CURSO VIRTUAL DE FORMACIÓN Y ACTUALIZACIÓN DOCENTE

ESTRATEGIAS DIDÁCTICAS PARA LA ENSEÑANZA APRENDIZAJE DE LAS

CIENCIAS DE LA VIDA EN LA EDUCACIÓN BÁSICA

DOCUMENTO DE ESTUDIO 2

CONSTRUCCIÓN DE CURRÍCULOS INNOVADORES

Viviana Jiménez A.
Instituto de Investigación, Educación y Promoción
Popular del Ecuador –INEPE-

"Se puede vivir dos meses sin comida y dos semanas sin agua, pero sólo se
puede vivir unos minutos sin aire. La tierra no es una herencia de nuestros padres,
sino un préstamo de nuestros hijos. El amor es la fuerza más grande del universo,
y si en el planeta hay un caos medioambiental es también porque falta amor por él.
Hay suficiente en el mundo para cubrir las necesidades de todos los hombres,
pero no para satisfacer su codicia” - Mahatma Gandhi

Lograr que los estudiantes aprendan ciencia, y que lo hagan de un modo

significativo y relevante, requiere considerar varios aspectos en torno a las estructuras
conceptuales y a las estrategias utilizadas para su enseñanza, ya que su aprendizaje,
además de ser un proceso que resulta de la interacción con el mundo natural, es una
laboriosa construcción social que se lo puede alcanzar mediante una enseñanza
adecuada, que permita el desarrollo de actitudes, habilidades y conocimientos, que sean
transferidos a nuevos contextos y situaciones y que sobre todo aporten al cuidado de la
vida del planeta.

El diseño de los currículos de ciencias en la Educación Básica debe tomar en

cuenta los aportes actuales psicopedagógicos, epistemológicos y sociales. Las fuentes
psicopedagógicas nos entregan información sobre cómo aprenden los estudiantes, y,
concretamente, cómo construyen los conocimientos científicos. Estos datos se han ido
conformando a partir de la psicología cognitiva y, en los últimos años, de las
investigaciones que se han realizado desde el campo de la didáctica de las ciencias. Las
fuentes epistemológicas en cambio, nos permiten conocer la concepción de ciencia que
debe estar presente en los currículos científicos que se diseñen para estas edades, qué
vamos a enseñar? por qué? y para qué? se lo va a enseñar, son algunas preguntas que
guían el sentido del diseño curricular. Las fuentes sociales se consideran de especial
relevancia a la hora de decidir los objetivos de la enseñanza de la ciencia, así como la
selección de contenidos y los enfoques metodológicos. Se parte de la necesidad de

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proponer currículos científicos en íntima relación con las necesidades locales y mundiales
para no provocar rupturas entre el mundo real y la escuela.

De esta manera, los currículos de ciencias para la Educación Básica deben

aportar a que los estudiantes:

 Se desenvuelvan en la sociedad de una manera responsable, consciente,

comprometida con el cuidado de la vida del universo.
 Participen, opinen, opten y decidan en la sociedad, en función a la búsqueda del bien
común, iniciando por el cuidado de la vida propia, de los demás y del planeta.
 Comprendan el Universo, la Tierra, los fenómenos naturales, la vida de las plantas,
animales, su hábitat, la interacción del ser humano con el mundo natural y el papel e
impacto del desarrollo tecnológico en el planeta en que vivimos a través del
conocimiento científico y tecnológico.
 Desarrollen un espíritu investigativo desde las tiernas edades y den respuesta a sus
preguntas infantiles y juveniles: ¿Por qué me sigue la luna?, ¿Qué son las nubes?,
etc.
 Conozcan y comprendan el funcionamiento del organismo, su estructura y relaciones,
además de adquirir herramientas para cuidar el cuerpo y la mente y mantenerlos
sanos.
 Estén al día en los avances científicos, tecnológicos, conozcan sus aplicaciones y
utilicen estos conocimientos en la comprensión de los fenómenos naturales y
problemas ambientales locales y mundiales.
 Comprendan los límites, peligros de los cambios científicos y tecnológicos y sobre
todo puedan actuar críticamente sobre ello.
 Desarrollen una conciencia ecológica que les permita asumir la responsabilidad de
buscar alternativas de solución a los daños que este desarrollo científico – tecnológico
ha causado al planeta e intervenir en acciones de protección de la vida.

Los currículos diseñados por el INEPE, recrean el paradigma de la Educación

Popular en una dialéctica permanente con los aportes científicos de la ciencia cognitiva,
las neurociencias, la psicopedagogía, el pensamiento complejo, las inteligencias múltiples
en función de los recursos metodológicos más actuales; en diálogo con los saberes
ancestrales, las dimensiones socioculturales y las concepciones de plurinacionalidad, que
son parte de la Ecosofía, como paradigma emergente, para enfrentar la crisis civilizatoria
planetaria.

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 El proceso epistemológico se construye a partir de tres fases: percepción, reflexión
y concreción, las mismas que integran la pedagogía de la pregunta, la construcción
colectiva del conocimiento, el diálogo de saberes y la inter y transdisciplinariedad.

La construcción y recreación del currículo de ciencias en cada año parte de la

investigación temática que recoge las vivencias de los estudiantes en función a las
necesidades del sector, en estas necesidades se integran el cuidado de la Unidad
Educativa, la elaboración de abonos y siembra de productos orgánicos en el Huerto
Escolar, la reforestación del Parque Metropolitano Chilibulo, el conocimiento y
recuperación de la flora y fauna del sector, el cuidado del agua y la utilización de energías
renovables, entre otras.

Los estudiantes junto con sus docentes visitan los diferentes espacios y registran
en el diario de campo las observaciones y preguntas. Estas experiencias forman un
sustrato de vivencias directas, observaciones e intercambios sobre los cuales es más
fácil y firme la construcción colectiva del conocimiento, además de ser la base para que
surjan nuevas inquietudes e interrogantes que nos lleven en el futuro a la realización de
trabajos de estudio e investigación más profundos.

Las observaciones se sistematizan y se reorganizan junto con los temas del

currículo propuesto por el Ministerio de Educación. A los grandes temas también se
integrar las últimas investigaciones, cuidando que los contenidos sean válidos al permitir
alcanzar los objetivos propuestos; sean adecuados al adaptarse a las competencias
cognitivas y características evolutivas de los estudiantes, y sean significativos al poder ser
aplicados en la realidad. La correcta selección de los contenidos permitirá la construcción
de aprendizajes significativos.

El currículo diseñado se vive durante el año escolar a través de talleres de

Educación Popular y la realización de proyectos de investigación que integran la
bibliografía especializada, el trabajo en el laboratorio, en el huerto y en el Parque
Metropolitano Chilibulo, utilizando una diversidad de estrategias didácticas que permiten
la aprehensión de los estudiantes de la lógica interna de cada ciencia, es decir, les
permitirá “aprender a aprender”.

De esta manera, los currículos se diseñan con una visión interdisciplinaria que
supera el fraccionamiento del conocimiento y se amplían a través de una visión

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integradora en que las partes se explican a partir del todo, llevándonos a abordar el
estudio y comprensión de la naturaleza en toda su complejidad y sus interrelaciones.

El currículo final relaciona de una manera sutil cada uno de sus elementos:
objetivos, contenidos, estrategias metodológicas y los criterios de evaluación en función a
los grandes temas y necesidades planetarias.