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Lic. Julio C. Salazar Ramírez – Universidad Virtual de Salud, Las Tunas jsalazar@ltu.sld.cu
Introducción
En los albores del siglo XXI, impulsar la Educación Abierta en la Educación Médica Superior
resulta perentorio para promover el uso de los Recursos Educativos Abiertos (REA), estimular la
investigación sobre estos, diseñar estrategias desde lo curricular para que los docentes tengan
conciencia de la importancia de saber trabajar con las herramientas tecnológicas que, a la vez,
permitan crear otros recursos para ser profesionales más competentes y mejorar nuestro
desempeño académico.
El uso de los REA permite nuevas experiencias y flexibiliza el aprendizaje, provee equidad en
oportunidades educativas para distintas localidades, ofrece alternativas de recursos de aprendizaje
de bajo costo, promueven trabajo colaborativo, entre otras ventajas (e-learning, 2016).
En nuestro quehacer profesional tenemos que desarrollar espacios con la finalidad de intercambiar
información, así como trabajar en colaboración sobre temas relacionados con la producción y la
utilización de estos recursos.
El impulso al uso de los recursos educativos abiertos en la Educación Médica Superior conmina el
intercambio y aplicación de las TIC en los diferentes escenarios docentes y en particular los
recursos de e-learning que favorecen el desarrollo del aprendizaje como herramienta para acceder
al conocimiento que rompe barreras espacio temporales. El impacto que ha tenido la Educación
Abierta en los ambientes educativos, permite una integración del conocimiento y la motivación del
estudiante y los profesores en sus usos que ha revertido en el desarrollo del profesional acorde a
las exigencias actuales en la formación universitaria.
Una de las vías para la implementación de estos recursos seria el incremento en nuestras
facultades de programas de cursos completos (programas educativos), con sus respectivos
materiales, objetos de aprendizaje, libros de texto actualizados, materiales multimedia (texto,
sonido, vídeo, imágenes, animaciones), exámenes, compilaciones, así como publicaciones visibles
tanto para docentes como estudiantes de nuestras sedes docentes.
Si logramos que los profesores interioricen la importancia y las ventajas de esta implementación
tecnológica, independientemente de la carencia de recursos informáticos, pudiéramos considerar
el uso de recursos abiertos una de las vías para la implementación de estos recursos asumiendo
que, tanto docentes, gestores de información, profesionales vinculados a la docencia y hasta
algunos alumnos ayudantes, hubiesen transitado por alguna oferta de capacitación relacionada
con el uso de los REA.
Otras vías que podemos implementar para el uso amplificado de los RAE en la educación abierta
en Cuba pudieran contemplar la creación e integración de espacios, presenciales y virtuales, que
permitan el dominio de estos medios dentro de la Universidad Virtual de Salud; vincular a las
Bibliotecas Universitarias con su implementación, para lo cual jugaran un papel preponderante, así
como hacer accesible y visible la información referida a estos medios en todos los formatos de
socialización de la misma.
La universidad médica, como institución social y educativa, no puede estar ajena a la cultura y
tecnología de su época. Las TIC están presentes en nuestro quehacer profesional, por tanto,
tenemos la responsabilidad de conocerlas, dominarlas en todas sus dimensiones en aras de poder
utilizarlas para una adecuada integración curricular en el aula. Por todo ello, los profesores
universitarios debemos promover la participación, en estos espacios formativos, de estudiantes,
investigadores y docentes de manera que ganemos en una cultura de trabajo ante este reto
impuesto por las TIC.
La solución puede estar encaminada en considerar obligatoria, más que opcional, la necesaria
preparación de los docentes en función de utilizar los REA como apoyo directo al proceso docente-
educativo. Esta preparación podría definirse como una oferta académica de cursos y talleres
acerca de cómo manejar el entorno virtual y sus ventajas, para a la vez trasmitir a los educandos la
necesidad de las TIC y su influencia determinante en la educación médica superior actual.
Los REA aportan y en gran medida garantizan un sistema educativo de Universidad Abierta,
constituyéndose en uno de los nuevos modelos que buscan satisfacer la demanda de educación
superior de la sociedad cubana, para lo cual se han diseñado planes de estudios flexibles que se
contraponen al sistema escolarizado convencional.
Los resultados actuales muestran que aún resta mucho por hacer en muchos aspectos
relacionados con la implementación, perfeccionamiento y desarrollo de la Educación Abierta en la
Educación Médica Superior, como modalidad de enseñanza novedosa y muy contemporánea en
nuestro país. Para lograr estos propósitos, a largo plazo, se debería continuar trabajando en la
formación de recursos humanos que dominen y apliquen la tecnología educativa actual, en
correspondencia con nuestras posibilidades tecnológicas.
Por otra parte, si lográsemos promover la producción de materiales didácticos digitales (software
educativo, multimedia, páginas web, libros electrónicos, bases de datos), como una vía para
atenuar las insuficiencias que puedan presentar algunos materiales didácticos escritos, esto
permitiría, de cierta manera, desarrollar el proceso de enseñanza-aprendizaje de los estudiantes y
una mayor socialización de estos recursos por medio de las plataformas virtuales presentes en
nuestras redes académicas universitarias.
De alguna manera, valorar las formas de perfeccionar el modelo de educación abierta aplicado
hasta la actualidad, en aras de fortalecer el vínculo profesor-estudiante, estudiante-estudiante y
grupos, en correspondencia con las características y posibilidades de nuestros centros de
Educación Médica Superior, permitiría brindar sistemáticamente una mayor atención y orientación
a los estudiantes, así como, la evaluación de sus aprendizajes.
Finalmente, promover un uso más amplio de las redes académicas y las plataformas virtuales para
la comunicación que permitan visualizar la relación estrecha entre la educación abierta y las TIC
en el contexto actual, en aras de un mayor y mejor intercambio en proyección hacia una
“universidad virtual” con todas las funciones de una universidad real, previendo además, la
integración de los centros de información y bibliotecas universitarias, entre otros.
En el ámbito formativo de las ciencias médicas, contamos con la estrategia curricular de
investigación e informática, la cual debemos dar tratamiento en el tiempo de duración de las
carreras que conforman estas ciencias. Los docentes tenemos la responsabilidad de formar a
nuestros estudiantes al nivel de su tiempo, lo que requiere que constantemente estemos
actualizados en temas relacionados con las TIC. Aquí resulta necesaria la capacitación tanto de
profesores como de estudiantes para poder lograr el intercambio y socialización del contenido de
la actividad que se imparte.
Los docentes tenemos que, por demás, participar en actividades de superación encaminadas al
trabajo con las TIC en el ámbito educativo, como medio de enseñanza, de información y
comunicación. También debemos fomentar en los estudiantes una cultura de trabajo con estas
tecnologías educativas y concientizar en nuestros estudiantes que el conocimiento no se puede
archivar para guardarlo sino que hay que socializarlo pues es el único bien que más crece cuanto
más se comparte (1).
Entre las competencias más importantes que deben desarrollar los docentes para poder crear,
usar y gestionar adecuadamente los REA se encuentran aquellas relacionadas con el diseño de
materiales didácticos y desarrollo de estrategias de aprendizaje en entornos virtuales con un
diseño centrado en el estudiante; habilidades tanto para el uso aplicaciones y herramientas para la
producción de REA como tecnológicas para la curación de contenidos, comunicación y navegación
en entornos virtuales, y por ultimo competencias para el trabajo colaborativo y para la investigación
(2).
Conclusiones
Una implementación tecnológica efectiva en nuestras aulas requiere de una transposición didáctica
que la acompañe desde un uso fundamentado didáctica y tecnológicamente que favorezca la
virtualización del proceso formativo universitario.
Resulta más que apropiado, a partir de los elementos enunciados anteriormente, impulsar la
educación abierta en la EMS para poder hablar de una ciencia abierta combinada con una
investigación abierta(4), como parte de este proceso en función de la formación del futuro
profesional con un perfil de salida contextualizado a la realidad cubana con vínculos entre la
producción colaborativa y la cultura científica requerida para el profesional de las Ciencias Médicas
que formamos actualmente en nuestras universidades.
Referencias