Está en la página 1de 5

Biografía de Aristóteles

Aristóteles nació en Estagira, en Tracia, el año 384-3 a. C., según Diógenes Laercio,
quien nos dice que era hijo de Nicómaco y Efestiada, y que su padre ejercía la medicina
en la corte del rey Amintas (II) de Macedonia, "por causa de la medicina y por amistad", lo
que se ha tratado de asociar con el posterior interés naturalista de Aristóteles. Diógenes
Laercio nos describe a Aristóteles como "el discípulo más legítimo de Platón, y de voz
balbuciente... que tenía las piernas delgadas y los ojos pequeños, que usaba vestidos
preciosos y anillos, y que se cortaba la barba y el pelo". (Vidas de filósofos ilustres, libro
V, 1).

Aristóteles en la Academia
Poco sabemos de la educación recibida por Aristóteles en su juventud, aunque debió ser
la propia de los jóvenes griegos de su época. A los diecisiete años, el 368 a. C., se
trasladó a Atenas donde se incorporó a la Academia de Platón en la que permanecería
durante veinte años. A pesar de algunas anécdotas que se hacen eco de un supuesto
enfrentamiento entre Platón y Aristóteles, antes de la muerte de aquél, es poco probable
que tal enfrentamiento haya podido producirse, dado que todas las referencias que
tenemos de Aristóteles hacia Platón hacen gala de un gran respeto y admiración hacia el
maestro, pese a las discrepancias teóricas que luego llevaron a su separación doctrinal.
El hecho de que la crítica contemporánea haya puesto de manifiesto el carácter histórico,
evolutivo, de la obra aristotélica hace aún más insostenible dicha hipótesis. Sabemos que
Aristóteles atravesó por una fase profundamente platónica antes de desarrollar sus
propias concepciones filosóficas, asumiendo como propia, por ejemplo, la teoría de las
Ideas de Platón, antes de haber procedido a su crítica, como claramente se pone de
manifiesto en el diálogo aristotélico "Eudemo", una de sus obras de juventud.
A la muerte de Platón, en el - 347, Espeusipo, sobrino de Platón, se hizo cargo de la
dirección de la Academia, bien por designación directa de éste o bien por decisión de sus
condiscípulos, imprimiendo una orientación de carácter místico-religioso a las actividades
de la Academia, lo que no fue del agrado de Aristóteles, quien la abandonó (ya fuera por
esta razón, ya por sentirse frustrado al no haber sido designado él mismo como director,
como sostienen otros biógrafos).

Aristóteles tras el abandono de la Academia


Aristóteles se dirigió entonces, en compañía de Jenócrates, a Assos, donde reinaba el
tirano Hermias (con quien, al parecer, entabló profunda amistad) fundando allí una
sección de la Academia que él mismo dirigió durante tres años. Fue allí probablemente
donde comenzó a desarrollar sus propias opiniones contrarias a la teoría de las Ideas. De
esta época es, en efecto, su obra "Sobre la filosofía", en la que aparecen los primeros
elementos críticos de la teoría de las Ideas. También allí contrajo matrimonio con Pythia,
hija adoptiva o sobrina de Hermias, con la que llevó una vida feliz hasta la muerte de ésta.
Se desconoce cuando tuvo lugar este acontecimiento, pero sabemos que Aristóteles tras
la muerte de Pythia vivió con Herpilis, con la que tuvo un hijo llamado Nicómaco.
Tres años después, en el 345-4, se trasladó a Mitilene, en la isla de Lesbos, entrando allí
probablemente en relación con Teofrasto, que sería posteriormente el más destacado
discípulo y continuador de la obra de Aristóteles. Allí siguió con su actividad filosófica
hasta que en el año 343-2 fue llamado por Filipo de Macedonia para hacerse cargo de la
educación de su hijo Alejandro, el futuro Alejandro Magno, que tenía entonces trece años.
Probablemente dicho encargo se debiera más a la amistad y parentesco con Hermias,
aliado de Filipo, y asesinado hacía poco mediante una trampa tendida por los persas, que
al pasado de su familia en la corte de Macedonia. Allí permaneció siete u ocho años,
hasta el 336-5, cuando Alejandro subió al trono, regresando entonces Aristóteles a
Atenas.

Regreso a Atenas y creación del Liceo


Una vez en Atenas, en el 335, fundará su propia escuela, el Liceo, una comunidad
filosófica al estilo de la platónica , llamada así por estar situada dentro de un recinto
dedicado a Apolo Likeios. Además del propio edificio contaba con un jardín y un paseo
(perípatos) del que los aristotélicos recibirán el nombre de peripatéticos, ya sea porque
Aristóteles impartiera sus enseñanzas paseando, como recoge Diógenes Laercio ("...
tomó en el Liceo un sitio para pasear, y paseando allí hasta la hora de ungirse los atletas,
filosofaba con sus discípulos, y de este paseo fue llamado peripatético"), o porque,
simplemente, se impartieran dichas enseñanzas en el paseo. (Excavaciones realizadas a
mediados de los 90 en Atenas, cerca de la la Plaza Sintagma, dejaron al descubierto los
cimientos de varios edificios, como se puede observar en la imagen, que los arqueólogos
consideran pueden ser los restos del Liceo de Aristóteles). Según la tradición el orden de
las actividades en el Liceo estaba fuertemente establecido, dedicándose las mañanas a
las cuestiones más difíciles de carácter filosófico, reservadas para los discípulos, y las
tardes a las lecciones de retórica y de dialéctica, entre las que se podía encontrar un
público más amplio.
A lo largo de este período Alejandro Magno realiza sus campañas militares que tienen
como una de sus consecuencias la unificación de la Hélade, con la consiguiente pérdida
de autonomía política de las ciudades estado, entre las que se contaba Atenas. El hecho
de que Aristóteles hubiera sido su preceptor, así como su amistad y parentesco con
Hermias, le irá convirtiendo en un personaje no grato para muchos atenienses. A la
muerte de Alejandro, en el año 323, sintiéndose amenazado por los crecientes
sentimientos antimacedónicos, Aristóteles abandonará Atenas y se retirará a Calcis ("para
que los atenienses no vuelvan a pecar contra la filosofía", dicen que dijo, en clara
referencia a la condena de Sócrates) a una propiedad de su difunta madre, en la isla de
Eubea, de donde era originaria. Allí morirá Aristóteles, el 322 a. C., de una enfermedad
del estómago.
El filósofo griego Aristóteles (384 a. C. – 322 a. C.) desarrolló muchas teorías sobre la
naturaleza de la física. Estas teorías comprendieron lo que Aristóteles describió como
los cuatro elementos. Se refirió con gran detalle a las relaciones entre estos elementos y a
su dinámica.
La principal fuente de información es la Física de Aristóteles donde desarrolla sus ideas
sobre física. Los principios fundamentales de la física de Aristóteles son:

1. Lugares naturales: cada elemento querría estar en una posición distinta relativa al
centro de la Tierra, que también es el centro del universo.
2. Gravedad/levedad: para lograr esta posición, los objetos sienten una fuerza hacia
arriba o hacia abajo.
3. Movimiento rectilíneo: un movimiento como respuesta a esta fuerza es en una
línea recta a una velocidad constante.
4. Relación entre la velocidad y la densidad: la velocidad es inversamente
proporcional a la densidad del medio.
5. El vacío es imposible de imaginar: el movimiento en un vacío es infinitamente
rápido.
6. El éter: todos los puntos del espacio están llenos con materia.
7. Teoría del continuo: si existieran los átomos esféricos habría un vacío entre ellos,
por lo que la materia no puede ser atómica.
8. Quintaesencia: los objetos por encima de la Tierra no están formados de materia
terrenal.
9. Cosmos incorruptible y eterno: el Sol y los planetas son esferas perfectas, y no
cambian.
10. Movimiento circular: los planetas se mueven en un movimiento circular perfecto.

Física aristotélica
Aristóteles enseñó que los elementos a partir de los cuales se formó la Tierra fueron
distintos de los que formaron el cielo y el espacio sideral.1 También enseñó que
la dinámicaestá principalmente determinada por las características y naturaleza de
las sustancias de las que está formado el objeto que se desplaza.1
Elementos
Aristóteles creía que la Tierra estaba formada por la combinación de
cuatro elementos o compuestos básicos: tierra, aire, agua y fuego.2 También sostuvo que
todos los cielos, y cada partícula de materia en el universo, estaban formados a partir de
otro elemento, que era el quinto y que él llamó 'aether' (también designado como "éter"),2
el cual se suponía que no tenía peso y era "incorruptible". 2 Al éter también se lo llamaba
'quintaesencia' - o sea la "quinta sustancia".3
Se consideraba que las substancias pesadas tales como el hierro y los metales estaban
principalmente formadas por el "elemento" tierra, con una cantidad reducida de materia de
los otros elementos. Se sostenía que otros objetos, más livianos y/o densos eran menos
terrenos, y por lo tanto estaban compuestos con mayor proporción de los otros
elementos.3 Los humanos estaban constituidos con una combinación de todas las
substancias, con la excepción del éter, pero cada persona tenía una proporción distintiva
de los elementos que era única para cada persona; o sea, no había una cantidad
predefinida de cada substancia en el cuerpo humano.3
Dinámica
Aristóteles sostenía que cada uno de los cuatro elementos que forman el mundo poseen
afinidad entre sí y por lo tanto que tienen una tendencia a aglutinarse, y que solo era
posible evitar esta preferencia por agruparse con otros elementos similares mediante la
acción de alguna fuerza que se les opusiera, ya que la tendencia es tan natural como el
hecho de que dos imanes se repelan, o que la lluvia caiga desde el cielo. Por ejemplo,
dado que el humo está principalmente formado de aire, es natural que se eleve para
ponerse en contacto con el aire que forma el cielo. Él también era de la opinión de que los
objetos y la materia solo se podían desplazar siempre y cuando una forma de energía los
estuviera empujando en una dirección dada.1 Por lo tanto, si se eliminaran todas las
fuerzas que están aplicadas sobre la Tierra, como al lanzar una piedra, entonces el
movimiento no se produciría.1 Esta idea tenía fallas que ya fueron indicadas en la época
en la que se formuló el concepto. Mucha gente ponía en duda esta idea, preguntando
cómo era que un objeto como una flecha podía seguir moviéndose hacia adelante una vez
que había dejado atrás el impulso que le había transferido la cuerda del arco. Aristóteles
propuso la idea de que las flechas y otros objetos creaban una especie de vacío en su
parte posterior que resultaba en una fuerza que los hacía desplazar hacia delante, 1 lo cual
era consistente con su interpretación del movimiento como una interacción del objeto que
se desplaza y el medio a través del cual se mueve. Dado que el movimiento turbulento del
aire en proximidades de una flecha es sumamente complejo, y todavía no era
comprendido, toda discrepancia entre la teoría y la realidad podía ser camuflada en forma
elegante.
Dado que Aristóteles colocaba al medio en el centro de su teoría del movimiento, él no
podía comprender las ideas del vacío que eran básicas para la teoría atómica
de Demócrito. Un vacío es un espacio que no contiene nada, y dado que Aristóteles
aseveraba que el movimiento requiere de un medio, él concluía que el vacío era una idea
incomprensible. Aristóteles creía que el movimiento de un objeto es inversamente
proporcional a la densidad del medio. Cuanto más tenue es el medio, más rápido será el
movimiento. Si un objeto se moviera en el vacío, Aristóteles creía que debía desplazarse
en forma infinitamente rápida, de forma tal que la materia rellenara todo espacio vacío en
el instante en que se produce.4
Movimiento y gravitación
Aristóteles no reconoció el principio de inercia, que no fue claramente formulado
hasta Galileo aunque se había ya algunos antecedentes. Así Aristóteles creía que un
cuerpo sulunar solo podía estar en movimiento rectilíneo uniforme si continuamente
actuaba sobre él una fuerza en contradicción con la primera ley de Newton. La
experiencia muestra que si bien en condiciones ordinarias no es sencillo mantener un
cuerpo en movimiento rectilíneo uniforme, eso sucede precisamente porque existe una
fuerza que se opone al movimiento, la fricción. Aristóteles no concebía la posibilidad del
vacío, es decir, una región desprovista de materia y por tanto de fuerzas fricción, así que
no hizo el experimento mental de imaginar que pasaría con un cuerpo moviéndose a
través de él, y esa esencialmente fue la razón por la que no acertó a reconocer el principio
de inercia.
En presencia de medios dotados de fricción Aristóteles creía que la fuerza necesaria para
mantenerlo en movimiento era proporcional a la masa e inversamente proporcional a
viscosidad o densidad del medio. Matemáticamente, las conjeturas de Aristóteles habrían
llevado a una relación del tipo:
Donde m es la masa del cuerpo, v la velocidad del movimiento uniforme, ρ la densidad del
medio y η viscosidad del medio. Aristóteles no presenta una definición exacta de densidad
o viscosidad, si interpretamos los términos usados por Aristóteles por sus equivalentes
modernos, la segunda ecuación guarda alguna relación con fuerza sobre una partícula
que se mueve en el seno de un fluido a baja velocidad (en régimen laminar y
no turbulento):
Aunque nótese que Aristóteles erróneamente consideraba que la fuerza debía ser
proporcional a la masa m en lugar de al coeficiente aerodinámico correspondeinte Kc que
es independiente de la masa y sólo depende de la geometría o forma del cuerpo.
Algunas ideas erróneas similares llevaron a Aristóteles a pensar que la velocidad de caída
de un cuerpo era a partir de cierto punto más o menos constante y proporcional a la masa
(así los cuerpos más pesados caerían más rápidamente que los cuerpos más ligeros).
Esta idea es errónea ya que todo cuerpo que no ha alcanzado su velocidad límite de
caída cae aceleradamente durante casi toda su trayectoria. La idea aristotélica sólo sería
correcta para los cuerpos cayendo a su velocidad límite en el seno de un fluido muy
denso que viene dada aproximadamente por:
Aunque en presencia de flujo turbulento (como sucedería en el aire), la expresión
tampoco se ajusta a la idea aristotélica ya que la velocidad límte de caída sería:
Por lo que la densidad del medio no sería inversamente proporcional a la velocidad, sino
inversamente a su cuadrado.

También podría gustarte