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La Revolución Gloriosa no solo significó la abolición de un Estado que tenía como base
un régimen político en el que el rey era el que conservaba todo el poder sin
importar las demás instituciones; sino también un rompimiento de la Francia de
Luis XIV, católica y con gran solidez, como modelo inspirador de la Inglaterra
gobernada por Jacobo II, en el afán de ser él el que logre las mismas cosas en
tierras inglesas. La revolución gloriosa estuvo sumada por ideas de Liberalismo
de John Locke que planteaba todo lo contrario a lo que establecía el rey. Al salir del
poder Jacobo ll y toma el mando Guillermo de Orange, príncipe holandés,
que no tenía interés en restaurar un monarquía absoluta como Jacobo ll, este
acepta la corona con ciertos requisitos que le ponía el parlamento para poder reinar;
como la aceptación de la firma de los Derechos individuales, conocido como el Bill of
Rights y la supremacía del parlamento frente al rey. Lo que significó una nueva etapa,
ya que fue el establecimiento de una nueva forma de gobernar, donde el papel
fundamental ya no lo cumplía el rey; ahora era compartido por el monarca y
el parlamento en el que, por primera vez, iban a poder elegir por quienes serán
representados en una de las cámaras del parlamento, La Cámara de los Comunes.
Se estaba dando la separación de poderes, limitándose así la concentración de poder
en una sola persona para una administración más justa dentro de una
monarquía constitucional. Todos estos procesos produjeron cambio en la concepción
política, se establecía un gobierno mixto, una transición hacia una conciencia
política que generó un gran impacto para futuras revoluciones y para la formación de
un Estado como el que tenemos hasta la actualidad.
2.- ¿Cuáles son características de la forma más pura de monarquía?
La forma más pura de monarquía, dentro del contexto de la Revolución Gloriosa, es
el despotismo. Se habla de despotismo como régimen político en el que el
monarca tiene como objetivo tener todo el poder concentrado en sí mismo. El
monarca podía hacer y deshacer las leyes porque prácticamente la ley era él;
gobernaba sin la interferencia del parlamento e incluso, sin interferencia de la
iglesia, porque es el rey quien es Jefe de la Iglesia. Tenemos aquí el ejemplo de uno de
los monarcas que fue un modelo del despotismo inglés Enrique VIII o Henry VIII, que
por medio del Acta de Supremacía se declara jefe de la Iglesia originando a la Iglesia
anglicana que tenía bases del catolicismo, pero sumándose a estas pensamientos
protestantes. Surgió debido a que Roma no apoyó que el monarca, en su anhelo de
concentrar más poder, se divorciara de Catalina de Aragón. Algunas de las
características del despotismo fue la arbitrariedad al gobernar en el que, como
se mencionó antes, ningún órgano se tomaba en cuenta para la toma de decisiones,
sea justa o no; reunía el poder ejecutivo, legislativo y judicial en su misma figura. La
poca relevancia que tenían los nobles y el clero que solo se limitaban a dar
bienes, algunos impuestos y reservas para el servicio exclusivo del rey. Se
apoya el derecho divino de los reyes para gobernar. También el Estado reúne tropas
para evitar levantamientos de algún individuo perteneciente a sus tierras.
El factor religioso, en definitiva, cumplió un rol importante, porque esta fue uno de
los factores para el inicio y desarrollo de la Revolución Gloriosa; debido a
que, después de la muerte del rey Carlos ll asumió el cargo Jacobo ll, siguiendo las
bases ya establecidas desde el Acta de Supremacía dada por Enrique VIII; este no solo
asumiría el cargo de rey sino también el de Jefe de Iglesia, iglesia que promovía el
anglicanismo, iniciada por este mismo monarca. Al tener la corona y sentir
la aprobación de los Tories y, sobre todo, del parlamento, creyó que estos iban a
aprobar, también, todo lo que él realizaría en adelante. Jacobo ll era movido por
la doctrina providencialista; con la cual, él sentía que tenía una tarea designada
por Dios y esta era retornar al catolicismo. Cegado por su fanatismo religioso, similar
al que existía en la Francia gobernada por Luis XIV, realizó una serie de actos para
poder a reestructurar la religión, como el querer sumar a las tropas cien
oficiales católicos cuando con esta acción estaba yendo en contra de la seguridad de
la Iglesia Anglicana y una ley establecida. Trato de diversas formas evitar
levantamientos, para poder así modificar el orden tradicional del gobierno. El afán de
legitimar el catolicismo en Inglaterra, lo llevó a tener conflictos con los órganos, como
el parlamento, que poco a poco lo iban dejando de apoyar. Estos conflictos muy
ligados a la religión terminaron cuando Guillermo de Orange, su yerno y sobrino a la
vez, que ya había asumido el cargo.