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mentiras
Yolanda Rodríguez - Carlos Berbell
7-9 minutes
Parpadear mucho, respirar agitadamente y mirar hacia otro lado no son necesariamente
señales de que alguien esté mintiendo. Creer que detectar mentiras es así de simple, solo
demuestra que la ficción nos condiciona más de lo que pensamos. Sin embargo, sí es
posible detectar la mentira a través de algunos gestos.
Conocer esos gestos es esencial para abogados, jueces y fiscales porque gracias a ellos se
puede detectar, con cierta seguridad, cuándo un sospechoso dice o no la verdad.
Y es que como decía el personaje de Cal Lightman (interpretado por Tim Roth), en la serie
Lie to Me, basada en las teorías del psicólogo norteamericano y experto en las
mocroexpresiones faciales, Paul Ekman: “No tengo mucha fe en las palabras. Según las
estadísticas una persona normal miente tres veces al hablar cada 10 minutos. Gente normal,
no hemos estudiado a los que pretenden volar una iglesia afroamericana, los resultados
serían diferentes ”.
Aunque hay algunas señales que aparecen más frecuentemente entre mentirosos, que entre
quienes cuentan la verdad; sin embargo, no ha sido identificada una señal universal de
mentir. Ya que no todos los mentirosos muestran el mismo comportamiento. Un mentiroso
puede disminuir el contacto visual, mientras que otro puede aumentarlo en respuesta a la
misma pregunta.
8. Compresión de labios.
Se suele producir cuando algo negativo está sucediendo (un juicio, por ejemplo).
7. Taparse la boca.
Si, mientras habla, mantiene este gesto, quiere decir que podría estar mintiendo. Si se tapa
la boca mientras escucha al interlocutor podría dar a entender que piensa que está ocultando
algo.
Bill Cinton, expresidente de los Estados Unidos, mintió a millones de personas, cuando
aseguró que él nunca le había sido infiel a su esposa con Mónica Lewinsky.
6. Tocarse el cuello.
Denota ansiedad, nerviosismo o miedo, sobre todo cuando se toca la horquilla esternal (el
hueso en forma de “v” que está debajo de la garganta). Los hombres suelen ocultarlo
ajustándose la corbata.
Las mentiras provocan una sensación de picor u hormigueo en la cara y en el cuello que
invitan a rascarse. Por eso, a las personas que les han pillado en la mentira recurren al gesto
de tirar del cuello de la camisa. También se produce con el enfado o la frustración.
El ciclista Lance Armstrong quien tras ganar 7 Tour de Francia reconoció haberse dopado,
por lo que fue sancionado de por vida y despojado de sus trofeos.
En una situación cómoda las personas tienden a ocupar espacio extendiendo sus brazos y
piernas. En una persona que miente, su posición se mantendría cerrada; las manos tocarían
su cara, orejas o la parte trasera del cuello. Brazos y piernas cerradas y falta de
movimientos puede ser un signo de no querer dar información.
Se trata de una señal de distanciamiento que puede ser muy sutil, sobre todo cuando la
persona está sentada (puede tratar de ocultarlo al reacomodarse en la silla). A veces el
cuerpo contradice las palabras y es un claro síntoma de que la gente está mintiendo.
La imagen denota el frío saludo entre Donald Trump y Barak Obama.
3. Frotarse los ojos.
Es una señal bastante fiable de que existe un problema. Cuando no se quiere ver algo
desagradable lo normal es frotarse el ojo. Si la mentira es aplastante, los hombres se frotan
con fuerza los ojos, y si es más grande, apartan la vista. Las mujeres suelen acariciarse el
ojo.
En esta imagen el presidente de Rusia, Vladímir Putin, en un gesto que puede denotar que
una persona miente, aunque siempre hay que tiene en cuenta a qué responde ese gesto.
Además, está comprobado que el pestañeo normal suele oscilar entre seis y ocho pestañeos
por minuto, en los cuales los ojos se cierran sólo durante una décima de segundo. Las
personas que están bajo presión (si mienten, por ejemplo), aumentan drásticamente su
pestañeo.
2. Tocarse la nariz.
Puños apretados con los pulgares metidos en indican malestar. Cuando alguien nos dice
enfáticamente que están diciendo la verdad o dando muchos detalles sobre algo en
particular, queremos ver que los pulgares estén visibles.
También puede significar una falta de compromiso que no concuerda con lo que se está
comunicando, y esto puede llevarnos a pensar que nos mienten.
Son las imágenes que creamos con nuestra imaginación. Si le pides a alguien que imagine
un elefante rosa, su mirada adquirirá esta dirección.
Arriba a la derecha
Al centro y a la izquierda
Construcción Auditiva (CA)
Si le pides a alguien que trate de imaginar el sonido más desagradable que haya oído nunca,
su mirada se desplazara hacia la izquierda.
Al centro y a la derecha
Tus ojos se desplazarán hacia la derecha si tratas de recordar la voz de tu primera pareja.
Abajo a la izquierda
Olores, Sabores, Sentimientos (OSS)
Si le pides a alguien que trate de recordar el olor de una hoguera, sus ojos se desplazarán en
esta dirección.
Abajo a la derecha
Cuando una persona está hablando consigo misma, sus ojos miran hacia abajo y a la
derecha.
Tras esta breve explicación te preguntarás cómo puedes detectar una mentira mediante la
observación de estas direcciones visuales. La respuesta es tan sencilla como el hecho de
que una mentira no es un recuerdo, sino una construcción. Y como acabamos de ver, las
construcciones únicamente adquieren 2 direcciones: «arriba a la izquierda» y «al centro y
a la izquierda». Así que ya sabes, cuando tu novio te diga que anoche estuvo con sus
amigos pero sus ojos se desplacen hacia la izquierda, lo más probable es que te esté
mintiendo.
Bromas aparte, existe una ciencia mucho más compleja detrás de las direcciones visuales,
pero las explicaciones que acabo de dar aquí quizá sean las nociones más básicas sobre la
materia.