de presentada la demanda
de nulidad del matrimonio, o la demanda de divorcio, o de separación de cuerpos, o la solicitud
de ésta (Art. 203 C.c.).
 1. En caso de nacimiento del hijo antes de los ciento ochenta (180) días a contar desde
la fecha en que quedó definitivamente firme la sentencia que declaró sin lugar la demanda
de nulidad, de divorcio o de separación de cuerpos; o terminado el juicio (Art.
 2. (Art. 203 C.C.). El derecho de impugnar la paternidad por las causas señaladas en los
numerales 2 y 3, cesa para el marido que se ha reconciliado con su mujer. Aunque sea
temporalmente.
 3. En caso de imposibilidad de acceso físico con la esposa o de vivir separado de ella
durante el período de la concepción del hijo (Art.201 C.c.).
 4. Esta causa requiere la imposibilidad de relaciones sexuales entre los cónyuges,
débase ésta a cualquier circunstancia, siempre que el alejamiento sea físico y absoluto, lo
cual deberá probar el demandante mediante todo género de pruebas. Por ejemplo,
separación geográfica por viaje, separación física por hallarse éste preso e incomunicado,
etc., etc.
5. En caso de adulterio de la mujer, cuando ha ocurrido durante el período de la concepción y el
marido pruebe, además, otros hechos o circunstancias que verosímilmente concurran a excluir
su paternidad (Art. 205 e.e.).
No basta, como vemos, que la mujer haya cometido adulterio durante la época de la
concepción; pues, pudo ocurrir que en ese mismo lapso tuviera relaciones con su marido. Por
ello el legislador le exige que pruebe, además, otros hechos o circunstancias que
verosímilmente concurran a excluir su paternidad.
6. En caso de impotencia manifiesta y permanente, excepto si la concepción ha tenido lugar por
inseminación artificial con autorización del marido (Art. 204 C.C.).
Obsérvese que el legislador exige que la impotencia del marido sea manifiesta y además
permanente; es de':" que pueda comprobarse mediante simple examen físico por ser notable y
evidente; y que sea constante, sin solución de continuidad, como podría ser la que deriva de la
ablación de los genitales, por ejemplo.
Es decir, que se refiere a la impotencia coeundi, sin que se requiera que ésta sea anterior al
matrimonio, como se exige para la que determina la incapacidad matrimonial.
Además de los casos señalados, por vía de excepción y aunque no aparezca taxativamente
señalado en el c.c., parece lógico que en caso de establecerse la filiación materna por una
sentencia según la cual se demuestre que el producto del parto de la esposa no es hijo de su
marido, éste podrá igualmente impugnar la paternidad que le es atribuida por la presunción
"pater is est.... "
Para concluir 10 relativo a la impugnación de paternidad, debemos recordar que, de
conformidad con 10 pautado en el Art.212 del C.C., "la declaración de la madre no basta para
excluir la paternidad".
Inquisición de paternidad:
Procede esta acción cuando el hijo, nacido fuera de matrimonio, no ha sido reconocido
voluntariamente por su padre; y tiene por objeto establecer la filiación entre el sediciente hijo
y el hombre que éste pretende que es su padre.
La paternidad podrá demostrarse con todo género de pruebas, incluidos los exámenes o las
experticias hematológicas y heredo biológicas que hayan sido consentidas por el demandado.
La negativa de éste a someterse a dichas pruebas se considerará como una presunción en su
contra.
Quedará establecida la paternidad cuando se pruebe la posesión de estado de hijo o se
demuestre la cohabitación del padre y de la madre durante el periodo de la concepción, así
como la identidad del hijo con el concebido durante dicho periodo (Art. 210 C.C.). Pero si la
madre ha tenido en este mismo tiempo relaciones sexuales con otros hombres o ha practicado
la prostitución, será necesario para el hijo probar por otros medios la paternidad que demanda
(Art. 210 in fine).
La posesión de estado de hijo se establece por la existencia suficiente de hechos que indiquen
normalmente las relaciones de filiación y parentesco del individuo con la persona que pretende
que es su padre, así como con la familia a la cual dice pertenecer.
Los principales entre estos. Hechos son:
a) Que haya usado el apellido de quien pretende tener por padre.
b) Que éste le haya dispensado el trato de hijo y él a su vez el de padre, y
c) Que haya sido reconocido como hijo de su presunto padre por la familia de éste y por la
sociedad (Art. 214 C.c.).
La acción para inquirir la paternidad podrá ser intentada, en vida del hijo y durante su
minoridad, por su representante legal o por el Ministerio Público; así como por los organismos
de protección del menor, por el progenitor respecto del cual la filiación esté establecida y por
los ascendientes de éste. Después que el hijo ha alcanzado la mayoría o ha contraído
matrimonio, la acción corresponde sólo a él.
La acción de inquisición de paternidad es imprescriptible, si se intenta frente al padre; pero
cuando se intenta contra los' herederos de éste, debe hacerse dentro de los cinco (5) años
siguientes a su muerte (Art. 225 C.C.). Es decir que, de acuerdo con esta disposición legal,
la legitimación pasiva en juicio corresponde al padre en vida de ésta; y después de su muerte a
quienes sean sus herederos.
El reconocimiento del hijo por la parte demandada pone término al juicio sobre filiación, en
todos los casos en que tal reconocimiento sea admisible de conformidad con las disposiciones
del Código Civil (Art.232).
Como en todas las acciones relativas a filiación, es competente para conocer de la de
inquisición de paternidad el Juez de Familia del domicilio del hijo, cualquiera sea la edad de
éste y, siempre, con intervención del Fiscal del Ministerio Público (Art. 231 C.C.).

Acciones que inciden sobre la maternidad


Igual que ocurre respecto a la paternidad, en relación con la maternidad pueden plantearse dos
acciones: Una cuyo objeto es desvirtuar la relación de filiación entre una persona y otra que
ésta pretende tener por madre; la otra, por el contrario, encaminada a probar quién es la madre
de una persona determinada. La primera se denomina impugnación de estado y la segunda,
reclamación de estado.
Impugnación de estado: Procede esta acción cuando se desea desvirtuar la filiación materna de
una persona nacida dentro del matrimonio, en razón de su partida de nacimiento o de su
posesión de estado.
En efecto, tal como lo señala el Art. 199 del C.C., cuando faltan la posesión de estado y la
partida de nacimiento, podrá demandarse al pretendido hijo la inexistencia de su filiación
materna y éste deberá, mediante todo género de prueba, demostrar su filiación. El actor en
tales casos será todo aquél que tenga interés legítimo y actual y el demandado lo será el
pretendido hijo o sus herederos. No podrá intentarse la acción cuando exista partida de
nacimiento conforme con la posesión de estado; sin embargo, aún en este caso, será procedente
la acción cuando el hijo fue inscrito bajo falso nombre, o bien si se trata de suposición o
sustitución de parto.
Reclamación de estado: Dos hipótesis pueden presentarse en cuanto a la acción para establecer
la filiación materna: Una en el caso de hijo nacido de matrimonio; la otra cuando se trata del
hijo de madre soltera llamada más generalmente inquisición de maternidad.
Mediante el ejercicio-de la reclamación de estado, el sediciente hijo pretende demostrar, por
medios diferentes de la partida de nacimiento y de la posesión de estado, quién es su verdadera
madre.
Esta, por hipótesis, era casada para la fecha de la concepción del hijo o al menos para la de su
nacimiento.
Esta acción sólo procede cuando la maternidad debe probarse por cualesquiera medios
diferentes de la partida de nacimiento y de la posesión de estado conformes; es decir:
1) Cuando no existen ni partida de nacimiento ni posesión de estado.
2) Cuando carece de posesión de estado y alega que su partida de nacimiento es falsa.
3) Cuando tiene partida de nacimiento y pretende que su posesión de estado es falsa.
4) Cuando las partidas de nacimiento y la posesión de estado se contradicen, y 5) Cuando alega
suposición o sustitución de parto.
El actor en esta acción es el propio hijo, dado su carácter esencialmente moral. La parte
demandada puede serio la madre presunta o sus herederos, pero nada se opone a que se
demande también al cónyuge de ésta.
La inquisición de maternidad, equivalente a la anterior, aunque se refiere a los hijos nacidos de
uniones extramatrimoniales, tiende a establecer legalmente el vínculo de filiación existente
entre una persona y la mujer que pretende es su madre, cuando ésta no le ha reconocido
voluntariamente.
Las acciones de inquisición de maternidad, lo mismo que las de paternidad, son
imprescriptibles cuando la parte demandada lo es la madre; pero si lo son los herederos de
ésta, no podrá intentarse sino dentro de los cinco (5) años siguientes a su muerte (Art. 228
C.C.).
En ambas acciones la parte actora es el pretendido hijo, exclusivamente cuando es mayor de
edad, o cuando, siendo menor, haya contraído matrimonio; en caso contrario, es decir, durante
la minoridad del hijo, puede intentar la acción el Ministerio Público, los organismos
encargados de la protección del menor y el otro progenitor respecto del cual la filiación esté
establecida o los ascendientes de éste.
Cuando el hijo hubiere muerto sin reclamar su filiación, podrán intentar la acción sus
herederos o descendientes, contra los herederos de la progenitora cuya filiación deba ser
establecida, siempre que aquél haya muerto siendo menor, o hasta los dos (2) años siguientes a
su mayoridad (Art. 229 C.c.); es decir, hasta la fecha en que el fallecido hubiera cumplido
veinte (20) años de edad.
 
 
Otroooooo

La prueba técnica ADN en los procesos sobre filiación


Liseth Mojica Gómez*

* Catedrática de la Facultad de Jurisprudencia, Universidad del Rosario. Bogotá, Colombia.

1. INTRODUCCIÓN

Hasta hace algunos años, legislaciones como la inglesa, la española y la francesa


imposibilitaban el reconocimiento de los hijos naturales; hoy en día se puede afirmar que
todas permiten que se reconozcan los hijos extramatrimoniales, al establecer, por una
parte, la posibilidad de que se investigue la paternidad o la maternidad y, por otra, el que
se pueda impugnar la una o la otra, cuando se establece que a quien se le imputó un hijo
como fecundado por él, no es realmente quien lo engendró.

El derecho a conocer la verdadera filiación es el derecho a la identidad de la persona


humana; en la actualidad y gracias a la ciencia el concepto jurídico de filiación legitima, ya
sea matrimonial o extramatrimonial, se encuentra ligado y al alcance de la verdadera y
única realidad biológica.

El establecimiento con certeza de una paternidad o de una maternidad, ante las instancias
judiciales, reclama la existencia de normas que permitan que todo individuo sea tenido
como hijo de quien biológicamente lo procreó o fecundó. En este orden de ideas, todo
ordenamiento legal que obstruya el derecho a la verdad en los asuntos de filiación, atenta
contra los derechos constitucionales. Conocer la verdad biológica frente a una supuesta
paternidad o maternidad es un derecho y para ello se debe acudir al estudio científico que
permite despejar toda duda con certeza absoluta.

Por ser la familia la institución base de nuestra sociedad, los asuntos de filiación (como son
la investigación de paternidad o de maternidad y su impugnación) sólo pueden ventilarse y
fallarse en aras a la verdad biológica, excepción hecha de actos de voluntad que escapan a
esa realidad biológica, como es el caso de los procesos de adopción. Hoy en día, el derecho
a conocer la verdadera identidad personal reclama normas que permitan y agilicen este tipo
de procesos; todo ser humano tiene derecho a ser tenido como hijo de quien
biológicamente lo procreó.

2. EVOLUCIÓN HISTÓRICA
El problema de la determinación de la paternidad es tan antiguo como la humanidad, y
hasta 1900 el único criterio que permitía establecerla o negarla era el parecido físico, a
todas luces un medio poco idóneo y totalmente arbitrario, que conducía a resultados
subjetivos carentes de fiabilidad, y de todo fundamento legal y fáctico.

Posteriormente, se abrió un nuevo sendero con la práctica de pruebas biológicas, acerca de


las cuales no entraremos en detalles, ya que sus connotaciones y particularidades
corresponden a la rama de la medicina. No obstante, a grandes rasgos y de manera
histórica:

En el año 1900 Karl Landsteiner descubrió el sistema de los grupos sanguíneos mediante
los antígenos tipo A o tipo B que podían estar o no asociados a los glóbulos rojos, sistema
éste que se conoce como ABO y que fue reconocido por la comunidad científica hacia el año
1915 y dilucidado como patrón de herencia en el año 1924 por Felix Berstein.

El sistema ABO se utilizó legalmente por primera vez y con gran eco en 1924, en Alemania;
pero su utilización procedía de las justicias italiana, escandinava y austriaca. En los Estados
Unidos de Norteamérica, la asociación médica aprobó el uso de esta técnica en 1937.

Los resultados obtenidos con el sistema ABO dependían de la preponderancia de los grupos
sanguíneos y de las similitudes étnicas de la población: en los casos de poblaciones
diversas, la paternidad queda descartada y su probabilidad, totalmente descartada, esto es,
arrojaba como resultado una paternidad del 0%, pero en los casos de similitud de grupos
sanguíneos y etnia el resultado era el de la probabilidad de la paternidad biológica sin
establecer un índice de certeza; pero entre más común era el grupo sanguíneo, menor era
la probabilidad de paternidad.

Cabe mencionar que no obstante las investigaciones realizadas con el sistema ABO, en
1927 se descubrieron las técnicas MNSs y P.

En 1940 Levine y Stetson descubrieron el sistema Rh, y se empezaron a describir nuevos


subgrupos; sin embargo, con este sistema, al igual que con el anterior, lo único que se
podía establecer con 100% de certeza era la exclusión de la paternidad, es decir, cuando el
pretendido progenitor no era el procreador biológico.

El descubrimiento de los antígenos asociados a los glóbulos blancos, conocido como sistema
HLA, también permite establecer la paternidad mediante patrones hereditarios, pero de una
manera más sofisticada. Cuando se empezó a utilizar la técnica ADN, aplicada a los
antígenos HLA, se llegó a resultados de paternidad probable con índice de certeza
aproximado al 80%, valor que aún era insuficiente para designar inequívocamente al
verdadero padre biológico.

En 1985 se descubrió por primera vez el uso de la técnica RFLP, en la que se utilizan
enzimas llamadas de restricción, para cortar el ADN mediante electroforesis en gel, en
sitios conocidos por su gran variabilidad, en la búsqueda de una secuencia específica, que
varía de una persona a otra.

Con los avances a los que ha permitido llegar la ciencia, la técnica ADN se utilizó por
primera vez en 1987, en los Estados Unidos de Norteamérica, por un tribunal de la Florida.
Esta técnica consiste en un estudio molecular que permite generar perfiles genéticos para
así establecer si el presunto padre o madre debe ser incluido o excluido. La exclusión de la
paternidad o de la maternidad mediante la técnica ADN es irrefutable.
Desde mediados de la década de los noventa, esta técnica se encuentra catalogada como
tecnología de punta, ya que ofrece certeza, permite establecer la verdad y descartar toda
posibilidad de duda; el ácido desoxirribonucleico ADN está formado por un azúcar (2-
desoxiD-ribosa), por ácido fosfórico y por bases nitrogenadas (adenina, guanina, citosina y
timina). La estructura del ADN es de doble hélice y se encuentra en las bases nitrogenadas
(adenina con timina y guanina con citosina), en el interior de la molécula, y los grupos
fosfatos en el exterior.

Las dos hebras que forman las cadenas del ADN presentan orientaciones opuestas y
pueden separarse mediante la acción del calor o de determinadas sustancias químicas,
hecho que da lugar al proceso de desnaturalización, el cual es reversible. El ADN es el
soporte físico que contiene toda la información genética y se define como gen cada una de
las porciones de su molécula que se pueden traducir en una proteína. El ADN que
determina el código genético se encuentra físicamente en el núcleo de las células en
distintos sectores que forman los cromosomas. Las diferencias entre el ADN de los
diferentes individuos se hallan en la porción y en el orden como se suceden los pares de
bases de púricas y pirimidínicas, que son las que establecen la especificidad y la diferencia
para cada individuo.

3. DEFINICIÓN DE LA PRUEBA TÉCNICA ADN EN LOS PROCESOS SOBRE


FILIACIÓN

La prueba de paternidad o de maternidad basada en el ácido desoxirribonucleico ADN es la


técnica médica, biológica y científica que permite establecer la identidad genética (huella
genética única que permite conocer la verdad biológica sin lugar a equívocos) y la relación
filial legítima respecto de quien engendró o procreó. El ADN es el material genético que se
encuentra en las células del cuerpo, por eso es el medio más idóneo en materia de
identificación, es la huella genética de cada ser humano, es vida.

Cada célula tiene 46 cromosomas, a excepción de los espermatozoides y los óvulos que tan
sólo tienen, 23 cromosomas cada uno, por ende es necesaria la unión de estos dos
(espermatozoide y óvulo), que suman 46 cromosomas para procrear una persona. Se
observa así que cada individuo recibe la mitad de su material genético del padre biológico y
la otra mitad de la madre biológica. Los cromosomas son las estructuras del núcleo de la
célula eucariota que consiste en moléculas de ADN que contienen genes y proteínas;
genotipo es el conjunto de genes de un individuo o de una especie (son los genes los que
contienen la información genética hereditaria), y los alelos son las formas alternativas de
cada gen que se heredan del padre o de la madre, los cuales controlan cada rasgo o
carácter.

La prueba de ADN es la prueba más precisa para determinar la paternidad o la maternidad,


según el caso; cuando el hijo no contiene dos o más de los marcadores genéticos del
supuesto padre o madre, significa que biológicamente él o ella no es el padre o la madre;
queda así, gracias a la ciencia, excluida la paternidad o la maternidad, en un 100%, es
decir, con una certeza total, que se traduce en una paternidad o maternidad del 0%.

4. APLICACIONES

Las aplicaciones del estudio de paternidad en lo referente a la filiación son varias, podemos
citar: la determinación misma de la paternidad o de la maternidad, el análisis de paternidad
o de maternidad de progenitores desaparecidos mediante pruebas a los familiares y la
determinación de relaciones familiares (hermanos, abuelos, tíos, etc.).
Cabe mencionar que la técnica del ADN se puede utilizar asimismo para identificar
individuos en actos delictivos, accidentes, violaciones y muchos otros estudios de interés
médico legal.

5. EVOLUCIÓN PROBATORIA EN LOS PROCESOS SOBRE FILIACIÓN EN COLOMBIA

Hasta la década de los sesenta las pruebas para establecer paternidad eran totalmente
indirectas, se basaban en testimonios y en el supuesto trato sexual entre el pretendido
padre y la madre. Una vez establecido el trato personal y social, se infería el trato sexual y
dentro de los límites del artículo 92 del Código Civil se permitía presumir la paternidad e
incluso se declaraba judicialmente.

Como consecuencia de que los avances científicos llegaron a permitir que las pruebas
biológicas descartaran o confirmaran de manera determinante una paternidad o una
maternidad, en la legislación colombiana, mediante el artículo 7º de la Ley 75 de 1968, 1 se
estableció por primera vez la realización de exámenes médico-biológicos en todos los
juicios tendientes a la investigación de la paternidad o la maternidad, prueba ésta que
debía decretarse de oficio o a solicitud de la parte, y respecto de las personas que fueran
necesarias para reconocer pericialmente las características heredobiológicas paralelas entre
el hijo y su presunto padre o madre; asimismo, establecía que se debía ordenar la
peritación antropoheredobiológica, con análisis de los grupos y factores sanguíneos, y de
los caracteres patológicos, morfológicos e intelectuales transmisibles

En este orden de ideas, desde 1968 las pruebas médicas y biológicas venían siendo de
forzosa práctica en todos los procesos de investigación de la paternidad o de la maternidad.
Para la época de la Ley 75 la prueba más importante y reconocida era la de los grupos
sanguíneos, la cual permitía formular paternidades posibles o imposibles, según la
hemoclasificación, con un alto grado de eficacia y de certeza cuando se trataba de
resultados negativos, pero sin ningún índice de seguridad cuando eran positivos. Así, lo
único que quedaba realmente probado como verdad era la paternidad o maternidad
excluida o descartada, cuando el resultado era negativo, ya que frente a resultados
positivos, el presunto padre o madre podía ser o no ser efectivamente. Una constatación
similar, esto es, irrefutable al tratarse de resultados negativos, y con principios de duda en
resultados positivos, era la que quedaba establecida con las técnicas médico-científicas que
se usaron posteriormente y que antecedieron a la técnica ADN, en el establecimiento de la
paternidad o maternidad.

Recientemente, gracias a los avances de la ciencia, la técnica ADN permitió establecer la


paternidad o la maternidad, ya sea compatible o incompatible, con índices de certeza
absoluta en porcentajes superiores al 99,99%. En los asuntos de filiación los avances de la
ciencia han superado y opacado las formulaciones legales, por lo que el juez debe
enfrentarlos, pues no puede desconocerlos en modo alguno y, por el contrario, le prestan
su sapiencia como una herramienta probatoria de gran valor, que supera y se opone a
cualquier otro medio de probatorio. El juez no puede dejar de lado la ciencia cuando la
verdad que predica ha llegado a su conocimiento.

Un primer progreso normativo para la práctica de esta prueba, en todos los procesos
tendientes a establecer filiación, se dio con el Acuerdo 1224 del 27 de junio de 2001, del
Consejo Superior de la Judicatura, en virtud del cual los juzgados de familia y promiscuos
de familia, para establecer la paternidad y a efectos de que se practicara la prueba
genética, debían diligenciar un formulario y remitirlo al Instituto Colombiano de Bienestar
Familiar (ICBF). Este Acuerdo, que hoy en día se encuentra superado por la Ley 721 del 24
de diciembre de 2001, presentaba un gran inconveniente: al no contar el ICBF con
laboratorio de genética, con reactivos, con personal calificado para la práctica misma de la
prueba de paternidad técnica ADN, ésta lo hacía el Instituto de Medicina Legal, donde el
cúmulo de trabajo, y en ocasiones la carencia de reactivos y elementos, hacían que su
realización tuviera más de dos años de espera, contados desde que el juez la ordenaba;
circunstancia ésta que generaba un retardo y una ineficiencia abrupta de la justicia.

La jurisprudencia desarrollada en los últimos años reconoce el valor y el mérito probatorio


de las pruebas científicas de paternidad o maternidad realizadas con la técnica ADN y las
considera como apoyo y pilar del veredicto del juez. Al respecto, consideramos oportuno
citar algunos apartes de una sentencia2 proferida por la Corte Suprema de Justicia, así:

La evidencia palpable de los avances de la ciencia a límites


insospechados, ha puesto en aprietos la tarea del juez, quien so
pretexto de tener ante sí el universo jurídico concebido de manera
que en él quepan cualesquiera situaciones jurídicas, a modo de
plenitud hermética de que ha hablado algún autor, deberá siempre
fallar secundum jus [...]
En el desarrollo de la filiación como institución jurídica y del
derecho fundamental de toda persona a saber quienes son sus
padres, la ciencia ha prestado, quizá como en ningún otro campo,
un innegable apoyo al derecho familiar y probatorio, al punto de
escucharse hoy apresuradas voces que claman porque se defiera
al experto y no al juez la declaración acerca de la paternidad o
maternidad, cuando aquélla o ésta es impugnada o investigada,
no sólo porque, al decir de algunos, ya no es menester contar con
un acervo probatorio que permita "inferir" la paternidad o la
maternidad, sino porque la pregunta sobre la paternidad es, antes
que jurídica, biológica, esto es, científica.
[...]
De allí se desprende, en segundo término, que a pesar de poder
estar consagrada en Colombia la investigación de la paternidad
mediante un sistema restringido de presunciones que rinde culto a
las reglas de la experiencia plasmadas positivamente en la ley,
esa otra fuente de conocimiento sistemático que es la ciencia, no
puede dejarse a un lado por el juez, cuando la verdad que ella
predica ha llegado a su conocimiento...
[...]
Pero debe en primera medida, asumir que en la investigación de la
paternidad, la ciencia actual —a la que debe acudir no sólo en
virtud de lo previsto en el artículo 7º de la Ley 75 de 1968 sino
con miras en la búsqueda de la verdad histórica—, le presta tal
apoyo a su veredicto, que se constituye en pilar de su sentencia.
[...]
Se reitera, hoy es posible destacar que esas probanzas indirectas
(testimonios, cartas, seducción dolosa) no tienen el peso
probatorio de las pruebas biológicas. Porque la paternidad
biológica, esto es, la posibilidad de que un gameto femenino haya
sido fecundado por un determinado hombre [...], es hoy posible
demostrarla con alcances de certidumbre casi absoluta, mediante
procedimientos que el medio científico colombiano ofrece y que
distan hoy mucho de los que el legislador de 1968 pudo tener en
mente.
En efecto, este mismo proceso muestra cómo diversos y cada vez
más seguros exámenes de paternidad se fueron implementando,
al punto de llegar a uno que establece una paternidad en
porcentaje superior al 99%. Pero este avance, que en Colombia se
inició con las pruebas sobre grupos sanguíneos a que hizo
referencia el legislador de 1968, y pasó por sistemas HLA (clase I
—serología— clase I y II —molecular—), VNTR/RFLP, inserciones
ALU, STR, cromosoma Y, etc., no se ha recogido en la práctica
judicial con la importancia que merece ni ha sido, la verdad sea
dicha, comprendido en sus justos alcances. Y así, se le ha dado
(por una suerte de inercia que más que resistencia a los cambios
denota un retraso que históricamente evidencia el derecho frente
a la ciencia) más importancia probatoria a los medios que pueden
llegar a acreditar la relación sexual, cuando miradas las cosas hoy
con la ayuda que la ciencia presta, no puede ser éste el fin de la
investigación judicial, dado que sólo es un paso —de varios
posibles— para llegar a la paternidad.

En los asuntos sobre filiación, la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia, dentro de


la cual se destaca el fallo citado, ha reconocido y avalado las pruebas científicas para
establecer paternidad o maternidad, ya sea que éstas se investiguen o se impugnen, a
punto tal que las coloca por encima de cualquier otro medio probatorio.

Como consecuencia del soporte y ayuda que los avances de la ciencia prestan
probatoriamente en los asuntos de filiación y del reconocimiento jurisprudencial que se ha
hecho a las pruebas de paternidad realizadas con la técnica, se hizo necesario modificar la
legislación nacional y quedaron plenamente reconocidas, plasmadas y exigidas las pruebas
de paternidad o maternidad técnica ADN, para dilucidar de una manera clara, efectiva,
eficiente y rápida los procesos sobre filiación; de esta manera surgió y se expidió la hoy
vigente Ley 721 del 24 de diciembre de 2001, de la cual destacamos:

 En todos aquellos procesos en los que se pretenda establecer paternidad o


maternidad, el juez, incluso de oficio, debe ordenar la práctica de la prueba
científica técnica ADN, que ofrezca un índice de certeza superior al 99,9%, 3 prueba
ésta que atendiendo su naturaleza y especificidad, debe ser practicada por un
laboratorio aprobado por la autoridad competente y que se ajuste a los estándares
internacionales establecidos en la materia.
 En los procesos para establecer filiación, sólo en los casos en que es absolutamente
imposible disponer de la información de la prueba de ADN, se podrá recurrir a las
pruebas testimoniales, documentales y demás medios probatorios que conlleven a
emitir el fallo correspondiente.
 Una vez obtenido el dictamen médico, éste se debe correr traslado a las partes por
tres días, las cuales podrán solicitar dentro de este término la aclaración, la
modificación o la objeción, conforme lo establece el artículo 238 del Código de
Procedimiento Civil. La persona que solicite nuevamente la práctica de la prueba
deberá asumir los costos; en caso de no asumirlo, no se decretará la prueba. Es de
mencionar que la ley dispone que quienes adulteren o manipulen el resultado de la
prueba se hacen acreedores a las sanciones penales correspondientes.
 El costo de la prueba corre a cargo de quien la solicite, salvo que medie amparo de
pobreza, evento en el cual lo asume el Estado.
 El procedimiento de los juicios para establecer paternidad o maternidad debe ser
especial preferente.4 Así, una vez presentada la demanda, en el auto admisorio el
juez debe ordenar la prueba, y en notificación personal al demandado, se le debe
correr un traslado de ocho días hábiles para contestarla. Una vez se tenga el
resultado de la prueba, el juez debe entrar a dictar sentencia. En caso de renuencia
a la prueba, éste, sin más trámites, mediante sentencia, procederá a declarar la
paternidad o maternidad que se imputa.

Hoy en día, en el ámbito internacional, la investigación de la paternidad y de la maternidad


es reconocida y admitida mediante pruebas biológicas y científicas. En ninguna legislación
el juez puede obviar sus resultados, que cuentan con un alto grado, por no decir absoluto,
de confiabilidad y certeza, pues no deja margen de duda.

La práctica de la prueba de paternidad dentro de los procesos de filiación es una


herramienta que sirve, entre otros:

 A un hombre que intenta reconocer o ganar la custodia y los derechos sobre un hijo
 A un hombre que quiere confirmar su paternidad respecto de un hijo que se le
imputa.
 A un hombre o a una madre que quiere entrar determinar la paternidad de una
criatura antes de su nacimiento.
 A una persona que quiere establecer su filiación respecto de un difunto.
 A un descendiente que quiere establecer su ascendencia legítima.

En legislaciones como la española el juez no admite la demanda sin un principio de prueba


de los hechos en que se funde, esto significa que tanto para que se reconozca al hijo
natural como para que se impugne el reconocimiento de un hijo, en el momento de ejercer
la acción se debe presentar una prueba suficiente capaz de fundamentar o de soportar lo
pretendido.

Con la técnica del ADN se ha pasado de presunciones indeterminadas y controvertidas a la


certeza que va más allá de toda duda razonable. Esta prueba permite absolver inocentes
condenados injustamente y condenar culpables que han buscado y logrado eludir la justicia.

Gracias a la técnica del ADN se protegen y se garantizan los derechos fundamentales de la


persona y se permite conocer la verdadera filiación, esto es: al padre saber si es realmente
el progenitor, al hijo conocer la verdad sobre su supuesto padre y a la madre saber quién
es el padre de sus hijos. La prueba genética de paternidad ADN es una prueba reina no sólo
frente a los asuntos de filiación, sino a la promiscuidad de la mujer, tema de difícil prueba
en otras épocas, donde imperaban los testimonios y las probanzas indirectas.

6. PRÁCTICA DE LA PRUEBA DE PATERNIDAD ADN

La prueba de paternidad ADN es tan poderosa, seria y confiable que se puede ejecutar aun
cuando la madre no asiste; la prueba de dúo es legal, efectiva y confiable, en el mismo
grado de certeza que la prueba de trío. La referencia en cuanto a la asistencia de la madre
se establece con fines meramente presenciales, y en especial para procesos dentro de los
cuales el hijo es menor de edad y respecto del cual aún no se ha producido el
reconocimiento por parte del supuesto padre, por eso la madre, como única representante
de su hijo, tiene el derecho a presenciar la prueba.
La toma de muestra a la madre no altera ni afecta el resultado respecto a la filiación entre
el hijo y el supuesto padre. En algunas legislaciones, como la brasileña, la referencia a la
madre se hace con fines meramente administrativos, esto es, de autorización, pero no para
que sea tenida como parte para la toma de muestras. En todo caso, sea cual sea el número
que se tome, el resultado siempre será comparativo de dúo entre las dos personas respecto
de las cuales se pretende establecer la filiación (el hijo y su supuesto padre o madre),
según el caso que se esté investigando o impugnando.

Tratándose de presunto padre, presunta madre o hijos fallecidos, ausentes o


desaparecidos,5 el laboratorio autorizado para realizar la prueba con marcadores genéticos
de ADN, a fin de establecer la paternidad o maternidad, debe utilizar los procedimientos
que le permitan alcanzar una probabilidad de parentesco superior al 99,99%, o la exclusión
de la paternidad o maternidad. Cuando no se alcancen estos valores, el dictamen debe
indicar que los resultados no son concluyentes.

Si es necesario exhumar un cadáver, un juez del conocimiento debe autorizarlo, mientras


que los organismos oficiales correspondientes lo ejecutan en presencia del juez de
conocimiento o su representante, esto, independientemente del laboratorio que vaya a
realizar la prueba, el cual debe designar a un técnico que se encargue de seleccionar y de
tomar adecuadamente las muestras requeridas para la realización de la prueba, y que debe
preservar, en todo caso, la cadena de custodia de los elementos que se le entregan.

Lo importante de la práctica de esta prueba es que es de obligatoria ejecución en todos los


procesos para establecer filiación, y que su dictamen ofrece certeza y seguridad, pues es
una prueba irrefutable que supera y opaca cualquier otro medio probatorio.

Las características hereditarias que trasmite un padre a su hijo se reflejan en la molécula


de ADN, que se encuentra constituida por nucleótidos que se unen y forman estructuras
complejas (ahí se encuentran todos los genes). Es de reiterar que la mitad de la
información genética proviene de la madre y la otra mitad del padre, por lo tanto, no hay
margen de error en los resultados.

El ADN se encuentra en la estructura de las células (boca, huesos, sangre), y es el que


permite establecer la paternidad o la maternidad.

Cuando el ADN se compacta, forma los cromosomas (los seres humanos tienen 46
cromosomas, de los cuales 22 vienen de cada progenitor y los dos restantes son sexuales).
Cada uno se compone de subunidades denominadas genes, que se encuentran constituidas
por ácido desoxirribonucleico (ADN); de esta manera, el conjunto de genes de cada ser
humano se denomina genotipo y el conjunto de características hereditarias que posee cada
individuo de una especie se denomina fenotipo, y la mitad que se recibe o hereda de cada
progenitor se denomina halotipo.

Para la práctica de la prueba de paternidad o maternidad técnica ADN no existen


restricciones en cuanto a la edad. Esta prueba puede ser simple o compleja.

6.1 Prueba de paternidad o maternidad simple

La prueba de paternidad es simple cuando se cuenta con la presencia de las personas


físicas respecto de las cuales se pretende establecer la filiación, en este caso se requiere
muestra de sangre del hijo y del hombre o de la mujer a quien se le imputa la paternidad o
maternidad.

6.2 Prueba de paternidad o maternidad compleja


La prueba de paternidad es compleja cuando al no disponer de la muestra de sangre se
acude para practicarla a muestras de semen, pelo (debe ser arrancado y debe tener el
bulbo), saliva, diente o hueso.

7. DICTAMEN MÉDICO DEL ADN

El dictamen médico del ADN describe los marcadores genéticos moleculares empleados, el
fenotipo y el genotipo obtenido de cada uno de los integrantes del estudio, los cálculos
estadísticos que determinan la probabilidad de paternidad y las conclusiones definitivas.

El dictamen que rinden los laboratorios expertos, y que son autoridad en el tema, garantiza
la confiabilidad y la eficacia de la prueba, por su especial naturaleza y características, así
como por el grado de certeza que ofrece, lo que se traduce en que raya con la seguridad,
por ser una prueba incontestable, y en legislaciones como la española, una vez que se
practica y se obtiene el resultado, se le reconoce plena validez probatoria y judicial.

De conformidad con la Ley 721 del 24 de diciembre de 2001, el dictamen de la prueba


científica técnica ADN que se presente al juez debe contener como mínimo:

 El nombre y la identificación completa de aquellos a quienes se les practicó la


prueba.
 Los valores individuales y acumulados del índice de paternidad o maternidad y una
probabilidad.
 Una breve reseña de la técnica y del procedimiento utilizados para rendir el
dictamen.
 Las frecuencias poblacionales utilizadas.
 La descripción del control de calidad que se realiza en el laboratorio.

8. ACREDITACIÓN Y CERTIFICACIÓN DE LOS LABORATORIOS

Los laboratorios idóneos para realizar pruebas de paternidad cuentan con acreditación de la
Superintendencia de Industria y Comercio, la cual se realiza cada cinco años, pero se hace
una ratificación anual. No obstante, la Ley 721 del 24 de diciembre de 2001 exige que los
laboratorios idóneos para realizar estas pruebas y que han de obrar en las instancias
judiciales deber ser certificados por una comisión especial, la cual fue creada mediante el
Decreto 1562 del 24 de julio de 2002.

En este orden de ideas, por disposición del gobierno nacional, ya se creó la Comisión de
Acreditación y Vigilancia,6 encargada de certificar a los laboratorios autorizados para
realizar las pruebas de paternidad técnica ADN. Esta comisión está integrada por delegados
del Ministerio de Salud, del Ministerio de Justicia y del Derecho, del ICBF, de las Sociedades
Científicas, del Ministerio Público, de los laboratorios privados de genética y de los
laboratorios públicos. La Comisión de Acreditación y Vigilancia deberá garantizar la
eficiencia científica, veracidad y transparencia de las pruebas con marcadores genéticos de
ADN y podrá reglamentar la realización de ejercicios de control y calidad, rigiéndose por los
procedimientos establecidos internacionalmente y por la Comunidad Científica de Genética
Forense.

La acreditación y certificación nacional de los laboratorios debe realizarse anualmente con


sujeción a los estándares internacionales establecidos para pruebas de paternidad o
maternidad. Básicamente, los criterios para evaluar los laboratorios de genética son:

 Imparcialidad, independencia e integridad.


 Sistema de calidad.
 Estructura organizacional, instalaciones y condiciones ambientales.
 Personal idóneo y calificado.
 Equipos y materiales de referencia, trazabilidad metrológica y analítica.
 Métodos y procedimientos.
 Informes y certificados.
 Documentación y registros.
 Manejo de muestras y contramuestras.
 Servicios y suministros internos.
 Auditorías.
 Cooperación con el ente acreditador, con los clientes y con otros laboratorios.

9. CONCLUSIONES

La prueba biológica técnica ADN permite establecer de manera indiscutible, cierta y segura
la verdad en los procesos tendientes a establecer la filiación legitima, ya sea mediante la
investigación o la impugnación. La filiación legitima, bien sea matrimonial o
extramatrimonial, es una sola y debe obedecer a la verdad biológica. Asunto diferente es el
caso de las inseminaciones artificiales y de los alquileres de vientre, donde se deben tener
en cuenta el consentimiento y la voluntad de las personas involucradas; de igual manera, la
adopción obedece a un proceso voluntario y específico que requiere un trámite y unos
requisitos, en estos casos lo que entra en juego y en discusión es el derecho del concebido
artificialmente o por inseminación y del adoptado, a conocer su verdadera ascendencia, sus
raíces biológicas.

Anteriormente, cuando nuestra legislación no consagraba la obligatoriedad de la prueba


biológica de paternidad,7 los procesos contra falsos padres eran abundantes, y en un
número considerable de casos se condenaba a reconocer a inocentes que no habían sido
progenitores de quienes se les imputaba como sus hijos. Asimismo, existía un gran
volumen de procesos en los que padres que realmente habían procreado buscaban eludir el
reconocimiento de sus hijos y lo lograban. Hoy en día se pueden seguir abriendo procesos
contra cualquier hombre a quien se le pretenda imputar una paternidad, pero
afortunadamente se estableció la obligatoriedad del recurso a la ciencia y a la medicina,
recurso éste que es fiable y que permite sentencias justas y seguras, ya que si dos o más
de los marcadores analizados no coinciden la exclusión es del 100% y la probabilidad del
0%.

En materia de impugnación, la ciencia y la medicina también prestan su ayuda y son una


herramienta muy valiosa para quienes, cualquiera que sea el medio, procedían o proceden
aún a reconocer o legitimar hijos que se les imputan y que creen haber procreado; pero
que gracias a los avances científicos de hoy tienen acceso a la real y única verdad acerca
de la paternidad, con lo que cuentan, en consecuencia, con las acciones pertinentes ante la
jurisdicción de familia.

La prueba ADN es mucho más que un examen de sangre, es el método más preciso que
existe para identificar criminales, para resolver enigmas históricos y para efectuar
investigaciones sobre filiación, ya que el ADN de cada persona es único; su resultado es
más preciso que el que requieren las cortes y los jurados, y para practicarla ni existen
requisitos específicos, ni preparación, ni restricción de edad, incluso puede practicarse de
manera prenatal, ya que el ADN queda fijado al momento de la concepción.

OTROOOOOO

A CC I O N E S RELATIVAS A LA FILIACIÓN
En torno a la filiación y dada la excepcional importancia de ésta en cuanto a la estructura de la familia, el
legislador ha establecido diversas acciones que confieren a su titular la facultad de impugnar unas veces, y otras
de reclamar determinada filiación, con el objeto de establecer con toda precisión la que realmente le
corresponde
Estas acciones relativas a la filiación, son acciones de estado, porque tienen por objeto obtener una decisión
judicial sobre el estado familiar de una persona; por 10 que más correctamente podemos afirmar que son
acciones declarativas de estado, puesto que la decisión se contrae a declarar la preexistencia de un estado
familiar.
CARACTERES COMUNES:
Las acciones sobre filiación varían, según incidan sobre la paternidad o sobre la maternidad y según se trate de
hijos nacidos dentro o fuera del matrimonio; sin embargo, dada su misma naturaleza, tienen estas acciones los
siguientes caracteres comunes:
l. Son indisponib1es.
2. Son imprescriptibles, y J. Se tramitan mediante igual procedimiento judicial.
1. Son indisponibles por ser de orden público y, por tanto, no pueden renunciarse ni relajarse por voluntad del
sujeto activo. Lo que significa que una vez intentada la acción, deberá continuar hasta sentencia definitiva; Sin
que pueda caber en este procedimiento la confesión ficta, ni el desistimiento, ni el convenimiento, ni la
transacción. Tampoco tiene cabida la prueba de juramento; y la confesión sólo tendría valor de indicio.
La doctrina se pronuncia, no obstante, por admitir esta indisponibilidad sólo en el caso que exista
interés moral en el sujeto activo; pues cuando haya únicamente interés económico, opina que sí se puede
disponer de la acción; y señala que hay interés económico cuando la demanda es interpuesta no directamente
por el interesado (hijo, padre o madre) sino por los herederos de éste.
2. Son imprescriptibles, por cuanto el orden público tiene interés en el esclarecimiento del verdadero estado
familiar y, por tanto, no se limita en el tiempo el derecho a ejercer las acciones que persiguen tal
esclarecimiento. Sin embargo, en aras de la estabilidad del grupo familiar y ante la incertidumbre que puede
derivar del no ejercicio de las acciones, éstas en ciertos casos están sometidas a lapsos de caducidad.
3. En cuanto al Procedimiento, todas las acciones relativas a la filiación se tramitan mediante juicio ordinario,
salvo especiales disposiciones de la ley; ya personalmente, o a través de mandatario con poder especial, y se
deben intentar ante el Juez de Familia del domicilio del hijo, cualquiera sea 'la edad de éste, con intervención
del Ministerio Público (Art. 231 C.C.).

A CC I O N E S QUE INCIDEN SOBRE LA PATERNIDAD


Son dos las acciones de filiación que inciden sobre la paternidad:
Una que corresponde al padre y tiene por objeto desvirtuar la presunción de paternidad; es la Impugnación de
paternidad. Y otra que corresponde al hijo y tiene por objeto hacer que el padre le reconozca su condición de
tal: es la Inquisición de paternidad. La primera tiene lugar sólo en el caso d~ existir matrimonio entre el padre
y la madre del hijo cuya paternidad se impugna. La segunda opera sólo en el caso de hijos extramatrimoniales,
cuando éstos pretenden que su presunto padre les reconozca como tales hijos.
Impugnación de la Paternidad:
De conformidad con lo dispuesto en el Art. 201 del c.c., "el marido se tiene como padre del hijo nacido durante
el matrimonio o dentro de los trescientos (300) días siguientes a su disolución o anulación". Es esta presunción
iuris tantum, que puede ser destruida mediante prueba en contrario, en juicio contradictorio tendiente a
impugnar esta paternidad.
La acción de Impugnación de paternidad deberá intentarse por el presunto padre, dentro de los seis (6) meses
contados desde la fecha del nacimiento del hijo o de conocido el fraude cuando se ha ocultado el nacimiento; es
decir, que está afectada de un término de caducidad, el cual sin embargo no comenzará a contarse, en caso de
interdicción del marido, sino después de su rehabilitación (Art. 206 C.C.). Si el marido muere sin haber
promovido la acción de desconocimiento, pero antes que haya transcurrido el término útil para intentada, sus
herederos tendrán dos (2) meses para impugnar la paternidad, contados desde el día en que el hijo haya
entrado en posesión de los bienes del de cujus o del día en que los herederos hayan sido turbados por aquél en
tal posesión (Art. 207 C.C.).
La acción de impugnación deberá intentarse conjuntamente contra el hijo y la madre, en todos los casos; y si el
hijo está entredicho, el Tribunal ante el cual se intente la acción le nombrará un tutor ad hoc que le represente
en el juicio (Art. 205 C.C.).
La Impugnación de paternidad procede:
1. En caso de nacimiento del hijo antes de 180 días contados desde la celebración del matrimonio (Art. 202
C.C.). En este caso, el marido puede limitarse a negar judicialmente su paternidad, alegando y probando
simplemente dos extremos: la fecha de su matrimonio y la fecha del nacimiento del hijo de su esposa; lo cual
podrá hacer mediante las respectivas copias certificadas de las partidas de Registro Civil, sin que sean
descartables otras pruebas que lleven al ánimo del Juez la convicción de que el demandante no es el padre del
hijo que se le atribuye. Este, por su parte, tiene a su favor las pruebas que pueda aportar, para demostrar que,
aunque no ha nacido dentro del matrimonio, sí es hijo del marido de su madre.
Hay en este primer caso, sin embargo, tres excepciones contempladas en el C.C. (Art. 202), a saber:
 a. - Si el marido supo antes de casarse, el embarazo de su futura esposa.
 b. Si después del nacimiento el marido ha admitido al hijo como suyo, asistiendo personalmente o por
medio de mandatario especial a la formación del acta de nacimiento o comportándose como padre de
cualquier otra manera; y c. Cuando el hijo no nació vivo. En estos tres supuestos. No es procedente la acción
de impugnación de paternidad.
2. En caso de nacimiento del hijo después de trescientos (300) días de presentada la demanda de nulidad del
matrimonio, o la demanda de divorcio, o de separación de cuerpos, o la solicitud de ésta (Art. 203 C.c.).
 1. En caso de nacimiento del hijo antes de los ciento ochenta (180) días a contar desde la fecha en que
quedó definitivamente firme la sentencia que declaró sin lugar la demanda de nulidad, de divorcio o de
separación de cuerpos; o terminado el juicio (Art.
 2. (Art. 203 C.C.). El derecho de impugnar la paternidad por las causas señaladas en los numerales 2 y
3, cesa para el marido que se ha reconciliado con su mujer. Aunque sea temporalmente.
 3. En caso de imposibilidad de acceso físico con la esposa o de vivir separado de ella durante el
período de la concepción del hijo (Art.201 C.c.).
 4. Esta causa requiere la imposibilidad de relaciones sexuales entre los cónyuges, débase ésta a
cualquier circunstancia, siempre que el alejamiento sea físico y absoluto, lo cual deberá probar el
demandante mediante todo género de pruebas. Por ejemplo, separación geográfica por viaje,
separación física por hallarse éste preso e incomunicado, etc., etc.
5. En caso de adulterio de la mujer, cuando ha ocurrido durante el período de la concepción y el marido pruebe,
además, otros hechos o circunstancias que verosímilmente concurran a excluir su paternidad (Art. 205 e.e.).
No basta, como vemos, que la mujer haya cometido adulterio durante la época de la concepción; pues, pudo
ocurrir que en ese mismo lapso tuviera relaciones con su marido. Por ello el legislador le exige que pruebe,
además, otros hechos o circunstancias que verosímilmente concurran a excluir su paternidad.
6. En caso de impotencia manifiesta y permanente, excepto si la concepción ha tenido lugar por inseminación
artificial con autorización del marido (Art. 204 C.C.).
Obsérvese que el legislador exige que la impotencia del marido sea manifiesta y además permanente; es de':"
que pueda comprobarse mediante simple examen físico por ser notable y evidente; y que sea constante, sin
solución de continuidad, como podría ser la que deriva de la ablación de los genitales, por ejemplo.
Es decir, que se refiere a la impotencia coeundi, sin que se requiera que ésta sea anterior al matrimonio, como
se exige para la que determina la incapacidad matrimonial.
Además de los casos señalados, por vía de excepción y aunque no aparezca taxativamente señalado en el c.c.,
parece lógico que en caso de establecerse la filiación materna por una sentencia según la cual se demuestre que
el producto del parto de la esposa no es hijo de su marido, éste podrá igualmente impugnar la paternidad que le
es atribuida por la presunción "pater is est.... "
Para concluir 10 relativo a la impugnación de paternidad, debemos recordar que, de conformidad con 10
pautado en el Art.212 del C.C., "la declaración de la madre no basta para excluir la paternidad".
Inquisición de paternidad:
Procede esta acción cuando el hijo, nacido fuera de matrimonio, no ha sido reconocido voluntariamente por su
padre; y tiene por objeto establecer la filiación entre el sediciente hijo y el hombre que éste pretende que es su
padre.
La paternidad podrá demostrarse con todo género de pruebas, incluidos los exámenes o las experticias
hematológicas y heredo biológicas que hayan sido consentidas por el demandado. La negativa de éste a
someterse a dichas pruebas se considerará como una presunción en su contra.
Quedará establecida la paternidad cuando se pruebe la posesión de estado de hijo o se demuestre la
cohabitación del padre y de la madre durante el periodo de la concepción, así como la identidad del hijo con el
concebido durante dicho periodo (Art. 210 C.C.). Pero si la madre ha tenido en este mismo tiempo relaciones
sexuales con otros hombres o ha practicado la prostitución, será necesario para el hijo probar por otros medios
la paternidad que demanda (Art. 210 in fine).
La posesión de estado de hijo se establece por la existencia suficiente de hechos que indiquen normalmente las
relaciones de filiación y parentesco del individuo con la persona que pretende que es su padre, así como con la
familia a la cual dice pertenecer.
Los principales entre estos. Hechos son:
a) Que haya usado el apellido de quien pretende tener por padre.
b) Que éste le haya dispensado el trato de hijo y él a su vez el de padre, y
c) Que haya sido reconocido como hijo de su presunto padre por la familia de éste y por la sociedad (Art. 214
C.c.).
La acción para inquirir la paternidad podrá ser intentada, en vida del hijo y durante su minoridad, por su
representante legal o por el Ministerio Público; así como por los organismos de protección del menor, por el
progenitor respecto del cual la filiación esté establecida y por los ascendientes de éste. Después que el hijo ha
alcanzado la mayoría o ha contraído matrimonio, la acción corresponde sólo a él.
La acción de inquisición de paternidad es imprescriptible, si se intenta frente al padre; pero cuando se intenta
contra los' herederos de éste, debe hacerse dentro de los cinco (5) años siguientes a su muerte (Art. 225 C.C.).
Es decir que, de acuerdo con esta disposición legal, la legitimación pasiva en juicio corresponde al padre en
vida de ésta; y después de su muerte a quienes sean sus herederos.
El reconocimiento del hijo por la parte demandada pone término al juicio sobre filiación, en todos los casos en
que tal reconocimiento sea admisible de conformidad con las disposiciones del Código Civil (Art.232).
Como en todas las acciones relativas a filiación, es competente para conocer de la de inquisición de paternidad
el Juez de Familia del domicilio del hijo, cualquiera sea la edad de éste y, siempre, con intervención del Fiscal
del Ministerio Público (Art. 231 C.C.).

A CC I O N E S QUE INCIDEN SOBRE LA MATERNIDAD


Igual que ocurre respecto a la paternidad, en relación con la maternidad pueden plantearse dos acciones: Una
cuyo objeto es desvirtuar la relación de filiación entre una persona y otra que ésta pretende tener por madre; la
otra, por el contrario, encaminada a probar quién es la madre de una persona determinada. La primera se
denomina impugnación de estado y la segunda, reclamación de estado.
Impugnación de estado: Procede esta acción cuando se desea desvirtuar la filiación materna de una persona
nacida dentro del matrimonio, en razón de su partida de nacimiento o de su posesión de estado.
En efecto, tal como lo señala el Art. 199 del C.C., cuando faltan la posesión de estado y la partida de nacimiento,
podrá demandarse al pretendido hijo la inexistencia de su filiación materna y éste deberá, mediante todo
género de prueba, demostrar su filiación. El actor en tales casos será todo aquél que tenga interés legítimo y
actual y el demandado lo será el pretendido hijo o sus herederos. No podrá intentarse la acción cuando exista
partida de nacimiento conforme con la posesión de estado; sin embargo, aún en este caso, será procedente la
acción cuando el hijo fue inscrito bajo falso nombre, o bien si se trata de suposición o sustitución de parto.
Reclamación de estado: Dos hipótesis pueden presentarse en cuanto a la acción para establecer la filiación
materna: Una en el caso de hijo nacido de matrimonio; la otra cuando se trata del hijo de madre soltera
llamada más generalmente inquisición de maternidad.
Mediante el ejercicio-de la reclamación de estado, el sediciente hijo pretende demostrar, por medios diferentes
de la partida de nacimiento y de la posesión de estado, quién es su verdadera madre.
Esta, por hipótesis, era casada para la fecha de la concepción del hijo o al menos para la de su nacimiento.
Esta acción sólo procede cuando la maternidad debe probarse por cualesquiera medios diferentes de la partida
de nacimiento y de la posesión de estado conformes; es decir:
1) Cuando no existen ni partida de nacimiento ni posesión de estado.
2) Cuando carece de posesión de estado y alega que su partida de nacimiento es falsa.
3) Cuando tiene partida de nacimiento y pretende que su posesión de estado es falsa.
4) Cuando las partidas de nacimiento y la posesión de estado se contradicen, y 5) Cuando alega suposición o
sustitución de parto.
El actor en esta acción es el propio hijo, dado su carácter esencialmente moral. La parte demandada puede
serio la madre presunta o sus herederos, pero nada se opone a que se demande también al cónyuge de ésta.
La inquisición de maternidad, equivalente a la anterior, aunque se refiere a los hijos nacidos de uniones
extramatrimoniales, tiende a establecer legalmente el vínculo de filiación existente entre una persona y la
mujer que pretende es su madre, cuando ésta no le ha reconocido voluntariamente.
Las acciones de inquisición de maternidad, lo mismo que las de paternidad, son imprescriptibles cuando la
parte demandada lo es la madre; pero si lo son los herederos de ésta, no podrá intentarse sino dentro de los
cinco (5) años siguientes a su muerte (Art. 228 C.C.).
En ambas acciones la parte actora es el pretendido hijo, exclusivamente cuando es mayor de edad, o cuando,
siendo menor, haya contraído matrimonio; en caso contrario, es decir, durante la minoridad del hijo, puede
intentar la acción el Ministerio Público, los organismos encargados de la protección del menor y el otro
progenitor respecto del cual la filiación esté establecida o los ascendientes de éste.
Cuando el hijo hubiere muerto sin reclamar su filiación, podrán intentar la acción sus herederos o
descendientes, contra los herederos de la progenitora cuya filiación deba ser establecida, siempre que aquél
haya muerto siendo menor, o hasta los dos (2) años siguientes a su mayoridad (Art. 229 C.c.); es decir, hasta la
fecha en que el fallecido hubiera cumplido veinte (20) años de edad.
 
 

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