INCLUYENDO A PAPÁ Y A MAMÁ EN MI PROCESO EDUCATIVO

Cuando se habla de inclusión educativa se habla de la educación para todos, la

cual hoy en día, se entiende como una búsqueda de mejores formas de responder
a la diversidad. Se trata de aprender a vivir con la diferencia de los demás y de
aplicar esas alternativas con el fin de que, sin importar sus condiciones físicas,
intelectuales, económicas y sociales, todos tengan el derecho a una educación de
calidad

La importancia que tiene la familia en el éxito académico de un estudiante es muy

importante y ha sido comprobada por diversos estudios y se convierte hoy en un
hecho irrefutable. Por lo mismo, la participación que tienen los padres en la
escuela adquiere un papel fundamental para potenciar las capacidades de los
niños y jóvenes e incidir en su éxito académico.

Fomentar la participación de las familias: Los familiares conocen muy bien a los
alumnos y alumnas, y ellos pueden ayudarnos a descubrir cómo trabajan más
eficazmente y pueden ser un recurso muy valioso para poder diseñar un aula
inclusiva. También es necesario establecer con ellos una relación de confianza,
manteniéndoles bien informados de todo lo que sucede dentro del aula y pidiendo
su compromiso para conseguir algunos de los objetivos plantados en el aula.

Para lograr todo lo dicho anteriormente, es necesario utilizar estrategias que

permitan establecer encuentros en los cuales estén incluidos los padres, alumnos
y profesores para fortalecer las relaciones y el trabajo en grupo.

La importancia de realizar esta estrategia educativa, se hace con el fin de

fortalecer la relación y el vínculo de los padres con sus hijos. Y si este ejercicio se
ejecuta de manera correcta se obtendrán muchos factores positivos ya que, hay
niños que tiene problemas para participar de las actividades grupales, también
presentan dificultad en el aula para integrarse y debido a estas situaciones, los
niños se aíslan por temor o vergüenza dentro del aula y esto puede deberse a
problemáticas que se dan dentro del hogar.

Ahora bien, sabemos que es muy importante tener en cuenta los niños con
discapacidad ya que, no se les brinda una atención adecuada. Por tal motivo, es
de vital importancia la presencia de los padres de familia en la formación de los
educandos, probablemente ellos se sentirán apoyados y refugiados, este
acompañamiento les servirá para reforzar sus falencias educativas.
Objetivo general

 Diseñar e implementar estrategias de articulación entre la familia y la

escuela, mediante técnicas participativas las cuales permitan lograr un
clima favorable de participación y aprendizaje, transformando las reuniones
de los padres en momentos formativos y productivos que ayuden a generar
un mayor compromiso y acompañamiento con sus hijos.

 Conocer y recrear materiales educativos que dinamicen las reuniones

convocando a la participación y reflexión sobre temas de su interés.

Objetivos específicos

 Establecer de manera conjunta encuentros (familia- escuela) en donde se

puedan crear vías de comunicación, para compartir información y resolver
las problemáticas que se presentan en el aula como, por ejemplo, las
dificultades en la participación de las actividades.

 Diseñar, estrategias en donde se comparta el poder y la toma de

decisiones, en donde las educadoras y las familias, puedan decidir de
manera conjunta en beneficio de los niños y las niñas.

 Identificar los efectos ya sean positivos o negativos que produce el

acompañamiento de los padres en la escuela.

 Realizar un acercamiento con los estudiantes que presentan necesidades

educativas especiales que permita establecer los bajos niveles de inclusión
que se presentan

 Potenciar las capacidades de cada uno de los estudiantes por medio de

juegos grupales en donde se genere la inclusión y participación de todos los
estudiantes en el aula de clase

Información aparte.

1) Estudiantes: incremento de la motivación, logros y éxitos en la escuela. Los

estudios realizados en diversos ambientes familiares señalan que los niños tienen
ventajas cuando sus padres apoyan y se involucran en la educación de sus hijos a
través de las actividades de la escuela (Epstein, 1992). Estas ventajas se resumen
en logros académicos, asistencia, adaptabilidad social y conducta en
aula (Romagnoli y Gallardo, 2008).

2) Familias: los padres aumentan el conocimiento acerca del desarrollo del niño,
aumentan sus habilidades parentales y la calidad de sus interacciones.

3) Escuelas: la participación de los padres ayuda a los administradores de escuela

y profesores a conducir un programa de escuela más efectiva, que conduzca a
estudiantes más exitosos. Contribuiría a una enseñanza más efectiva y a un mejor
clima de trabajo.