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Cuando los riesgos laborales no se pueden evitar o no pueden limitarse suficientemente por
medios técnicos, de protección colectiva o mediante medidas, métodos o procedimientos de
organización del trabajo, se recurre a dotar al trabajador de una serie de elementos que se
denominan equipos de protección personal (EPP), cuya finalidad es protegerlo de los diferentes
riesgos profesionales en el lugar de trabajo. El objetivo de los elementos de protección personal, es
primordialmente servir de obstáculo entre el agente del riesgo que puede ser un filo cortante, una
superficie abrasiva, un objeto disparado o una sustancia peligrosa y el cuerpo humano y así evitar
lesiones que pueden producirse por el contacto con ellos.
Dado que los EPP no eliminan ni corrigen el factor de riesgo, se trata de recursos menos eficaces,
que solo deben utilizarse si no existe otra posibilidad de protección o bien como métodos
complementarios de otras medidas, puesto que solamente evitan o disminuyen las consecuencias.
En ocasiones son absolutamente imprescindibles.
El primer aspecto a considerar en el EPP es su selección. Un cirujano utiliza guantes de látex que
lo protegen a él y a su paciente de agentes biológicos, mientras que un carnicero usa guantes de
malla metálica que lo protegen de una cortadura con el filo del cuchillo y el portero de un equipo de
fútbol usa guantes para evitar que el balón resbale de sus anos. Esto mismo aplica para todos los
elementos de protección. Por lo tanto, se debe ser cuidadoso en su selección.
El segundo aspecto es su uso. Cualquier uso inapropiado del EPP, puede hacer que éste no
proteja adecuadamente y por lo tanto, permitir que el accidente ocurra. Los cascos no son
contenedores de líquidos, ni los guantes, bolsillos para transportar otras cosas.
Un tercer aspecto tiene que ver con el equipo muy especializado como los respiradores. En
general hay respiradores para sustancias y ambientes específicos que pueden deteriorarse al
usarse en ambiente distintos, como se dañaría un guante de látex si lo vamos a usar para trabajar
en una obra de construcción.
Para llevar a cabo su misión, esto es, impedir una lesión o daño al usuario, todo EPP debe cumplir
unos requisitos mínimos:
• Ser adecuados al riesgo que tratan de evitar, proporcionando una protección eficaz.
• Ser cómodos y estéticos.
• Ser de fácil uso.
• Ser compatibles, si el caso lo requiere, con otros equipos de protección individual.
• Ser de uso individual. Cada trabajador debe disponer de su propio equipo, siendo esencial
la adaptación al trabajador.
• Ser de uso generalizado, de modo que cualquier persona que se encuentre en la zona de
riesgo donde haya obligación de llevar estos equipos, debe hacer uso de ellos.
• Ser de uso continuado, debiendo utilizar constantemente el equipo, durante todo el tiempo
que se permanezca en la zona de riesgo o se estén realizando trabajos que lo requieran.
• Conservarse adecuadamente, siguiendo las recomendaciones del fabricante.
• Facilitar la adecuada formación e información al trabajador para su correcta utilización y
conservación.
• Realizar la elección teniendo en cuenta la consulta y participación de los trabajadores.
• Ser proporcionado gratuitamente por el empresario.
Hay que tener en cuenta que los EPP presentan una serie de inconvenientes entre los que cabe
señalar:
Son aquellos que protegen al trabajador en su totalidad, sin especificar determinadas zonas del
cuerpo. En esta categoría se incluyen los siguientes:
Normas como las ICONTEC 2021 y 2037, las ANSÍ Z.359-1 y entidades como la OSHA, son una
excelente ayuda al momento de seleccionar los elementos protectores que eviten lesiones por caídas y
para proteger a los operarios en trabajos en alturas.
El trabajo, el medio ambiente en que se labora, el peso del usuario, son fundamentales al momento
de hacer una adecuada y segura selección de arneses, cinturones y fajas entre otros. Especial atención
recomiendo al momento de la adquisición sobre los materiales de los amarres, las argollas y los
herrajes.
- Ropa de trabajo:
Se define como tal, aquella ropa que sustituye o protege la ropa personal para proteger al
trabajador de uno o más peligros. Es obligatoria su utilización ante determinados riesgos, en
trabajos sucios y en alimentación, farmacia o medicina.
Las características que debe reunir la ropa de trabajo son las siguientes: que sea ligera y lavable,
ajustada y sin elementos adicionales para evitar enganches; también será impermeable,
incombustible o de abrigo, cuando el trabajador lo requiera.
La ropa de trabajo se clasifica en función del riesgo específico para el que ofrece protección, de
modo que se distinguen, de forma general, los siguientes tipos de ropa de protección:
- Prendas de Señalización:
Consisten en prendas reflectantes como brazaletes, cinturones, chalecos, para utilizar en aquellos
lugares que forzosamente tengan que estar poco iluminados y en los que existe riesgo de colisión,
atropello etc.
- Protección frente al riesgo eléctrico: Debe entenderse como una protección integral, si bien se
compone de prendas de protección parcial, ya que está destinada no sólo a proteger una parte del
cuerpo, sino a impedir que la corriente circule a través de él. A menudo se requiere al mismo
tiempo el uso de otros equipos, como banquetas, alfombrillas o varas aislantes, para la realización
de determinadas tareas en condiciones de seguridad.
Hoy estos elementos para la protección de la cabeza cumplen una serie de requisitos y normas y son
utilizados en todo tipo de industria y proceso tales como manufactureras, agroindustria, servicio
públicos etc., sirven para proteger de impactos, elementos en riesgo de caídas, altas temperaturas
bajo y sobre cero grados centígrados, riesgos del medio ambiente y también como medio de
identificación etc.
En Colombia, la norma ICONTEC 1523 normaliza sobre ellos y para la generalidad se sigue la norma
ANSÍ Z89.1
Están compuestos de cuerpo y suspensión la que en común es llamada tafilete. Se producen de muchos
colores, formas y tamaños y estos se utilizan básicamente para identificar a las personas por su oficio o
su rango organizacional, o para definir un uso ante un riesgo. En algunas empresas los colores de estos
elementos identifican al personal de contratistas, a los temporales, a los estudiantes en práctica, esto
con el fin de poder tener control sobre ellos.
Los fabricantes los someten a una serie de pruebas de laboratorio entre las cuales las más
importantes son: impacto, penetración, aislamiento eléctrico, rigidez lateral, inflamabilidad,
soluciones ácidas, masa, envejecimiento.
Protección de ojos
La inadecuada o ausente protección de los ojos puede generar irritación, conjuntivitis, cataratas,
reducción de la visión y llegar hasta la pérdida de ella, teniendo por lo tanto corno consecuencia la
incapacidad de ver y la limitación para ejercer gran parte de nuestras actividades.
Todas las reglamentaciones y legislaciones del mundo conocido y en cuanto a seguridad ocupacional se
refieren, hacen énfasis especial en la protección visual y la importancia de los ojos en la vida del
hombre.
Las normas ICONTEC sobre estos elementos, se encuentran NTC 5145-1:2003, NTC 5145-2:2003, NTC
5243:2004, NTC 5288:2004 y NTC 5331:2004 y a nivel internacional se pueden citar por ejemplo ANSÍ
Z87.1, COVENIN 957-76, ISO 48-49, CE EN 166.
Son muchos los riesgos para el sistema visual y por lo tanto muchos los elementos producidos para su
protección, los hay para reducir riesgos ante la presencia de rayos solares, ultravioletas, de soldadura,
para partículas y polvos en suspensión, partículas y partes resultantes de impactos y operaciones
industriales, en la soldadura, la carpintería etc. Y en actividades como el deporte, la industria, para
control de los efectos de los rayos solares. En la agroindustria, existe hoy incluso productos que
aumenta la capacidad de la visión mediante el uso de determinados colores.
Así como en la protección respiratoria existen muchos filtros y cartuchos, también lo es para la
protección visual, los marcos o caretas se fabrican con productos acordes al control del riesgo por
ejemplo en poliuretano, en plástico, con sistema de aireación con ventilación indirecta, de acetato, en
PVC, en nylon, los vidrios también se producen según el riesgo y el color tiene especial importancia para
controlar efectos de rayos ultravioletas o de arcos eléctricos entre otros.
Caretas para la cara, petos para el pecho, abrigos para el calor o el frío, capuchas para la humedad y el
agua, todos tienen materiales diferentes según la exposición, los riesgos y los usuarios, y todas exigen
un tamaño y forma determinada.
Normas como las NTC 3610, ANSÍ Z.87.1, COVENIO 95576, ISO 48499-014-3, dan guías suficientes
para una buena selección de estos materiales.
No siempre se deben utilizar guantes y elementos protectores de dedos, manos y brazos y esta
restricción tiene especial validez cuando se labora en equipos y sistemas en movimiento, porque si
la maquina o equipo atrapa el guante o protector detrás van irreparablemente dedos y manos.
Como para las otras partes del cuerpo, para las manos dedos y brazos existe infinidad de elementos
protectores, y cada oficio necesita de uno en particular, no es igual un guante para manipular productos
químicos, que un guante para cortar carne.
Los guantes para protección en operaciones con sistemas eléctricos por ejemplo, se fabrican con
diversos materiales y resistencias dependiendo de la tensión del sistema a operar y estos guantes
por seguridad del operario se distinguen por su espesor, pero ante todo porque son fabricados de
diferentes colores, para ayudar a su identificación.
Se producen guantes de cuero y carnaza, de plástico y polipropileno, metálicos, con mezclas de asbesto,
en tela y cada uno responde a un determinado riesgo, y pueden ser cortos o largos.
Las llamadas botas de "Seguridad" en el común de la gente tienen una serie de requisitos en su
diseño, materiales de fabricación, tamaño, etc. Por ejemplo, las suelas deben corresponder al lugar y
riesgo donde se van a usar, deberán según el caso ser antideslizantes, dieléctricas, resistentes a
los aceites, ácidos y petroquímicos, resistentes a clavos y otros elementos penetrantes. Se deberán
fabricar de caucho o cuero según el caso, y su diseño debe ser corto, medio o largo.
Las punteras de acero que se instalan en algunas botas deben corresponder a un número según las
normas internacionales, este número equivale al número de la bota en su tamaño menos 33. Quiere
decir que una bota número 40 debe tener una puntera número 7 y así sucesivamente. Esto es
especialmente importante porque muchas veces los usuarios de este elemento sufren cuando la
puntera no cumple este requisito.
También se incluyen las fajas de protección lumbar indicadas para el manejo de cargas y las fajas
o cinturones anti vibraciones en puestos como el conductor de carretillas elevadoras, utilización de
martillos neumáticos etc.
Normas ICONTEC que normalizan sobre elementos de protección respiratoria son citadas a
continuación y las internacionales que pueden consultarse más conocida son las ANSÍ Z88.2, y
NIOSH 42CFR-84 entre otras. A este respecto se recomienda que los elementos de protección
personal, siempre tengan el sello de una entidad normalizadora y certificadora pero con mayor
rigidez los que protejan el sistema respiratorio.
Es importante recordar que los protectores respiratorios solo deben usarse en áreas de bajas
concentraciones y en donde la cantidad de oxigeno en el aire no afecte la respiración del usuario,
para áreas contaminadas la protección debe ser autónoma mediante cilindros con aire a presión o
sistemas de inyección de aire por medio de bombas y mangueras.
Se producen para esta protección elementos desde los básicos o desechables hasta los más
complejos y que protegen de un determinado producto o forma de riesgo en partículas, polvos,
gases, olores, material particulado y vapores orgánicos entre otros. Existen cartuchos para
protección ante la presencia de vapores ácidos, gases ácidos, vapores orgánicos, amoníaco,
pinturas, humos metálicos, fumigantes y plaguicidas agroindustriales.
Debe tenerse en cuenta que la concentración de oxígeno en el aire nunca debe ser inferior al 17%.
Si la concentración de oxígeno fuera insuficiente o existiera una elevada presencia de
contaminantes con riesgo de intoxicación, se recurrirá a equipos independientes de la atmósfera.
Contra partículas: Constan de un medio filtrante y un adaptador facial. Deben utilizarse según el
tipo de partícula que pretenden filtrar (polvo, nieblas, humos, emanaciones metálicas etc.)
Máscaras con filtro: Constan de un adaptador facial que cubre boca, nariz, ojos y mentón y un filtro
dotado de unos materiales filtrantes, absorbentes, neutralizantes o catalíticos. Ofrecen protección
combinada frente a gases, vapores, humos y nieblas o polvos.
- Equipos independientes de la atmósfera:
En los primeros, no autónomos, existen los equipos de aire fresco no asistido, con asistencia
manual y de aire comprimido.
Dentro de los equipos autónomos se encuentran los de circuito abierto (el aire exhalado pasa al
exterior) y cerrado (el aire exhalado se recicla siendo respirado de nuevo, añadiéndole el oxígeno
necesario).
Los efectos del ruido en el organismo son irreversibles y la pérdida del sentido de la audición es de un
incremento geométrico en su lesión.
Para conocer el efecto ruido en un área, se utiliza el medidor de ruido o decibelímetro que mide las
unidades con base en los estudios del físico Decibelios. La sencilla medición o la especializada
dependen de la exposición en niveles, de las personas expuestas y de la cantidad de horas de
exposición al día. La atenuación y las frecuencias nos indican los elementos a utilizar.
Existen protectores desechables, protectores tipo tapón de silicona de uso personal y reutilizables,
protectores de uso multi-personal y llamados de copa. Hoy en muchas empresas y cuando la exposición
es por poco tiempo y los niveles no son críticos, en las entradas a los sitios con riesgo instalan
suministradores de tapones tipo algodón de un solo uso desechables y unipersonales.
La norma ICONTEC 2272 y la internacional ANSÍ 3.19/74 son guías para estos elementos su
fabricación, uso y mantenimiento.
La resolución 1792 del 3 de mayo de 1990 define sobre valores límites permisibles para la exposición
a
ocupacional al ruido y también hacen aparte especial sobre este tema la Ley 9 del 24 de enero de
1979 y la Resolución 2400 del 22 de mayo de 1979.
- Tampones: Elaborados con diferentes materiales, como vinilo, silicona, elastómeros, algodón y
cera, lana de vidrio, etc. Se insertan en el conducto auditivo externo, pudiendo ser premoldeados
(en varios tamaños normalizados) o moldeables. También pueden colocarse en la abertura del
conducto auditivo externo, fabricados en un único tamaño que se adapta a la mayoría de oídos, en
ocasiones van dotados de un cordón interconector o un arnés de cabeza ligero.
- Auriculares u orejeras: Constan de dos casquetes provistos de una almohadilla que cubren por
completo el pabellón auditivo externo y se aplican herméticamente por medio de un arnés. Si el
nivel de ruido es muy intenso, pueden ser necesario utilizar tampones y auriculares al mismo
tiempo.
- Cascos: En ocasiones los auriculares se pueden montar en un casco rígido, pero la protección
que suelen ofrecer es peor ya que el ajuste resulta más difícil.
Otros dispositivos: Son equipos más complejos que ofrecen unas prestaciones específicas como
los dispositivos de respuesta plana, protectores dependientes del nivel de ruido, protectores para
la reducción auditiva del ruido o asociados a equipos de comunicación entre otros.
OBLIGACIONES SOBRE LOS EPP
Obligaciones de los empresarios
• Análisis y evaluación de los riesgos que no se pueden evitar por otros medios.
• Definición de las características de los EPP.
• Valoración de las posibles situaciones de emergencia.
• Solicitar información a los suministradores de EPP sobre los aspectos mencionados.
• Consultar a los trabajadores y a sus representantes.
• Adquirir los equipos.
• Informar y formar a los trabajadores.
• Planificar un programa de implantación de los EPP.
Obligaciones de los trabajadores