La disfonía es un trastorno momentáneo o duradero de la función vocal,
considerado como tal por la propia persona o su entorno. La disfonía funcional se define como una alteración de la función vocal mantenida fundamentalmente por un trastorno del acto vocal. La etiología es múltiple, pero la más aceptada se basa en la desorganización del gesto fonatorio, puede generar una alteración en la dinámica vocal, especialmente en la descoordinación neumofónica. Según Perello & Miguel en 1973 la disfonía funcional es aquella en la que la laringe no posee alteración visible al examen larincoscopico. Aronson en 1980 separo el termino psicógeno de funcionalidad, separando así estas dos disfonías. Le Huche describe un círculo vicioso respecto al esfuerzo vocal. Inicia con un factor desencadenante (alergias, reflujo, resfrió) lo que provoca realizar un esfuerzo vocal para lograr una mejoría transitoria de la calidad vocal, pero a medida que mantengo ese patrón en el tiempo me va a producir una disminución progresiva del rendimiento.
Morrison & Ramage en 1983: ven la voz como un proceso multifactorial,
postulando las disfonías por uso muscular inadecuado, donde hay ideas de que el sistema neuromuscular requiere una coordinación fina y precisa de los aspectos musculares que intervienen en la fonación. Signos y síntomas que se deben presentar (aunque sea 1 signo de cada ítem): Musculo esqueletales (alteración de la ATM, posturales, posición lingual, muscular laríngeos). Psicológicos: el mas importante es el estrés Acústico-perceptuales (tensión, soplosidad, estridencia, frecuencia descendida, ataque vocal duro, quiebres, incoordinación fonorespiratoria) En 1993 las clasifican en: Tipo 1: trastorno isométrico laríngeo: Se observa frecuentemente en usuarios que utilizan la voz profesionalmente sin preparación previa. Se debe a mala técnica vocal, exigencias amplias del uso de la voz. La tensión generalizada de todos los músculos laríngeos se asocia a menudo a una abertura glótica posterior abierta, debido a la persistencia de tracción del musculo cricoaritenoideo posterior durante la fonación. Existen aumentos palpables de la tensión del musculo suprahioideo con la fonación, en especial en las gamas de tonos más altos durante el canto. Puede observarse una elevación de la laringe en el cuello y una extensión de la mandíbula cuando el paciente va subiendo en la escala del canto.
Tipo 2: Contracción lateral: La laringe tiende a estar comprimida o en
hiperaduccion en una dirección laterolateral. o Subtipo a: contracción glótica: hiperaducción de las cuerdas vocales produce una voz con un sonido tenso debido a una técnica vocal incorrecta. Los pacientes refieren fatiga de la voz y molestias al final de una jornada de trabajo. Hipercontracción lateral a la altura de la glotis. Se acompaña de respiración incoordinada, se produce una voz tosca y esforzada con una rápida fatiga. En una laringoscopia se puede observar un eritema o engrosamiento difuso de la mucosa además del cierre tenso de la glotis posterior. Con la luz estroboscópica se observa una fase de cierre prolongada, reducción de la amplitud vibratoria y supresión de la onda mucosa. Esta forma glótica se debe principalmente a malos hábitos, postura y técnica vocales.
o Subtipo b: aducción supraglótica: tiende
a predominar en la disfonía psicógena y puede presentarse con cuerdas vocales verdadera en aducción tensa que provocan voz chillona de tono alto o C.V laxas en abducción parcial con voz susurrante, en este ultimo caso las puntas de los aritenoides entran en contacto y dejan un vacío entre las dos cuerdas membranosas laxas (como un vacío entre los aritenoides)
Tipo 3: Contracción supraglótica
anteroposterior: Disfonía de tensión-fatiga con fonación en la parte más baja de su gama dinámica vocal, pero son capaces de conversar de manera mas clara y con menos dificultad en un tono más alto. Hay un patrón de contracción que produce reducción del espacio entre la epiglotis y las prominencias aritenoideas en dirección anteroposterior durante la fonación. Tipo 4: afonía/disfonía de conversión: factores de estrés psicológicos y los patrones de uso muscular inadecuado resultantes difieren de los usos inadecuados de tensión por ansiedad asociados al tipo 2ª que se han descrito. El usuario puede no ser consciente del uso inadecuado. Las cuerdas tienen un movimiento completo y pueden realizar una aducción normal para la tos u otros tipos de fonación vegetativa, pero en el habla las CV se detienen antes de alcanzar una aducción suficiente para emitir la voz.
Tipo 5: disfonía psicógena con cuerdas vocales
arqueadas: de base psicógena que presentan una glotis arqueada.
Tipo 6: disfonía de transición del adolescente:
establecimiento de una voz en falsete de manera mantenida, la laringoscopia muestra una glotis tensa y la glotis cartilaginosa puede estar en hiperaduccion, limitando la fonación de las CV membranosas anteriores. La laringe suele estar traccionada al hueso hioides o la base de la lengua.
Behlau y Pontes en 1992 hicieron una nueva clasificación:
❖ Disfonía funcional primaria: causada por uso incorrecto de la voz o Falta de conocimiento vocal: el individuo selecciona ajustes motores vocales inapropiados a una producción saludable y los utiliza a largo plazo acostumbrándose a aquello. o Modelo vocal deficiente: se asumen patrones vocales inadecuados y se incorporan como habituales. ❖ Disfonías funcionales secundarias: causada por inadaptación vocal, son alteraciones mínimas o pequeñas de la laringe que son secundarias a otra patología. ❖ Disfonías funcionales psicógenas: causadas por estrés, incluye las DMT y el síndrome musculo esquelético (es un conjunto de signos y síntomas de instalación lenta y progresiva que mejora en situaciones de alivio o desaparición de la presión emocional, la calidad vocal puede ser tensa comprimida o estrangulada, desvíos de frecuencia e intensidad)