La equidad de género en la cuidad de Medellín, atendió a una sub-política que pudiera construir

y aterrizar la problemática de una sociedad en desigualdad de género, pero desde hace 16 años la
cual inició hace 16 años atrás.
Esta estrategia, surgió de la necesidad de responder a la gran problemática, que se agudizó en en
la ciudad, por la normalización de ideas erróneas y violentas, referente a los géneros sexuales.
En el año 2018, se evidenció el poco avance que como sociedad habíamos tenido en el tema y de
ahí en adelante, el Concejo municipal y la Alcaldía de Medellín, crearon una política pública,
enfocada en la igualdad de género de las mujeres, para poder así, crear un modelo desarrollo de
que permitiera el abordaje del tema y la participación activa de las mismas mujeres, sujetos de
derechos ante la ley, pero altamente vulneradas en la cotidianidad.
De esta forma, la política pública de género, se enfoca en resolver y acotar las diferentes
problemáticas que tiene que enfrentar las mujeres en la ciudad de Medellín, en donde se le pueda
inculcar a la comunidad el aprendizaje de sus derechos, y de la misma manera, se busca educar a
la sociedad para que rompa estereotipos y le dé a la mujer el reconocimiento al que tiene
derecho, en lo público y en lo privado, en la casa y la calle, en lo laboral y lo institucional, es
decir, que la mujer como género no siga sucumbiendo ante la dominación patriarcal.
Actualmente, la investigación de la Secretaria de las Mujeres, da como resultado que en esta
ciudad, se da un gran nivel de desigualdad en el aspecto de las diferentes oportunidades que
tienen los hombres y las mujeres, de los diversos roles que se les han impuesto a las mujeres,
Siendo consideradas aún, en el siglo 20 como el sexo débil, con menos ingresos económicos por
ser madres, dedicadas a cuidar de sus familias, y prácticamente, relegadas a cumplir órdenes y
deseos de sus familiares, limitando su desarrollo personal y profesional, en muchos casos, lo que
ha llevado a que muchas mujeres, hayan visto afectada su salud mental y emocional, dado que
los estereotipos de la ciudad y del país, se han construido de manera generacional y de manera
arraiga.

Nos lleva a reflexionar que, si no cambiamos nuestra manera de ver el mundo y a la mujer,
nunca llegaremos a comprender que, en esta ciudad, necesitamos buenos seres humanos, más
haya del órgano con que hayan nacido.
Medellín es la ciudad más innovadora de Colombia y por esa misma razón, debemos cumplirle
como ciudad a todos sus habitantes, y visibilizar que las violencias que en ella padecemos, dan
como victimas de violencia intrafamiliar a las mujeres, principalmente, dato histórico que es
imperativo transformar para que como sociedad, podamos hablar de desarrollo y civilización.