BREVES IYOCIO]YBS

DE
A S CE TICA
o
PEQUEÑO TRATADO
DE LA PERFECCION CRISTIAI{A
EN
PREGUNTAS Y RESPUESTAS-

POR EL
P. SANTIAGO JUDERMANS
REDENTORISTA

NUEVA EDICION

o
EDICIONES PAULINAS
Giotto \Iq BE Idixcoac D. F;
-
 PREFACIO
ImPdmatur.

Lo decretó el Excmo. Y Revmo. Sr'

Existen en nuestta lengua
innumera-
Arzobisoo.
' DoY
!!tt, l!r": obras mérito sobre-r;;;'í",
esprrrtual,
dy gran la aida
Pe. ora originales
' tncompardble¡ escritos
Dr. Luic J, Soni- f)ii,
Nléxico 7 Dic. 1948.
. de Jesús, San Jua.n d, h á;;; ;r"'V.;-
nerables Padre¡ Fray r
uis-¿r-C"r"r"rr¿i
¿1 I ons o R o d rí
gu e z, í"1' ; r-; i;r';i: ";
otros,
.ord traducidas d, o;;o; íriri;l
c.or¡to las obras de Sr"
le1, S3n átf onso ltr.'
F,r.;;;;"';;"3:"_
de L;;;;;," Eík;;-
pis, Escúpoli y otros.

^!::: to, íroy

DACTICAS
escasa.¡ las obras Df_
o 2, €njeñ¿¿nta, que ,zbar_
l*r.rn.un reducido tolumen i"l" t"
teria de la Áscélica. á_
. E:ro. det'iciencia, m.uchas
o,b o d o,
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.t)ecej com_
!.: 6¿ e¡crtbtt
¿o
o,
;;;;;;i
?,' ! +, ; "' p ;, i o- t
ie bresente obriia. áunqr.¿g
:;-
en elias ,o ,, ,niurntre nada;";'r;"";;;;
Impreso, en 'México. México.
-
Queda hecho cl dePósito
 en forma má.s amplia y extefisa'
en otras INTRODUCCION
de mayor aolumen y *1!o'
tnerl.to'
"rirr*ot,
o,bras I-¿Qué
ni obstante' 7ue ella' prectsa-' es Ascética?

;;;;;;b,
'iJiro,'po,¿rá su t'orma comP.end.ioso ! .*''-- Ascética es la ciencia de la vida espiritual.
ier útil en colegios' nootcla',
'iír',"íLírll.nto¿o', e.tc'' v también para et También puede ilecirse: Ascética es Ia. ciencia
*ro' iort;rular y prioad-o' á
dt¡ertire,m.os' que enseña llegar al pleno desarrollo de l¿
vida
matertas
7", íitrr"rr, qí'' lot dit'erentes espirituaf; y, como el pleno desarrollo ¿" l"
';i I tiadas,P or ta espiritual^ constituye "ia,
;,;' ;;:;" ;; i ionod on amP _la
perfección a.U"rrr, fu"J"
o po''lo diligente lectura
decirse: Ascétic¿ es la ciencia que trata
de'la per.
i-íiir"i;r"-í'il fección ctistie"a"
de los autores as cétt'cos '
. La ascética es una ciencia emin"rrt"merrt prá.,
tfa, que enseña el ejercicio y l" pr¿.tlo ¿f lrl
Ia
vlrtudes.

Z--¿Qué es vida espiritual?

Vida espíntual se toma'-aquí en el mismo

sentido que sobrenatural y i"rig*r.
vid.a, distinta de ia vicia, Áarural ";d;
v ,"-r'"rro,
", "l ;r;;;;;;:
a ella, que se lnfunde al ¿rlma
tismo.

Por esre mocivo el santo bautismo es llama,io

r€enemción según_las paiabras del Señor: "a;;
no renacíere por el agua y el Espíritu Srrto.
puede enrar en ei reinc de Dios" (l). "o
(1) San Juan 3, 5.

_6-
I
 3.-¿Ño basta, para salvatnos'y óantificar- La vida sobrcnatural, llamada vida
_.
de Ia gracia,
no.,
-rrida
Ia natural que .tenemos? :
alcanza.su completo y' a.fi"¿riuo
l"-.;"ii".;, j"
de,la gracia es para la gloria lo que
ij",il"-^11,,",0"
e6 la semllla para la planta.
Nq basta, para salvarno§ y santificarnos'
la satva'
la vida natural que tenemos, porque a. ¿Qué es la gracia santificanté?
ción v santificación de una aima es una
oDra

,op""io" a las fuerzas naturales' La gracia santificante es un don

sobrenafu,
ralgraruito que el Espírit, S"ñ
Aclaremos esta resPuest¿ con uníI
paráhola' Un -
que" nuestras alnas, ei .u"i no. t oa.
ñ;;;";
i^ái.rero tiene en su jardín un á'¡bol silvestre ¡urto, V ."'*
tos, hijos de Dios y herederos a.
fii".;;" ?;;;;";g*' ¿Qué hace Para
d"
obtener
., gláf"l"
,r,"¡ores frutos? Va y trae un sarmíento
y lo injerta en el silvestre' y .u"
he q:l
-1-:: .
La gracia santificante no es una .os,
.rt.ínr".r,
bot..trttirrdo ni tampoco mero perdón de 1". ;;;rá;..;;;:
--éste
al año siguiente produce sazonados .frutot' T^t _el
ensenaron algunos here;es. Es un
ou¿. el árbol iilt..tt" ha cambiado en
clerto mooo don divino oue
comperletra y santifica nuestj:as
ie naturaleza y de vida' Nosotros somos' en sen' aimas, borrando'en
ella.la mancha del pecado , .;,";;j.árd;i;";;
,tt ;i;;áá, el olivo silvestre' nacido de un (ugnidad y hermosura sobrehumana.
tronco vicíoso, que no puede dar sino
frutos amar'
C<-¡mo el híerro. sometido
,".'7zl N" ," .atirfizl de ell6s Dios' cl jardinero lr r..ió., del fueso
"
toma en cierto modo .la naruraleza
i." ll. '"r*r., | ,i.t""do obtener mejores d"l f*gq-;;
frutos
dejar de ser hierrt:, así nosot¡os sin
una "ida nueve y sobrenatural'
y deja¡ de se¡
"á.^l.r""¿ii participamos por la <ie-l; *;";
ahora podemos dar frutos luenos' esto es' oDras fro.mbres,
leza.drvina (+). Sienclo la viá de
gracia'
rneritorias Para la vida
-eletna' ú-ü;";;;
-",
- 'mu' participación nisreriosa de la vida
¿,Vii",
f.t* ,uCá nueva nos la mereció Jesucristo' que la recibe ..nacido ¿" ñi*:'iii
l*i"]
rieirdo por nosotros en la cruz' según sus
pro' pta-s Ta* "i
de,Dios."\Á¡aC qué amor r.^ lr",";i¿j;i ""¡,i,?,
oalab¡ai, "Yo he venido para que tengan
v'da y '
querieodo que nos ll¿memos ;;i;
i, ,"rrg"r, en a.bundancja" (3) , ' .-
hij". y l; ;;;".-'(rj
(4) II Pet¡. l. .(.

Rom. II. l7'2 i.

(5) s. ,uaE l. 13.
(?)
(3) S. Juan 10, 10.
(6). r. S. -Ir¿r 3, 1

'- 8 __'
-9_
 u'.1
6. ¿En qué consjste Ia perfección cristiana?
La sracia reviste ¿l alma de l"*'"':T^*:;
esencla' er
f"ü;.';;';; resplandor. de la divina
selio que i*Pnme La perfección crisulana consiste en ei pleno
1"""i ir.".ii*"." alma;
'un .
"i""tr"a" DioJ' mucho más Pertec' desarrollo de la vida espiritual o ,oÉ.;;,
:f:ü;;ili-'g"o
Isinq'" "o"ar.
duda,
d" :.']::H"iTrfT:"8?:;. ?';
la mayor de las
tural. Y como esta vidJ se muestra actiá
principalmente por medio de las virn¡des in,
alma es' según enseña
infusión de la gracia en un tusas de fe, esperan¿a y caridad, puede de,
grande c"".1" T?:
ü"".-'i"-a; 'l"a obt" más merecemos la gracta cirse también que la perfección cónsiste en
l?""a"i-*rl""t* «ll'Pa¡a
la actividad constante y f'ervorosa de estas
U+ .f Hi¡. de Dios del cielo' tres virüudes y en particular de la caridad.
. 5 activa la vida de Ia
¿Cómo se muestra
gracia en el aüna? Es doctrina común de Ios Santos que la perfec.
ción consiste en la ca¡idad. Oigamos i San Alfon,
activa en so: "Ponen unos la perfección en llevar vida aus,
La vida de la gracia se muestra
las virtudes tera y retirada, otros en la oración, ástos en
sl elma dei justo por medio de ^c¡e.

trillt, * lafe'laesperanza y la ca- cuentar los sacramentos, aquellos en dar límosnas:

"Jp"ti"i mas todos se engañan porque Ia perfección con,
ridad. siste en amar a Dios de rodo .o.aiór,
1g¡.
' Vida es actividad' Resortes Ce 1a actividad na' Los Santos, a1 decir'que la perfección consiste
encendimiento' en la caridad, designan con este nombre no la
tur;i-;"; las potencias de1 alma' gracía san'
;;;;, Juntamente con ia caridad habitual. que se infunde en e1 bautisrno sino
i'funden ert el alma potencias sobre'
;rf;;;;'t" ""f"áqr¿. un grado ¡rerfecto de cariciad o el fervor de caridaci,
el cual encierra ea sí ei ejercicio de las demás vir.
Jffi ilil;".r;":.1:,.^,:"i;TJ:"t1:"TILI*,"; tudes.
hacen caPaces de Proouc
Eias Potensas so'
;á¡i"¡r. de la'vida eterna'iníusas'
i'á"iiriir". son las virtudes en'esPeclal; 7.-¿C6mo sc pruéba que la perfección
f. i." f" esperanza Y la caridad' consiste eu Ia caridaci?

(7) I. II. q 113 a' 9'

t -10-
 Perfecta es una cosa que cumple bien
ton su fin. Perfecto es el ojo si descierne bien
bs objetos, el oído si percibe bien losr soni,
dos, etc. Ahora bien; nuestro fin en este preparan
-,rl]-nor:u:los obsácrrel camino a Ia caridad.
elrmmando
mundo es amár y servir a Dios. Por consi,
guienfe, el cristiano que ame y sirva bien a.
Dios es perfecto.
*t #,,yft
la caridad.
't* l:ir:ls#{jil,k I
. Santo Tomás de Aquino le da a este argumento 2e Porque Ia candad
la expresión siguiente; "Cada coba se llama per, incita y mueve el
ma al ejercicio de al,
fect¿ en cuanto alcanua su prbpio _ fín.. . Es así las
que la caridad nos une.con Dios, quien ee el últi,
§ff:Í': ii*,;rt;#tr,
<

"#ilr":,:q
mo fin del alma humana. Por tantt h perfección
de la vida cristiana .se mide por el gradt de cari.
dad" (e).
_ La. misma doctriqa fluye de ias palabras del S-e.
ño¡: "Amarás ai Señor tu Dios con rodo tu cora,
;;,;;,-'',;':gfl¡¡i;iil'r,i.T:H
zón y con toda tu alma y con toda tu mente. Este
es el más principal y primero de los mandamientos. 9.=-¿E obligación render
El segr.rado es_ semejante a áste: Amarás a tu pró-' a Ia perfección?
jimo como a tí mismo. En estos dos mandamieitos duda de que esta
y,, exrste
^}-1*b" obir.gación cxiste
está cifrada
-toda
la ley y los proferas" (i0). De para fodos.
suerte que.el.qrre cumple bien estcs dos preceptos,
cumple toda le tey, y es, por tanto, crisiia.ro'per.
fecto. *j"T::t.:
¡nundo' Tambrén r¡lfecc.ronarse es sene¡al
h;;'üi""
gene¡al en el
)j'e Ja nuestra
muestra
físico,
¡rslco. morai
Doral o i^¡^t^^--
"1 , La 'a en su
su.ser
ser
8.¿Pertenecen también las otras virtu- pueoe ";;;ü*i:Te
tormrr ov6^^^_:! ,"" vrda sobrena¿urat
des a Ia perfección? 'lÍ: ::,"::,::-"r*e.;;,;
' -r,X'::" :ff r.T
"il!."'s'.",,
no

fi
los que ?íc en
;,; T:lt ?rron,o
;,; J ;;.,;,.,?;"";:. ij:T':":fi",,¿,,
(e)
( 10)
II. II.
S.
o- i64, a. l.
Matl 22,37.4C.
l;
(ii) I Cor. xlll ¿.
:_ tL
l.¡

_ 13
¡
saoros, porque
I
-y,:l::o
Pablo, que os s¿ntltlquels' #,T",?'
rx,;","kl
seaEos Santos' y c?Id| uno según.la rn*,"o-,l: El.estado religioso se llama esrado de per,
.fección:
vida, que tiene: el relieioso iom:J":5:'ü'i'."r".-r^; ,, j

como seglar' el sacerdote cc

Iil;;il;,;l m"'c"de' como mercadár' el sold¿' .1' Porque los religiosos se comprometen
solemnemente a buscar la perfeccióÁ median,
;;1;il-t;1'd"do, v así 1os demás estados v
con.
te la observancia de ios consejos evangélicos.
-'Á-.Jo,
dicion'es: (12 ): .
"Amarás al 2o Porque este santo estado ofrece mayo,
íra dicho Jesutristo:
Sáo,;il. *" rcáo ttí corazín'con toda res facilidades de alcan¿ar la perfeccrón ale,
;;lily ;;o toda tu mente"; Y "sed Pe' cz'
jando los principales estorbos áe h misma.
iJ.ar "Jt.rtos así como vuestro- padre
todos lormtuo _ Los principales estorbos de ia perfección 6on
lestial es.perfecto" (13)' Para Ias tres concupisceacias
que son y las solicitudes exteriores.
¿i-§"¡o. ias ocho bienaventuranzas' todos Nótese que la perfección es esencialment¿ l,i
; ;áj;;-d" ia perfección cristiana' A misma para . los religiosos y los cristiaaós on eI
ffi;:ii;#á san Pablo esta exhortación:
santY
mundo. La diferencia consisre priocipalmente en
G;; ;. h voluntad de Dios; vuestrarepetida por
.los medios, pues mientras los fieles á
se santifican por la fiel observancia de los
,.uiao
"f manda,
riirJ¿":^1i;i. Exhortación "Conforme.a mientos, los religíosos añaden a esta observancia
^t Pedro en
§an -á"1esto§ términos: la de sus vdtos y reglas.
h ;;á; qt'" os ilamó' sed también
vosotros santos en toda vi¡estra conduc' .¿Porqué deber¡ros
ta" (15). . ltr. rabajar en.la obra
\ de nuestra perfección?
llama
IO--¿Por gué el estado religioso se Si bien ei.motivo pnncipai es la obiigacrón
estado de Perfección? que todos tenemos, existen, no obstante]offos
c' VIII' ¡eotivos que deben mover nr¡estra voluntad
( 12) -dei amor a J' C''
Práct.
(13) S. Mat. 5, 43. a, emprender y prosegu.rr asta obra. He
aquí
, ( 14) I- Test. 4, 3. aigunos:
(15) Petr. l, 15.
le L;L granCeza y hermosura de esta. em,

-14- r(
lJ _
-
 presa, entre todas las que puede llevar a ca' .el mismo Apóstol: "Vivo yo, mas no yo sins Cri-<:

bo el hómbre, la mas grande y excelente. vive en mí' (22) .

.i ,Las siguientes reflexiones nos la mostra¡án: 2 La consoladora seguridad de sak¿rse-

' a) El que quiere cruzar un to¡rente imper'r:'rc, &'
El 'hombre es lo que es §u amor. El que
rige más arriba el curso de la embarcacióe- co s¡¡
ama coSag teÍrenas se hace terreno. El que ame
que la arrascre el ímpetu de las olas' De L ai*'
cooae viles se hace vil, según testimonios del profc' seguridaé ir or:-
ta: "Se han heóho aborrecibles a manera de [a¡ -"nét" el que quiere ganar con
lla de la ete¡nidad dichosa, no debe con=¿tzt-€
co6as que amaban" (16) ' El que ama a Dioe ee
con huir el pecado mortal, debe ¿levar mas -<¡s p\eú'
hace eñ cierto eentído divino, se transforma más' y
sarnientos y aspiraciones, debe santificarse- ¿No
más en Dios. "Quien permanece en la caridad,
ha dicho el <iivino Maestro: ':Ei que es f::: ea i¡
en- Dios perara[ece y Dios en éf' (17)- ."El quc
poco, también lo es en lo muchc", (23) ? \:o ea'
¿stá .unidó con el Señor, es un mismo espíriru coe
Leterá pecado grave el que evita los ler-s' ai -
Er'(18). dejará airastrar a 1o ilicito el que se moc-ic¿ ai=
:t Ú) L" perfección nos hace semejantes a lesu- e¡r lo lícitci.
.oiáo incompaiable de santidad. El Hijo
".i.ío,
de'Dios'nos amaba y Por eso se hizo semejante a
'nosotros; 3t El insigr:e mérito.
toriiando nüáetri oatur¿-leza- De un mo'
tó parecido, si 'el'amor de Dios se apgdera de -ua. Ningún buen deseo, ningún acto de vn:xi qs.-
almi, é1 1a conduce de virtud en virtud y l¿ i¡s' dará sin recompensa en el cielo- ¡Cuán grancr
prime más y más el sello de la semejanza con Jesu' aerá el premio de un alma constá¡temente :olicd¿
iritto,, o, pa'ra:hablar' con el Apóstol: "Cristo ec ¿ su santificrclón !
forma en ella' (19); "la vida de Cristo se m a¿i'
figsta en elia" (20); "eila llega a la plenitud de la 4t El amor de Dios:
eáad de Ch'istol; (21); y por fin puedé decir-coa
El amor <ie Dios no sólo coostituye 1¿ a<ia &
b perfcccióo sino también su principú =óvil ¡
6) Os. 9, r0.
(i
( t7) I. S. Juan t tó.
'( i8) I Cor. 6, t7.
( 19) cal. 4, 19. f?7\ GaI, 2, 20.
(20) II Cor..4, 10. í¿3) S. Luc. I6' i!.
(2r.) Efr 4, 13.

16- __!'l _
-,
 el de los proficierites (o aprovechados) yeL
alicíe¡ite. Loe santos y porque Ie de los perfeétos.
"^"b"o a. LDios,
trabajaban sin'cesar o*i j"t.;;;:
Seba3,
E¡lcacton. La breve frase de ", ' Como la perfección consiste esencialmente en ia
S. Fr¿ácisco.de Asís
encierr¿ rodo un progiama a" p"*.""iár, caridad, 1a iual puede ser más o menos activa en
8u rln y su motivo: ..Mi Dios y mi
.J"¡".* ,"a,, ," .o*pi"rrde fácilmente que la p-erfección
todo,,. Lo mie. "f "f
palabras de San rgnacio d" i;yoh, aámite ,r"rios giados según las palabras del Sabio:
*^:Il'::i" J"s
üenor mio, haced que os arner y que
i'L" ,urrd" de los justos es como una lu¿ brillante'
ml amor s€a amaros más cada dí ,,. ei n."^it d., que va en aumento y crece hasta el perfecto- día"
iz+). Santo Tomís compara la vida espiritual con
ü üdu n"rutrl y dice que así como en ésta hay
l2.-¿Cufes son los principales medios de. tres niñez, juventud y edad madura'.así
t" "d"de", espiritual se distinguen los tres grados'
perfección? "., "iá"
de principianies que son como niños' proficientes
qu"-.ot, iomo jóvenes y perfectos que son como
Ios princrpales medios dé perfección,
re- hombres maduros'
comeridados por los maesrros
¿" l" o-
prntual, son: el deseo y. la resoluclón,
"iáá Aestos tres grados corresponden las tres
la di-
espintual, la oración, t-;d,r"_*1ü vías de la vida espiritual, cuyos nombres son:
I^":y
ra lechtra espiritual, el ejercioo vía purgativa, r,ía iluminativa y vía rmitiva"
de la p¡esen-
cra de l-)ios, el examen de conciencia
cuencia de sacramentos. ,'la fre- Fácilmente se comprenden 1as mutuas relaciones
De los medios de perfección trata¡á que exísten entre 1os tres grados y ias ués vías se'
parte del presente ,r"Ldo. la primera. ñalados.
Eir ei prime; grado, que es ei ie los incipienteq
el aima ." h*il" todavía :ono dividida entre Dios
t-;---Zcur{les son los principales y los faisos atractivos del mal; las pasiones son aún
grados de
perfección? vivas y vehementes; 1a práctica <ie la virtud es pc'

Los principaies grados de la perfección

soft (1.4) Prov. '1, t8.
Eres: eI de los incipientes (o
princtpiances)"
_.i9_
_18_
.,.\
 [osa.. . ta principal tare¿ en esta vía] es apartar los;
obetáculos de la caridad, que son las pasiones des-
ben practicar las virtudes, y los perfectps no estár!
ordenadas. Mortific¿ndo las pasiones se purifica- .
todaví¿ libres de la luch¿ contr¿ las pa§iones.
el corazón. De ¿hí el nombre áe ,.ía pr"g"tioa que De los grados o vías de la vida espirituai tratarí
se.ha dado a esta vía, la cual pertenecl a1a perflc- la segunda parte de nuestro escrito.
ción no por constituirla sino por formar uni etapa
necesaria para llegar a ella.

En el scgundo grado, que es el de los proiicien-.

tes, las pasiones ya están más galmadas y iometidas.
al imperio de la razón, las virtudes se pracricaa
con mayor facilidad, el peiigro de caer. en pecado
mortal (aún muy réal en el primer grado) se aleja
más y más; se procura evitai aún lós p"cado. uL.
niales voluntarios. El almá se halla *á" il,r-irr"d*
sobre- Dios y sus deberes para con El y el pró;irná,
De ahí el nombre de vía iiuminatirr" qrr" ," há d"-
do a esta segunda vía.

, En el tercer grado, que es el {e los perfectos,

ras pasrones están tan sujetas que dejan de cons-
tlT{ u! serio obstáculo para el ejercicio de la ca. tí.
ridad.. Las virtudes se practican con facilidad no-
table y ctrda vez mayor. lio sólo se evitan log d*
f?'t-
pecados manifiestos sino también, en cuaoto
es
posible_en esta vida, las menores imperfecciones_
La unión con Dios se hace cada vez ¡aás ¡rrt"rrr"
y,.más continua. Es la vía unitiva.

,
No se debe creer, sin ernbargo, Qué estas tres
vras o - camlnos puedan separar:se completamente
el ullo del otro en la pníctica así como lr" ."o"rrt
en la teoria. No hay tal. ya los principiantÉs
cie-

__20_
_21 _
 bien, ¿a quién dará el Señor esas gracias? A lae
almas qu¿ ansír.n llegar a la pelección. Tal es la
opinión de Santa Teresa de Jesús, quien dice.que
Dios, por lo general, no prodiga sus especiales fa'
DE LOS MEDICS DE PERFECCION vores sino a las almas que desean con ansiag su
amor ( I ) . Se comprende fácilmente la razón. El
deseo ardiente de perfección es por sí solo una
I. EL DESEO DE LA PERFECCION excelente disposición para alcanzar las gracias del
Señor. Agréguense a esto gue el alma animada da
este deseo, pedirá con más fervor los dones del
Señor. La promesa de Jésucristo no puede menos
.- 14*-¿Por qué es necesario el deseo de Ia de cumplirse: "Bienaventurados los qus tienen
pedección? har¡rbre y sed de justicia (o perfección), porque
seún hartos" (2) .
ala 2'i Faltando el sincero deseo, faltará la propia
cooperación.
En cualquier orden de cosas, lo primero que sa
requiere para obtener un bien ausente y difícii, ee
el sincero deseo. Una voluntad apática e indolente
es imposible llegar a 1a perfección. no dará un solo paso para llegar al fin propuestó.
' lc Faltando el síncero Y cuando más elevado y difícil de obteaer es estÉ
dcseo, faltará la gracia fin, tanto más vigoroso y constante debe ser el
de.Dios -deseo.
Es así que la perfección es una empresa grande
La perfección es un¿ obra sobrenatural, t¿ y difícil como ya'se ha dicho; los caminos que a
todas lae más sublime y ¡oil difícil, mejor dicho, elia- conCucen soa ásperos y sémbrado.q <ie espinas.
es un conjuato de infinitos actos sobrenaturales- ¿Cómo se podri llegar si falta el sincero desec?.
Para llevar ¿ feliz. término tamaña ." ,",
"-pr"o
cesitan muchas y especiale.r gracias de óios, Ahora (I) Vida, c. 13.
(7) S. Mat. 5, 6.
_22 _
_23 _
 pjrar a la perfección y de amplear los medios.'
que a ella conducen. :

"Muchos están llamados, escribe San Alfónso,

a ser perfectos; muévelos a ello la divina gracia,'
f eun ti€nen deseoe de alc¿nzarla; mas porqle'
falta esta resolución, viven y mueren imperfectt'-,'.
que no basta desear la perfección, si al deseo no
,i"rr" juntarse una inquebrantable resolución'de'
"
alcanzarla" (5).

16-¿Pueden decir "basta" Ios que han

adelantado o creen haber adelantado muchol
en Ia perfección?

De ninguna manera, porque ia perfección

cristiana no tiene un límite fijo que no se
pueda traspasar.

Enseña Santo Tomás que "la ca¡idad en este

vida puedb aumentarse y más" (6) . Lo rnismo .
debe decirse de 1as otras vírrudes que acompañan,,
a la caridaci y constituyen con ella 1a peifección- ''
Nunca se llegará a un punto en que se püeda decir:-

(3) S. \,h.r.. 19, 2l .

f1) P..-áet- del anm : J. C, 9. y.üI.
(5) L- c.
, (.5) iT. IL o 7.a a.7.

':- 3+ ¿) _
-
 j::l#i:
senda de los,
ffiñ,T. :.._ ,-:-**
r"_* Í:::'.!loñ, * ;"-. ;.,
r¡¡us et oaDro, es como una
luz

[1X
j* 9. :.1 i'.l ". i#::.ñ'&;..f,7
ig:.^ j:
:y:. aumento y crece hasta eLel n¿".
per, a fin de que los que viven no vivan ya para sí sino
para el que murió Por ellos (10).
ry*1 l?
9"r"" "*.."'""[i."" tiXff Lll: fficipalmente en las meditaciones y exámenes'
más santo" (g). Las medit¿ciones, las lectur¿s piadosas, los exá'
menes de conciencia, los ejercicios o retiros espiri'
' tuales deben suministrar la leña necesaria a este
l7*¿Qué debemos r,-^^-
--. ma¡rtener i.ágo ."g."áo de los santos deseos. En ellos,G-
,¡""
"iiiJl * í",'ii"lil"LlIl, debámos renovar nuestra resolución y detallarla-.
Es preciso estar alerta para que no se extinga
ese fuego sagrado en. tiemPo de artdez o desolacióti .
. espiritual cuando la gracia en apariencia se ha
.eiir"do de nosotros y es. como si todo depen'
diera de nuestra conshncia y fimeza de volu¡rtad-
Entonces más que nunca se nos difigen las pala'
bras de1 Espíritu Santo: "Esfué¡ zate. y sé valiente"
(11). La vigilancia, unida a la oración, mantendá
los santos deseos en nuestra alma por más que no
sintamos su influjo, y poco -¿ poco ilegaremos a
ei consejo rcalizar el ideal de la vida crisfiana, la cual, según
I.:,f:";:::i,."n
j:X"""1:f eue nos da san AIj
,"**";;,","d";¿:".il:'J,.,i,"i;#, San Agustín, consiste eo los santos deseos: ''Ioda
I la vida del buen cristiano e.s un si¡to deseo" (11).
,* ?1":" -p * ¡,i" l*_*i",':' Jr'XJ",ff jXT:
I,l .:f
ha f:t
hecho oor"1.*
i
:"T"d:Tffi:"lfl
"".,*"",i"a.esre .
hermosa ro"::: ::':T1,.ftTjg
¿" s-.-Fil;,
propósito ia
[. LA DIRECCION ESPIRTTUAI,
"ffi'?tirr?;:::::j: 18. ¿Es necesario tcner director espiti-
('7t Prov. 4, tg. tual?
(8) 22. 11.
(e) Í)poc.
(10) Cor. 5, 15.
(11) fran. t0. i9.
_*26_ (11*)'Iract, in ep. I Jo.

-_27 _
 . . Sí; pao llegar a la perfección
€s moral- fglesia (13). A los apóstoles y sus. sucesores les
rnente necesario tener director espiritual. dljo el S"ñot; "Así como me ha enviado mi Padre
Se dice "moralmente", porque esta necesidad no
.''q "J o. "nrrío yo a vosotros' Id y vosotros'
enseñad a
a
.es. todos los pueblos' El que os escucha &
absoluta. Hubo algunos Sintos que se santifi,
mí me esc^ucha". La lglesia, iospirándose eo estas
caron solos, -'guiados únicamente por el Espíriru .áoctrinas de su divino Fundador, ha seguido siem'
Santo y su ángél custodio, .o-o
-S*
Juan Bau- o." norma de condÚcta: dirigir a las almas en
tista en el desierto. Pero estos casos-deúerr con-_ ".,* de la perfección por medio de sus nú'
Ii .Ái"o
'd.erarse como. excepcicnes, siendo la regla qus las
nistros.
almas, para llegar a las alruras de h
lerfácción,
. necesitan de un guía experimentado. É"
'fazone8,. "quí
l"s 2)c "Hijos, nos dice el Espíritü Santo, no hagas
¡ nada sin ionsejo, y no tendrás que aÍepentirte '
áe"pués" (14).-Si esta regla.de oro vale en.todq§
. 1¡que
'tica
§abemos por la historia sagrada y éclesiás.
los
^negocios,
mucho más valdrá.en el ncgocio im'
es conducta ordinaria de la divina pro,
to*"tiisi.o de nuestra salvación y santificación'
videncia dirigirnos en eI camino del cielo por üe, ' Nirrnrrn" ciencia se aprende sin maestro ¡Cuán'
dfo dd sus ministros y representantes. A-bundan
1os ejemplos en la Sagradá Biblia y en las Vidas
,o *"io. la de la perfección, 1a más difícil de
todasl
de Ios §antos. Recordaremos sólo dos casos que
pueden considerarse como típicos. La virtud consiste en el justo medio; por poco
l".rlr-," "i* que se decline a uno u ot¡o lado, comienza a t¡o'
tece en el camino de Damasco a Saulo, y.,rrrrdo
éste convertido repentinament" ¿" p".."goi¿b.
ár.. "r, vicio lo que antes er.a virtud' No es fácil
apó.stol le pregunta: "Señor,
* acertar siempre con este justo rnedio' Para no caer'
¿qué queréii que ha,
ga?", el Redentor Ie envía a su d;scípulo Ánanías en error o jlusión, se necesíta un experto guía 1'
para que éste le consejero.
.manifieste Io que debe hac.er (12) En suma, las almas deseosas <ie sarrtificarse ne' .
El ángel que se apareció al centuríón Corn"lio no Ie
cesitan luz Para no engañarse ni ser engañadas:'
instruyó por sí mismo en la ciencia <ie Ia salu<i consejo y ayuda para íencer las ciificultades;
sino le dirigió a Pedro, jefe de la Iglesia, pára aliento para ao desmayar en su§ ¿ngustias, temore§
,que éste le en¡eñara recibiera
¡r en el seno de la
(13) Ac., cap. 10.
( 12) Act., cap. 9. { 14) :7clt, r¿- L+-

_28_ _29 _
 y ab'
siste en oír la acusación de los pecados
LH:Jñ*" u'"" d"Pueito' El oficio
y. tropiezos. Todo6 estos bienes les proporgiona' la a las almas
del director consiste en enca;inar que
dirección esPiritual. ilal-i, p".fección, para 1o cuat tiene
en.la
3r La doctrina que acab2mos de sentar se ha'
rár"""1ái"¿os los medios: instrui-rlassu.§ du'
resolver
lla confirmada po, io, dócumentos de los Santos ;;;; á" i"
"l¿''*piritual'
Do";;;; y Ma'esttos de.la vida espiritual' qug En' ;::;'; d;i.J"á"r, uü¡"' ensaños e ilusiones'
aeña Santo Tomá¡ de Aquino que 9n todo lo con;lar, aconsejar, guiar' etc'
conciáne a la pnrdencia, el hombie tiene necesi- t""1";
Con ser real la diferencia señalada'el' contesor -1o-
á"á ¡" ser guiádo lo. áito, v añade que de esta d;":;; práctica el director v
,rár-" rro p,i"den dispensa¡se los. que por su edad' s¿r' la misma Persona'
y' por lo general"^sg 1leÉ
saber o auioridad descuellan entre los demás (15)' dtt"tción espiritual en la conte§ton
sa'
Ñ.náJo"ot a hacernos diecípulds de un hombre,
;;;'i;
-San cramental. ordinll
díce Gregorio Magno, fácilmente Jleqargel "'"uriiJ'.o*unidades d-onde hay confesor
i eer para nosotros maestros del error". (16)' Con- es por
,i";;;;;"s extraordinarios' el ordinario
clüireilos con las siguientes graves palabras .de iJ í"grrt., director espirirual; pero en.casos. Par'
San Francisco de S-ales: "¿Quierés tomar con Ee' 'r"i*f"?* de los extraor'
g.rtiaea .t i"-ino de la devoción? .Pues busga- al'
,.¿ta serlo también alguno
[.rrr p"t oo" de virtud que te guíe y encaminq-
dínarios.
E.t "" la advertencia de las advertencias, pues' Zo-¿Cuáles son los deberes
del dirigido
como dice el piadoso Avila, por más que .!e. faa'
gues no hallarás medío más seguro de hacgr la vg- para con el dircctor?
luntad'de Dios que esta humilde obediencia" (17)-
para con el d"rect
Los deberes del dirigido dc'-
19-Js lo mismo tener confesor y teoer ,"r";;;;; reducirse a dosi ui','""idad v
director? cilidad.
las intel-
se requiere anre todo en
Since¡idad
No mismo. El oficio del confesor con' otra cosa que Ia gloña
aofo]-. ü-.. debe'buscat
es 1o
esPirigual dei alrna'
de Dios y el aprovechamrento
(15) IL II. q. 49 a 3.
( 16) DiáI., 1- 1. c. I.
Vida dev-, Parte I r, c. IV-
31-
( 17)
-
30_
 .,,
y excluii rigurosamente de la direcciórr: to-
se debe
do afectb demaiiado n¿ri¡ral. : les:. "Si tanto te importa caminar ion un buea'
Bn' tegundo lugar debe haber sincendad en lai
mahifestaciories. dei dírigido. Estas deben ser ve,:
rídicae y completas y deben abarcar todo el fir,
tlrior, de la,persona: los defectos, las tentaciones,
el reglamento de vida, los bueios deseoo y propó:
eitoe, el modo de hacer los ejerciciós de piedad, en'
particular, la medit:rción y e[ examen particular.
La do¿ilidad / obédiencia que se debe al directór,
sé fünda'cn laa'palabras del Señor: "El que oe es,
circhá á.vosotroo, a mí me escucha" (18). Faltando
eetie cualidade¡ ee frustra la mejor diiección: 'De-
bemoe convencernoe de que, aunque en un caso,
cxcepcional el director se engañara, nosotros, al
obedecerle de buena fe, no faltamos. Claro estl
que si Io que ordena el director es a todas luces'
d¿saceftado, no se obedecerá antes de haber cbn;
sultado sobre el particular a otro director de al;
mas, lo cual podrá hacerse siemprc en casos gra-
VG3¡
21.-¿Qué se debe hacer anres de elegir
director espirtual?
Antes de elegir director espir¿ual se debe-
rogar mucho a Dios para enconfrar uno bue-
no y segrin el corazón de Dios.
(16) S. Luc. 10, 16.
-32. -
Es este ei consejo que da Sán Francisco "óe Sa'
guía en este santo viaje de la devocíón, pide a
Dios con grandes instancia que te lo dé según su
corazón, y no desconfíes que te dará conductor
bueno y fiel, aunque sea necesario enviar un án'
gel del cieio como hizo con el joven Tobías" (19)'
En la elección de director no deben influir mo'
tivos humanos sino sólo la gloria de Dios y el
progreso espiritual del alma.
Advertiremos que, antes de elegirlo definitiva-
mente, no sólo es lícito síno aun recomendable pro'
barie por experiencia durante algún tiempo.
22, ¿Es Iícito cambiar alguna vez de di-
fector esPiritual?
No
se debe cambiar de director espiriüual
por ligereza o capricho sino sólo por motivos
. graves y atendibles.
He aquí lo que sobre el particular escribe N¿-
vai en su Curso de Teologí" ascética y mistica: "Se
impone el cambio según la doctrina de Santa Te-
resa y d¿ otros escritores: le cuando se advierte
que el riirector induce a la vanidaci o al amor ser¡..
sible o se entrctiene corr los penitentes en conversa-
ciones frívolas o de simple curiosidad; 2q cuando
( 19) Vida dev., 1 c.
¿ A5 JJ
- -
 -+r,i,,.

De virios modos podemos ofrlcer a Dios el tributo

III. LA ORACIOI¡T
23-1,Quées oración?
Oración es la del alma a Dios
para adorarie, darle gracias o pedirle favores'
La paiabra "elevación:' expresa.que nuestra alm¿
¿"[" á".p;""¿erse de. las cosas d," l'. *1-11",11;
del
;;;t; ;óir.. Conro las Brin'cipales facultades
y ac'
*1r"" to" el entendimién6 y la voluntad' los
y
tos de las mismas son los pensamientos- Ios atec'
la^el9'
tcs, puede decirse también que la oración es
vacián de nuestros pensamientos )' afecics a
l)tos'
Adorar a pios quiere d¿cir reconocer su supr¿'
o¡o do¡oinio y nuestra total depen<lencia de El'
de nuestra adoraiíóo y alabanza: o admirando y
glorificlndo sus divitros atributos, o alabándole cn
sus obtr., o confesando nuéstra Iniseria y depen'
denci¿ de El. La adoración es, sin dudlt, la ora'
ción más excelente y pcrfecta, porque nace del
amo¡ de Dios; es la oración dc los ángeies. Ejem'
plos de esta oración son eI Gloria de 1a Misa, cl
Óloria Pat¡i, el Trisagio, etc. El Apóstol San Pa'
blo alude a esta oración cuando cxhorta a los fielcs
a "¿nimarse unos a otros con salmos, con himnos
y cánticos espirituales, cantando de corazón las
alabanzas a Dios" (20).
La acción de gracias consiste en dar gracias a
Dios por sus innumerables beneficios. Si todo bien'
hechor merece nuestro reconocimiento ¡cuáoto más
Dios, de quien procede todo bien! Por eso nos
exhorta el Apóstol "a dar siempre gracias por
todo a Dios Padre en ei nombre de nuestro Se'
ñor Jesucristo" (21). La Iglesia nos da el ejempio.
¡Cuántas veces repite las paiabras: Deo gratias!
El 'Ie.Deum y el Prefacio de la misa son himnos
de alabanza y de acción de gracias. La gratitud
es el mejor título para al.ca¡r¿a¡ nuevos favores.
La petición o súplica consiste en pedir a Dios
sus gracias. Es, raientras vivimos en este mundo,
la oración más necesaria para nosot¡os.. Si la ado'
¡acrión es la oración de los ángcies, la petición es
(?0) Col. 3, 16.
(21) Ef.5,2{r.

-34 -
 con palabras, acompañadas de la atencrón
de
Ia mente y Ia devocrón del cora¿ón.
Las palabras pueden existir en aiguna fórmula
,
de oración cuyos. concepto. u. el alma, o
se van inventando libremente, "p.op-i"
,ágún la de.,roción
las inspire. Esta segunda manera d1 orar
24. ¿Cómo se divide Ia oración? mucho ¿ la oración mental y forma, por ".".."
r"
así, sl pr¡gr¡. ent¡e las dos clases d" ;;.i¿". -'^""
decirlo
I¿ oración se divjde: le según sus fines eq '
Lai jaculatorias (breves oracioncitas, compuestas
adgracrón, accrón de gracias y petición, como generalmenrs de un solo acto
se ha dicho; 2o según-ia manera de hacerla en-
o afecto) ñá;;-o
ser de una y de otra clase de
mental y voc¿l. vocal, según que se hagan con sólo "r".1¿", "rárrr"t
lrrrt"rrr" o .o,
palabras.

25 ¿Qué es oración mental? La oración vocal se subdivide en privada

Llámase, mental aquella oración que se ha/
ce con sólo la mente, o sea.con sólo 1as facul,
tades interiores del alma.
A la oración mental pertenece la meditacióu. En
e11a consideramos una verdad reiígiosa y hacemos
aplícacíones prácticas a nuesrra vida, intercalándo.
se frecuentes actos interiores de oración. De la
medit¡ción se.tratará en ei capítulo siguiente.
26. ¿Qué es oración vocal?
y pública. Privada es la que se hace en
oarti,
Iar; pública, Ia que se hace en i" j"
"á.U."
lglesra, por ejempio, el divino Oficio que
re,
zan los sacerdotes. También pu"d" [Á"r."
pública la que se hace en común.
De la oración pírblica y común debemos hacer
particular aprecio, porque
Jesucri.to ¡" ai.t o,;U
oos oe vosotrcs se unieren enue sÍ sobre
la tieira
paia pedir algo, sea lo.que fuere,
les ,".e o,orn"af.
por ¡ri Padre-.que esrá en los ciejos,, (?z). --'---

Vocal se ilama aquella oración que se hace (22) S. Mat. iS, r9.

_36_ _5t _
 y ex-
27. ¿Fs"qué se conoce'la grandeza
celencia de Ia oración?
En la oración y por medio de ella el
1o
hombre se muestra rey de Ia creación'
Todo el ui¡iverso alaba a Dios. "Los cielos anun'
cian la gloria de Dios", eiciama e1 salmista' (2 3 ) '
Hay, eñpero, una dife¡encia-a
muy grande' Las
'i¡racionales.
alaban Dios de un modo
".i"tl.""
inconsciente, cumpliendo su voluntad (manifestada
por las leyes de la naturaleza), y ¡evelindonos a
iro*oa"o. los divinos atributos, en particular, su
poder, sabiduría y bondad. El hombré, en c¿m'
tio, d"b" ofrecer a Dios un culto consciente y io-
trr¡¡¿¡i6, constituyándose así en ir,ltérprete y sacer'
dote de la creación visible.
2e Orar es conversar con Dios'
;Puede haber para el hombre honra más gran'
<ic" que 1a de traiar familiarmente con la Divini'
,ladi Cuanto mayor es la dignidad ds una perso'
na, tanto más s¿ estima la hoora de poder col'
,r".r", ella. Los hombres se juagan rnuy hon'
"oo
rados si ies cabe la dicha de hablar crin el tuonarca
(23) Ps. 18.
_38--
o con el primer magistrado de ia república. Pero
¿quá son tdos los grandes de l¿ tierra en compa-
ración con Dios, "rey de reyes y señor de seño,
res que habit¿ en una luu inaccesible.. . a quíen
pettenece el honor y ei imperio sempiterno" (24) ?
Con ¡azón llaman San Juan Crisóstomo y otros
§antos a la oración ocupación angélica.
3e La oración es un acto de la virtud de
te,tgi6n, la primera y más excelente de ias
virnrdes moraies.
La virtud de la religión consiste en t¡ibutar a
Dios el culto que le es debido. E1 acto principal
de este culto es 1a oración; es el alma de la religión.
Verdad es que el augusto sacrificio de la Misa
es el culto más perfecto que podemos ofrecer a
Dios; pero también ella no se celebr¿ sin que la
oración la acompañe.
4e La oracrón es fuente de bienes.
Los f¡utos principales de la oración son tres:
mérito, satisfacción e impeü:ación. De ¿llos se
tratará en la pregunta 29.
,28.-¿Es nscesaria la oración para sal-
varse?
Sí; Ia oración es necesaria pa{a salvarse a
(24) Tim.6, 15.16.
1C
 sue expresiones: "Perseverad en la oración,: (29).
.He aquí las razones: ls en el prim"t manjamiet - "Sed constanres en la oración'. (¡o). ..Orad sín
to noe ordena Dios tributarle el culto que le es interrupción" (31). ..Velad l" oá.ió.,,, i3zi.
debido. Ahora. bien, la oración forma parte inte- 3+ No es posible salvarse
"n
sin el auxilio de la
grante de este culto; es, como se ha dicho arriba, divinna gracia. Es esta una verdad que l" f. ,ro.
el alma de la relilión. Por consiguiente, la ora,: gnseña y que se infiere ciaramente de las palabras
ción está mandada en el primer precepto de la ley del §eñor: "Sin mí nada podéis t".".1;
de Dios. Los mismos paganos con sólo las luces las del Apóstol: "Dios es el que obr"
1lí¡, fJ"
de la ra¡óa comprendían que la oración, es un. "r, ";'J..;;
así el querer como el ejecutar;' (3a). para salvar.
homenaje dtjbido a Dios, soberano Señor de todas se es necesario observar los divinos mandamientos,
1as cosas. resistir a las tentaciones, perseverar en la práctica
2e Jesucristo, nuestro divino Maestro, ha re- . del buen hasta el fin. Tádo lo cual no ; p";á;
novado y confirmado con su ejemplo este precepto. sin la gracia de Dios. Ahor¿ bien, la, gracia de
El enseñó a'suo discípulos el Padrenuestro, dicién' Dios se aicanza por medio de la oración,
; -".
chos ásos, no se alcanza sin ella, como se ";
doles: "Así debéie. orar" (25). El dijo: "Pedid, deduce
y se os dará; busáad y hallaréis:. llamad y se os clar¿mente'de las frecuentes- promesas del señor,
abirá" (26) . El mismo hizo ver a sus discípulos en las cuales apa¡ece la o.a.ióo como condíción
por medio de parábolas que "es menester orar necesaria para alcanzar los divinos favores: ..pedid,
siempre y nunca desfallecer" (27), es decir, que y. s:.os dará; buscad y hallaréis; llamad y
se os
debemos orar con asiduidad sin cansarnos jamás.. abrirá._ Porque todo el que pide recibe,'el que
EI nos dió ejemplo: "Por este tiempo se retíró a busca halla, y al que llama se le abrirá". ú".
;l"j
or¿r a un moote y pasó toda 1a noche haciendo bras expresan con bastante clandad quc si el oue
oraiión a Dios" (28) . pide recibe, el que no picie no .ecilr". Estas paia-
Los Apóstoles repiten e inculcan con frecuen' sena expresamente el Apóstol Santiago: ..No te,
cia el precepto del Señor. Oigarnos aigunas de
(ze) Col. 4, 2.
( 30) Ro¡¡- 12, 12-
(2s) S. M3t. 6. 9. (31) I Tes.5,,.7.
(26) lb. 7, 7. (32) I Petr. 4. 7.
77\ Luc. i8, 1. (33) S. Juan 15, .s.
( 28) Luc. 6, 17. (34) Fii. 2, 13

_40 _ _4i _
 náis porque no pedis" (35). En el Sagrado Con,
cilio dé .Trehto propone la Iglesia la misma doc,
trina cuaodo dice: Dios no mand¿ cosas imposibles,
sino que nos axhorta a hacer lo que podemos y a
pedir lo que no podemos; y entonces El.nos .a¡r,
dará" (36). "Luego, termina diciendo San Alfon,
so, si por una p¿rte nada podemos sin el socorio'de
la gracia, y.por otra Dios no da este socorro sino
a quien se lo'pide ¿quién no ve la consecuencia
que de eito se deduce, o sea l¿ abeoluta necesida'
de la oración para .salvar,se?" (37). "El que ruega
se salva, y el que,no ruega se condena". Son pa,
labrae del miemo' Santo Doctor. : se del salmista: "Con el Santo serás más sao,
Huelga decír que si la oración es necesaria para
' salvarse, en mayor grado es necesaria para llegar a
la perfección porque esta emprésa, grande y g1o,
riosa, supone un cúmulo de gracias que iro se ob,
tendrán sin inucha oración.
29, frutos de
¿Cuáles son los principales
Ia oración?
Los principaies frutos de la. oración son los
siguientes:
ln l¿ oración, por cuanto es ia piadosa ele'
vación dei alora a Dios, produce en nuestro
espíritu mayor conocimiento y amor de ias
cosas divinas, desprecio dei mundo, afectos.de
humildad, de confianza en Dios, etc. Santo
Tomás de Aquino llama este fruto de la ora,
ción "espiritual refacción de Ia mente".
No es posible acercarse al sol sin ¡ecibir luz, ca.
lor, vida. Del mismo modo no es posible ¿¡cercarse
a Dios y tratar familiarmente con El sin hacerse
mejor, pudiendo entenderse en este sentido la fra,
to" (38). Esta es, sin duda una de l¿rs ra¿ones por
las cuales Dios dilata con frecuencia el oír nues.
tras oraciories; quiere obligarnos a perseverar eo
la oración y obtener así sus saludables frutos.
2e La oración, como obra buena que es, es
rneritoria y satisfactoria.
Mérito quiere decir aumento ds gracia santifi.
cante en esta vida y de gloria en la otra. Satisfac-
ción significa perdón de pena tempcral merecida
por los pecados. Es menester estar en gracia de
Dir:s para que la oración pueda producir estos Cos
efectos.

3n La. oración es finalmente imperratoria, es

(3s) Sant.4,2-
( 35) Sess.IV. cp. 1 1.
( 37) Del gran medio, cap. I- (38) Ps. l?.
,n
.J: __43 _
 Oramos con fe y confianza si creemos fir,
memente que Dios es infinitamente poderoso,
bueno y fiel en sus promesas y, apoyados en
esta creencia, esperamos que El oirá nuestras
oraciones si es para gloria suya y bien de
nuestras almas.
"Por tanto os aseguro que todas cuaotas cosas
pidiereis en la oración, tened fe de conseguirlas, y
se os concederán" (2). "Pida (el hombre) con
fe, sin sombra de duda (o desconfianza); pues
quien anda dudando, es semejante a la ola del
mar, alborotada y agitada por el viento acá y a1iá.
Así que un hombre scmejante no tiene quc Lrcnsar
gu-e ha de recibir poco ni mucho del Seíior"- (43).
"Cuai sea nuestra confianza, escribe San Aifon.
so, tales se¡án las gracias que de Dios recii¡ire,
mos" (44).

32.-¿Es necesario estar en g. ':cia cfe Dios

30. ¿Cómo debemos orar? para que nuestras oraciones sea¡, oídas?

Debemos orar: 1q con fe y confianza; 2e No se puede dudar de que el est¿do degru

con devoción; 3e con perseverancia.
3l-¿Cuáado oramos con fe y confianz{l
.
cia aunenta la cficacia de nuestras oracioáes.
Pero, por^otra pffie, -siendc general la pro.
aresa dei Señor, debemos creer que Dios iye

( 3e) S. Mat. ?. 7.
(.12.) S. l"farc. 11, 2-f-
(10) S. Juan 16,23.
(41) Vida esp., Parte l', c. Y. (43) Sant. i, 6.7.
(44], L. c., cae., ill.
AL
,t É"
 de oro no puede quejarse de que nó ha sido oido'
también ias oraciones de los pecadot?:l l' i"^po.o el cristiano que pide la salud v reclb3
y seilaladamen' del Señor para sufrir
crue biden es útil para su alma .r, 1rg". copiosos
"uiilios
"n
sus doleicias ion paciencia y con mérito para el
ili;tá;*la gácia de la conversión'
cielo.
"Si oermanecéis en mí y mis palabras P:*n:^ No obstante, aun cuando pedimos favores tem'
qurstere"' {,":
-i+s¡.'pediréis 1o que
."o vósotros, ;'vtutt'"
oorales no abiertamente contrxrios a nuestro bíen
"^
il;*;til vale 1a oración asrdua espiritual, debcmos pedir con. gran confianza'
la eficacia Cuanto mayor es nuestra confianza, tanto Íia'
del iusto" (+6). Estos textos prueban
ilil¿ d" l, o,".ió,, iÍ j:l:;#T"lb:j":'
parte es general la Prome
yor la probibilidad de alcan4ar lo que se pide' Con
esta confianza obraban milagros los santos"
y recibiréis".
34 necesario rogar Por sí mismo para
fi. ¿C6mo hemos de Pejlr *" f"l,::: ¿Es
que la oración sea oída?
fl"or" "i*do no sabemossi lo que Pedrmos
...'
es del agrado del Señor? Esta condición, como observa Santo To'
más (+7), no es necesaria para que la oración
favor temporal'
Cuando pedimos a Dios un produzca efecto sino paü que el efecto de la
J#;bJii:si"' ¿"r agrado del señor' cle' misma sea mas seguro.
ffi;;Cáá' l" uoi¿a¿ Y ridelidad dei
He aquí ia ¡a¡ón. Si se ruega por otro; puede
S;;r,'.á"i^t que"" El ,os daráa 1o
que le Pe'
nuestro bien ser que él a Lausa de su mala vóluntad oponga
climos o, si esto no conviene a1gún obstáculo a la acción de la graqia, mjentr¿s
I-ro*ü, lfi;Lá' p'o""thoso v saludable' q,r" q,r" ruega por sí tnismo- se vd¡disponieodo
"i las divinas gracias. Perc esto no quiere
Dics ti"-P:: a ¡ecibir
En este serrddo puede decirse'que no dccir que ia oraciód por otrcs sea ineficaz, porque
,,.''ir.:.;;;;;;'- b'ien lechas' si -bien 'i:Tp.::- no siempre'e*istc el inconveniente aPuntadc, y
ll*,r""""'"'"*-lT":':,#"r:lil?,ttr"1"":J.:
reor
además Dio., po. un efecto de su infinita mise'
menórugo de Pao Y
-r ol- s Juan5, 15' 1' (41j II. Ii. q. 8-1. a 7.
i+oi Sant. 16'

*. _ 4'.7 __
--46
 36-¿Por qué debemos orar con humil-
.rcordiá, concede a veces gracias extraondinarias dad?
q." r"á."tt más tenatr'
1¿ resistenci¿
"Dios
La oración por otros se halla muY recomendada Debemos orar coo humildad porque
"Orad los unos Por los
resiste a.los soberbios, y a los
en las Sagradas Escricuras' humrldes oa
l^iJ"r*' t* l"ái, ."1"o'" q8)'.Ei P'"-'-":111
Ios pecaoo' sus gracias" (50) '
debemts .ogrt pot la conversión de
¿" ':ó¿-. "s iosible, exclam¿ySan Alfonso' que
"La oración del que se humilla traspasa -1":(s-l:'
una persona que ama a Dios que comprende b", i * ,"pot" h"tia """rt'rse al
Altísimo" . 1.) :
y lo,gu"--ni
J-"Jot q,r" óio" tiene a las almassalvacron en la parábola del
Tret iáá¡.i" iiustró esta verdad
iecho y padecido Jesucristo por su EI soberbio fariseo fué
i;i",lo"; i"i p'ujit'""publicano
;;; áü dene dá que nosotroe dígo' l::
,got que.P"-:".::; ñ"*ild" oído' (52)'
posible' pueoa ;;;"á",-;i
,". ,ogu.*o., cómo es vi"9":]1 :t::
."i l"¿irárencia ¿ tantosyque 37.-¡¿Qué quiere decir: orar coll
fervqr?
""r esclavos del demonio' no se mueva-y-§E
vlson
irll''illr¿l, iá.'*"'n""t" '"o q'" el señor con el
su miserable es' Orar con fervor quiere decir: orar
leí'de fuena y luz para salir de ha
;:tJdt á; q'," bio' no nos Prometido es' srncero deseo de ser oído'
.;;";.;;"io aquello' por quienes
'-c-1i:: porfía,e impor-
Debemos orar con cíerta santa
oc la
tunidad. Iesucristo nos enseña esta caulldad
lllf-m:llx':,'r1T::"i'"",,i"0"i,1áJÍ'i'il" t"""" "á.r¿t en la parábola de ios tres panes'
ffi';;i". o,utio""t de sus siervos y. aPronta de rogar cuan'
con oue reducír a buen es' ,á
Éi imporcuno obruvo a fuerza
;;; ;;;';'dinarias "-*"
ffibil^"l;;i"'.-;""i' terminó con las palabras:
obcecados" (49)'
i"áI'Ir". n"*dores más duros v :¡-i"láüro, páid )' se os darár buscad v ha'
con devoción? ll"réi.r tl"tir.i y se os abrirá" 15:)'
"-;l',;i*".
35. ¿Cuáudo orarnos áempo debemos hacer de rruestra
con
Oramos con deljoción cuando.oramos
con fetvor y cofl atenclon' ( 50) Sant. 4 6.
humildad, (5t) Ec1i. 35, 21.
(.sz) S. Luc., caP. 18.
c' (s3) S. Luc. 11, 9.
(43) Sant', 1' -.
i;óí o.i g'"" meJio' c' 3'
¿o
-_48-
 parte cuanto podemos para lograr lo que pedimos.
Necio sería el labradoi qu" pidi"o a'Dijs buena
cosecha .y entre tanto sá .rrrzn." de bra¡os. No
meaos insensato eÉ el cristiano que pide a Dios
lii hu¡aildad u otra virtud y no se esfuérza para al,
' can.zarla. Aquí vale el provcrbio: ..A Dios
rogan.
cio y con el mazo dando". proverbio al cual 3an
Ignacio de Loyola dió la expresión siguiente:
"Obra{ como si todo dependie." d" ,ro.Jt.or,,y
orar cómo si todo ddpendiera de Diosj". ,
No debe confundirse el fervor sensible, el cual
no siempre está ¿i1 iuestro arbitrio, con el_fervor
.
esencial, o sea, 1a voluntad decidida de orar bien.
El' fervor. sensible puede,faltan,si" qu" f" o;i.iá"
.Ceje de ser buena; el fervor esencial no debe faltar
nunca.
38. ¿Cuándo oramos con atención?
'
Oramos con atención cuando nuestra men.
te atiende a ia oración y deshecha con prest?
Za-y energía las Cistracciones.
Distracción. se llama la divagación de la mente a
otros objetos. Disüraerse voluntaüamente en .la
_
. cración .es
oíencier a. Dios y privarse del ,(rjro Cc l¿
cración. *¿Cónro pretendes que Dios te escuche,
dice San Cipriano, si rú mismá no re oyes" (5.4).
Con todo, la necesidad de atención ¡o i* Ái.,
"u
(54) De ort. dom.
_ 50_
m¿ en las <lifcrentes clascs dc oracirin. L¿ atención
es dc absolut¿ necesidad en la otación mental y en
aquella vocal que sc hace con palabras propias,
porque en estos casos, i¿ltanclo h ltención, falta la
misma oración. En c¡mbio, la oración vocal que se
hace de metnori;r o con ayuda de un lib¡o pierde su
valor y su fruto sólo por las distracciones volunta-
rias, es decir, aquellas que se advierten y no se des'
echan, porque en ella la intcnción de o¡ar perdura
virtualmente mientras lir boca sigue pronunciando
1>alabras. "Las distracciones involuntarias dice el
P. Meschler, que nos vienen a pesar nuestro, no
nos quitan nada ni el mérito, ni del provecho,
ni de la cabida que con Dics tiene la or¿ción sino
sólo el gusto que r¡ae consigo la oración sosega'
da" (55). Esta doctrina debe servi¡ de consuelo
a 1as almas pusilánimes que se afligen demasiado
por las dist¡acciones involuntarias que padecen'
Pero de nuestra parte debemos poner cuanto nos
§ea posible para que la oración sea buena y devota.
39. ¿Qué debemos hacer Para orar Con
atención?
Debemos recogernos antes de ia oración,
poniéndonos a la presencia de Dios y ccnsi'
cierando que vamos a hablar con el Altísimo.
(55) Vida esp., Pa¡¡e ln c. V
_ )l _

."-¡'{
- il-a Primera; aunqune suficiente en -si; ás ioper..
fectá y ocasionada' a distracciones; la segunda y 1a
tercera son buenas, y puede elegirse entre ellas la.
que nlás convenga. Si no se entiende el sentido de
las palabras, habrá que rdcr.irrir a la tercera clase..
A parte de este caso, será 1o mejor ateñder.al sen,
ticio. de las paiabras.
4J... ¿Curíndo oramos
(56) EcIi. 18, 23.
-52-
mos orarrdo aunque parelcaque Dios no quie.
re oír nue§tras oraciones.
En la parábola de los tres panes Jesucristo nos
enseñ¿ tanto e1fervor como la perseverancia con
que debemos orar. L¿ misma enseñan4a nos da
el Señor en la parábola de la viuda que no se can'
só de pedir justicia hasta haberla alcanzado (57).
Dios no oye nuestras oraciones en seguida para
que apreciemos más sus dones y Para que no desis.
tamos nunca de or¿.r.
42 *¿Cuándo debemos orar?
Dice Jesucristo "que es menester orar sie4-
pre y nó desfallecer" (58). Oramos siempre
si no omitimos ningún día las oraciones de
costumbre, si ofrecemos a Dios con frecuen'
cia nuestros trabajos por medio de ia recta
intención y si levantamos a menudo nuestros
cora¿ones a Dios medjante breves y fervoro'
sas olzrcione§, llámadas jaculatorias.
"(Jra conáis, ora bebáis c hagáis cualquiera 'ótra
cosa, hacedio todo a gloria de Dios" (59):
Lo que es la respiración para la vida co.rporal, 1o
(5?) S. Luc.. cap. i8.
(58) ib. i8, l.
( se) Cor. lC, 31.
_ )5 _
 debe ser la. oración para la vida espirituai del cris.
tiano,
De un modo especial debemos orar en las tenta-
ciones, y gn las tribulaciones públicas y privadas.
43,-.,.¿Cuál es Ia más excelente de todas
Ias oraciones?
La,más excelente de todas las oraciones es
cl Padrenuestro, llamado también oración do-
minicirf porque nos la enseñó nuestro Señor
Jesucristo.
El Padre nuestro se compone de una invocación
y siete peticiones. La invocación sirve para elevar
fluestro corazón a Dios y despertar nuestra con,
fianza. En las dos primeras peticiones pedimos al.
,canzar ouestro fin, el cuai consiste en glorifica: z
Dios y obtener el ¡eino de los cielos; y pedirnos
..esta gracia como las demás no sólo para nosotros
,sino para todos los hombres, nuestros hermanos.
En las cinco peticiones restantes pedimos lcs me-
,dios necesarios para alcanzar nuesiro fin, que son:
,le hacer la voluntad de Dios, manifestada en los
mandamientoe y en las ínspiraciones de la gracia;
.2e el pan corporal y espiritual, o sea, todos- ios au.
xilios del Señor para la vida <ie cuerpo y de akna,
'en particular, el pan de la Eucaristía: 3s el perdón
.de los pecados cometidos; 4q el ser preservados de
los pecados futuros; 5q el quedar libres de todos
los males temporales y espiriruales, y sobre todo dei
-54 - _55_
mal de la culpa y de la condenación eterna.
El Padrenuestro es la oración modelo de los cris^
tianos. Nuestras oraciones, si han de ser agrada'
bles ir Díos, deben ajustarse a este modelo e im'
buirse de su espíritu.
Semejante el Padrenuestro en dignidad y ex'
celenci¿ es el Avemaría, oración compuesta de
las palabras del Angel, de Santa Isabel y de LE lgle'
sia. Contiene en su primera parte saludoS y'a\a'
banzas, y en su segunda parüe una fervorosa plega'
ria dirigida a la Reina dei cielo.
44.-¿Debemos invocar también a los
Santos?
Sí, debemos invocar también a 1os Santos,.
porque es doctrina de la Iglesia que es justo
y saludabie venerar e invocar'a los Santos.
De un moclo particular debemos vellerar e in'
vocar a nuestros sanios Datronos y abogados, entre
eilos a nuestro Angei cie la guarda, ai Santo cuyo,
nomb¡e ll¿vamos y .a los santos Protectores del país
en q':e vivimos o del Instituto á que perteírecemos.
45.-¿Podemos iniocar'ta*Háo lás ben=
ditas ánimas {el Purgatorio?
"
Sí, pociemos in.;ocar tarnbién a ias benditas,
ánimas del Purgatorio, porque'es piadosa

creencia apoyada en las enseñan¿as de'ios
Santos y en hechos.milagrosos, que esas aI,
nias,pueden rogar por nosotros.
a6*¿A quién debemos honrar e rnvocar
má§.'entf,e todos los Santos?
Detemos hbnrar con un culto particular e
invocar @n mayor fervor a la Santísima Vir-
gen Mada, reina de todos los Santos, nuestra
rnadre y especial'abogada.
"Si María iuega por nosotros, dice San Alfonso,
cgtemoo seguros de ser oídos, porque sus oraciones
oon siemprs de Dios bien acogidas y jamás quedan
des¿tendidas,t (60):
' Loi
Santos y loe cristianos fervo¡osos se han dis'
ringuido siempre por su singular devoción a Ma¡ía
y han declarado que esa devoción ha sido para ellos
un poderoso auxilio para adelantar en la perfec'
ción.
IV. LA I\,IEDTTACION
47 ,¿Quées meditación?
Meditación es una forma de oración men'
(ó0) Práct. dcl amor r J. C., c. VIII.
_5ó_
tal, en la cual se considera alguna verdad relir
giosa con el fin de mover la voluntad a piado,
sos afectos y saludables resoiuciones.
Se dice: "una forma de oración mental", porque
la oración mental. puede hacerse con el fin general
de alabar a Dios o de darle gracias o de pedirle fa'
vores y sin el fin particular que la meditación se
propone. Pero como la n-reditación es la forma más
usada de oración mental, es designada muchas veces
con el nombre de oración mental. Se dice "de ora.
ción mental", pues aunque se intercalen en ella ja.
culatorias u oraciones vocales, la mayoría de sus
actos son mentales. y se ¡ealiuan sin el uso de la pa.
labra. Se dice finalmente: "cofl el fin de mover !a
voluntad a piadosos afectos y saludables resoiucio-
nes". De ahí se sigue que las reflexíones no so¡r la
parte principal de la meditación. Una meditación
en que no hubiera más qug refiexiones o considera.
ciones, no sería oración.' Sin embargo, las ¡eflexio-
nes son necesarias, a 1o menos en los prirtcipros, pa-
¡a der¡amar luz sobre la verdad e inflama¡ ia vo,
lunad. Cuanto más se ora, tanto mejor. Las mrs,
mas reflexiooes pueden hacerse en forma de un fa-
miliar coioquio con Dios.
48-¿Es lo ",ismo meditación o contem-
plación?
lrio es lo mismo. La contemplación es una
-_51 _

forma más elevada de oraclón mental, en la
cualelldiscurso de la ,^zón o sustituído por
.,la- i¡nüción y admiración de la verdad- En
clti el espíritu abarca y concempla la verdad
.coñro con una sola mirada.
,pácd*".tt" se comprende que la coqtPmplación
supone particulares gracias del Señor. Pa¡a mere'
o".".ario ser constante en la meditación or'
""i1"* ",
dinaria y en'la mortificación de las pasiones.
+9' , ¿Es necesaria la meditación?'
.§í,. la meditación es moralmente necesaria
para llegar a la perfección.
He aquí las razonés: le Si falta meditación, no
1a
se conocerán bien las grandes ve¡dades que la- reli'
sión edseña v que son el funda^"t'to de Ia vida es'
iUt,rai, por-epmplo, la vanidad de las cosas del
neundo, li importancia de nuestra salvación, el amor
que Jesucristá merece, etc. No se conoceráo tam'
poco 1os pelígros que nos rodean, las tentaciooes
(." ,rot 1as pasiones que debemos ven-
"*".razan,
cer. La consecueocia será que no se e'¿itará el pe'
cadc como se debe, cumpliéndcse así les palabras
del Espíritu Santc: "Desoiad¿ escá toda la tierrf
porqrrá ,to hay nadlie que reflexione en su corazón"
(6i).
(ól). ier. I?, 11.
__ 58 _.
2{ Si f¿lta la meditación, la voluniad no ¡.m¿¡ir ;,
Dios como debe , y carecerí de fuer¿as y esi.rulos
para i;r prírctica de las virtudcs. Porqi;c estrs .-c¿r,
zhs y cstimulos son cl fruto de los afe¿tos. pro ósi.
tos y sú¡licas quc sc hircen en la meditación.
3't Si lalta l¿ meditación no se hará or¡ción ¿-aro
sc debe. En la meditación conocemos nuestr¿i ne.
ccsid¿dcs y las clivinas l:rrguczas. San Alfon-.,.¡ ::,-.is-
tc mt¡cho clt cst:¡. razón y dicc que "de la absc.u¡e
ncccsidad qLlLr tcrlcn)os cic orar nace la necc::Jld
moral de la oración mental" (62).
50.-No podrán salvarse los cristianos que
no hacen meditación?
Los cristianos que asisten a los sermona. en
1as iglesias, leen libros devotos, hacen oraaón
vocal, etc., pueden salvarse, aunque no hagan
r.reditación en sentido estricto, pues cumplan-
do sus deberes .:iigiosos en ia forma esore-
sada, pensarán cor¡ frecuencia en las ve¡d¿des
religiosas, y harán de algún modo meüta,
ción. Pero tratándose de cristianos llamados
¿r rrlayor perfección, deberán hacer malitn,
ción en sentido propio y estricto, pues nertsi
ta¡ de ¡aayores luces y gracias, que de a{(r
¡rocio difícil¡nente otbendrá¡.
(62) Verd. Esc. Ce l. C., c. XV.
_ 59-_
 .ollo que encierr¿ todos
los elemntoe de una bue.
Según San Alfonso "todoc los Santos se han san, ' n¿ meditación-
tificado por medio de la or¿ción mental. Ella es. la Tres so¡ las partes principales de l¿ meditáción:
dichosa ir.g.r. que se encienden las aimas ;rr el preparación, aplicación de las potencias
"o
divino amor conforms a las palabras del salnis, d"i ;ñ;;
conclusión.
ta: En mi meditación se enciende un fuegol' (63).

, L PREPARACION
ir ¿Có-o se hace meditación en sentidó
La preparación comienza por la
estricto? noche y rermina
por la mañana. por la noche se
l";;r;;-"; #^:";
Siguiendo uri método. l^,11.:3
sara :l-p,"toy de
al acostarse
meditació", ;; ;l "í"r',"^r*l
al levantarse, precisando el f^-to
que_se qurer. e sacar de la meditición.
El método es útil sobre todo para los principian'
tes; no entorpece la actividad del espíritu sino la
Hay que ir a la meditación con ánimo
sosesado
cncauza. §in embargo, no conviene atarse demasia' según. el consejo del Erpt;tu-i-ff;
I^r":ociÍo.
.ónres c1e la oración prepara tu alma-.,.
do al método hasta el punto de privar ai espíritu ..Veni,
Después de rczar el
de la necesaria libe¡tad. Lo que importa es obte' Sancte Spiritus,, con
ner el fin de la meditación, el cual consiste en la el Ave Maria u ora or¿ción ."'"_Ji"r""f,
enmienda de la vida.
meditación con los acros de f""o.¿,i";.;.;;:;j;
Los maestros de la vida espiritual han propues' "" f"r'pá."á". .il
Dios,. de humildad y contrición p"..
to varios métodos, los cuales, sin embárgo, no se metidos y da súplica,
diferencian en lo esencial. Todos está¡ de acuerdo 19: S"Ijo: abogados el"rr.orrl"od"rrdo
buen suceso de "ia;ñ";;-"
l, medíta,
en señalar los sigr:ientes acios de 1a meditación: re' ción. Hechos ¡ctos, se lee e1 p;. U';.di,
_e€ros
flexiones, afectos, pro¡úsitos, súpli'"". Todos igual'
mentc están óontestes en recomendar 1a humildad,
l¡ mortificación y el recogimiento como prepara' II. APLICACION DE L,.TS POTENCIAS
ciór/ remotq pero necesaria para hacer buena me' DEL ALMA
ditación.
Dareraos en 1o siguiente un método breve y sén' Las principales potencias del a.L¡na son tres: me-
moriq entendiaúento y voluntád- Conocicios son
los actos de estas tres potencias: la mem.oria
(ó3) L. c. recuer-

_60_ _6r _
 e¡ údl recorda¡ los motivos que
da, el enlendimiento piensa y refléxioná; {a volun' suelen ser la necesi.
dad, Ia uritidad, ei ejemptodl
taá q,.i""" y p.olr.rt e. Pues bien' cstos mismos ac' etc. También es útil- preguntarse: Jes;;;:;i* s*lT:
tor r. h"."n e,r ñ m"dita.ión. Lll memoria recuer' bcr he.cho en Ia hora de Ia muertei¿eué qüsiera ha-
áo pu",o cle meclitación; .:l snteádimiento hace §" oi¿erl f". i*
"i
."i." iit oportunits ¡eflexrones; la voluntadyforma ces del Señor.

piadosos ,}..tot y saludables propósitos; para

..^r__:9Q"é T.e en lo.pasado? Aquí se hace ul bre.
ve exarnen de
-
cumolirlos sc implora la gracia del Señor' conciencia. s"tr" pr"r. p-p."|r".
Se pidc perdón a Dios de fas "i
Dir"rno. una palabra sobre cad:r una de las Par' taltas cometid¿s_
tes'indicadas.
,^31-
aQ"e .haré en adelante? Conviene acordarse
sc rds ocaslones en oue con
mayor frecuencia se
Aplicación a la memoria suele faltar y de los mecl;
D; ;. ;;' ;;á"';T ";:üX..ffi
uT : "'.
Toc¿ a la memoúa recordar el punto de medita' ".:,o"".Hu
.ión- iut" ello puecle hacerse la pregunta: ¿Quí Aplicación de Ia volt¡ntad
¿" leer? Es suiiciente, sin embargo, recordar'
"."i"
una que otr¿ frase que más ha impresionado n;:::'
Los actos cie la voluntad son
Ios afectos v 1.,"
propósitos; a ellos se
tro espíriru. Al mismo tiempo, para -que. no ralle Alfoaso llama estos actos "Ara", lo.'i";.;;;;.rSr",i
la oracíórr, podrán hacerse actos de fe, de acción y afirma que en ellos consisre d"'l;;;i;_ó;
frutos
de gracias, etc.
cho de Ia misma (64).
; p;r*üJrr"""J]
Aplicación del entendimiento .lq . Los afectos son actos interiores de dive¡sas
ejeinplo, d". f",
Toca al enteüdimiento reflexionar sobre 1¿ ver'
:to'"9": Por ".;;;;;;: ;;#:,
humildad, acción de g.rci"r. .t..- .i..j
que -contrición,
ro: p.flnc]p1les, según S. Alfonso,
daci -propuesta, no de un modo especulativo .-to
i
lo, d" a_or-,,
suele sei estérii, sino pÉctico, aplicándola a 1a vida contrición. Nótese que en todo
i
.l .u..o;;;;"1
real, puesto'que eri lJ ¿nmiénda de la vjda consiste I diraciór¡ deben hacerse piro".á*".r"liñ
.t fi" ¿" la meditación. Los princrpiantes pueden me a las reflexiones gue se \.,an ;.;a.i::.
-
I huai.n¿o.'a.i
hacerse las siguientes sencilias pregufltas: cjemplrr, el pensamiento Ce las grandez". """,
I
a" b-io"
ls ¿Qué se sigue te ahí para mia ,-fOuí tt :io :l
:.1
despercarí atectos de r¿.irr.i¿,i- y'"ili;,-;:i
una conclusión práctica. apropiada a las nec¿sloa'
deg actr¡ales del alma. Para rnover más la voiuntad
I
(64) L. c.
_62_ -_63_
 afectos
rgcuerdo de los divinos beneficios brotaráo y_la manera cómo se ha de cump
de amor; el pensamiento de las pro'
il-;;;ñft El propósito: "Quiero tener paciencia
oias- migerias y culpas cometidas
hará nacer atectos go; conviene particuiari¡ario: -..euiero
á. ir-ii¿"á,'.onf^usión v dólor' Los afectos
pue
cia,en tal ocasiónl quiero entoirce";;;;á;;;
pi.l#
r.n.,
palabras; el mismo
den haceise con pocas y sencillas Jesús en la cruz". pídase el ou*ilio a" ñioI;;;
.puede repetirse varias veces' Ifueden
servrr
Santos. Con esto se pasa a las peticiones. -' -"'"'
ü;
"fecto espiritual'
iuüi¿ír *Üt" ,'oáo "" tiempo de aridez o tam la' 3s Las peüciones o súplicas, si bien pueden ñL
láculatorias sacadas de los libros sagrados cerse en rodo el curso de Ia medítaciórr,
ies a los Santos. "Es cieno' dice Melecro' 'que
tos in .rte lüju...
gar deberán hacerse con particuiar f"*ár, i^pio-_ ',, *_t
.fectos del coraión se fomentan y avivan
cuanoo
rando las luces y gracias áel Señor
palabras adecuadas; pero no. es v, .oUrrüá".
,"o con 't""t según consejo de San Alfonso, ,áá.
"*ptaoaos
q". ¿rt"" muchas y muy buscadas" la perseverancia final. En tiempo "l d. a" Oi." I
""*JaI.
antes tenemos por mejor que sean
pocas y, sencl'
que.dad espiritual bastará ."p"ri, .* "r¡;;;rJ.
y
llas, repitiéndolis con frecuencia Ponderanoolas *Dios fr".iráJ,
mio, ayudadne; Señor, rened pi.J"d;;-;;
ea nugstro esPíritu" (65)' Jesus mro, mrsericordia". Aunque. otra cosa no se
.-- ii- g proiósito es un acto
de la voluntad por
hiciera, bien empleado estarr¡ el ti".po a"
el cu"l ,rrro re'suel'" poner en práctica
1o que ha.re' U't"_
ditación.
conocido útil, necesano, etc, en Ia constderacron'
El orooósito es necesario para obtener eI tln
oe.,la
escnoe
IiI. CONCLUSION
*"áit.iiót¡. "Según es nuestro propósito'
i"-á"-áL'r",opl, "tí "t nuestro aprovechamiento' La conclusión se compone de tres actos.
si;iq* p*"; fümísimamente' falta muchas le Se hace un breve examen sobre la medi,
tarde o nun'
iq"¿ i" podrá esperar del
que ción; se darán gracias a Dios por 1", 1u...
"*..
.r-"io"oi""z" teo). et propósito, para llenar este das, se prds perdón de las faltas comeridas.
oii"J
para [á enmien'
ñ:;ó; ;.t p.á"dto, esio es efic¿zfácit de cumplir' 2e Se toma un ramillete espiritual, esto ¿s, una
il'r-;; t"pá*i.i"r á demasiadoy no vxgo o dema' fras.e o jaculatoria que nos recierde
ri,ír"r¿tirá debe ser paricular que meditación y el propósito tomado. "í "...rro-tJ
,iaáo lenerat: deterurínanse las ocasiones en
.3_- S_e pide de nuevo gracia para cumplir ei pro.
posrro: 5e recomi¿niü:r a Dios ias ,r"".iid"d"S
d.
u*".'"¿"oa.l'iti. la Santa Iglesia, Ias de Ia tamilía . .o;;;dnd,;
Í:¿i ,, conversión de los pecadores, etc.
".

-ó4- J A5
-65--
 §alve la San' V. LECTURA ESPIRÍTUAL
La meditación se termina coo un&
a:

tisima Virgen u otra oración vocal'

d9' ?-,'r¡
En las comunidad€s suelen leersematerlal' se enriende por lectura espiri-
NOTA: -
ofrece ba§tan¿e oe lJ.-+Q"¿
tual?
,;;r: Sl el primeraf-Punto conviene emplear
L'.i11"". i"rüiá ies, ictos, p ropósitos' En caso
!i,"ii"i"a"'irl'ii"m io d9 la rirediación'
'contra.o
del alma en et Por.lectura espiritual se entiendí
iJ rloi* i" "pti.".ian de las tres potencias ,
u.n Lqrg que rrara de piedad,
ia lectura
segundo Y terc¿r Punto'
:: de aclelantar
rln
hecha con el
en la virn¡d.
52 ' si uno no puede Se dice: "con el fin de adelantar
¿Qué Podrá hacerue porque si Ia lectura se emprende
en la virtud,,
meditar bien? *" ii" i"
aprender, aunque fuese cosas "l l"*
espirituales, '"."-";":
corpo' tura espiritual sino estudio. a"n ."n* '1""o "a
Si uno a causa de una indisposición hace.por pura cunosidad ""
lal o Dor offo motivo cualqüera no. pueoe " o*;;;,ilrrr"o"]'
medit; bien, podrá hacer breves i':"LTl* 54,
-hay? ¿Cuántas clases de libros espirituales
v reDetirlas a menudo, como ya-se. ha
dlcno
Irii".-TrrUién podá rezar el Padrenuestro cada Pa' Pueden
il,,"á'oii6",oL1, d"t""iéndose en estos casos
. 9T!,_ng*.." r¡es clases de [bros
pll:rn¡ates: Vldas de Santos, tratados
es,
iubo o frase. Otros arbitrios para hacien' vrrrudes y hbros de meditaáones.
de las
*rr, ft".* 6sn¿elmente el Vía'Crucis' co'
;;^;;;" de las estaciones afectos Las Vidas de ios Santcs son, pcr
decir.lo así. el
"", en espíritu los m4n'
-
Evangelio aplicado. D"b"r, t""..á l";-;;;;";;.;
r respondientes; recorrer las vidas de Ios Santos más imitables.
Y^desPués de
un L;" ;;;.,
LHffiJá;;I;J'Dios actos
de Ias vim¡des;, cie la vida
;;;;;;"" en cada uno de ellos hacer ".pir;;;l';;"r;,:,;l
les con üai que estén al ajcance
a"t t".tor. Á lá.
áe- corrt.lc.ión. Io que
más importa :" ,rtt-r rneclitación perEenecen taml.,ién
"t-9-u
precloso'co' !" 1., l¿;;;
.tos. o no perder un üiempo tafi ue senrenüas, como ¿l Kempis. S¡¡pedore.q
todos
nro es el de ia oración'
son los Santos Evangelios tont'"""n 'ia"
ras dccirinas de nuesirc ,.lli. 'ida v

.67_
 espi' borada.por las sentencias de
55.iPor qué' debemos hacerlectura períencia. de innumerables
los Santos y pot la ex.
rlmar. Sro p,rñ;' ;;.
ritual? ga a su discípulo San
T. "Aplíc.ate a la lec.
los rura, a ra exhorración ,, llo'"ot
Debemos hacer lectura espiritual'por ra enseñ.an¿a" (67)' san
gra,ndes biene que ella proporciona
a nuestra J*¿;,*;;¡i".i,3:Ii "Ama I¿ Iectura de
i* s"g."á. É.il;:;'::"^1:,::
alna. di,i,;"§;;;,;;:"i::",u:"::,1?,:T":T¿T,f
He aquí los PrinciPales:
,:i
con la del I1il::,';:,::: ; ? j,,".: :pi.r,: *;;' ;; :;, d

lc Comparando nuestra conductadoctrina que el ' palabras'sigi:r;;r,':¿-i,] lre " ^,"

§an Alfoson son las
Santo cuya vide. Ieeoos o con ia -r"rñ., " es nociva Ia lectura
comprendemos lo que debemos
re' á" m-r "' *"*
,r.,J"".'"'"
""i". ñ"*, ani¡oados a em' buenos" (¿81.
ss provechosa l¿ de libro'
formar en nosotros y nos sentimos
coraPara san
;;;;;t dtÁ; '"fo,á"' Poi esta razóncon - La- conversión de San A

"i; :";[*::l"i "ff,1,,T"Ii;.::

un espe'¡o
6t-.notio Magno [a lectura espiritual ,L;.f i
.q"
r
que-nos hace ver las manchas de nuestra '-".---, oevotos- Otros se enfcrvr
2e La lectura espiritual alimenta nuestro
espl' s,n aro,,1o l" dil;'r"JÍ i::ir"'K",",.:;I;Í";
¡¿í p"o1troi""tot' Asi como I9s. myn' todos los momencos I;bres
ros esPurtua'
"ol"-u""""" el tiempo con lectur¿s- frívolas'
t;;;r;Etdá vanos y perBru-
r
"'.
p'.r,., r.Á
"r"",
# ;il".
"
fi ;l;b
Ilenan su cibeza' dé pensamientos
;:";;ijJb;;;o. "i'tiu"os que hacen todos los 56- ¿Cómo debemos h""". L lectrlra espi_
ella de sanccs
;;- ;t;t" espintual t" p'o"""t'Aen esto deben agre'
ritual?
devotos
;;;;;;Ñ "i"'to'' del Señof que con Para que la le6¡¡a espiritrral
sarsc las luces e tnsprraciones
-espi'tuai .frutos prcduzca los
reciben'
-l;-;;; i"l" Iect':ra tl"-'ot"tseiectu¡as nos disPo'
i.".i¿. expresados, deben
medio de l"
iTi:l:L{: "b.;^;;;;;;
reglas que ia prudlncia aconseja.
,;".;l;r;;n Y meditación' P'".. Heias aquí:
;ñ;; "rpitrt" too bu"t'otmáspensamiqntos'
fácilmente el,segu:r
reco' lc Antes de la lectur¿ se invoca¡án
," ir. ii.rtá, conservaremos las luces
;'#*;:';i i"i.' r' princ'ipai disposición pará Ia
oraoón' (67 I. 'I'im. 4. 1 3.
se halla corio' (68) Verd. Eip. de
L¿ utilidacl de la lectura espiritual i. C., c. 15.

_69_
-68..--
 Spiritus"
del Eeoí¡itu Santo con el "Veni' Sancte la santí' €oseña. acerca de la presencia de Dios y hacer
;":#"ó;;:tó" "pt"pi"¿"' v se saludará a actos y aíectos correspondrentes.
J*" Vitg"n con el Ave María'
2t Léaeecon Pausa y con refleúón' dando tiem'
las enseñanzas del li'
58, ¿Qué nos.enseña Ia fe acerca de Ia
,"""r "ioiJ" l"i" "il'r'^" presencia de Dios?
t;".'a"i;;; il Alfonso que seamos como la.abeje
to'
ñ;;;;;;i;;, la flor sin haber sacado de ella La fe nos enseña: lo que Dios está en
da le miel (69)' el
cielo; en la tierra y en todo lugar;
tq Si surgc en la mente un pensamient"-: "1::"
poco la lec'
interrumoir un
to saludable,-conviene
y hacer alguna ,T'.que Jesucristo, como Dios y hombre, as,
tura, si ésta se hace en Particuür' ta glorioso en el cielo y oculto Éajo b; vélc,s
jacuiatoria.
plsa' eucarísticos en el Santísimo Sacraiento.
'- 4n s"n Alfonso aconseja escoger algún
mas et es' 3e que todas las cosas creadas refleian
miento o sent¿ncia que ha imoresionado el
to.oá t" lleva r¡na flor' de poder, la bondad y la sabiduría de Dios.
áum
,iii" ,ir*"¿o "o"'igo
Es el mismo consejo que se
da en la me' es su Criador y Conservador. '
L -- -
i"-i*á*.
--;*
dít¿ción.
. 4a que Dios habita de un modo especial en
Escójase para hacer la lecrura espiritual el ei alma del justo.
ti;p";#;.i*,o"oi'¿'r,""n".T'T:,0":::'?1"1 El que. piensa cjevotamente en alguna
este ejercicio a 1o meaos ¡ de estas
tercia<Jes, anda en la presencia
ie imáoett", un cuarto de hora' d" óio.. p"ro oo
oay que contentarse con el pensamicnto;
DE DIOS es preciso,
vI. EJERCICIO DE LA PRESENCIA para completar. este ejercicio, hr.". pirdorás
aroii
¡aciones o jaculatorias como luego se dirá.
la pre-
57-¿Eaqué con'siste el ejercicio de '
sencia d; Dios? 59. ¿C-aántos mcdos hay de a¡rdar en Ia
presencia de Dios?
El eiercicio de la presencia de Dios
consrs'

,";;#.d*iát¡ fi*"*tia 1o que la fe nos

Hay cuatro modos según las cuatro verda,
des expuesúas en el númerc anterio r.
(ó9) L. c.

-70=..
 EI primer modo consiste en considerar-T,1 l:: tará contigo Jesús. Sin
nosocros t"9"1-iT
r

¿^" f" fe ¿ Dios presente en y si no fuere J.Jfi,fl::.:[x".:#,,._.,::

"¡*
;ilü.;i Apóstoi' "No está lejosy somos de
":''"ii:',t'
111,":
estarás muy trisre y desconsola....,.,
ioroo" El vivimos' nos movemo§
/v' '
\ s.ar que Jesús nos ve ir¡j.;-;:;l
desde .l .i"lo o'á"íJ"';i #.
i:q]ii,-p.rt",
"o dice San-Alfonso' que no le veamos tísimo Sacramenro, nos ..".d".;;;"-;;?
.árrt 1o, oios del cuerpo? Tampoco
vemos el aire; Ya il:,
otro miscerio de su vida ,".,tí.irn* -."gú;
que est;mos rodeados. de él !¡
rus tlempos del año o I
;;"';;;;;" partes.ab"*o'
y que vlvlmos en medio.de illg?l' c"" ;;;;";;;,; i"j". arracrivos det corazón.
oor todas
q.e sit é1, no podríamos ni resoirar nl vlvlr \ ,l'
/r
."ü ;i'd:".#::;::.ffi;: l'É":::
ll:o..sil"esruviera ';;",..ij
¿ll"o"';;;;r";" medio dát mar está Por todas como cerca de
así nosotros de porta son "oo,.o.l-iá
;;;;;Já v pá"t'"¿" del agua' los. afectos
-o t¡cr
del cor.Zoo' no los esfuerzos
i'1;:;";J"'óiou. "¿at"* rio lleno vo el cielo á" t, i*g-i*.ia.t
(72)' EI tercer modo consiste en ver y
v ta tietraZ" dice el Señor' "Jesucris' en las cosas c¡iadas. Todas
adorar a Dios
El sesundo modo consiste en pensar:
-r" desde el cielo", o "Jesús me o¡s' Dlos, revelándonos su ,"¿"., "rU.'".""i1¡1r""'a"j
Uon¿"J;;;;;:
,o .. ,'" "Toda Ia tierra está llena
de §u trono eucarístico"' A 1o cual
pueclen su gloria,, 174\ ..r ^.
oe-Di*T"i;s
-ana' cietos anuncian la gtoria d"
ii* f* .i*r"ntes reflexiones: "Esviüó eI mismo- Jesús
oculrc en cosas pueden servirnos de )., iJj""ll;'
IiJ,i}á^il-;i;";'l de Belén' peldaños'pa;; ,;l;..;
Ñ;;;;;Aicl''el sanco Evangelio' sq''ó a los .el ponsamiento a Dios. Así Io p.r.rrIrÁ"""i".'#]
tos. De San Agustin ..ft"."
enfermos,-dió ejemplo' de todas las
virtudes' Paoe' Sr'r-ilfJili'i;.)
ccnc¡melar las criaturas remontábase T;
.iál--üio l.t'z',r"sucjtó y subió. a los cie' 11, su cora-
"n'1, 291 a Dir-rs, exclamándo .o., :Ei
i"."1 f-"-e. de Kempis describe magistralmente ".do.o* l¡":;",
;.;" ,";á.J" la preseicia de Dios: "Sidañarte'Jesús estu'
Po' ::,:..I ! rier.ra y.rodas. las cosas
oo que o-s ¿me, Díos mío.'. me escán dicien-
;;;;";;s", ningiur enemigo podrá
brísimo qo" vive sin Jesús y riqurstmo es er -__",,.u"ao
modo ccnsiste ¿n mi:.ar a
Dios den.
".bien
"1 ion Jesús' Muy grande arte. es saDer tro de nosotros mismos Í
ár.
"stá ccn Jesús. Sé pacífico y humltde y es-
Jo.rt"rr-
Di".; ; ;;;;
;:,í^#;:""ilT}:'n,n:ilX,i:.0d,:
('tz) Jm. de C¡., t. II. c. 8-
(70) Act., 11 , 27'28. (7 4) ls. 6, 3.
( 71) 1.. c., c. 16. Ps. 13.
(72) ler. Z!, 24. lln
t ,'o, r-
n"l
/J _
-
 el súbdito, en presencia de su superlor,
en ei alma ¿:l jY-t,": ¿cómo po.
dÉ faltar a las leyes de Dios qrr" 'p-i".rr"
un modo . Particular su trono qrr"
donde reside como en su
templo t"ry1't"t-t'lo-1t3 "i srgiadas y'en
q":-:'": Dios le ve? Leemos en las l¡istorias
;:";;;-ñ;j": [uien dice: "¿No sabéis' las vidas de los Santos que los sierrJs d" ói"r,
temolos de Dios y que el
Espíritu de Dios haorta fortalecidos con este gran pensamiento, resistie,
:'Jfi;t;;¡ 1ií1"n"'¿" tiene'san
de subir
lll
+r'":"t"-"lo ron todos los asaltos de sus enemigos.
"No tenemos
ra decir: necesidad "l
j'#n,i"i; 2e El mismo pensamiento les daba fuerza v
'r,:'l"i':iü ;- nt"." b1:'l vigor para practicar las más heroicas virtudes.
y- eu ::#X
¡ruw"'"- ,----
ffo de nosot¡os m1§mos' "o:: -.,^ sa
Teresa' los que ""- Nunca muestra más valor el .soldado qu" ., pr".
ffiti";;J]ñri' s"g'i"'santa sencia de su jefe y capitán_
il;*";;"'" "" ** pequeño cielo de sus
alroas'
pio' oUn"" pot.:1:"13r1t"9--:" 3e Advierte San Alfonso que el amor crece
donde habita (79) ' TaI iué tam' con la presencia del objeto amacio. El alma que
i-Já" -"tf'o en Poco dempo
clatalína de 'sen¿' que procura constantemente andar en la presencia de
' iltJI',i'rJIiJ''áJ s'"o
" ' ::"ffirá """1"r¿iuten su cor¿zón' donde con' Dios, conocerá cada vez mejor Ia infinita belleza
Dios eo medio de sus
quehaceres' y amabilidad de Dios y no podrá menos de encen.
versaba con
derse más y más en su santo amor.
60.-¿Cufes son Ios frutos de este ejerci* De lo dicho se deduce que el ejercicio de Ia
presencia de Dios pertenece a las ties vías de la
cio? vüa espiritual, ), que es un excelente medio para
según San
tos frutos de este ejercicio son' adelantar en la perfección según las palabras'del
práctica' de Señor al parríarca Ab¡ahám: . Anda delante de mí,
Alfonso, trest ft'g" del pecado' y serás perfecto" (81).
i"r-rr¡*.r¿"t, ut'iói con Dios'
' le "'I<¡dcs los pecados, di* t1^,:,?::: á:Ol; 61. ¿Qué son las jaculatorias?
se olvloan L¡E
ororienén de que los hombres si el-hijo no,se
ilüic;¿loio.". En efecto' Las jaculatorias, las cuales pueden consi,
faltas en Presencia de su Padre" .
:d;;ñ; derarsecomc e1 complemento y fruto sa¿o,
nado cÍel ejercicto de la presencia de Dios,
(77) I. Cor. 3' 16.
( 78)
('/e) b;,1. ,. pcrr., c. 28' ( 81) Gen. 17, i.
(80) L. c.
*75 _
 Diosl, tened piedad de mí, pobre pecador: pésa.
sorr unas breves oracioncitas que se compo.. me de habe¡os ofendido".
,"" g"""t fa""re de un solo acto o afecüo' En cualqüer momento: "¡Dios mío y todas mis,
..Son como unos ilardos y saetas encendidas' cosasl" "Jesús, Dios mío, os amo sobre todas las
dice el P. Rodríguez, que salen del corazÓn
y en cosas". "Haced de mí lo que os agrade". "No per,
y envían a Dios" (82)' mitáis que me separe de Vos". "Madre mi¿ Miría,
.rn ponro ,"
"t-¡rn
Las jaculatorias se recomiendan.por su
Ol":d-* rogad por mí".
for ser
v la facilidad con que pueden hacerse'¿.distrac' Muy recomendable es ambién la frecuente re,
l" ."b.i", ni dan lugar novación de la ¡ecta intención.
;';;;;-;;"o de tooas
ciones. Poi su facilidad están al alcance
#;;;t;;;., ; fu"den hacerse en cualquier lugar 62. ¿Qué es la recta intención?
auo et toedio de 1as ocupaciot'"t' . ,
"iiiioo.
" Errtá ias jaculatorias. merecen la preferencr4 ras' La recta intención es un acto de la volun,
q*' ;"¡"i .á adaPtan al estado attual decon nue§tra'
fre' I tad por el cual ofrecemos a Dios nuestras
repetir.
alma. llay personas que prefieren va' cbras.
.*".4 lá ti.-" ¡a"duória, otras -prefieren
La recta intención, bien practicada, es por sí
riarlas según 1as circunstancias' En lo
cual pueoe
*"ü; "rá" uno los atracrivos deque
;;;;; su corazón' sola, capaz de conse¡varnos en la presen-ia de
ilÑ;" jaculatorías pueden servir' Dios como demuesrra el P. Rodríguez (g3). El
de
"il
modelo. Apóstol San Pablo recomienda su práctica con las
""Ái"rtirr.ipi"r una obra: "Por Vos' Señor' quie' ¡.alabras: "Ora comáis, or¿ bebáis, o hagáis otr¿
ro hacer otra obra"' cosa cualquiera, hacedlo todo para gloria de
'"Éilp*"U" o tribulación: "Hágase; Señor' tr¡- Dios" (8a). Conviene hacer la recia intención por
.roluntadi. "Dadme Paciencia"' la m¿ña"na y rcncvarla fiecuentemente d,:rante el
";h
il á,rÁt v peiplejidades: "Señor' ¿qué que' día.
E1mérito de la recta intención consiste cn ele-
^;Jñque haga?".
réis
teit"cio,,est "Señor, venid en mí socorro' var nuestras obras ordinarias al orCen sob¡enaru.
Tesús. Marí¿ Y José".
ral y hacerias meritonas para la vida eterna. Re-
" Despues de haber c¿ído. en una
talta: "¡Oh
(83) i. c., c. 4.
(84) i. Cor. 10, 3I.
(82) Ei. de Pert., tr' Vi, c' 3'

__76 _ _77 _
novada con. frecuencia, qonvie¡te nue§tr¿ vida- en
oración continua haciéndonos cumplir e[ precepto
del Señor: "Es menester orar siempre y nunca des'
fallecer" (85).
' Tomamos del citado P. Rodríguet 1as siguien'
tes fórmul¿s de recta intención: "Por Vos, Señor,
hago esto; Por'contentaros y agradaros a Vos. Por'
qoá Vos aií lo queréis. Vuestra voluntad, Señor,
es la mí¿ y vuestro contento es el mío".
Claro está que las fórmulas o maner¿s de ex'
presar la recta inteflción pueden variarse hasta 1o
infinito. En general puede decirse que e§ r€cta
nuestra intención ar"t do t" inspira en el an¡or de
Dios (por vuestro amor, Dios mío; por agradaros
a Vos) o en el amor det próiimo (por la conver'
sión de los pecadores, por las benditas ánimas, etc')
o en otÉ virtud sobrenatural (por peaitencia' por
obediencia).
Para cdncluir este número advertiremos con el
mismo devoto autor que "cuando hacemos estos
actos, diciendo: Por Vos, Señor, hago esto; por
vuestro a¡nor y porque Vos así lo queréis, y otros
semejantes, los hemos de hacer y decir como quien
habla con Dios presente. La razón e§ "Porque eso
es propiamenüe andar eo la presencia de Dio,s .y
io que hace este ejercicio fácil y suave" (Só).'
"roi.
(85) S. Luc. 18, l.
(86) L. c.
VII EXAMEN DE CONCIENCIA
.63. ¿Es necesario.el examen de concien-
cia?
§í, el examen de conciencia es moralmente
necesario a los que aspiran a la perfección.
He aquí la ra¿ón. El que no se examina coo fre.
cuencia, no se conocerá bien a sí mismo, y, por
consiguience, no podrá desarraigar efica¿mente
sus
detectos ni implantar en su iugar las virtudes. por
ei contrario, el que se examina asiduamente se co.
noce¡á a si mismo. Con esto y con los actos de
do.
ior y oropósito que se añaden al
pondrá para la enmienda. "r"-"o- * dia.
La importancia dei examen ha sido insinuada
por el .Apóstol, el cual escribe: ..Si ent¡ásemos en.
cuentas con nosocros mismos, ciertamente no
se.,
ríamos juzgados" (87) y ha sido,".orro.id, p-o1.
los Santos y escritores ascáticos de todos lp, sigios
64.-¿De cuántas maneras es el examen
Ce conciencia?
De dcs: particuiar y generai.
,lat?65.-¿En qué consiste el exarnen :particu_

(87) I Cor. 1t, 31.

_78_ _
 El examen particular consiste en exami' .
Conviene distingür enüre la subsrancia
r
narse sobre un defecto que se quiere corre'r ceftas prácricas que podemos ilamar
adi.io
nales-
Acerca de la materia del examen parricular dan
los maestroe de,la vida espiritual las siguientes ie' La substancia del examen particular
consiste en
examinarse cuidadosamente iob."
"l ,r;r;;;;
glas:
se. ha elegido, recorriendo
ls El ex¿men particular debe hace¡se sobre rn"nrnlrnár"tl;J;;
dei dia, y hacer un acro d" ,ir;;.;';;;;;
una sola cosa, es'decir, una sola falta o una sola propóisto. "En cuanro a la práctica ffi:
virtud. y conviene detallar más aun esa falta o esa menes,,,ry:scribe San Alfonso,
l"-iá.'"_?l
'virtud así como se ha dicho dei propósito. que se p^.tl.rfo.-
toma en la meditación. En esto consiste la' efica'
ve, porque se reduce a fijar "l ", U.J.
un rato la atención
sobre el defecto dominantá y hacer;";ü;;;
cia del examen particular según la máxima latina:
"Divide et impeia" o en nuestra lengua: "Divide :l^T,:9"
nace
dotor" (88). Taábién .t p.
notar que "en esta computación y ¿¡¡si¿¡-
ü;ñ;
y. vencerás". Más fácil es vencer a un solo enemi' timiento y en esce_propósito firme
'go que muchos a la'.vez' ;"'";^;;;;;;
a caer esfa toda la fuerza del examen para
enmen-
2s El examen particular debe hacerse con pre' darnos, y así en esro se ha de
;.r;;;;.,"J;;i
férencie. sobre la páriót domit a:rte o la vim¡d con- tiempo" (89).
traria. Porque, vencido el enemigo principal, más Acab.amos de cxplicar en qué consisre
fácil será vencer a los demás. la subs-
tancia del examen panicular; pero hay.i"rt",
o.á..
3s No se dcbe canrbiar antes dei tiempo 1a ma' ttcas quc aumentan notablemente .su
eficacia; *"
ias
. teria del examen particuiar. Meses y años se re' hemos llamado ad:icional, Las p.incipales
,;;'
quieren a veces para extirpar un '¡icio o adquirir la Registra¡ en un pape.l o cuadernito
üa virrud. De §an Francisco de Sales se refíere .. _ Dor me.
dro de puntos o rayitas, después de cada.
que durante 20 años llevó el examen particular el n umero de faitas cometirlas v confenr de
.*r*"r,
tobt" l. mansedumbre; se sabe que en asta virtud en día o de semana en seme.na ,rúa"ao
dͿ
C"
faltas para ver si hay.enmienda o"l,"rroa"ro. -- '*"
llegó a ser modelo incoraParable, ' io,

66-¿Cómo debi hacerse el examen par'

lll) verd. Esp. de l. C., c. 24.
ticular? (ó:r) E;. de perf., tr. VII, c. g.

80..,- _81_
 ,2+. I¡¡ponerse uria leve penitencia
por las fal' .I_a-sPa¡a hacer cl examen general basta recorrer
,n" or" ü .o*"r"rr, la cuai se cumplirá" o T
t:' del. dí¿ lempezaido p".-H-;;;;;'"
por ,horas
la noche) y examinar las faltas qr"
g""rü-á*p.* d" .o*"tid"" las falas o después de cometido en pensamientos, palabras yiJÜ; ." h".,
"''
hecho el exa¡nen'
3s Renovar
-4" con firmeza cada tsrañana. la re'
observar fielmente 1o que se ha
pro'
toi*i¿" VIII._FRE¿UENCIA DE SACRAMENTOS
puesto eo el examen Particular'
4r Hecho examen particular al mediodía'
el
volve¡lo a hacer por la noche. En este caso el pr1' 68._¿Qué sacramenros se entienden
mero versa sobr" la, horas'de la mañana"y e1 se'
.. *
al ha_
blarse de frecuencia de sacramenrori- -
gundo sobré las de la tarde.
Alhablarse de frecuencia de sacramentoq
:¿Ét qué consiste el'exámen general? se entienden los sacramentos
67 . . y Comunión.
de ia C""f;;

El examen general consiste en examinarse

sobre to.das ti faltas cometida§ durante
eI
69.
¿Por qué son medios. de perfección los
dia. sacramentos de Ia Confesión y
Comuni ón, re_
'El examen geteral, eI cual suele hacerse por cibidos con frecuencia?

ic Sé oide lu¿ para conocer las faltas come' A esta pregunta debemos contestar
por par,
tidas, p;'ct vo fin iuede re zzrsé, el "Veni'
Sancte tes-
Spiritus':.
2e Se recorren mentalmente ias horas del día L, Coaíesión frecuente, ya por los ¡Lctos
dei
p.i" .r"i lo que se ha faitado en pensamientos' perutente. ya pnncipalmente
t1to}."ntg, purifica más y más ior ia sracia dei
ei jma, lim-
3e Se liac¿'un actó de dolor y propósito' p¡andola de las manchas contr¿jdas y previ.
cad¡' r-t9'
Éf seneral, hecho coa cuidado niéndola contra lix recaídas,
.ir", "-"*"" Ét"rr. pt"p"'"cióa 'para la conf¿sión
paLra adeiantar en ei emor
l, ,"114í;;;;
". "it
.s¿manal.
divino.

-'8i2 -- -83_
 Según refiere San Alfonso, dijo e[ Señor a San' en el momenco de recrbrrlos
ta Br?gidi: "El que quiera conserva¡ la devoción algunas de ellas.
estas verdades o
Jebe ümpiarse *"trdo por medio de la.Confe'
"
sión, acusándose de todas las faltas y negiigencias -
que comete en el servicio de Dios" (90) ' qué disposiciones debemos
Dtr estos_"r""
sacra¡nentos?
reci-
La Comunión frecuente y diaria nos une ^,11:_
c:¡da vu más con Cristo, robustece en nos' para recrbir dignamente
otros.la vida de la gracia y no§ hace mas fuer ,^.lT^_9,_.p":iciones.
los sacramentos de Ia
tes y vigorosos patihüt el pecado y practica: se enseñan en ia ,6;;?;
Confesión
doct,na cristiana.
la virrr¡d. O" Ia vida espiritual
il.;;;r]
vanos importanúes cr "* d;';;;;rr'*":
,r:o:
3nseJos para recibirios
7O-¿,Qué debemos hacer para que esto§ con mayor fruto.
sacfamefitos produzcatr efi nosotfo§ fa+ Pfe-
He aquí algunos de e¡
ciosos frutos? consejos.
.c,n o¡den , t" corrr""¡¿tis
, Debemos acercarnos a ellós: . I '2. En el examen de
le con espíritu de fe;
2e con buenas disPosiciones; ::fl:i:':f.i,i" l,"u,j":i?;:
,.-, Denor
:
ill;L,i"::
cu et agua ¿urbja y agitada.
3e con frecuencia. ..c,1
ciaos, decÍa s""
-i:*,.ril'!d?H[:.'
no está en la r

¡udes, porque no
hay co
# i];,"1:::.
71.-¿Qué debemos hacer para acercarno§ ca m in a¡, i p..r"..Iá., r-?1 ri
*r13
', Io, tacr"-"ntos co¡I espíritu de fe? : " fre,:uencia
se co.nfiesan.con 1,3*.:,:t"" #
pue<.len hacer en
co t¡ernpo el exa_men co.
Debemos creer firmemente 1o qüe 1a fe nos i"rt",,ffi;] de i-tuvieran
er¡seña acerca de la institución, naturaJe:a
y "igu.,, r'á"il'il"X.j}
2e Lo principai es la coatrición.
virrtrd de estos sacramentos y terter Pres-oüe Es preciso re.

(90) Verd, EsP. dc J. C.' c' 18' i;ji á1i,ff-;#,,1,¡r, i c

-84 - _85_
zlar¿l acto. de contricción con atención y. devo' 73. ¿Con qué frecuencia debemos recibir
;¿";^p*;-.;-d"b" '"totdnt tambiénlaque- la con' Ios sacramentos de la Confesión y Comu-
voluntad
;iJ¿J ". esencialmente un acto de En medio de.y nión?
no del sentimiento o sensibílidad'
il;;;;dedad se puede tener contrición muv Aunque no sea posible establecer una re,
perfecta. gla general sobre esüe punto, por depender
volver
3e A más del propósito generai de no de varias circunstancias, puede decirse, no
se'
a ofender a Dios, conviene' en las contesrones
el, cual cbstante, que la persona deseosa de llegar a
manales tomar un propósito particular' . la perfección debe procurar confesarse una
partlcular'
puede ser idéntico con el del examen
Yhu' vez por semaria o a 1o menos cada quince
4q La confesión debe ser breve' sencillamuflIes' días y comulgar todos los días o casi todos Iós.
milde. Será- breve si se evian relaciones1o que..se
todo días según el consejo del confesor.
ó;;;i";", no obstante' manifestar sencilla
:;";:;;'.;; ia di¡ección espirirual' S¿árodeos,m Los motivos que deben animarnos a la Comu,
se acusan los pecados sin
;;;ú" sí-rr","iIdad nión frecuente y diaria se hallan. expues¡os en ei
1".ürr.l" atraerá sobre nosotros las
citado decreto pontificio, y son: la práctica de los.
bendiciones del Señor' primeros cristianos, los fervientes deseos ds Je,
En orden a 1a Comunión:' sucristo y de la Iglesia y 1os preciosos frutos de
' este augusto sacramento de que ya se ha hablado,
Las ccodiciooes para comulgar -dignamente^-Y
."""'i;^ .;; áos,'señaladas en el d"t1::t-.^pt:;
y urdrra u"' 7a. ¿Qué práctica devota hay que unir.
tificio sobre al Comuniór' trecuente piadosa in-
;;'iri,5.^;';;do de gracia v fecta v
-"-bargo,"para a Ia Comunión frecuente y dtatia?
mayor fruto se
ácibir
,"".iá". Si"
indic¿<Jas *
il;j;;;;;'".'o"ái'iá""'' "l T,if:
diligente PÍg*'oo1,-I
La devota asistencia al santo sacrifico de
d;:;;; ;;Pecial, unagracias' También * :i:'" la Misa-
.'á"*"r#"-Iti¿"'¿"
;tot'u"ni"t'iítí-o que los. q"" :o--"1
:iü;;;t;" L¿ Comunión débe consídera:rse como comple.
;;i;.*;" o di"i"*""tt estón libres de,'Pe' meoto de la Saata Misa- Así 1¿ consideraban los,
cados venial¿s, to rnenos' plenameote dehbe'
Por primeros cristi¿nos. La Santa. .Mis¿ es eÍ\ ezpre..
v.Jel afecio hacia
¿11os"'
;;J;;
_.87 _
rión.de San Frincrtco de Sales, "sol de los ejer'
cicios espírituales, centro de la religión cristiana'
alma de ia devoción, vida de la piedad y misterio
SBGUN DA PARTtr
inefable que encierra el abiémo de la caridad di'
vina (93 ) .

VIAS DE LA VIDA ESPIRITUAL

Conclusión de la Primera Parte'
No cabe la menor duda que el que as constan'
poco
te en el.empleó de estos rnedios llegará Poco a
'-a la oerfécción
ód;;1";". ahora tratar ig t¿5 vías de la vida
ECCION PRIMER,T
o sea del ejercicio y desarroilo paulatino
".oirirrl
de la perfección en'el alma' Se endende que en VIÁ PI.'RGAT]VÁ
cad" .rr" de estas vías deben emplearse los- me'
áto. .*p,r"t o. en 1a lc Parte de e§te tratado' si 75.
bi;; ;;'".. y empleo se moditica conforme el al' ¿Qué es vía purgativa?
.ma va creciendo en Perfección'
Jía purgativa es ia primera vía de la vida
espiritual, en la cual se trata
de aieíar mái
a" r" p".r..j;;: "'*
r/ ma^s los obsáculos
Los principales obstáculos de
.la perfección son.
como se ha dicho en la
desordenadas.
in¡¡,rd¡s.ló"-il;;;#
Sj supons que e.l alma
de Dios, p"'qi,"'r*
ñ:";;";"il";;::tr,Í:Hl
.*e. hallan. fuera de ias vías
a" i" f"ri".Jioil1't.
.o;
mismo cebe afirmar, en m
i"",i*.;-;b;; il'[J,:;: T,?,1?'.-llf,l¿.jj
(93) Vida dcv', P. II' c' 14'
serio para adelanrar
"n
r.. p"J""j;;:il;';;l:
_89*
-88--
8e eflcuentran efr con§tante. peligro de recaer en el
pecado . mortal.
76-¿,aon qué nombre genérico pueden
designarse los ejercicios propios de la vía pur'
gativa?
Los ejercicios propios de la vía purgativa
puedm designarse con el nonbre genérico
de mortificación cristiana.
77 mortificación' cristia¡a?
-4Qué.es
La mortificación cristiana, llamada también
abnegación o vencinúento propio, es el con'
junto de actos que tienden a someter al dic'
tamen de la ruón 1os sentidos del cuerpo y
las potencias del alma.
Al
decir "dictamen de la razón" entendemos la
razón ilustrada por 1as luces de la fe. También'
puede decirse: Morrificación es el esfuerzo moral
que debemoe hacer para llevar una vida digna de
hombres y de cristisnos.
Los dive¡sos'. nombres que se dan a la mo¡tifi'
cación evocan la idea de la lucha y del ccotraste'
Iste contraste es designado en los libros sagrados
con los nombres de hombre vieio y hombre nrre'
vo, ley {el pgcado y lcY dcl esPíritu
- _90_
78. ¿CuáL es el fin de Ia mortificación?
El fin de la morrificación no es destruir
la natu¡ale?a, ni alguna de sus potenci", ,i.ro
mejorar, elevar, dignificar la naturaleza con
sus potencia§.
.Io que se combate por medio de la mortifica-
cron no es. la naturaleza, ni ninguna de las poten-
cias o, facultades del alma, sino lá desordeoá q.r"
en ellas hay. Desordenado es lo que conduce al
Pecado' ,
-,_;
79.
¿Constituye Ia mortificación una vir-
tud particular, distinta de las demás?
La mortificación no constituye r:na virtud
parcicular, disrinra de las demás, sino que
entra en el ejercicio de todas las virtudes.
80. ¿Es necesaria Ia mortificación?
Sí, ia mortificación es necesa¡ia. He aqur
ias razones:
i.s Somos hombres, es decir, seres r¿cio.
nales. Para Eerecer este nombre e-s necesario
-"
subordinar 1¿ vicia inferior d" io. ."rrtiáár
ia vida superior de ia razón. f.t", ao. ¡o-r*".
_91_
 . 'lPurificar los senridos del cuerpo., quiere
3e El verdadero discípulo y soldado de Jesu-
evitar que por Ios sentidos, que son como las
decir
crieto, no contento con defenderse contra los ene' ta,s,y ve.ntanas del alma, entre el mal
puer.
il;; ;;.;, por decirlo así' la ofénbivq preii,,' en el alma.
flaDlando con propicdad, no son los sencidos
níé-ndáse en Ia oración contr¿ los ataques de sus terlores los que se mortifican sino las
e-x.
enemigos y pasando a menudo en 1a mortificación naciones o_ pasiones que se valen d" lo.
malas incli.
los límites de lo esrrictamente necesarlo' ,"nil-d*
como cle rnstrumentos para buscar sus satisfac.
ctones.
82. ¿De cuántas clases es Ia mortifica-
ción?
84. ¿Es necesaria Ia mortificación exte-
La mortificación es de dos clases: exterior riot? \
e interion La primera sujeta a la recta.tazon
Sí, Ia morcificación. exterior es necesaria.
los sentidos d.i .r'r""po; la otr¿ regula las po-
tencias del alma. A.las razones que prueban Ia necesidad de la
moftttrcacrón 'en generai, puede añadirse .las
A estas dos clases, llamadas mortificación gutentes reflexiones: si.
activa, puede añadirse la mortificación pasi- lq. El cuerpo ha sido viciado por el o¡im¿r
.r", la'cual consiste en llevar cop Pagelc'a pecado. ..la
I)esde entonces carne codicia contra
las pruebas interiores y exteriores que la Pro' el espíntu" (6). Es un hecho q." l"-rür-r"."
vidáncia envía para punficar el alna' cle las tentaciones entran en el alma poi
lo.'r"n.
tidos exteriores.
Trataremos sucesivamente de estas ciases de
mor'
tificación. .2a La lucha constante contra la sensuaiidad
sirve admir¿blemenre p"r" fo.t"i.... ;i';;ñ;
¿n las demas luchas (contra la soberbia,
I. MORTIFICACION EXTERIOB' etc.).
3e La necesid¿d ie refrena¡ consranternente
A3-;¿Cuál es el fin de la mortificación demasías de la. car¡re co¡serva el alma
.;l;:;;
las

cxterior? ta humilCad, haciéndola decir con .i-Áp¿ri"i,

",i"-
El fin ,Je la mortificación exterior es p-üri'
ficar los sentidcs det 'rrerPo' (ó) G¿I. 5, 17.

95_
-9+ -
feli,¡ dc míl ¿Quién me librará de este cuerpo 1$ Siendo el fin de la morrificación exte.
mortal?" (7) .
"'1;-'L"t'í*tos rior mejorar Ia naturaleza, no destruirh. ;;
de todos los siglos'-aun los má* se debe perjudicar notablemenre
benignos. nos predican con su ejemp-lo
y'.con 6us l, .ul"J'*r,
exte' porai con excesivos ayunos, vigilias,.";. L;
;;;;;;;" ia necesidad de la mortificación prudencia debe regir át
rior. San Juan de la Cruz decí¿ que' aunque
v1'

ri.." "" etg.f a decirnos que la morrificatiól trcación como las demás "¡"r.ioá-a;i";"i,
pácticas virüuosas.
creetlo"1-
y
terior no ei necesaria, no deberiamos 2s Tratándose de penitencras y austeridar
,.Á.t q* fuera un engaño diabólico' ,
ces corporales como cilicios, disciplinas, ayu,
85 ¿Cuánt¿rs .cosas
abarca la mortifica- erc., debe pedirse consejo y^p"r.i.o
los,
ci6n exterior? director espirirual, ya paru no incurrir en "t
errores e indiscrecionc, y? para aquilatar
La mortificación exterior abarca dos co' más con Ia obediencia el mérit d" á ;;.,
sas. tificación.
ln sujetar los sentidos al dictamen de la 87-¿Qué mortificaciones particulares se
reúa nzoo; designan con el nombre de mortifi"..¡¿o-.*_
cosas 1í'
2o orivarlos algunas veces de las
- r-- ' terior?
';
citas Para aie,¡arlos mas de las ilícitas Y
llevar
de Se designan con este nombre las morrifi,
así en nuestro Guerpo 1a mortificación caciones de la vista, del oído, dei olfato,
de1
Jesús. gusto y del rac¿o. A la morrificaclón
de los
seguirse en las úlcimos p*it"""j*
f".
86. ¿Qué normas debeu .sentidos penenecen
v ausrendades exteriores ccmo a¡rnos, vigi,
r¡rortificaci,ones exteriores? --'
I:as, cama dura, ciijcrbs y ctisciptinas,
'-o-
deban se'
En las mortificaciones exteriores
güise las siguientes normas: 88. ¿Cómo debemos rrorrificar Ia vista?
(l.--noln., r' z+' Debemos mortificar la rista:

-96-
4AS -._97 _
 1o reprimiendo el deseo de saber vanas no,
: le no fijándola con detención en personas
ticras o novedades del mundo;
de otro sexo;
2o no escuchando, en cuanto de nosotros
.20 apartándola de objetos peligrosos como dependa, conversaciones en que se falta
en re' a la
ser ciertas estaüuas, grabados' figuras caridad, la modestia y otra virrud;
v.istas, etc¡átera; 3e observando el silencio en las horas ores,
3e no asistiendo a teatros, cinematógrafos critas por la regla del instiruro o po. á
,1 ,",
r¡ otros espectáculos Provocatlvos; glamenüo particular.
4o llevando la vista baja al ir
por las car "Cerca con espinas tus oidos,
no escuches la.
lles; maia lengua" (10).,
aun tratao' La qortificación del oído y la de la lengua son
5q mortificando la curiosidad correlativas. La una es tan necesaria como -Ía
dose de cosas inocentes' Ula y otra abarcan casi todo a .r-p" á"-f.otr¿-
cética. En ia 2§ sección de esra p""i,
La licencia de la vista da orig-en 1 'o"th^:,^'-T: habla_del ejercicio de las vir¡udes ,"
¿á¿" "..
t
caídas' Mucho: :" Y'"'o'
rJ;"*:;;i;"*'¡t"' con el profeta: "Mi ojo
me ";i";;-;-h;
.llar de .ellas ( I l). "Si alguno no falta .* o".
exclamar
orecisados a Iabras, ésre es hombre perfecto" (12). "o
'h¿
robado mi alma" (8) '. t?i!l:l
La modestia de Ia vrsta es nece'saria 90.-¿Cómo debemos mortificar el olfato?
nara eiüfica¡ ai pro¡t'
U""* "ráa "lcogid," '
"#
ffi
tra
:;;h;; r; ."111;;
modestia sea conocl Í,**1l."Y:il. Debemos mortificar e1 olfato:
bres" (9). le no usando sin necesidad peCumes y
e-"encias olorosas:
el oído?
. 89.-¿Cómo debemos rnortificar 2e ilevando con pacie_ncra y aun ccn gus,
Debemos mortificar el
oído:
( 10) EC\. ti;, ¿é.
(11i del pr.ójimo, mansedunbre, etc.
(12) Y^i:.;1...
Jana. J. I
(8) Lanr., 3, 5J.
(e) Fi1. 4, 5.

-98 - -99_
 \
to'las'üolestias' inherentá
a cieffis bbras,'de 92. ¿Cómo debemos mortificar.el tacto?
;Ad;;;; vista Y-asistencia de enfer' Debemos mortificar ei tacüo:
Iuosiri.etc. le no üoc¿ndo sin necesidad a otras oer,
I'
,-i ,-,..' .
''Ci;-¿C¿r¡ro sonas, mayonnenüe si son de diferente
debemos mortificar el gusto? s&o;
2a no usando camas muelles
ni sofás (sal,
vo en caso de necesidad), y, en g"n".ul.
.ro
br:scando demasiado I"
3'q no estando en c:trna
;;";;--";;',.e¿"
más que el tieú. .
po necesano para el descanso corporal;
no.huyendo con demasiado afán
,40
ctemenqas de la esación, ni los
las ¡n,
dolores cor,
porales;
5o usando drscretamente penitencias
porales como cilicros, discrpilnas,
*'
cor.
;;.
La morcificación del tacto.es de particular
por los serios peiigros io,
l^olT.i"
dcd¡rea sr no se ie mortifica.
;;I""ril;
cr"-

iI. IVIORTIFICACION INTERIOR

93.--¿Eu qué consiste Ia mortificación

in_.
te¡ior?

La morrificación interior consiste en o(v

.bernar
según e[ dict¿men ¿" i";;;";?;
las poteucias iurerio¡es del al¡na.
(13) Im. dc Cr' 1' I' c' 19'
__ 101_
-
100
--
 poteaclae Debemos mortificar la imagnación negán,
g4.-¿CaáÁes son. la§ principales
dole no sólo las .epr"r"nta.i,cnes ilíciti
á¿ ¡-"r pelgrosas sino también ias vanas, frívolas
v
potencia"s del alma son cua' y
fas p'itncipales mundanas.
Al decir representaciones mundanas entende,
-áá
ff'Ti'i"-"r",;"i"lÁ,*,:**lT.Hl
-jJ
mos aquellas que se refieren a las
.p"Í"'*":lI: :"TL ;;"*as suPe'
mundo, como son espectáculos, U"lt".,
mrctas, etc. I:ts preciso además alejar
"""1¿"á""
_oar* .o.
las vanas ilu,
se llaman Páston€s'.-r-a^:rrii rrolúnt"d.
y'la que h"c"n p"id".
riores son el entendrr :,.::,":,y-qui.eras ,i",npá'i
inte'
pueoen traer funestasconsecuencias. "f
95 *¿És necesa¡ia !a mortificación . No es posible llevar una vida piadosa v recosi.
da si no se refrenan los des.ra.í,js de ;;r-;.?;
rior? La mayor parte de las distraccion"r-; ;;";;;;;;
províenen de una_ imaginación poco
áouii."á".---
l\orese, srn embargo, que la imaginación
no se
cesaria que la ""r""{ürJ;;d. puede gobernar con gobierno despótico
exreriores, sino con gobierno p.lil;, ^;
talr¿ como los
lida ni <iuradera sl ":**,:'-
"'-#{il r-La s¿r DU' 119idos
oeclrr.con arte y maña, apartando la aiención
de
, lqmrr'*'*:á{:1"';:m'
tos obJetos pelrgrosos, vanos e inútiles, y
en útiles y .provechosas
ocupando
,., de1 corazóo Pr9T'
cual.cosas "t
seguirá por fuer?a la fantasía.
p.n.rrni"nio,- rt

Procúrese .santificar la irnaginación represenrán,

f :; ##[*[.Jl t*"tt't-*"*"x dose con frecr¡encia esceaas á. h Hirb;i,

da o de ia vida de los Sanros.
a;;;

"ió-rl::umo la imagi- clebemos mortificar las pa-

debemos mortificar .97.-¿Cómo
siones?
nación?
Debemos mordficar las pasiones :tpartá.rv

(14) Mat' J' ls'

S.
_103_
-10L -
 to fuere posible; el amor propib es cl fin de toda
haciéndolas la vía purgativa. .Por 1o cuaf no entraremos aquí
¿ot rl¿" tot obietos pelig¡gsos v - en mayores detalles para evitar repeticiones in.
h dél bien'
;ffi
- ;; Práctica necesarias.
,o...o. aeuí,la palabra
f:;:":nJt:i":$: Trataremos en lo siguients del amor desorden¿.
arriba exPuesto de mov: do a.alguna_ persona y de su contrario, la antipa,
;;;;á;".
son de Por
L'"
-f 1:it?¿:::"f
sr.
'Jffi'".":l;
-*J;;;; á mat, de modo
tia; de los deseos excesivos; de la alesrí¿ vana v
tido, del temor. De los otros afectos y pasiónes se tra.
1o Áismo nara e.l biel tará en otros lugares de la Ascétici.
oue todo dePende del u
T""ll:""^"til"r" t "."..oer,
Eupenor
'"L-;;.¿;; repercuteÍ en la parte '

99. ¿Cómo debemos moderar el afecto

:#ft""T:r:J.*ir*.***$,,i**:
pasiones y en.su purrrrea\'rv¡¡ ------
las,
desordenado a alguna persona?

Debemos moderar el afecto desordenado

se- las mismas regtas'
a alguna persona:
pasiones?
98.-'¿Cuf"t 'ott 1"" piincipales ln apartando con suavidad y
energía el
iiones son: amor Y odio'
t,"-*--Ti,1",- pensamiento de ella, sobre todo en tÉmpo
Las principales Pasrones á,
alegria Y rtitY":,1'
d;; Y ,ePt'gtt'"tla' cie oración;

;;;*;Y á"táP"t"lón' valor Y t"e": " '-ti, 2o huyendo el trato innecesario con ella;
' demás p'"ti:i":^::
L* ,^oy fueate de todas las
rlebe ser ord¿nado; Io _ 3q pensando en la fragilidad de las cosas
sera
el amor. Nuestro ¿g16¡ humanas, y consagrando iodo ,ruot o ,f".to
si amamos a Dios sobre-t:lH,H1,""J1'o];L::"'
iimo y a nosotros *"T::"1;;;ro'.
a Dios, a quien debe¡nos amai sobre tocias
,ni*o. .. tt"- las cosas en el tiempo ¡, ea la eternidad.
El amor desordenadc
-i #;;;;io', ca "o' n'oP'iJ¿":rt:1 "#:
Aquí sobre todo vale la máxima: ..Resiste a Ios
falas. Por cual escn
1o
te daña más q":'-':' principios". Un afecto desordenado, ,oU." toao
de saber que eI arnor-propio en cuan' si es a persona Ce ctro sexto, puede llegar a sei
::;",,,,,"5o" (15)' cámÉatir v destruir'
un obstáculo ínsuperablc p"r" i" pe.fecáórr.
Im rlc Cr' t'rr*O
"t _r05_
_
' 1oo.-¿C6mo debemgs moderar Ia
autipa' ;rón ,en las obligaciones presenües y
repr.
tia contra alguna Persona? miendo las divagáciones de la imaginación.'

1e Debemos pensar que esa

persona es hi' "De ningún modo apruebo San Fran.
cisco de Sales- que quien tiene-drce
obligación u ocu.
ia de Dios, desiinada a participar con nos' pación determinada, se entretenga en desear una
ttro, d" la gloria del Paraíso' manera de vida poco conveniente a su obligación,
2o Debemos olvidarnos del mal
que.no§ ni ejercicios incompatibles con su condíción ac.
tual, porque esto dísipa. el cora¿ón y le debilit¿
ht-h"lá y disculpar sus intenciones si no para los ejcrcicios necesarios" (16).
¡od".ot d1sc,rlPa" sus obras'
'-. y 102.
3o Debemos hablar bien de esa persona ¿Cómo debemos moderar la alegría
d"'tk;;;tras de afecto y de consideración' vana y mundana?

' i0r.-,¿Cómo debemos moderar'el exce' Debemos mc-,derar 1a alegría vana y mun,
lrioo des"á d. Ias cosas terrenas? dana:

' Debemos moderar el excesívo deseo de las

1o pensando en la vanidad de los placeres
ciel mundo, los cuales no pueden dar verda,
cosas terrena§, aunque tistas sean
naturalmen'
dero contento al corazón;
te buenas:
que 2e considerando 1os perniciosos efectos Ce
1o pensando que es necio desear- cosas
dicha alegría, la cual disipa el corazón y hu
tan pio.rto pTñ que no pueden harca¡
I ce perder el gusto de las cosas divinas;
3o cultivando la santa tristeza, de la cual
2* pensando que es mejor estar,i"dif:t--": ha dicho Jesucristo: "Bienavenüurados los
' te resiecto de las cosas que no oo" 1 Tf. que lloran por.Jue seran consoladcs" (17).
ro alLnce que atbrmentarse constante.e rn,,
útilmente. (16) ViCa dev. P. 3, c. 3r.
y'aten'
, 39 ocupando riue§tro pensamiento { l7) S. Mat. 5, 5.

-106- _i07_
 5o cultivando la alegría espirituai, la cual
consiste en alegrarse de los bienes sobrena¡
turales.
Los bienes espirituales que poseemos en nues'
. l$ ¿C6mo debemos
modetar la triste- tra santa religión son innumerables y de infinito
za verna o inmoderada? valor. Nombraremos: la gracia santificante, las vir'
tudes teologales, la herencia del cielo, la Euca'
inmo-
Debemos moderar \a tristeza vana e ristía, la Comunión de 1os Santos, etc. La Sagrada
Escritura nos exho¡ta con frecuencia. a la alegría
derada: espiritual. "Servid a1 Señor con alegría" (19).
le pensando que la causa de nuest¡as.af1ic' "Hermanos, alegraos siempre en el Señor" (20)
'eonet'no son ánto los males en sí mismrcs "Dios ama al que da con alegría" (21).
"La tristeza mala turba el alma, la llena de ín,
;;;. el concepto que de ellos formamos'
:, -. ^,,- ,...'', ,'rr.,o"ft. nesar no disminuyen es^ quietud, ocasiona desordenados temores, causa dis,
gusto en la oración, perturba y debilita la cabeza,
deja el alma sin consejo, sin resolución, sin jui,
de la cio y sin'ránimo, abate 1as fuerzas, en una palabra,
es como un riguroso invierno que marChita .toda
ia hermosura de la tierra. . . " (22) . Como re¡ne,
dios contra l¿ tristeza mala indica San Francisco
gloria; de Sales en el lugar citado a más de la oración:
3e apartando pensamiento en cuanto
ei no dejar de hacer las ob¡as buenas ¿ pesar de la
repugnancia que se siénte, entonar cánticos espi'
,", pááut", de los áales de la vida que no rituales, emplearse en obras exteriores, y otros.
podemos evitar;
1T pY lo4.--¿Cómo debemcs moderar el temor?
4c acudiendo a la oración, .seg¡un
trlsrc ar'
labras del Apóstol Santiago: ¿"EsT
üi" ¿" vosotros? Ore" (18); ( 1e) Ps. 99.
Fit.4,4.
_ (?0)
( 21) IICor: 9, 7.
' (22) Vrda Dev. P. 41 c. 12.
( l8) §¡nt. !' 13'

108
_ 1C,l _
-

' Debemos moderar el temor:.
1o convenciéndonos de que la mayor par
te de los males que tenemo§, existen '¡á! en
r¡uestra imaginación que en 1a realidad;
2o confiando en Dios y exclamando con
el Apóstol: "Lo puedo todo en El, que me
conforra" (23).
3e considerando que por el,baucismo y la
confirmación somos soldados de Jesucristo,
y que es indigno de un soidadd de Jesucristo
ál i"¡rt." apártar por el temor y la pusila'
'nimiáad del cumplimiento del deber y de la
práctica de las virtudes.
El temor y la pusilanimidad hacen mucho mal
en la üda áspirituat. De ellos puede- entenderse
lo que San Frincisco de Sales escribe de la inquie'
*¿, ;a excepción del pecado no hay mayor mal
pari el alma que la inquietud, pues así como..las
i.ü.io.r". y disensiones internas cie una repúbli'
ca la destruyen enteramente y la dejan incapaz de
oponerse a los extranjeros, así fluestro. coazórt'
turbado e inquielo dentro de sí mjs'
"stála fuerza necesaria pirra conseñtar ias
"uando
mo, pierde
,iriuá". que había adquirido y los medios de re'
sistir a Ias tentaciones del enemigo, el cual hace
(23) Fil. 4, 13.
_110_
entooces los mayores esfuerzos para pescar a rio
¡evueito como suele decirse" (24).
l05-¿Cómo debemos mortificar el en-
tcndimiento?
Debemos mortificar el entendimiento com'
baciendo los defectos en que §ue1e caer. Los
principales son:
1o descuidoy holgazanería en adquirir los
conocimientos necesarios, sobre todo en mry
teria de religión;
2n curiosidad y ansias inmoderadas de sa'
ber;
3o dureza- o rigidez excesiva en los juicios;
4e ligereza en 1os juicios y particularmen'
te en sospechar y jtugar mal del prójimo-
Es claro que en'éstas como en todas las faltas
morales interviená ia voluntad. No obstante, por
cratarse de actcs intelectuales, poCemos conside'
¡arias como defectos de1 entendimiento.
¿Cómo debemos mortificar Ia vo-
106.
luntad?
í'¿4) L. c., c. 11 .
_ 111_
 eotooces los mayores estuerzo§- p'¡xa p€§c:Ir ir ¡¡!r
revuelto como suele decirse' (2a)'

l05---¿Cómo debemos mortificat eI e¡-

tendimiento?
2e confiando en Dios y exclamando con
Debemos mortificar el entendimiento iom,,
el Apóstol: "Lo puedo todo en El' que me
batiendo los defectos en que suele c¿er' I¡s
conforra" (23). principales son:
3q considerando que-por el bautismo y -l:
1o descuido y holgazanería en adquirir los
' confirmación somos soldados {e Jesucnsto'
conocimientos necesarios, sobre todo en ma/
'
y que es rndlgno de Iun soldadó de Jesucristo
teria de religión;
r
et deiarse apartar por el temor la p9s11
ái.".ptil,¿nto del deber v de la 2o curiosidad y ansiás inmoderadas de sa¡
I l;;;"d ber;
páctica de las virtudes' juicios;
hacen mucho. mal
3o dureza. o rigidez excesiva en los
El temor y la pusilanimidad
."-il"üd; J.pltiár"r. De eilos puededeentenderse 4' Egereza en los jücios ¿Particul¡rmerr
lo que San Frincisco de Sales escribe [a rnqute' y
te en slosp"cJrar iwgar mal del prójimo'
hav mavor mal
ñ¿l:a *."p.1* áel pecado no Es ciaro que en'éstas como eo todas las
faltas
oera e[ alma que la inquierud, pues así como. 'las 1a voluntad' No obstante' por
Ldi.ioir"t y diseusiones internas de una repubir'' -*^t". inteiienéintelecruales, podeuros conside'
dejan inczpaz de
;;i;-áñ..ien eateramente v la nuestro t-r".* á" t"rot
corazon' rarlas como defectos del entendimiento'
oDonerse. a los extranjeros, así -
cüando ' está turbado e inqüeto 'Jentro
dc s¡ ors'
mo. oierde la fuerza necesaria para conservar
tas 106= ¿Cómo debemos mortificar la vo-
de re' -luntad?
;;"il c"e habh adquirido v los medios
.:isti¡ a las tentaciones del enemigo' eI
cual hace

(?4) L. c., c. 11.

(2!) Fil. 4, 13.
111
TTI _
_110- -
 .pruebas interiores y
exteriores'que Dios-noé
án ía o permite qüe nos vengan- con ei fin
de despránder nuestro corazón de las cosas
criadas- y de nosotros mismos y purificarlo
de este modo.
Son del número de estas pruebas las ten'
üaciones, las arideces y otra§ aflicciones
y
2e indecisión y pesadez para óbrar 9]_!ien, penalidades.
segun las palabras del Espí$tu Santo:
"El pe'
. t Io* quiere Y no quiere" (25); 108.-¿De qué modo contribuyen las ten-
, '- 3c inconsüancia y debiüdad en cumplir
los taciones a purificar nuestro corazón,?
etc'
i buenos ProPosltos q'ue se han tomado' volun' Las tentaciones purifican nuestro. corazon:
:,,t¿á,Son .".iio. p"r" educar y robustecer la- un
ii la oración, tener sólidos principíos, segur 1o haciéndonos conocer las inciinaciones
"' ,tin áe vida, ser constante en 1as práctica§ peque'
tentacio' r,'iciosas que debemos combatir y corregir;
áa¡-4"- rl.tud, resistir con energía-.a las
nr.
-
fármación de la voluotad es de suma 2' obligándonos a combatir estas maias in'
t 'inpott"o.la
"i".-i, en Ia vida espiritual' ' ciinaciones mediante los actos contranos'
.

¿Cómo debemos resistir

a las ten'
' r III.-MORTIFIC'{CION PASM 109.
taciones i."" qo. produzcan estos saludables
' LO7-¿,En qué consiste la mortificación efectos?
pasiva?
Para que las tentaciones produzcan estos
. I L" mortific¿ción pasiva, llamada ordina' saludab!á ef.ectos debemos resistirlas:
.. riamente purgación pasiva, consiste en' la§ 1e con prontitud, esto és, des<ie el prime¡
lcomento;
. (25) Prov. 13, 4.

_l'r2 _ l-13
-
-
 Aridez o sequedacl espiritual es la
falta
senslble
más o menos completa de devoción
i" y demás ejercicios de piedad'
"" "*.i¿" gu§t9
valernos La devoción sensible consiste en cierto
110--.,¿De qué mt zdios debemos que se siente en la oración y otros
,o
e1er'
pá" t nát las. tentaciones? "on.rrJ"
.i.i'áll.piinr"les La oración puede ser buena aun'
;;irÉ i" devoción sensibie- La devoción que
debemos-velar y consrste
- -- vencer las ¡entasiones
'y Pa¡a ' 'Velad I""." á.U" falt¿r se llama substancial
ofaf, según tas pui'rbras del Señor: iT^i" i"r, de hacer lo que es del agra'
.
y orad para no caer en la tenación
' (26) ' ' do del Señor.
"'oi'"tna

'La vieilancia consiete en pertrecharn* gue'1 :1T. frecuen-

;;;;l;" asaltos clel enemigo' no
sea nos Lll--¿Cuáles son las causas más
i;#e;;;;";-á;;' En la meditación' los ex¿¡ue'
tes de la aridez esPiritual?
prevenirnos -por
.á"ciencia, etc'' debemos la aridez e-s'
.t" ""T'¿"
;"¿i" de l¿ oración y de firmes Proposrtos' Las causas mas frectlentes de
: A la vigilancia PertEenece también la fuga
de
pirituatr son:
la ocasrón Próxima dé Pecar' -- 1- nos
t- principal Para vencer-Ios 1+ alguna indisposición corporal .gue
' l* oo.iáo es ei arma devoción;
hace inÉábiles para orar con
,,"q.,", .d"
""".r.: - "1:*j5:§d"1;ffi.1 ,:r.*; de
ción es buena, se recol
cruz; invoc¿¡ 1:: ff' 2e cietto estado de inquietud' efecto
#il';;i á" 1' '""t' de María: recita¡ el ure' alguna PreocuPación;
ffi"nolü;s-J"sús v i;;;;"t t" especial del
do. el Padreno"'oo' "i T"'th'con otros
-:::l 3a la sustracción de ia gracia
lJ'#.#il;i"t-t" o'""t"' ocupándola Señor que producía la devociórL
senslble'
pensaoientos' de.la' ari'
Tambián la tibieza puede ser causa
d"; t=,;.:tjru,"t Ti*::
:ü"*Jrem¿dto esta
3:
eridez, cuYo
antes.
'(26J S. Mat' 26, 41'
_ Ll.J
lL4 --
 3a Debemos acat¿r humildement"
q y.*
r""rlá"i*s"n"t confesando nuestra indig
y es'
Já"1¿" ser consolados Por el Señor'
Ia devocron'
cora¡on: perar con paciencia la vuelta de
I¡Ls arideces purifican nuestro
servir
:10 haciéndonos'ver nuestra miseria; 115.-.¿Qué otras pruebas pueden
las cosas p""" p,rriii.." nuestro corazó¡?
i' áoP.g"t'do el corazón de son
luique éstas sean buenas' como Pueden servir para este fin
todas las de'
"rá¿"", en- Ia oracron'
,td,rd"b1"r"nte los consuelos o:, ,nr!*"fiá"ae, áe ia vida' corporal?^y r'¿§ f"
;il;ffiÁs buscar, según gráfica,lt-?"-
al Dios .de la consolaoon Y tr¿.áiá* como
r',iritüales. son las entermedaoes'
-u*"es
o de seres queridos' las
il;;i;t*a, ¿"
,ro.la aontolación de Dios' irumillaciones, ios escrúpulos'
etc'

' . ll4.-¿Cómo debemos conducirnos en la

116. ¿De qué modo purifican estas Pe'
aridez esPiritüal? nalidades nuestro cotaz6¡?

1: No debemos cercenar en
1o más mi,. Estas y otras penalidades purifical "Y".:'
**,
nos
ios ejercicios esoirituales' aunque fio cotazí¡ ya abatiendo nuestra soberbla'
N-" 1as cosas de es'
á;"';;ho P"""ut^'"' en ellos' imposlble
:'li: ,l ¿*rá""¿t el corazón denuestra
,""i., f, á*ción mental' si resulta í" *áó, ya derribando exceslva
vocales' lec' cielicadeza Y amor ProPio'
podrá sustiturrse por oiaciones
a¡ra meditada, etc' en
t"iY 117.-¿Cirtc' debc¡rcs cond'ircirnos
el oPorarno
2o Debemos buscar
dal nedio dc estas tribulaciones para que Pro'
a las Jolencras físicas
o morales que :r-1'
dtjgjcaf- este resultado?
;# ü;: Ji
sosiciones corPoraJa
il:t,%'HLill F,Ji:X Debemos vet y adotar en e§tos sucaso§

ios negocios, etc'

*fr7 -
116.--
-
 impedimeotos, se dedica .oo *ayo. facilidád=!
la.matro'de Dios, el cual nos Prueba para al ejercicio dé las virtudes cristianas'
nue§tro bien. Ya se ha dicho que la vía iluminativa se con'
"En el horno se prueban las vasijas- de tierra; y funde en la práctict con el estado de proficietrtes'
er, la tentación de las tribulaciones los hombres También án la vía purgativa se practican las
justos" (27. En, consecuencia, debemos reprlmlr vircudes, pero con el fin principal de domar los
i" .*."rit, tristeza que quiere apoderarse de nues' vicios o malas pasiones. En la vía iluminativa se
tro espíritu, y buscar nuestro consuelo en la ora'' practican las mismas virtudes en grado más per'
ción
- y práctica de la Piedad. i""to y .on fines más elevados.
;;J Jt.*p;losos dáben obedecer a su confesor El secreto de adelantar en las virtudes no con'
y combatiq .segúh las indicaciones del mismo sus siste tanto en multiplicar las obras de virtud o de
vanos temores Y escrúPulos. piedad cuanto en hacerlas con más espíritu, .es
á".i., .on más pura intención y mayor perfeccién'
De este modo ilegará el alma a practicar las vir'
tudes con prontitud, facilidad y consancia, .en - 1o
cuel consisie el fin y objeto propio de ia vía ilü-
minativa.
SECCION SEGTINDA
119. ¿Qué ejercicio resume admirable-
mente el ejercicio de todas las virtudes?
. VIA ILUMINATTVA
La imitación de Jesucristo, nuestro Señor'
118-¿Qué es vía iluminativa? ouien ha dicho de sí mismo: "Yo soy el ca'
,oino, la verdad y la vida" (28); "Os h?
Vía iluminativa es la segunda vía de la dado ejemplo" (29); "Aprenied dé nlí"
de
vida espiritual en la cuai ei alma, gozando (30).
mavore iuces en las cosas diünas y removv
J"r * i",*q"e no del todo) los principales (28\ S. Juan 14, 6.
(zei Ib. 13, 15.
( 30) S. Mat 11, 29.
(2?) Ecli. 27, 6.
_119_
_118-
,. 'L
' ' lrt que me sígué a mí' no- anda en ünie' v no se inspiran en ótios motivos que humanos'
y plac:
ior"rnl.*."' filósofos pagancis ensalzabanvtrtuoes'
u".;' «iii. ;;prtr¡i". son éstasvida
de cristo con las
y costumbres ticaban algunas de estas virtudes' Estas
;;i".;; exhorta a imitar su iluminados v li' aunque bienas en el orden de la naturaleza'
no
' ;i:;";;;'1"-. *'¿"¿"t"mente "Sea' pues' tienÉn valor ni mérito para la vida eterna'
;;;;l;á" cegueded del corazón'
en la vida de Je'
meditar Las virtudes sobrenaturales,. que suponen ei es'
,i,i"".rl"'p"".rp"]?;¿io tado de gracia, se fundan en las luces de ia fe y
sucristo" (32).
p"l 9":i:' se inspiráa en mo¡ivos sobrenaturales conocidos
La imitación de Jesucristo constituye'
d"t por la fe. Si faltan en absoluta estos motivos so'
b *,:T f";;o v É i"¿or" pec'liar "-'i::':l:.
no se ase' Lrenaturales el acto deja de ser sobrenatural
y me'
crístiano el
;";-Ñ; ". t'"'d'dt'oprimera que
es Ia s ritorio para la vida eterna. Dicen muchos teólo'
;;;"';j;;sto' La bautismo'semejanza
Péro ásta "o'o':' go. q,-r., mientras el alma está en gracia ds Dios'
I""i[má. en el santo nuestra t?"111: io filta.¿ Ia dirección sobrenatural, a 1o menos
ta. Es necesario reproduéir en habitual, de sus buenas obras; pero es bueno acen'
¡"t¿" que se hüolos
[ii;,,ülJ."tti,to'es ooligación.
hombre
redl' tuarla y avivarla por medio de la ¡ecta intención'
.el Hiio de Dios, de todos
'IiáoJ-lrtiot Las virtudes sobrenaturales se llaman , también
uus dívinos. ejemplos'
infus"s, Porque se infunden en e1 santo bautismo
i*r*Lá* con ta gracia sandficante' No obstan'
120. ¿Qué es virtud? i" .ti, i"f".i¿r, .o-b'""'t"t"l, sóto con el cons'
de ia
en
,r""-"¡*cl* ." udqt'i"t" la facilidad decidida
su
-prác'
Virrud es una disposñión constan@ i;."lri gracia da a la voluntad unasobrenatural'in'
voluntad a hacer eI bien' .ii"r"l*" . ¿rrección hacia el finprontitud en la'
;;;;'1" "o*,rrri"" la facilidad o Asi como.se
121--:C6mo se dividen las virtudes? y so' ...i¿". f" cual es fruto del ejercicio'
f*'tiá"J"t se dividen en naturales ,pr",rá" un idicma hablándolo, un arte -eiercltan.'
dlto, d" la misme manera se adquiere l"
plgl:-
' br.enaturahs'
tucl v facilidaci a hacer ei bien por la
repetlclorr
que taurbién pueden lla'
Las virtudes naturales 1a razón d. lás actos. De ahi se deduce [a inrprescrndrote
#::;;;; r"'J*'"n ias luces de
'" ;;;;;á ¡; aprovechar con avidez 1as ocasiones
para. praciicar las '¿irtudes'
(31) S. Iuan 14' 6'-
( 31) Im. de Cr.' l. I, c' r' '

-"-izl
.r
abilidad a trav¿s de los siglos y otros de que trata
Las'virtudes sobrenati¡rales o infusas se la apologética, sin embargo, nuestra fe no se fun'
da en ellós sino únicamente en la autoridad o vera'
dividen en teologales Y morales. cidad de Dios, quien no pueds engañarse a sí
Las virtudes teologales son tres: fe, espetanza mismo ni engañarnos a nosotros. En este obsequio
v caridad. Se llaman teologales porque se refieren ' que hacemos a Dios, al someter nuestra inteligen'
irmediatamente a Dios. Las virrudes morales .
son ci" , ru palabra infalible, consiste el mérito de la
-cuatro
muchas, pero se pueden reducir a Prloc1' fe.
jus-
."rdir,.l"t, t"b"t' prudencia'
""r""-ii"Ár¿".
'ú;;' l""rrLr y ter,rplanza' ' Las virtudes morales 123. la fe?
¿Es necesaria
J"*i"."" "ti po.qr" tienen por finconducta
reguiar del
mo'
."á" -¿, "gt"¿"bi" a Dios nuestra La fe es tan necesaria que §in elia es im'
ral o cosrumbres' posible salvarse como consta por las palabras
áei Señor: "El que no creyere sera conde'
I._LAS VIRTUDES TEOLOGALES nado" (33); y por las del Apóstol: "Sin fe
es imposible agradar a Dios" (34).
. Lafe
124. ¿Qué cualidades debe tener Ia fe?
122.-¿Quié es la Íe?
La fe'debe ser:
La fe es una virtud sobrenatural por la 1o senciila, apoyándose en la sola autori'
cree'
cual. &poyados en la autoridiid de Dios' dad divina, sin busca¡ razones humanas, ni
**l "i"ío El se ha dignado reYel-alno.s y queier escudriñar los mistenos;
nos Propone a cteer por medio de ia
lglesn'
indinan
. 2n firme, excluyendo toda vacilación o du'
Arurque hay muchos motivos que 1T da involuntaria;
;;;;] u;táos motivos de credibilid¿d cie co'
tales
"ilñ'Jffi;[ ut-ptol"ti"t, Ia const¿ncia los -.:-
cte
mártircs. loJ Santoa, la rápida Propagaclonsu ss' (33) §an Marc. i6, 1ó.
-r¿ ( 34) Hebr. 1 1, 6.
Iglesie por medioe tan desproporclonaclos'
_Lzl
-

3q fuerte y constante'comb la dL los már''
tires.
125.-,¿Qué se entiende por espíritu de
Íe?
Por espíritu de fe se entiende una fe viva
y práctica que influye en todos los actos de
la vida según las palabras del Espíritu Santo:
"Mi justo vive de la fe" (35).
" 81. crisfiano qul posee espíritu de fe se acorda'
rl:en: todos los momentos de la vida de las máxi'
qhs- del Evangelio y ajustará a ellas su conducta.
.,,'La fe puede compararse a. un grano de trigo.
Arroiado err la arena no produciá fruto:alguno.
Arrojado en tier¡a férti1 producirá fruto ábundan'
te. La fe en un alma disipada poco o níngún fru'
is-rproducirá; en un ahna bien dispüesta e' imbuída
en las máximas dei Evangelio y lcs ejeruplos de
Jesucristo, dará fruto abundante.
126. ¿Es necesario tener espíritu de fe
para llegar a Ia perfección?
Así como la fe es necesaria para salvarse"
del mismo modo, para liegar a la perfección,
r,e.
es necesario tener espíritu de .
(35) Rom. l, 17.
_i24_
,Esto se infiere de 1as palabras..del Señor: "Mi
justo vive de la fe", cuyo significado. es: "Las ver,
dades de la fe constituyen el alimento esp_iritual
del justo". No será justo, esto es, perfecto el que
se priva de este alimento. En otras palabras,' no
llegará a la perfecta unión con Dios aquel cuyo
espíritu no está imbuído todo en las saludables
máximas de la fe.
127. ¿C6mo se manifiesta el espíritu de
fe en Ia práctica?
El cristiano que posee espíritu de fe, pen,
sará con frecuencia en la presencia de Dios;
eh el'templo estará con sumo respeto; verá
en los superiores los legítimos representan,
tes de Dios, en sus semejantes, a los hijos
de Dios y hermanos de Jesucristo, en los
acontecimientos de la vida, agradables o des,
agradables, la^s disposiciones de la divina Pro,
videncia, etc. En una palabra, la fe ilumina,
á todos sus pasos y santificaá toda su exis,
tencia.
. La esperanza
128-¿Qué es la esperrttza?
La uperznza es una viraid sobreaaturat
_125 _
 da ia fortaleza indispensable en las pruebas,
por cual, apoyados en la bondad y'fide:
ia''
tentaciones y combates de la vida espintual.
ld"d d" Dios; esperquios la vida. eterna y
También es necesaria para pedir a Dios en
los medios necesariós para alcanzarla'
debida forma las gracias que se requieren
El objeto principal de nuestra esperanza es,la para llegar a la perfección.
ti¿" 'el objeto secundario Io forman. ios
"án"t
auxiiios necesarios u oportunos para conseguirla' Los siguientes textos indican estos preciosos
como el perdón dé los pecados, las gracias "ttY1t-1 efectos de la esperanza. "Corri por e1 c¿mioo de
objeto tus mandamientos cuando ensanchaste mi cor¿-
También los bienes temporales pueden ser
para con' aón" (36). "A.legres por 1a esperanza" (37). En
de la esperanra en cuanto son necesarios
seguir los bienes eternos. su epístola a los Heb¡:eos llama el Apóstol la es,
El -otirro formal o fundamento de nuesÚa en
es' peranza de los bienes eternos "un poderosisímo
la bondad de Dios su fidelidad
v consuelo y una áncc-,ra segura y firme" (38). "Por
'";;;;
i". 1lro.".". que nos ha hecho' tanto os aseguro que todas cuanr-as cosas pidiereis
tt11-:Í en la oración, tened fe de conseguírlas, y se os
P'o, .u"nco Dios nos ha prom-etido.li
concederán" (39).
na oor los merecimientos de Jesucristo' nuestf<r
5aá". Prr"¿" decirse también que nuestra esPTl'
i" ."-f""¿" en los merecimientts infinitos de Cris' 130. ¿Cuándo debemos p"..tic"t ds rrn
to, nuestro Redentor. modo especial Ia esperanza?
a ta
i,a firme confian¿a en Dios ho se oPone ya que
."tr-rá"Út" desconfian¿a de nosotros mismos' Debemos practicar de un modo especiai ia
tam'
i"-.o".".".i¿" de ios bienes eternos dependepropra esperanza:
bién, según voluntad de Dios, de nuestra
cooperación.
1' en la bración, ya que 1a confianza de
sü oído es una condición indispensable de
lle-
129.-¿Es necesaria Ia esperanza para la buena oración;
gar a la Perfección?
(36) Ps. 118.
necesana (l?)
La esperanza es absoirrtamenE ( 38I
R.om. 12,
Iicbr. 6,
12.
18,19.
p.t" ff.í* " lu p.rf"toón' pol'clue ella nos ( 39) S. Nlarc. 1i, 2'1.

_126 -t27 -
-
 y Jesucristo ¡nismo ha dicho que ella consrituve
ei máximo y primer mandamiáto (*i'*""r'
3e en general, en todas las pruebas y tri-
l¡ulacio¡ies de la vida. 132. ¿Por qué debemos amar a Dios?
. "No
perdáis vuestra confianza pues tiene grarr Debemos amar a Dios:
recompensa" (40).
.le porque EI nos ha dado este rnanda.
mienüo;
La caridad
2e por ser sumo bien;
131. ¿Qué es la caridad? 3e por ser nuestro mayor bienhechor.

l:a, caridad es una vircúd sobrenatural--con
. tu
la cual amamos a Dios por sí mismo y sobre
todas 1as cosas y al prójimo comó a nosotros
mismos y por amor de Dios.
El objeto principal de ia caridad . es Díos; -ob'
jeto se"undrtio el prójimo. El motivo formal o fun-
. damento de 1a caridad es Dios mismo, ya que ama'
mos a l)ios por sí mismo y ai prójimo por Dios'
La caridaá es la reina de todas las virtudes' EI --
Apóitol la llama "la mayor de 1as virtudcs teolo'
caies" (41) y "vínculo de perfección" (42)-'¡ zn'
Jeña que los dones más extraordinarios y las obras
más heroicae no valen nada si falta ia carida<l (4r);
l e ' Dios pide nuestro amor. ..Hijo Jo.
d"."
.co¡azón" (45). El precepro d" ,mr.l" pru"b"
la tntrnrta ternura de Dios para con nosotros.
, 2c. Dios es el Ser perfettísimo. Todo cuanto
nay de b.ueno, hermoso y amable en las criaturas,
no es más que un débil rayo de la infinira
. bo;;
dad, hermosura y amabilidaá de Dios.
lt "Amemos a Dios porque El nos ha amado
primero" (46) . Dios se llarna y es nuestro padre.
El nos ha dado la vida. El ¡" lr".-".""a"^;*,"
ld tierra que nos ha de senir d"
-o."d;;";;;;;
algunos años. El quiere darnos .i.i;;ñ;;i
",
mismo quiere ser "nuestra recompensa sobre ma.
neia gran<ie" (47). Para,
-"...".,io, "l .i"to, ¡r...

( 40) Hebr. . 10, 35. (44) S. Mat. 12, 17 .

(4r) I Cor. 13, 13. (45) Frov.2-r,26.
(42\ Col 3, 14. (46) I Juan a, 19.
(43) I Cor. I l, l'3. (47) Gen. 15, .1.

_128 _ 5,AS _129_

dido por el pecado, murió el,Hijb,d",D-]"t :: (a l:
Ios principales medios para adqürir la. ca,
cri.u.'"Me amó y se entregí a si mlsmo-
ra
ridad son:
iuett"¡ por mi" (48)' Jesucrist"' """:"? 1,"^t1i- le desearia ardientemente y pedirla con
tor- instiruvó los sacramentos' en' Partlcual .'" ,t" fervor;
el vraJe na'
,io" f"o.i.ti", para fortalecernos enDios'
D"b"*o* artrar a porque 2o considerar con frecuencia ios motivos
"f,l. "i"*i¿"d. Primero Y nos-ha colmado de
il;.;;;Jo del amor divino, en parricular, ia pasión de
beneficios. Jesucristo y la institución de 1a Eucaristía;
3e hacer frecuentes actos del amor de
83.-¿Cómo debemos amar a Dios? Dios.

to'las las co- Los actos del amor de Dios pueden dividirse en
Debemos amar a Dios'sobre cinco clase o gn¡pos, que son: amor ile compla-
,J ñ;-;. JÁP'""d" de las Palabq' d" cencia_ (complaciéndose en las divinas perfeccio.
i¿r;;;,;A#ás al señor tu Dios'de to' nes, alegráadose del amor que tantas almas le tie"
á;;;; v *i to¿' üu alma Y con rcdas nen) ; amor de preferencia (manifestando a Dios
que le amamos sobre todas las cosas y que pre.
tus fuerzas" (49) ' fe¡imos perderlo todo aotes que perderlá poi el
Nuestro amor a Dios debe ser
surno en la apr¡^- pecado); amor de benevolencia -(deseando que
a perderlo
¿J¿"t , lo será si estamos dispuestos o",P-i?:
todos amen o glorifiquen a Dios) ; amo. de .onti_
;d:;,¿.;;ferder la gta..ia venamistad
la aPreclaclon
ción, o- sea, <iolor perfecto de los pecados; amor
iil;;;; iu"d" '"'-"''.,o de conformiá"d (deseando y pidiencio que se haga
;;;ü,,o' ro,",
-:: -tlTT'"0;',LJ',,iTH:'
"' en todo la volunrad de Dios y declarándose con,
forme con sus disposiciones).
cuales no siemPre estan

-principales medios EI arnor del prójimo

t!4.-¿Cuáles son los
para adqui"i" la carida<i? . 135.-¿Quién es nuestro prójimo?
'Iodos los hombres son nuestros prójimos.
( 48) Gal.2,20. ' también auesrros enemigos.
( 4e) S. Luc. i0' 27'

130-_ 131_
-
 a
todos los 3' porque todos-formamos un cuerpo mís,
' un rigor' son nuestros prójimos ^seres
de lá etérna bien¿venturanza' tico, cuya cabeza es Jesucristo.
"J;"ñ;";;;es la "Amarás a tu prójimo como a ti mis,
*xf"'::"1q"'Hf;' mo" (50). "Este es cl mandamiento mío que os
''ti#;xffi améis los unos a los otros como yo os he aoa.
do" (5 1). "En esto conocerán todos que sois mis
f.:,:P ;",s* i:[1**ru,: ] ;'.,:::i
do al decir: "Creo en,la _,,_..,, ca¡idad para con discipulos si tuviereis caridad los unos con 1os .
,,.,o";i otros" (52).
El motivo formal oe ,.óU*" nor.Dios,
2e "Este mandamiento tenemos de Dibs .que
,quien ama a Dios, ame también a su herma.
:5:'T"'.':'rilff f:tf,Tj1#.'T'.n".:";
;"Irfi no" (5 3 ). Todos fo¡mamos la gran familia de los
J::"*Y,r?l"l*"-, o"" ," i,r.,d" .',
i, r"ngr" dg cieio'
. a Dios en el etc;.!}il;i n'i i"ndrá, pot .í fujos de Dios en la tierra, hijos de Dios por la
no
''-. otr¿s. razorieses soD^--- .creación, en sentido mucho más perfecto por la
'- en ia glorra' regeneración en el santo bautismo. Todos como
sóio, ménto
fujos somos üamados a poseer la . herencia del cie'
"136*¿Por qué debemos amar a nuestro Jo; somos, por decirlo así compañeros de viaje. San
Pablo indica estas razones cuando dice: "Uno es
próiimo? el Señor, una la fe, uno el bautGmo, uno el Díos
y Padre de todos" (5 a). "Lldmados a una misma
a nuestro Prójimo: esperanza de vuestra vocación" (55).
Debemos a!oa( 3e "Formamos en Cnsto un solo cuerpo-' (5ó).
, le porqr.re Dios nos
ha dado este manda' "Un solo cuerpo formamos muchos, todos ios que
participamos del mismo pan" (57). Por eso nos
miento;
""1,'ioro.," *d": 'i,lilil;
!: :r'#:'fi t:]} (50)
(s1)
S. Mat. 22, 39.
S. Jüan 15, 12.
(52) Ib. 13,35.
i?lffi :3"¿!:"{-Jff :,"ffi:'""-;*;:";
'
{5-1)
( s4)
I Juan 4, ?1.
El. 1, 5.6.
ró'Ñesiro P (ss) Ib.4,4.
il1H":i1,":^TJ:'::fffi (5ó)
.15? )
Rom. 12,5.
I. Cor. 10, 17.
lmo;
l -)J _
 dos hemos de comparacer ante el 'tribunal de-
Cristo" (60). "El uno lleve la carga del otro,
:::-H'*,:'"ff T:.onT,,:ioT!","n"ñ""::',"uil;n1"- y así cumpliréis la ley de Cnsto" (61). "Amad í'
vuestros enemigos, haced bien a los que os abo-
cemos (58).
rreceo y orad por los que os persiguen y calum-
debemos amar a nue§tro nian" (62). "Amaos unos a otros con amor fra-
L37
ternal, anticipándoos unos a otro§ con muestras
-¿C6mo
prójimo? de honor y deferencia" (63). "Hijitos mios, no
debe radicar en amemos solamente de palabra y con la lengua sino
Nuestro amor al prójimo con cbras y de veras" (64). "Si alguno posee ios
extenor'
to iti""io" y manifestarse en Io bienes de este mundo, y, viendo a su hermano en
prójímo ciene como base necesidad, no se compadece de é1, ¿cómo es po.
La caridad pa'ra con el €o sible que resida en é1 la ca¡idad de Dios?" (65).
h::#;;il;t"nc'a i,,t''"io"' Y se muestra
',::;;; 1f" pa*.," ",".T_:,:ffi::::j::,':i San Pablo compendia todog estos caracteies de la
caridad con las palabras: "La caridad es paciente,
de caflda(i
"'¡"*¡i':1;;tt
. infinitr,,o fos es benigna. La'ca¡idad no tiene envidia,.no obra
;lüffi
y
--
naturale'
HT'.:"Y".;X'JJ;
tll;;;í-.áot"rr" mal, no se engríe; no es ambiciosa, no busca sus
ies ,q"" de sus *¡a, propios intereses, no se irrita, no piensa mal; no
bien; alegrarse dt tT 1';I;""irUj.'..1 faltas y de' se regocija de lo que está mal, pero sí se complace
les; excusar "l "u"":o-X
í;;;. oo.io,e
qt",""" y p"r. en Ia verdad (en 1o que es recto y justo); a fodo
fectosl sufrir las molestras :;:::;'-, íor^r.t., se acomoda, todo 1o creé, todo lo espera, lo so.
ias ofensasi no caustrle molesda alguna;
donar porta todo" (6ó).
iffi u,"^ i ..¿*' ":-'::""'"i?H".#.:ff'[.
Evitense las faltas contra la c¿¡idad: los juicics
oáticos; edificar e todos etc-
fiffi IoJt; la salvacrón de 1as almas'
t"c5.rláZt*áe""i"tlos siguientes textos'de
1a Sagra'
cómo Cebemos Prac' 60) R.om. 7.
rl¡ Escritura que oos explican
( 1.
(ói) Gal. 6, ?.
:¿r:"il;d;; "Nc jLguérs para'que "? '"il' (ó?) S. M:t. 5, 4.i.
1"g"t tú a ru herma'
iir*"á".;-lsrt. "¿Por q"Z trj (63 ) Rom. i2, 10.
a tu hermanor to- ( 64) L Jrran 3,.18.
'":T;"¿"P"t'ilé dásprecias (65) I Juan 3, 17.
t 66) I. Cor. 13,4-7.

E]-¡. Mltr i:',i' _ 135 _

--
iemetarios, las mtirmuraéiones' las críticas,- las ca'
reo'
l rmnirs, lL envidias, los celos, los odios' 1os
cores, lo's insultos, las burlas, etc'
- zón humana, sin tener en cuenta el fin sobrena,
II._LAS VIRTUDES MOP"AIES
136*-¿Cuáles son las principales virtu-
des morales?
Las principales virardes morales son esta's
-cuatroi prodenciq justicia, fo*aleza, tem'
planza.
Estas- virtr¡des se llaman cardi¡ales porque. :o'
qulclos
bre' elias giran como sobre'otro§ tantos.
i;; i;;r",7ái¿i"""1 todas las otras virrudes; .ellas
*i, po, consiguiente, el fundamento de toda la
vida moral crisriana.
Las virtudes ca¡dinales
139. ¿Qué es Prudencia?
Prudencia es 1a viraid que ordena tódas
las acciónes al debicio fin, y para ello busca
los medios mas con'¿enientes a fin de que Ia
cbra salga bien he&a y agradable a Dios'
habla'
La prudencia sobrenatural de que aquí
-- i36
-
!.os, se opone a fa prudencia de la carne, la
cuai
sirve.al amor propio y a las pasione., y * J;r.iT
gue de la prudencia natural la cual di.ige n,Á- -
tras acciones según las iuces y normas dle la .a.
tural que Dios nos ha dado. Son cont¡a¡ias a L
prudencia, por defeco, la precipitación, l" ;omrr.
sideración, la inconst¡ncia, 1a desidia; etc.
A la prudencia pertenecen conro virrudes inte,
grales'(pa:tes que la integran) la circunspección
que pesa bien las circunstancias de los casos par_
ticulares, la precarrción que previene los peliiros
y tropiezos y la docilidad gue busca luz y io.üio
en otros para suplir la propia insuficiencia.
I.a prudencia es .llamada por 1os Santos padres
guía de ias virtudes. Ella debe concurrir al ejer,
cicio de todas las virtudes.
1aO. ¿Qué es justicia?
Justicia es 1a virtud po¡ la que damos a
cada uno 1o que le corresponde.
La jr:5¡j6i¿ se ciivicl¿ en conmurarivq distribu-
tila y legal. La primera establece la ciebida igr,a.l.
ciaC entre ias personas, sean físicas o mor*l"rl
co.
mo sucede en los contr¿tos; la segunda repa¡te
cargos y cargas, premios y casiigos según lc mere;
cido;la tercera consist" q,r" lr" leles sean jus.
,r_. , ." curnplan. "r,
_ 137 -_

Se comprende que para. que- sea virtud sobre-
n"tuol, lot fin"t y mátivos deben ser sobrenatu'
rales. . desmayar por los fr¿casos o reveses sino obr¿r
A la . iusticia pertenecen como virtudes anexas
-""lrgrá",
i" la fnitencia, la piedad filial' la obe-
y importancia de la fortalez¿ se ve también I'cr las
diencii lal veracida4 o sinceridad, la gratitud
otfas-
La justiciá es necesaria para que haya paz y.or'
den en la sociedad humana. Jesucristo recomlen'
da esta virtud cuando dice: "Dad a Dios 1o que
es
de- Dios, y al Césa¡ 1o que es del eésar"
(67) '
' 14f
¿Qiré es fortaleza?
Fortaleza es la virtud qug nos hace aninro'
sos para no temer ningún peligro, *1".
*:'
ma muerte, cuando se trata del servlclo de
Dios.
Enseña Santo Tomás que el oficio de esta vir'
tud es -doble según 1os caso§: sufrir y acometer;
pero dice el Sant-o que lo primero es lo.principal'
§on vim.rdee ,rrá*". la magnanimidad, la pa-
ciencia, 1a perseverancia y otras..
La import:rncie de esta vírtud se conoce por
sus <iue son, entre otros: pisotear ei respeto
".toi;
humano .ü"¿o se opone ai curnplimiento del de'
Ler; desprecia., to mis'!'o supuesüo' los temo'
"]i
res cle enfermedades, pobreza, ¿tc'; acometer em'
(67) S. Mat. 1',! 11
I JÓ
presas difíciles por la glona de l),os ctP;rxx) se
sabe ser del agrado del Señor; luchar der¡ctJrda'
mente contra los enemigos de la buena cauia; no
nuerros ánimos; exponer la vida por la czrsa de
Dios, si fuere mene ster, hasta el martirio- ' ' L¿
freiuentes recomendaciones de la Sagrada Escri:
tura. "Obrad varonilmente y sed fuertes- (ó8)'
"¿Quién nos separará del amor de Cris.-l ¿La
tribulación, la angustia, el hambre, la desnuo=? " '
Estoy cierto que ni la muerte ni la vid¿- - ' ni
criatura alguna nos podrá apartar del e=or de
Dios que se funda en Jesucristo, Seño: nues'
t¡o" (69).
La fortaleza supone Ia co¡fianze en Dl¡s' "Lo
puedo todo
"n
aquel que me conforta" (7ir- Sir'
.r" para sostener nuestro ánimo el ejemplo <le los
Sanios. "Lo que pudieron ástos y ástas, ¿rur qué
no lo podría yo también?" (71 ) .
142. ¿Qué es temPlanza?
Templanza es la virtud que modela y re'
frena en nosotros los deseos 'lesordena,ri'x de
(68) I. Cor. 16, 13:
(6e)
(70)
Rom.8,35'39.
Fil. 4, 13.
(.7t) San Aguscin, C,onfess-
-i39-
 de doctrinas, preceptos y ritos de afuuna sociedad
religiosa. Así hablamos de la religión católica y.
q.$,qfi{I*:}üiilL{'it",tu t"*tién de religiones falsas. En este lugar se to'
ma religión en sentido estricto y como virtud'.
hdcdad en el comer Y
en La ráigión es la más noble entre lab virtudes
de ta templanza son la mansedum- morales por tazón de la nobleza de su objeto que
Virtudes anexas
j"
tü, l.¿*tta Y la humildad' son los ictos del culto divino. Se distingue de las
virtudes teologales, cuyo objeto inmediato es Dios
(creemos en Dios, esperamos en Dios' amamo§
;?:il,'ü:i:f :xf*-.r"n*.#".'.x a Oios¡ , en tanto que el objeto inmediáto de la
reiigión son los actos del culto.

ü,f*-[iffiit'ffi3itr;nl
ftrlof su constante Pra( q"".'.1-11^ll1:tn'
144. ¿Es necesariala religión?
Sí, la re[gión es necesaria porque es url
Dios Una vez mas. 5 Y"son inseparabtes' '" para el hombre hon¡q¡ a
deber ineludib'rc -Diot
ñ. d" la vida espiritual
"Noo, eye brey¡ Dios, ya por ser sí mismo i{inita¡
Siendo imposible tratar en "., ya principaLnente
c*'p""¿'í-á".'Ji'1:,;.'"'J"lT"iü'::":i'""i:; *"rri"' gt*d" y excelso,
sr¡
{tmcs en los números oo. ."rbio, nuestro Criador y Conservador'
en el esquema
üás importante', tuyo - "ig"' .propio hl ."cono.i*ientode la soberanía de Dios y
ü]". iitr"¿"t se ha índicado' de nuestra dependencia de El constituye el
La Religión
Debelos adotar a Dios por ser soberano Se'
ñor cie iodo io creado, darle gracias por ser-nues'
143i ¿Qué es religión? úo rnayor bienhechor. suplicarle Pol -ser fu91te
Majestad in'
moral Por 1a cual d¿ todo bien, peditle perdón por ser
Religión es una vrirrud tm finita ofendi«la por nuestras culpas'
d";;; Dios, nuestro suPIgTg Señor Y El oreceoto cle tributar culto 'a Dios es de ley
-j"I".¡sto
it-rá,-.t culto que le es debido' ¿i conjunio **.ii. 1o ha renov-ado v dignificado
religión
Eo sentido lato significa
_- 141-
_* 140
 €oa su. ejemplo. Al entrar en este mundo dijo:
"Heme oqoí !u" vengo, según está escrito de mí
al principio del libro' paia cumplir, oh Dios' tu
lrol'rnt"di' (72); y al salir de él dijo: "Padre, te
he glorificaio' sotre la tierra, he consumado.la
obra" que me.has encargado" (73)' El pasaba las
,roch"s en oración, levantaba maflos y ojos al cie'
1o para dar gracias y suplicar;
-
El se ínmoló- en. la
Á'2. terlizaido el acto más sublime de relígión'
Siendo El nuestro mediador y sumo Sacerdote'
debemos honrar y glorificar a Dios pór El, con
El, en El. La §anta Misa en que Cristo renueva
el sacrificio de la crur e§, por tanto, el sol y cen'
tro del culto y el acto principal de religión'
La relieión es necesaria también para la socie-
dad; porque donde falta la religión y se pisotean
.io. iá¡"t"t pari con Dios, no puede haber só1ido
progreso ni verdade¡a prosperidad'
145.-¿Basta tributar a Dios culto inte'
rior?
No basta tributar a Dios culto interior'
Sjendo el hombre un ser sensitivo (comPue§'
to de cuerpo y alma), debe honrar a l)ios
con toda su persona, estlr e§, con toda§ sus
facultades corporales y e§pirituales
(72) H¿br. 10, 7.
(73 ) S. Juan r7, 4.
-- LlZ
-
No es posible poseer y practicar .o, o"rf"cci6á
\ la virtud de la religión sin que esta' se ,anifieste
I también en actos exteriores.
i
El hombre es un ser sociat forma pan: de la
sociedad. Peró la sociedad no puede tributar cul'
to a Dios sino por actos exteriores y colectivt's: '
Las palabras del Señor: "Es menester, adortr
a Dios en espíritu y en verdad" (74), indican
que los senti;ientos interiores son de absoluta
necesidad y que sin ellos el culto exterior no vale
nada.
146.-¿Cluáles son los principales actos de
religi6n?
Los principales actos de religión son la ado'
r'.!ción, el sacrificio, 1a oración, 1os sacramen'
tos, las ofrendas y oblaciones, 1os votos y ju'
'ramentos, la santificación de 1os días festir
- §os, las procesiones y peregrinaciones, etc'
La adoración es el acto más general de religión,
el cual forma parte de todos los demás actos del
todcs se reconoce explícita o
óulto, por .,r"riu
".,
irnplíciramente el soberano dorninio de Dios. y
,rrlrtr" completa dependencia. Son actos exterio-
res de ado¡ación las genuflexiones, postraciones' .
inclinaciones, etc.
(7 4) 4, 24.
'c. Juan
_i43 _
 , r" p".rit"nalQ,
: .El sacri{icio es el acto más perfecto de religión.
'- En la nueva ley no hay otro que el del altar.
.,. La oración puede'tonsiderarse como ei acto más
'iinportante de religión, no sólo porque suele acom.
a 1os demás sino también porque siempre
'ypañar
en todo momento podemos ofrecer a Dios e[.
culto de nuestra oración.
Los sacramentos, si bien fueron instituidos pró,
'ximamente para nuestra santificación, redundan
. . ambién en honia y gloria de Dios, ya por los.
'l.actos
de culto qús los acompañan, ya porque el fin
. dá nuestr¿ santificación es gloriíic¿r a Dios.
: ..., Con el nombre de ofrendas y oblaciones se en-
'. '.-Los
tiéndeir las que se hacen.para el culto divino.
'- votos y juramentos son actos del culto si
-'.-reuner las condiciones rqqueridas que se. enseñan
..- i:ir' la doctrina cristiana.
' Eltre los actos de religión se suele nombrar tam,
- 'bién
. la devoción que cbnsiste en la decidicia vo-
luntad Ce dedicarse al culto de Dios. Fácilmente
se comprende qqe esta voluntad debe accmpañar
e ínflui¡ eri todcs los actos de religión. Sin em,
,tnrgo, con la devoción substancial que condiste
en la expresada voluntacl, no se debe cónfundir
la devoción accidental o sensibie que consste en
los consueios sensibles. La orimera no debe faltar
ounca: .ia segunda no es necesaria. Recuérdese lo
'que se ha <Iicho sobre e1 fervor esencial y .zl fey
vor sensible e¡ la oración.
{
1. _ 1,1+ _ _
-5i fu*o-
i*\',,
U7*¿Qué tl',a"
es la peniten"rr,
Penitencia es una virtud morai por la"i;al
ofrecemos a Dios satisfacción poi los peá,
dos cometidos.
- "" '...
La virtud de la penitencia se áistingue del sa-
cramento de la penitencia porque, si bien una y
otra tienen el fin de destruir el pecado, lo hacen
sin embargo, de diferente manera: e[ sacramento
por su virtud intrínseca y sacrarnental que es in.'
faiible, la virtud de la penitenciá mediante los ac'.
tos del per-ritente. Por ¿stos mismos actos concurre
la virtud de 1a penitencía. a la digna y fructuosa
recepción del sacramento
148 ¿Cuáles son los actos de penitencia?
. los actos de la penitencra son interiores y
citeriores. Los actos interiores son el dolor
<ie haber ofendido a Dios, el saludable remor
de recaer en.el pecado, el odro y detestación
de la más leve ofensa de Dios, el firme pro, !
pósito de sufrir cualquler tormento antes,que
volver a ofender a Dios. Los actos exrerio-
nos, limosnas, oracion;s de desagravio, áus,
teridades corpoi?les, induigencias, ecc. -
t45 __
:" 1,,

. Aunque los actos interiores de penitencia son cordar en general haber ofendido a Dios y hacer
los más importantes, no deben faltar, sin embar, accos de dolor.
go, las obras exteriores. El cuerpo y el alma tu,
vieron parté en el pecado. Por eso los dos deben r5O. ¿Qué es espiritu de compunción?
' hacer penitencia. §i faltan las obras exterio¡es se
puéde dudar de'la penitencia interior. Espíritu de compunción es la misma virtud
de penitencia ejercida con nayor perfección.
149: ¿Es necesarib hacer penitencia? "Mi dolor cstiL siemprg delante de mi" (79).
Sí, "Un corazón contrito y humillado no lo des.
preciarás, oh, Dios". (80).
Muy señalados son los frutos del espíritu de
compunción. Entre otros, pureza de conciencia,
tumildad y desconfian¿a dá sí mismo, paciencia
en la adversidad, fecundidad y efica,cia de la ora.
ción, etc. Los siguientes textos indican estos fru-
tos: "No soy digno de ser llamado apóstol, porque
he perseguido la Iglesia de Dios". (81). ^ ..Ctn
razón padecemos estas cosas porque hemos pecado
contra nuest¡o herr.ano". "Bienaventurados los
que lloran, porque serán consolados" (83).

La hr¡mildad

151. ¿Qué es humildad?

Hurniidad es una vim¡d moral que reÍre,
------i ..

) S. Mat. 3. 2;
75
( 79) Ps. 37.'
76i ¡a¡. s. i.' -' (
(81)
80) Ps.50.
I. Cor. 15, 21.
7?).,.FiI. 2, i2.. (83)
781 Conc. Trid., ¡¿s. i4. S. Mat. 5, 5.

_ L4:6 _ _ 147
,
¡ tr.i - :-.
ria en noibtros el desordenado deseo de gran, oblígación de hacer" (87). ..A Dios sólo
la honra
: "'_deza 'y y la gtori:r por los siglos de los siglos,, (gg).
gloria .y nos hace recono."r nrrEii" En.
reconocer
nada y miseria según la verdad. -est¿s
verdades, en dar la gloria a_'. Dios-
en no preferirse a los demás que han-recibid.;;j
Se dice: "refrena en noso&os ei desondenado bién los dones de Dios, acaso
deseo de'grandeza y gloria", porque emprender tc la humildad -"yo."r. . . Lrr.I.
cosas grandes por {a gloria de Dios, confiando en
'los auxilios del Señor, ,aSe 1u.el9
distinguir humildad de entendimiento
no es conrra la humildad. y numltdad de corazón. La primera consiste en él
Se dice: .l'nos hace reconocer nuestra nada v conocimiento de la propia miseria y .. .orrdi.iór,
niseria según la verdadrr. La humildad consiste, necesarla para llegar a la segunda, la
,.Una de corazón"
-según1 §anta Teresa, en andar en la verdad. en la cual consisre propiamánte l" ¡r.-ifa-rJ---'
"i-e? estaba yo considerando Santa-
qué raz6¡ era nuesrro -escribe.la
Señor tan amigo de [a
. ¡.9r
. hu¡iildad, y púsoseme 152. . ¿Por qué debemo. y practicár
delante que es porq-ug Dios -Ia humildad? "**
. gs Suma Verdad, y la humildid es indar en la
¡ e¡dad" (84). La.ve¡dad nos enseña que el hom.
bie,. es imagen de Dios, rey. de.la c¡eación visible, Debemos amar y
practicar la humildad:
: . hijó de, Diós por la gracria santificanre. No reco,
iocer estos dones seria ingratitud. Pero Ia verdad _1n
po.qre Dios ama la humildad y abofie.
nos enseña también que el hombre de su propia ce la soberbia;
¡o_secha no tiene más que-'la nada y el pácaáo. . 2o porque la humildad es fuente de gran*
"Si alguno piensa ser algo se engaña a sÍ mismo, des bienes espiriüuales.
pues nada es'J (85). "¿Qué cosas ierres tú que
no las hayas recibido? Y si lo has recibido, jde . lq "Es abcrrecido del Señor todo arrogante (so^
qué te glorías si no lo hubie¡as recibido?" berbio)" (89); "Dio-" resisre a 1". ;ob;b1;.1';
t (86) . "Des¡uésccmo que hubieres hecho todas las co, a los humildes da su gracia" (90).
sás qtre se os han mandádo, ,decid: siervos inútiles
somos: ¡o heaos hecño más <ie 1o que teníamos
(87) S. Luc. 17, 10.
(84) .Mor.VI, c. 10. (88) I Ti¡c. i, t ?.
(85) Gai.6, 3. (8et' P¡ov. 16,5.
(86) I Cor. 4, 7. (e0) Sant. '4, 6.

__ 148 __ _t49 _
 "Dios protege y libm ai humilde, ama al humilde
y le consuela, inclínase al hombre humilde, le pro-
diga sus gracias y después de su abatimiento le cle-
va ¿ la gloria" (91). "Aprender de mí que soy
manso y humilde de corazón, y hallaréis paz para
.vuestras almas" (92). "En verdad os digo que si
no os volvéis y hacéis semejantes ¿ los niiros, no
entraréis en e1 reino de los cielos" (93). "Quien
!e humillare será ensalzado" (94).
153 *¿Cuáles son los principales actos de
humildad?
Ios principales actos dá humildad son:
1e reconocer su nada delante de Dios;
' 2o creerse indigno de los dones de Dios e
'ineptó, por sí mismo, para toda obra buena;
3e no engreirse de los buenos éxitos, ni
Cesmayar en los sucesos adversos;
40 huir los honores y buscar el úlcimo 1u,
gar en cuanto de nosoiros depende;
5e considerar en e1 prójimo 1os dones cle
Dios y no preferirse a nadie:
(e t) Im. de Ct., I. II, c. 3.
(ez) S. Mat. II, 29.
(e3) S. lv1a¿. 18, 3.
(e4) |'/fat. 2,3, 12.
_15C_
6§ sufrir con paciencia y;aun con alegría
las humillaciones que sobrevinieren. .
lc "Todas las naciones son delante de El cómo
si no fueran" (95).
2e "No porque seamos capaces por nosotros mis,
mos de concebir algún (buen) pensamiento, sino
que toda nuestra suficiencia viene de Dios" (96).
"No te envanezcas por tus. buenas obras, porque
los juicios de Dios son muy distintos de 1os luicios
de los hombres; y frecuentemente 1o que agrada
a los homb¡es, desagrada a Dios". (97).
3e "Me complazco en mis debilidades, en los uI,
trajes, en las necesidades, en las persecuciones, en
las angustias por Cristo, pues cuando estoy débil,
entonces soy fuerte" (98). "Nos vemos acosados
de toda suerte de tribulaciones, pero no por esto
pérdemos el ánimo" (99).
4s "Cuando fueres convidado, vet¿ a poner en
el último lugar. . . Quien se humilla sé¡á ensalza,
do" (100). "Ama el ser ignorado y reputado por
nada" ( 101).
5e "No pienses haber aprovechado algo si no te
tienes por infe¡ior ¿ todos" (102). -
-(e5) Is. 40, 17.,
(eó) II Cor. 3, 5. ..
( 9?) Im. Ce Cr., 1. 1, c.7.
(e8) II Cor. 12, 10.
(ee) Ib. 4, 8.
( 100) S. Luc. 14, 10,11.
(101) Im. de Cr-
( 102) Ib- f. iI c. 2-
__ 151._
 '-- 6e "Bien mirado, nunca nos culpan sin culpas, Hay también una ira juüsCoqo fué ia ¿"
' 'pues andamos llenos de ellas, y si no son aquel1as tro Señor cuando arrojó a los ver¡ds¿q¡ss del"tem.
olo. "Airaos, pero no pequéis" ( 104) .; ^ ,
''. ,que nos dicen serán otras muchas"
y qué
";'qué admiración no causa
Santa Teresa.
da ver
escándalo
Pecan por ira los quisquillosos que áe:l'enfáda¡r
por causas insign ificantes, los iracundos que se,édo.¡..
a una.persona que coinulga con frácuencia y des' jan e n demasia, los rencorosos que guardan d"m"i;: ''
pués se turba o irrita por una palabrilla de menos' '
siado tiempo la memoria de las injurias sufridas,
precióI" (103). los vengativos que no descansan hasta haberse
vengado, etc.
' La mansedumbre
156, ¿Es necesaria Ia mansedumbre? .

,t ; 154., .¿Qué es Ia mansedumbre?

La mansedumbre es Éan necesaria comó la
umbre es una virfud moral que humildad; por 1o cual Jesucnsto nos reco.'
ira. mienda ambas
mienda ambas virtudes con las palabras:
"Aprended de mi que soy manso y humilde
de corazón".
Dada la gran diversidad de temperamentos y ca,
racteres, no es posible vivir en paz con nuestros
prójimos sin refrenar Ia ira y practicar la manse.
dumb¡e. "El uno lieve la carga del otro, )' así cum,
pliréis la ley de Cristo" (105). La caridad para -
con el prójimo supone el ejercicio de ia mansedum.
155 ¿Es siemPre mala Ia ira? b¡e
En mayor grado tienen necesidad de esta vir¡¿d -. "
La ira no siempre es mala. Es mala cr¡an' los que tiene¡r el oficio de educar o dirigir a otros...
do falta el justc motivo o cuando se pa§a el Jesucristo promete la tierra de promisión (o. cie,
justo modo y meCida.
(104) Ps. 4.
(105) Gal. 6, 2.
(103) S. Alfonso, Práct- del an- a i' C, c' 9' r
t52 _ 153 _
- -
lo) a 1os qlansos: "Bienaventurados los man§o§,
porque poseerán ,la tier¡a" (106).
157, ¿Cúles son los principales actos
de.mansedumbre?
principales actos de qansedumbre solr:
' Lo's
10 no permitir que se apodere. de nuestra
alma otrJ ira que la santa; airarse contra €1
pecado, no contra el pecador; moderar la ira
justa;
.20 no enfadarse por bagatelas, ni tomar
como ofensa lo que en realidad nó 1o es;-
.3e"perdonar por amor de Dios las ofensas
recibidas; no guardar rencor;
- 4e ser afable con todos y no dar motivo
de airarse a nadie.
La pacienciá.
15S. ¿Qué es paciencia?
Paciencia es una virtr:d que nos hace so'
brelievar los males de 1a presente vida con
calna y tranqu.ílidad de espíritu Por motivos
cistianos y sobrenaturales.
(10ó) S. Mit. 5, +.
_t54_
Con el nombre de "males de la-presente vida,'
. sc entienden toda clase de penalidides,. sean de
cuerpo o de espíritu y vengan de donde vinieren-
paciencia rnitiga la tristeza. y turbación que
.La
sobrevienen por los males de la presente vida, de
modo qus por ellos el hombre no se aparte de los
dictámenes de la recta razón. La fisteaa que aquí
se nombra es la triste¿a inmoderada de que se tia.
tó en la Vía purgativa. De ella dice e1 Espíritu
Santo: "Apiádate de tu alma... y arroja lejos de
tr la tristeza, porque a muchos ha dado muerte y
r¡o es bueni para nada" (107). La paciencia con-
forta nuestro espíritu y nos hace co¡servar la tr¿n,
quiiidad de alma.
Los motivos sobrenaturales en que la paciencia
cristiana se inspira son aquellos que la fe nos ense-
r-ra, por ejemplo, el pensamiento de que Dios per.
¡¡ite las pruebas para nuestro bien; "El Se¡oi at
que ama castiga". (i08); que Jesucristo ha.suf¡ido
por nosotros y más que nosotros; que "los sufri-
mientos de la vida presente no pueden comparar,
se con la gloria venidera" (109) y otros de que se
hablará a concinuación.
i 59.-¿Es necesaria Ia paciencia?
La paciencia es ian nece.saria que sin eila
( 107) F.cií.30,24.25.
( 1c8) Hebr. i 2, 6.
( ice) Rcm. 8, 18.
_ 1)5._
:"no,es posibie alcan4ar la vida eterna según las
palabras del Apóstol: "Os es tecesaria la pa,
ciencia para que, haciendo la voluntad de
Dios, obtengáis la promesa" (110).
La" paciencia alivia los males de la vida, mientras
,que la impaciencia los agrava y encona.
Lievando con paciencia nuestra cruz nos hace.
. mos semejantes.a Jesucristo, el cuai nos dice: "§i
uno qüere venir en pos de mí, niéguese a sí mis,
mo, 'tome _su cruz y sígame" ( I I l), No es buen
.cristiano el que no llev¿ su crüz con paciencia.
Además, por medio de la paciencia pagamos nues,
. :t¡as de;udas a Dios, y alcanzaremos el premio de la
wida eterna.
,:
*r-rcuoas,grados de pacieucia hay?
Hay tres grados de paciencia:
. 1e ilevar los males de ia vida con c¿l,na
e*terior, esto es, sin prorrumpir en quejas v
lamentos'
2o L7evar los males de la vida con calma
interior, reprimiendo la triste¿a y poniendo
en pa¿ el corazón turbadc;
3o llevar las tribulaciones con alegriay ac-
(i10) Hebr: i0, 36.
(i11) S. Luc. 9, 23.
_ i-56 _ _157
ción de gracias como los Apóstoles que ..ibag
trruy gozosos porque habían sido hailados
díg.
l*. q: sufrir aquei ulrraje po.
"f "á.Ur"E
161*¿Qué rnedios debemos emplear pa.-,
ra adquirir Ia paciencia?
lo Mirar a Jesus Cruciflcado. ..Cristo m.
cieció por nosorros,'dándonos eiemplo. oi¡::a
que sigáis sus pisadas" (ll3).
Ze Mirar a los Santos, de quienes dice To.
r.nás de_Kempis: ";Ohl cuántas y cuán grary
<ies-tribulaciones padecieron los Apósábq
los Mártires, los Confesores, las Víigenes y
todos los que qüsieron seguir las huellas de
Jesucristo" (114).
3o Acudir a la oración. "¿Está triste al
guno de vosorros? Ore" (115).
_4e
Recordar e1 premio insigne prometido
a los que sufr-en con paciencia.
(112) Áct.5,41.
(r13) f Petr. 2, 21.
(114) Im. de Cr. t. I, c.
(11s) Sant. 5, 13.
18.
_
 163.-¿Cuáles son,los ejercicioq propios de
Ofrezcamos, todos los días en la oración de -
la
Ia vía unitiva?
*rñ"no t,r"arras penas al Seiror, uniéndolas con las
de Jesucristo.
Los ejercicios propios y caracterÍsticos de
la. vía unitiva son:
1o el ejercicio de la presencia de Dios;
VIA UP{ITIVA 2e la contemplación;
3o el ejercicio del puro y perfecto amor de
Dios;
SECCION TERCERA 4o la conformidad con ia divina voluntad;

- Del ejercicio de la presencia de Dios se ha ha, -

l6Z._¿Qué es vía unitiva?
: Vía unitiva es la terceta vía de ia vidaes'
riritual. et) la cual el alma, libre ya de los
principales estorbos de las pasiones y orien'
tadas sus facultades hacia Dios Por el ejer
cicio de las virtudes, se Lrna más Y más con
Dios.
Como se ha dicho en ia Introduccióo, esta terce'
,. .,í" .or."rponde al grado de los- perfcctos' De
.e-sigrre lrre tí" unitiva y perfccció:i son no'
"hi
.,on". .irl¿"mas. Las dcs prirneras vías penenecen
Ia ter'
a la perfección, por cuanto a ella conducen;
'.orr.tirrye ia perfección, sin dejnr de ser ca'
."i,
;;, ;o.q"J en 1a perfección v unión con Dios se
vez lnás'
¡r:"de progresar cada
blado entre los medios generales de perfección. En
esta tercera vía se practica como medio de unión
con Dios.
16a.-¿Qué es contemplación?
Contemplación es una forma cie oración
mental que consiste en mirar y admirar por
cierta intuición y sin discurso aig.rna verdad
revelada.
En la meditación ordinaria e1 alma piensa, refle,
xiooa, discurre; en 1a contemplación mira y.,aCniia
[a. verdad. Los efectos de ia vo]untad no faltan en
la coatemplación, aunque suelen ser pocos y sen.
cillos o reducirse a uno solo.
De lc tiicho se sigue que la contemplación no

_158- _ 1'-59 _
 contemplación por ser un medio eicelente
para llegar a mayor perfección. pero. sesún
confornúdad de
167.-;-Enqué consiste Ia el orden ordinario de la divina providencil es
.r"á.É""ád tot' la de Dios? necesario habilitarse para reobir este don,
mortificando las pasiones y pracricando las.
en uniformar
Consiste esta conformidad virtudes. Sólo en la rercer¿ víi de la vida es.
la divina'' hacrendo pirírual se suele obtener este don. En cuanto
"#;;-;;h"tud "o"
1'o qo" es del agrado
del Y
ffi;; 'Señor
que El nos en'
a los dones extraordinarjos como ¿*t
IIIrt*d" ,Já u" P*"É"t srones, revelaciones, etc., no hay que "ir, "¡,
desear,

'tlrl;.,-" de roda
los ni pedirlos por no ,". n"d"rit.
perfección.
p; il
" 1T:trri,Fgx.u"f*i
fonso- está encerrada-,t "H^"I almas muy dadas a la oración _escribe
^ l tonso-
Jan que, Ieyendo los &tasis y raDtos de

:rsf:rt#":*#ffi"*Ht
oue no es en regalos
rnte
'I
¡ante eresa y de San Feiipe Neri y ot-" 3rrto*
entran en deseos de tener y dísfrutai de esta
sobrenatural. Tales deseos d"b".;.-á;;;;;;:
uniói
b¿mientos' ni en vsrone por ser contrarios a la hudldad. Si de veras
bus,
camos.la santidad y perfeco-ón, debemos
::1 iffi ""3,ri i::queram
d";;";;
ouiere, que no la
l#:I"i; ::.:'::::r::,:::
-irf"Hi:
verdadera unión con Dios, que consiste
en unir
totalmente nuesrra voluntad cán la ¿" Oior,i?rra).
l;?i,], entendiendo
¡"e' ?p¿i* ::,:
qt TTJ:,"J.T
sabroso,
(.1i7) .

jT.,l"#:
68--¿E s
1

místicas que Dios

*:: suere
"ililT"l,.:::: EIN

perfectas?
pedir con humildad la (118) l.
Es licito desear Y
c.

C t' --163_
' l' '
13.
ñr- ,ru"t' del ar¡or
il rr¡
.,,'
!undac'' ''
i'O¿ '- -
 iNDICE

-o: Pág.
Prefacio . 5
Introducción 7
. Primera parte: Medio de perfeccióo ,'l

El deseo de la perfección 22
La dirección espirirual 27
La oración 3-4

La meditación 4:6
La lectura espiritual ó7
E.l ejercicio de Ia presencia
de Dios 70
Examen de conciencia
79
Frecuencia de sacramentos
Seguada parte: Vías ÓJ
de Ia vida aspi¡itual
Seccióa primera: 89
Vía purgatih
89
Morfificación exterior
94
Mortificación interior
10i
Morrilicación pasiva
112
Seccióa seguada: Vía iluminativa
118
I¿s virtudes teologales
t2.2
111
La esperanza
! ¿J