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1. Obtención de la Libertad. Naturaleza Jurídica.

La aplicación de un criterio de oportunidad

Es una facultad del ministerio publico reglamentada en los articulo 34, 35 y 36 del (cpp).
el tiene la opción de renunciar a la acción publica (persecución)contra uno o algunos de
los imputados, sea en relación con uno o varios hecho que se le imputan y en caso de que
los hecho se correspondan con mas de una calificación jurídica puede limitarse a una o
algunas art. 34 (cpp). En las circunstancia y bajo las condiciones que señala el codigo.
puede imputado solicitar al ministerio publico algún criterio de oportunidad el cpp no lo
dices de manera expresa paro el texto del articulo 35 sobre la aplicación de esta medida
se refiere que si (la victima y el imputado pueden objetar la decisión de ministerio publico
por la que aplica o rehusé aplicar un criterio de oportunidad. De modo que dicho
funcionario puede aplicar las medidas o negarse a hacerlo. Es de lógica concluir que el
imputado no objetara la aplicación de la medida si le favorece sino la negativa que le
perjudica.

El ministerio público puede, mediante dictamen motivado, prescindir de la acción pública


respecto de uno o varios de los hechos atribuidos, respecto de uno o de algunos de los
imputados o limitarse a una o algunas de las calificaciones jurídicas posibles, cuando:
1. Se trate de un hecho que no afecte significativamente el bien jurídico protegido o no
comprometa gravemente el interés público. Este criterio no se aplica cuando el máximo
de la pena imponible sea superior a dos años de privación de libertad o cuando lo haya
cometido un funcionario público en el ejercicio del cargo o en ocasión de éste;

2. El imputado haya sufrido, como consecuencia directa del hecho, un daño físico o
psíquico grave, que torne desproporcionada la aplicación de una pena o cuando en ocasión
de una infracción culposa haya sufrido un daño moral de difícil superación y

3. La pena que corresponde por el hecho o calificación jurídica de cuya persecución se


prescinde carece de importancia en consideración a una pena ya impuesta, a la que
corresponde por los restantes hechos o calificaciones pendientes, o a la que se le
impondría en un procedimiento tramitado en el extranjero.

La aplicación de un criterio de oportunidad para prescindir de la acción penal puede ser


dispuesta en cualquier momento previo a que se ordene la apertura de juicio.
El ministerio público debe aplicar los criterios de oportunidad y otras facultades
discrecionales en base a razones objetivas, generales y sin discriminación. En los casos
que se verifique un daño, el ministerio público debe velar porque sea razonablemente
reparado.

Conciliación Procedencia.
Procede la conciliación para los hechos punibles siguientes:

1. Contravenciones;

2. Infracciones de acción privada;

3. Infracciones de acción pública a instancia privada;

4. Homicidio culposo;

5. Infracciones que admiten el perdón condicional de la pena.

En las infracciones de acción pública la conciliación procede en cualquier momento


previo a que se ordene la apertura del juicio. En las infracciones de acción privada, en
cualquier estado de causa.

En los casos de acción pública, el ministerio público debe desestimar la conciliación e


iniciar o continuar la acción cuando tenga fundados motivos para considerar que alguno
de los intervinientes ha actuado bajo coacción o amenaza.

2. Término de la Pena. El fin de la sanción. Formas de obtener la Libertad (Código


Procesal Penal de la República Dominicana, Arts. 241, 301.6, 304, 337, 424

Cese de la prision preventiva

Está finaliza cuando;


1) Nuevos elementos demuestren que no concurren la razones que la motivaron o
tornen conveniente su sustitución por otra medida;
2) Su duración supere o equivalga a la cuantía mínima de la pena imponible,
considerándose incluso la aplicación se las reglas relativas al perdón judicial o a
la libertad condicional;
3) Su duración exceda de doce meses.

Resolución

Inmediatamente después de finalizada la audiencia, el juez resuelve todas las cuestiones


planteadas; y ordena la corrección de los vicios formales de la acusación del ministerio
publico o del querellante.

Auto de no a lugar.

El juez dicta el auto cuando;


1) El hecho no se realizo o no fue cometido por el imputado;
2) La accion penal de ha extinguido;
3) El hecho no constituye un tipo penal;
4) Concurre un hecho significativo o la persona no puede ser considerada
penalmente responsable;
5) Los elementos de prueba ofertados en la acusación presentada antes de la
audiencia preliminar resulten insuficientes para fundamentar la acusación .
Absolución

Se dicta sentencia absolutoria cuando:


1. No se haya probado la acusación o ésta haya sido retirada del juicio;
2. La prueba aportada no sea suficiente para establecer la responsabilidad penal del
imputado;
3. No pueda ser demostrado que el hecho existió o cuando éste no constituye un
hecho punible o el imputado no participó en él;
4. Exista cualquier causa eximente de responsabilidad penal;
5. El ministerio público y el querellante hayan solicitado la absolución.
La sentencia absolutoria ordena la libertad del imputado, la cesación de las medidas de
coerción, la restitución de los objetos secuestrados que no estén sujetos a decomiso o
destrucción, las inscripciones necesarias y fija las costas.

La libertad del imputado se hace efectiva directamente desde la sala de audiencias y se


otorga aun cuando la sentencia ab- solutoria no sea irrevocable o se haya presentado
recurso.

Libertad del imputado.

Cuando por efecto de la decisión del recurso debe cesar la privación de libertad del
imputado, la Corte de Apelación ordena su libertad, la cual se ejecuta en la misma sala de
audiencias, si está presente.

3. Ley de Habeas Corpus, No. 5353, de 1914). RESUMIR.

El Código de Procedimiento Criminal rescataba el habeas corpus a través de la ley 5353


del 22 de octubre del 1914, pero con la incorporación de nuestro nuevo código procesal
penal fue derogada.

Esta acción suele confundirse con el amparo pero la diferencia básica es que en el habeas
corpus la persona se encuentra en prisión ilegitima.

Durante el sombrío periodo de los doce años que van desde 1966 a 1978, el régimen de
democradura o dictablanda del balaguerismo, en pleno auge de la guerra fría o guerras
de seguridad nacional, el Poder Judicial fue una herramienta para la persecución y
eliminación de miles de jóvenes. En esta época un joven que era perseguido por asuntos
políticos interpuso una acción de habeas corpus sin estar detenido, obviando el amparo
que buscaba proteger su derecho fundamental.

Esta experiencia histórica nos lleva a pensar en la importancia de esta institución y el


valor que representa en un verdadero Estado de derecho.
La Honorable Suprema Corte de Justicia mantiene el criterio que para una persona ser
beneficiada por el habeas corpus debe estar detenida de forma ilegal.

El código procesal señala en su art. 381 su procedencia.

“Toda persona privada o cohibida en su libertad sin las debidas formalidades de ley o
que se viere inminentemente amenazada de serlo, tiene derecho, a petición suya o de
cualquier persona en su nombre, a un mandamiento de habeas corpus con el fin de que
el juez o tribunal decida, sin demora, sobre la legalidad de la medida de privación de
libertad o de tal amenaza”.

4. Naturaleza Jurídica del habeas Corpus (Ley de Habeas Corpus, No. 5353, del 22
de Oct. De 1914 y Nuevo Código Procesal Penal, Arts. 381, 382, 383, 384, 385,
386, 387, 388, 389, 390, 391, 392). COMENTAR.

Procedimiento jurídico mediante el cual cualquier ciudadano puede comparecer


inmediatamente ante el juez para que este determine sobre la legalidad del arresto.

El nuevo Código Procesal Penal toma la parte esencial de la Ley 5353, sobre Habeas
Corpus, y en el libro dedicado a los procedimientos especiales, organizar esta acción,
cuyo objeto es la protección de la libertad individual frente a la privación ilegal de ella
por parte de cualquier autoridad. Como es sabido, el Habeas Corpus, de origen
anglosajón, se introdujo en nuestra legislación en el 1914, teniendo hoy día rango
constitucional.

El procedimiento de Habeas Corpus se hace más accesible y expedito en el nuevo Código


Procesal Penal, al no sujetarlo a formalidad alguna, y ampliarse las causas por las que se
puede solicitar.

Se puede interponer un mandamiento de Habeas Corpus, no sólo en caso de detención


ilegal, sino además, si de modo inminente se estuviere amenazado de serlo. La solicitud,
que está exenta de cualquier tipo de carga impositiva, puede hacerse cualquier día, tanto
por la propia persona como por otra en su nombre, siendo válida tanto por escrito como
por declaración en secretaría.

El tribunal de Primera Instancia es el competente para conocer de modo unipersonal del


Habeas Corpus. El juez apoderado puede ordenar la presentación inmediata del
impetrante (que es el término con el que técnicamente se designa al solicitante del Habeas
Corpus, y luego de oírlo, resuelve inmediatamente o fija una audiencia, todo dentro de las
48 horas de la solicitud. A ésta debe comparecer el funcionario demandado. Si el juez
tiene conocimiento de que hay motivos para suponer que el impetrante pueda ser
trasladado ilegalmente al extranjero, tiene el deber de expedir órdenes y resoluciones para
impedirlo. Si el juez decreta la libertad o el cese de la medida que la amenaza, ningún
funcionario puede negarse, sin exponerse a ser reo de desacato, encierro ilegal,
ocultamiento o secuestro, según el caso. También podrá ser condenado al pago de
indemnizaciones por daños y perjuicios, siendo el Estado solidariamente responsable.

Al juez que conoce del Habeas Corpus le fueron suprimidas dos facultades que le
otorgaba la Ley 5353: Este no puede expedir de oficio un mandamiento de Habeas Corpus
para auxiliar una persona de la que tenga pruebas que se encuentra ilegalmente privada
de su libertad dentro de su jurisdicción; siempre se requerirá de una solicitud con ese fin.
Tampoco puede el juez del Habeas Corpus, luego de comprobar la irregularidad de la
prisión, por ningún motivo, ordenar el encarcelamiento del impetrante.

De las dos modificaciones que ha recibido el Código Procesal Penal, luego de su entrada
en vigencia, una de ellas es la que dispone que son recurribles en apelación las decisiones
que rechacen una solicitud de Habeas Corpus o que denieguen la puesta en libertad.
5. Naturaleza Jurídica de la Libertad Condicional (Código Procesal Penal de la
República Dominicana, Arts. 40, 41, 42, 43, 44, 341). CITAR Y COMENTAR.

Para la aplicación del perdón judicial el Código Procesal Penal exige las siguientes
condiciones:

1- Que la penal imponible no supere los diez años de prisión y,

2- Que se den una de las circunstancias siguientes:

a) Participación mínima del imputado durante la comisión de la infracción;

b) que la víctima u otras personas hayan provocado el incidente;

c) que la infracción se haya producido en circunstancias poco usuales;

d) que el imputado haya participado en la comisión de la infracción bajo coacción;

e) Que la infracción haya provocado un daño socialmente insignificante;

f) que el imputado haya cometido la infracción por error o creyendo que su actuación era
legal o permitida;

g) que el imputado haya actuado motivado en el deseo de proveer las necesidades básicas
de su familia o de sí mismo;
h) que el imputado haya sufrido un grave daño físico o psíquico en ocasión de la comisión
de la infracción;

i) que el hecho cometido, cuente con algún grado de aceptación social.

La libertad condicional, por su parte es una facultad del Juez de la Ejecución Penal.

La libertad condicional solo puede decidirse luego de que el condenado haya cumplido
por lo menos, la mitad de la pena.

A esos fines, un mes antes del cumplimiento del plazo antes indicado, el director del
establecimiento penitenciario debe remitir al juez de la ejecución los informes necesarios
para que éste pueda decidir sobre la misma.

Esos informes se refieren, no solo a las constancias de ingreso al recinto carcelario y el


cómputo de la pena, sino también a la conducta observada por el condenado así como
cualquier evaluación pericial que fuere necesaria.

La libertad condicional puede promoverse de oficio o a solicitud del condenado o su


defensor.

Si la libertad condicional es concedida, el juez dispondrá las condiciones e instrucciones


en que la misma debe cumplirse.

Corresponde al juez de la Ejecución vigilar el cumplimiento de las condiciones impuestas,


quien puede reformarlas, de oficio o a petición del condenado.

El juez, como es natural, puede denegar la solicitud, cuando resulte manifiestamente


improcedente.
El condenado puede, en caso de rechazo, renovar su solicitud, tres después de éste.

El juez puede de nuevo rechazar la solicitud si considera que no transcurrió el tiempo


suficiente para que hayan variado las condiciones que motivaron el anterior rechazo.

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