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LOS ENEMIGOS DE LA FE -25 OCT 20

Si no hay enemigos no habría lucha, el diablo siempre va a tratar de atacar


en los puntos más débiles, por eso necesitamos saber dónde trabajar para
desarrollar nuestra fe.

1 Timoteo 6: 12 “Pelea la buena batalla de la fe, echa mano de la vida eterna,


a la cual asimismo fuiste llamado, habiendo hecho la buena profesión delante
de muchos testigos”.

La fe tiene enemigos que impiden que tu fe crezca:

1. La incredulidad, la duda y el temor

La incredulidad puede ser voluntaria e involuntaria. La voluntaria es aquella


que sucede por estar renuente a la Palabra de Dios. La cura es obedecer la
Palabra. La incredulidad involuntaria es aquella que es por falta de
conocimiento, la cura es conocer la Palabra de Dios.

Hay tres ejemplos en la Biblia que Jesús experimentó con personas a su


alrededor. Primer ejemplo:

Mateo 14:29 – 30 Pedro camina sobre las aguas

Si algo tenía Jesús es que Él te salva, te sana, te enseña y después te


reprende, Pedro se atrevió a ir, comenzó a caminar, pero quitó la mirada de
Jesús, tuvo miedo y miró las circunstancias, se desenfocó, dejó de ver a Jesús
y se hundió. Aunque tú te hundas Jesús te va a dar su mano y te va a sacar,
pero después le regaña, porque no obedeció, no creyó, tuvo duda y tuvo
temor.

Segundo ejemplo:

Mateo 17:14 – 17 Jesús sana a un muchacho lunático.

Usted a veces viene a la iglesia y quiere todos sean perfectos, pero ni los de
Jesús fueron perfectos. Alguien de la iglesia te va a llamar la atención o el
sacerdote, pero igual vamos a orar por ti, igual te vamos a ayudar, Jesús no
dejaba de hacerlo. Ellos por no creer que fue que no pudieron liberar a ese

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lunático, si estas atormentado por el mal tienes que buscar a alguien que
crea.

Tercer ejemplo:

Marcos 4:39 – 41 Jesús calma la tempestad

Jesús se durmió en la barca, había una fuerte tormenta, los discípulos lo


levantaron, porque no creyeron. Con incredulidad y temor es imposible.

Usted al único que le tiene que temer es al Señor, con un temor reverente,
del resto no debe temer a nada ni a nadie. No permita que el espíritu de
temor le domine. Usted sí se puede dominar, porque a usted le dieron el
espíritu de dominio propio.

El diablo conoce a los cobardes, sabe cuándo usted le tiene temor, el diablo
no ataca a todo el mundo, ataca a quien le impide seguir haciendo mal. Si
usted es un ganador de almas, a usted es a quien el diablo más va a atacar,
pero si usted no hace nada no va a perder el tiempo con usted.

No deje de hacer para que el diablo no se meta con usted, porque eso es
espíritu de cobardía. El Señor nos manda a pelear la buena batalla de la fe,
esa es la vida del creyente.

¿Cómo tratamos la duda e incredulidad?

1. Reconocerlo
2. No confesarlo

No confieses que eres un temeroso, que eres incrédulo, no hables la


circunstancia, háblale a la circunstancia.

3. Pelea con la Palabra, con la oración y el ayuno. Esa incredulidad y duda se


va a acabar en su vida.

4. Si es necesario pida ayuda en la iglesia, pero esto como último recurso.

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Marcos 11:23 Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este
monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere
que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho.

Rechace la duda, la duda nace en el corazón, no nace en la mente, dígale al


problema que se vaya de su vida, sin dudarlo, porque la duda no permite que
la fe funcione, rechace la duda, no crea a las circunstancias más que a las
promesas de Dios.

Otro enemigo de la fe 2. Falta de conocimiento

Romanos 10:17 La fe viene por la Palabra de Dios, no viene por la oración. No


conocer la Palabra te vuelve vulnerable a los ataques de satanás.

Satanás le ofreció muchas cosas a Jesús pero Él le respondió siempre “escrito


está”, le respondió con la Palabra, no conocer la palabra te hace vulnerable.
Necesitas conocer la Palabra, escudriñar la Palabra.

Oseas 4:6 Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Desechar el


conocimiento es obviar la Palabra, recibir la Palabra y echarla por tierra, no
tenerla en cuenta. Quizá tienes en casa muchas versiones de la Palabra pero
no las lees. Hasta cuándo no vas a saber?, lee la Palabra, escudríñala,
disfrútala.

Juan 8:32 y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.

La única manera de ser libre es a través de la Palabra, la verdad te hace libre,


no necesitas ir a 20 encuentros, necesitas conocer la Palabra. El
conocimiento de Dios nos hace libres, podemos luchar contra la ignorancia
solo con el estudio
de la Palabra de Dios. Si no tienes conocimiento de la Palabra de Dios tu fe no
va a funcionar.

3. La Preocupación otro enemigo de la fe

Filipenses 4:6 Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante
de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.

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La preocupación es estar pensando que algo malo va a suceder antes de que


ocurra. La preocupación trae enfermedad, hay personas que por todo se
preocupan, eso afecta nuestro ánimo, provoca temor.

Preocuparse es pecado, porque es falta de confianza en Dios, es decirle al


Señor que Él no lo puede hacer, que lo haremos en nuestras fuerzas.

En tus fuerzas quieres hacer muchas cosas y terminas preocupado.

1 Juan 4:4 Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor
es el que está en vosotros, que el que está en el mundo.

Jesús es mayor que cualquier cosa, es más grande que el diablo, que el
pecado, que la circunstancia, que el problema. Todo tiene solución en Cristo
Jesús. La preocupación puede matar a una persona luego de una depresión.
Con preocupación quién va a tener fe, Dios está contigo, está a tu lado, no
hay motivo para que vivas preocupado, sólo cree en sus promesas, confía en
que Él no te defraudará.

Él dijo que nos lleva de victoria en victoria, de triunfo en triunfo, a veces


parece que estuviéramos perdiendo, pero tenemos la victoria.

4.otro enemigo de la fe es Falta de perdón

Mateo 18:21 – 22 cuantas veces debo perdonar….

La falta de perdón trae daño a nuestra vida, la falta de perdón enferma, hay
muchas personas que están en un lecho, en una cama sin poder levantarse,
pero no tienen ningún diagnóstico médico, lo que necesitan es perdonar para
poder levantarse.

La falta de perdón seca los huesos, trae enfermedades como la artritis,


gastritis, colitis. Si uno no perdona, inmediatamente viene el diablo y entra a
operar.

Proverbios 17:11 El rebelde no busca sino el mal,


Y mensajero cruel será enviado contra él.

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El diablo manda a un mensajero cuando uno no perdona, viene y atormenta


a traer más falta de perdón.

La Biblia nos dice que caminemos en amor, el amor no cuenta el mal que te
hayan hecho.

1 Corintios 13 El amor soporta todo, no toma en cuenta el mal hecho.

1 Samuel 16:14 nos habla Dios permito que un espíritu malo atormentaba a
Saúl, por estar molestando a David, Saúl hervía de enviada para con David,
quien tuvo oportunidad de hacer daño a Saúl pero no lo hizo, porque no puso
sus manos sobre el Ungido de Jehová. Si abres la puerta a satanás con falta
de perdón Dios se retira.

La falta de perdón estorba tu fe.

Marcos 11:26 Porque si vosotros no perdonáis, tampoco vuestro Padre que


está en los cielos os perdonará vuestras ofensas.

Nuestras oraciones tienen estorbo si no has perdonado al prójimo, a tu


pareja. Si perdonas mucho se te perdonará mucho, si no perdonas no serás
perdonado, con la misma vara que mides serás medido. No pienses que
recibirás cosa alguna del Señor si no has perdonado. Dios no envió a su hijo al
mundo para condenar al mundo, lo envió para que fuésemos salvos en Él.

El amor cubre multitud de faltas, perdona, edifica. El amor no condena, no


hace nada indebido, no se enoja, establece en ti un sistema de perdón
automático. Pídele al Señor que las ofensas te resbalen para guardar tu
corazón, si te ofendes es porque estás en la carne.

Tu honra es pasar por alto la ofensa. Dios no habita en un ambiente de queja,


sino de alabanza y adoración, perdonemos de la manera que Cristo nos
perdonó, el amor de Él cubrió multitud de pecados.

El perdón olvida la ofensa por completo, no se vale decir que perdonas a la


persona pero que no se te olvida. Hay parejas que les cuesta perdonarse por
pequeñeces.

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Isaías 43:25Yo, yo soy el que borro tus rebeliones por amor de mí mismo, y
no me acordaré de tus pecados.

Nuestros pecados Él los borró, te perdonó y no se acuerda más de ellos, tú


también olvídalos, eres nueva criatura en Cristo. No vivas en tus errores
pasados, perdona y olvida para que puedas ver tu fe funcionando, vive en
el presente y prepárate para todo lo que Dios tiene en el futuro.

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