Foro de debate N°5: Sobre injusticia y pérdida de libertad

1. ¿En qué condiciones aparecen los trabajadores en They Live de J.

Carpenter?
En primer lugar, es importante mencionar ciertas características del contexto en el
que nos ubicamos, pues estamos hablando de un capitalismo que mantiene a toda
una clase social conformada por obreros, presa de este intercambio de su fuerza
de trabajo por un salario que funciona como su único sustento para vivir. Por otra
parte, respecto a las condiciones en las que aparecen los trabajadores, es fácil
identificar que ellos trabajan en un ambiente de sumisión, ya que saben que si
pierden su trabajo literalmente perderían su única fuente de ganancias, por lo que
no pueden incurrir en faltas. Asimismo, se puede apreciar como los capitalistas no
muestran ningún interés por mantener el bienestar de sus trabajadores, puesto
que muchos de ellos vienen desde lugares lejanos y no poseen algún lugar donde
alojarse, además de prohibirles la estadía en su mismo lugar de trabajo, incluso
después de culminar su jornada laboral. De igual manera, cabe destacar los
constantes retrasos respecto al pago de su fuerza de trabajo, y la dependencia de
seguir asistiendo a trabajar para recibirlo.
2. ¿Puede decirse que coincide con el trabajador desposeído de todo, salvo
de su fuerza de trabajo, del que nos habla Marx?

Ciertamente es correcto afirmar que, la situación descrita en la película, coincide

con la noción de Marx que expresa que el trabajador se encuentra despojado de
todo, menos de su fuerza de trabajo. Aquello se fundamenta en que, durante la
jornada laboral, el trabajador no tiene control sobre su vida, ya que, como
mencionamos anteriormente, este se encuentra totalmente sumiso porque si
pierde su trabajo, pierde su única fuente de ingresos para vivir, lo cual se vuelve
mucho más agobiante si se tiene que mantener a una familia entera como era el
caso de muchos trabajadores. En otras palabras, como señala Marx, el trabajador
queda desposeído de todo, debido a que este no podría vivir sin vender su fuerza
de trabajo, la cual es propiamente una actividad vital del obrero.