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Un pedido para

Filemón

La deserción de los
Gálatas
Un esclavo llamado Onésimo habría huido de
su amo y se habría refugiado junto a Pablo
en busca de protección.
Estando aún encarcelado en
Éfeso, Pablo recibió una visita
inesperada que motivó la
redacción de una nueva carta. «Pablo, preso de Cristo Jesús, y Timoteo, el hermano,
a nuestro querido amigo y colaborador Filemón, a la
hermana Apfia, a nuestro compañero de armas,
Filipos Arquipo, y a la Iglesia de tu casa» (Flm 1-2).

El lugar de residencia de esta comunidad podría ser


Colosas. La despedida de la carta a los colosenses
contiene un mensaje para Arquipo, que es un ministro
del Señor (Col 4,17).
Por eso es probable que ambas cartas vayan
Efeso dirigidas al mismo lugar. Aún si no fue Pablo quien
Colosas
escribió Colosenses, su autor habría buscado una
correspondencia precisa entre Arquipo y su
vinculación con Colosas, para dar una mayor
sensación de autenticidad.
La proporción dentro de la población de
algunas ciudades había crecido hasta
llegar a los dos tercios.
La economía antigua se basaba en la
esclavitud, que proporcionaba una mano de
obra abundante para la producción agraria, la «Roma estaba bastante inquieta por la
explotación de recursos y la construcción. multitud de esclavos que crecía
desmesuradamente, mientras disminuía
cada día la plebe de nacimiento libre»

Tácito, Anales IV,27


La principal forma de conseguir esclavos
era mediante las guerras, cuando los «Los que tenían menos de diecisiete años
miembros de un pueblo vencido eran fueron vendidos. Mientras Fronto hacía la
sometidos a servidumbre por los selección, perecieron de hambre once mil
vencedores. personas, unas por el odio de los guardianes,
que no les daban de comer, y otras porque se
La rebelión judía del 66-70 EC ocasionó, negaban a aceptar lo que les daban. Además
además de la destrucción del Templo y faltaba trigo para socorrer a una multitud tan
una enorme cantidad de muertos, la grande de cautivos. En el transcurso de la
reducción a la esclavitud de miles de guerra se tomaron noventa y siete mil
jóvenes menores de 17 años. Otros prisioneros».
fueron destinados a sucumbir en los
anfiteatros, por la espada o por las fieras. Josefo, Guerra VI,418-420
Otras circunstancias hacían que personas
libres se transformaran en esclavos,
especialmente el endeudamiento.
A partir del imperio de Augusto este
camino de esclavitud se hizo cada vez
menos frecuente, en la medida en que
la sumisión a Roma fue más
espontánea. Una persona podía tener el status
jurídico de esclavo por haber sido
engendrado por padres esclavos.

También un niño abandonado podía ser


criado como esclavo.

O podía convertirse en esclavo cuando


su familia se veía obligada a venderlo
para pagar sus deudas.

Por esta vía también personas adultas


llegaban a ser esclavas.

Niño esclavo (s. II EC).


El propietario no dejaba de obtener beneficios
de la liberación, porque el «liberto» debía
restituir el precio de su compra, por lo cual
Pero se daba con mucha frecuencia seguía ligado a su patrón.
también el caso del ascenso de
algunos esclavos a la condición de
hombres libres a través de un acto Hubo esclavos liberados
jurídico llamado MANUMISIÓN. («libertos») que llegaron a ser
gobernadores de provincia, como
Félix (Hech 23,24-26).
Las consecuencias de esta acción era,
de acuerdo a la ley Aelia Sentia, la
adquisición de la ciudadanía romana «Entre sus libertos, Claudio apreció
en algunos casos, o la simple especialmente al eunuco Posidés, al
condición de «latino», en otros casos. que otorgó durante su triunfo sobre los
bretones, en medio de sus oficiales,
incluso una pica sin hierro. Lo mismo
pasó con Félix, a quien puso al mando
de algunas cohortes y de alas de
caballería y nombró luego gobernador
de la provincia de Judea, y que se
casó con tres reinas».

Suetonio, Vida de Claudio XXVIII


El emperador
ELITE y la Casa del César
Grupos del Senadores
El hecho de ser esclavo no estrato superior Caballeros
siempre era el peor destino, al Aristocracia provincial
menos económicamente. Aristocracia
ciudadana
Pertenecer a una familia Miembros
• Hombres libres
del séquito
garantizaba el sustento diario, ya • Libertos
que al propietario le interesaba • Esclavos con altas
funciones
mantenerlo en buen estado para
un mejor rendimiento laboral.
Había esclavos administradores, MASA Relativamente
acomodados
mejor situados socialmente que Relativamente
hombres libres pobres. pobres
mínimo vital
Absolutamente
pobres
• En el CAMPO debían desempeñar tareas
pesadas y podían ser objeto de una despiadada
La situación de los esclavos explotación.
en la sociedad romana era • Peor aún era la situación de los que trabajaban
muy diversa. en las MINAS. A ellas iban destinados los
condenados (llamados «damnati»).

• Mejor les iba a los esclavos URBANOS, que


desempeñaban profesiones que requerían cierta
capacitación. Algunos se desempeñaban como

asesores jurídicos,
como administradores de casa,
médicos,
pedagogos,
artistas,
músicos,
escribas,
ingenieros
filósofos.

Epicteto, de joven estudió los escritos de los estoicos y después de


conseguir su libertad fue a enseñar filosofía a Roma hasta el año 90 EC.
Era inimaginable para uno profesional, a quien
seguramente se cuidaba por su valor.
La FUGA DE ESCLAVOS
es un indicador del modo Era, en cambio, totalmente comprensible en
como podían ser tratados. aquellos que eran tratados con crueldad.

Éstos debían llegar a un nivel de maltrato


insoportable para arriesgarse a un acto de
consecuencias tan terribles.

las perspectivas para un fugitivo capturado eran:

la flagelación
la marca con hierro candente
el trabajo en las minas
remar en las galeras
la arena del circo
la cruz.
«Yo he huido.
Atrápame. Si me
No era fácil desaparecer sin ser llevas de nuevo a mi
descubierto, ya que muchos esclavos amo Zoninus, serás
llevaban alguna MARCA que permitía recompensado con
reconocerlos o sus dueños elevaban una moneda de oro»
PEDIDOS DE CAPTURA.

«Te ruego muy insistentemente, en nombre de nuestra amistad y del


afecto que siempre me has mostrado, que te preocupes de otro
asunto que me concierne: mi esclavo Dionisio, encargado de mi
biblioteca, persona muy valiosa, me ha robado muchos libros y
luego, creyendo que no podría librarse del castigo, emprendió la
huida. Está en tu provincia. Lo han visto en Narona mi amigo
M.Bolano y otros muchos, pero les dijo que yo le había dado la
libertad y se lo han creído. Si te preocupas de que me lo entreguen,
no sabré decirte cuánto te debo».

Cicerón, Cartas familiares XIII,77


«Las fronteras de la zona con este
derecho han cambiado muchas veces,
pues Alejandro las extendió hasta un
Existía la alternativa de encontrar estadio, Mitrídates, lanzando un arco
REFUGIO EN ALGUN TEMPLO, desde una esquina del tejado, pensó que
como el Artemision de Efeso, había sobrepasado por un poco el estadio,
donde se practicaba el derecho y Antonio duplicó esta distancia
de asilo para cualquier incluyendo en el derecho de asilo una
perseguido. parte de la ciudad. Pero resultó que estas
nuevas fronteras eran perjudiciales y
ponían a la ciudad en manos de los
maleantes, por lo que César Augusto las
anuló».
Estrabón, Geografía XIV,1,24.

Colosas está cerca de Éfeso, como para que Onésimo pudiera


llegar a un lugar de refugio antes de que fuera atrapado. El templo
de Artemisa podía brindarle el asilo requerido.
Sin embargo el fugitivo no lo buscó junto a la diosa, sino ante el
prisionero Pablo.
¿Cómo podría proteger un prisionero acusado de graves delitos a
un esclavo fugitivo? Ambos estarían con graves dificultades legales.
La posición de Pablo, muy frágil jurídicamente, era
sólida en cuanto a la ascendencia sobre Filemón. Pablo
ocuparía el lugar de un mediador, la posición del «amigo
Otro recurso contemplado por del dueño» con poder de intercesión.
la ley era el de suplicar la
«Plinio a su querido Sabiniano: salud. Tu liberto con quien
INTERCESIÓN DE UN
te muestras furioso ha venido y se ha postrado a mis pies
AMIGO DEL DUEÑO. Es el
como se habría postrado a los tuyos, diciendo que no se
caso que atendió Plinio el
quiere alejar de mí. Ha estado llorando mucho tiempo, ha
Joven, y para el cual redactó
estado suplicando mucho tiempo, y también por mucho
una carta a su amigo
tiempo ha guardado silencio; en resumen, me ha hecho
Sabiniano.
creer en su pesar. Realmente creo que se ha corregido,
porque sabe que se ha portado mal (...) Temo que vayas a
creer que, en vez de suplicarte, te lo exija, uniendo mis
súplicas a las suyas; pero las uniré con tanta mayor
abundancia cuanto que le he reprendido con la mayor
energía y severidad, larga y abundantemente,
amenazándole sin rodeos con no intervenir ya nunca en
su favor. Esto vale para él, pues había que asustarle; pero
no para ti, pues quizás te siga suplicando y obteniendo tu
bondad;pero se tratará siempre de una súplica que yo
pueda hacer y tú escuchar. Adiós».

Plinio el Joven, Cartas IX,21


¿Cuál podría ser el caso de No parece que haya tenido una capacitación
Onésimo profesional que lo hiciera valioso ante su dueño.
Ya sea que se hubiese fugado de la casa, o que
su dueño lo hubiese enviado para asistir a Pablo
en la prisión, es claro que no parecía
imprescindible para Filemón:

«En otro tiempo te fue inútil, pero ahora muy útil


para ti y para mí» (Flm 11).

Por lo menos no era creyente al momento de


llegar hasta Pablo, ya que el Apóstol se refiere a
Onésimo como

«al que engendré en la prisión» (10).


« Si te preocupas de que me lo entreguen, no sabré
decirte cuánto te debo».

Cicerón Antes que pueda preguntarle Pablo cuánto le estaría


debiendo como recompensa por la entrega, el Apóstol
Filemón se adelanta a declarar:

«No quiero recordarte que tú también eres mi deudor,


y la deuda eres tú mismo» (19).

El retorno del esclavo se habría producido, pero con la


carta de recomendación que estamos leyendo,
probablemente llevada por el mismo Onésimo:

«Te lo envío como si fuera yo mismo» (12).

Estas palabras son una llamada a la acogida amable y


a la renuncia de cualquier represalia. Confirmarían
que se ha tratado de una huida, tal vez motivada por
un trato poco benévolo.
«Yo querría retenerle conmigo, para que me
sirviera en tu lugar, en estas cadenas por el
Pero las palabras siguientes Evangelio» (13).
podrían entenderse también
como una justificación por En ese caso significaría que Onésimo fue
haber mantenido alejado de enviado por la comunidad de Filemón a ayudar
Filemón a su esclavo a Pablo, como la de Filipos había enviado a
Epafrodito.

Pablo invitó a Filemón a contemplar en adelante


a Onésimo no como esclavo:

«como algo mucho mejor, como un hermano


querido que, siéndolo mucho para mí, ¡cuánto
más lo será para ti, no sólo como amo, sino
también en el Señor!» (Flm 16).

A pesar de su intercesión para una acogida


clemente, Pablo no pidió la liberación de
Onésimo, que no era tan difícil de conceder.
«El que recibió la llamada del Señor
Desde su óptica de inminencia del final de siendo esclavo, es un liberto del Señor;
la historia, se preocupó únicamente de la igualmente, el que era libre cuando
transformación de las relaciones recibió la llamada, es un esclavo de
personales, y no del cambio de las Cristo. ¡Habéis sido bien comprados! No
estructuras sociales os hagáis esclavos de los hombres» (1
Co 7,22-23).

Pablo termina de nuevo su carta con la


esperanza de poder dejar la prisión:

«Prepárame hospedaje; pues espero que


por vuestras oraciones se os concederá
la gracia de mi presencia» (22).

La tensa espera de Pablo ante la definición de su suerte


encontró un desenlace feliz con su liberación de la cárcel.
La gran «puerta abierta» (1 Co 16,9) se le
estaba cerrando rápidamente.
Pero la gravedad de lo padecido
en Efeso le mostraba también
que sus posibilidades
evangelizadoras en la región se La sensación de que había llegado el
habían reducido. momento de partir se va a profundizar con las
noticias de las comunidades que él había
fundado en Galacia

«Me maravillo de que La situación parece más


abandonando al que os comprometida que en Corinto. Ya no se
llamó por la gracia de Cristo, trata de la preferencia por otros
os paséis tan pronto a otro apóstoles considerados superiores, ni de
Evangelio» (Gal 1,6). la ambición de sabiduría o de carismas
extraordinarios.
Lo que preocupa ahora a Pablo es la
disponibilidad de los gálatas a aceptar la
circuncisión, que los Apóstoles de
Jerusalén habían decretado como no
obligatoria (cf. Hech 15,7-29).
• La insistencia con que Pablo presenta la circuncisión
¿Qué los movería a como una recaída en la esclavitud puede estar
aceptar libremente algo indicando que muchos de los que estaban dispuestos
que tanto costaba a la a aceptarla antes habían sido esclavos.
mayoría de los gentiles?
• Tal vez debían a la sinagoga su libertad. De hecho
se conservan testimonios de liberación donde la
sinagoga garantizaba la legalidad del proceso.
Panticapaeum
• La condición impuesta era que el liberto conservara
Mar Negro el contacto con la comunidad judía como «adorador
de Dios».
GALACIA

Contamos con testimonios de manumisión de


esclavos en la sinagoga de Panticapaeum, al norte del
Mar Negro, recogidas en el Corpus de Inscripciones
del Reino del Bosforo (CIRB). Muestran la integración
de las sinagogas en la vida civil y religiosa del lugar.
«En el reinado del rey Tiberio Julio Rhescuporis,
amigo del emperador y amigo de los romanos,
piadoso, en el año 377, el día 12 de Pereitios,
yo, Chreste, que fui esposa de Druso, pongo en
libertad en la casa de oración a mi esclavo
Heraclas, criado en casa, de una vez por todas,
en cumplimiento de un voto para que vaya sin
impedimento ni obstáculo de ninguno de mis
herederos a donde lo desee sin traba alguna, de
acuerdo con mi voto, a condición de que honre
la casa de oración y sea concienzudo en su
asistencia a ella, con el acuerdo de mis
herederos Herclides y Heliconias y también bajo
la custodia conjunta de la comunidad judía»
(CIRB 70)

«Libero en la casa de oración a Elpias, mi


esclavo doméstico, de manera que no se
vea perturbado ni sea atacable por parte de
ninguno de mis herederos, con la condición
de que asista a la casa de oración bajo la
tutela de la comunidad judía, y adore a
Dios» (CIRB 71)
Conservando su fe mesiánica en Jesús, que
Pablo había predicado y que los nuevos
misioneros confirmaban, retomarían su inserción
Si éste era el caso de
en el culto sinagogal.
algunos de los que Pablo
había convertido en Galacia,
No hay que olvidar que hasta el siglo IV EC
estarían entonces retornando
seguirá habiendo creyentes en Jesús en las
a su lealtad hacia la sinagoga.
sinagogas.

«Hasta el día de hoy, en todas las sinagogas del Oriente, existe


entre los judíos una secta que se llama de los Minim, que es
rechazada hasta por los fariseos. Se les denomina vulgarmente
Nazareos. Creen en Cristo, Hijo de Dios, nacido de la Virgen
María, y dicen que es el mismo que padeció bajo Poncio Pilato y
resucitó, el mismo en quien nosotros creemos. Pero queriendo ser
judíos y cristianos a la vez, no son ni judíos ni cristianos».
Jerónimo Epístola 112,13

En el siglo IV ambas comunidades habían consolidado una


identidad que se definía como mutua exclusión.
Pero en tiempos de Pablo la fe mesiánica en Jesús era aún una
variante compatible dentro de un judaísmo muy plural.
Además la circuncisión les permitiría formar parte de una «religión
lícita», en lugar de pertenecer a un grupo cada vez más sospechoso
de ser una «nueva y maléfica superstición» (Suetonio, Nerón XVI).
Eso lo advertía Pablo:

«Los que quieren ser bien vistos en lo humano, ésos os fuerzan a


circuncidaros, con el único fin de evitar la persecución por la cruz de
Cristo. Pues ni siquiera esos mismos que se circuncidan cumplen la
ley» (Gal 6,12-13).

La confrontación entre •Según los nuevos misioneros no bastaría la fe en Jesús para


Pablo y los recién llegar a ser santos en la presencia del Dios Santo (Lev 19,2),
llegados estaba como predicaba Pablo.
centrada en el tema de • Sería necesaria también la circuncisión, pues ésta convertía en
la justificación. prosélitos a los temerosos de Dios, que llegaban así a ser hijos
de Abraham, y herederos de las promesas reservadas para su
descendencia.
• Además de cuestionar la legitimidad del mensaje de Pablo, los
misoneros habrían objetado su autoridad de Apóstol, ya que no
sería más que el auxiliar de Bernabé en su actividad en Antioquía
(cf. Hech 11,26).
En ella cambia el esquema epistolar, comenzando no
con la bendición o acción de gracias esperada, sino con
una sorpresiva fórmula de MALDICIÓN contra
Por medio de una dura carta, cualquiera que deforme la Buena Noticia anunciada:
Pablo explicita su primer
esbozo de una «teología de la
«Aún cuando nosotros mismos o un ángel del cielo os
justificación».
anunciara un Evangelio distinto del que os hemos
anunciado, ¡sea anatema!» (Gal 1,8).

Usa luego un ARGUMENTO HISTÓRICO que consiste


en una serie de referencias autobiográficas:

El no es un mensajero de Jerusalén enviado a través


de Antioquía, sino un Apóstol de parte de Dios por
medio del Resucitado (Gal 1,11-17).
Los notables de Jerusalén confirmaron su Evangelio
sin más imposición que la solidaridad con los pobres
(Gal 2,6-10).
En Antioquía Pedro había cedido a presiones de
emisarios de Santiago, y por eso Pablo puso las cosas
en claro reprochándoselo en público (Gal 2,11-14).
«Bienaventurado apóstol Pablo, tú que censuraste a
Pedro de simulación porque se apartó de los gentiles por
miedo de los judíos que vinieron del grupo de Santiago,
Este último punto muestra ¿por qué, contra tu convicción, te ves tú obligado a
cómo la polémica le hace circuncidar a Timoteo, hijo de hombre gentil y él mismo
perder la objetividad. gentil; pues ni era judío, ni había sido circuncidado? Me
responderás: «A causa de los judíos que había por
aquellos lugares». Entonces, ya que te permites a ti
mismo circuncidar a un discípulo que viene de los
gentiles, permite también a Pedro, tu predecesor, hacer
Pablo recurre luego a la algunas cosas por causa de los creyentes del
EXPERIENCIA judaísmo».
ESPIRITUAL. Si a los Jerónimo Epístola 112,9
creyentes de Corinto los
fascinaba una sabiduría
humana que resolvía todo, Pablo contrapone a los logros humanos el poder
los creyentes de Galacia otorgado gratuitamente por Dios:
estaban también
fascinados (3,1), pero por «¿Habéis pasado en vano por tales experiencias?
la posibilidad de llegar a ¡Pues bien en vano sería! El que os otorga, pues, el
ser justos ante Dios por la Espíritu y obra milagros entre vosotros, ¿lo hace
observancia de preceptos porque observáis la ley o porque tenéis fe en la
religiosos. predicación?» (Gal 3,4-5).
«La prueba de que sois hijos es que Dios ha enviado a
nuestros corazones el Espíritu de su Hijo que clama: ¡Abbá,
Padre! De modo que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo,
Los gálatas no necesitan
también heredero por voluntad de Dios» (Gal 4,6-7).
de la circuncisión para
ser hijos de la promesa.
Pablo emprende entonces una argumentación bíblica
centrada en la promesa hecha a Abraham de ser una
Los misioneros instaban
«bendición para todas las naciones» (Gn 12,3). Ésta no
a los gálatas a completar
puede apoyarse más que en la fe, porque la Ley es fuente
su fe, porque si bien
de maldición:
«creyó Abram en YHWH,
el cual se lo reputó por
«Pues dice la Escritura [Dt 27,26]: Maldito todo el que
justicia» (Gn 15,6), sólo
no se mantenga en la práctica de todos los preceptos
alcanzó la perfección
escritos en el libro de la Ley» (Gal 3,10).
cuando aceptó como
«señal de la alianza» la
Pero Pablo hace una lectura estrecha de la tradición de
circuncisión (Gn 17,1.11).
Abraham, sin un apoyo bíblico sólido, al interpretar al
heredero de la promesa:

«No dice: «y a los descendientes», como si fueran


muchos, sino a uno solo, a tu descendencia, es decir,
a Cristo» (Gal 3,16).
Y va más lejos al idear un simbolismo a partir de
las dos mujeres de Abraham:

«Representan dos alianzas; la primera, la


del monte Sinaí, madre de los esclavos, es
Agar, (pues el monte Sinaí está en Arabia)
y corresponde a la Jerusalén actual, que es
esclava, y lo mismo sus hijos. Pero la
Jerusalén de arriba es libre; ésa es nuestra
madre» (Gal 4,24-26).

Sin embargo, al sostener que «Porque toda la Ley alcanza su plenitud en este
«cuantos buscan la justicia en la solo precepto: amarás a tu prójimo como a ti
ley, se han apartado de la mismo» (Gal 5,14).
gracia» (Gal 5,4), no suprime las
obras:
Dios, queriendo que el hombre realice buenas
obras, suscita la fe y otorga la fuerza de su
Espíritu para que pueda hacerlas efectivamente.
Pero ya no son «obras de la Ley», sino «obras de
la fe».
«Llegué, pues, a Tróada para predicar el Evangelio de
Cristo» (2 Co 2,12),
Pablo se desplazó de • tal vez también para preparar su visita a Macedonia:
Éfeso hacia Tróada
«mi espíritu no tuvo punto de reposo, pues no encontré a
mi hermano Tito, y despidiéndome de ellos, salí para
Macedonia» (2 Co 2,13).
Recordemos que la primera evangelización de Filipos
había partido desde allí (Hech 16,11-12).

La mente y el corazón de Pablo no estaba en Macedonia, sino en las


noticias que debía traerle Tito, que se demoraba en llegar. ¿De dónde
debía venir?

• De Corinto. Algún tiempo atrás había llevado una carta


apologética (2 Corintios 2,14 - 7,4) y había regresado con malas
noticias.
• La segunda visita de Pablo había tenido peor resultado, por lo
que había escrito la carta polémica (2 Co 10-13).
• Como había tomado «la decisión de no ir otra vez con tristeza»
(2 Co 2,1), habría enviado a Tito para tantear el ambiente.
«El Dios que consuela a los humillados, nos consoló con la
llegada de Tito, y no sólo con su llegada, sino también con el
Y finalmente llegó... con consuelo que le habíais proporcionado, comunicándonos
buenas noticias vuestra añoranza, vuestro pesar, vuestro celo por mí hasta
el punto de colmarme de alegría» (2 Co 7,6-7).
La carta polémica había
hecho efecto en la
comunidad, motivando Y éste responde con una carta de RECONCILIACIÓN:
un castigo para el que
había ofendido al
Apóstol (2,6) y un pedido «¡Qué interés y qué disculpas, qué enojo, qué temor,
de perdón ante Pablo. qué añoranza, qué celo, qué castigo! En todo habéis
mostrado que erais inocentes en este asunto» (2 Co
2,11).

Tito había sido acogido de un modo muy distinto. No había


sido enviado a suplicar, como antes, sino a imponer órdenes
de Pablo. Y lo había logrado:

«Y su corazón se inclina todavía más hacia vosotros al


recordar la obediencia de todos vosotros y cómo le
acogisteis con temor y temblor. Me alegro de poder
confiar totalmente en vosotros» (7,15-16).
«Pues hemos tenido sobre nosotros mismos la
sentencia de muerte, para que no pongamos
En la carta Pablo hace una
extensa acción de gracias, no nuestra confianza en nosotros mismos, sino en
sólo por la reconciliación con su Dios que resucita a los muertos» (2 Co 1,9).
comunidad, sino también por el
feliz desenlace de la terrible
La obediencia impuesta por el Apóstol debió
experiencia de la prisión:
suponer la partida de los «super-apóstoles», sin
la cual no hubiera sido posible la reconciliación.
Satisfecho, Pablo pide que la comunidad
perdone también al que lo había ofendido al
acoger a los competidores:

«Os suplico, pues, que reavivéis la caridad para


con él» (2 Co 2,8).

Después de enviar la carta, el terreno quedaba


preparado para que la tercera visita anunciada
no volviera a ser penosa.
En medio de tales preparativos, prepararía un
nuevo proyecto apostólico. Y para eso llamó a un
escriba y le dictó la más larga de todas sus cartas:
Pablo llegaría a Corinto con
delegados de Macedonia y
con la colecta allí recaudada «Una vez terminado este asunto, y entregado
(2 Co 9,4), para juntar todo y oficialmente el fruto de la colecta, partiré para
llevarlo a Jerusalén. España, pasando por vosotros» (Rom 15,28).

«Mas ahora, no teniendo ya


campo de acción en estas
regiones [Efeso: puerta de
Oriente, centro geográfico
del mundo]

y deseando vivamente
desde hace muchos años
ir donde vosotros [Roma:
centro político del mundo]

cuando me dirija a España


[Finis terrae]» (Rom 15,23-24).
El Apóstol de Cristo Jesús iría a predicar a la
capital del Imperio Romano.

Abril de 2009

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