Está en la página 1de 106

MINERALOGÍA

Mineralogía

La mineralogía es la rama de la geología que estudia las propiedades físicas y


químicas de los minerales que se encuentran en el planeta en sus diferentes
estados de agregación. Un mineral es un sólido inorgánico de origen natural,
que presenta una composición química no fija, además tiene una estructura
cristalina. Una observación importante es el caso del mercurio que debido a la
disposición de sus átomos es un mineraloide.

El estudio de los minerales se puede dividir en cinco grandes grupos:

Mineralogía general: estudia la estructura, cristalografía, y las propiedades de


los minerales.

Mineralogía determinativa: aplica las propiedades fisicoquímicas y


estructurales a la determinación de las especies minerales.

Mineralogénesis: estudia las condiciones de formación de los minerales, de


qué manera se presentan los yacimientos en la naturaleza y las técnicas de
explotación.

Mineralogía descriptiva: estudia los minerales y los clasifica sistemáticamente


según su estructura y composición.

Mineralogía económica: desarrolla las aplicaciones de la materia mineral;


como su utilidad económica, industrial, gemológica, etcétera.

Mineralogía topográfica: estudia los yacimientos minerales de una región o


país determinado, describiendo las especies presentes y también los hechos
culturales e históricos asociados con ellos y con su explotación.

Por tanto, cualquier mineral, por ejemplo el carbono, puede cristalizar en


diferentes estructuras, véase cristalografía, mediante el sistema cúbico; en este
caso se le denomina diamante, o si cristaliza en el sistema hexagonal,
conforma el grafito. Basta su apariencia para reconocer que son dos minerales
diferentes, aunque es necesario un estudio más profundo para comprender que
poseen la misma composición química.

También se encuentran varios minerales que pueden presentar dualidad en su


comportamiento y a estos se los denomina mineraloides.
Características diagnósticas

Cuando se tiene una muestra de mano recolectada en el campo, el geólogo


tiene a su disposición varias propiedades, entre ellas: forma cristalina, brillo,
raya, dureza (escala de Mohs), exfoliación o fractura, peso específico, color,
etc.

La exfoliación de un mineral se presenta cuando en su estructura cristalina, hay


enlaces más débiles que otros, por lo que se generan planos a lo largo de los
cuales el mineral tiende a romperse cuando se le aplica tensión. Los
minerales biotita y moscovita ilustran muy bien esta característica.

El color no es una característica muy confiable, ya que hay minerales como


el cuarzo o la fluorita, que tienen diversos colores. En cambio, la raya es el
color de un mineral en polvo, la cual se puede obtener al frotar el mineral contra
una pieza de porcelana no vidriada. Esta característica es más fiable.

Historia de la mineralogia

En un principio, el hombre fijó su atención en los minerales que podían servir


para satisfacer sus necesidades. Desde el primer momento utilizó el sílex,
primero a partir de depósitos superficialñes y más adelante incluso mediante
explotaciones subterráneas. Mucho más adelante descubrió los metales
nativos como el oro y la plata que se deformaban fácilmente debido a su
maleabilidad. Más tarde el cobre nativo, que posteriormente aprendió a extraer
de algunos de sus minerales, especialmente de la malaquita y de la azurita.
Posteriormente descubrió la aleación de éste con el estaño dándole más
dureza, y el hierro que fue fundamental para impulsar la civilización. También,
en el neolítico, comenzó la utilización de minerales como la variscita para
fabricar adornos. Los metales y su empleo han dado nombre a varios períodos
de la Prehistoria como Edad del Cobre (calcolítico), Edad del Bronce y Edad
del Hierro. Se han encontrado pinturas egipcias de más de 5000 años en las
que se representan artesanos trabajando minerales. A comienzos del Neolítico
se empezaron a grabar signos a las piedras brillantes para aumentar sus
poderes mágicos y al final de la Prehistoria se convirtieron en una specie de
moneda que intercambiaban con cuanto deseaban poseer. Parece ser que el
documento más antiguo relacionado con minerales fue el libro chino San Hey
Din2 (500 a.C.) que señalaba 17 minerales. Aristóteles compendió todo el
saber de su época especialmente en ciencias naturales. Su sucesor, Teofrasto
de Ereso escribió el que se puede considerar el primer tratado de
mineralogía, Pery Lyton (Sobre las piedras), del que se conserva un fragmento
bastante extenso y un tratado de los metales que se perdió. Plinio "El Viejo",
recopiló todo lo que en aquella época se sabía sobre minería y mineralogía. En
su obra Historia natural los libros 33, 34, 36 y 37 trataban de la mineralogía
aunque dejando sin respuesta la regularidad que presentan los
cristales. Isidoro de Sevilla en sus Etimologías salvó la cultura clásica para la
posteridad, en el libro XVI dedica 24 capítulos a la mineralogía, esta obra ha
pasado a la posteridad con el nombre de Lapidario de San Isidoro. En el siglo
XIII el filósofo alemán Alberto Magno en su obra De mineralibus describe una
serie de especies mineralógicas. El Rey de Castilla y León, Alfonso X "El
Sabio" publicó el libro El lapidario, curioso estudio de los minerales en el que
incluían las piedras preciosas en su relación con los signos del zodíaco. Georg
Bauer escribió obra De re metallica publicada en Basilea en 1556, un año
después de su muerte, con privilegio y licencia del rey Enrique IV de Francia y
de la que se hicieron traducciones en varios países del mundo,
(en España en 1772).

Su obra constaba de 12 libros o capítulos tratando cuanto se refería a la


minería y mineralogía con 291 grabados. En el siglo XVIII surgió el anatomista
y geólogo danés Niels Stessen (Nicolás Steno), que descubrió la regularidad
geométrica en la formación de los cristales. Jean Baptiste Romé de
l'Isle confirmó el descubrimiento de la constancia de los ángulos diedros de los
cristales de una misma especie mineral, que ya había sido descrita por el
profesor Lomonosov en 1645.

René Just Haüy, sacerdote, físico y mineralogista francés, debido a la caída de


un cristal de calcita, descubrió que todos los cristales de este mineral estaban
compuestos por la adición de romboedros elementales cadá vez menores
cuando se rompía un nuevo fragmento, hasta cristales prácticamente invisibles
a simple vista, con lo cual su obra Traité de la cristallographie estableció las
bases de una nueva ciencia: la cristalografía, que agrupa los cristales según la
simetría de su cristalización. El químico sueco Berzelius junto
con Mitscherlich sistematizaron los minerales y el francés Bravais sentó las
bases de la estructura cristalina.

A partir de la invención del goniómetro de reflexión se realizaron con más


exactitud las medidas angulares en los cristales. En el siglo XX, el
descubrimiento de la difracción por rayos X de los cristales. Los recientes
avances técnicos de caracterización (microscopía electrónica, microanálisis por
rayos X, difracción de electrones, etc.). En el siglo XIX y principios del siglo
XX la minería alcanzó gran difusión y por tanto también el coleccionismo de
minerales que motivó la posibilidad de encontrar abundantes piezas de gran
valor y la creación de grandes museos en Europa y Norteamérica.
Cristalografía

Cristales de sulfato de cobre (II). Estos cristales tienen una estructura cristalina
triclínica.

La cristalografía es la ciencia que se dedica al estudio y resolución


de estructuras cristalinas. La mayoría de los minerales, y en general todos los
materiales, adoptan formas cristalinas cuando se forman en condiciones
favorables. La cristalografía es el estudio del crecimiento, la forma y
la geometría de estos cristales.

La disposición de los átomos en un cristal puede conocerse por difracción de


rayos X, de neutrones o electrones. La química cristalográficaestudia la
relación entre la composición química, la disposición de los átomos y
las fuerzas de enlace entre estos. Esta relación determina propiedades físicas y
químicas de los minerales.

Cuando las condiciones son favorables, cada elemento o compuesto químico


tiende a cristalizarse en una forma definida y característica. Así, la sal tiende a
formar cristales cúbicos, mientras que el granate, que a veces forma también
cubos, se encuentra con más frecuencia en dodecaedros o triaquisoctaedros. A
pesar de sus diferentes formas de cristalización, la sal y el granate cristalizan
siempre en la misma clase y sistema.

En teoría son posibles treinta y dos clases cristalinas, pero solo una docena
incluye prácticamente a todos los minerales comunes y algunas clases nunca
se han observado. Estas treinta y dos clases se agrupan en seis sistemas
cristalinos, caracterizados por la longitud y posición de sus ejes. Los minerales
de cada sistema comparten algunas características de simetría y forma
cristalina, así como muchas propiedades ópticas importantes.

La cristalografía es una técnica importante en varias disciplinas científicas,


como la química, física y biología y tiene numerosas aplicaciones prácticas
en medicina, mineralogía y desarrollo de nuevos materiales. Por su papel en
«hacer frente a desafíos como las enfermedades y los problemas
ambientales», la UNESCO declaró el 2014 como el Año Internacional de la
Cristalografía.

Origen del nombre

El primer uso del término cristalografía relativo al estudio de los cristales se


debe al médico y yatroquímico suizo Moritz Anton Cappeller (1685-1769), que
lo utilizó en 1723 en su obra Prodromus crystallographiae de crystallis
improprie sic dictis commentarium.

Teoría

Un material cristalino es aquel en el que los átomos se estructuran en redes


basadas en la repetición tridimensional de sus componentes. La estructura
repetitiva se denomina celda unitaria. Los cristales se clasifican según las
propiedades de simetría de la celda unitaria. Estas propiedades de simetría
también se manifiestan en ocasiones en simetrías macroscópicas de los
cristales, como formas geométricas o planos de fractura. El estudio de la
cristalografía requiere un cierto conocimiento del grupo de simetría.

Elementos de simetría

Modelo de red de un sistema cristalino cúbico simple.


Las celdas fundamentales de un cristal presentan elementos de simetría, que
son:

Eje de simetría: es una línea imaginaria que pasa a través del cristal, alrededor
de la cual, al realizar este un giro completo, repite dos o más veces el mismo
aspecto. Los ejes pueden ser: monarios, si giran el motivo una vez (360º);
binarios, si lo giran dos veces (180º); ternarios, si lo giran tres veces (120º);
cuaternarios, si lo giran cuatro veces (90º); o senarios, si giran el motivo seis
veces (60º).

Plano de simetría: es un plano imaginario que divide el cristal en dos mitades


simétricas especulares, como el reflejo en un espejo, dentro de la celda. Puede
haber múltiples planos de simetría. Se representa con la letra m.

Centro de simetría: es un punto dentro de la celda que, al unirlo con cualquiera


de la superficie, repite al otro lado del centro y a la misma distancia un punto
similar.

Sistemas cristalinos: todas las redes cristalinas, al igual que los cristales, que
son una consecuencia de las redes, presentan elementos de simetría. Si se
clasifican los 230 grupos espaciales según los elementos de simetría que
poseen, se obtienen 32 clases de simetría (cada una de las cuales reúne todas
las formas cristalinas que poseen los mismos elementos de simetría) es decir,
regular o cúbico, tetragonal, hexagonal, romboédrico, rómbico, monoclínico y
triclínico.

Tipos de hábito cristalino

El hábito es el aspecto externo del cristal, los distintos tipos de hábito


dependen de la estructura del mineral y de las condiciones externas en las que
se forman, son:

Hábito cristalino: es el aspecto que presenta un cristal como consecuencia del


diferente desarrollo de sus caras.

Hábito acicular: cristales con gran desarrollo de caras verticales. Tienen


aspecto de agujas.

Hábito hojoso: cristales con aspecto de hojas por el gran desarrollo de las
caras horizontales.

Formas cristalográficas

Es el conjunto de caras iguales que están relacionadas por su simetría:


Una sola cara: pedión

Dos caras:

Pinacoide: iguales y paralelas relacionadas por un plano o eje binario.

Domo: no paralelas que se relacionan por un plano.

Esfenoide: no paralelas relacionadas por un eje binario.

Prismas, pirámides, bipirámides, trapezoedros, escalenoedros.

Clases cristalinas.

Las posibles agrupaciones de los elementos de simetría son treinta y dos y a


estos corresponden otras tantas clases cristalinas, más una a la que no
corresponde ninguno de tales elementos de simetría. Todos los cristales se
hallan comprendidos en estas treinta y dos clases que, a su vez, se reagrupan
en siete sistemas (cúbico o manométrico, tetragonal, hexagonal, trigonal o
romboédrico, rómbico, monoclínico y triclínico).

Propiedades

Sistema triclínico : no posee ninguna simetría mínima.

Sistema monoclínico : Presenta como simetría mínima un eje de rotación


binario o un eje de inversión binario (=plano de simetría)

Sistema ortorrómbico : Como mínimo posee tres ejes binarios perpendiculares


entre sí.

Sistema tetragonal : posee como característica fundamental un eje de rotación


cuaternario o un eje de inversión cuaternario.

Sistema hexagonal : su característica fundamental es la presencia de un eje de


rotación senario o un eje de inversión senario (eje ternario + plano de simetría
perpendicular). Para mayor precisión, generalmente se introduce un cuarto eje
i, coplanario con a y b, que forma un ángulo de 120º con cada uno de ellos.

Índices de Miller hexagonales: como se trabaja con un cuarto índice, que se


sitúa en el plano a1 a2 y a 120º de cada uno de estos ejes, los planos
hexagonales se van a representar por cuatro índices (hkil). El valor de i se
determina como -(h+k).

Sistema romboédrico o trigonal : su característica común es la presencia de un


eje de rotación ternario o un eje de inversión ternario (eje ternario + centro de
simetría).
Sistema cúbico : posee como característica fundamental cuatro ejes de
rotación ternarios inclinados a 109,47º.

Métodos

Los métodos cristalográficos se apoyan fuertemente en el análisis de los


patrones de difracción que surgen de una muestra cristalina al irradiarla con
un haz de rayos X, neutroneso electrones. La estructura cristalina también
puede ser estudiada por medio de microscopía electrónica.

La cristalografía en biología

La cristalografía asistida por rayos X es el principal método de obtención de


información estructural en el estudio de proteínas y
otras macromoléculas orgánicas (como la doble hélice de ADN, cuya forma se
identificó en patrones de difracción de rayos X). El análisis de moléculas tan
complejas y, muy especialmente, con poca simetría requiere un análisis muy
complejo utilizándose ordenadores para ajustar el patrón de difracción a las
posibles estructuras. El Banco de Datos de Proteínas (PDB) contiene
información estructural de proteínas y otras macromoléculas biológicas.

La cristalografía en ingeniería de materiales

Las propiedades de los materiales cristalinos dependen en gran medida de su


estructura cristalina. Los materiales de ingeniería son por lo general materiales
policristalinos. Así como las propiedades del monocristal están dadas por las
características de los átomos del material, las propiedades de los policristales
son determinadas por las características y la orientación espacial de los
cristales que lo componen.

La técnica de difracción de rayos X permite estudiar la estructura del


monocristal mediante la identificación de los planos difractantes según la ley de
Bragg, lo cual es útil para la determinación de fases. Además, los métodos
cristalográficos permiten estudiar también la distribución de orientaciones
cristalográficas en un material, conocida también como textura cristalográfica.

Mineral

Para otros usos de este término, véase Mineral (desambiguación).


Amatista, una variedad del cuarzo

Un mineral es una sustancia natural, de composición química definida,


normalmente sólido e inorgánico, y que tiene una cierta estructura cristalina. Es
diferente de una roca, que puede ser un agregado de minerales o no minerales
y que no tiene una composición químicaespecífica. La definición exacta de un
mineral es objeto de debate, especialmente con respecto a la exigencia de ser
abiogénico, y en menor medida, a que deba tener una estructura atómica
ordenada. El estudio de los minerales se llama mineralogía.

Hay más de 5300 especies minerales conocidas, de ellas más de 5070


aprobadas por la Asociación Internacional de Mineralogía(International
Mineralogical Association, o IMA). Continuamente se descubren y describen
nuevos minerales, entre 50 y 80 al año. La diversidad y abundancia de
especies minerales es controlada por la química de la Tierra. El silicio y el
oxígeno constituyen aproximadamente el 75% de la corteza terrestre, lo que se
traduce directamente en el predominio de los minerales de silicato, que
componen más del 90% de la corteza terrestre. Los minerales se distinguen por
diversas propiedades químicas y físicas. Diferencias en la composición química
y en la estructura cristalina distinguen varias especies, y estas propiedades, a
su vez, están influidas por el entorno geológico de la formación del mineral.
Cambios en la temperatura, la presión, o en la composición del núcleo de una
masa de roca causan cambios en sus minerales.

Los minerales pueden ser descritos por varias propiedades físicas que se
relacionan con su estructura química y composición. Las características más
comunes que los identifican son la estructura cristalina y el hábito, la dureza,
el lustre, la diafanidad, el color, el rayado, la tenacidad, la exfoliación,
la fractura, la partición y la densidad relativa. Otras pruebas más específicas
para la caracterización de ciertos minerales son el magnetismo, el sabor o el
olor, la radioactividad y la reacción a los ácidos fuertes.

Los minerales se clasifican por sus componentes químicos clave siendo los dos
sistemas dominantes la clasificación de Dana y la clasificación de Strunz. La
clase de silicatos se subdivide en seis subclases según el grado
de polimerización en su estructura química. Todos los silicatos tienen una
unidad básica en forma de tetraedro de sílice
es decir, un catión de silicio unido a cuatro aniones de oxígeno. Estos
tetraedros pueden ser polimerizados para dar las subclases: neosilicatos (no
polimerizados, y por lo tanto, solo tetraedros), sorosilicatos (dos tetraedros
enlazadados entre sí), ciclosilicatos (anillos de
tetraedros), inosilicatos (cadenas de tetraedros), filosilicatos (láminas de
tetraedros), y tectosilicatos (redes en tres dimensiones de tetraedros). Otros
grupos minerales importantes son los elementos
nativos, sulfuros, óxidos, haluros, carbonatos, sulfatos y fosfatos.

Definición básica

La definición general de un mineral comprende los siguientes criterios:

 ser de origen natural;


 ser estable a temperatura ambiente;
 estar representado por una fórmula química;
 ser generalmente abiogénico (no resultado de la actividad de los
organismos vivos);
 y tener disposición atómica ordenada.

Las tres primeras características generales son menos debatidas que las dos
últimas. El primer criterio significa que un mineral se tiene que formar por un
proceso natural, lo que excluye compuestos antropogénicos. La estabilidad a
temperatura ambiente, en el sentido más simple, es sinónimo de que el mineral
sea sólido. Más específicamente, un compuesto tiene que ser estable o
metaestable a 25°C. Son ejemplos clásicos de excepciones a esta regla
el mercurio nativo, que cristaliza a -39°C, y el hielo de agua, que es sólido sólo
por debajo de 0°C; puesto que estos dos minerales se habían descrito con
anterioridad a 1959, fueron adoptados por la Asociación Internacional de
Mineralogía (IMA). Los avances modernos suponen un amplio estudio de los
cristales líquidos, que también concierne ampliamente a la mineralogía. Los
minerales son compuestos químicos, y, como tales, pueden ser descritos por
una fórmula fija o una variable. Muchos grupos de minerales y especies están
compuestos por una solución sólida; las sustancias puras generalmente no se
encuentran debido a la contaminación o sustitución química. Por ejemplo, el
grupo del olivino se describe por la fórmula variable (Mg, Fe)
2SiO
4, que es una solución sólida de dos especies de miembro extremo,
la forsterita rica en magnesio y la fayalita rica en hierro, que se describen
mediante una fórmula química fija. Otras especies minerales podrían tener
composiciones variables, tales como el sulfuro de mackinawita, (Fe, Ni)
9S
8, que es principalmente un sulfuro ferroso, pero que tiene una impureza de
níquel muy significativa que se refleja en su fórmula.

El requisito de que una especie mineral para ser válida ha de ser abiogénica
también se ha descrito como similar a que sea inorgánica; sin embargo, este
criterio es impreciso y a los compuestos orgánicos se les ha asignado una
rama de clasificación separada. Por último, la exigencia de tener una
disposición atómica ordenada es generalmente sinónimo de cristalinidad; sin
embargo, los cristales también son periódicos, por lo que se utiliza en su lugar
el criterio más amplio. Una disposición atómica ordenada da lugar a una
variedad de propiedades físicas macroscópicas, como la forma cristalina, la
dureza y la exfoliación. Ha habido varias propuestas recientes para modificar la
definición para considerar las sustancias biogénicas o amorfas como minerales.
La definición formal de un mineral aprobada por la IMA en 1995:

Un mineral es un elemento o compuesto químico que es normalmente cristalino


y que se ha formado como resultado de procesos geológicos.

IMA (1995)

Además, las sustancias biogénicas fueron excluidas explícitamente:

Las sustancias biogénicas son compuestos químicos producidos totalmente por


procesos biológicos sin un componente geológico (por ejemplo, cálculos
urinarios, cristales de oxalato en tejidos vegetales, conchas de moluscos
marinos, etc.) y no son considerados como minerales. Sin embargo, si hubo
procesos geológicos implicados en la génesis del compuesto, entonces el
producto puede ser aceptado como un mineral.

IMA (1995)

Avances recientes

Los sistemas de clasificación de minerales y sus definiciones están


evolucionando para recoger los últimos avances de la ciencia mineral. Los
cambios más recientes han sido la adición de una clase orgánica, tanto en el
nuevo Dana y en los esquemas de la clasificación de Strunz. La clase orgánica
incluye un grupo muy raro de minerales con hidrocarburos. La «Comisión sobre
nuevos minerales y nombres de minerales» de la IMA aprobó en 2009 un
esquema jerárquico para la denominación y clasificación de los grupos
minerales y de los nombres de los grupos y estableció siete comisiones y
cuatro grupos de trabajo para revisar y clasificar los minerales en una lista
oficial de sus nombres publicados. De acuerdo con estas nuevas reglas, las
especies minerales pueden ser agrupadas de diferentes maneras, sobre la
base de la química, la estructura cristalina, la aparición, la asociación, la
historia genética o los recursos, por ejemplo, dependiendo de la finalidad para
que sirva la clasificación.

IMA

La exclusión de Nickel (1995) de las sustancias biogénicas no fue


universalmente respetada. Por ejemplo, Lowenstam (1981) declaró que «los
organismos son capaces de formar una gran variedad de minerales, algunos de
los cuales no se pueden formar inorgánicamente en la biosfera.» La distinción
es una cuestión de clasificación y tiene menos que ver con los constituyentes
de los minerales mismos. Skinner (2005) considera todos los sólidos como
minerales potenciales e incluye los biominerales en el reino mineral, que son
aquellos creados por las actividades metabólicas de los organismos. Skinner
amplió la definición previa de un mineral para clasificar como mineral cualquier
«elemento o compuesto, amorfo o cristalino, formado a través de los procesos
biogeoquímicos».

Los recientes avances en la genéticas de alta resolución y espectroscopía de


absorción de rayos X están proporcionando revelaciones sobre las relaciones
biogeoquímicas entre microorganismos y minerales que pueden hacer obsoleta
la exclusión biogénica de Nickel (1995) y una necesidad la inclusión biogénica
de Skinner (2005). Por ejemplo, el IMA encargó al «Grupo de trabajo de
Mineralogía ambiental y Geoquímica» tratar de los minerales en
la hidrosfera, atmósfera y biosfera. El alcance del grupo
incluye microorganismos formadores de minerales, que existen en casi todas
las rocas, en el suelo y en la superficie de las partículas que atraviesan el globo
hasta una profundidad de al menos 1600 metros por debajo del fondo del mar y
70 kilómetros en la estratosfera (posiblemente se introduzcan en la mesosfera).
Los ciclos biogeoquímicos han contribuido a la formación de minerales durante
miles de millones de años. Los microorganismos pueden precipitar los metales
de la disolución, contribuyendo a la formación de yacimientos de mineral.
También pueden catalizar la disolución de los minerales.

Antes de la lista de la Asociación Internacional de Mineralogía, más de 60


biominerales ya habían sido descubiertos, nombrados y publicados. Estos
minerales (un subconjunto tabulado en Lowenstam (1981) ) se consideran
propiamente minerales de acuerdo con la definición de Skinner (2005). Estos
biominerales no figuran en la lista oficial de nombres de minerales de la IMA,
aunque muchos de estos biominerales representativos se distribuyen entre las
78 clases minerales que figuran en la clasificación de Dana. Otra clase rara de
minerales (principalmente de origen biológico) incluye los cristales
líquidos minerales que tienen propiedades tanto de líquidos y cristales. Hasta la
fecha se han identificado más de 80.000 compuestos cristalinos líquidos.

La definición de mineral de Skinner (2005) toma en cuenta esta cuestión


afirmando que un mineral puede ser cristalino o amorfo, incluyendo en este
último grupo los cristales líquidos. Aunque los biominerales y los cristales
líquidos no son la forma más común de minerales, ayudan a definir los límites
de lo que constituye propiamente un mineral. La definición formal de Nickel
(1995) menciona explícitamente la cristalinidad como una clave para la
definición de una sustancia como un mineral. Un artículo de 2011 define la
icosahedrita, una aleación de hierro-cobre-aluminio, como mineral; llamada así
por su singular simetría icosaédrica natural, es un cuasi cristal. A diferencia de
un verdadero cristal, los cuasicristales están ordenados pero no de forma
periódica.

Rocas, menas y gemas

Un esquisto es una roca metamórfica que se caracteriza por la abundancia de


placas minerales. En este ejemplo, la roca tiene
prominentes porfiroblastos de silimanita (de hasta 3 cm).

Los minerales no son equivalentes a las rocas. Una roca puede ser un
agregado de uno o más minerales, o no tener ningún mineral. Rocas como
la caliza o la cuarcita se componen principalmente de un mineral —
calcita o aragonito en el caso de la caliza, y cuarzo, en la última. Otras rocas
pueden ser definidas por la abundancia relativa de los minerales clave
(esenciales); un granito está definido por las proporciones de
cuarzo, feldespato alcalino y plagioclasa. Los otros minerales de la roca se
denominan accesorios, y no afectan en gran medida la composición global de
la roca. Las rocas también pueden estar compuestas enteramente de material
no mineral; el carbón es una roca sedimentaria compuesta principalmente de
carbono derivado de manera orgánica.

En las rocas, algunas especies y grupos minerales son mucho más abundantes
que otros; éstos se denominan minerales formativos. Los principales ejemplos
son el cuarzo, feldespatos, las micas, los anfíboles, los piroxenos, los olivinos,
y la calcita; excepto la última, todos son minerales silicatos. En general,
alrededor de unos 150 minerales se consideran particularmente importantes, ya
sea en términos de su abundancia o valor estético en términos de
coleccionismo.

Los minerales y rocas comercialmente valiosos se conocen como minerales


industriales y rocas industriales. Por ejemplo, la moscovita, una mica blanca,
puede ser utilizada para ventanas (a veces conocida como isinglass), como
material de relleno o como un aislante. Las menasson minerales que tienen
una alta concentración de un determinado elemento, normalmente de un metal.
Ejemplos de ello son el cinabrio (HgS), un mineral de mercurio, esfalerita (ZnS),
un mineral de zinc, o la casiterita (SnO
2), un mineral de estaño. Las gemas son minerales con un alto valor
ornamental, y se distinguen de las no gemas por su belleza, durabilidad, y por
lo general, rareza. Hay alrededor de 20 especies minerales que se califican
como minerales gema, que constituyen alrededor de las 35 piedras preciosas
más comunes. Los minerales gema están a menudo presentes en diversas
variedades, y así un mineral pueden dar cuenta de varias piedras preciosas
diferentes; por ejemplo, rubí y el zafiro son ambas corindón, Al
2º.

Nomenclatura y clasificación

Clasificación histórica de los minerales

Los minerales se solían clasificar en la antigüedad con criterios de su aspecto


físico; Teofrasto, en el siglo III a. C., creó la primera lista sistemática cualitativa
conocida; Plinio el Viejo (siglo I), en su “Historia Natural”, realizó una
sistemática mineral, trabajo que, en la Edad Media, sirvió de base
a Avicena; Linneo (1707-1778) intentó idear una nomenclatura fundándose en
los conceptos de género y especie, pero no tuvo éxito y dejó de usarse en el
siglo XIX; con el posterior desarrollo de la química, el químico sueco Axel
Fredrik Cronstedt (1722-1765) elaboró la primera clasificación de minerales en
función de su composición; el geólogo estadounidense James Dwight Dana, en
1837, propuso una clasificación considerando la estructura y composición
química. La clasificación más actual se funda en la composición química y la
estructura cristalina de los minerales. Las clasificaciones más empleadas son
las de Strunz y Kostov.

Clasificación moderna

Los minerales se clasifican según la variedad, especie, serie y grupo, en orden


creciente de generalidad. El nivel básico de definición es el de las especies
minerales, que se distinguen de otras especies por sus propiedades químicas y
físicas específicas y únicas. Por ejemplo, el cuarzo se define por su fórmula
química, SiO
2, y por una estructura cristalina específica que lo distingue de otros minerales
con la misma fórmula química (denominados polimorfos). Cuando existe un
rango de composición entre dos especies minerales, se define una serie
mineral. Por ejemplo, la serie de la biotita está representada por cantidades
variables de la endmembers flogopita, siderofilita, annita, y eastonita. Por
contraste, un grupo mineral es una agrupación de especies minerales con
algunas propiedades químicas comunes que comparten una estructura
cristalina. El grupo piroxeno tiene una fórmula común de XY(Si, Al)
2º 6, en donde X e Y son ambos cationes, siendo X generalmente mayor que Y
(radio iónico); los piroxenos son silicatos de cadena sencilla que cristalizan en
cualquiera de los sistemas cristalinos monoclínico o ortorrómbico. Finalmente,
una variedad mineral es un tipo específico de especies minerales que difieren
por alguna característica física, como el color o el hábito del cristal. Un ejemplo
es la amatista, que es una variedad púrpura del cuarzo.

Para ordenar minerales dos son las clasificaciones más comunes, la de Dana y
la de Strunz, ambas basadas en la composición, en especial respecto a los
grupos químicos importantes, y en la estructura. James Dwight Dana, un
geólogo principal de su tiempo, publicó por primera vez su System of
Mineralogy [Sistema de Mineralogía] en 1837; en 1997 se editó su octava
edición. La clasificación de Dana asigna un número de cuatro partes a una
especie mineral. Su número de clase se basa en los grupos de composición
importantes; el número de tipo da la relación de cationes/aniones en el mineral;
y los dos últimos números corresponden al grupo de minerales por similaridad
estructural dentro de un tipo o clase determinada. La clasificación de Strunz —
utilizada con menor frecuencia y llamada así por el mineralogista alemán Karl
Hugo Strunz— se basa en el sistema de Dana, pero combina tanto criterios
químicos como estructurales, estos últimos con respecto a la distribución de los
enlaces químicos.

En enero de 2016, la IMA había aprobado 5.090 especies minerales. Se han


nombrado en general en honor de una persona (45%), seguidos por la
ubicación del lugar, mina o yacimiento del descubrimiento (23%); otras
etimologías comunes son los nombres basados en la composición química
(14%) y en las propiedades físicas (8%). El sufijo común -ita usado en los
nombres de las especies minerales desciende del antiguo sufijo griego - ί τ η ς
(-ites), que significa 'relacionado con' o 'que pertenece a'.

Química mineral

Hübnerita, el miembro final rico en manganeso de la serie de la wolframita, con


cuarzo menor en el fondo.

La abundancia y diversidad de minerales es controlada directamente por su


composición química, que a su vez, depende de la abundancia de los
elementos en la Tierra. La mayoría de los minerales observados derivan de la
corteza terrestre. Ocho elementos representan la mayor parte de los
componentes clave de los minerales, debido a su abundancia en la corteza
terrestre. Estos ocho elementos suponen más del 98% de la corteza en peso, y
son, en orden decreciente:

oxígeno, silicio, aluminio, hierro, magnesio, calcio, sodio y potasio.

El oxígeno y el silicio son, con mucho, los dos más importantes —el oxígeno
compone, en peso, el 46,6% de la corteza terrestre, y el silicio un 27,7%.
Los minerales que se forman son controlados directamente por la química
mayor del cuerpo matriz. Por ejemplo, un magma rico en hierro y magnesio
formará minerales máficos, como el olivino y los piroxenos; por el contrario, un
magma más rico en sílice cristalizará para formar minerales que incorporen
más SiO
2, como los feldespatos y cuarzos. La caliza, la calcita o
la aragonita (todas CaCO
3) se forman porque la roca es rica en calcio y carbonato. Un corolario es que
no se encontrará un mineral en una roca cuya química mayor no se parezca a
la química mayor del mineral dado, con la excepción de algunas trazas de
minerales. Se forma a partir del metamorfismo de lutitas ricas en aluminio; no
sería probable que ocurriera en rocas pobres en aluminio, como la cuarcita.

La composición química puede variar entre las especies terminales de una


serie de solución sólida. Por ejemplo, los feldespatos plagioclasacomprenden
una serie continua que va desde el miembro extremo de la albita, rica en sodio
hasta la anortita, rica en calcio, con cuatro variedades intermedias reconocidas
entre ellas (recogidas en orden de riqueza del sodio al
calcio): oligoclasa, andesina, labradorita y bytownita. Otros ejemplos de serie
son la serie del olivino, desde la forsterita, rica en magnesio, a la fayalita, rica
en hierro, y la serie del wolframita, desde la hübnerita, rica en manganeso,
hasta la ferberita, rica en hierro.

La sustitución química y la coordinación de poliedros explican esta


característica común de los minerales. En la naturaleza, los minerales no son
sustancias puras, y se contaminan por otros elementos que están presentes en
el sistema químico dado. Como resultado, es posible que un elemento sea
sustituido por otro. La sustitución química se producirá entre iones de un
tamaño y carga similares; por ejemplo, K+
no sustituirá a Si4+
debido a las incompatibilidades químicas y estructurales causadas por la gran
diferencia en tamaño y carga. Un ejemplo común de sustitución química es el
del Si4+ > por Al3+
, que están próximos en carga, tamaño y abundancia en la corteza terrestre. En
el ejemplo de la plagioclasa, hay tres casos de sustitución. Los feldespatos son
todos armazones de sílice, que tienen una relación de silicio-oxígeno de 2:1, y
el espacio para otros elementos se da por la sustitución del ion Si4+
por el ion Al3+
para dar una unidad de base de [AlSi
3º 8]− ; sin la sustitución, la fórmula pude ser cargada-equilibrada como SiO
2, dando cuarzo. La importancia de esta propiedad estructural se explica
además por los poliedros de coordinación. La segunda sustitución se produce
entre el ion Na+
y el ion Ca2+
;sin embargo, la diferencia en la carga tiene que contabilizarse haciendo una
segunda sustitución del ion Si4+
por el ion Al3+
La coordinación de poliedros es una representación geométrica de cómo un
catión está rodeado por un anión. En mineralogía, debido a su abundancia en
la corteza terrestre, los poliedros de coordinación se consideran generalmente
en términos del oxígeno.

Una forma alternativa de describir la coordinación del silicato es mediante un


número: en el caso del tetraedro de sílice, se dice que tiene un número de
coordinación de 4. Diversos cationes tienen un rango específico de posibles
números de coordinación; para el silicio, es casi siempre 4, excepto para
minerales de muy altas presiones en los que los compuestos se comprimen de
tal manera que el silicio está seis veces (octaédrico) coordinado con el oxígeno.
Los cationes mayores tienen un número de coordinación más grande debido al
aumento en el tamaño relativo en comparación con el oxígeno (la
última subcapa orbital de los átomos más pesados es diferente también). Los
cambios en los números de coordinación conduce a diferencias físicas y
mineralógicas; por ejemplo, a alta presión, tal como en el manto, muchos
minerales, especialmente algunos silicatos como el olivino y
los granates cambiarán a una estructura de perovskita, en el que el silicio está
en coordinación octaédrica. Otro ejemplo son los
aluminosilicatos cianita, andalucita y silimanita (polimorfos, ya que comparten la
fórmula Al 2SiO
5), que se diferencian por el número de coordinación del Al3+
; estos minerales transitan de uno al otro como una respuesta a los cambios en
la presión y en la temperatura. En el caso de materiales de silicato, la
sustitución del ion Si4+
por Al3+ permite una variedad de minerales, debido a la necesidad de
equilibrar las cargas.

Cuando los minerales reaccionan, los productos a veces asumirán la forma del
reactivo; el producto mineral se denomina por ser un pseudomorfo de (o
después) del reactivo. Aquí se ilustra un pseudomorfo de la caolinitadespués
de la ortoclasa. Aquí, el pseudomorfo conserva la macla Carlsbad común en la
ortoclasa.
Los cambios de temperatura, de presión y de composición alteran la
mineralogía de una roca simple: los cambios en la composición pueden ser
causados por procesos como la erosión o metasomatismo (alteración
hidrotérmica); los cambios en la temperatura y en la presión se producen
cuando la roca madre se somete a movimientos tectónicos o magmáticos en
diferentes regímenes físicos; y los cambios en las condiciones termodinámicas
favorecen que algunas asociaciones de minerales reaccionen entre sí para
producir nuevos minerales. Como tal, es posible que dos rocas tengan una
química de roca base idéntica, o muy similar, sin tener una mineralogía similar.
Este proceso de alteración mineralógica está relacionado con el ciclo de las
rocas. Un ejemplo de una serie de reacciones minerales se ilustra como sigue.

El feldespato ortoclasa es un mineral que se encuentra comúnmente en el


granito, una roca ígnea plutónica. Cuando se expone a la intemperie, reacciona
para formar caolinita , un mineral sedimentario, y ácido silícico):

2KAlSi
3O
8 + 5H
2O + 2H+
→ Al
2Si
2O
5(OH)
4 + 4H
2SiO
3 + 2K+

Bajo condiciones metamórficas de bajo grado, la caolinita reacciona con el


cuarzo para formar pirofilita

2Si
4O
10(OH)
2):

Al
2Si
2O
5(OH)
4 + SiO
2 → Al
2Si
4O
10(OH)
2

A medida que aumenta el grado metamórfico, la pirofilita reacciona para formar


cianita y cuarzo:

Al
2Si
4O
10(OH)
2 → Al
2SiO
5 + 3SiO
2+H

Alternativamente, un mineral puede cambiar su estructura cristalina como


consecuencia de cambios de temperatura y de presión sin reaccionar. Por
ejemplo, el cuarzo se convertirá en una variedad de sus polimorfos de SiO
2, como la tridimita y la cristobalita a altas temperaturas, y en coesita a altas
presiones.

Propiedades físicas de los minerales

La caracterización de los minerales puede variar de ser muy simple a muy


difícil. Un mineral puede ser identificado por varias propiedades físicas, siendo
algunos de ellas suficientes para una plena identificación sin ambigüedades. En
otros casos, los minerales sólo se pueden clasificar mediante análisis más
complejos, ópticos, químicos o de difracción de rayos X; estos métodos, sin
embargo, pueden ser costosos y consumen mucho tiempo. Las propiedades
físicas que se estudian para la clasificación son la estructura cristalina y el
hábito, la dureza y el lustre, la diafanidad, el color, el rayado, la exfoliación y la
fractura, y la densidad relativa. Otras pruebas menos generales son
la fluorescencia y fosforescencia, el magnetismo, la radioactividad,
la tenacidad (respuesta a los cambios mecánicos inducidos de forma),
la piezoelectricidad y la reactividad para diluir ácidos.
Estructura cristalina y hábito

Acicular natrolita

El topacio tiene una forma característica de cristal alargado ortorrômbico.

La estructura cristalina resulta de la disposición espacial geométrica ordenada


de los átomos en la estructura interna de un mineral. Esta estructura cristalina
se basa en una disposición atómica o iónica interna regular, que se expresa a
menudo en la forma geométrica que el cristal toma. Incluso cuando los granos
minerales son demasiado pequeños para ser vistos o son de forma irregular, la
estructura cristalina subyacente siempre es periódica y se puede determinar
por difracción de rayos X. Los minerales por lo general son descritos por su
contenido de simetría. Los cristales están cristalográficamente restringidos a 32
grupos de puntos, que se diferencian por su simetría. Estos grupos se
clasifican a su vez en categorías más amplias, siendo las de mayor alcance
seis familias de cristales (a veces una de las familias, la hexagonal, también se
divide en dos sistemas cristalinos: el trigonal, que tiene un eje tres veces
simétrico, y el hexagonal, que tiene un eje seis veces simétrico.)

Estas familias pueden ser descritas por las longitudes relativas de los tres ejes
cristalográficos, y los ángulos que forman entre ellos; estas relaciones
corresponden a las operaciones de simetría que definen los grupos de puntos
más estrechos. Se resumen a continuación; a, b, y c representan los ejes, y α,
β, y γ representan el ángulo opuesto al eje cristalográfico respectivo (por
ejemplo, α es el ángulo opuesto al eje a, es decir el ángulo entre los ejes b y
c.):

La química y la estructura cristalina, en conjunto, definen un mineral. Con una


restricción a grupos de 32 puntos, los minerales de diferente química pueden
tener una estructura cristalina idéntica. Por ejemplo, la halita (NaCl),
la galena (PbS) y la periclasa (MgO) pertenecen todas al grupo de puntos
hexaoctahedral (familia isométrica), ya que tienen una estequiometría similar
entre sus diferentes elementos constitutivos. En contraste, los polimorfos son
agrupaciones de minerales que comparten una fórmula química, pero que
tienen una estructura diferente. Por ejemplo, la pirita y la marcasita, ambos
sulfuros de hierro, tienen la fórmula FeS
2; sin embargo, el primero es isométrico mientras que el último es ortorrómbico.
Este polimorfismo se extiende a otros sulfuros de fórmula genérica AX
2; estos dos grupos son conocidos colectivamente como los grupos de la pirita
y marcasita.

El polimorfismo se puede extender más allá del contenido de la pura simetría.


Los aluminosilicatos son un grupo de tres minerales —
cianita, andalucita y silimanita— que comparten la fórmula química Al
2SiO 5. La cianita es triclınica, mientras que la andalucita y la silimanita son
ambas ortorrómbicas y pertenecen al grupo de puntos bipiramidal. Estas
diferencias surgen correspondiendo a como el aluminio se coordina dentro de
la estructura cristalina. En todos los minerales, un ion de aluminio está siempre
seis veces coordinado con el oxígeno; el silicio, por regla general está en
coordinación de cuatro veces en todos los minerales; una excepción es un caso
como la stishovita(SiO
2, un polimorfo de cuarzo de ultra-alta presión con estructura de rutilo).

Las diferencias en la estructura cristalina y la química influyen mucho en otras


propiedades físicas del mineral. Los alótropos del carbono, el diamante y
el grafito, tienen propiedades muy distintas; el diamante es la sustancia natural
más dura, tiene un lustre adamantino, y pertenece a la familia isométrica,
mientras que el grafito es muy blando, tiene un lustre grasiento, y cristaliza en
la familia hexagonal. Esta diferencia se explica por diferencias en el enlace. En
el diamante, los átomos de carbono están en orbitales híbridos sp3, lo que
significa que forman un marco o armazón en el que cada carbono está unido
covalentemente a cuatro vecinos de una manera tetraédrica. Por otro lado, el
grafito forma láminas de átomos de carbono en orbitales híbridos sp2, en los
que cada átomo de carbono está unido covalentemente a sólo otros tres. Estas
hojas se mantienen unidas por fuerzas mucho más débiles que las fuerzas de
van der Waals, y esta discrepancia se traduce en grandes diferencias
macroscópicas.
Maclas de contacto en la espinela

La macla es la interpenetración de dos o más de cristal de una única especie


mineral. La geometría de la macla es controlada por la simetría del mineral y,
como resultado, hay varios tipos: de contacto, reticuladas, geniculadas, de
penetración, cíclicas y polisintéticas. Las maclas de contacto, o maclas simples,
constan de dos cristales unidos en un plano; este tipo de maclas es común en
la espinela; las maclas reticuladas, comunes en forma de rutilo, son cristales
entrelazados que se asemejan a un reticulado. Las maclas geniculadas tienen
una mezcla en el medio que es causada por el comienzo del maclado. Las
maclas de penetración constan de dos cristales individuales que han crecido
uno dentro de otro; ejemplos de este hermanamiento son las maclas en forma
de cruz de la estaurolita y las maclas de Carlsbad en la ortoclasa. Las maclas
cíclicas son causados por el maclado repetido en torno a un eje de rotación. Se
produce alrededor de tres, cuatro, cinco, seis, o ocho ejes de plegado. Las
maclas polisintéticas son similares a las maclas cíclicas por la presencia de
maclados repetitivos aunqueo, en lugar de producirse alrededor de un eje de
rotación, lo hacen siguiendo planos paralelos, por lo general en una escala
microscópica.

El hábito cristalino se refiere a la forma general de cristal. Se utilizan varios


términos para describir esta propiedad: acicular, que describe cristales en
forma de aguja como en la natrolita; acuchillado; arborescente o dendrítica
(patrón de árbol, común en el cobre nativo); equante, que es típico del granate;
prismático (alargado en una dirección); y tabular, que se diferencia de
acuchillado en que el primero es plano mientras que este último tiene un
alargamiento definido. En relación con la forma cristalina, la calidad de las
caras del cristal es diagnóstico de algunos minerales, especialmente con un
microscopio petrográfico. Los cristales euhedrales tienen una forma externa
definida, mientras que los cristales anhedrales no lo hacen; las formas
intermedias se denominan subhedrales.
Dureza

El diamante es el material natural más duro (dureza de Mohs de 10)

La dureza de un mineral define cuánto puede resistir el rayado. Esta propiedad


física depende de la composición química y de la estructura cristalina, y por ello
no es necesariamente constante en todas las cara; la debilidad cristalográfica
hace que algunas direcciones sean más blandas que otras. Un ejemplo de esta
propiedad se muestra en la cianita, que tiene una dureza de Mohs de 5½ en la
dirección paralela a [001], pero de 7 paralela a [100].

La escala más común de medición es la escala de dureza de Mohs ordinaria.


Definida por diez indicadores, un mineral con un índice más alto rasca los
minerales que están por debajo de él en la escala. La escala va desde el talco,
un silicato estratificado, hasta el diamante, un polimorfo de carbono que es el
material natural más duro.

Lustre y diafanidad

La pirita tiene un brillo metálico


La esfalerita tiene un brillo submetálico

El lustre o brillo indica cómo se refleja la luz que incide sobre la superficie del
mineral, una propiedad que no depende del color y sí de su naturaleza química:
es más intenso en sustancias que tienen enlaces metálicos y menor en las de
enlaces iónicos o covalentes. El tipo y la intensidad del brillo dependen del
índice de refracción y de la relación entre la luz absorbida y la reflejada. Hay
numerosos términos cualitativos para su descripción, agrupándose en tres:

brillo metálico, cuando reflejan casi toda la luz visible que reciben. Son opacos
y con índices de refracción mayores de 3. Suelen ser metales nativos (cuando
no están oxidados) y muchos sulfuros (pirita) y óxidos de metales de transición
(hematites).

brillo submetálico, cuando reflejan una pequeña parte de la luz visible que
reciben. Son opacos y su índice de refracción es ligeramente inferior a 3.
Suelen ser elementos semimetálicos (grafito), sulfuros y óxidos.

brillo no metálico, cuando transmiten la luz en cierto grado. Esta condición es


ambigua y se emplean varios términos para estimar los matices:

vítreo, con índice de refracción 1.33-2.00. Son minerales transparentes, en


general compuestos por aniones oxigenados (oxoaniones), como carbonatos,
sulfatos, fosfatos, silicatos, nitratos, etc. También varios halogenuros y óxidos
(cuarzo hialino o cristal de roca);

adamantino, con índice de refracción 2.00-2.50. Es el brillo típico del diamante


y de algunas otras variedades aunque a veces para estas se usa el término
subadamantino;

nacarado o perlado, un brillo irisado típico de minerales fácilmente exfoliables,


como las micas, el yeso y la apofilita;

craso o graso, motivado por la presencia de pequeñas rugosidades en la


superficie, a veces microscópicas. Lo tienen algunas blendas, la nefelina y el
cuarzo en masa o lechoso;

resinoso o céreo, de minerales como el azufre y ciertas blendas y granates;

sedoso, característico de minerales fibrosos, como el yeso fibroso, la crisotila y


la ulexita;

mate, cuando no presentan ningún reflejo, como la creta (calcita) o las arcillas.
En este caso también se dice que el mineral no tiene brillo.
Diferentes brillos de minerales

Vítreo: cuarzo

Adamantino: diamantes tallados

Nacarado: moscovita

Craso: ópalo musgoso


Resinoso: ámbar

Sedoso: selenita, variedad del yeso

Ceroso: jade

Mate: caolinita

La diafanidad de un mineral describe la capacidad de la luz de pasar a través


de él. Los minerales transparentes no disminuyen la intensidad de la luz que
pasa a través de ellos. Un ejemplo de estos minerales es la moscovita (mica de
potasio); algunas variedades son lo suficientemente claras como para haber
sido utilizadas como vidrios en las ventanas. Los minerales translúcidos
permiten pasar algo de luz, pero menos que los que son transparentes.
La jadeíta y nefrita (formas minerales del jade) son ejemplos de minerales con
esta propiedad. Los minerales que no dejan pasar la luz se denominan opacos.

La diafanidad de un mineral depende del espesor de la muestra. Cuando un


mineral es suficientemente delgado (por ejemplo, en una lámina
delgada para petrografía) puede llegar a ser transparente, incluso si esa
propiedad no se ve en la muestra de mano. Por el contrario, algunos minerales,
como la hematita o la pirita son opacos incluso en láminas delgadas.

Color y raya

El color, en general, no es una característica que permita caracterizar


minerales. Se muestra una uvarovita verde (izquierda) y una grosularia rojo-
rosada (derecha), ambos granates. Las propiedades que servirían para el
diagnóstico serían los cristales rombododecaédricos, el lustre resinoso, y la
dureza, de alrededor de 7.

Elbaita dicróica
Esmeralda

El color es la propiedad más obvia de un mineral, pero a menudo no sirve para


caracterizarlo. Es causada por la radiación electromagnética que interactúa con
los electrones (excepto en el caso de incandescencia, que no se aplica a los
minerales). Por su contribución en el color, se definen tres grandes clases de
minerales:

minerales idiocromáticos (o 'autocoloreados'), que deben su color a los


constituyentes principales y que son diagnosticables. Son minerales siempre
del mismo color, como la malaquita (verde), la azurita (azul) y muchos
minerales metálicos. Sus colores suelen variar ligeramente debido a la
presencia de pequeñas cantidades de otros metales: el oro, por ejemplo, es
menos amarillo cuando se mezcla con un poco de plata, y más rosado cuando
es mezclado junto con cobre.

minerales alocromáticos (o 'coloreados por otros'), que deben su coloración a


pequeñas cantidades en la composición consideradas como impurezas, a las
que se llama cromóforos, usualmente metales
(hierro, cromo, cobre, vanadio o manganeso). Son capaces de adoptar más de
una coloración, como el berilo o las dos variedades del corindón, el rubí y
el zafiro. Algunos minerales alocromáticos que pueden tener prácticamente
cada color imaginable, e incluso pueden tener muchos colores en un
solo cristal.

minerales pseudocromáticos (o 'de color falso'), cuya coloración proviene de


la estructura física del cristal y la interferenciacon las ondas de luz. Son
ejemplos la labradorita, la bornita y el ópalo, que está formado por capas
microscópicas de esferas de sílice. Al pasar a su través la luz se separa en los
colores que la componen, más o menos como ocurre cuando se refleja en una
capa de aceite sobre el agua.
Algunos metales, como el hierro, pueden ser tanto alocromático como
idiocromático: en el primer caso es considerado como una impureza, mientras
que en el segundo forma parte intrínseca del mineral coloreado.

El color de algunos minerales puede cambiar, ya sea de manera natural o con


un poco de ayuda. Los bajos niveles de radiación, que se dan a menudo en la
naturaleza, pueden contribuir a oscurecer algunos minerales incoloros. Los
mismos berilos de color amarillo verdoso se tratan artificilamente ahora con
calor para darles una coloración más azulada.

Además del simple color del cuerpo, los minerales pueden tener otras
propiedades ópticas distintivas que pueden implican variabilidad del color:

juego de colores, como en el ópalo, significa que la muestra refleja diferentes


colores cuando se ilumina, a causa de que la luz se refleja desde las
ordenadas esferas de sílice microscópicas de su estructura física.

pleocroísmo, facultad de absorber las radiaciones luminosas de distinta manera


en función de la dirección de vibración: un mismo cristal puede aparecer con
coloraciones diferentes dependiendo de la orientación en que haya caído en la
preparación microscópica

iridiscencia, una variedad del juego de colores por la que la luz se dispersa en
un recubrimiento sobre la superficie del cristal, planos de exfoliación o capas
desactivas que tienen gradaciones químicas menores.

chatoyancia ( "ojo de gato") es el efecto de bandas onduladas de color que se


observan cuando se rota la muestra;

asterismo, una varidead de la chatonyancia, un fenómeno sobre un área que


hace aparecer una estrella sobre la superficie reflectante de un corte de
cabujón. Se da en algunos rubíes, zafiros y otras gemas (granate-estrella,
diópsido-estrella, espinela-estrella, etc.) y particularmente en el corundum de
calidad gema.

Empañamiento

Propiedades ópticas

Asterismo en un zafiro-estrella azul.


Ojo de tigre

Iridiscencia en la labradorita

Barras de tungsteno con cristales evaporados, parcialmente oxidados con un


colorido empañado

pleocroísmo en la cordierita, fuertemente dicroica

Placas de raya con pirita(izqda.) y rodocrosita (dcha.)


La raya de un mineral se refiere al color de un mineral en forma de polvo, que
puede o no ser idéntico al color de su cuerpo. La forma más común de evaluar
esta propiedad se hace con una placa de raya, que está hecha de porcelana y
es de color blanco o negro. La raya de un mineral es independiente de los
elementos traza o de cualquier alteración de la superficie a causa de la
intemperie. Un ejemplo común de esta propiedad se ilustra con la hematita, que
es de color negro, plata o rojo en la muestra, pero que tiene una raya de color
rojo cereza. a marrón rojizo. La raya es más a menudo distintiva de los
minerales metálicos, en contraste con los minerales no metálicos, cuyo color de
cuerpo está creada por elementos alocromáticos. La prueba de la raya se ve
limitada por la dureza del mineral, ya que los minerales de dureza superior a
siete rayan ellos la placa.

Exfoliación, partición, fractura y tenacidad

Perfecta exfoliación basal en la biotita (negra), y buena exfoliación en la matrix


( ortoclasa rosa).

Por definición, los minerales tienen una disposición atómica característica y


cualquier debilidad de esa estructura cristalina es la causa de la existencia de
los planos de debilidad. La rotura del mineral a lo largo de esos planos se
denomina exfoliación. La calidad de la exfoliación puede ser descrita en función
de cómo de limpia y fácilmente se rompa el mineral; los términos con los que
se describen comúnmente esa calidad, en orden decreciente , son «perfecto»,
«bueno», «distinto» y «pobre». En particular en los minerales transparentes, o
en una sección delgada, la exfoliación se puede ver como una serie de líneas
paralelas que señalan las superficies planas cuando se ven de lado. La
exfoliación no es una propiedad universal de los minerales; por ejemplo, el
cuarzo, compuesto por tetraedros de sílice muy interconectados, no tiene
ninguna debilidad cristalográfica que le permitiría exfoliarse. Por el contrario,
las micas, que tienen una exfoliación basal perfecta, consisten en láminas de
tetraedros de sílice que se mantienen juntas muy débilmente .

Como la exfoliación es función de la cristalografía, hay gran variedad de tipos


de exfoliación produciéndose en uno, dos, tres, cuatro o seis direcciones. La
exfoliación basal en una única dirección es una característica distintiva de
las micas. La exfoliación en dos direcciones, denominada prismática, se
produce en anfíboles y piroxenos. Los minerales como la galena o la halita
tienen exfoliación cúbica (o isométrica) en tres direcciones, a 90°; cuando hay
tres direcciones de exfoliación, pero no a 90°, como en la calcita o en
la rodocrosita, se denomina exfoliación romboédrica. La exfoliación octaédrica
(cuatro direcciones) está presente en la fluorita y en el diamante, y
la esfalerita tiene seis direcciones de exfoliación del dodecaedro. Los minerales
con muchas exfoliaciones pueden no romper igual de bien en todas las
direcciones; por ejemplo, la calcita tiene buena exfoliación en tres direcciones,
pero el yeso solo tiene una exfoliación perfecta en una dirección, y pobre en las
otras dos. Los ángulos entre los planos de exfoliación varían entre los
minerales. Por ejemplo, dado que los anfíboles son silicatos de cadena doble y
los piroxenos son silicatos de cadena única, el ángulo entre sus planos de
exfoliación es diferente: los piroxenos exfolian en dos direcciones a
aproximadamente 90°, mientras que los anfíboles lo hacen claramente en dos
direcciones separadas aproximadamente a 120° y 60°. Los ángulos de
exfoliación se pueden medir con un goniómetro de contacto, que es similar a un
transportador.

La partición, a veces llamada "falsa exfoliación", es similar en apariencia a la


exfoliación pero se produce por defectos estructurales en el mineral en lugar de
por una debilidad sistemática. La partición varía de cristal a cristal de un mismo
mineral, mientras que todos los cristales de un mineral determinado exfoliaran
si la estructura atómica permite tal propiedad. En general, la partición es
causada por una cierta tensión aplicada a un cristal. Las fuentes de las
tensiones incluyen la deformación (por ejemplo, un aumento de la presión),
exsolution o maclado. Los minerales que a menudo muestran partición son los
piroxenos, la hematita, la magnetita y el corindón.

Cuando un mineral se rompe en una dirección que no corresponde a un plano


de exfoliación, se habla de fractura. Hay varios tipos:

concoidea, cuando se forman superficies redondeadas cóncavas o convexas,


de relieve suave. Se produce solo en minerales muy homogéneo, siendo el
ejemplo clásico la fractura del cuarzo;

lisa, cuando aparecen superficies planas, suaves y sin asperezas;

desigual o irregular, cuando surgen superficies rugosas e irregulares. Se da en


el cobre nativo;
fibrosa o astillosa, cuando se rompe como una madera, formando astillas;

ganchuda, cuando la superficie de rotura aparece dentada;

terrosa, cuando se desmorona como un terrón.

La tenacidad está relacionada tanto con la exfoliación y la fractura. Mientras


que la fractura y la exfoliación describen las superficies que se crean cuando el
mineral se rompe, la tenacidad describe la resistencia que ofrece el mineral a
tal ruptura. Los minerales pueden ser:

frágiles, cuando rompen con facilidad con poco esfuerzo;

maleables, cuando se laminan mediante golpes;

sectiles, cuando se secciona con una cuchilla formando virutas;

dúctiles, cuando se puede estirar convirtiéndose en un hilo;

flexibles, cuando al ser doblados no recuperan la forma al cesar el esfuerzo;

elásticos, cuando al ser doblados recuperan la forma al cesar el esfuerzo.

Densidad relativa

La galena (PbS) es un mineral de alta densidad relativa

La densidad relativa (a veces llamada gravedad específica) describe


numéricamente la densidad de un mineral. Las dimensiones de la densidad son
unidades de masa divididas por unidades de volumen: kg/m³ o en g/cm³. La
densidad relativa mide la cantidad de agua desplazada por una muestra
mineral. Se define como el cociente de la masa de la muestra y la diferencia
entre el peso de la muestra en el aire y su correspondiente peso en agua; la
densidad relativa es una relación adimensional, sin unidades. Para la mayoría
de los minerales, esta propiedad no sirve para caracterizarlos. Los minerales
que forman las rocas —normalmente silicatos y occasionalmente carbonatos—
tienen una densidad relativa de 2.5–3.5.

Una alta densidad relativa si permite diagnosticar algunos minerales. La


variación química (y por consiguiente, en la clase mineral) se correlaciona con
un cambio en la densidad relativa. Entre los minerales más comunes, los
óxidos y sulfuros tienden a tener una alta densidad relativa, ya que incluyen
elementos con mayor masa atómica. Una generalización es que los minerales
metálicos o con brillo diamantino tienden a tener densidades relativas más altas
que las que tienen los minerales no-metálicos o de brillo mate. Por ejemplo, la
hematita, Fe
2O
3, tiene una densidad relativa de mientras que la galena, PbS, tiene una
gravedad específica de 7.2–7.6, que es el resultado de su alto contenido en
hierro y en plomo, respectivamente. La densidad relativa es muy alta en
los metales nativos; la kamacita, una aleación de hierro-níquel común en
los meteoritos de hierro, tiene una densidad relativa de y el oro tiene una
densidad relativa observada entre 15 y 19.

Otras propiedades

Carnotita (amarillo) es un mineral radioactivo

Se pueden utilizar otras propiedades para identificar minerales, aunque son


menos generales y solo aplicables a ciertos minerales.

La inmersión en ácido diluido (a menudo en HCl al 10%) ayuda a distinguir los


carbonatos de otras clases de minerales. El ácido reacciona con el grupo del
carbonato ([CO3] 2-), lo que causa que el área afectada sufra efervescencia,
con desprendimiento de gas dióxido de carbono. Esta prueba se puede ampliar
para poner a prueba el mineral en su forma original de cristal o en polvo. Un
ejemplo de esta prueba se realiza para distinguir la calcita de la dolomita,
especialmente dentro de las rocas (caliza y dolomía, respectivamente). La
efervescencia de la calcita es inmediata en ácido, mientras que para que lo
haga la dolomita el ácido debe aplicarse a muestras en polvo o sobre una
superficie rayada en una roca. Los minerales de zeolita no sufren efervescencia
en ácido; en vez de eso, se vuelven esmerilados después de 5-10 minutos, y si
se dejan en ácido durante un día, se disuelven o se convierten en un gel de
sílice.

El magnetismo es una propiedad muy notable de ciertos minerales. Entre los


minerales comunes, la magnetita muestra esta propiedad con fuerza, y también
está presente, aunque no con tanta intensidad, en la pirrotita y la ilmenita.
Algunos minerales también pueden identificarse mediante la prueba del sabor u
olor. La halita, NaCl, es la sal de mesa; su homólogo de potasio, la silvita, tiene
un sabor amargo pronunciado. Los sulfuros tienen un olor característico, sobre
todo cuando las muestras están fracturadas, reaccionando o en polvo.
La radiactividad es una propiedad poco frecuente, aunque algunos minerales
pueden integrar elementos radiactivos. Pueden ser constituyentes que los
definen, como el uranio en la uraninita, la autunita y la carnotita, o como
impurezas traza. En este último caso, la desintegración de los elementos
radiactivos daña el cristal mineral; el resultado, denominado halo
radiactivo o halo pleocroico, es observable mediante diversas técnicas, en
especial en las láminas finas de petrografía.

Clases de minerales

Dado que la composición de la corteza terrestre está dominada por el silicio y el


oxígeno, los elementos con silicatos son, con mucho, la clase de minerales
más importante en términos de formación de rocas y diversidad: la mayoría de
las rocas se componen en más de un 95% de minerales de silicato, y más del
90% de la corteza terrestre está compuesta por estos minerales. Además de
los componentes principales, silicio y oxígeno, son comunes en los minerales
de silicato otros elementos comunes en la corteza terrestre, como el aluminio,
el magnesio, el hierro, el calcio, el sodio y el potasio. Los silicatos más
importantes que forman rocas son los feldespatos, los cuarzos, los olivinos,
los piroxenos, los anfíboles, los granitos y las micas.

A su vez, los minerales no-silicatos se subdividen en varias clases por su


química dominante: elementos nativos, sulfuros, haluros, óxidos e hidróxidos,
carbonatos y nitratos, boratos, sulfatos, fosfatos y compuestos orgánicos. La
mayoría de las especies minerales no silicatos son extremadamente raras
(constituyen en total un 8% de la corteza terrestre), aunque algunas son
relativamente comunes, como la calcita, pirita, magnetita y hematita. Hay dos
estilos estructurales principales observados en los no-silicatos:
el empaquetamiento compacto y los tetraedros enlazados como aparecen en
los silicatos. Las estructuras compactas son una manera de empaquetar
densamente átomos y reducir al mínimo el espacio intersticial. El empaquetado
compacto hexagonal consiste en apilar
apilar capas en las que cada capa es la
misma ("ababab"), mientras que el empaquetado cúbico consiste en grupos de
apilamiento de tres capas ("abcabcabc").
("

Análogos a los tetraedros de sílice enlazados son los tetraesdros que forman
los iones SO
4 (sulfato), PO
4 (fosfato), AsO
4 (arseniato), y VO
4 (vanadato).

Los minerales no-silicatos


silicatos tienen una gran importancia económica, ya que
concentran más elementos más que lo hacen los minerales de silicato y se
explotan especialmente como menas.

Silicatos

Esquema
Esquem del tetraedro [SiO4]4−
base de los silicatos

Los silicatos son sales que combinan la sílice SiO


2 con otros óxidos metálicos. La base de la unidad de un mineral de silicato es
el tetraedro [SiO4]4−
: en la mayoría de casos, el silicio se encuentra coordinado cuatro veces, o
en coordinación tetraédrica,
tetraédrica, con el oxígeno; en situaciones de muy altas
presiones, el silicio estará coordinado seis veces, o en coordinación octaédrica,
como en la estructura de perovskita o en el cuarzo polimorfo stishovita (SiO2).
(En el último caso, el mineral ya no tiene una estructura de silicato, si no
de rutilo (TiO
2) y su grupo asociado, que son óxidos simples.) Estos tetraedros de sílice son
luego polimerizados en algún grado para crear otras estructuras, como
cadenas unidimensionales, láminas bidimensionales o a
armazones
tridimensionales. El mineral de un silicato básico sin polimerización de
tetraedros requiere de otros elementos que equilibren la base cargada 4-. 4 En
las otras estructuras de silicato son varias las combinaciones de elementos que
equilibran esa carga
rga negativa. Es común que el Si4+
sea sustituido por Al3+
debido a la similitud en radio iónico y en carga; en otros casos, los tetraedros
de [AlO 4]5−
forman las mismas estructuras que lo hacían los tetraedros no sustituidos,
pero los requisitos del equilibrio de cargas son diferentes.

El grado de polimerización puede ser descrito tanto por la estructura formada


como por el número de vértices tetraédricos
tetraédricos (u oxígenos de coordinación)
compartidos (por el aluminio y el silicio en sitios tetraédricos): los ortosilicatos
(o nesosilicatos) no tienen ninguna vinculación de poliedros, así que los
tetraedros no comparten vértices; los disilicatos (o sorosilicatos)
sorosilicatos) tienen dos
tetraedros que comparten un átomo de oxígeno; los inosilicatos son silicatos en
cadena: los de cadena simple tienen dos vértices compartidos y los de cadena
doble dos o tres; los filosilicatos forman una estructura de lámina que requiere
tres
res oxígenos compartidos (en el caso de silicatos de cadena doble, algunos
tetraedros deben compartir dos vértices en lugar de tres como harían si
resultase una estructura de lámina); los silicatos en armazón o tectosilicatos,
tienen tetraedros que comparten
comparten los cuatro vértices; los silicatos de anillo, o
ciclosilicatos, solo necesitan tetraedros que compartan dos vértices para formar
la estructura cíclica.

Se describen a continuación en orden decreciente de polimerización, las


subclases de silicato.

Enlaces de tetraedros

Ortosilicato: tetraedros simples


Sorosilicatos: dobles tetraedros

Inosilicatos: cadenas de tetraedros

Inosilicatos: cadenas dobles de tetraedros

Ciclosilicatos: Anillos de tetraedros

Tectosilicatos
El cuarzo es el principal
al mineral de la serie de los tectosilicatos (cristal de roca
de la mina La Gardette, Francia

Esquema de la estructura interna tridimensional de un cuarzo (cuarzo


(cuarzo-β). Las
esferas rojas representan iones de oxígeno y las esferas grises iones de silicio.

Los tectosilicatos son muy abundantes, constituyendo aproximadamente el


64% de los minerales de la corteza terrestre. También conocidos como
silicatos de estructura en armazón, tienen el grado de polimerización más alto y
tienden a ser químicamente estables como resultado de la fuerza de los
enlaces covalentes. Son ejemplos el cuarzo, los feldespatos
feldespatos,
los feldespatoides, y las zeolitas.
zeolitas

Tienen una estructura basada en un entramado tridimensional


de tetraedros (ZO4) con los cuatro vértices ocupados por el ion O2-
compartidos, lo que implica relaciones Z:O=1:2.38
Z:O=1:2. La Z es silicio (Si) (la
fórmula resultante es SiO 2, sílice),
), pero parte del Si4+
puede ser reemplazado por Al3+ (en raras ocasiones por Fe3+
, Ti3+ y B3+ ). All suceder esto, las cargas negativas resultantes se
compensan con la entrada de cationes grandes, como el K+ , el Na+
o el Ca2+ (y con menos frecuencia Ba2+ , Sr2+ y Cs+ ). También pueden
tener aniones complementarios F−, Cl−, S2−, CO32−, SO42−.

El cuarzo (SiO 2) es la especie mineral más abundante, formando el 12% de la


corteza terrestre. Se caracteriza por su alta resistividad química y física. Tiene
varios polimorfos, incluyendo la tridimita y la cristobalita a altas temperaturas,
la coesita a alta presión y la stishovita a ultra-alta
alta presión. Este último mineral
solo puede formarse en la Tierra por impacto de meteoritos, y su estructura
está tan compuesta que había cambiado de una estructura de silicato a la
de rutilo (TiO 2). El polimorfo de sílice que es más estable
estable en la superficie de la
Tierra es el α-cuarzo.
cuarzo. Su homólogo, el cuarzo-β,
cuarzo está
á presente solo a altas
temperaturas y presiones (a 1 bar, cambia a cuarzo-α
cuarzo α por debajo de 573°C).
Estos dos polimorfos difieren en un retorcimiento de los enlaces; este camb cambio
en la estructura da al cuarzo-β mayor simetría que al cuarzo-α, y por lo tanto
también se les llama cuarzo alto (β) y cuarzo bajo (α).

Los feldespatos son el grupo más abundante en la corteza terrestre, en torno al


50%. En los feldespatos, los Al3+ sustitutos de los Si4+ crean un desequilibrio
de carga que debe ser explicado por la adición de cationes. La estructura de
base se convierte ya en [AlSi 3º 8], ya en [Al 2Si 2º 8]2−.

Hay 22 especies minerales de feldespatos, subdivididas en dos grandes


subgrupos —alcalino y plagioclasa— y dos grupos menos comunes —
celsiana y banalsita. Los feldespatos alcalinos son los más comunes en una
serie que va desde la entre ortoclasa, rica en potasio, a la albita, rica en sodio;
en el caso de las plagioclasas, la serie más común varía desde la albita a
la anortita, rica en calcio. El maclado de cristales es común en los feldespatos,
especialmente con maclas polisintéticas en las plagioclasas y maclas de
Carlsbad en los feldespatos alcalinos. Si el último subgrupo se enfría
lentamente a partir de una masa fundida, se forma laminillas de exsolution
porque los dos componentes —ortoclasa y albita— son inestables en solución
sólida. La exsolution puede darse desde una escala microscópica hasta ser
fácilmente observable en la muestra de mano; se forma una textura pertitica
cuando un feldespato rico en Na exsolve en un huésped rico en K. La textura
opuesta (antipertitica), cuando un feldespato rico en K exsolve en un huésped
rico en Na, es muy rara.

Los feldespatoides son estructuralmente similares a los feldespatos, pero se


diferencian en que se forman en condiciones de carencia de silicio lo que
permite una mayor sustitución por Al3+
. Como resultado, los feldespatoides no se pueden asociar con cuarzo. Un
ejemplo común de un feldespatoide es la nefelina ((Na, K)AlSiO
4); comparada con los feldespatos alcalinos, la nefelina tiene una relación Al
2º 3: SiO
2 de 1: 2, en lugar de 1:6 en el feldespato.

Las zeolitas a menudo tienen hábitos de cristal distintivos, produciendo agujas,


placas o bloques masivos. Se forman en presencia de agua a bajas
temperaturas y presiones, y tienen canales y huecos en su estructura. Las
zeolitas tienen varias aplicaciones industriales, especialmente en el tratamiento
de aguas residuales.

Ejemplos de tectosilicatos
Albita

Anortita

Ortoclasa

Nefelina

Zeolita
Filosilicatos

Moscovita,
vita, una especie mineral del grupo de las micas, dentro de la subclase
de los filosilicatos

Modelo poliédrico de la lámina de tetraedros de sílice.

Los filosilicatos son un grupo de minerales muy extendidos en la corteza


terrestre, integrantes de muchos tipos de rocas, ígneas, metamórficas y
sedimentarias. Las arcillas están formadas fundamentalmente por filo
filosilicatos.
silicatos.

La característica principal de los filosilicatos es su disposición en capas, que


ocasiona hábitos típicos fácilmente reconocibles (minerales hojosos o
escamosos). Además suelen ser minerales blandos y poco densos.

Los filosilicatos consisten en apilamientos de láminas de tetraedros


polimerizados. Las láminas, desde el punto de vista estructural, son de dos
tipos: tetraédricas y octaédricas. Los tetraédricas están enlazados a tres sitios
de oxígeno, lo que da una relación característica de silicio:oxígeno
silicio:oxígeno de 2:5.
Ejemplos importantes son la mica, el grupo de las cloritas y los grupos
de caolinita-serpentina.. Las láminas están débilmente enlazadas por fuerzas de
van der Waals o enlaces de hidrógeno, lo que provoca una debilidad
cristalográfica, que a su vez conduce a una prominente exfoliación basal entre
los filosilicatos. Además de los tetraedros, los filosilicatos tienen una hoja de
octaedros (elementos de coordinación seis con oxígeno) que equilibran los
tetraedros de base, que tienen una carga negativa (por ejemplo, [Si
4ºº 10]4−
) Estas hojas de tetraedros (T) y octaedros (O) se apilan en una gran variedad
de combinaciones para crear los distintos grupos de los filosilicatos. En una
capa octaédrica, hay tres sitios octaédricos en una estructura única; sin
embargo, no todos los sitios pueden estar ocupados. En ese caso, el mineral
se denomina dioctahédrico, mientras que en otro caso se denomina
trioctaédrico.

El grupo de la caolinita-serpentina consiste en pilas de T-O (minerales de arcilla


1:1); su dureza varía de 2 a 4, cuando las láminas están retenidas por enlaces
de hidrógeno. Los minerales de arcilla 2:1 (pirofilita-talco) consisten en pilas T-
O-T, pero son más blandos (dureza 1-2), ya que están se mantienen unidos por
fuerzas de van der Waals. Estos dos grupos de minerales están divididos en
subgrupos según la ocupación octaédrica; específicamente, la caolinita y la
pirofilita son dioctaédricos mientras que la serpentina y el talco son
trioctaédricos.

Las micas son también filosilicatos T-O-T apilados, pero difieren de los otro
miembros de las subclases apiladas T-O-T y T-O en que incorporan aluminio
en las láminas tetraédricas (los minerales de arcilla tienen Al3+
en los sitios octaédricos). Ejemplos comunes de micas son la moscovita y las
series de la biotita. El grupo de la clorita se relaciona con el grupo de la mica,
pero con una capa similar a la brucita (Mg(OH)
2) entre la de las pilas T-O-T.<2:602–605

A causa de su estructura química, los filosilicatos típicamente tienen capas


flexibles, elásticas, transparentes que son aislantes eléctricos y se pueden
dividir en escamas muy finas. Las micas se puede utilizar en la electrónica
como aislantes, en la construcción, como relleno óptico, o incluso en
cosméticos. Crisotila, una especie de serpentina, es la especie mineral más
común en el amianto industrial, ya que es menos peligrosa en términos de la
salud que los asbestos anfíboles.

Ejemplos de filosilicatos

Fuchsita, una mica


Biotita

Crisotilo

Brucita

Serpentina

Inosilicatos

Disposición cristalina de los inosilicatos


Tremolita asbestiforme, parte del grupo de los anfiboles en la subclase de los
inosilicatos

Aegirina, un clinopiroxeno hierro-sodio, es parte de la subclase inosilicatos

Los inosilicatos son metasilicatos que consisten en tetraedros unidos


repetidamente en cadenas. Estas cadenas pueden ser simples —cuando un
tetraedro está unido a otros dos para formar una cadena continua —o dobles,
cuando dos cadenas sencillas se combinan entre ellas. Los silicatos de cadena
individuales tienen una relación de silicio:oxígeno de 1:3 (por ejemplo, [Si
2º 6]4− ), mientras que las variedades de doble cadena tiene una proporción de
4:11, por ejemplo [Si 8º 22]12− . Los inosilicatos tienen dos importantes grupos
de minerales que forman rocas; los piroxenos, generalmente silicatos de
cadena simple, y los anfiboles, de cadena doble. Hay cadenas de orden
superior (por ejemplo, cadenas de tres, cuatro o cinco miembros) pero son
raras.

El grupo de los piroxenos consta de 21 especies minerales. Los piroxenos


tienen una fórmula de estructura general (XYSi
2º 6), siendo X un sitio octaédrico e Y otro que puede variar en número de
coordinación de seis a ocho. La mayoría de las variedades de los piroxenos
consisten en permutaciones de Ca2+
, Fe2+ y Mg2+
que equilibran la carga negativa de la cadena principal. Los piroxenos son
comunes en la corteza terrestre (aproximadamente el 10%) y son un
componente clave de las rocas ígneas máficas.

Los anfiboles tienen una gran variabilidad química, por ello descritos a veces
como un «cesto mineralógico» o un «tiburón mineralógico nadando en un mar
de elementos». La columna vertebral de los anfíboles es la [Si
8º 22]12−
; está equilibradoa por cationes en tres posiciones posibles, aunque la tercera
posición no siempre se utiliza y un elemento puede ocupar las restantes. Los
anfíboles están generalmente hidratados, es decir, que tienen un grupo
hidroxilo ([OH]−
), aunque puede ser reemplazado por un fluoruro, un cloruro, o un ion de
óxido. Debido a su química variable, hay más de 80 especies de anfíboles,
aunque las variaciones más comunes, como en los piroxenos, implican
mezclas de Ca2+
, Fe2+ y Mg2+

Varias especies minerales de los anfíboles pueden tener un hábito


cristalino asbestiforme. Estos minerales de asbesto forman fibras largas,
delgadas, flexibles y fuertes, que son aislantes eléctricos, químicamente inertes
y resistentes al calor; como tal, tienen varias aplicaciones, especialmente en
materiales de construcción. Sin embargo, los asbestos son conocidos
carcinógenos, y causan varias enfermedades más, como la asbestosis; los
asbestos anfíboles (antofilita, tremolita, actinolita, grunerita y riebeckita) se
consideran más peligrosos que el asbesto serpentina crisotilo.

Ejemplos de inosilicatoss

Diopsida, un piroxeno
Piroxeno

Antofilita (anfibol)

Tremolita (anfibol)

Crocidolita, variedad de riebeckita(anfíbol)

Ciclosilicatos

Estructura en anillo de la dioptasa.

La clase de los ciclosilicatos corresponde a la clase 9.C de la clasificación de


Strunz y tiene 16 familias. Está integrada por tres o más tetraedros de
[SiO4]4− unidos por sus vértices, formando un anillo cerrado, simple o doble, el
cual puede tener enlaces iónicos con un metales como por
ejemplo sodio, calcio, hierro, aluminio, potasio, magnesio, etc. Algunos
ejemplos de ciclosilicatos son
la turmalina, cordierita, rubelita, benitoita, dioptasa, etc.

Los ciclosilicatos, o silicatos de anillo, tienen una relación de silicio a oxígeno


de 1:3. Los anillos de seis miembros son los más comunes, con una estructura
de base de [Si 6º 28]12− ; ejemplos del grupo son la turmalina y el berilo. Hay
otras estructuras de anillo, habiendo sido descritas las de 3, 4, 8, 9 y 12 . Los
ciclosilicatos tienden a ser fuertes, con cristales alargados y estriados. Los
anillos pueden ser simples o ramificados, aislados unos de otros o agrupados
en dos. Estos anillos están generalmente apilados en la estructura y determinar
canales que puede estar vacíos u ocupados por iones o moléculas. Los
ciclosilicates se clasifican según el tipo de anillos, y en particular por el número
de tetraedros en el anillo.

Las turmalinas tienen una química muy compleja que puede ser descrita por
una fórmula general XY 3Z 6(BO 3) 3T 6º 18V 3W. El T 6º 18 es la estructura
básica del anillo, donde T es generalmente Si4+ , pero pueden ser sustituidos
por Al3+ o B3+.

Las turmalinas pueden dividirse en subgrupos por el sitio que ocupe el X, y de


ahí se subdividen por la química del sitio W. Los sitios Y y Z pueden acomodar
una variedad de cationes, especialmente diversos metales de transición; esta
variabilidad en el contenido del metal de transición estructural da al grupo de la
turmalina mayor variabilidad en color. Otro ciclosilicato es el berilo, Al 2Be
3Si 6º 18, cuyas variedades incluyen piedras preciosas como la esmeralda
(verde) y la aguamarina (azulado). La cordierita es estructuralmente similar al
berilo, y es un mineral metamórfico común.

Ejemplos de ciclosilicatoss

Elbaita, una turmalina con una distintiva banda coloreada


Benitoita

Cordierita

Dioptasa

Berilo

Sorosilicatos

La epidota a menudo tiene un color verde pistacho distintivo.


La clase de los sorosilicatos corresponde a la clase 9.B de la clasificación de
Strunz y tiene 10 familias, de dos tipos, el de las de las epidotas y el de las
idocrasas.

Los sorosilicatos, también denominados disilicatos, tienen un enlace tetraedro-


tetraedro en un oxígeno, lo que resulta en una relación de 2:7 de silicio al
oxígeno. El elemento estructural común resultante es el grupo [Si
2º 7]6− . Los disilicatos más comunes son, con mucho, los miembros del grupo
de la epidota. Las epidotas se encuentran en diversos entornos geológicos, que
van desde las cordilleras oceánicas a los granitos y hasta las metapelitas. Las
epidotas se construyen alrededor de la estructura [(Si 2º 4)(Si 2º 7)]10−
; por ejemplo, las especies minerales de epidota tiene calcio, aluminio y hierro
férrico para equilibrar las cargas: Ca 2Al 2(Fe3+ ,Al)(SiO 4)(Si 2O
7)O(OH). La presencia de hierro como Fe3+ y Fe2+ ayuda a entender
la fugacidad de oxígeno, que a su vez es un factor significativo en etrogénesis.

Otros ejemplos de sorosilicatos son la lawsonita, un mineral metamórfico que


forma las facies blueschist (ajuste de zona de subducción con baja temperatura
y alta presión), la vesuvianita, que ocupa una cantidad significativa de calcio en
su estructura química.

Ortosilicatos

Andradita negra, un miembro terminal del grupo de granates.


Modelo estructural del zircônio

La clase de los ortosilicatos corresponde a la clase 9.A de la clasificación de


Strunz y tiene 10 familias con cerca de 120 especies.

Los ortosilicatos consisten en tetraedros aislados que tienen las cargas


equilibrada por otros cationes. También denominados nesosilicatos, este tipo t
de silicatos tiene una relación silicio:oxígeno de 1:4 (por ejemplo, SiO
4). Los ortosilicatos típicos tienden a formar bloques de cristales equantes, y
son bastante pesados. Varios minerales que forman rocas son parte de esta
subclase, como los aluminosilicatos,
osilicatos, el grupo del olivino o el grupo del granate.

Los aluminosilicatos —cianita


cianita, andalucita, y silimanita, todos Al 2SiO 5— están
estructuralmente compuestos por un tetraedro [SiO 4]− y un Al3+ en
coordinación octaédrica. El restante Al3+ puede estar en coordinación de seis
(cianita), cinco (andalucita) o cuatro (silimanita); qué mineral se forma en un
entorno dado depende de las condiciones de presión y temperatura. En la
estructura
ura del olivino, la serie principal de olivino (Mg, Fe) 2SiO 4 consisten en
forsterita, rica en magnesio, y fayalita, rica en hierro. Tanto el hierro como el
magnesio están en coordinación octaédrica con el oxígeno. Existen otras
especies minerales que tienen tie esta estructura, como la tefroita, Mn 2SiO
4. El grupo del granate tiene una fórmula general de X 3Y 2(SiO 4)
3, donde X es un gran an catión ocho veces coordinado, e Y es un catión menor
seis veces coordinado. Hay seis miembros terminales ideales de granate,
divididos en dos grupos. Los granates piralspita tienen Al3+ en la posición
Y: piropo (Mg 3Al 2(SiO 4) 3), almandino (Fe 3Al 2(SiO 4) 3), y espesartina (Mn
3Al 2(SiO 4) 3). Los granates ugrandita tienen Ca2+ en la posición
X: uvarovita (Ca 3Cr 2(SiO 4) 3), grossular (Ca 3Al 2(SiO 4) 3) y andradita (Ca
3Fe 2(SiO 4) 3). Si bien hay dos subgrupos de granate, existen soluciones
sólidas entre los seis
eis miembros finales.

Otros ortosilicatos son el circón,


circón la estaurolita y el topacio.. El zirconio (ZrSiO
4) es útil en geocronología ya que el Zr4+ puede ser sustituido por U6+
; además, debido a su estructura muy resistente, es difícil resetearlo como un
cronómetro. La estaurolita es un común mineral índice de grado intermedio
metamórfico. Tiene una estructura cristalina particularmente complicada que
solo fue descrita plenamente en 1986. El topacio (Al 2SiO 4(F, OH)
2, que se encuentra a menudo en pegmatitas graníticas asociadas con
turmalina, piedra preciosa es un mineral común.

Ejemplos de ortosilicatos

Andalucita, un aluminosilicato

Almandina, del grupo del granate

Humita

Ludwigita, del grupo del olivino


Zirconio

Minerales no silicatos

Elementos nativos

Oro nativo. Raro especímen de cristales gruesos que crecen fuera de un tallo
central (3.7 x 1.1 x 0.4 cm, de Venezuela).

Los elementos nativos son aquellos minerales integrados por elementos que no
están unidos químicamente a otros elementos. Este grupo incluye
minerales metales nativos, semi-metales y no metales, y varias aleaciones
sólidas y soluciones. Los metales se mantienen unidos por enlaces metálicos,
lo que les confiere propiedades físicas distintivas, como su lustre metálico
brillante, ductilidad y maleabilidad, y conductividad eléctrica. Los elementos
nativos se subdividen en grupos por su estructura o atributos químicos.

El grupo del oro, con una estructura cercana al empaquetamiento cúbico,


incluye metales como el oro, la plata y el cobre. El grupo del platino es similar
en estructura al grupo de oro. El grupo del hierro-níquel se caracteriza por tener
varias especies de aleaciones de hierro-níquel. Dos ejemplos son la kamacita y
la taenita, que se encuentran en meteoritos de hierro; estas especies difieren
en la cantidad de Ni en la aleación; la kamacita tiene menos de 5–7% de níquel
y es una variedad de hierro nativo, mientras que el contenido de níquel de la
taenita es del 7–37%. Los minerales del grupo del arsénico se componen de
semi-metales, que tienen solamente algunos metálicos; por ejemplo, carecen
de la maleabilidad de los metales. El carbono nativo aparece en dos alótropos,
el grafito y el diamante; el último se forma a muy alta presiones en el manto, lo
que le confiere una estructura mucho más fuerte que el grafito.

Sulfuros

Cinabrio rojo (HgS), una mena del mercurio, sobre dolomita

La clase de los minerales sulfuros y sulfosales —denominación engañosa pues


los sulfuros solo son una parte del grupo— corresponde a la clase 2 de
la clasificación de Strunz y en ella se incluyen: minerales sulfuros —con el
ion S2− —-, los seleniuros, teluriuros, arseniuros, antimoniuros, bismutiuros,
sulfoarseniuros y sulfosales. Los sulfuros se clasifican por la relación del metal
o del semimetal con el azufre, M:S igual a 2:1, o 1:1. A pesar de que los
sulfuros son mucho menos abundantes que los silicatos, su química y sus
estructuras son muy variadas, lo que explica porque el número de minerales de
sulfuro es muy alto en relación a su abundancia.

Se agrupan entre los sulfuros los minerales compuestos de uno o más metales
o semimetales con un azufre, que tienen una fórmula de tipo general de M
MS p, donde M es un metal (Ag, Cu, Pb, Zn, Fe, Ni, Hg, As, Sb, Mo, Hg, Tl, V).
Los arseniuros, los antimoniuros, los telurios... se clasifican entre los
«sulfuros» sensu lato debido a su similitud estructural con los sulfuros.

Los sulfuros minerales se caracterizan por la unión covalente, la opacidad y el


brillo metálico; se estudian con el microscopio de reflexión. Los sulfuros tienden
a ser blandos y frágiles, con un alto peso específico y la mayoría son
semiconductores. Muchos sulfuros en polvo, como la pirita, tienen un olor
sulfuroso cuando son pulverizados. Los sulfuros son susceptibles a la
intemperie, y muchos se disuelven fácilmente en agua; estos minerales
disueltos se pueden después volver a redepositar, lo que crea yacimientos de
menas secundarias.

Muchos minerales de sulfuro son importantes económicamente como minerales


metálicos; son ejemplos la esfalerita (ZnS), una mena de zinc; la galena (PbS),
una mena de plomo; el cinabrio (HgS), una mena de mercurio; y
la molibdenita (MoS 2, una mena de molibdeno. La pirita (FeS
2) es el sulfuro que aparece más y se puede encontrar en la mayoría de
entornos geológicos. No es, sin embargo, una mena de hierro, pero puede ser
oxidada para producir ácido sulfúrico. Relacionados con los sulfuros están las
raras sulfosales, en las que un elemento metálico está unido al azufre y a un
semimetal, como antimonio, arsénico o bismuto. Al igual que los sulfuros, las
sulfosales son típicamente minerales blandos, pesados y frágiles.

Ejemplos de sulfuros

Pirita, disulfuro de hierro

Esfalerita, mena de zinc

Molibdenita, mena de molibdeno

Estannita, mena de estaño


Reálgar, sulfuro de arsénico

Óxidos

Categorías y artículos principales: Minerales óxidos y Minerales óxidos. La


clase de los minerales óxidos e hidróxidos corresponde a la clase 4 de
la clasificación de Strunz y en ella se
incluyen: óxidos, hidróxidos, vanadatos, arsenitos, antimonitos, bismutitos, sulfit
os, selenitos, teluritos y yodatos.

Los minerales óxidos se dividen en tres categorías: óxidos simples, hidróxidos


y óxidos múltiples. Los óxidos simples se caracterizan por O2−
como anión principal y enlace principalmente iónico. Se pueden subdividir
además por la relación del oxígeno a los cationes. El grupo de
la periclasa consta de minerales con una relación 1:1. Óxidos con una relación
2:1 incluyen la cuprita (Cu 2O) y el hielo de agua. minerales del grupo
del corindón tienen una proporción de 2:3, e incluye minerales como el
corindón (Al 2º 3) y la hematita(Fe 2º 3). Los minerales del grupo el rutilo tienen
una proporción de 1:2; la especie del mismo nombre, rutilo (TiO
2) es el principal mena del titanio; Otros ejemplos incluyen la casiterita (SnO
2, mena de estaño), y pirolusita (MnO 2, mena de manganeso). En hidróxidos,
el anión dominante es el ion hidroxilo, OH−.

Las bauxitas son la mena principal del aluminio, y son una mezcla heterogénea
de minerales de hidróxido de diáspora, gibbsita, y bohmita; se forman en áreas
con una alta tasa de meteorización química (principalmente condiciones
tropicales). Por último, varios óxidos son compuestos de dos metales con
oxígeno. Un grupo importante dentro de esta clase son las espinelas, con una
fórmula general de X2+ Y3+ 2º 4. Ejemplos de especies incluyen la
propia espinela(MgAl 2º 4), la cromita (FeCr 2º 4) y la magnetita (Fe 3O
4). Esta última es fácilmente distinguible por su fuerte magnetismo, que se
produce ya que tiene hierro en dos estados de oxidación (Fe2+ Fe3+
2º 4), lo que hace que sea un óxido múltiple en lugar de un óxido simple.
Ejemplos de minerales óxidos

Anatasa, dióxido de titanio (TiO2)

Cuprita, óxido de cobre

Casiterita, óxido de estaño

Gibbsita, hidróxido de aluminio

Magnetita, óxido de hierro


Haluros

Cristales de halita cúbica rosa (NaCl; clase haluro) en una matriz


de nahcolita(NaHCO 3; un carbonato, y la forma mineral del bicarbonato
sódico, que se utilizan como bicarbonato de sodio). baking soda).

La clase de los minerales haluros corresponde a la clase 3 de la clasificación


de Strunz y en ella se incluyen: haluros o halogenuros simples o complejos,
con H2O o sin ella, así como derivados oxihaluros, hidroxihaluros y haluros con
doble enlace.

Los minerales haluros son compuestos en los que un halógeno (flúor, cloro,
yodo y bromo) es el anión principal. Estos minerales tienden a ser blandos,
débiles, quebradizos y solubles en agua. Los ejemplos más comunes de
haluros son la halita (NaCl, sal de mesa), la silvita (KCl) y la fluorita (CaF
2). La halita y la silvita se forman comúnmente como evaporitas, y pueden ser
minerales dominantes en las rocas sedimentarias químicas. La criolita, Na
3AlF 6, es un mineral clave en la extracción de aluminio a partir de la bauxita;
Sin embargo, dado que la única ocurrencia significativa está
en Ivittuut, Groenlandia, en una pegmatita granítica, ya agotada, la criolita
sintética se puede hacer a partir de la fluorita.

Carbonatos

Categorías y artículos principales: Minerales carbonatos y Minerales


carbonatos.
Cristales de calcita de la mina Sweetwater, condado de Reynolds, Missouri (6.2
× 6 × 3.3 cm La clase de los minerales carbonatos y nitratos corresponde a la
clase 5 de la clasificación de Strunz y en ella se incluyen carbonatos, uranilo-
carbonatos y nitratos.

Los minerales carbonatos son aquellos en los que el grupo aniónico principal
es un carbonato, [CO3]2−.

Los carbonatos tienden a ser frágiles, muchos tienen exfoliación romboédrica, y


todos reaccionan con ácido.

Debido a la última característica, los geólogos de campo a menudo llevan ácido


clorhídrico diluido para distinguir los carbonatos de los no-carbonatos. La
reacción del ácido con los carbonatos, que se encuentra más comúnmente
como los polimorfos calcita y aragonita (CaCO
3), se refiere a la disolución y precipitación del mineral, que es un elemento
clave en la formación de las cuevas de caliza —con elementos como
estalactitas y estalagmitas— y los accidentes geográficos kársticos. Los
carbonatos se forman con mayor frecuencia en forma de sedimentos
biogénicos o químicos en ambientes marinos. El grupo carbonato es
estructuralmente un triángulo, donde un catión central de C4+
está rodeado por tres aniones O2−
; diferentes grupos de minerales se forman a partir de diferentes disposiciones
de estos triángulos.

El mineral de carbonato más común es la calcita, que es el componente


principal de la sedimentaria caliza y del mármol metamórfico. La calcita, CaCO
3, puede tener una impureza de alto contenido en magnesio; en condiciones de
alto magnesio, se formará en su lugar su polimorfo, la aragonita; la geoquímica
marina se puede describir, en este sentido, como un mar de aragonito o mar de
calcita, dependiendo de qué mineral se forme preferentemente. La dolomita es
un carbonato doble, de fórmula CaMg(CO
3).

La dolomitization secundaria de la caliza es común, en la que la calcita o la


aragonita se convierten en dolomita; esta reacción aumenta el espacio de los
poros (el volumen de la celda unidad de la dolomita es el 88% del de la calcita),
lo que puede crear un yacimiento de petróleo y gas. Estas dos especies
minerales son miembros de los grupos de minerales del mismo nombre: el
grupo de la calcita incluye carbonatos con fórmula general XCO
3y el de la dolomita la de XY(CO
3)
Ejemplos de minerales carbonatos

Rodocrosita

Smithsonita

Dolomita con calcita y calcopirita

Azurita y malaquita

Hanksita, uno de los pocos minerales considerado un carbonato y un sulfato


Sulfatos

Rosa del desierto de yeso

La clase de los minerales sulfatos corresponde a la clase 7 de la clasificación


de Strunz y en ella se
incluyen: sulfatos, selenatos, teluratos, cromatos, molibdatos y wolframatos.

Los minerales sulfatos tienen todos el anión sulfato, [SO


4]2−.

Tienden a ser de transparentes a translúcidos, blandos, y muchos son frágiles.


Los minerales de sulfato se forman comúnmente como evaporitas, donde se
precipitan de la evaporación de las aguas salinas; alternativamente, los sulfatos
también se pueden encontrar en los sistemas de vetas hidrotermales asociados
con sulfuros, o como productos de oxidación de sulfuros. Los sulfatos se
pueden subdividir en minerales anhidros e hidratados. El sulfato hidratado más
común, con mucho, es el yeso, CaSO
4⋅2H 2O. Se forma como un evaporita, y se asocia con otros evaporitas como
la calcita y la halita; si incorpora granos de arena cuando cristaliza, el yeso
puede formar rosas del desierto. El yeso tiene muy baja conductividad térmica
y mantiene una temperatura baja cuando se calienta a medida que pierde el
calor por deshidratación; como tal, el yeso se utiliza como aislante en
materiales de construcción. El equivalente anhidro del yeso es la anhidrita; se
puede formar directamente de agua de mar en condiciones muy áridas. El
grupo de la barita tiene la fórmula general XSO
4, donde X es un catión grande 12-enlazado. Son ejemplos la barita (BaSO
4), la celestina (SrSO
4), y la anglesita (PbSO
4); la anhidrita no es parte del grupo de la barita, ya que el más pequeño Ca2+
sólo tiene enlace ocho veces.

Ejemplos de minerales sulfatos


Barita con cerusita

Fenicocroíta, un cromato

Lindgrenita, molibdato de cobre

Anhidrita

Xocomecatlita, un tellurato
Fosfatos

La clase de los minerales fosfatos corresponde a la clase 8 de la clasificación


de Strunz y en ella se incluyen fosfatos, arseniatos y vanadatos. Son 51
familias agrupadas en 7 divisiones, un grupo grande y diverso, que sin
embargo, tiene solo unas pocas especies relativamente comunes.

Los minerales fosfatos se caracterizan por el anión fosfato coordinado


tetraédricamente [PO 4]3− , aunque la estructura se puede generalizar siendo
el fósforo sustituido por antimonio ([sob 4]3− ), arsénico ([AsO 4]3− ), o vanadio
([VO 4]3− ). Los aniones de cloro (Cl− ), flúor (F− ) e hidróxido (OH− ) también
encajan en la estructura cristalina.

El fosfato más común es el grupo de la apatita, un nombre genérico que


designa fosfatos hexagonales de composición bastante variable, Ca 5(PO 4)
3(OH, Cl,F). Las especies más comunes del grupo son la fluorapatita (Ca
5(PO 4) 3F), la clorapatita (Ca 5(PO4) 3Cl) y la hidroxiapatita (Ca 5(PO 4)
3(OH)). Los minerales de este grupo son los principales constituyentes
cristalinos de los dientes y de los huesos de los vertebrados.

Otro grupo relativamente abundante es el grupo de la monacita, que tiene una


estructura general de ATO
4, donde T es el fósforo o arsénico, y A es, a menudo, un elemento de
las tierras raras. La monacita es importante en dos sentidos: en primer lugar,
como sumidero de tierras raras, puede concentrar la cantidad suficiente de
estos elementos para convertirse en una mena; en segundo lugar, los
elementos del grupo de la monacita pueden incorporar cantidades
relativamente grandes de uranio y torio, que pueden ser utilizadas para datar
una roca basándose en la desintegración del U y Th en plomo.

Ejemplos de minerales fosfatos

Apatita
Vivianita, un fosfato hidratado de hierro

Piromorfita, un cloro-fosfato anhidro de plomo

Turquesa, fosfato hidratado de cobre y aluminio

Lazulita, un fosfato de hierro, aluminio y magenesio

Minerales organicos

La clase de los minerales compuestos orgánicos corresponde a la clase 10 de


la clasificación de Strunz y en ella se incluyen sales y ácidos orgánicos que
aparezcan en minas y los hidrocarburos. Son 7 familias agrupadas en 3
divisiones, un grupo escaso.
Estos raros compuestos contienen carbono orgánico, pero se pueden formar
también medianteun proceso geológico. Por ejemplo, la whewellita, CaC
2º 4⋅H
2O es un oxalato que se puede depositar en las venas de menas
hidrotermales. Mientras el oxalato de calcio hidratado se puede encontrar en
las vetas de carbón y en otros depósitos sedimentarios que comprenden
materia orgánica, la ocurrencia hidrotérmica no se considera que está
relacionada con la actividad biológica.

Importancia y utilidad

Minerales diversos

Los minerales tienen gran importancia por sus múltiples aplicaciones en los
diversos campos de la actividad humana. La industria moderna depende
directa o indirectamente de los minerales.

Algunos minerales se utilizan prácticamente tal como se extraen; por ejemplo


el azufre, el talco, la sal de mesa, etc. Otros, en cambio, deben ser sometidos a
diversos procesos para obtener el producto deseado, como
el hierro, cobre, aluminio, estaño, etc. Los minerales constituyen la fuente de
obtención de los diferentes metales, base tecnológica de la sociedad actual.
Así, de distintos tipos de cuarzo y silicatos, se produce el vidrio. Los nitratos y
fosfatos son utilizados como abono para la agricultura. Ciertos materiales,
como el yeso, son utilizados profusamente en la construcción. Los minerales
que entran en la categoría de piedras preciosas o semipreciosas, como
los diamantes, topacios, rubíes, se destinan a la confección de joyas.

Astrobiología

Se ha sugerido que los biominerales podrían ser indicadores importantes


de vida extraterrestre y que por lo tanto podrían jugar un papel importante en la
búsqueda de vida pasada o presente en el planeta Marte. Por otra parte, se
cree que los componentes orgánicos (biofirmas), que a menudo se asocian con
los biominerales, juegan un papel crucial tanto en reacciones pre-bióticas
como bióticas.

El 24 de enero de 2014, la NASA informó que los estudios actuales de


los rovers Curiosity y Opportunity en Marte estarán ahora destinados a la
búsqueda de evidencia de vida antigua, incluyendo una biosfera basada
en microorganismos autótrofos, quimiótrofos y/o quimiolitoautotróficos, así
como en agua antigua, incluyendo ambientes fluvo-lacustres (llanuras
relacionadas con antiguaos rios o lagos) que pueden haber sido habitables.44
La búsqueda de evidencia de habitabilidad, tafonomía (relacionada con
los fósiles), y el carbono orgánico en el planeta Marte son ahora un objetivo
primordial de la NASA.

Diamante

Para otros usos de este término, véase Diamante (desambiguación).

Diamante

General

Categoría Minerales elementos (no


metales)

Clase 1.CBº11
0a (Strunz)

Fórmula C
química

Propiedades físicas

Color Típicamente amarillo, marrón o


gris a incoloro. Menos frecuente
azul, verde, negro, blanco
translúcido, rosado, violeta,
anaranjado, púrpura y rojo
(fancy diamond).1

Raya Incolora

Lustre Adamantino1

Transparencia Transparente a subtransparente


a translúcido.

Sistema Isométrico-Hexoctaédrico
cristalino (Sistema cristalino cúbico)

Fractura Concoidal

Dureza 10 (Material más duro


conocido)

Densidad 3,5 - 3,53 g/cm3

Índice de 2,4175 - 2,4178


refracción

Birrefringencia Ninguna

Pleocroísmo Ninguno

Propiedades Refractiva simple


ópticas
Minerales relacionados

Zirconia cúbica, Moissanita, Carburo de silicio

En la mineralogía, el diamante (del griego antiguo αδάμας, adámas, que


significa invencible o inalterable) es un alótropo del carbono donde
los átomos de carbono están dispuestos en una variante de la estructura
cristalina cúbica centrada en la cara denominada «red de diamante». El
diamante es la segunda forma más estable de carbono, después del grafito; sin
embargo, la tasa de conversión de diamante a grafito es despreciable a
condiciones ambientales. El diamante tiene renombre específicamente como
un material con características físicas superlativas, muchas de las cuales
derivan del fuerte enlace covalente entre sus átomos. En particular, el diamante
tiene la más alta dureza y conductividad térmica de todos los materiales
conocidos por el ser humano. Estas propiedades determinan que la aplicación
industrial principal del diamante sea en herramientas de corte y de pulido
además de otras aplicaciones.

El diamante es uno de los minerales más preciados del mundo por sus
características físicas y ópticas. Debido a su
estructura cristalina extremadamente rígida, puede ser contaminada por pocos
tipos de impurezas, como el boro y el nitrógeno. Combinado con su gran
transparencia (correspondiente a una amplia banda prohibida de 5,5 eV), esto
resulta en la apariencia clara e incolora de la mayoría de diamantes naturales.
Pequeñas cantidades de defectos o impurezas (aproximadamente una parte
por millón) inducen un color de diamante azul (boro), amarillo (nitrógeno),
marrón (defectos cristalinos), verde, violeta, rosado, negro, naranja o rojo. El
diamante también tiene una dispersión refractiva relativamente alta, esto es,
habilidad para dispersar luz de diferentes colores, lo que resulta en
su lustre característico. Sus propiedades ópticas y mecánicas excelentes,
combinadas con una mercadotecnia eficiente, hacen que el diamante sea
la gema más popular.

La mayoría de diamantes naturales se forman en condiciones de presión y


temperatura extremas, existentes a profundidades de 140 km a 190 km en
el manto terrestre. Los minerales que contienen carbono proveen la fuente de
carbono, y el crecimiento tiene lugar en períodos de 1 a 3,3 mil millones de
años, lo que corresponde a, aproximadamente, el 25 % a 75 % de la edad de la
Tierra. Los diamantes son llevados cerca de la superficie de la Tierra a través
de erupciones volcánicas profundas por un magma, que se enfría en rocas
ígneas conocidas como kimberlitas y lamproitas. Los diamantes también
pueden ser producidos sintéticamente en un proceso de alta presión y alta
temperatura que simula aproximadamente las condiciones en el manto de la
Tierra. Una alternativa, y técnica completamente diferente, es la deposición
química de vapor. Algunos materiales distintos al diamante, incluyendo a
la zirconia cúbica y carburo de silicio son denominados frecuentemente
como simulantes de diamantes, semejando al diamante en apariencia y
muchas propiedades. Se han desarrollado técnicas gemológicas especiales
para distinguir los diamantes sintéticos y los naturales, y simulantes de
diamantes.

Historia

El nombre diamantes deriva del griego antiguo ἀδάμας (adámas), «propio»,


«inalterable», «irrompible, indomable», de ἀ- (a-), «sin» + δαμάω (damáō), «yo
gobierno, yo domo». Sin embargo, se piensa que los diamantes fueron
reconocidos y minados por primera vez en la India, donde depósitos
aluviales significativos de dicha piedra podrían haberse encontrado muchos
siglos atrás a lo largo de los ríos Penner, Krishna y Godavari. Se considera
probado que los diamantes han sido conocidos en la India desde hace al
menos 3.000 años, y se conjetura que se conocieran hace ya 6.000 años. Los
diamantes han sido atesorados como gemas desde su uso como iconos
religiosos en la antigua India. Su uso en herramientas de grabado también se
remonta a la historia humana más temprana. La popularidad de los diamantes
ha ido creciendo desde el siglo XIX debido a su creciente suministro, mejores
técnicas de corte y pulido, crecimiento en la economía mundial, y campañas de
publicidad innovadoras y exitosas.

En 1813, Humphry Davy usó una lente para concentrar los rayos del sol en un
diamante en una atmósfera de oxígeno, y demostró que el único producto de
la combustión era dióxido de carbono, demostrando que el diamante estaba
compuesto de carbono. Posteriormente, demostró que, en una atmósfera
desprovista de oxígeno, el diamante se convierte en grafito.

El uso más familiar de los diamantes hoy en día es como gemas usadas
para adorno, un uso que se remonta a la antigüedad. La dispersión de la luz
blanca en los colores espectrales es la característica gemológica primaria de
las gemas diamantes. En el siglo XX, expertos en el campo de
la gemología han desarrollado métodos para clasificar a los diamantes y otras
gemas, basándose en las características más importantes de su valor como
gema. Las cuatro características, conocidas informalmente como las cuatro C,
son usadas ahora de un modo común como descriptores básicos de los
diamantes: estos son carat, cut, colour y clarity (peso, talla, color y pureza).
El Cullinan es el mayor diamante hallado en toda la historia del que se tenga
conocimiento. Su valor era incalculable, hasta tal punto que debió ser troceado
en varios
os fragmentos.Hay muchos diamantes en el mundo, pero muy pocos
que puedan compararse al Cullinan, la pantera rosa del mundo real. Extraído
de una mina que sir Thomas Cullinan poseía a 40 kilómetros de Pretoria,
Suráfrica, pesaba en bruto 3.106 quilates (621 gramos)
gramos) y fue el gran regalo de
cumpleaños del rey británico Eduardo VII.

Propiedades materiales

El diamante y el grafito son dos alótropos del carbono:: formas puras del mismo
elemento, pero que difieren en estructura.

El diamante

Un diamante es un cristal transparente de átomos de


carbono enlazados tetraedralmente (sp3)
( que cristaliza en la red de diamante
diamante,
que es una variación de la estructura
e cúbica centrada en la caracara. Los
diamantes se han adaptado para muchos usos, debido a las excepcionales
características físicas. Las más notables son su dureza extrema y
su conductividad térmica (900–2.320
(900 W/(m·K)), así como la amplia banda
prohibida y alta dispersión óptica.9
óptica Sobre los 1.700 °C (1.973 K / 3.583 °F) en
el vacío o en atmósfera libre de oxígeno, el diamante se convierte en grafito;
grafito en
aire la transformación empieza aproximadamente a 700 °C. Los diamantes
existentes en la naturaleza tienen una densidad que va desde 3,15–3,53
g/cm3, con diamantes muy puros generalmente extremadamente cerca a 3,52
g/cm3.

Dureza

El diamante es el material natural más duro conocido hasta el momento


(aunque en 2009 se iniciaron unos estudios que parecen demostrar que
la lonsdaleíta es un 58% más dura) donde la dureza está definida como la
resistencia a la rayadura. El diamante tiene una dureza de 10 (la máxima
dureza) en la escala de Mohs de dureza de minerales. La dureza del diamante
ha sido conocida desde la antigüedad, y es la fuente de su nombre.

Los diamantes naturales más duros en el mundo son de los campos de


Copeton y Bingara, ubicados en el área de New England en Nueva Gales del
Sur, Australia. Fueron llamados can-ni-faire ("no puede hacerse nada con
ellos"—una combinación del inglés "can" = poder, italiano "ni" = no y el francés
"faire" = hacer) por los cortadores en Amberes cuando empezaron a llegar en
cantidades desde Australia en la década de 1870. Estos diamantes son
generalmente pequeños, octaedros perfectos a semiperfectos, y se usan para
pulir otros diamantes. Su dureza está asociada con la forma de crecimiento del
cristal, que es en una sola etapa. La mayoría de otros diamantes muestran más
evidencias de múltiples etapas de crecimiento, lo que produce inclusiones,
fallas y planos de defectos en la red cristalina, todo lo que afecta su dureza. Es
posible tratar diamantes regulares bajo una combinación de presión alta y
temperatura alta para producir diamantes que son más duros que los
diamantes usados en dispositivos de dureza.

La dureza de los diamantes contribuye a su aptitud como gema. Debido a que


sólo pueden ser rayados por otros diamantes, mantienen su pulido
extremadamente bien. A diferencia de otras gemas, se adaptan bien al uso
diario debido a su resistencia al rayado —tal vez esto contribuye a su
popularidad como la gema preferida en anillos de compromiso y anillos de
matrimonio, que suelen ser usados todos los días durante décadas.

El uso industrial de los diamantes ha sido asociado históricamente con su


dureza; esta propiedad hace al diamante el material ideal para herramientas de
cortado y pulido. Como material natural más duro conocido, el diamante puede
ser usado para pulir, cortar, o erosionar cualquier material, incluyendo otros
diamantes. Las adaptaciones industriales comunes de esta habilidad
incluyen brocas y sierras, y el uso de polvo de diamante como un abrasivo. Los
diamantes de grado industrial menos caros, conocidos como bort, con muchas
fallas y color más pobre que las gemas, son usados para tales propósitos.
El diamante no es apto para maquinarias de aleaciones ferrosas a altas
velocidades, puesto que el carbono es soluble en hierro a las altas
temperaturas creadas por la maquinaria de alta velocidad, conduciendo a un
desgaste incrementado en las herramientas de diamante cuando se las
compara con alternativas.

Estas sustancias pueden rayar al diamante:

Algunos diamantes son más duros que otros.

Los agregados nanocristalinos de diamantes producidos por tratamiento de


presión alta y temperatura alta del grafito o fullerenos (C60).

Nitruro de boro cúbico (Borazón)

Una forma hexagonal del diamante denominada lonsdaleíta, que se ha


predicho teóricamente ser 58% más fuerte que el diamante.

Conductividad eléctrica

Otras aplicaciones especializadas también existen o están siendo


desarrolladas, incluyendo su uso como semiconductores: algunos diamantes
azules son semiconductores naturales, en contraste a la mayoría de otros
diamantes, que son excelentes aislantes eléctricos. La conductividad y color
azul se originan de la impureza de boro. El boro sustituye a átomos de carbono
en la red de diamante, donando un hueco en la banda de valencia.

Comúnmente se observa una conductividad sustancial en diamantes


nominalmente no dopados, que han crecido por deposición química de vapor.
Esta conductividad está asociada con especies relacionadas al
hidrógeno adsorbido en la superficie, y puede ser eliminada por recocido u
otros tratamientos de superficie.

Tenacidad

La tenacidad se refiere a la habilidad del material de resistir la ruptura debido a


un impacto fuerte. La tenacidad del diamante natural ha sido medida como
2,0 MPa·m1/2, y el factor de intensidad de tensión crítica es 3,4 MN·m−3/2.
Estos valores son altos comparados con otras gemas, pero bajos comparados
con la mayoría de materiales de ingeniería. Como con cualquier material, la
geometría microscópica de un diamante contribuye a su resistencia a la
fractura. El diamante tiene un plano de fractura y de ahí es más frágil en
algunas orientaciones que en otras. Los cortadores de diamantes usan este
atributo para quebrar algunas piedras, como paso previo al facetado.
Yacimientos

En África: En América: En Oceanía:

Namibia Brasil Australia

Ghana Colombia En Asía:

República Democrática del Congo Perú India

Sierra Leona Venezuela

Sudáfrica

Color

Diamantes coloreados de marrón en el Museo Nacional de Historia Natural del


Instituto Smithsoniano.

El diamante tiene una amplia banda prohibida de 5,5 eV (o 225 nm) que abarca
todo el espectro visible,, lo que significa que el diamante puro debería transmitir
la luz visible y aparecer como un cristal transparente e incoloro. El origen de los
colores en el diamante está en los defectos de red e impurezas. La mayoría de
impurezas de diamantes consisten en el reemplazo de un átomo de carbono en
la red cristalina.. La impureza más común, nitrógeno,, ocasiona una coloración
amarilla ligera a intensa, dependiendo del tipo y concentración de nitrógeno
nitrógen
presente. El Gemological Institute of America (GIA) clasifica la baja saturación
amarilla y marrón como diamantes en el rango normal de color, y aplica una
escala de graduación desde 'D' (incoloro) hasta 'Z' (ligeramente amarillo). El
nitrógeno es, con diferencia, la impureza más común encontrada en las gemas
diamantes, y es responsable del amarillo y marrón en los diamantes (ver
también: centro nitrógeno--vacante). ). El boro es responsable del color azul
grisáceo. Los diamantes de color diferente, como el azul, son llamados
diamantes de "colores fantasía", y caen bajo una escala de graduación
diferente.

Los metales de transición Ni y Co, que se usan comúnmente para el


crecimiento de diamante sintético por las técnicas de presión alta y temperatura
alta, han sido detectados en los diamantes como átomos individuales, sin
embargo la concentración máxima es 0,01% para el Ni, e incluso mucho
menor para el Co. Obsérvese, sin embargo, que puede introducirse
virtualmente cualquier elemento en el diamante, por implantación de iones.

El color en los diamantes tiene dos fuentes adicionales: irradiación


(usualmente por partículas alfa), que ocasiona el color en los diamantes
verdes; y deformaciones físicas del cristal de diamante conocidas como
deformaciones plásticas. La deformación plástica es la causa del color en
ciertos diamantes marrones y tal vez en algunos rosados y rojos. En orden de
rareza, los diamantes incoloros, por mucho los más comunes, son seguidos por
los amarillos y marrones, luego por los azules, verdes, negros, blancos
translúcidos, rosados, violetas, naranjas, morados, y el más raro, rojo. Se
llaman diamantes «negros» a diamantes que no son verdaderamente negros,
pero que contienen numerosas inclusiones oscuras que le dan a la gema su
apariencia oscura.

En el 2008, el Diamante Wittelsbach, un diamante azul de 35,56 quilates (7,11


g) que se creyó haber pertenecido a los Reyes de España, alcanzó la suma de
más de US$24 millones en una subasta de Christie's. En el 2009, un diamante
azul de 7,03 quilates (1,41g) alcanzó el más alto precio por quilate jamás
pagado para un diamante, cuando fue vendido en subasta por 10,5 millones
de francos suizos (6,97 millones de Euros o US$9,5 millones en aquel tiempo)
lo que excedía en exceso los US$1,3 millones por quilate.

Identificación

Los diamantes pueden ser identificados por su alta conductividad térmica. Su


elevado índice de refracción también es indicativo, pero otros materiales tienen
similar refractividad. Los diamantes cortan el vidrio, pero esto no identifica
positivamente a un diamante, debido a que otros materiales, como el cuarzo,
también se encuentran sobre el vidrio en la escala de Mohs y también pueden
cortar el vidrio. Los diamantes fácilmente rayan a otros diamantes, pero esto
daña a ambos diamantes.

Existen métodos físicos para la identificación de los diamantes, como el empleo


de líquidos pesados; se trata de, empleando como criterio la densidad del
diamante, sumergir la muestra en una solución de yoduro de metileno, en la
que la gema flotará o se hundirá si se trata de un diamante o no.
Hace unos años se fabricaron unos dispositivos que emplean la conductividad
térmica del diamante para distinguirlo del resto de gemas transparentes. En un
primer momento resultaron muy útiles, sobre todo para aquellos que no
poseían conocimientos gemológicos, ya que simplemente tocando la gema con
estos aparatos se podía determinar si esa gema era diamante o no. Pero con la
aparición de la moissanita, otra nueva imitación del diamante, que posee una
conductividad térmica muy similar a la del diamante, la fiabilidad de estos
aparatos quedó en entredicho.

También existen métodos de observación directa para identificar un diamante.


Los microscopios gemológicos permiten observar las inclusiones internas de la
gema objeto de estudio, y un experto puede determinar que inclusiones son
características de un diamante y cuáles no. La transparencia es otra
característica del diamante, siendo menos transparente que alguna de sus
imitaciones.

Historia natural

La formación del diamante natural requiere condiciones muy específicas —


exposición de materiales que contienen carbono a presión alta, variando desde
45 a 60 kilobares,— aunque ocasionalmente cristalizan diamantes a
profundidades de 300-400 km. pero a un rango
de temperatura comparativamente bajo que va desde aproximadamente 900-
1300 °C.32 Estas condiciones se encuentran en dos lugares en la Tierra; en
el manto de la litosfera bajo placas continentales relativamente estables, y en el
sitio de impacto de meteoritos.

Formación en cratones

Las condiciones para que suceda la formación de diamante en el manto de la


litosfera ocurren a profundidad considerable, correspondiendo a los
requerimientos antes mencionados de temperatura y presión. Estas
profundidades están estimadas entre 140 y 190 km,

La tasa a la que la cambia la temperatura con el incremento de profundidad en


la Tierra varía grandemente en diferentes partes de la Tierra. En particular, bajo
las placas oceánicas, la temperatura sube más rápidamente con la
profundidad, más allá del rango requerido para la formación del diamante a la
profundidad requerida. La combinación correcta de temperatura y presión sólo
se encuentra en las partes gruesas, viejas y estables de las placas
continentales, donde existen regiones de litosfera conocidas como cratones.
Una larga estancia en la litosfera cratónica permite a los cristales de diamante
crecer más grandes aún.
La forma octaédrica ligeramente distorsionada de este cristal de diamante bruto
en matriz es típica del mineral. Sus caras lustrosas también indican que el
cristal es de un depósito primario.

A través de estudios de composición isotópica de carbono (similar a la


metodología usada en datación por radiocarbono, excepto con
los isótopos estables C-12 y C-13), se ha encontrado que el carbono de los
diamantes proviene de fuentes tanto orgánicas como inorgánicas. Algunos
diamantes, conocidos como harzburtigícos, son formados de carbono
inorgánico encontrado originalmente en lo profundo del manto terrestre. En
contraste, los diamantes eclogíticos contienen carbono orgánico
de detritus orgánico que ha sido arrastrado hacia abajo desde la superficie de
la corteza terrestre a través de subducción (ver tectónica de placas) antes de
transformarse en diamante. Estas dos fuentes diferentes de carbono tienen
diferentes razones 13C:12C mensurables. Los diamantes que han llegado a la
superficie de la Tierra son generalmente bastante viejos, yendo desde mil
millones a 3,3 mil millones de años. Esto es del 22% a 73% de la edad de la
Tierra.

Los diamantes ocurren más frecuentemente como octaedros eudrales o


redondeados y octaedros gemelados denominados maclas. Como la estructura
del cristal de diamante tiene una disposición cúbica de los átomos, tienen
muchas facetas que pertenecen a
un cubo, octaedro, rombicosidodecaedro, tetraquishexaedro o hexaquisoctaedr
o. Los cristales pueden redondearse y las aristas inexpresivas pueden
elongarse. Algunas veces se les encuentra crecidos juntos o formando cristales
dobles "gemelados" en las superficies del octaedro. Estas formas diferentes y
hábitos de los diamantes resultan de las diferentes circunstancias externas. Los
diamantes (especialmente aquellas con las caras del cristal redondeadas) se
encuentran comúnmente recubiertos en nyf, una piel opaca gomosa.

Formación en cráteres de impacto de meteoritos


Los diamantes también pueden formarse en otros eventos naturales de alta
presión. Se han encontrado diamantes muy pequeños, conocidos
como microdiamantes o nanodiamantes, en los cráteres de
impacto de meteorito. Aunque en el Cráter Popigai en Siberia los diamantes
alcanzan un tamaño de entre 0,5 a 2 mm con algunos ejemplares de 10mm. Se
considera que es el mayor yacimiento del mundo de diamantes de impacto.
Tales eventos de impacto crean zonas de choque de alta presión y
temperatura, idóneas para la formación de diamantes. Los microdiamantes del
tipo de impacto pueden ser usados como un indicador de cráteres de impacto
antiguos. Algunos de estos diamantes poseen empaquetados
hexagonales(EH), Lonsdaleíta, a diferencia de los comunes que poseen un
empaquetado cúbico (EC).

Formación extraterrestre

No todos los diamantes encontrados en la Tierra se originaron aquí. Un tipo de


diamante denominado diamante carbonado, el cual se encuentra en
Sudamérica y África, puede haberse depositado ahí vía un impacto de
asteroide (no formado por el impacto) hace aproximadamente 3 mil millones de
años. Estos diamantes pueden haberse formado en el medio interestelar, pero
en el 2008, no había consenso científico acerca de cómo se originaron los
diamantes carbonados.

Los granos presolares en muchos meteoritos encontrados sobre la Tierra


contienen nanodiamantes de origen extraterrestre, formados probablemente
en supernovas. La evidencia científica indica que las estrellas enanas
blancas tienen un núcleo de carbono y oxígeno cristalizado. El más grande de
estos encontrado en el universo hasta ahora, BPM 37093, está ubicado a 50
años luz, en la constelación Centauro. Una nota de prensa del Harvard-
Smithsonian Center for Astrophysics describió el núcleo estelar de 2500 millas
de diámetro como un diamante. Conocido como Lucy, por la canción «Lucy in
the Sky with Diamonds» («Lucy en el cielo con diamantes»), de The Beatles.

Llegada a la superfície

La roca portadora de diamantes es llevada cerca a la superficie a través de


erupciones volcánicas de origen profundo. El magma para tal volcán debe
originarse a una profundidad donde los diamantes puedan ser formados—150
km o más (tres veces o más la profundidad de la fuente de magma para la
mayoría de los volcanes)—. Esto es algo que sucede relativamente rara vez.
Las chimeneas contienen el material que fue transportado hacia la superficie
por acción volcánica, pero no fue eyectada antes de que la actividad volcánica
cesara. Durante la erupción, estas chimeneas están abiertas a la superficie,
resultando en circulación abierta; en las chimeneas se han encontrado
muchos xenolitos de rocas superficiales, e incluso madera y/o fósiles. Las
chimeneas volcánicas que llevan diamantes están relacionados estrechamente
a las regiones más viejas y frías de la corteza continental (cratones). Esto es
porque los cratones son muy gruesos, y su manto litosférico se extiende a
profundidades suficientemente grandes tal que los diamantes sean estables.
No todas las chimeneas contienen diamantes, e incluso menos contienen
suficientes diamantes para hacer el minado económicamente viable.

El magma en chimeneas volcánicas es generalmente de uno de dos tipos


característicos, que se enfrían en roca ígneaconocida
tanto kimberlita o lamproita. El magma en sí mismo no contiene diamantes; sin
embargo, actúa como un elevador que lleva las rocas formadas en la
profundidad (xenolitos), minerales (xenocristos), y fluidos hacia arriba. Estas
rocas son característicamente ricas en minerales de olivino, piroxeno, y anfíbol,
ricos en magnesio que suelen ser alterados a serpentina por el calor y los
fluidos durante y después de la erupción. Ciertos minerales indicadores ocurren
típicamente en kimberlitas diamantíferas, y son usadas como trazadores
mineralógicos por los prospectores, quienes siguen las huellas del indicador de
regreso a la chimenea volcánica que pueden contener diamantes. Estos
minerales son ricos en cromo (Cr) o titanio (Ti), elementos que le imparten
colores brillantes a los minerales. Los minerales indicadores más comunes son
los granates cromianos (usualmente piropo de Cr, rojo brillante, y granates
verdes de las series ugranditas), granates eclogíticos, piropo de Ti
anaranjado, espinelas rojas de alto Cr, cromita oscura, diópsido de Cr verde
brillante, olivino verde vidrioso, picroilmenita negra, y magnetita. Los depósitos
de kimberlita son conocidos como suelo azul, por las partes profundamente
serpentinizadas de los depósitos, o como suelo amarillo, por
la arcilla de esmectita cercana al suelo y carbonato meteorizado y
parte oxidada.

Una vez que los diamantes han sido transportados a la superficie por el magma
en una chimenea volcánica, pueden ser erosionados afuera y distribuidos en un
área grande. Una chimenea volcánica que contiene diamantes es conocida
como una fuente primaria de diamantes. Las fuentes secundarias de diamantes
incluyen a todas las áreas donde hay un número significativo de diamantes,
erosionados de su matriz de kimberlita o lamproíta, y acumulados por la acción
del agua o el viento. Estos incluyen depósitos aluviales y depósitos existentes
en líneas costeras existentes y antiguas, donde los diamantes tienden a
acumularse debido a su tamaño y densidad similares. Los diamantes también
han sido encontrados rara vez en depósitos dejados atrás por glaciares
(notablemente en Wisconsin e Indiana); sin embargo, en contraste con
los depósitos aluviales, los depósitos glaciales son menores y, en
consecuencia, no son fuentes comerciales viables de diamante.

Mercados comerciales

Diamante en corte brillante, engastado en un anillo

La industria del diamante puede ser separada en dos categorías básicamente


distintas: una relacionada con los diamantes de grado gema, y otro para los
diamantes de grado industrial. Aunque existe un gran comercio en ambos tipos
de diamantes, los dos mercados actúan en formas dramáticamente distintas y
diferentes.

Gemas

Existe un gran comercio en diamantes de grado gema. A diferencia de


los metales preciosos, tales como el oro o el platino, los diamantes gema no
son comercializados como una mercancía. Contrario a la creencia popular, hay
un mercado bien establecido para la reventa de diamantes pulidos y diamantes
de corte en brillante. Un aspecto remarcable del comercio de diamantes de
calidad gema es su altísima concentración: el comercio global y la talla de
diamantes están limitados a sólo unas pocas localidades. El 92% de los cortes
de piezas de diamantes en el 2003 fueron en Surat, Gujarat, India. Otros
centros importantes de talla y comercio de diamantes son Amberes, donde está
basado el International Gemological Institute, Londres, Nueva York, Tel Aviv,
y Ámsterdam. Una sola compañía —De Beers— controla una proporción
significativa del comercio en diamantes. Tienen su centro en Johannesburgo,
Sudáfrica y en Londres, Inglaterra. Un factor que contribuye es la naturaleza
geológica de los depósitos de diamante: algunas minas primarias grandes de
pipas de kimberlita contribuyen para porciones significativos del mercado (tal
como la mina de diamantes de Jwaneng en Botsuana, que es un gran
yacimiento operado por De Beers que puede producir entre 12.5 a 15 millones
de quilates de diamantes por año), mientras que los depósitos secundarios
aluviales tienden a fragmentarse entre diferentes tipos de operadores, debido a
que pueden ser dispersados por varios cientos de kilómetros cuadrados (por
ejemplo, los depósitos aluviales en Brasil).

La producción y distribución de diamantes está grandemente consolidada en


las manos de unos pocos jugadores clave, y concentrados en centros de
intercambio de diamantes tradicionales. Siendo el más importante, Amberes,
donde se manejan el 80% de los diamantes brutos, 50% de todos los
diamantes cortados y más del 50% de diamantes brutos, cortados e
industriales combinados. Esto hace a Amberes la "capital mundial de
diamante" 'de facto'. Sin embargo, Nueva York, junto con el resto de los
Estados Unidos, es donde aproximadamente el 80% de los diamantes del
mundo son vendidos, incluyendo ventas en subasta. Asimismo, también
terminan en Nueva York los diamantes más grandes y de formas brutas más
inusuales. La compañía De Beers, como el más grande extractor de diamantes
en el mundo, mantiene una posición claramente dominante en la industria, y ha
sido así desde su fundación en 1888 por el imperialista británico Cecil Rhodes.
De Beers posee o controla una proporción significativa de las instalaciones
mundiales de producción de diamante bruto (minas) y canales de
distribución para los diamantes de calidad gema. La compañía y sus
subsidiarias poseen minas que producen casi el 40 por ciento de la producción
mundial anual de diamantes. En algún tiempo se pensó que más del 80% de la
producción mundial de diamantes brutos pasaba a través de la Diamond
Trading Company (DTC, una subsidiaria de De Beers) en Londres, pero
actualmente la cifra está estimada en aproximadamente 40 por ciento. De
Beers vendió una vasta mayoría de sus reservas de diamantes a finales de la
década de 1990 - principios de la década de 2000 y el resto representa
principalmente inventario en trabajo (diamantes que están siendo ordenados
antes de su venta). Esto fue bien documentado en la prensa pero permanece
poco conocido al público en general.

La campaña de publicidad de diamantes de De Beer es apreciada como una de


las campañas más exitosas e innovadoras en la historia. N. W. Ayer & Son, la
firma publicitaria retenida por De Beers a mediados del siglo XX, alcanzó éxito
en revivir el mercado americano de diamantes y abrió nuevos mercados,
incluso en países donde no había existido una tradición de diamantes. La
multifacética campaña publicitaria de N.W. Ayer incluía publicidad por
emplazamiento, publicitando el diamante en sí, en vez de la marca De Beers, y
construyendo asociaciones con celebridades y realeza. Esta campaña
coordinada duró décadas y continúa hoy en día: tal vez es capturado mejor por
el eslogan: "a diamond is forever" (un diamante es para siempre).
Abajo de la cadena de suministros, los miembros de la Federación mundial de
bolsas de diamantes (WFDB) actúan como un medio para el intercambio global
de diamantes, comerciando tanto diamantes pulidos y brutos. La WFDB
consiste de bolsas de diamantes independientes en centros principales de
corte tales como Tel Aviv, Amberes, Johanesburgo y otras ciudades en los
Estados Unidos, Europa y Asia.

En el 2000, la WFDB y la International Diamond Manufacturers


Association establecieron el World Diamond Council para evitar el tráfico de
diamantes usados para subvencionar guerras y actos inhumanos. Actividades
adicionales de la WFDB incluyen también la promoción del World Diamond
Congress cada dos años, así como el establecimiento del International
Diamond Council (IDC) para supervisar la graduación de los diamantes.

Grado industrial

Diamantes en una hoja de corte.

Un escalpelo con hoja de diamante sintético.

El mercado para los diamantes de grado industrial opera de forma muy


diferente de su contraparte ornamental. Los diamantes industriales son
valorados mayoritariamente por su dureza y conductividad térmica, haciendo
algunas de las características gemológicas de los diamantes, tales como
claridad y color, irrelevantes para la mayoría de aplicaciones. Esto ayuda a
explicar por qué el 80% de los diamantes minados (igual a aproximadamente
100 millones de quilates, o 20.000 kg anualmente), no aptos para su uso como
piedras preciosas, son destinadas al uso industrial. Además de los diamantes
minados, los diamantes sintéticos encontraron aplicaciones industriales casi
inmediatamente tras su invención en la década de 1950; se producen
anualmente otros 3 mil millones de quilates (600 toneladas métricas) de
diamantes sintéticos para uso industrial. Actualmente, aproximadamente el
90% del material abrasivo de las lijas de diamante es de origen sintético.

El uso industrial dominante de los diamantes es el corte, perforación, lijado y


pulido. La mayoría de usos de diamantes en estas tecnología no requiere de
diamantes grandes; en efecto, la mayoría de diamantes que son de calidad de
gema, excepto por su tamaño pequeño, pueden encontrar un uso industrial.
Los diamantes son insertados en la punta de taladros u hojas de sierras, o
esparcidos en un polvo para su uso en aplicaciones de lijado y pulido. Algunas
aplicaciones especializadas incluyen el uso en laboratorios como contenedor
para experimentos de alta presión, rodamientos de alto desempeño, y un uso
limitado en ventanas especializadas.

Con los avances continuos hechos en la producción de diamantes sintéticos,


las aplicaciones futuras se están volviendo factibles. Está generando mucha
excitación el posible uso del diamante como un semiconductor apto para
construir microchips, o el uso del diamante como un disipador en electrónica,
aunque antaño en esta rama de la tecnología se empleó ampliamente en la
fabricación de agujas de las cápsulas fonocaptoras de los tocadiscos.

El límite entre los diamantes de calidad de gema y los diamantes industriales


está definido pobremente, y parcialmente depende de las condiciones de
mercado (por ejemplo, si la demanda de diamantes pulidos es alta, algunas
piedras aptas serán pulidos en gemas pequeñas o de baja calidad en vez de
ser vendidas para uso industrial). Dentro de la categoría de diamantes
industriales, hay una subcategoría que comprende las piedras de menor
calidad, principalmente piedras opacas, que son conocidas como bort o 'boart'.

Cadena de suministro

Aproximadamente 130 millones de quilates (26 000 kg) son minados


anualmente, con un valor total cercano a USD $9 mil millones, y
aproximadamente 100.000 kg son sintetizados anualmente.
Más o menos el 49% de los diamantes provienen de África central y del sur,
aunque se han descubierto fuentes significativas del mineral en Canadá, India,
Rusia, Brasil y Australia. Se les mina de la kimberlita y lamproíta presentes
en pipas volcánicas, que pueden transportar los cristales de diamante -
originados en las profundidades de la Tierra donde las altas presiones y
temperaturas le permiten formarse- hacia la superficie. La minería y distribución
de los diamantes naturales son un motivo de controversia frecuente, tales como
las preocupaciones sobre la venta de los "diamantes de sangre" por los
grupos paramilitares africanos. La cadena de suministro de diamantes está
controlada por un número limitado de negocios poderosos, y está también
altamente concentrada en un pequeño número de localizaciones alrededor del
mundo (ver figura).

Minería, fuentes y producción

Sólo una fracción muy pequeña de mineral de diamante consiste de diamantes


reales. El mineral es chancado, proceso durante el cual se tiene el cuidado
requerido para no destruir los diamantes más grandes, y luego son ordenados
por densidad. Hoy en día, los diamantes son localizados en la fracción de
densidad rica en diamantes, con la ayuda de fluorescencia de rayos X, después
de lo cual los pasos finales de ordenamiento son hechos a mano. Antes de que
el uso de los rayos X se haga común, la separación se hacía con cinturones de
grasa; los diamantes tienen una tendencia más fuerte a pegarse a la grasa que
los otros minerales en la muestra.

Históricamente, los diamantes eran encontrados sólo en depósitos aluviales en


el sur de la India. India lideró la producción mundial de diamantes desde el
tiempo de su descubrimiento, aproximadamente en el siglo IX A.Chasta
mediados del siglo XVIII d.C., pero el potencial comercial de estas fuentes
había sido agotado a finales del siglo XVIII, y en aquel tiempo, la India fue
eclipsada por Brasil, donde se hallaron los primeros diamantes no provenientes
de la India en 1725.

La producción de diamante de depósitos primarios (kimberlitas y lamproítas)


empezó sólo en la década de 1870, tras el descubrimiento de los campos de
diamantes en la República Sudafricana. La producción ha aumentado con el
tiempo, y ahora se ha minado un acumulado total de 4.5 mil millones de
quilates desde la fecha. Interesante es el hecho de que el 20% de dicha
cantidad se haya minado sólo en los últimos 5 años, y durante los últimos diez
años, 9 minas nuevas hayan empezado la producción, mientras 4 más están
esperando ser abiertas pronto. La mayoría de estas minas están ubicadas en
Canadá, Zimbabue, Angola, y una en Rusia.
En los Estados Unidos, se ha encontrado diamantes en Arkansas, Colorado,
y Montana.5859 En el 2004, el descubrimiento de un diamante microscópico en
los Estados Unidos condujo al muestreo en bruto de pipas de kimberlita en un
lugar remoto de Montana. Hoy en día, la mayoría de depósitos de diamantes
comercialmente viables están en Rusia (principalmente en Yakutia, por ejemplo
la mina Mir y la mina Udachnaya), Botsuana, Australia (norte y oeste) y
la República Democrática del Congo.

En el 2005, Rusia produjo casi un quinto de la producción global de diamante,


según los reportes de British Geological Survey. Australia posee las pipas
diamantíferas más ricas, con producción que alcanza niveles picos de 42 TM
por año en la década de 1990.

También hay depósitos comerciales siendo minados activamente en


los Territorios del Noroeste de Canadá, y en Brasil. Los prospectores de
diamantes continúan buscando en el globo pipas de kimberlita y lamproíta que
contengan diamantes.

Fuentes controvertidas

En algunos de los países de África central y occidental políticamente más


inestables, los grupos revolucionarios han tomado control de las minas, usando
los ingresos provenientes de las ventas de diamantes para financiar sus
operaciones. Los diamantes vendidos a través de este proceso son conocidos
como "diamantes de conflicto" o "diamantes de sangre". Grandes
corporaciones de comercio de diamantes continúan financiando y alimentando
estos conflictos al hacer negocios con los grupos armados. En respuesta a la
preocupación pública de que sus compras de diamantes pudieran estar
contribuyendo a la guerra y a violación de los derechos humanos en el África
central y occidental, la Organización de las Naciones Unidas, la industria de
diamantes, y las naciones comercializadoras de diamantes introdujeron
el Proceso Kimberley en el 2002. El Proceso Kimberley apunta a asegurar que
los diamantes de conflicto no se entremezclen con los diamantes controlados
por tales grupos rebeldes. Esto se logra al requerir que los países productores
de diamantes provean pruebas de que el dinero que hacen de la venta de
diamantes no es usado para financiar actividades criminales o revolucionarias.
Aunque el Proceso Kimberley ha tenido un éxito moderado en limitar el número
de diamantes de conflicto que entran al mercado, algunos aún encuentran su
camino ahí. Entre el 2% y el 3% de los diamantes comerciados hoy en día son,
potencialmente, diamantes de conflicto. Dos grandes fallos aún limitan la
efectividad del Proceso Kimberley:
(1) la relativa facilidad de hacer contrabando de diamantes a través de las
fronteras africanas, y

(2) la naturaleza violenta de la minería de diamantes en las naciones que no


tienen técnicamente un estado de guerra, y cuyos diamantes son considerados,
en consecuencia, "limpios".

El gobierno canadiense ha establecido un cuerpo conocido como el Canadian


Diamond Code para ayudar a autentificar los diamantes canadienses. Este es
un sistema muy riguroso de vigilancia de los diamantes, y ayuda a proteger la
reputación de "libre de conflictos" de los diamantes canadienses.

Distribución

La Diamond Trading Company (DTC) es una subsidiaria de De Beers, y


comercializa diamantes en bruto de las minas operadas por De Beers (dejó de
comprar diamantes en el mercado abierto en 1999, y cesó de comprar
diamantes rusos minados por la compañía rusa Alrosa a finales del 2008.
Alrosa apeló exitosamente contra una corte europea y reiniciará sus ventas en
mayo del 2009).

Una vez adquiridos por Sightholders (que es un término registrado, que hace
referencia a las compañías que tienen un contrato de suministro de tres años
con DTC), los diamantes son cortados y pulidos en preparación a ser vendidos
como gemas preciosas. El corte y pulido de los diamantes brutos es una labor
especializada que está concentrada en un número limitado de localidades
alrededor del mundo. Los centros tradicionales de corte de diamante
son Amberes, Ámsterdam, Johannesburgo, Nueva York y Tel Aviv.
Recientemente, se han establecido centros de corte de diamantes en China,
India, Tailandia, Namibia y Botsuana. Los centros de corte con menores costos
de mano de obra, notablemente Surat en Gujarat, India, manejan un gran
número de diamantes de pocos quilates, mientras que cantidades más
pequeñas de los diamantes más grandes o más valiosos tienden a ser
manejados en Europa o Norteamérica. La reciente expansión de esta industria
en la India, empleando mano de obra barata, ha permitido que diamantes más
pequeños sean preparados como gemas en cantidades más grandes de lo que
antes era económicamente factible.

Los diamantes que han sido preparados como gemas preciosas son vendidas
en centros de intercambio de diamantes conocidos como "bolsas". Hay 26
bolsas de diamantes registradas en el mundo. Las bolsas son el último paso
fuertemente controlado en la cadena de suministro de diamantes, grande
mayoristas e incluso minoristas pueden comprar cantidades relativamente
pequeñas de diamantes en las bolsas, después de lo cual son preparadas para
su venta final al consumidor. Los diamantes pueden ser vendidos ya
engastados en joyería, o vendidos sin engastar. De acuerdo al Rio Tinto Group,
en el 2002 los diamantes producidos y liberados al mercado estaban
valorizados en US$9 mil millones, como diamantes brutos, US$14 mil millones
después de cortados y pulidos, US$28 mil millones en joyería de diamantes
mayorista, y US$57 mil millones en ventas de escaparate.

Sintéticos, simulantes y mejoras

Sintéticos

Diamantes sintéticos de varios colores, crecidos por la técnica de alta presión y


alta temperatura.

Los diamantes sintéticos son cristales de diamante que son manufacturados en


un laboratorio, en contraste a los diamantes naturales que se forman
naturalmente en el subsuelo. Los usos gemológicos e industriales del diamante
han creado una gran demanda de piedras brutas, esta demanda ha sido
satisfecha en gran parte por los diamantes sintéticos por más de medio siglo;
estos han sido fabricados por diversos procesos, sin embargo, es en años
recientes en que se ha hecho posible producir diamantes sintéticos de calidad
de gema de tamaño significativo.

La mayoría de diamantes sintéticos disponibles comercialmente son de color


amarillo, y son producidos por procesos denominados de Alta Presión y Alta
Temperatura (HTHP). El color amarillo es causado por impurezas de
nitrógeno. Otros colores también pueden ser reproducidos, como el azul, verde
o rosa, que resultan de la adición de boro o de la irradiación después de la
síntesis.
Corte incoloro de gema a partir de diamante crecido por deposición química de
vapor.

Otro método popular de crecimiento de diamante sintético es la deposición


química de vapor (CVD). El crecimiento tiene lugar en presión baja (menor a la
presión atmosférica). Involucra alimentar una mezcla de gases (típicamente
1:99 metano:hidrógeno) en una cámara y descomponerlos por la acción
de radicales químicamente activos en un plasma iniciado
por microondas, filamento caliente, descarga eléctrica, welding torch o láser.
Este método es usado principalmente para recubrimientos, pero también puede
producir cristales individuales de algunos milímetros de tamaño (ver imagen).

En el presente, la producción anual de diamantes sintéticos de calidad de gema


es sólo de unos cuantos miles de quilates, mientras que la producción total de
diamantes naturales es alrededor de 120 millones de quilates. A pesar de este
hecho, frecuentemente un consumidor encuentra diamantes sintéticos cuando
busca un diamante de color de fantasía, porque casi todos los diamantes
sintéticos son de color de fantasía, mientras sólo el 0,01% de los diamantes
naturales son de color de fantasía. La producción de diamantes sintéticos más
grandes amenaza el modelo de negocio de la industria de diamantes. El efecto
final de la rápida disponibilidad de diamantes de calidad de gema de bajo costo
en el futuro es difícil de predecir.

Imitaciones

Un diamante de imitación está definido como un material distinto al diamante


que es usado para simular la apariencia de un diamante. Las gemas que imitan
al diamante suelen ser referidas como «diamantes», a secas, aunque
propiamente son «diamantes de imitación»; a veces se llaman «simulantes del
diamante» por calco semántico del inglés. El diamante de imitación más
familiar a la mayoría de consumidores es la zirconia cúbica. La popular
gema moissanita (carburo de silicio) suele ser tratada como un diamante de
imitación, aunque es una gema por derecho propio. Aunque la moissanita tiene
una apariencia similar al diamante, su principal desventaja como simulante del
diamante es que el zircón cúbico es mucho más barato y casi igualmente
convincente. Tanto el zircón cúbico como la moissanita son producidos
sintéticos.

Mejoras

Las mejoras del diamante son tratamientos específicos realizados sobre los
diamantes naturales o sintéticos (usualmente sobre aquellos ya cortados y
pulidos en una gema), que están diseñados para mejorar las características
gemológicas de la piedra en uno o más formas. Estas incluyen la perforación
láser para eliminar inclusiones, aplicación de sellantes para rellenar fisuras,
tratamiento para mejorar el grado de color de un diamante blanco, y
tratamientos para dar color de fantasía a un diamante blanco.

Los recubrimientos se están usando más para darle a los simulantes de


diamantes, como el zircón cúbico, una apariencia más "como el diamante". Una
sustancia así es el carbono diamantino—un material carbonáceo amorfo que
tiene algunas propiedades físicas similares a las de los diamantes. La
publicidad sugiere que tal recubrimiento podría transferir algunas de estas
propiedades similares al diamante a la piedra recubierta, con la consecuencia
del mejoramiento del simulante de diamante. Sin embargo, las técnicas
modernas, como la espectroscopia Raman permiten identificar fácilmente este
tratamiento.

Identificación

Se ha indicado que un proceso de recocido han podido convertir diamantes


sintéticos, típicamente marrones (CVD) en diamantes incoloros, y que estos
diamantes, después de haber sido enviados para identificación en joyería de
diamantes, no fueron identificados como diferentes a los diamantes naturales.
Tales anuncios suelen ser hechos para nuevas piedras sintéticas, simulantes, y
tratadas, así que es importante validar cómo fueron enviadas las piedras para
su identificación.

Los gemologistas adecuadamente entrenados y equipados pueden distinguir


entre diamantes naturales y diamantes sintéticos. También pueden identificar la
gran variedad de diamantes naturales tratados, siendo dos excepciones una
pequeña minoría de diamantes tratados por HPHT del Tipo II, los diamantes de
este tipo suelen ser brown, y a través del ya mencionado proceso HPHT lo que
se hace es un proceso físico que permite que el diamante obtenga un color
muy alto (desde colores D hasta H) y algunos diamantes verdes artificialmente
irradiados, estos diamantes naturales se encuentran en su mayoría en África y
son fáciles de detectar. No se ha encontrado cristales "perfectos" (a nivel de
red cristalina atómica), así que tanto los diamantes naturales y sintéticos
siempre poseen imperfecciones características, que surgen de las
circunstancias del crecimiento del cristal, que les permite ser distinguidos unos
de otros.

Los laboratorios usan técnicas como


las espectroscopia, microscopía y luminiscencia bajo luz ultravioleta corta para
determinar el origen de un diamante. También usan máquinas especialmente
diseñadas para ayudarles en el proceso de identificación. Dos de estas
máquinas son la "DiamondSure" y la "DiamondView", ambas producidas por
la DTC y comercializadas por el GIA.

Pueden realizarse algunos métodos para identificar diamantes sintéticos,


dependiendo del método de producción y del color del diamante. Los
diamantes CVD suelen ser identificados por una fluorescencia roja. Los
diamantes coloreados C-J pueden ser detectados a través del Diamond
Spotter del Swiss Gemmological Institute. Las piedras en el rango de color D-Z
pueden ser examinadas a través del espectrómetro UV/visible DiamondSure,
herramienta desarrollada por De Beers. De modo similar, los diamantes
naturales suelen tener imperfeciones y fallas menores, tales como inclusiones
de material extraño, que no se ven en diamantes sintéticos.

Simbología

La tradición atribuyó al diamante en otros tiempos virtudes maravillosas contra


los venenos, la peste, los terrores pánicos, los insomnios, los prestigios y los
encantamientos. Calmaba la cólera y conservaba el amor entre los esposos lo
que dio motivo a que se le llamara piedra de reconciliación. Se le atribuía
también una propiedad talismánica cuando bajo su aspecto favorable, o cuando
bajo el planeta Marte se grababa en él la figura de este dios o
de Hércules matando a la hidra, de asegurar siempre la victoria al que lo
llevaba cualquiera que fuera el número de sus enemigos.

Se llegó al extremo de creer que los diamantes engendraban otros y Ruens nos
dice que una princesa de Luxemburgo tenía diamantes hereditarios que le
producían otros en determinadas épocas. En el lenguaje iconológico, el
diamante es el símbolo de la constancia, de la fuerza, de la inocencia y de
otras virtudes heroicas.

Esmeralda
Esmeralda

General

Categoría Minerales ciclosilicatos

Clase 9.CJ.05 (variedad de berilo)

Fórmula química Be3Al2(SiO3)6::Cr

Propiedades físicas

Color Verde esmeralda

Raya Blanca

Lustre Vítreo

Sistema cristalino Hexagonal

Hábito cristalino De masivo a cristalino bien


definido

Fractura Conchiforme

Dureza 7.5-8

Peso específico 2,70 y 2,90


Índice de 1,576 - 1,582
refracción

Birrefringencia δ = 0.0040–0.0070

Pleocroísmo Distinto, azul-verde/amarillo-


verde

Propiedades Uniaxial (-)


ópticas

[editar datos en Wikidata]

La esmeralda es la variedad verde del berilo,


un mineral ciclosilicato de berilio y aluminio de fórmula química Be3Al2(SiO3)6,
que contiene además pequeñas cantidades de cromo y, en algunos
casos, vanadio, que le proporcionan su característico color verde. El peso
específico oscila entre 2,65 y 2,90 y posee una dureza de 7,5 a 8 en la escala
de Mohs.

Es una piedra preciosa muy valorada. Ya en la antigüedad las piedras de color


verde, como la malaquita, y la variscita fueron muy apreciadas. La esmeralda
une a su color verde especialmente intenso la propiedad de ser transparente o
al menos traslúcida, y su mayor brillo al ser pulida. Su nombre,
posiblemente persa, significa piedra verde y su tonalidad ha dado nombre al
color verde esmeralda.

Técnicamente, la esmeralda es una variedad de berilo cuyo color se debe a la


presencia de cromo y/o vanadio. Su valor como gema depende críticamente de
su grado de transparencia. La esmeralda casi opaca es relativamente común y
se encuentra en muchos países, pero su valor es actualmente muy limitado. La
esmeralda de calidad gema debe ser transparente, aunque casi nunca está
libre de inclusiones e imperfecciones internas, el llamado "jardín de la
esmeralda, y es mucho más rara.

La esmeralda de calidad gema se encuentra en gran cantidad en el


departamento de Boyacá en Colombia (Muzo, Chivor, Otanchey Coscuez).
Colombia es el principal productor mundial de esmeraldas de calidad gema.
Mención especial merece la esmeralda trapiche, que se encuentra en algunas
minas de Colombia, por su extraña forma de estrella debido al crecimiento del
cristal en varias direcciones. Su nombre procede del cilindro dentado utilizado
en los trapiches para extraer el azúcar de la caña.

Otros yacimientos están situados en Brasil, especialmente en el estado de


Bahía. En este país se obtienen muchas esmeraldas de baja calidad, utilizadas
sin tallar, asociadas a la roca encajante, como material de decoración o para
coleccionismo. Pequeños yacimiento en el que aparece ocasionalmente
material gema, pero de interés especialmente para los coleccionistas, se
encuentran en Estados Unidos (especialmente en Carolina del Norte).

En la región de Sikait-Zabara, en Egipto, existen unas minas de esmeraldas


que posiblemente fueron explotadas hace 3.500 años. Con los criterios
modernos, a la vista de los yacimientos conocidos actualmente, la calidad del
material es muy baja, pero durante siglos fue el principal yacimiento del Viejo
Mundo. Muchos años después del descubrimiento de las
esmeraldas, Cleopatra llegó a poseer esas minas, pues sentía una especial
fascinación por estas piedras. En África se encuentran esmeraldas de calidad
gema en Zambia,especialmente en el distrito de Ndola, así como en
Mozambique y Zimbabue.

En Europa, las minas más importantes fueron las situadas en Rusia, en la zona
de Ekaterinburgo, en la región de los Urales. Generalmente su transparencia
no es muy grande. En algunos yacimientos aparecen asociadas al crisoberilo
de la variedad conocida como alejamdrita. Yacimientos del mismo tipo se
encuentran en Austria, en la región de Salzburgo, y en España, en Pontevedra.

En Asia, los yacimientos más importantes están en Afghanistán, en la provincia


de Nuristán y en el Valle de Panjshir. Los de la India, en tamil Nadu y en
Rajastán, se conocen desde antiguo, aunque la calidad del material es
mediocre, También se han encontrado esmeraldas, aunque muy raramente de
calidad gema, en diversas localidades australianas.

Simbolismo

En la Edad Media, fue símbolo de Juan el Apóstol. Para los alquimistas, es la


piedra de Venus.

La superstición desde tiempos muy remotos ha atribuido a esta piedra virtudes


milagrosas, tales entre otras como las de impedir los síntomas de la epilepsia y
de romperse cuando el mal había llegado a tal estado de violencia que no
podía ella vencerle; de acelerar el parto cuando la ataban al muslo de la mujer
que se hallaba en los trance de parir. Finalmente, el polvo de la esmeralda
curaba la disentería y las mordeduras de los animales venenosos.
Los pueblos de la valle de Manta, en Perú, adoraban una esmeralda de la
magnitud de un huevo de avestruz; la enseñaban en los días de las fiestas
mayores, y los indios corrían de todas partes para ver a su diosa y ofrecerle
otras esmeraldas. Los sacerdotes y caciques hacían entender a los fanáticos,
que la esmeralda madre estaba muy contenta, porque le presentaban sus hijas,
logrando con esta estratagema reunir una gran cantidad de piedras preciosas.
Cuando los expedicionarios españoles conquistaron Perú, según se dice,
encontraron todas las hijas de la diosa pero los indios supieron ocultar tan bien
a la madre que aun no ha podido averiguarse su paradero.

Esmeraldas famosas

Esmeralda Gachalá: Una esmeralda de 171,6 g (858 quilates). Fue encontrada


en 1967 en la mina Vega de San Juan en el municipio de Gachalá del
departamento de Cundinamarca, Colombia.

Esmeralda Fura: Es de 2,2 kg (11 000 quilates), es la segunda esmeralda


tallada más grande del mundo, era de propiedad de Víctor Carranza.

Esmeralda Teodora: Es de 11,4 kg (57 500 quilates), es la esmeralda tallada


más grande del mundo, propiedad de Regan Reaney, un comerciante de
gemas raras de Canadá.

Esmeralda Tena: De 400 g (2.000 quilates), tiene intensidad oscura, verde


mariposa, que la hace más valiosa, mucho más valiosa que la esmeralda que
perteneció a la emperatriz rusa Catalina la Grande, y que se remató en
Christie´s de Nueva York por dos millones de dólares, esta también propiedad
de Carranza.

Rubí
Rubí

General

Categoría Minerales óxidos, Gemas

Fórmula química Al2O3:Cr

Propiedades físicas

Color Rojo Brillante

Sistema cristalino Trigonal

Dureza 9.0

El rubí es un mineral de la clase 04 (óxidos), según la clasificación de Strunz.


Es una gema de color rojizo. Debe su color a los metales de hierro y cromo con
los que está asociada esta variedad de corindón (óxido de aluminio Al2O3). Su
nombre viene de ruber, que significa 'rojo' en latín.

Pertenece a la familia del corindón, junto al zafiro, siendo una convención de


nombre la única diferencia entre ambas gemas. Se llama rubí a los corindones
rojos y zafiro a todos los demás colores, incluido el rosado.
Le corresponde la dureza 9 en la escala de Mohs. Es considerado una de las
cuatro gemas preciosas junto al zafiro, la esmeralda y el diamante.

Se encuentran yacimientos de rubíes en Birmania, Sri


Lanka, India, Madagascar, Tailandia, Brasil, Colombia, China y Rusia, además
de encontrarse en menor cantidad
en Sudáfrica, Australia, Groenlandia y Estados Unidos. Los de la península de
Malaca y Tanzania son muy valiosos, llegando a alcanzar en valor a los
diamantes de mismo tamaño.

El rubí sintético

Los rubíes sintéticos se produjeron por primera vez


en 1923 mezclando alumbre y pigmentos de cromo. Este método permite la
producción de piedras muy similares química y físicamente a las naturales. Sin
embargo, los rubíes sintéticos se usan más en relojería que en joyería.

Primero se utiliza óxido de aluminio (Al2O3) y óxido de cromo (CrO3)


estequiométricamente en un crisol de platino.

Después se coloca en una horno de mufla a unos 2000 K por unos 250
minutos.

Finalmente se enfría y se observa como el cristal queda en el fondo de platino.

Propiedades físicas

Cristal de rubí sin pulir


El rubí es duro (dureza en Mohs: 9), y su color varía con la concentración del
cromo trivalente (Cr2O3) en la mena. Por trazas de hierro, el color se torna más
marrón. Su punto de fusión es > 2000 °C, y varía sólo unos grados,
dependiendo de la concentración de impurezas. La densidad relativa es de 3,9
a 4,1, según los defectos cristalinos presentes. El rubí tiene una configuración
cristalina trigonal, y forma a menudo cristales hexagonales.

Propiedades químicas

El rubí es resistente a la corrosión pues es estable cinéticamente y


térmicamente también. No se puede disolver en ácidos halogenuros pero si
en ácido sulfúrico para formar con el cromo ácido crómico y con el óxido de
aluminio un sulfato ácido de aluminio. También lo ataca el ácido perclórico,
el fluorhídrico y el hexafluorosilícico.

Obtención

Se obtiene de las minas bauxíticas por el método de lixiviación y flotación.


También se encuentra en los ríos poco profundos de zona mesolítica.
Actualmente se fabrica artificialmente en su mayoría.

Usos

Un rubí soporta el eje del volante en un reloj mecánico.

Sus usos no se restringen a joyería, en la que su valor depende de su color,


tamaño, densidad y pureza. Se han utilizado profusamente en la fabricación de
los relojes mecánicos, en los que sirven de soporte o buje de
los ejes sometidos a rotaciones ya que su dureza resiste el desgaste
por fricción.

También tienen importantes aplicaciones industriales para crear los láseres de


helio-rubí y los de rubí puro.

Se utiliza para hacer pulseras y objetos de lujo.

Grabado en rubí

Los antiguos grabaron poco en rubí y Plinio el Viejo da por razón de ello que
los sellos hechos con esta sustancia se llevaban la cera. La dureza excesiva
del rubí, su alto precio, la rareza de los planos propios para el grabado son
ciertamente las verdaderas causas que impidieron a los artistas de la
antigüedad grabar el rubí. Hay que notar, además, que la imposibilidad en que
probablemente estaban los antiguos de pulir las cavidades hechas con esta
sustancia podían causar el defecto de que habla Plinio.

En el Museo de Odescalque se encuentran el diseño de un rubí grabado


representando a Ceres en pie con una espiga en la mano. Otro grabado en rubí
presenta la cabeza de un hombre de larga barba y cabellos crespos que se ha
creído representar a un filósofo griego. Este rubí estaba tallado en forma de
corazón y formaba parte de la colección del duque de Orleans.

Zafiro

Zafiro
General

Categoría Minerales óxidos

Clase 4.CB.05 (variedad de corindón)

Fórmula Óxido de
química aluminio con cromo y Titanio, Al2O3::Cr(III], Ti(III)

Propiedades físicas

Color Variado (transparente, azul, amarillo, morado)

Lustre Vítreo y adamantino.

Sistema Trigonal, clase hexagonal


cristalino

Hábito De masivo a granular


cristalino

Dureza 9

Peso 4 ±0,05
específico

Densidad 4 - 4,1 g/cm3

Índice de nω=1.768–1.772
refracción
nε=1.760–1.763

Pleocroísmo Fuerte

Punto de 2000 K aprox.


fusión

Solubilidad Insoluble

[editar datos en Wikidata]


El zafiro es un mineral precioso del grupo del corindón con característico color
azul (aunque hay otros colores menos comunes) debido a impurezas de ciertos
óxidos (Cr (III) y Ti(III)).Es una de las cuatro gemas más importantes del mundo
y de las más hermosas junto al rubí, el diamante y la esmeralda. Se encuentra
comúnmente en yacimientos ricos de rutilo, bauxita y hematita. La composición
química es una mezcla de óxidos de aluminio, hierro y titanio, el cual le da su
color característico azul. Su fórmula química es Al2O3. Le corresponde la
dureza 9 en la escala de Mohs.

El zafiro (La palabra zafiro viene del latín sapphirùs, la cual a su vez proviene
del griego σάπφειρος (sappheiros), y a su vez ésta viene del hebreo chappir
(‫ = ספיר‬Safir), que significa pulcro.) o ultralita -sinónimo poco usado- pertenece
a la misma familia de minerales que el rubí, es decir corindón, siendo la única
diferencia una convención de nombre. Se le llama rubí a los corindones de
colores cálidos (la única excepción es la variedad amarilla, la cual es
considerada zafiro) y zafiro a los colores fríos de corindón (a excepción de las
variedades blanca y gris las cuales son rubíes).

Los zafiros se encuentran en estado natural en una amplia gama de colores,


desde el transparente, pasando por diferentes tonos de rojo, amarillo, azul y
sus combinaciones. Los mayores productores están en África y actualmente se
han encontrado yacimientos en Sudamérica. También se hallan asociados con
los rubíes en Siam y Sri Lanka, y se encuentran en Cachemira (India), y en un
área muy extensa en Queensland Central, (Australia). La Antártida es rica en
este mineral pero, debido a su delicado equilibrio ecológico, se ha limitado la
explotación. Su uso se restringe a la joyería y aplicaciones láser.

Los zafiros sintéticos, coloreados con pequeñísimas cantidades


de cromo y titanio, vienen fabricándose desde el año 1902 por el
proceso Verneuil. Desde 1940 se empezaron a fabricar en los Estados Unidos,
consiguiendo un gran éxito con los zafiros y rubíesestrellados, obtenidos
introduciendo titanio.

Propiedades químicas, físicas y cristalográficas

No lo atacan los hidrácidos excepto el ácido fluorhídrico. Lo ataca de igual


manera el ácido hexafluorosilícico, el ácido perclórico, su anhídrido el agua
regia en caliente, el ácido mágico, el ácido cuasimágico, el ácido
clorosulfónico y el ácido fluorosulfónico. Sufre un fenómeno de dimorfismo a
1770 K. Presenta una dureza de 9 en la Escala de Mohs; alta dureza
característica de los corindones prácticamente carece de clivaje. Tiene brillo
vítreo con caras de prisma hexagonal , bipirámides hexagonales , romboedro y
pinacoide. En ciertos casos se observa un estriado horizontal debido al maclaje
según en pinacoide. A veces presenta una opalescencia fulgurante en forma de
estrella (Zafiro estrella) debida a inclusiones microscópicas orientadas de
impurezas mecánicas y no químicas, como muchos piensan. Su peso
específico ronda entre 3.95 y 4.10 y su punto de fusión es alrededor de 2040 K.

Ubicación

A veces se le encuentra en rocas magmáticas de alta profundidad, ricas en


alúmina y pobres en sílice, es decir en las sienitas y anortositas de corindón,
asociado a feldespatos. Los yacimientos metasomáticos de zafiro se forman en
las calizas cristalinas vecinas a las rocas eruptivas. En algunos casos, los
yacimientos surgen con motivo de fuertes efectos de agentes pneumatolíticos
en las rocas sedimentarias de alúmina. Al ser químicamente muy estable, se
encuentra con frecuencia en aluviones. Zafiros de muy buena calidad proceden
de Birmania, Sri Lanka e India. El mejor zafiro indio es de color azul y se
encuentra en Cachemira, ya sea en pegmantitas o en forma de cantos en
depósitos aluviales. En Tailandia, Australia y Nigeria se encuentran zafiros azul
oscuro que pueden parecer casi negros. En el estado norteamericano
de Montana se explota un zafiro de un atractivo azul metálico. También se
obtiene en Camboya, Brasil, Kenia, Malawi y Colombia.

Colores del zafiro

Yogo sapphire.

El zafiro, como gema preciosa, es la variedad transparente y azul del mineral


corindón. El rubí es la variedad roja, con calidad de gema, del mismo material.
Aunque muchas veces se aplica el término zafiro para todos los colores
excepto el rojo, el zafiro auténtico es azul intenso, siendo el mejor matiz un azul
acíano llamado azul de cachemira. El corindón incoloro y precioso es el zafiro
blanco, el coridón amarillo se llama zafiro amarillo o dorado, o topacio oriental,
las piedras rosas pálido son los zafiros rosas. Los distintos colores del zafiro se
deben a pequeñas cantidades de impurezas, como cromo, hierro o titanio en el
óxido de aluminio, componente principal del mineral.

Variedades

zafiro de agua: es la variedad azul de la cordierita o dicroíta;

zafiro blanco: corindón cristalizado, incoloro y transparente;

zafiro falso: variedad del cuarzo cristalizado que presenta la coloración azul
debida a inclusiones de pequeños individuos de crocidolita;

zafiro oriental: zafiro muy apreciado por su brillo en oriente;

zafiro Padparadscha: variedad del zafiro muy rara que se caracteriza por sus
colores amarillo, rosa y naranja.

Zafiro en bruto.

Zafiro sintético.

Zafiro amarillo.
Zafiro blanco.

Aplicaciones industriales

El zafiro sintético se utiliza en la fabricación del cristal de zafiro. Este material


transparente presenta una gran resistencia al rayado y se utiliza, por ejemplo,
como cristal en los relojes de pulsera.

Otras acepciones

Heráldica: es uno de los modos de denominar al azur, nombre que se da al


color azul.

Zoología: ave apodiforme, de la familia de las troquilidas. Es un colibrí, con pico


corto y recto, amarillento (la punta negra); plumaje verde dorado en el lomo,
azul vivo en el pecho y verde sucio en el vientre, cola corta y rojiza. Mide unos
9 cm y vive en las Guayanas y norte de Brasil. También llamado Colibrí Zafiro
(Hylocharis sapphirus).

Zafiro (color)
Zafiro estrella cortado en cabujón

Zafiro o azul zafiro es un color que se basa en el aspecto de la variedad


de corindón noble llamado zafiro, que contiene óxidos de hierro y de titanio.

El color zafiro estándar es azul purpúreo y suele aparecer normalizado en


inventarios cromáticos, sirviendo de referencia general para el color zafiro. El
color zafiro inespecífico, en tanto, es azul y se basa —sin guardar especial
fidelidad al modelo— en el aspecto de las variedades de zafiro de color azul
moderado.

La denominación de color «zafiro» incluye también a las coloraciones similares


al color estándar, denominadas zafíreas. El color zafiro está comprendido en
los acervos iconolingüísticos de las culturas árabe y europea.

Zafiro Zafiro
(estándar) (inespecífico)

HTML #7573A6 #6576B4

(55, 50, 0,
CMYK (65, 52, 0, 0)
0)

(117, 115, (101, 118,


RGB
166) 180)

(242°,
(227°, 44 %,
HSV 31 %,
71 %)
65 %)

Referencia 1 1

Zafiro es también el nombre de una familia de colores que son específicos de


determinadas variedades de esta gema, como el «azul zafiro pálido» y el
«púrpura zafiro»

Padparadscha (zafiro)
Padparadscha

El Padparadscha es una variedad de color amarillo-rosa o naranja de un


mineral conocido como corindón, es decir, óxido de aluminio (Al2O3). El
nombre proviene del sánscrito "Padma raga" (Padma = loto; raga = color) y
alude al color parecido a la flor de loto.

El corindón es alocromático, es decir, puede asumir cualquier color


dependiendo de los diferentes elementos químicos cromóforos que, sin
embargo, no alteran su composición. Ambos, rubíes y zafiros son otras
variedades del corindón, rojo y azul, respectivamente (pero la designación
"zafiro" también se pueden utilizar para otros colores).

El padparadscha es muy raro en la naturaleza y también se produce


sintéticamente.

La Mineralogía

La mineralogía es la ciencia que se ocupa de identificar minerales y estudiar


sus propiedades y origen con el propósito de realizar su clasificación. El estudio
de los minerales se efectúa a partir de la observación y del análisis de las rocas
que constituyen muestras geológicas.

El estudio de las rocas y sus minerales nos permite conocer más acerca de los
procesos geológicos que han tenido lugar en una determinada zona, y
comprender las características que se observan en la actualidad y definir sus
posibles usos.

También podría gustarte