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PATRIA BOBA VS.

SOLIDARIDAD
Pasado, presente y futuro de nuestra realidad.
Por Benancio Patiño Rolon

PASADO

Se conoce como la Patria Boba al período de la historia de Colombia comprendido entre


las declaraciones de independencia de 1810 y la entrada a Santa Fe de Bogotá de los
realistas durante la reconquista española.
¿Pero realmente este periodo de tiempo, limito la Patria Boba?, ¿Quedo atrás, o por el
contrario, es una historia que se sigue repitiendo todos los días?
Colombia en el tiempo y hablando de un pasado, ha sufrido una serie de casualidades o
paradojas, que empujan a través del momento a engrosar dentro de un proceso oscuro,
donde nadie es responsable; pero todos tienen la culpa.
Independencia absurda la que se pide a gritos en la Nación, donde y desde el inicio, genero
una ruptura social, con ardor fratricida; hecho que se ha repetido una y otra vez en el vivir
del colombiano; los centralistas (liderados por Antonio Nariño y que controlaban el gobierno
de Cundinamarca) y federalistas, liderados desde Tunja por Camilo Torres en calidad de
Presidente del Congreso de las Provincias Unidas. A estos dos caudillos poco les importo,
si perdían el objetivo ideal que era la independencia, o la cantidad de víctimas generado
por conflicto independentista, el enfrentamiento forjado por sus absurdas ideas o la cruel
reconquista española, a la que fue sometida la nacionalidad de ese entonces.
Muchos colombianos de los dos bandos fenecieron, mientras sus caudillos gozaban del
fortunio de ser los que mandaban.
Luego en una necesidad de emancipación, surgieron nuevos próceres, como fue el caso
de Bolívar y Santander, los cuales con una fuerte ideología y capacidad de liderazgo,
organizaron un nutrido ejército, compuesto en su mayoría por campesinos, mulatos,
indígenas, afrodescendientes etc. Con muy pocos pertrechos y mal vestidos, pero con el
entusiasmo de liberar a su tierra del caciquismo generalizado por los españoles, este
ejercito de “Pati rajados” como fueron denominados, lograron un “Paso de vencederos” al
expulsar a los ibéricos definitivamente de nuestro actual territorio y cuando se creía que
llegaba una época de paz, se inició otra pugna, entre Santander y Bolívar, por el ansia
desmesurada del poder y de la verdad absoluta; y se prolongó la periodo de Patria Boba.
Posteriormente se sucedieron otros conflictos y generados todos, por los intereses de
caudillos que poco o nada, les importaba la voz del pueblo; estos conflictos fueron
numerosos y los más importantes aquí se enuncian.
Guerra de los Supremos (1839-1841)
Guerra civil de 1851.
Guerra civil de 1854
Guerra civil de 1860-1862
Guerra civil de 1876-1877
Guerra civil de 1884-1885
Guerra civil de 1895
Guerra de los Mil Días (1899-1902)
Consecuencias
La violencia (1930-1958)

PRESENTE

Conflicto armado interno de Colombia (1960-actual)

El presente de la actual Colombia, se enmarca desde la muerte del caudillo político liberal,
Jorge Eliecer Gaitán Ayala, y aquí se hace referencia a la tragedia que vive Colombia,
donde cada vez que sale un líder que oye la voz del pueblo es silenciado, por las balas
fratricidas de armas dirigidas por fuerzas que están dentro y fuera de los actuales gobiernos
de turno de la época.

Es el caso de:

Jorge Eliecer Gaitán Ayala 1948


Luis Carlos Galán Sarmiento 1989
Carlos Pizarro LeónGómez 1990
Álvaro Gómez Hurtado 1995.

El incumplimiento de pactos sociales, realizados entre los gobiernos de turno y las clases
sociales, dio origen a la constitución de grupos armados, que en sus albores históricos, eran
dignos de una filosofía real (pero que con el correr del tiempo, se desdibujaron en grupos
terroristas, narcotraficantes) como fue el caso de:

FARC 1964
M 19 1970

Estas dos ya extintas mediante acuerdo de paz

Y las actuales:

ELN 1964
EPL 1967

También se crearon grupos tales como las autodefensas unidas de Colombia en el año de
1997, ya desmanteladas y de donde surgió un sin número de BACRIN.
Desde el bogotazo, como se conoce ese acto de violencia desatado por la muerte del
caudillo liberal Gaitán, el País, se vio envuelta en una refriega o guerra interna que lleva
más de 60 años. A esto se le suma la enunciación de carteles de la droga, que con el
beneplácito de grupos políticos de izquierda y derecha, crearon un estado de terror, muerte,
y narcotráfico.
Dejando a lo largo y ancho del país un total de 8.708.664 víctimas, un tejido social
totalmente destruido y la necesidad de un cambio total.

Estas víctimas vienen del terrorismo causado por el estado, las bacrin, la guerrilla y los
paramilitares, todos al servicio del más fuerte y en mucha ocasiones del narco terrorismo.
Pero y en estos dos periodos de tiempo, donde queda el ciudadano del común, el
colombiano que pone los muertos, el dolor y la angustia, aquel que no vive, sino sobrevive
en los diferentes lugares de Colombia. El ciudadano que no piensa, que lo enseñaron a
pensar, aquel que actúa en pro del beneficio de los poderosos; aquel que no tomo partido
sino que lo obligaron a tomar partido, aquel que no lo enseñaron a pescar, sino que le dieron
el pescado, para poder tenerlo dentro de una línea de acción cuadriculada, aquel ciudadano
que representa el mayor caudal electoral y que es la materia prima, para políticos
inhumanos, que desde hace mucho tiempo han repartido limosna a un gran grupo de
mendigos; con paquetes no de acuerdo a la necesidad de ese elector pasivo, sino del
momento que vive y el favor que precisan y traigo a colación una canción de los señores
Silva y Villalba “A quien engañas abuelo”.

Los grupos políticos, beligerantes, religiosos, sociales económicos y la actualidad


sensacionalista, ha creado una división demencial, entre las clases menos favorecidas; que
ya no ve a su vecino, como su amigo, su compadre, su hermano; sino como un rival de su
pensar, ya que no es de este bando. Pertenece al otro.

La división caótica, el miedo, la desconfianza, el egoísmo, la envidia; generan odio social y


distorsiona la forma de ver y enfrentar la vida y se vuelven enemigos del grupo contrario,
hasta el punto de tomar ese retorcido partido, que carcome, que lastima y quita la dignidad,
que los vuelve esbirros de un pensar y actuar paupérrimo y no es coherente a la hora de
tomar una elección o decisión, ya que no se hace por criterio propio, sino por ese criterio,
infundido por el grupo o gamonal de turno.

El productor primario de cualquier reglón, se vio perseguido, hostigado, violentado,


desplazado y victimizado, producto de esa exclusión, creada por el nuevo orden del
terrorismo, venga este de donde sea. Se perdió ese apasionamiento por lo cultural y de
arraigo que se trasmitía, y se transformó la economía, por el pago de un impuesto, no
permitido pero si exigido, los cultivos lícitos, fueron cambiados por cultivos ilícitos y la forma
de ver la vida, muto, surgió una economía subterránea, donde el facilismo era el mejor
revoque del miedo y el terror sembrado en las diferentes zonas de la vasta geografía
colombiana; el campesino arrinconado, cambio la labranza de plátano, yuca y otros tantos
productos, por el cultivo de coca, que al momento comercializar, era más rentable, sin medir
las consecuencias; al fin y al cabo ellos siempre han puesto los muertos, la pobreza y la
marginación.

Esto como producto de una sociedad rota, exclusivista, donde los masificadores de dinero
ya sean los sectores bancarios y corredores de seguros o las grandes plataformas de
distribución y grupos comercializadores, no dan el valor real que se merecen los productos
de los productores de primer reglón, los marginados; apoyados por un gobierno que se hace
de la vista gorda y una cantidad de leyes, que mitigan y aplacan esa ansia de decir basta
ya.

Tales circunstancias ha llevado a perder el arraigo y el relevo generacional, los campos, se


están quedando solos, el campesino, está cansado de ser campesino y no inculcan a sus
hijos ese apasionamiento por seguir las tradiciones de cultivo y querer la tierra, amar ese
pedazo de suelo, en muchas ocasiones, herencia ancestral de muchas generaciones ya
olvidadas. Dando paso a una generación sub urbana, de casas de cartón y cordones de
pobreza extrema, blancos ideales, para los políticos y los violentos.

Y lo peor aún dentro de las esferas del gobierno y los potentados de este país, conocen la
problemática, pero no toman una iniciativa para cambiar, esa realidad. Inventando el
famoso acuerdo de voluntades, que solo beneficia a los de arriba.

Y como un velo post apocalíptico, se cierne sobre el planeta una pandemia denominada
COVID 19 y a todos los planteamientos de supervivencia que se somete día a día los
marginados, se le agrega este nuevo y duro acontecer.

Esta pandemia, ataco a todos por igual sin escatimar la clase o el poder y salió un dirigente
de masas a decir que en esta calamidad, todos estábamos en el mismo barco y no resulta
más falacia esta, pues todos estamos en el mismo océano, mas no en el mismo transporte.

Ante esta situación y como una burla anacrónica, Latinoamérica vivía, una serie de huelgas
y marchas, en pos de exigir igualdad social para los marginados, donde los más, exigen a
los menos, un paralelismo y no una equidad social. Lastimosamente y como en todas las
manifestaciones, son infiltradas por los bandos, que necesitan hacer presión, por parte de
conjuntos ya sea de izquierda o de derecha y en este caso en particular, estaban presente
los dos grupos, manipulando en aras de satisfacer sus necesidades.

El Uribismo con el Centro Democrático y el Petrismo con Colombia Humana, ha radicalizado


un factor de odio y agresividad en las diferentes redes sociales, por la búsqueda que una
supremacía, que solo ha demostrado, la monstruosidad inigualable de estos dos bandos,
por el poder de la Republica, sin importar la cantidad de víctimas.

FUTURO

31 de diciembre de 2019

La Comisión Municipal de Salud de Wuhan (provincia de Hubei, China) notifica


un conglomerado de casos de neumonía en la ciudad. Posteriormente se determina
que están causados por un nuevo coronavirus y el mundo identifica días después
con horror que está, ante una nueva pandemia y calamidad de sanidad mundial;
paulatinamente y como era de esperar, Colombia fue receptor del virus, por
contagios del exterior y luego se propago a casi todos los lugares.

Las campañas de prevención y corrección no se hicieron esperar y políticos, que


poco tiempo atrás habían tachado de insulsos y poco responsables a los
huelguistas, ahora pedían que ayudaran en su calidad de profesionales, y se dejó
claro la falta de recursos para la educación, la salud, la investigación, y la inversión
social.

Y nace otro esquema, que no es de ahora, viene de antaño pero no por eso deja de
ser preocupante, una plaga que azota a Colombia en todas las esferas del gobierno,
y es la CORRUPCION, con más de 52 billones de pesos robados anualmente y
ocupando un alto índice en la escala de países con mayor corrupción, Colombia,
gasta mucha de su capacidad de invertir en el mejoramiento como País, en
sobrecostos y dadivas, de los cuales son solo beneficiados los caciques de turno y
sus equipos de colaboradores, ya sean directos o indirectos.

La corrupción alcanza un índice tan alto de gasto gubernamental y eso es dinero


que paga cada uno de los que a costa de esfuerzo y sacrificio, construyen país,
pues muchos de los altos grupos empresariales de esta Nación, no tributan al
estado o lo mas paupérrimo, los casos de Inter Bolsa, Agro Ingreso Seguro, Avianca
y la ejecución de muchos contratos, donde grandes cantidades de dinero son
malversadas con la venia del gobierno, como el caso Nule u Hodebrecht y
rematando, los escándalos de la narco política, como lo acaecido en la Costa
Atlántica y otros muchos lugares de este gran País y, que a pesar de tanto ultraje,
aún sigue en pie y, no precisamente por el gobierno de turno, por los poderosos o
por los terroristas en cualquiera de sus ámbitos, esta Patria sigue pie, por los
marginados, por los que luchas cada momento, cada día para subsistir y sobrevivir,
por los que jamás se rinden, por los que solo cuentan, cuando son necesarios y la
mayor parte de su tiempo y de su historia, solo son números y estadísticas.

Y como dice el poema del escritor Eduardo Galeano “Sueñan las pulgas con
comprarse un perro” los marginados, a los que les obligaron a tomar partido, a los
que les enseñaron a pensar, a los que cuadricularon en su actuar, a los que solo
escuchan la verdad de los medios de comunicación viciados y vendidos; son ellos
los responsables de que Colombia, siga siendo País único real y Legitimo en medio
de tanta ilegitimidad.

La corrupción, la pandemia y la falta de salud, educación, investigación y apoyo


social real y efectiva, flagelan cada día la espalda de una República, carcomida
hasta sus cimientos por la carencia de conciencia y capacidad de ser mejores.
Y aquí nace un interrogante. ¿De quien es la culpa, de los gamonales de turno, de
los grandes grupos empresariales, de los terroristas, o de los marginales? y con
mucho dolor nos damos cuenta, que los de abajo, adoptaron una cultura de
conformismo, dada por muchos años de cultura de aguante y esperanza que todo
pude cambiar, por gracia de los mandatarios.

Lógicamente, este cambio no se dará, aquí, se necesita un actuar radical, total y no


de violencia, armas, revolución o partidista, sino por el contrario un cambio de
inteligencia y precisión, donde se conciba la realidad de lo que daña al País. Donde
los marginados, entiendan que los gobernantes, son electos por el pueblo y para el
pueblo.

Se debe dejar de ser patria boba, de conformarse con lo que digan y quieran que
piensen los grandes, ya sean terroristas, narcotraficantes, gobernantes o grupos
religiosos inescrupulosos, y también se debe dejar de gastar tanto tiempo en los
medios de comunicación, amañados y retóricos.

Iniciar el cambio por un consenso de familia, de comunidad, de amigo de sociedad,


donde todos cuentan, todos valen y todos son, de unión; donde el problema común,
sea el problema de todos y se busque soluciones reales, que afecten en forma
positiva el bienestar de la colectividad.

Aprender a vivir en direccionamiento de los demás y del Yo personal, como individuo


colectivo como ser, creativo, innovador, proactivo, que genere riqueza de
pensamiento y acción y donde sea capaz de encadenar la necesidad de al lado, con
su necesidad.

Cuando el marginado, sea capaz de migrar y cambiar su forma de pensar, crear


grupos que incluyan dinamismo social, económico, cultural y ambiental; desde su
interior como conglomerado cooperado y articulado y comprendan que los
gobernantes se deben a la sociedad por igual y no a grupos sectorizados; se iniciara
un actuar diferente.

Cuando los marginados vuelvan a saber los que es la pasión por lo que se hace y
retornen a sus sanas costumbres, cuando le enseñen al niño, al hijo al nieto, lo
orgulloso de ser Patria, de ser País, allá desde su terruño, cuando el abuelo y la
abuela, dejen escuchar su recia y nostálgica voz contando las aventuras de los
taitas y se cree una transformación de pensamiento sutil y humano.

Cuando entienda que su economía depende de la del vecino y la economía del


vecino, de la suya. Cuando estemos en condición, sin envidia, rencores o
desconfianza de unir capitales y no necesitar de los grandes potentados y con
dignidad y orgullo, seguir produciendo para Colombia, entonces si dejara de ser
Patria Boba y los marginados se convertirán en productores solidarios. Cuando
estén en capacidad de fomentar y fortalecer grupos colectivos cooperados
emergentes y capaces.

Fuentes consultadas:

Colombia.com
El colombiano. Com
Wikipedia
DANE
Revista Semana
OMS
Eduardo Galeano, escritor y periodista. Tema Los Nadies
Silva y Villalba. Tema. A Quien Engañas Abuelo

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