UNIDAD I – FASE II

MANUAL DEL PROCESO DE PAZ

ADELA PÉREZ OJEDA

GRUPO 80008_19

PEDAGOGIA PARA LA SOLUCIÓN DE CONFLICTOS

CURSO_ 80008A_764

HELIANA MAGALLY VILLARREAL

DIRECTORA DE CURSO

UNIVERSIDAD NACIONAL ABIERTA Y A DISTANCIA UNAD

BOGOTÁ, OCTUBRE DE 2020.

INTRODUCCION

El presente ensayo se realiza con el fin de dar cumplimiento a lo solicitado en la

guía de actividades de la fase dos, para comprender la temática del curso, leer
el libro “Alto al Fuego, Manual de procesos de Paz”, realizar un análisis reflexivo
sobre el éxito o fracaso de esos procesos, y que impresiones le deja desde el
plano político y social, así mismo, hacer el ensayo, consignando las impresiones
personales de los procesos de paz llevados a cabo con las Farc y el Eln.
 ENSAYO

Teniendo en cuenta lo estudiado en el libro ¡Alto al fuego! de Vincenç Fisas, se

puede señalar que desde hace muchos años se ha venido tratando procesos de
paz en diferentes partes del mundo, en algunos casos han resultado exitosos y
otros simplemente han fracasado, ya que desde mi punto de vista los terceros
que intervienen no solo lo hacen con el fin de frenar la violencia, creo que van
con fines lucrativos a costa de las personas que están en algún pueblo,
comunidad o un país entero.

Se puedo decir que todo proceso histórico de paz llevado a cabo por diferentes
actos militares y políticos de un país en conflicto interno, debe sobrellevarse en
la historia del porque se originó ese conflicto.

Colombia somos un país de habitantes olvidadizos y en las cuales ven los

incisivos hechos que involucran a las fuerzas armadas o grupos armados ilegales
del país, como enemigos voluntariosos de su puntual paz y seguridad que
debería ser garantizada por un estado de derecho.

Recordemos nuestra historia del porque el surgimiento de los grupos armados

ilegales como las FARC, el ELN, el EPL entre otros, Colombia vivía en un
crecimiento armado a causa de los partidos políticos para la época que nacieron
estos grupos armados los liberales y los conservadores no solo peleaban las
curules políticas sino también la aceptación del pueblo para acogerse a sus ideas
como una doctrina política de la cual solo podían ser de bando rojo o azul, lo cual
conllevo a conflictos internos de nuestro país y lo cual también empeoro a finales
de los años 40 y todo por seguir un color político dentro de la dividida sociedad
política y gracias a esos partidos políticos le debemos la actual situación de
violencia.

Cada una se fue con su grupo armado, paramilitar, milicias guerrilleras los cuales
con el tiempo deficiencias en el gobierno del momento cada grupo tomo su
camino a las armas por incumplimiento de acuerdos pactados, cuestión que en
el actual proceso de paz persiste, después que la historia nos recuerda que
somos malos negociadores y cumplidores de acuerdos.
La historia de las guerrillas en Colombia se debe recordar, sin embargo, muchas
personas las ven como justas perspectivas políticas y armadas a vencer, se
colman de odio el o saber por que existen, pues es claro que estos grupos si
infringieron el derecho constitucional de estar en paz y tranquilos o seguros en
sus territorios, no comparto la existencia de estos grupos armados ilegales, pero
hay que recordar que estos nacieron a cuestas de superioridades políticas que
querían establecer su propio orden político y social es decir las mal llamadas
“familias políticas” que desde entonces y desde el surgimiento de las FARC en
Marquetalia y del ELN en un grupo de extrema izquierda con raizal comunista.

En ambos casos los procesos de desarme, reinserción, reintegración,

desmovilización o lo más sutilmente nombrado por los gobiernos que es el
sometimiento, y pues ninguno de los grupos acepto conforme a sus métodos
políticos de negociación posguerra del ámbito unilateral o bilateral, en este caso
el bilateral fue el más indicado por las FARC iniciaran diálogos con el gobierno
bajo conceptos políticos con argumentos de índole social, como las reformas
agrafias, que en un tiempo fueron la principal razón de los grupos armados
ilegales para consolidar un proceso de negociación viable, esto antes que llegara
el infortunio modelo económico y armado generado por el narcotráfico y las
mortificaciones económicas no solo en los grupos armados sino en también en
gestores gubernamentales.

El proceso de las FARC ha sido enmarcado por incumplimiento a los acuerdos,

por ejemplo lo sucedido en el Caguán, fue un proceso complaciente donde el
gobierno le permitía a las FARC ejercer control territorial además de no poseer
bases permanentes del ejército en la zona, así mismo, permitieron que realizaran
actos de violencia fuera de la zona de distensión y solo para beneficiar una
imagen errada de un proceso fallido cuando Manuel Marulanda dejo la silla vacía
en la reunión para el acuerdo de paz engañoso.
Con el ELN no se llegaría a consensos de negociaciones, en razón a que las
hostilidades entre el grupo guerrillero y los entes de control militar del país
siempre estaban en oposición a un acuerdo bilateral, el ELN pactaba un sece al
fuego pero continuaba con los secuestros y atentados a la infraestructura
petrolera, es decir no se evidenciaba voluntad por parte del ELN para iniciar un
proceso de negociación, y en realidad nunca la hubo, pues siempre por el motivo
culminante que el ELN establece negociaciones dentro del marco de la guerra.

Con las FARC podemos decir que llegaron a un acuerdo de cese de hostilidades
en algunas partes y la concepción final del cese al fuego, pero no a la tregua
acordada, se firmó el acuerdo y las FARC ahora son un partido político, y se
mostró un supuesto éxito, se desarmo la guerrilla mas antigua y gestiono como
resultado un nobel de paz como resultado de las negociaciones.

En presente se ve reflejado el peligro del proceso de paz, porque volvieron las

andanzas de los grupos armados en contra de la ley, también la delincuencia
común que por no estar de acuerdo talvez por los adoctrinamientos políticos,
odios del pasado o simplemente por no estar de acuerdo con los acuerdos de
paz y que el nombre de las FARC sea incluyente en el marco político del país,
se comienzan a masacrar a sus participantes como sucedió con la Unión
patriótica, el quiebre político de una parte de sus dirigidos y su regreso de nuevo
a la subversión armada contra el estado, el otro punto crucial es la partición en
la que se encuentra el partido político debido a las diferencias o ideologías, el
abandono de los militares rasos y la poca protección por parte del estado de los
militares en zonas de influencia paramilitar y de delincuencia común, contando
también los sucesos de otros grupos políticos que no están de acuerdo con el
documento gestionado en la Habana y exigen que se revise y se realicen
cambios, sobre todo en el concepto de pago de culpa y reparaciones a víctimas
del conflicto armado, lo cual las FARC no están de acuerdo ya que ellos sugieren
que el acuerdo pactado es legal y aterrizado, pero este no refleja en las actuales
condiciones de confianza de la gente y de muchos que no estuvieron de acuerdo
con este proceso de paz y que lo mejor que se pudo haber hecho fue haber
sometido a una guerrilla que nunca se rendiría por medio de las armas, por lo
tanto esto seria la continuidad de la guerra, de la barbaridad social, de los
desterrados, refugiados en las capitales en condiciones paupérrimas de pobreza,
en conclusión un país que aun vive la guerra a su manera por culpa de los
factores del narcotráfico, la corrupción, el desempleo, las diferencias económicas
y sociales, pero finalmente se concluye que ya las FARC como partido político
forma parte de todo este compuesto país llamado Colombia.
CONCLUSIÓN.

Al realizar este ensayo de los procesos de paz en Colombia, puedo decir que la
mejor interpretación que puedo dar a este tipo de situaciones es que cuando
existen diferencias para efectos de lograr una conclusión final a un acuerdo entre
las partes, la confianza en las negociaciones es la mejor parte en la que dos
líneas paralelas en la conversación, incluso una tercera, intercede todo el tiempo
empleado en el proceso y concierte en las verdaderas intenciones de justicia,
verdad y reparación, efecto propuesto también en diálogos alternos con los
grupos paramilitares ya que se persigue un fin absoluto la paz firmada pero claro
está que tampoco sabemos que tanto se percibe.
BIBLIOGRAFIA

Fisas, V. (2010). Alto el fuego. Manual de procesos de

paz. http://biblioteca.clacso.edu.ar/Espana/ecp/20161219045734/pdf_1093.pdf