¿Por Qué Cuidarse de Cuidar

17/10/2020 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CUIDAR?
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POR QUÉ PREOCUPARSE
¿CUIDANDO?
LA NATURALEZA FUNDAMENTAL DEL CUIDADO
LA quiero preguntar qué significa cuidar y establecer las líneas a lo largo de

TAREA PRINCIPAL de este capítulo es un análisis preliminar del cuidado. yo
cuyo análisis procederá en los capítulos dos y tres. Parece
obvio en un sentido cotidiano por qué deberíamos estar interesados en cuidar.
En todas partes escuchamos la queja "¡A nadie le importa!" y nuestro creciente
La inmersión en procedimientos y regulaciones burocráticas nos lleva a predecir
que la denuncia seguirá siendo escuchada. Como seres humanos queremos
cuidar y ser atendido. El cuidado es importante en sí mismo. Se parece nece-
Sin embargo, quisiera motivar el tipo de análisis detallado que propongo; es decir,
es razonable en un contexto filosófico preguntar: ¿Por qué preocuparse por el cuidado?
Si estuviéramos iniciando una investigación tradicional de lo que significa
Para ser morales, es casi seguro que comenzaríamos con una discusión de moral
juicio y razonamiento moral. Este enfoque tiene ventajas obvias.
Nos da algo público y tangible con lo que lidiar: las declaraciones
que describen nuestro pensamiento sobre cuestiones morales. Pero argumentaré que esto es
no es el único ni el mejor punto de partida. Comenzando la discusión
de asuntos morales con principios, definiciones y demostraciones es
más bien como iniciar formalmente la solución de un problema matemático.
A veces podemos proceder y procedemos de esta manera, pero cuando el problema
situación es nueva, desconcertante o especialmente compleja, no podemos comenzar esta
camino. Tenemos que operar en un modo intuitivo o receptivo que es algo
qué misterioso, interno y no secuencial. Después de que la solución
encontrado por métodos intuitivos, podemos proceder con la construcción
de una demostración o prueba formal. Como dijo el matemático Gauss:
https://translate.googleusercontent.com/translate_f 1/22
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"Tengo mi resultado, pero aún no sé cómo obtenerlo". •

Una dificultad en la enseñanza de las matemáticas es que rara vez compartimos nuestra
pensamiento matemático fundamental con nuestros estudiantes. Te presentamos todos
cosa ya hecha por así decirlo, como si brotara de nuestras frentes en
perfección formal. El mismo tipo de dificultad surge cuando nos acercamos
la enseñanza de la moralidad o el comportamiento ético desde un enfoque cognitivo-racional
Acercarse. No compartimos los sentimientos, los conflictos, la
esperanzas e ideas que influyen en nuestras elecciones eventuales. Compartimos solo el
justificación de nuestros actos y no lo que nos motiva y toca.
Creo que estamos doblemente equivocados cuando abordamos cuestiones morales en
esta forma matemática. Primero, por supuesto, extrañamos compartir la heurística
procesos en nuestro pensamiento ético del mismo modo que perdemos ese compartir cuando
abordar las matemáticas en sí formalmente. Pero esta dificultad podría remediarse
murió pedagógicamente. No tendríamos que cambiar nuestro enfoque de la ética
pero solo a la enseñanza del comportamiento ético o del pensamiento ético. Segundo,
Sin embargo, cuando abordamos los asuntos morales a través del estudio de la moral
razonamiento, se nos lleva con bastante naturalidad a suponer que la ética es necesariamente
un tema que debe formularse en el lenguaje de los principios y la demostración
ción. Esto, argumentaré, es un error.
Muchas personas que viven vidas morales no abordan los problemas morales
formalmente. Las mujeres, en particular, parecen abordar los problemas morales
colocándose lo más cerca posible en situaciones concretas y suposiciones
asumir la responsabilidad personal de las decisiones que se tomen. Ellos los definen
a sí mismos en términos de cuidado y se abren camino a través de los problemas morales
desde la posición de uno solidario. Esta posición o actitud de acción solidaria
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Vata una estructura compleja de recuerdos, sentimientos y capacidades. Más lejos,

El proceso de toma de decisiones morales que se basa en el cuidado requiere un
proceso de concretización más que de abstracción. Una ética construida
sobre cuidar es, creo, característica y esencialmente femenina, que es
por no decir, por supuesto, que no puede ser compartido por los hombres, como tampoco nosotros
Debería importarme decir que los sistemas morales tradicionales no pueden ser adoptados por
mujer. Pero una ética del cuidado surge, creo, de nuestra experiencia como
mujeres, así como surge el enfoque lógico tradicional de los problemas éticos
más obviamente de la experiencia masculina.
Una razón, entonces, para llevar a cabo el amplio y agradecido
investigación del cuidado a la que ahora nos referiremos es capturar la
un enfoque femenino, o simplemente alternativo, de las cuestiones de
moralidad.
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¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO? 9
¿QUÉ SIGNIFICA CUIDAR?
Nuestros diccionarios nos dicen que "cuidado" es un estado de sufrimiento mental o de

Absorción: preocuparse es estar en un estado mental agobiado, de ansiedad,
miedo o solicitud por algo o alguien. Alternativamente, a uno le importa
por algo o alguien si uno tiene respeto o inclinación hacia
ese algo o alguien. Si tengo una inclinación por las matemáticas,
Es posible que de buena gana pase algún tiempo con él, y si te tengo respeto,
me importará lo que pienses, sientas y desees. Y, de nuevo, cuidar
puede significar estar a cargo de la protección, el bienestar o el mantenimiento de
algo o alguien.
Estas definiciones representan diferentes usos del "cuidado" pero, en el más profundo
sentido humano, veremos que elementos de cada uno de ellos
cuidando. En cierto sentido, puedo equiparar "preocupaciones" con "cargas"; Tengo cuidados
en ciertos asuntos (profesionales, personales o públicos) si tengo cargas o
preocupaciones, si me preocupo por la situación actual y proyectada. En otro
sentido, me preocupo por alguien si siento un movimiento de deseo o inclinación hacia
él. En un sentido relacionado, me preocupo por alguien si tengo en cuenta sus puntos de vista
e intereses. En tercer sentido, tengo el cuidado de un familiar anciano si
estoy a cargo de la responsabilidad de su bienestar físico. Pero, claramente,
en el profundo sentido humano que nos ocupará, no puedo pretender cuidar de
mi pariente si mi cuidado es superficial o de mala gana.
Vemos que será necesario prestar mucha atención a la
cuidado en nuestro análisis. Aunque a veces juzgamos preocuparse por
exterior, como terceras personas, es fácil ver que los elementos esenciales de
el cuidado se ubican en la relación entre el que cuida y el cuidado
para. En un librito encantador, On Caring, Milton Mayeroff describe el cuidado
en gran parte a través de la visión de la solidaridad. Comienza diciendo: "Cuidar
otra persona, en el sentido más significativo, es ayudarlo a crecer y
actualizarse a sí mismo ''. 3
Quiero abordar el problema de manera un poco diferente, porque creo
El énfasis en la actualización del otro puede llevarnos a pasar demasiado rápido
sobre la descripción de lo que sucede en el cuidado de uno. Además, problemas
surgen en la discusión de la reciprocidad, y sentiremos la necesidad de examinar
el papel de los cuidados mucho más de cerca también. Pero Mayeroff ha dado
un comienzo significativo señalando la importancia de la constancia, la culpa,
reciprocidad, y los límites del cuidado. Todos estos los consideraremos en
algún detalle.
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Comencemos a mirar el cuidado desde afuera para descubrir las limitaciones

ciones de ese enfoque. En el curso ordinario de los acontecimientos, esperamos
acción de alguien que dice preocuparse, aunque la acción no es todo lo que
esperar. ¿Cómo vamos a determinar si el Sr. Smith se preocupa por sus ancianos?
madre, que está confinada en un asilo de ancianos? No es suficiente, seguramente, que
El Sr. Smith debería decir: "Me importa". (Pero la posibilidad de que diga esto
en breve nos llevarán a otro camino de análisis. Tendremos que examinar
cuidando desde adentro.) Nosotros, como observadores, debemos buscar alguna acción,
alguna manifestación en el comportamiento de Smith, que nos permitirá estar de acuerdo en que
A él le importa. Sentimos que cuidar requiere alguna acción a favor de los cuidados.
Así, si Smith nunca visita a su madre, ni le escribe, ni llama por teléfono
ella, es probable que digamos que, aunque está acusado formalmente de
su cuidado —él paga por su encierro— realmente no le importa. Nosotros
señalar que parece faltarle respeto, que no está preocupado
lo suficiente para ver por sí mismo cómo le va a su madre. No hay deseo por ella
compañía, sin inclinación hacia ella. Pero observe que un criterio de acción
No sería fácil formular a partir de este caso. Smith, después de todo, per-
realizar alguna acción en nombre de su madre: él paga por su mantenimiento físico
tenencia. Pero buscamos un tipo de acción cualitativamente diferente.
¿Es necesaria una acción directa y externamente observable para cuidar? Puede cuidar
estar presente en ausencia de acción a favor de los cuidados? Considerar
el problema de los amantes que no pueden casarse porque ya están
mitted a matrimonios satisfactorios y honorables. El amante aprende que su
amado está enfermo. Todos sus instintos claman por su presencia junto a su cama. Todavía,
si teme por los problemas, puede traerla, por las recriminaciones que
puede surgir de su apariencia, puede que se mantenga alejado de ella. Seguramente nosotros
No diría en tal caso que al amante no le importa. Él está en un men-
tal estado de abstinencia, incluso sufrimiento; siente el más profundo respeto y,
acusado por su amor del deber de proteger, niega su propia necesidad en
para evitarle una forma de dolor. Por lo tanto, al cuidar, elige no
Actuar directa y tiernamente en respuesta a la reacción física inmediata del amado.
dolor. Vemos que, cuando consideramos el componente de acción del cuidado en
profundidad, tendremos que mirar más allá de la acción observable a los actos de compromiso
los actos que son vistos sólo por el sujeto individual que realiza
ellos.
En el caso del amante cuyo amado ha caído enfermo, podríamos esperar
él para expresarse cuando la crisis haya pasado. Pero incluso esto puede que no
suceder. Él podría decidir no volver a contactarla nunca más, y su cariño
entonces sólo podría ser conocido por él mientras renueva su resolución de nuevo y
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otra vez. No queremos negar que al amante le importa, pero claro, algo
Falta en la relación: el cuidado no se completa en el cuidado.
O, considere la madre cuyo hijo, en la adultez temprana, deja su hogar en
ira y rebelión. ¿Debería actuar para lograr la reconciliación? Por-
haps. ¿Estamos seguros de que a ella no le importa si no actúa directamente para traer
él en contacto amoroso con su familia? Ella puede, de hecho, deliberadamente
abstenerse de actuar en la creencia de que a su hijo se le debe permitir hacer ejercicio
su problema solo. Su consideración por él puede obligarla a angustiarse y
inacción cuidadosamente considerada. Como el amante, eventualmente puede expresar
ella misma con su hijo cuando la crisis ha pasado, pero, de nuevo, puede
no. Después de un período de, digamos, dos años, la relación puede estabilizarse y
el cuidado de la madre puede retomar su forma habitual. ¿Diremos entonces que
ella "se preocupa de nuevo" y que durante dos años "no le importaba"?
Aún existen más dificultades para tratar de formular una
terion para cuidar. Supongamos que me entero de una familia muy necesitada y
supongamos que decido ayudarlos. Les pago el alquiler atrasado, compro
alimento para ellos y suplirlos con las necesidades de la vida. Yo hago todo esto
alegre y voluntariamente pasando tiempo con ellos. ¿Se puede dudar de que yo
¿cuidado? Este tipo de caso también planteará problemas. Supongamos que ambos marido
y esposa en esta familia quieren ser independientes, o al menos tener un latente
anhelando en esta dirección. Pero mis actos tienden a reprimir el impulso de
independencia. ¿Estoy ayudando u obstaculizando? • ¿Me importa o sólo parece
¿cuidado? Si hay que decir que mi relación con la familia necesitada no es adecuada,
erly, una relación cariñosa, ¿qué ha salido mal?
Ahora, en esta breve inspección de los actos de cuidado, ya nos hemos encontrado
problemas resueltos. Otros se sugieren a sí mismos. ¿Qué hay del cuidado indirecto?
¿ejemplo? ¿Qué diremos de los estudiantes universitarios que participan en
pruebas para los negros de Sudáfrica o la "gente del barco" de Indochina o
los judíos de Rusia? ¿En qué condiciones estaríamos dispuestos a decir
que les importa? Nuevamente, estas pueden ser preguntas que solo se pueden responder
por aquellos que dicen preocuparse. Necesitamos saber, por ejemplo, qué motiva
la protesta. Entonces, como veremos, existe el problema recurrente de "cQm-
"¿Cómo se transmite el cariño a los cuidados? ¿Qué tipo de
¿Puede haber encuentro entre el que se preocupa y el que se cuida?
No vamos a poder responder a todas estas preguntas con certeza.
tainty. De hecho, este ensayo no apunta a una exposición sistemática de
Criterios de cuidado. Más bien, debo mostrar que tal esfuerzo sistemático es,
en la medida en que el sistema es su objetivo, equivocado. Dedicamos tanto esfuerzo a
muestre lo que no es fructífero como lo que es. No es mi objetivo poder ordenar
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casos al final: A se preocupa, B no le importa, C se preocupa pero no por D, etc.

Si podemos entender cuán complejo e intrincado, de hecho cuán subjetivo,
cuidado es, tal vez estaremos mejor equipados para enfrentar los conflictos y
dolores que a veces induce. Entonces, también, podemos llegar a comprender
al menos en parte cómo es que, en un país que gasta miles de millones en el cuidado
de varios tipos, escuchamos en todas partes la queja: "A nadie le importa".
A pesar de las dificultades involucradas, tendremos que discutir el comportamiento
indicadores de cuidado con cierta profundidad, porque nos preocuparemos
problemas de encomendar el cuidado, de vigilar el cuidado y asignarlo.
Cuando consideramos la posibilidad del cuidado institucional y lo que
entendido como "escuela solidaria", tendremos que saber qué buscar
para. Y así, aunque el análisis nos moverá cada vez más
hacia los puntos de vista del cuidado en primera y segunda persona, examinaremos el cuidado
actos y la vista de "tercera persona" también. En este análisis inicial,
volver a la vista en tercera persona después de examinar en primera y segunda persona
aspectos.
Hasta ahora, hemos hablado sobre el componente de acción del cuidado y hemos
ciertamente no han llegado a un determinado conjunto de criterios. Supongamos, ahora,
que consideramos la fascinación que esperamos encontrar en el que se preocupa por uno.
Cuando el Sr. Smith, cuyo "cuidado" nos parece ser, en el mejor de los casos, superficial,
dice: "Me importa", ¿qué quiere decir? Ahora, claramente solo podemos adivinar, porque
porque el Sr. Smith tiene que hablar por sí mismo sobre esto. Pero podría querer decir:
(1) Me hago cuidado. Pienso en mi madre a menudo y me preocupo por ella. Es un
terrible carga. (2) Me hago cuidado. Debería verla más a menudo, pero tengo tanto
mucho que hacer: una casa llena de niños, largas horas de trabajo, una esposa que necesita
mi compañía .... (3) Yo hago cuidado. Pago las facturas, ¿no? Tengo hermana
ters que podrían proporcionar compañía ...
Estos significados sugeridos no agotan las posibilidades del Sr. Smith, pero
nos dan algo con lo que trabajar. En el primer caso, podríamos
concluir que el Sr. Smith no se preocupa por su madre tanto como él
para sí mismo como cuidador. Está abrumado por las preocupaciones, y el enfoque de su
la atención se ha desplazado hacia sí mismo y sus preocupaciones. Esto, lo haremos
ver, es un riesgo de cuidar. En todas las situaciones de cuidados existe el riesgo de que el
el cuidado único se verá abrumado por las responsabilidades y deberes del
tarea y que, como resultado de estar agobiado, dejará de importarle
para el otro y convertirse en su lugar en el objeto de "cuidar". Ahora aquí
y a lo largo de nuestra discusión sobre el cuidado, debemos tratar de evitar equívocos
catión. Como hemos señalado, hay varios significados comunes de "to
cuidado '', pero ninguno de ellos cede el sentido profundo que estamos investigando.
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Cuando está claro que "cuidar, se refiere a uno de los sentidos restringidos, o
cuando aún no estemos seguros a qué se refiere, lo encerraré entre comillas. En
la situación en la que el Sr. Smith está cargado de preocupaciones, él es el objeto
de "cuidar.,
En el tercer caso, también, podríamos concluir justificadamente que el Sr. Smith
no le importa. Su interés está en la equidad. Quiere que se le acredite
En g. Al hacer algo, espera encontrar un sustituto aceptable para
cuidado genuino. Vemos un comportamiento similar en la mujer que profesa
ama a los animales y lleva a todos los callejeros al refugio de animales. La mayoría de los animales,
una vez en el refugio, sufrir la muerte. ¿Alguien a quien le importa elige rápido y
muerte misericordiosa por el objeto de su cuidado sobre precario y tal vez
vida dolorosa? Bueno, podríamos decir, depende. Que depende de nuestra cuidados
capacidades, en las condiciones del tráfico donde vivimos, en las condiciones físicas
ción del animal. Todo esto va exactamente al grano. Lo que hacemos depende
no sobre reglas, o al menos no totalmente sobre reglas, no sobre una determinación previa
nación de lo que es justo o equitativo, sino sobre una constelación de condiciones
ciones que se ven a través de los ojos de los que se preocupan y los ojos
de los cuidados. En general, no decimos con convicción que un
A la persona le importa si actúa de forma rutinaria de acuerdo con alguna regla fija.
El segundo caso es difícil. Este Sr. Smith tiene la noción de que preocuparse
implica un compromiso de sí mismo, pero le resulta difícil manejar la
compromisos que ya ha hecho. Él está en conflicto sobre cómo debería
gastarse. Sufrir un conflicto es otro riesgo de preocuparse, y
considere una variedad de posibles conflictos. De especial interés para nosotros será
la pregunta: ¿Cuándo debería intentar eliminar el conflicto y cuándo
¿Debería decidir simplemente vivir con el conflicto? Supongamos, por ejemplo,
que me preocupo tanto por los gatos como por los pájaros. (Debo usar "cuidar, en esta etapa
sin intentar justificar completamente su uso).
propio y no tener pájaros particulares al mismo tiempo
son indicaciones de mi preocupación por cada uno. Pero hay pájaros salvajes en mi
jardín, y están en perjl de los gatos. Puedo considerar el asunto
pensamiento erable. Alimento bien a los gatos para que no cacen fuera de
hambre. Cuelgo cascabeles en sus cuellos. Mantengo las jaulas de pájaros listas para las víctimas
tims soy capaz de rescatar. Mantengo los bebederos y comederos para pájaros inaccesibles para los
gatos. Más allá de esto, vivo con el conflicto. Otros pueden tener gatos
sin uñas, pero no haré esto. Ahora, el punto aquí no es si me importa
más para gatos que para pájaros, o si la Sra. Jones (que le quita las uñas a sus gatos)
se preocupa más por los pájaros que yo. El punto radica en tratar de discernir el
tipos de cosas en las que debo pensar cuando estoy en un conflicto de afecto.
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Cuando mi cuidado se dirige a los seres vivos, debo considerar su naturaleza,

formas de vida, necesidades y deseos. Y aunque nunca podré lograrlo
por completo, trato de aprehender la realidad del otro.

Este es el aspecto fundamental del cuidado desde adentro. Cuando miro
y pienso en cómo soy cuando me preocupo, me doy cuenta de que invariablemente hay
este desplazamiento del interés de mi propia realidad a la realidad del
otro. (Nuestra discusión ahora se limitará al cuidado de las personas.) Kier-
kegaard ha dicho que aprehendemos la realidad de otro como posibilidad. A
ser tocado, haber despertado en mí algo que perturbará a los míos
realidad ética, debo ver la realidad del otro como una posibilidad para la mía.
Esto no quiere decir que no pueda intentar ver la realidad del otro de manera diferente.
De hecho, puedo. Puedo mirarlo objetivamente recopilando datos fácticos; yo puedo
míralo históricamente. Si es heroico, puedo llegar a admirarlo. Pero este tipo
de mirar no toca mi propia realidad ética; incluso puede distraerme
de eso. Como dijo Kierkegaard:
Hablando éticamente, no hay nada tan propicio para dormir profundamente como la admiración
de la realidad ética de otra persona. Y de nuevo, éticamente hablando, si hay
cualquier cosa que pueda conmover y despertar a un hombre, es una posibilidad idealmente requiriéndose
de un ser humano. •
Pero sugiero que no vemos solo las posibilidades directas de

volviéndonos mejores de lo que somos cuando luchamos por la realidad del
otro. También nos ha despertado el sentimiento de "debo hacer algo".
Cuando vemos la realidad del otro como una posibilidad para nosotros, debemos actuar para
eliminar lo intolerable, reducir el dolor, satisfacer la necesidad, actualizar
el sueño. Cuando estoy en este tipo de relación con otro, cuando el
la realidad de los demás se convierte en una posibilidad real para mí, me importa. Si el coche
se mantiene, si dura lo suficiente para ser transmitido al otro,
si se vuelve visible en el mundo, depende de que yo sostenga el
relación o, al menos, actuando preocupado por mi propia ética como
aunque fue sostenido.
En este último caso, uno en el que algo se me ha escapado
o me eludió desde el principio, pero en el que me esfuerzo por recuperarlo o lograrlo,
experimentar un genuino cuidado de sí mismo. Este cuidado de uno mismo, de la ética
yo, sólo puede emerger de un cuidado por los demás. Pero una sensación de mi físico
Yo, un conocimiento de lo que me da dolor y placer, precede a mi cuidado.
para otros. De lo contrario, sus realidades como posibilidades para mi propia realidad
no significaría nada para mí. Cuando decimos de alguien, "Solo le importa
él mismo ", queremos decir que, en nuestro sentido más profundo, no le importa en absoluto.
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sólo tiene un sentido de ese yo físico, de lo que le da dolor y placer.

seguro. Todo lo que ve en los demás está preseleccionado en relación con su propio
necesidades y deseos. No ve la realidad del otro como una posibilidad
para sí mismo, pero sólo como un ejemplo de lo que ya ha determinado como
yo o no yo. Por lo tanto, éticamente es cero y está acabado. Su único

"devenir" es un devenir físico. Está claro, por supuesto, que debo decir
más sobre lo que se entiende por "realidad ética" y "yo ético", y yo
Volveremos a esta pregunta.
Sin embargo, no necesito ser una persona que se preocupe sólo por mí para poder
me comporto de vez en cuando como si solo me preocupara por mí mismo. A veces me comporto
de esta manera porque no he pensado detenidamente las cosas y
porque el modo de los tiempos empuja a los irreflexivos en su propia dirección.
Supongamos, por ejemplo, que soy un profesor que ama las matemáticas. yo
encontrarse con un estudiante que está haciendo mal, y decido tener

él. Me dice que odia las matemáticas. Ajá, creo. Aquí está el
una conversación con
problema. Debo ayudar a este pobre chico a amar las matemáticas, y luego
hacerlo mejor. ¿Qué estoy haciendo cuando procedo de esta manera? No lo intento
querer captar la realidad del otro como una posibilidad para mí. Yo no tengo
incluso preguntó: ¿Cómo se sentiría odiar las matemáticas? En cambio, proyecto
mi propia realidad a mi estudiante y decirle: Estarás bien si solo
aprender a amar las matemáticas. Y tengo "datos" para respaldarme. Ahi esta
evidencia de que la motivación intrínseca está asociada con un mayor rendimiento.
(¿Alguien alguna vez dudó de esto?) Entonces mi estudiante se convierte en un objeto de estudio
y manipulación para mí. Ahora, he elegido deliberadamente un ejemplo
que no se asocia a menudo con la manipulación. Por lo general, asociamos
manipulación con tratar de que nuestro estudiante logre algo de aprendizaje
objetivo que hemos ideado y fijado para él. Llevándolo al "amor
las matemáticas "se considera un objetivo noble. Y así es, si se le ofrece
como una posibilidad que vislumbra al observarme a mí ya los demás; pero luego yo
no estaré decepcionado de él, ni de mí mismo, si él permanece indiferente a
matemáticas. Es una posibilidad que puede no estar actualizada. Lo que importa
para mí, si me importa, es que encontró alguna razón, aceptable en su interior,
por aprender las matemáticas que se le exigen o que las rechaza audazmente
y honestamente. ¿Cómo se sentiría odiar las matemáticas? Que razones
¿Podría encontrar para aprenderlo? Cuando pienso de esta manera, me niego a hablar sobre
por las recompensas que podrían ayudarlo a seguir adelante. Debe encontrar sus recompensas. Yo no
comenzar con actuaciones deslumbrantes diseñadas para intrigarlo o para cambiar
su actitud. Empiezo, tan cerca como puedo, con la vista de sus ojos:
Las matemáticas son sombrías, confusas, aterradoras, aburridas, aburridas, aburridas. . . . Qué
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dieciséis ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO?
en el mundo podría inducirme a participar en él? A partir de ese momento,

luchar junto con él.
Aprehender la realidad del otro, sentir lo que siente tan cerca como
sible, es la parte esencial del cuidado desde el punto de vista del que cuida. Por si
Tomo la realidad del otro como posibilidad y empiezo a sentir su realidad,
siento, también, que debo actuar en consecuencia; es decir, me veo impulsado a actuar como
aunque por mí, pero por el otro. Ahora, por supuesto, esto
El sentimiento de que debo actuar puede o no ser sostenido. Debo hacer un comentario
mitment para actuar. El compromiso de actuar en nombre de los cuidados, un con-
interés en su realidad a lo largo del período de tiempo apropiado, y
la continua renovación del compromiso durante este lapso de tiempo son los
elementos esenciales del cuidado desde el interior. Mayeroff habla de
la devoción y la promoción del crecimiento en los cuidados. Deseo empezar
con entusiasmo y desplazamiento motivacional. Ambos conceptos
requieren elaboración.
PROBLEMAS QUE SURGEN EN EL ANÁLISIS DE ONE-CARING
Cuando pienso en cómo me siento cuando me preocupo, en cuál es mi estado de ánimo,

Veo que mi cariño siempre se caracteriza por un alejamiento de mí mismo.
Sin embargo, no todos los casos de cuidado son iguales ni siquiera desde el punto de vista del cuidado único.
Las condiciones cambian y el tiempo que dura el cuidado varía. Mientras me preocupo
por mis hijos a lo largo de nuestras vidas mutuas, puede que solo me importe
momentáneamente para un extraño necesitado. La intensidad varía. Me preocupo profundamente por
aquellos en mis círculos íntimos y más a la ligera para aquellos más alejados de
mi vida personal. Incluso con las personas cercanas a mí, la intensidad del cariño
varía; puede estar tranquilo y estable la mayor parte del tiempo y desesperadamente
ansioso en emergencias.
Los actos realizados por cariño varían con ambas condiciones situacionales
y tipo de relación. Puede que me moleste brevemente, como profesor, aprender
que a los estudiantes en general no les va bien en la materia que enseño, pero
realmente no se puede decir que se preocupe por cada uno de los estudiantes que tienen dificultades.
Y si no he emprendido un estudio serio de las dificultades mismas,
No se puede decir que se preocupe por el problema en tanto que problema. Pero si uno de mis
propios estudiantes está teniendo dificultades, puedo experimentar la absorción y
desplazamiento motivacional del cuidado. ¿Este cariño brota del
relación que he formado con el alumno? O es posible que me importara
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¿POR QUÉ CUIDARSE DE CUIDAR? 17
de alguna manera significativa antes de conocer al estudiante en particular?

Los problemas que surgen aquí involucran períodos de tiempo, intensidad y ciertos
aspectos formales del cuidado. Más tarde, exploraré el concepto de cadenas de
cuidado en el que ciertos vínculos formales con conocidos cuidados nos unen al
posibilidad de cuidar. La construcción de tales cadenas formales nos coloca en
un estado de disposición para cuidar. Debido a que mis futuros estudiantes están relacionados (por-
malmente, como estudiantes) para presentar, estudiantes reales por quienes me preocupo, soy
preparado para cuidar de ellos también.
A medida que nos damos cuenta de los problemas que involucran tiempo, intensidad y
relaciones formales, podemos vernos llevados a reconsiderar el requisito de

absorción. En cambio, podríamos describir el cuidado de diferentes tipos, en diferentes
diferentes niveles y en diversos grados de intensidad. Aunque entiendo
por qué varios escritores han elegido hablar de tipos especiales de
de relaciones particulares, afirmaré que estos esfuerzos oscurecen
la verdad fundamental. En el fondo, todo cariño implica ensimismamiento. los
La absorción no necesita ser intensa ni omnipresente en la vida del
cuidado, pero debe ocurrir. Este requisito no obliga a cuidar
en el modelo del amor romántico, como temen algunos críticos, por nuestra
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El ment puede estar latente durante largos períodos. Podemos decir de cuidar como Martin
Buber dice del amor, "perdura, pero solo en la alternancia de la actualidad
y latencia. "• La diferencia que hace este enfoque es significativa.
Cualesquiera que sean los roles que asumo en la vida, se me puede describir en términos constantes como
solidario. Mi primera e interminable obligación es encontrarme con el otro como uno ...
cuidando. Pueden añadirse restricciones formales a los requisitos fundamentales:
ment, pero no lo reemplazan ni lo debilitan. Cuando hablamos de pedagógica
cuidar, por ejemplo, lo desarrollaremos a partir del análisis del cuidado mismo
y no de los requisitos formales de la docencia como profesión. 9
Otro problema surge cuando consideramos situaciones en las que hacemos

naturalmente no me importa. Responder al llanto de mi propio hijo en la noche puede
requiere un esfuerzo físico, pero no suele requerir lo que podría ser
llamado esfuerzo ético. Naturalmente, quiero aliviar la angustia de mi hijo. Pero
recibir al otro como se siente y tratar de hacerlo son cualitativamente diferentes
modos ent. En el primero, ya estoy "con" el otro. Mi motivacion
las energías fluyen hacia él y, quizás, hacia sus fines. En el
segundo, puedo percibir vaga o dramáticamente una realidad que es repugnante
posibilidad para mi. Morar en él puede provocar repulsión y repugnancia.
Entonces debo retirarme. No me "preocupo" por esta persona. Puedo odiarlo
pero no necesito. Si hago algo en su nombre, defender sus derechos legales o
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Confirmo una declaración que hace, es porque me preocupo por mi propia ética
yo. Al cuidar de mi yo ético, me enfrento a la pregunta: ¿Debo intentar
¿importar? ¿Cuándo y para quién? Una descripción del ideal ético y su
La construcción será esencial para tratar de responder a estas preguntas.
Existen otras limitaciones en el cuidado. No solo los hay para
a quien no me importa, naturalmente, situaciones en las que la absorción trae
la repulsión y el desplazamiento motivacional es impensable, pero hay,
también, muchos más allá del alcance de mi cuidado. Rechazaré la noción de
cuidado universal, es decir, cuidar de todos, sobre la base de que es
imposible de actualizar y nos lleva a sustituir la solución de problemas abstractos
ing y mera charla para el cuidado genuino. Muchos de nosotros pensamos que no es solo
posible cuidar
entonces. de todos,
Podemos, en unpero moralmente
sentido obligatorio
que requerirá que debemos
una elaboración, hacer
"preocuparnos" por todos;
es decir, podemos mantener un estado interno de preparación para tratar de cuidar
quien se cruce en nuestro camino. Pero esto es diferente del cuidado de
al que nos referimos cuando usamos la palabra "cuidar". Si somos reflexivos
hijos, sabemos que la diferencia es grande, e incluso podemos deliberadamente
restringir nuestros contactos para que el cuidado del que somos capaces no
no deteriorarse a un mero cuidado verbal. No intentaré mantener
esta distinción lingüística, porque parece algo antinatural, pero
debe tener en cuenta la distinción real a la que apuntamos: en un sentido,
"cuidar" se refiere a una actualidad; en el otro, se refiere a un compromiso verbal
ment a la posibilidad de cuidar.
Podemos agregar tanto la culpa como el conflicto a nuestra creciente lista de problemas en
conexión con el análisis del cuidado. El conflicto surge cuando nuestro absorto-
El gobierno está dividido y varios cuidados exigen decisiones incompatibles
de nosotros. Otro tipo de conflicto ocurre cuando lo que quiere el cuidado
no es lo que pensamos que sería mejor para él, y surge otro tipo
cuando nos sobrecargamos y nuestro cariño se convierte en "cuidados y
dens. "Cualquiera de estos conflictos puede inducir a la culpa. Además, podemos sentir
culpables cuando no hacemos lo que el cuidado quiere que hagamos o
cuando producimos resultados que nosotros mismos no pretendíamos traer
acerca de. El conflicto y la culpa son riesgos ineludibles del cuidado, y su
sideración sugerirá una exploración del coraje.
Sin embargo, la persona solidaria no está sola en la relación solidaria. Algunos-
veces el cuidado se vuelve hacia adentro, como en el caso del Sr. Smith en su descripción de las preocupaciones
y cargas, porque las condiciones son intolerables o porque el cuidado
es singularmente difícil. Claramente, también necesitamos analizar el papel de la
preocupo por.
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¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO '? 19
EL CUIDADO
Queremos examinar tanto los efectos del cuidado en los cuidados como en los
Contribuciones especiales que el cuidado hace a la relación de cuidado. los
El primer tema ha recibido mucha más atención y también comenzaremos allí.
Veremos que para que (A, B) sea una relación afectiva, tanto A (el único-
cuidado) y B (el cuidado) deben contribuir de manera adecuada. Alguna cosa
de A debe recibirse, completarse, en B. Generalmente, caracterizamos
este algo como actitud. B busca algo que le diga que
A le tiene en cuenta, que no está siendo tratado de manera superficial.
Gabriel Marcel caracteriza esta actitud en términos de "disponibilidad
(disponibilite), la disposición para otorgarse y gastarse y hacer uno-
uno mismo disponible, y su contrario, indisponibilidad " .10 Uno que es desechable
reconoce que tiene un yo para invertir, para dar. Ella no la identifica
yo con sus objetos y posesiones. Ella está presente para los cuidados. Uno
que es indisponible, sin embargo, se cruza incluso con alguien que presiona
ent como ausente, como en otros lugares. Marcel dice: "Cuando estoy con alguien que
es indisponible, soy consciente de estar con alguien para quien no
existe; Me vuelvo sobre mí mismo ". 11
El que se preocupa, en el cuidado, está presente en sus actos de cuidado. Incluso en

ausencia física, los actos a distancia llevan los signos de la presencia:
ment en el otro, respeto, deseo por el bienestar del otro. Cuidar es
en gran parte reactivo y receptivo. Quizás se caracteriza aún mejor como
receptivo. El que se preocupa está lo suficientemente absorto en el otro para escuchar
él y sentir placer o dolor en lo que relata. Lo que sea que ella hace
porque el cuidado está incrustado en una relación que se revela como
absorto y en una actitud que calienta y reconforta a los cuidados.
La actitud solidaria, esta cualidad de la disponibilidad, impregna las situaciones
espacio-temporal cional. Hasta donde esté bajo mi control, si estamos conversando y si
Me importa, permanezco presente para ti durante toda la conversación. Por supuesto si
Me importa y a ti no, entonces puedo poner mi presencia a distancia, así
liberándote para abrazar la ausencia que has elegido. Esta es la forma de
dignidad en tales situaciones. Ser tratado como si uno no existiera es un
experiencia amenazadora, y uno tiene que reunirse,
y colóquelo en un entorno más seguro y acogedor. Y por supuesto,
es el camino de la generosidad.
El que es cuidado ve la preocupación, el deleite o el interés en los ojos de
la que se preocupa y siente su calidez tanto en el lenguaje verbal como en el corporal.
Para el cuidado, ningún acto en su nombre es tan importante o influyente como
Página 14
la actitud del que se preocupa por uno. Un acto importante realizado a regañadientes puede ser
aceptado graciosamente en la superficie pero resentido profundamente por dentro, mientras que
un pequeño acto realizado con generosidad puede aceptarse con indiferencia, pero
apreciado interiormente. Cuando la actitud del que se preocupa por uno revela car-
el cuidado resplandece, se hace más fuerte y no siente tanto que
se le ha dado algo como ese algo se le ha agregado. Y
este "algo" puede ser difícil de especificar. De hecho, para los que se preocupan y
cuidado en una relación de afecto genuino, no se siente la necesidad de
cualquier parte para especificar qué tipo de transformación ha tenido lugar.
Lo intangible que se agrega a lo cuidado (y a menudo,
simultáneamente, para el que se preocupa por uno) será una consideración importante para
nosotros cuando hablamos del cuidado en las instituciones sociales y, especialmente, en
escuelas. Puede ser que mucho de lo que es más valioso en la enseñanza
La relación de aprendizaje no se puede especificar y ciertamente no se puede especificar previamente.
La actitud característica del cuidado se manifiesta en el conocimiento.
Cuando el estudiante se asocia con el maestro, sintiéndose libre de iniciar
y para sugerir áreas de interés, él o ella es más capaz de detectar

la actitud característica incluso en situaciones formales, orientadas a objetivos, como
conferencias. Entonces, un breve contacto de ojos puede decir: "Yo sigo siendo el
estado en ti. Todo esto es de importancia e importancia variable, pero
todavía importas más ". No sirve de nada decir que el maestro que" realmente
"quiere que sus estudiantes aprendan las habilidades básicas que son necesarias para un
vida cómoda; No lo niego, pero la noción se empobrece
en ambos extremos. En un extremo, no es suficiente querer a los alumnos
para dominar las habilidades básicas. No quisiera elegir, pero si tuviera que elegir
ya sea que mi hijo sea un lector o un ser humano amoroso,
elija este último con presteza. En el otro extremo, también es por sí mismo
mucho, ya que sugiere que yo, como maestro solidario, debería estar dispuesto a hacer
casi cualquier cosa para llevar a mis alumnos a dominar las habilidades básicas. Y yo
no soy. Entre los intangibles que haría que mis alumnos se llevaran
es la sensación de que el tema con el que hemos luchado es fascinante
y aburrido, significativo y tonto, lleno de significado y tonterías,
desafiante y tedioso, y que sea cual sea la actitud que adoptemos,
no disminuirá nuestra consideración por los demás. El alumno es infinitamente más
importante que el tema.
Hasta ahora, en esta discusión sobre los cuidados, he enfatizado la actitud
la forma de cuidar de los que se preocupan y cómo su recepción afecta a los cuidados. Pero nosotros
están interesados también en la contribución única de los cuidados a los familiares
ción. En el capítulo tres, donde discutiremos el papel del cuidado en
Página 15
algún detalle, encontraremos el problema de la reciprocidad. Qué exactamente

¿El cuidado da a la relación o simplemente recibe? Qué
responsabilidad tiene por el mantenimiento de la relación? Puede él
ser culpado por el deterioro ético en el cuidado de uno? ¿Cómo se
homenaje a la construcción del ideal ético en el solidario?
CUIDADO ESTÉTICO
Voy a utilizar la expresión "cuidado estético" para preocuparme por

cosas e ideas, y justificaré ese uso un poco más tarde. Preocuparse por
las cosas o las ideas parecen ser una forma cualitativamente diferente de cuidar. Nosotros
utilice "cuidar" y "cuidar" en relación con los objetos. Decimos, "Sr.
Smith realmente se preocupa por su césped "y" la Sra. Brown se preocupa más por ella
cocina que para sus hijos ''. Pero con estas expresiones no podemos
de lo que hemos estado hablando en relación con el cuidado de personas.
Puede que estemos absortos en nuestro césped o cocina, pero no hay "otro"
hacia quien nos movemos, no hay otra realidad subjetiva que captar, y hay
no hay una segunda persona a la que se transmita una actitud. Tal "cariño" puede
estar relacionado con el cuidado de personas distintas a nosotros y, por supuesto, es

relacionado con las formas en que nos cuidamos, pero también puede distraer
nosotros de preocuparnos por las personas. Podemos estar demasiado ocupados "cuidando"
cosas para preocuparse por la gente.
También encontraremos desafiantes anomalías en esta área del cuidado.
La mayoría de nosotros suele tomar como peyorativo: "A él sólo le importa el dinero";
pero tenemos sentimientos encontrados cuando escuchamos: "Solo le importan las matemáticas.
matemática "o" A ella solo le importa la música ". En parte, reaccionamos de esta manera
porque creemos que una persona a la que solo le importa el dinero probablemente
herir a otros en su búsqueda, mientras que uno que sólo se preocupa por las matemáticas
matics es una persona inofensiva y, tal vez, admirable que le niega
auto los placeres de la vida en su devoción a un objeto esotérico. Pero otra vez,
Nuestra actitud puede estar parcialmente condicionada por un respeto tradicional y
respeto por lo intelectual y, especialmente, lo estético, aquí interpretado
como una especie de participación apasionada con la forma y el contenido no personal.
Será un problema especial para nosotros preguntar sobre la relación entre
ético y estético y cuán cariñoso, que tomaremos como el
mismo fundamento de la ética, puede ser mejorado, distorsionado o incluso
disminuido por la estética. De la escritura de TE Lawrence en su
Arabian Adventures 12 al desinteresado y escéptico "Mr.
Página 16
22 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CUIDAR?
A, " 3 vemos la pérdida de lo ético en una estética altamente intelectualizada.

Estar siempre apartado en los asuntos humanos, un observador crítico y sensible, para
permanecer preocupado pero no comprometido, estar tan afectado o
afectado de esa manera, es perder lo ético en lo estético.
Y, sin embargo, sentimos, tal vez con razón, que la receptividad característica de
El compromiso estético es muy parecido a la receptividad del cuidado. Conciencia
asume un modo similar de ser, uno que intenta captar o recibir
una realidad en lugar de imponerla. Mozart habló de escuchar melodías en su
cabeza, 14 y el matemático Gauss fue "capturado" por las matemáticas. 5
Del mismo modo, uno que se preocupa por otro se ve atrapado por los proyectos o proyectos del otro.
difícil y, a menudo, "escucha" sin que las palabras hayan sido dichas por el
otro. Además, el artista creativo, al crear, está presente en la obra de
el arte como se va formando: escuchar, mirar, sentir, contribuir. Este ex
cambio entre artista y obra, este sentido de un aprehendido o recibido
realidad que, sin embargo, es exclusivamente propia, fue atestiguada por Mozart
cuando preguntó: '' Ahora bien, ¿cómo es que, mientras estoy en el trabajo, mi
Las composiciones asumen la forma o el estilo que caracteriza a Mozart y
no son como los de nadie? " 16
La sensación de tener algo creado a través de un solo incidente
odontológicamente por uno es informado con frecuencia por los artistas. En una entrevista celebrando
a su ochenta y seis cumpleaños, Joan Min) trató de explicar su creatividad a
interrogar a los entrevistadores. Dijo cosas como: "El papel tiene magne-
tismo "," Mi mano es guiada por una fuerza magnética ", " Es como si fuera
borracho " Sin embargo, cuando hablamos de creatividad en las escuelas, nuestro enfoque es casi
.17
invariablemente sobre la actividad, la manipulación, la libertad. Y, simi-

Por lo general, cuando hablamos de cuidar, nuestro énfasis está nuevamente en la acción, en
lo que podría llamarse propiamente el cuidado. Pero el cariño que da
el significado para el cuidador se descarta con demasiada frecuencia como "sentimiento". En parte,
Nuestros enfoques de la creatividad y el cuidado son inducidos por el dominio
insistencia en la evaluación objetiva. ¿Cómo enfatizar la receptividad
que está en el núcleo de ambos cuando no tenemos forma de medirlo? Aquí nosotros
En última instancia, puede decidir que algunas cosas en la vida y en la educación deben ser
emprendido y sostenido por fe y no por evaluación objetiva.
Aunque la receptividad característica de la creación artística se asemeja a
el de cuidar, encontraremos diferencias importantes, y no estamos de ninguna manera
significa estar convencido de que la receptividad artística está correlacionada (en
seres humanos) con la receptividad del cuidado. Después de todo, hemos sabido
monstruos artísticos (Wagner me viene a la mente); hombres que han amado las orquídeas
y la vida humana despreciada (la ficción "Moriarty" de Conan Doyle); personas
Página 17
como algunos en el alto mando nazi, que amaban la música y el arte y, sin embargo,
realizó una crueldad increíble con los humanos. Y, por supuesto, somos
familiarizado con aquellos que se preocupan apasionadamente por sus familias, tribus o
naciones y arrancar la cabeza a los enemigos con gusto. No esperamos
luego, para encontrar una fórmula simple que describa lo que nuestros hijos deben
aprender a cuidar para cuidar de manera significativa a las personas. Pero nosotros
Verá, nuevamente, la gran importancia de los cuidados para contribuir a
relaciones afectivas. Quizás algunas personas encuentren ideas y cosas que respondan mejor
más vivo que los humanos a los que han tratado de cuidar.
Finalmente, en nuestra discusión de la educación, estaremos interesados en
cuidado tetico por derecho propio. Las escuelas y los profesores pueden, si así lo desean
hacerlo, ejerza cierto control sobre la naturaleza y la capacidad de respuesta del
posibles "cuidados" presentados a los estudiantes como materia, y no
pueden ser formas razonables de dar a los modos perceptivos / creativos una
lugar apropiado junto con los modos de juicio / evaluación.
CUIDAR Y ACTUAR
Regresemos brevemente al tema de la acción. Quizás, con una mejor noción

de lo que constituye los aspectos del cuidado en primera y segunda persona, podemos
ahora di algo más decidido sobre los actos de cariño. Nuestra motivación
La atención en el cuidado se dirige hacia el bienestar, la protección o la mejora
de los cuidados. Cuando nos importa, idealmente deberíamos poder presentar
razones de nuestra acción / inacción que persuadirían a una

observador interesado que hemos actuado en nombre de los cuidados. Esta
no significa que todos esos observadores tengan que estar de acuerdo en que habrían
se comportó exactamente como lo hicimos en una situación particular de cuidado. Pueden, en
al contrario, consulte las alternativas preferidas. Pueden experimentar la mismísima
conflictos que nos causaron ansiedad y aún sugieren un curso diferente de
acción; o pueden proceder de una manera puramente racional-objetiva y sugerir
hacer el mismo curso o uno diferente. Pero, con frecuencia, y especialmente en
caso de inacción, no estamos dispuestos a dar razones a un ob-
servidor; nuestro observador ideal es, y sigue siendo, una abstracción. Las razones por las que
daría, los que nos damos a nosotros mismos en un pensamiento subjetivo honesto,
debe estar tan bien conectado con los elementos objetivos del problema que
nuestro curso de acción claramente tiene una posibilidad de éxito en nombre
de los cuidados, o puede haber sido comprometido sólo con la esperanza de
efectuando algo para los cuidados.
Página 18
Cuidar implica salir del propio marco de referencia personal

en el del otro. Cuando nos importa, consideramos el punto de vista del otro, su
necesidades objetivas y lo que espera de nosotros. Nuestra atención, nuestra mental
la absorción está en los cuidados, no en nosotros mismos. Nuestras razones para actuar
Entonces, tienen que ver tanto con los deseos y deseos del otro como con la
elementos objetivos de su situación problemática. Si el gato callejero está sano
y relativamente seguro, no lo llevamos al refugio del condado; en lugar,
proporcionamos comida y agua y fomentamos la libertad. ¿Por qué condenarlo a
muerte cuando podría gozar de una libertad vagabunda? Si nuestras mentes están en nuestro
nosotros mismos, sin embargo, si nunca hemos abandonado realmente nuestro propio marco de
referencia: nuestras razones para actuar apuntan hacia nosotros y no hacia
el cuidado. Cuando queremos que se nos considere cariñosos, a menudo actuamos
rutinariamente de una manera que pueda fácilmente asegurarnos ese crédito.
Esto nos da, como forasteros a la relación, un camino, no infalible para ser
seguro, para juzgar el cuidado en busca de signos de interés real. Cuidar es actuar no por
regla fijada sino por afecto y consideración. Es probable, entonces, que la
las acciones de un solo cuidado serán variadas en lugar de estar sujetas a reglas; esa es ella
acciones, aunque predecibles en un sentido global, serán impredecibles en
detalle. Es de esperar una variación si el que dice preocuparse realmente se preocupa,
porque su fascinación está en la variable y nunca comprendió completamente a los demás,
en el otro particular, en un conjunto particular de circunstancias. Obligado por reglas
Las respuestas en nombre del cariño nos llevan a sospechar que el reclamante quiere
a la mayoría se le atribuye el cariño.
Actuar como solidario, entonces, es actuar con especial consideración por las
persona lar en una situación concreta. Actuamos para no lograr por nosotros mismos un
elogio sino para proteger o mejorar el bienestar de los cuidados.
Porque nos inclinamos por los cuidados, queremos actuar de una manera
que le agradará. Pero deseamos complacerlo por su bien y no por
la promesa de su agradecida respuesta a nuestra generosidad. Incluso esta motivación
actuar de modo que la felicidad y el placer de los cuidados sean
mejorado-puede no proporcionar una señal externa segura de cariño. Somos algunos
momentos en conflicto sobre lo que quieren los cuidados y lo que nosotros
creo que sería mejor para él. Como padres solidarios, por ejemplo, no podemos
actuar siempre de manera que produzcan reacciones inmediatas de placer de nuestra
niños, y hacerlo puede indicar el deseo, de nuevo, de ser acreditado con
cuidando.
El que cuida desea el bienestar de los cuidados y actúa (o
se abstiene de actuar-realiza un acto interno de compromiso) para promover
ese bienestar. Ella se inclina hacia el otro. Un observador, sin embargo, puede
Página 19
no ve el motivo crucial y puede malinterpretar los signos de actitud. los

El observador, entonces, debe juzgar la preocupación, en parte, por lo siguiente: Primero, el
acción (si ha habido una) o bien produce un resultado favorable para
el cuidado o parece razonablemente probable que lo haga; segundo, el cariñoso
muestra una variabilidad característica en sus acciones -actúa en una no-regla-
moda ligada en nombre de los cuidados.
Tendremos que dedicar algo de tiempo y esfuerzo a la discusión de
Comportamiento cariñoso y sujeto a reglas. Claramente, no pretendo defender el arbitraje
comportamiento tradicional y caprichoso, pero algo más parecido a la inconsistencia
defendido hace mucho tiempo por Ralph Waldo Emerson, 11 el tipo de comportamiento que
está condicionado no por una serie de principios estrechos y rígidamente definidos, sino
por una ética amplia y vagamente definida que se moldea en situaciones y
tiene el debido respeto por los afectos, debilidades y ansiedades humanas.
De tal ética no recibimos prescripciones sobre cómo debemos
comportarnos en determinadas condiciones, pero estamos algo iluminados en cuanto a
el tipo de preguntas que deberíamos plantearnos (a nosotros mismos y a los demás) en varios
tipos de situaciones y los lugares en los que podríamos buscar respuestas adecuadas.
Tal ética no intenta reducir la necesidad del juicio humano.
con una serie de "Tú deberás" y "No harás". Más bien, reconoce
niza e invoca el juicio humano a través de una amplia gama de hechos y
sentimiento, y permite situaciones y condiciones en las que el juicio (en
el sentido impersonal, lógico) puede ser debidamente dejado de lado en favor de la fe
y compromiso.
Establecemos fondos, instituciones o agencias con el fin de brindar la
el cuidado que juzgamos necesario. El impulso original es a menudo el
asociado con el cuidado. Que surge en los individuos. Pero como grupos de individuos
Los individuos discuten las necesidades percibidas de otro individuo o grupo, el
cambios perativos de "Debo hacer algo" a "Algo debe ser
hecho ''. Este

subjetivo a locambio
racionalvay acompañado
objetivo. ¿Lode undebe
que cambio de lo no
hacerse? OMSracional y
¿Deberías hacerlo? ¿Por qué deberían hacerlo las personas nombradas? Este tipo de pensamiento
no es en sí mismo un error; es necesario. Pero ha enterrado en su interior la semilla
de error mayor. El peligro es que el cuidado, que es esencialmente irracional
en que requiere una absorción constitutiva y un desplazamiento de la motivación
ción, puede transformarse gradual o abruptamente en un problema abstracto
resolviendo. Hay, entonces, un cambio de enfoque de lo cuidado al "problema
lem. "Surgen oportunidades para el interés propio, y las personas a las que se les ha confiado
los cuidados pueden carecer de la necesaria concentración en aquellos a quienes se cuida. Reglas
se formulan y la variación característica en respuesta a las necesidades
Página 20
de los cuidados pueden desaparecer. Aquellos a quienes se les ha confiado el cuidado pueden concentrarse
en satisfacer los requisitos formulados para el cuidado y no ser
presentes en sus interacciones con los cuidados. Así el cariño desaparece
y solo queda su ilusión.
Está claro, por supuesto, que también existe el peligro de no pensar en objeciones.
tiva y bien en situaciones de cuidado. Entramos con bastante propiedad en un
modo objetivo mientras tratamos de decidir exactamente qué haremos en nombre de
el cuidado. Si estoy mal informado, o si me equivoco, o si actúo
impetuosamente, puedo herir en lugar de ayudar a los cuidados. Pero uno puede
argumentan, aqu, que el fracaso est todava en el nivel de absorcin y motivacin
Desplazamiento nacional. ¿Me comportaría tan descuidadamente por mí mismo?
Se Parecería, entonces, que uno de los mayores peligros para el cuidado puede ser
cambio prematuro a un modo de objetivo racional. No es ese objetivo
El pensamiento no sirve de nada en problemas en los que se requiere cuidado, pero es de
uso específico y particular, y tendremos que indagar profundamente en lo que
llamará "puntos de inflexión". Si el pensamiento racional-objetivo se va a poner en
el servicio del cuidado, debemos en el momento oportuno apartarlo del
abstracto hacia lo que tiende y de regreso a lo concreto. A veces nosotros
debe suspenderlo en favor del pensamiento y la reflexión subjetivos, permitiendo
tiempo y espacio para ver y sentir. El modo racional-objetivo debe
ser continuamente reestablecido y redirigido desde una nueva base de compromiso
ment. De lo contrario, nos encontramos profundamente, tal vez inextricablemente, en-
entrelazados en procedimientos que de alguna manera solo sirven a ellos mismos; nuestros pensamientos
están separados, completamente separados, de los objetos originales de cuidado.
Ahora, antes de mirar más de cerca al que se preocupa, tal vez
deberíamos considerar hacia dónde nos dirigimos a través de nuestro análisis del cuidado.
ÉTICA Y CUIDADO
Generalmente se acepta que la ética es el estudio filosófico de la moralidad,

pero también hablamos de "ética profesional" y "ética personal".

Cuando hablamos de la segunda forma, nos referimos a algo explicable: un
conjunto de reglas, un ideal, una constelación de expresiones -que guía y justifica-
tifica nuestra conducta. Uno puede, obviamente, comportarse éticamente sin comprometerse
en la ética como una empresa filosófica, e incluso uno puede armar un
una especie de ética, es decir, una descripción de lo que significa ser moral con
cuestionando seriamente lo que significa ser moral. Tal ética,
me parece, puede o no ser una guía para el comportamiento moral. Que depende, en
Página 21
de manera fundamental, en una valoración de la respuesta a la pregunta:

¿Qué significa ser moral? Esta pregunta será fundamental para nuestra investigación.
tigación. Usaré "ético" en lugar de "moral" en la mayoría de nuestras discusiones.
pero, al hacerlo, asumo que comportarse éticamente es comportarse
bajo la guía de una explicación aceptable y justificable de lo que
significa ser moral. Comportarse éticamente es no comportarse conforme
con cualquier descripción de moralidad, y afirmaré que el sistema ético
Los términos no son equivalentes simplemente porque incluyen reglas relativas a la
mismos asuntos o categorías.
En un argumento a favor de la posibilidad de una moral objetiva (contra
relativismo), el antropólogo Ralph Linton señala dos puntos principales que
puede servir para iluminar el camino que estoy tomando. En un argumento, parece
decir que el relativismo ético es falso porque se puede demostrar que toda la sociedad
Las etias establecen reglas de algún tipo para el comportamiento en ciertas categorías universales
gories. Todas las sociedades, por ejemplo, tienen reglas que rigen el comportamiento sexual.
Pero Linton no parece reconocer que el contenido de las reglas y
no solo su mera existencia, es crucial para la discusión de la ética. Él
dice, por ejemplo: "... prácticamente todas las sociedades reconocen el adulterio como
ético y castigar a los infractores. El mismo hombre que prestará su esposa a
un amigo o hermano se enfurecerá si va a otro hombre sin
con su permiso " .19 Pero, sin duda, nos gustaría saber qué concep-
moralidad hace que el adulterio sea "incorrecto" y el préstamo de la esposa
'' correcto ''. Con la misma seguridad, un sistema ético que toma tales decisiones puede-
no ser equivalente a uno que encuentra aceptable el adulterio y el préstamo de la esposa
inaceptable.
En su segunda afirmación, a Linton se une un número sustancial de
antropólogos. En pocas palabras, la afirmación es que la moralidad se basa en
características y necesidades humanas comunes y que, por tanto, un objetivo
la moralidad es posible. Que la moralidad está arraigada de alguna manera en los
se acuerda necesidades, sentimientos y cogniciones. Pero no me queda claro que
puede pasar fácil o rápidamente de ese acuerdo a una afirmación de que el objetivo
la moralidad es posible. Podemos describir el impulso moral como
surge en respuesta a necesidades y sentimientos particulares, y es posible que podamos
describir la relación de pensar y actuar en relación con ese impulso;

pero a medida que abordamos estas tareas, podemos alejarnos más de la noción de
moral objetiva y más cercana a la convicción de que un sub-
ncleo subjetivo, un anhelo de bondad, proporciona lo que la universalidad y el
bilidad hay en lo que significa ser moral.
Quiero construir una ética en el cuidado y afirmaré que hay una forma
Página 22
28 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CAJUNO?
de cuidar natural y accesible a todos los seres humanos. Ciertos sentimientos

actitudes y recuerdos se reclamarán como universales. Pero la propia ética
no incorporará un conjunto de juicios morales universalizables. De hecho, moral
el juicio no será su principal preocupación. Es muy común entre los filósofos
sophers para pasar de la pregunta: ¿Qué es la moralidad? a lo aparentemente
pregunta más manejable: ¿Qué es un juicio moral? Fred Feldman,
por ejemplo, hace este movimiento desde el principio. Él sugiere:
Quizás podamos arrojar algo de luz sobre el significado del sustantivo "moralidad" al
considerando el adjetivo "moral". • Proceder de esta manera nos permitirá
tratar con un concepto menos abstracto y, por lo tanto, podemos tener más éxito. Entonces
en lugar de preguntar "¿Qué es la moral? •• escojamos uno de los más interesantes
de estos usos del adjetivo "morat •• y preguntar en su lugar," ¿Qué es una moral
¿juicio?' • 20
Ahora, no estoy argumentando que este movimiento esté completamente equivocado o que
nada se puede ganar mediante la consideración de juicios morales, pero
tal movimiento no es la única posibilidad. Podríamos elegir otro interés
uso del adjetivo y preguntar, en cambio, sobre el impulso moral o
actitud moral. La elección es importante. El énfasis de larga data en
El estudio de los juicios morales ha conducido a un grave desequilibrio en la dis-
cussion. En particular, es bien sabido que muchas mujeres, quizás la mayoría
mujeres-no abordan los problemas morales como problemas de principio,
soning y juicio. Discutiré este problema en profundidad en el capítulo
cuatro. Si un segmento sustancial de la humanidad se acerca a los problemas morales
a través de una consideración de los elementos concretos de las situaciones y una
se consideran a sí mismos como bondadosos, entonces tal vez debería hacerse un intento
para iluminar el estudio de la moralidad en este modo alternativo. Además, tal
un estudio tiene implicaciones significativas, más allá de la ética, para la educación. Si
La educación moral, en un doble sentido, está guiada sólo por el estudio de la moral.
principios y juicios, no sólo las mujeres se sienten inferiores a
hombres en el ámbito moral, pero también la educación misma pueden sufrir de empobrecimiento
guía moral errada y unilateral.
Por lo tanto, construir una ética basada en el cuidado parece tanto razonable como importante.
Bien se puede preguntar; En este punto, si una ética así construida será una
forma de "ética situacional". No es, ciertamente, esa forma de acto-utilidad
tarianismo comúnmente denominado "ética de la situación ... 21 Su énfasis no está en

las consecuencias de nuestros actos, aunque estas no son, por supuesto, irrelevantes
vant. Pero una ética del cuidado ubica la moralidad principalmente en la condición previa al acto.
conciencia del que se preocupa por uno. Sin embargo, no es una forma de agapismo. No hay
Página 23
manda amar ni, de hecho, ningún Dios para hacer el mandamiento. Pelaje-
Luego, rechazaré la noción de amor universal, encontrándola inalcanzable en
cualquier sentido excepto el más abstracto y, por tanto, una fuente de distracción. Mientras
mucho de lo que se desarrollará en la ética del cuidado se puede encontrar, además,
en la ética cristiana, habrá diferencias importantes e irreconciliables.
El amor humano, el cuidado humano, bastarán para fundar un
principio moral.
Debemos mirar aún más de cerca ese amor y cariño.

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17/10/2020 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CUIDAR?

LA NATURALEZA FUNDAMENTAL DEL CUIDADO

LA quiero preguntar qué significa cuidar y establecer las líneas a lo largo de

8 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO?

"Tengo mi resultado, pero aún no sé cómo obtenerlo". •

Vata una estructura compleja de recuerdos, sentimientos y capacidades. Más lejos,

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO? 9

¿QUÉ SIGNIFICA CUIDAR?

Nuestros diccionarios nos dicen que "cuidado" es un estado de sufrimiento mental o de

10 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO?

Comencemos a mirar el cuidado desde afuera para descubrir las limitaciones

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO? 11

12 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CAIUNO?

casos al final: A se preocupa, B no le importa, C se preocupa pero no por D, etc.

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO? 13

14 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO?

Cuando mi cuidado se dirige a los seres vivos, debo considerar su naturaleza,

por completo, trato de aprehender la realidad del otro.

Pero sugiero que no vemos solo las posibilidades directas de

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO? 15

sólo tiene un sentido de ese yo físico, de lo que le da dolor y placer.

yo o no yo. Por lo tanto, éticamente es cero y está acabado. Su único

encontrarse con un estudiante que está haciendo mal, y decido tener

dieciséis ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO?

en el mundo podría inducirme a participar en él? A partir de ese momento,

PROBLEMAS QUE SURGEN EN EL ANÁLISIS DE ONE-CARING

Cuando pienso en cómo me siento cuando me preocupo, en cuál es mi estado de ánimo,

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CUIDAR? 17

de alguna manera significativa antes de conocer al estudiante en particular?

relaciones formales, podemos vernos llevados a reconsiderar el requisito de

Otro problema surge cuando consideramos situaciones en las que hacemos

18 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO?

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO '? 19

El que se preocupa, en el cuidado, está presente en sus actos de cuidado. Incluso en

20 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO?

y para sugerir áreas de interés, él o ella es más capaz de detectar

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO? 21

algún detalle, encontraremos el problema de la reciprocidad. Qué exactamente

Voy a utilizar la expresión "cuidado estético" para preocuparme por

estar relacionado con el cuidado de personas distintas a nosotros y, por supuesto, es

22 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CUIDAR?

A, " 3 vemos la pérdida de lo ético en una estética altamente intelectualizada.

invariablemente sobre la actividad, la manipulación, la libertad. Y, simi-

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO? 23

Regresemos brevemente al tema de la acción. Quizás, con una mejor noción

razones de nuestra acción / inacción que persuadirían a una

24 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CUIDAR?

Cuidar implica salir del propio marco de referencia personal

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO? 25

no ve el motivo crucial y puede malinterpretar los signos de actitud. los

hecho ''. Este

26 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CUIDAR?

Generalmente se acepta que la ética es el estudio filosófico de la moralidad,

pero también hablamos de "ética profesional" y "ética personal".

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO? 27

de manera fundamental, en una valoración de la respuesta a la pregunta:

describir la relación de pensar y actuar en relación con ese impulso;

28 ¿POR QUÉ CUIDARSE DE CAJUNO?

de cuidar natural y accesible a todos los seres humanos. Ciertos sentimientos

tarianismo comúnmente denominado "ética de la situación ... 21 Su énfasis no está en

¿POR QUÉ CUIDARSE DE CARINO? 29

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