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La muerte y la vida (si, que nombre mas original)

La muerte y la vida, envueltos en un vals eterno,

Giran, se retuercen, retroceden, se escapan

Salvajes danzan, se burlan y están serios,

Transfiguran nuestro camino, y nos arman puentes

Y Destruyen al mundo con sus pisadas.

No nos dan alas, ni podemos tenerlas.

La suerte está echada

Estamos a merced de este baile de celebración.

Se festeja la vida, y la existencia misma con esto,

Trata de borrarla.

Dias de aquellos

"Estamos tendidos en la cama, con capas sobre las cabeza, resonando con unas
trompetas de sollozos, clamamos por la que cruza la puerta.

La música está en lo mas alto, tiñendo con verbo nuestros halagos, y el cielo está en
su apogeo, y los colores falsos comentan su orgullo, agitando el río con piedras.

Saltando al ritmo de la hiedra, los necios no tienen nociones, y cantando con ustedes
este dia, desde muy abajo se oyen las voces.

La juerga nos tiembla, y nosotros la aquietamos, sujetando con negros cordeles, las
riendas de su risa inocente, y de sus rotos cascabeles.

El mundo está estallando, y con su celebración se atora, mientras nosotros escapamos


sin caballos, hacia un río mucho mas profundo, una cuna de fiestas, de esas sin
canciones."

Niño

"Esta tarde conocí a un pequeño, que reía como si fuera música, y cantaba como si no
fuera hombre.

He encontrado este día un regalo, que coló por la puerta, que por andar de
concienzudo, anoche dejé abierta.
Ha llegado hasta mi almohada, y se a quedado prendado, en uno de mis sueños, del
recuerdo de un cerro lejano.

Ha traído con el la alegría, de una de esas cosas que espero entender, y ahora me
tiene buscando, una perla que me ayude a correr.

Blando el colchón de espinas, que trae este niño consigo, a ayudarme a pensar en lo
indebido, en lo bello, y en lo adictivo.

Cuentas falsas son las que trae, a pasarme por verdaderas, que trae del lomo de un
par de letras, y acarrea un tiempo de silencio, un tiempo de no recuerdo."

No escribo lo que escribo

Son muchas cosas, y ninguna en particular,

que me traen a pensar en ti, y no pensar en lo tuyo

y así que le digo adiós al recuerdo, y no recuerdo lo que le digo,

y por eso vuelvo por estos lugares, lugares a los que ya no vuelvo,

y a mirar aquel cielo que nunca había visto, y que por nada veré de nuevo,

y sollozo como nunca, como no sollozaré jamás,

y reemplazo mi sinceridad, por una mas sincera y menos reemplazada

y llego a encontrarme aquí mismo, a encontrarme donde no estoy,

y escucho risas que aun no son reídas, y que nunca lo serán,

y contento por haberlo hecho, me descontento por sentir aquello,

y vuelvo a tener un pensamiento, y me deshago de lo pensado,

y se cual es mi alivio, y desconozco como tenerlo,

y vuelvo a escribir poemas, poemas que ni siquiera escribo.

Pensando de noche

Esta noche no dormí, porque estaba pensando en ti.

Estaba filtrando el dolor, escribí toda la noche,

intentando crear una historia

No salió nada que me gustara, y me desviaba de lo que quería.


Mi manos me porfiaban, y escribían otras cosas.

Escribí sobre conversaciones inexistentes, con personas inventadas,

compartí llantos y risas con sombras de muñecos de trapo,

caminé por senderos que ya no están mas, y que no van a volver,

subí cerros, y me ladraron los perros, porque estaba solo, ya no estaba contigo,

me quite del cuerpo al llegar a un claro conocido,

todo el peso del llanto, que no había caído,

y allí en medio de un recuerdo, una golondrina ciega paso por mi lado,

iba y volvía rauda, y me invitaba ir con ella,

y cuando me decidí a seguirla, cual si fuese un eco,

estuvo, se mantuvo y se fue,

y quede solo de nuevo en la noche, para seguir caminando,

para seguirte buscando.

Sobre ti

Si quisiera escribir un libro, estaría lleno de páginas sobre ti,

un libro sin muchas lagrimas, un libro para no dejar de sentir,

escribiría con poca gana, y con mas ánimo por terminar,

que por ver la obra realizada.

Comenzaría hablando amores, y terminaría lanzando pestes,

contaría sobre aquel cerro, y acabaría con nuestras flores.

Si una llama pudiera ser veneno, tragaría fuego a mares,

solo para que termine mas rápido,

por la ventaja de parar ya, con este leve recuerdo,

que molesta como una espina, tan diminuta que apenas,

me hace querer acabar con esto.

Si quisiera escribirte un libro, lo haría para encerrarte en sus páginas,

y poder seguir avanzando, hacia donde me lleve la vida,


si quisiera escribirte un libro, no sería un libro para ti,

sino uno para quemar, como ha de merecer,

todo lo que de ti queda en mi.

Soñando despierto

Cuando se esparcen los astros, comienzan a bajar las musas.

Las espero siempre en la puerta, y no llegan nunca,

y como cada noche, entro y busco una espina.

Me pincho apenas un poco, y demasiado es lo que obtengo,

por no tener cuidado, por no importarme el resultado.

Si se me va de las manos, como una fuente conocida,

saldría a chorros la vida, y por no quedar en mas que lagrimas,

el papel repleto, a mis sueños no imitaría.

En un tintero de plata, recojo los recuerdos que sangro,

para ordenar en letras, los síntomas que exhalo,

mas cuando con el sol llegue el sueño, aun no habrán llegado a visitarme,

Y las heridas habrán cerrado, pero ninguna para siempre,

Quizás solo por un dia, quizás hasta que despierte.

En blanco y negro

Con los ojos cerrados alzaré la vista

y en verde veré el cielo.

Me marcharé de mi,

y recorreré la tierra,

levantando el azul polvo.

Y bañare en estanques mis formas,

Y secare de mi cuerpo las rosadas aguas.


Los hombres cambiaran sus tonos,

Su piel se convertira en quimera,

mitad calipso, mitad crema.

Cuando la roja lluvia caiga,

El sol con claro estornudo de violeta teñirá el cielo,

Obligándome a abrir nuevamente los ojos,

Y el canto el cielo luego de cesar,

Cruzara todo en esplendor,

Tocando al mundo por los lados,

Y perplejo veré, los colores que ya conoci,

en el arcoíris de mis sueños.

La puerta y el viejo

¡Toc-toc-toc!

Golpearia ese hombre la puerta.

Los días se volverían de primavera,

Y la diversión comenzaría a surgir,

Y bajaría corriendo las escaleras,

Y chorros de colores comenzarian a salir.

Si no, me escondería tras el sillón,

Esperaría hasta la hora que fuese,

Expectante como siempre por escuchar esa puerta.

¡Toc-toc-toc!

¡No! son recuerdos de la niñez.

No aguanto pensar esas travesuras,

Ni esperar la misma estupidez.

No hay temporada estival que a mi llegué,

Sin antes cambiar de canción,

Pero hoy soy preso del pasado,


Y la vieja nostalgia me enrola,

Pero yo durmiéndome le digo:

Ya es tarde para el viejo,

Ya es tarde para los dos.

Ilegal

"Invirtamos nuestras vidas, pasando de libros y de trajes,

Rompamos los arreglos: no mas flores para los muertos

Reventemos las calles y levantemos el polvo,

Que estornuden las corbatas y los delantales,

no esperemos a que el sol baje,

salgamos a buscar a aquella diosa,

que se esconde en lo diario:

este dia queremos esa belleza,

y gritarle a todos lo que esperan y sueñan

que hay algo de ilegal en esa sonrisa"

Los juegos y el viejo

Sigue rodando, sigue rodando,

No des pasos en falso, o caerás al vacio,

Y aprieta mejor los botones,

O perderás antes de verlo concluido.

No esperes, no esperes,

Nunca vendrá a tocar la puerta.

No irán juntos por esas tiendas,

Si acaso son alguna vez mas que un sueño lejano,

no será porque él te llevó consigo.

Sigue corriendo, sigue corriendo,


El record siempre, siempre puede ser empujado,

No malgastes tus tiros,

O serás tu el disparado.

No llores, no llores,

No hace falta extrañar a nadie, niño.

No hace falta despertar en las noches,

Ni hacerle caso a esas voces.

Sigue jugando, sigue jugando,

Las oportunidades son infinitas,

Continuaras perdiendo por siempre,

Y nunca irás a la deriva,

Nunca habrá un traidor.

No duermas, no duermas,

Que aquí tienes un sueño mejor:

“Te llevaré en mis brazos,

Te mostraré que este mundo es lo mejor”

A ti:

Despues de la vida, te escribo un poema,

Después de llegar, después de cerrar la puerta.

Despues de tanto tiempo, te escribo silente:

“No te olvido”, y no me sorprende.

No cuento que extraño tu pelo, por el que me deslizaba en circulos,

Ni que tus ojos son como estrellas,

Ni tu piel suave como una flor.

No ruego a ningún dios ni a la vida porque vuelvas:

Nunca te has ido, y no soy poeta.

Si escribo es porque miro,

como la vida se revuelve,


Como nos hace mirar atrás,

Como nos hace querer recordar,

nos hace enfermos y nos hace tropezar.

Te escribo porque tu recuerdo me hace sentir mal,

Porque pensar en ti duele,

Porque siento que perdi,

Que arruine una gran oportunidad.

Pero también escribo porque se que es mentira,

Y para contarme un cuento, que nunca debo olvidar:

Que la vida sigue siendo la misma,

Y que en realidad,

El pasado siempre será el mismo,

Y nunca viviremos en el.

Que tu sonrisa se acabo hace tiempo,

Que tus besos, partieron de mi,

Que tu cariño escapo con el viento,

Y que el mundo sigue igual de bien asi.

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