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Asignatura:

Lengua Española Básica II

Facilitador:
Elsa Padua Tamariz
Tema:
Los sueños son metas con alas
Participante:
Deyanira Reyes

Matricula:
100551847
Al igual que la mayoría de las funciones creativas, los sueños se alojan en el hemisferio
derecho del cerebro junto con la pasión, la imaginación y las emociones. Por otra parte,
las metas se forman en el hemisferio izquierdo, son racionales, secuenciales y
mensurables. El sueño es un estado ideal, mientras que la meta es un estado real. El
sueño brinda vigor, visión y dirección; mientras que la meta nos señala un blanco
específico de corto plazo y las estrategias para dar en él. La meta es un paso hacia el
sueño. ¡El sueño es una meta con alas!

El sueño brinda significado y valor intrínseco, es nuestra más profunda expresión de lo


que queremos, la declaración de un futuro deseado. El sueño es un ideal que comprende
un sentido de posibilidad más que de probabilidad; de potencial, más que de límites. Las
metas que se fija sin tener un sueño utilizan, literalmente, solo la mitad de nuestra
capacidad cerebral. La pasión falta cuando solo trabajamos con el lado izquierdo
racional del cerebro. Sin pasión, hay poco entusiasmo y poca vitalidad. Si no hay
pasión, no hay fuego en el corazón.

El sueño es el manantial de la pasión, nos guía y nos señala grandes alturas. Es una
expresión de optimismo, de esperanza y de valores lo suficientemente nobles como para
capturar la imaginación y comprometer el espíritu. Los sueños se apoderan de nosotros
y nos mueven. Pueden remontarnos a nuevas alturas y superar las limitaciones
autoimpuestas.

Los sueños, a diferencia de la metas, no están limitados por aquello que uno cree que
puede o no puede hacer o por aquello que la mente racional le señala que es o no es
posible. Los sueños representan algo que uno realmente quiere, en oposición a algo que
uno cree que podría lograr. Las metas so tangibles mientras que los sueños son
intangibles.

El secreto de hoy está en tener simultáneamente sueños y metas, pasión y una “dosis de
racionalidad”. El punto inicial de cualquier jornada es un sueño, la visión de algunas
posibilidades distantes. Esta visión debe ser emocionante y conmovedora. Cuando a
usted le produce entusiasmo el lugar al cual se dirige, fija posteriormente algunas metas
y algunos hitos que le ayudarán a llegar. Cuando estas metas a corto plazo se convierten
en un fin, la pasión se extingue. De manera similar, los pasos racionales producen los
mejores resultados al servicio de la pasión.
De verdad que este artículo es muy importante porque el sueño es el manantial de la
pasión, nos guía y nos señala grandes alturas. Y sin sueno no podemos lograr nuestro
objetivo.
Puedo decir que me encanto todo el articulo realmente me toco el corazón porque a
veces nos olvidamos de los sueños que un día tuvimos pero que no tuvimos el valor o el
coraje para luchar por ello así que me animo a seguir adelante
Creo que todos o la mayoría al soñar deseamos alcanzar ese sueño, salvo que sepas de
antemano que es totalmente imposible, inalcanzable y aun así tu mente persiste en ese
sueño quedará solo en eso, un sueño. Como nuestra mente es una totalidad, trabaja
integralmente.
Desde mi niñez mis objetivos, mis proyectos, mis metas fueron en su comienzo sueños.
Alcanzarlos requiere esfuerzo, paciencia, crear circunstancias favorables o revertir
aquellas desfavorables, ponerme en acción y alcanzar lo propuesto.
Una vez logrado diré: mi sueño se cumplió. Y a él seguirán otros sueños.
Si sueño, sin tiempos ni fronteras, sin acciones, y vuelo y vuelo por que satisface mi
vida interna, mi alma, mi mente sabré que estoy soñando, aunque jamás eso se cumpla.

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