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Geschichtlichkeit (die), geschichtlich: «historicidad», «histórico».

De entrada hay que tener


clara la distinción heideggeriana entre Geschichte e Historie, que encontramos en el tratado de
1924 El concepto de tiempo, en las Conferencias de Kassel (1925) y en Ser y tiempo (1927).
Bien es cierto que, en las lecciones del semestre de verano de 1920, Fenomenología de la
intuición y de la expresión, el joven Heidegger menciona seis sentidos de historia. Asimismo,
en su recensión de la Psicología de las concepciones del mundo de Karl Jaspers (1919-1920)
habla de «la historia que nosotros mismos somos» (GA 9, p. 5) y distingue la historia
(Geschichte) en el sentido de lo que efectivamente acontece de la pretensión científica de la
historiografía (Historie) que convierte la historia en un simple objeto de indagación teorética.
Geschichte viene del alemán geschehen («acontecer», «suceder»), mientras que Historie se
remonta al griego ίστορεῖν («investigar», «indagar», «examinar»). La distinción entre Historie y
Geschichte empieza a dibujarse con claridad en el mencionado tratado El concepto de tiempo,
donde se ofrece un primer análisis serio de los conceptos de «historicidad» y «temporalidad»
que se enmarca en la lectura heideggeriana de la correspondencia entre el conde Yorck de
Wartenburg y Dilthey. Historie hace referencia a la ciencia histórica, al saber histórico, al
conocimiento estrictamente historiográfico, es decir, a la ordenación cronológica de hechos
históricos, al establecimiento lineal y progresivo de secuencias históricas, a la datación de
acontecimientos pasados. Una tarea que, según Heidegger, ocupa básicamente al historiador.
En cambio, el término Geschichte, que comparte la raíz del verbo geschehen («acontecer»,
«acaecer», «suceder»), remite al acontecer mismo de la historia, al proceso de gestación
histórica al que está sometida cualquier parcela de la existencia humana. En este sentido, ser
histórico significa estar constituido por las diferentes estructuras de sentido que determinan
nuestra existencia temporal. Esta distinción también guarda una estrecha relación con la
diferencia que se establece entre das Vergangene —lo pasado, lo que ha desaparecido
irrevocablemente, lo enterrado por el pasado— y das Gewesene —lo sido, la historia
acontecida, lo que todavía permanece vivo y activo para nuestro presente, lo que todavía tiene
la capacidad de influir sobre nuestro destino—. Además, jugando con el parentesco lingüístico
de las palabras, Heidegger asocia Geschichte («historia») con Geschehen («acontecer») y
Geschick («destino colectivo»). Tras el cambio de perspectiva que sufre su pensamiento en los
años posteriores a Ser y tiempo, se hablará de Seinsgeschichte («historia del ser»),
Seinsgeschehen («acontecimiento del ser») y Seinsgeschick («destino del ser»). A la luz de
estas aclaraciones, traducimos Historie por «historiografía», Geschichte por «historia»,
Geschichtlichkeit por «historicidad» y Geschehen por «acontecer».
[GA 64, pp. 3, 4 (historicidad = carácter de ser), 6-7, 12 (historicidad de la autoconciencia), 13,
15 (comprender la historicidad), 86 (constitución de ser, fenómeno de la temporalidad), 91, 93
(historicidad propia, historia del mundo), 95 (codeterminación del ser del Dasein), 103; KV, pp.
147, 158 (Dilthey), 159 (donación de la realidad histórica), 173, 174 (diferencia historia –
historiografía), 175 (pregunta por la historicidad); GA 24, p. 393 (historicidad, comprensión,
Dasein); SuZ, pp. 19-21, 332 (historicidad del Dasein), 372-404 (temporalidad e historicidad),
381, 382-387 (constitución fundamental de la historicidad), 393-396, 402 (filosofía).]

Geschick (das): «destino colectivo», «destino común». El término Geschick tiene un sentido
muy específico en Heidegger. Como se dice en Ser y tiempo, «el acontecer (Geschehen) del
Dasein es un co-acontecer (Mitgeschehen») (SuZ, p. 384) que se determina como destino
común (Geschick). Geschick es el acontecer de la comunidad, del pueblo. Por tanto, en la
medida en que el Dasein forma parte de un colectivo comparte un destino común (Geschick)
con los otros que se diferencia de su propio destino individual (Schicksal). Después de Ser y
tiempo, desaparece esta estricta distinción entre Schicksal y Geschick. A partir de sus
posteriores exploraciones de los conceptos de «suerte» y «destino» en Hölderlin y Nietzsche
(amor fati), se deja de hablar del Schicksal del Dasein individual para centrarse casi
exclusivamente en el Geschick, en el «destino», en el «envío» del ser. Véanse también las
entradas Geschichtlichkeit (die), geschichtlich y Schicksal (das).

[SuZ, pp. 56, 384-386, 394, 396.]

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