Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Una empresa es una forma de organización constituida por una o más personas que se
asocian para planificar y llevar a la práctica la producción y/o transformación de algún
producto o servicio, con el fin de venderlo y así obtener beneficios económicos.
La empresa debe existir formalmente para que el Estado la reconozca como tal. Al
convertirse en una sociedad, sus socios asumen una serie de obligaciones tanto laborales
cuanto tributarias, y la responsabilidad por todos los actos que ella realice.
El objetivo de este trabajo es aprender acerca de la constitución de las empresas, así como
todos los pasos que se deben seguir para la formalización de dicha empresa. A través de
una investigación documental se logró recopilar toda la información necesaria para
realizar el presente trabajo.
Constitución de una empresa
Durante el proceso de creación de una empresa, como persona jurídica, debes tener en
consideración que una de las primeras cosas a determinar es el tipo de sociedad que va a
ser tu negocio
Existen diferentes tipos de constitución de una empresa. Puede ser individual cuando está
integrada por una sola persona, en forma de sociedad anónima o de responsabilidad
limitada, siguiendo el esquema de cooperativa y otras muchas variantes existentes en el
ámbito económico actual
De acuerdo a la definición indicada por el Servicio de Impuestos Internos (SII) esto es “Una
asociación de personas naturales o jurídicas dedicadas a una actividad comercial con fines
de lucro”. Sus tipos son:
Sociedad de Responsabilidad Limitada (SRL): El más usado por socios con relación de
confianza, quienes buscan pocas formalidades en la administración. Los socios pueden ser
personas naturales o jurídicas y deben responder de forma limitada por el monto o capital
que aporten. la sociedad de responsabilidad limitada es administrada por todos los socios,
de común acuerdo; es decir, todas las decisiones deben ser tomadas por unanimidad.
Sociedad por Acciones (SPA): es el tipo de sociedad más utilizado por emprendedores que
buscan levantar capital. Puede estar conformada por una o más personas. Su capital se
divide en acciones y son los accionistas quienes responden por la sociedad según el monto
de su aporte.
Sociedad Anónima (SA): está hecha para manejar negocios de alto capital, porque es fácil
el ingreso o salida de potenciales inversionistas a la organización mediante la venta de
acciones. Acá, el socio debe responder hasta el monto en dinero que aportó por lo que su
responsabilidad es limitada. En la Sociedad Anónima, exige que las decisiones o
determinaciones se realicen vía votación, según lo que opine la mayoría.
3.-Necesidades económicas del proyecto.- En principio las sociedades civiles son más
baratas en su constitución ya que no es necesaria su inscripción en el Registro Mercantil y,
por lo tanto, tampoco tienen que pasar por el Notario. Además, no se exige capital inicial
mínimo. Sin embargo, la Sociedad Limitada, la Anónima, las Sociedades Laborales y las
Cooperativas de Trabajo exigen escritura notarial y un capital mínimo para empezar. No
obstante, ese desembolso inicial puede compensar si lo que se pretende es limitar la
responsabilidad futura a ese capital y por lo tanto proteger nuestro patrimonio personal.
5.-Imagen ante los clientes.- Por último, hay que tener en cuenta que muchos clientes y
proveedores se fijarán en la forma jurídica de la empresa para determinar la mayor o
menor permanencia de la misma, y, por lo tanto, la mayor o menor fiabilidad. Las
sociedades mercantiles (limitada o anónima) dan mayor sensación de permanencia.
1.- El Registro:
Lo primero que debes saber es cuáles son los Registros Mercantiles que corresponden a tu
jurisdicción. Y cada uno tiene autonomía para establecer los requisitos de cada trámite y
definir los lapsos de respuesta; es decir, cada uno pide papeles distintos y se tardan el
tiempo que consideren.
Éste es el primer paso que se hace en el Registro, con la finalidad de verificar que el
nombre que escogiste para tu empresa no esté reservado por otra persona. La
recomendación es ser creativos en el nombre o acompañarlo de un número.
Si el nombre que elegiste para tu empresa está libre, deberás pagar el monto estipulado
para la reserva del mismo. El Registro te entrega una planilla que deberás pagar en los
Bancos autorizados (casi todos del Estado). Te concederán un plazo mínimo de tres días
hábiles, dependiendo de la oficina, para hacer el pago, si no lo realizas en ese tiempo o no
lo presentas ante la taquilla correspondiente, el nombre quedará liberado y deberás
comenzar desde cero el proceso. En algunos casos hay que hacer cita previa.