La época del terrorismo en el Perú, fue un periodo ocurrido entre 1980 y
2000 durante la escala armada de grupos subversivos establecidos en el centro y sur del país que buscaba destruir al Estado democrático e instaurar un Estado socialista. Donde “Sendero Luminoso” llegó a considerar el social imperialismo soviético como la amenaza mayor para el país e incluso llegó a obtener el poder exterior que sustentaba a la burguesía burocrática en el país. Abimael Guzmán fue un líder carismático, de notable influencia entre los estudiantes y propulsor de la estrategia de aplicar el máximo de crueldad para alcanzar los fines revolucionarios, es por eso que lo llegan a llamar “Sampoo”, porque lavaba la cabeza a cada uno de ellos con ideas erróneas. En la década del 90, el gobierno propuso una tercera vía contra Sendero, que no era ni la intervención de las Fuerzas Armadas ni una alianza con el gobierno, sino promover organismos vecinales de autodefensa, autónomos y distantes de las fuerzas del orden y del gobierno. El campesinado comenzó a organizarse contra Sendero. Las rondas funcionaban mejor bajo la presión de las Fuerzas Armadas o cuando la presencia militar era intensa, pero tendían a desactivarse apenas la presión disminuía. En ese mismo Fujimori asumió la presidencia, decidió que los pilares de su gobierno serían, primero la reinserción económica y financiera internacional y segundo, utilizaría una estrategia contra subversiva en cada campo. La captura de Guzmán por parte de DINCOTE evitó todo esto. Se capturó al líder de Sendero sin disparar un solo tiro, después de meses de paciente búsqueda de inteligencia, análisis y vigilancia de muchos sospechosos que los conducirían al escondite de Guzmán, de esa manera llega a concluirse esta problemática, un estudio de 2019 cuestionó las cifras de víctimas de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, estimando en cambio; un total de 48.000 asesinatos, sustancialmente inferior a la estimación. COMENTARIO En la década de los 80 está problemática afectó demasiado a la cuidad de Yurimaguas, tanto que trajo consigo consecuencias en el sistema de la economía. El sentir de las personas ante esto, más que todo era temor, porque cada día se incrementaba más el terrorismo, así como los asesinatos desde los más pequeños hasta los más grandes, los ataques diarios a las instituciones públicas del estado, y más que todo a la ciudadanía.