CASA MARIO. INT. DÍA.

MAÑANA. DÍA 1

PAULA es arrolladora, ingeniosa, malhablada, sabe reírse de sí misma y de los dramas

que le ocurren en la vida. Sin embargo, el dolor va por dentro. Sufre mucho, aunque no
le gusta mostrarlo a los demás.

MARIO abre la puerta de casa. PAULA la mira de arriba abajo.

MARIO
Pues ésta es mi choza y la tuya, si te quedas...

PAULA se descojona.
MARIO
¿Pasa algo? No sabía que mi casa fuera tan
“graciosa”.

PAULA
Perdona... es que es como la de un tío al que mata
“Dexter” en la tercera temporada. ¿Ves la serie?

MARIO
¿La del asesino psicópata? (Niega)

PAULA
Soy muy fan... No sabes la ilusión que me hace
pensar que puede venir Dexter cada noche con un
cuchillo carnicero y abrirme en canal.

MARIO
(Flipa) Me estás acojonando.

PAULA
Perdona, tío... Debes pensar que soy una friki.

MARIO
(Miente) ¿Friki? ¡Qué va!

PAULA
Pues soy de lo más normal... y encima no ronco.

PAULA vuelve a reírse con su risa contagiosa.

PAULA
Oye, la casa está limpia... para ser de un tío.

MARIO
No me gusta dejar manchas de sangre.

Ahora los dos se ríen juntos. Complicidad.

 MARIO
Tienes metro en la puerta... súper a dos minutos y
chinos, todos los que quieras.

PAULA
¿Bares de guardia?

MARIO
Esto es el centro... Puedes tomarte un gin tonic o
bailar flamenco hasta las tantas.

PAULA
Soy más de reaggeton.

PAULA da unos pasos de reageton y mueve sus carnes sin complejos.

PAULA
(Canta) Dame más gasolina... A mí me gusta la
gasolina...

MARIO no puede evitar mirarla de reojo.

MARIO
Nunca había compartido piso con una tía.

PAULA
Ni yo con un tío... ni con una tía... No había podido
salir de casa de mis padres hasta ahora... Estaba
tiesa.

MARIO
Como casi todo el mundo... Pues yo soy un tío con
el que es fácil vivir, creo... Mientras respetes mi
espacio...

PAULA
Yo respeto el tuyo y tú el mío...

MARIO asiente.
MARIO
Y la nevera y el baño los respetamos los dos.

PAULA
(Extiende la mano) Pues ya tienes oficialmente
alguien que te pague la mitad del alquiler. Me
quedo.

MARIO le da la mano sonriente.

MARIO
Nos lo vamos a pasar bien.

De repente, suena el móvil de PAULA. Ésta se pone seria.

 PAULA
Sí, sí... ¿Se la ha llevado la ambulancia? Vale, voy
ahora mismo.

PAULA, tras unos segundos en silencio, sonríe. MARIO, desconcertado.

MARIO
¿Pasa algo?

PAULA
Nada... mi madre que he tenido otro ataque...

MARIO
¿Ataque?

PAULA
Tiene diagnosticada esquizofrenia... Va por rachas...
Ahora está en una mala.

MARIO se queda cortado. PAULA disimula su emoción.

PAULA
(Sincera) Por esto también quiero independizarme...
para tener un poco de tranquilidad. No puedo más.

MARIO
¿Puedo ayudarte?

PAULA
No...

MARIO
Tía, de verdad... ¿Te llevo en moto a algún sitio?

PAULA
(Lo corta) Mira, paso de dramas... Lo nuestro había
empezado bien, no lo jodamos... (Tapa) Además,
que si me pones de paquete en la moto, haces el
caballito. Prefiero medios de transporte en los que
me quepa el culo entero.

MARIO sonríe. Breve silencio.

PAULA
Dejo aquí mis cosas...

MARIO
Claro, ya estás en tu casa.

PAULA
Coño, qué bien suena lo de tu casa... Me estoy
volviendo hogareña por minutos.

PAULA se descojona y se va. MARIO se queda desconcertado, sin saber qué hacer.