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La historia de la Principessa

Muchos saben (otros no jajajaja) que hace aproximadamente un año y


medio terminé por causas ajenas a mi voluntad una relación de más de tres
años, con una persona que amaba con locura y con quien había idealizado
pasar el resto de mi vida.

Sumergido en ese mar de dolor que produce una ruptura tan dolorosa, caí
en una fuerte depresión de la que hasta llegué a pensar no saldría vivo..

Sin embargo, poco a poco y con la ayuda de mucha gente, empecé a


retomar mi vida, pero con el dolor latente en mí. Para amortiguar la carga
me refugié en el trabajo. Trabajaba todo el día y parte de la noche sin parar,
para no pensar y cuando por algún motivo me detenía a hacerlo recaía en la
depresión, aunque trataba de disimular.

Así es cómo pasé casi todo el 2020. Dejé a un lado las cosas que me
gustaba hacer, como escribir, tocar la guitarra, leer, cantar, bailar...sólo
quería trabajar para no pensar.

Entonces pasó que un día, revisando mi Instagram encontré una


publicación de alguien que hacía un tiempo había visto cantar como
invitada en un concierto al que fui incluso con mi ex, ya que era de una de
mis artistas favoritas.

Increíblemente, aunque escuchaba su música y había visto algunas


entrevistas, no la seguía en ninguna red (nunca fui muy de redes) así que
me dio por hacerlo. Mágicamente, al curiosear en sus publicaciones me
cautivaron muchas cosas que vi, aparte de que obviamente me atraía
físicamente (cosa que pasó desde el día 1), pero más que todo me
conmovió su sutileza, en cierto modo su inocencia, su alma. Algo para mí
sorprendente tomando en cuenta que ya nada me quitaba el sueño, ni
captaba mi atención.

Le escribí por DM textualmente "Cásate conmigo" sin la más mínima


intención de que me respondiera, es más no pensé ni siquiera que lo vería.

Unos días después me puso un emoji y para mí fue como si me hubiera


dicho "Sí, acepto". Como buen atrevido continué la conversación y para mi
sorpresa, trató de ponerme atención, imagino pensando de donde saldría
ese loco jajaja.

Y así fue como empezó la historia de la Principessa, que sin saberlo, me


cambió el año. Me devolvió las ganas de hacer todas las cosas que ya dije
más arriba había dejado a un lado. Volví a entender la adrenalina que se
siente que alguien que te gusta te responda un mensaje, o que publique
algo. Volví a mirar lo lindo que es pensar en alguien, olvidar los
problemas, las tristezas, las frustraciones.

Y es así como cada día a través de mis historias (ahhh porque si me sigue,
le di mi muelita y lo logré jajaja) buscaba la manera de decirle, me
cambiaste la vida!!! Sin que dijera pero y este loco??? Porque de verdad me
cambió la vida.

Aterrado con la idea de sentir amor por primera vez en mi vida por una
persona que no conozco, me pregunte si era normal, si tenía un trastorno o
si simplemente era algo del destino. Les confieso que las respuestas a esas
preguntas todavía no las tengo, pero ha sido tan lindo volver a sentir, vivir,
volver a ser yo, a través de ese sentir, que sinceramente no me interesa
saberlas.

Quizás, nunca pase o a lo mejor sí, pero con el hecho de sentir y sentirme
como me siento hoy, para mí ya pasó, para mí ya valió la pena…

JMC

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