DIETA ALCALINA PARA EL CÁNCER

Este caso en particular de mi consulta ilustra el poder que tiene el cuerpo para auto-
repararse cuando se le da la oportunidad. Cuando deja de interponerse en su natural e
irrefrenable proceso curativo el cual está en todos nosotros.

La persona tiene 49 años en el momento de ser tratada y viene por ser diagnosticado por el
especialista de piel de turno de un "melanoma nodular" en el dedo anular de la mano
izquierda. Se inició como una pequeña verruga y al cabo de un año se convirtió en un
melanoma muy doloroso.

Él explica que años atrás fue tratado con medicina convencional de un problema parecido
por el que sufrió mucho y gastó dinero con las terapias propuestas sin conseguir la remisión
total. No quiso hacerse cirugía. Por ello estaba dispuesto a probar en sus palabras: "otra
cosa"

Las imágenes muestran el primer día en la consulta (ANTES) y a los 40 días de tratamiento
(DESPUÉS).

Como puede ver el resultado es notable quedando a los 40 días una pequeña cicatriz
blanquecina seca.

Cuál fue exactamente el tratamiento?

Básicamente fue el poder curativo de la Dieta Alcalina!

El protocolo que seguimos fue el siguiente:

1 - Eliminamos los principales causantes de acidificación

2 - Limpieza de colon e hígado con hierbas medicinales

3 - Dieta Alcalina estricta + suplementos para equilibrar el pH

4 - Estímulo del sistema inmune con técnicas naturales

5 - Homeopatía espagírica de uso tópico

Quisiera que el lector piense en las posibilidades que tiene ante sí de mejorar sus problemas
crónicos de salud que no son tan "incurables" (en palabras de la medicina alopática) si la
Dieta Alcalina ha podido revertir un crecimiento de células tumorales.

Obviamente no se puede hacer una estadística con un solo caso y como he dicho
anteriormente es "ilustrativo". Pero lo que sí se puede es tener en cuenta el método como
una alternativa de innegable valor terapéutico.

Para ver más detalles del método haz clic en "Sanar y Adelgazar con la Dieta Alcalina"
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El Trigo y los alimentos prohibidos para Celíacos

5 junio, 2013 por Gabriel Gaviña 20 Comentarios

El Trigo y los alimentos prohibidos para Celíacos

Si ha leído el artículo “El 60% de la raza blanca padece Intolerancia al Gluten” se habrá
percatado ya que realmente los cereales más consumidos terminan causando problemas de
salud.  Los más beneficiosos desde el punto de vista económico son lo más masivos en
consumo diario y los más manipulados genéticamente. La propuesta de William Davis es la
eliminación total del trigo de su dieta. Su teoría es que desde los años 60 se ha manipulado
genéticamente creando en el trigo una proteína llamada “Gliadina” que trae serios
problemas de salud.  Por supuesto, además del problema de la proteína Gluten, problema
para los celíacos (60% de la raza blanca).

El trigo, si no se ha parado a pensar un momento en ello, es consumido prácticamente por

todas las personas, cada día de su vida y varias veces por día. Está en las sopas, panes,
pizzas, pastas, preparados, empaquetados etc. Es el cereal más barato y por ello muy usado
en el mundo de la alimentación. Comprobará que aunque intente dejar de consumirlo se le
“cruzará” en el camino constantemente.  

(Puede variar la calidad del vídeo editando la pequeña ruedita que aparece debajo del
Vídeo)
El trigo, ese “veneno cotidiano” que arruina nuestra salud

Hace unos años, el prestigioso cardiólogo norteamericano William Davis comenzó a

sospechar de los perjuicios para la salud que provocaba el consumo de trigo y sus
derivados. Entonces, comenzó a recomendar a aquellos pacientes que no notaban mejorías
tras someterse a sus respectivos tratamientos farmacológicos, que suprimiesen este
alimento de sus dietas. Los resultados obtenidos sorprendieron al propio Davis: “El 70% de
los pacientes experimentaron unos beneficios que ni yo mismo me imaginaba, más allá de
una considerable pérdida de peso. En tan solo tres meses sus niveles de azúcar en sangre se
redujeron notablemente, incluyendo muchos casos de diabéticos o prediabéticos que
dejaron de serlo. Asimismo resultó que aliviaron otras de sus dolencias, como la artritis, la
soriasis, la sinusitis crónica o la irritación intestinal”, asegura el cardiólogo.
Tras analizar con sus colegas las historias clínicas de los cientos de pacientes sometidos a
este simple tratamiento dietético, Davis publicó un polémico ensayo, titulado Wheat Belly:
Lose the Wheat, Lose the Weight, and Find your Path Back to Health (Rodale), en el que
apoya sus conclusiones con una serie de estudios sobre los negativos efectos del trigo
genéticamente modificado, en la salud de los humanos. La publicación ha levando una
fuerte expectación entre el público, teniendo en cuenta de que se trata de un ensayo
científico, y solo dos semanas después de su salida a la venta Wheat Belly se coló en la lista
los libros más vendidos que elabora el diario New York Times.

Las rotundas tesis de Davis, en las que se relata mediante casos particulares los perniciosos
efectos para la salud del consumo “del trigo moderno”, han obligado a los lobistas de la
industria alimentaria a mover ficha. La Grain Food Fundation ha lanzado una campaña para
desacreditar los argumentos del cardiólogo norteamericano, mientras que este les ha
devuelto la pelota retándolos a un debate televisivo, aunque todavía no ha obtenido ninguna
respuesta al respecto.

El cardiólogo norteamericano William Davis, autor del polémico ensayo ‘Wheat Belly’.

“Para estar sano hay que comer sano”

En Wheat Belly Davis establece una relación directa entre el aumento del número de
diabéticos y el consumo de cereales sometidos a modificaciones genéticas: “Dos rebanadas
de pan integral aumentan más los niveles de azúcar en sangre que dos pasteles debido al
alto índice glucémico del trigo que se cultiva hoy en día. De este modo, estamos
desarrollando una peligrosa resistencia a la insulina y, por ende, la diabetes está
adquiriendo características de pandemia”. Según los cálculos de la OMS y otros
organismos oficiales, en las próximas décadas el número de diabéticos rozará los 350
millones de personas en todo el mundo. El consumo de trigo nos hace desarrollar una
peligrosa resistencia a la insulina.

Una de las mayores satisfacciones de las que hace gala Davis desde la implantación de este
tratamiento estrella en su consulta de cardiología es que “los únicos ataques al corazón que
veo ahora los sufren pacientes nuevos que no conocían la dieta”. Así, asegura que todas las
personas con problemas cardíacos a las que trata “han dejado de sufrir ataques”, después de
eliminar el trigo de sus dietas, limitar el consumo de carbohidratos, aumentar la ingesta de
vitamina D y compaginar con suplementos de yodo.

El extenso recorrido de Davis por las historias clínicas de sus pacientes intenta demostrar
que no hay mal que se resista a su tratamiento. “Sobre todo, las patologías modernas más en
boga, como la diabetes o el colesterol”, añade.

El trigo no sólo es un alimento que consumimos excesivamente en cuanto a % de calorías

diarias, sino que posee alto índice glucémico por ser una harina refinada, es un cereal
modificado genéticamente y contiene Gluten y Gliadina que son dos proteínas complejas
que traen serios problemas a su digestión y a su salud. Todo ello confirma.

Una cura milagrosa para casi todo tipo de enfermedades que hace desconfiar a buena parte
de la comunidad médica. Sus reacciones han sido de recelo al señalar la falta de evidencias
científicas en el libro. Unas acusaciones a las que Davis ha respondido exponiendo su
propio caso. “Mis niveles de colesterol en sangre antes de dejar de consumir trigo eran
bajos (27 mg/dl), los triglicéridos eran muy altos (350 mg/dl), los niveles de azúcar en
sangre rozaban la franja de la diabetes (161 mg/dl) y mi presión arterial era también alta.
Todo esto, unido a mi sobrepeso, con una gran acumulación de grasa alrededor de la
cintura. Sin embargo, cuando dejé de comer trigo experimenté una rápida reducción de
peso, los valores de colesterol se elevaron a 63 mg/dl, los triglicéridos se redujeron a 50
mg/dl, el azúcar en sangre se estabilizó en 84 mg/dl y la presión arterial se situó en una
franja normal. Todo ello sin tomar ni un solo fármaco. En otras palabras, todo cambió para
bien”.

“El agronegocio arruina nuestra salud”

La cruzada en solitario de Davis contra este alimento hace hincapié en que “el auge de
patologías comunes anteriormente estabilizadas se debe al consumo de trigo”, al que se
refiere a lo largo de su libro como el “veneno perfecto”. Para el cardiólogo, el valor
nutricional de los cereales siempre estuvo sobredimensionado, pero fue a raíz de los
avances genéticos iniciados en la década de los 60 cuando “se convirtieron en perjudiciales
para la salud”. Según defiende este, ahora contienen una nueva proteína llamada Gliadina
que actúa como un opiáceo. Esta estimularía el apetito, dice, hasta el punto de que “nos
hace consumir una media diaria de 440 calorías, por lo que si sumas esta cantidad a los 365
días que tiene un año, el sobrepeso será inevitable”.

Los diabéticos que eliminaron el maíz de su dieta superaron la enfermedad en tan solo tres
meses.

Pese a sus convicciones, el cardiólogo se muestra pesimista sobre la posibilidad de

establecer algún tipo de limitación a la producción industrial del grano. “Económicamente
no sería factible porque el trigo tradicional produce menos kilos por hectárea que el
transgénico”. Sin embargo, apela a la concienciación de los consumidores para reducir su
consumo. Para animar a dar este paso, Davis sugiere comer “alimentos de verdad”, como
frutas, carnes, pescados y verduras. Es decir, “los menos susceptibles a sufrir
modificaciones genéticas para engordar el agronegocio”, pues dice que el 90% del trigo ya
es transgénico y que en pocos años supondrá el 100% de las cosechas.

En Wheat Belly, el médico no deja títere con cabeza al criticar también las lógicas que
mueven a los nutricionistas y a los defensores de los alimentos ecológicos. “Todo lo que se
propone es reemplazar la comida basura por otra menos mala. Esto es como si fumo
cigarrillos sin filtro y me paso a otros que sí los tengan porque se consume menos nicotina.
Un error porque no dejamos de hacer daño a nuestra salud, simplemente aminoramos
parcialmente sus efectos. Lo que yo propongo es modificar radicalmente los hábitos
alimenticios dejando de comer este tipo de productos y ya veremos cómo en un corto
periodo de tiempo nuestra salud experimenta un beneficioso cambio”.

En Wheat Belly, el médico no deja títere con cabeza al criticar también las lógicas que
mueven a los nutricionistas y a los defensores de los alimentos ecológicos. “Todo lo que se
propone es reemplazar la comida basura por otra menos mala. Esto es como si fumo
cigarrillos sin filtro y me paso a otros que sí los tengan porque se consume menos nicotina.
Un error porque no dejamos de hacer daño a nuestra salud, simplemente aminoramos
parcialmente sus efectos. Lo que yo propongo es modificar radicalmente los hábitos
alimenticios dejando de comer este tipo de productos y ya veremos cómo en un corto
periodo de tiempo nuestra salud experimenta un beneficioso cambio”.

El Trigo y los alimentos prohibidos para Celíacos

Estoy totalmente de acuerdo con el Dr. Davis en cuanto al grave perjuicio que ocasiona el
trigo a nuestra salud. Dicho ésto, creo que es de todas maneras, una visión parcial de un
problema mucho más amplio que concierne a la producción de prácticamente todos los
productos de consumo masivo.  Comenzando por los lácteos y la pasteurización. Llevan a
90 grados el producto crudo con el que se mata todo vestigio delas enzimas originales
dejando un alimento totalmente muerto para el consumido. Y no una, sino hasta 5 veces son
las que legalmente reciclan los TetraaBrick Caducados. Si es curioso miré debajo del
envase y verá un número del 1 al 5. Ese será el número de reciclaje que tiene esa leche
envasada.

Y ello es el menor de los problemas. Los lácteos contienen una proteína llamada “Caseína”
que está diseñada por la naturaleza para hacer crecer un animal en pocos meses de 20 kilos
a 200 kilos. Un ternero. No está diseñada para el ser humano.

Pero esto es tema de otro artículo junto con los problemas de un consumo regular de
carnes...

Alimentos para prevenir el cáncer: el cáncer es natural y creado por causas artificiales

2 septiembre, 2014 por Gabriel Gaviña 20 Comentarios

¿Existía el cáncer hace cientos o miles de años? Tal y como lo conocemos seguro que no,
esta es la conclusión a la que se ha llegado desde la comunidad médica, donde aseguran que
se trata de una enfermedad moderna creada por el ser humano, concretamente por su
actividad reciente, es decir, por la polución que ha ido generando durante los últimos años y
por llevar una dieta cada vez más desequilibrada y nociva para la salud y por vivir en un
entorno estresante y de emociones negativas, pero los alimentos para prevenir el cáncer han
existido desde siempre, ¿Los conoces? Muchos hacen parte de la dieta alcalina.

Así lo ha determinado uno de los estudios más recientes, elaborado por científicos de la
Universidad de Manchester. Analizaron multitud de momias del antiguo Egipto y en
ninguno de ellos se encontró cáncer, salvo algún pequeño rasgo o caso aislado, nada en
comparación con la actualidad.

Según las declaraciones del profesor Michael Zimmerman, es evidente que al no encontrar
restos tumorales en momias de hace miles de años se permite llegar a la conclusión de que
por aquellos tiempos no existía esta enfermedad, al menos no estaba tan extendida como
hoy en día.

Por aquellos años no se conocía la cirugía, no se extirpaban tumores porque se desconocían,

por lo que en el caso de que hubieran existido, se tendrían que encontrar sus restos en las
momias que fueron estudiadas.

A pesar de haber encontrado alguna vaga referencia en el pasado más lejano, no fue hasta el
siglo XVII-XVIII cuando se encontraron las primeras afirmaciones, plasmadas en la
historia de la ciencia médica de la época. En sus inicios se registraban casos de cáncer nasal
debido al consumo de tabaco y cáncer de escroto debido a la exposición constante a
partículas de hollín. Hablamos del año 1775.
Volviendo al estudio que elaboró la Universidad de Manchester, se podría asegurar que su
teoría afirma que esta enfermedad moderna tiene su origen a raíz del nacimiento de la
sociedad industrializada, es decir, el cáncer se alimenta de nuestra forma de vida, si la
modificásemos, podríamos evitar padecerlo. El cáncer es una adaptación natural al medio.

Todo lo que tocamos y consumimos conlleva un riesgo que podría causar cáncer, desde la
ropa con la que nos vestimos hasta el agua que bebemos, pasando por el aire, los
cosméticos, medicamentos o incluso productos de higiene personal.

¿Quieres conocer algunos alimentos y productos que causan cáncer?

Aquí tienes una pequeña lista con algunos de los más peligrosos y habituales, presta mucha
atención porque seguro que puedes evitar consumir/emplear la gran mayoría:

Consumo de tabaco, tanto la persona que fuma el cigarrillo como aquél que indirectamente
lo inhala.

Alimentos alterados genéticamente..

Y estos son solo unos pocos, podríamos ampliar la lista con miles de productos más! Se
trata de que nos hagamos una idea de la gran cantidad de riesgos a los que estamos
expuestos, donde la mayoría de veces no somos conscientes. Lo bueno es que también
existen múltiples alimentos para prevenir el cáncer.

El profesor R. David afirmaba que ningún elemento natural provoca cáncer, por lo que éste
se origina a raíz de un producto artificial, es decir, con nuestra colaboración, directa o
Detergentes.

 Tintes para cabello.

 Productos de maquillaje.
 Contaminación en el aire de las ciudades.
 Aceite de canola.
 Tomate enlatado.
 Pesticidas empleados en alimentos que después consumimos.
 Aerosoles.
 Rayos X.
 Recipientes de plástico, sobre todo, aquellos que se emplean para calentar la
comida.

Biberones de plástico indirecta. Una frase realmente acertada.

¿Y qué podemos hacer para reducir el riesgo de sufrir un cáncer? Todos coinciden en 4

puntos fundamentales y muy relacionados: Controlar tu peso, Dieta Sana, Actividad física y
Emociones equilibradas. Si seguimos estos pasos, reduciremos el riesgo de padecer cáncer
considerablemente. También existen múltiples alimentos para prevenir el cáncer, muchos
de estos están incluidos en la dieta alcalina.

Personalmente le recomiendo seguir una dieta alcalina por unos meses como mínimo.
Además debería llevar adelante un protocolo de limpieza de órganos como el colon, hígado
y linfa y estimular su sistema inmune con técnicas naturales. Si tiene interés en tomarlo en
serio puede ver el Curso Dieta Alcalina donde se explican todas éstas técnicas al detalle.

La Clorofila alcaliniza y regenera la sangre | Poderes Curativos de Clorofila

11 noviembre, 2013 por Gabriel Gaviña 81 Comentarios

LOS PODERES CURATIVOS DE LA CLOROFILA

Conoce 6 de sus beneficios para la Salud

Cuando estábamos en el colegio, gracias a nuestra clase de ciencias nos quedó muy claro lo
que era la clorofila: La sustancia que hace que las plantas sean verdes… pero hay algo que
va mucho más allá.

La clorofila absorbe la energía del sol y facilita la fotosíntesis en las plantas. Su capacidad
única para convertir la energía del sol a través de la fotosíntesis se utiliza para construir
hidratos de carbono a partir de agua y dióxido de carbono.

Del mismo modo, nadie discute los beneficios que le brindan a tu salud los vegetales verdes
con grandes cantidades de clorofila. Sin embargo, ¿alguna vez has oído hablar de las otras
características de la clorofila, que son muy similares a las células rojas de la sangre humana
o la hemoglobina? Aparte de lo que hemos oído hablar de la descripción científica de la
clorofila, hay un montón de cosas interesantes para saber y así lograr entender
completamente la relación biológica entre la clorofila y la hemoglobina.

La clorofila y la hemoglobina

Las moléculas de clorofila tienen similitud con la sangre humana. La única diferencia es
que el átomo central en humanos es de hierro, mientras que es de magnesio en las
moléculas centrales de las plantas.

La investigación innovadora se reveló ya en 1926 por Charles Schnabels cuando estudió

sobre hierbas de los cereales y de la posible relación del componente de feofitina en la
clorofila y la hemoglobina humana. Después de ese notable descubrimiento, hubo
investigaciones posteriores realizadas a una gran variedad de animales para confirmar esta
afirmación. Todas las investigaciones se juntaron para dar como resultado un hallazgo
concluyente: la clorofila está actuando como estimulante fisiológico de los glóbulos rojos
de la sangre en la médula ósea.
Fue en 1936 cuando el Dr. Arthur Patek informó los fascinantes resultados del estudio
hecho con quince pacientes que fueron diagnosticados de anemia. Se les pidió tomar
diferentes cantidades de alimentos verdes junto con el hierro. El nivel de hemoglobina en la
sangre y el número de células rojas de la sangre aumenta más rápido que con la toma de
hierro solo. Por lo tanto, sobre la base de los informes irrefutables, y desde el punto de vista
químico la clorofila es muy similar a la estructura química de los glóbulos rojos de la
sangre.

El color verde de la clorofila

¿Te has preguntado por qué el verde es el color asociado con la clorofila y no rojo o
naranja? El magnesio, que es la molécula central de la clorofila contiene formaciones en
forma de anillo que capta longitudes de onda rojas y azul y refleja las longitudes de onda
verdes, por lo tanto estas llegan de vuelta a nuestros ojos, dando esa sensación de color..

El magnesio proporciona un efecto altamente alcalinizantes y suministra oxígeno esencial

para las células y tejidos.

Los cambios en la estructura química de la clorofila

Por favor, tenga en cuenta que cuando las verduras verdes se cocinan, el magnesio se
elimina del centro de las moléculas y se reemplaza por un átomo de hidrógeno causando la
decoloración de las verduras a un tono gris oliva.

Tomemos por ejemplo, los estudios realizados con el brócoli. Los dos tercios del contenido
de clorofila del brócoli se perdieron después de 20 minutos de ebullición. Expertos en
cocina saludable del mundo sugieren técnicas para la preservación de las concentraciones
de clorofila presente en los vegetales verdes, como por ejemplo, cocinándolos al vapor por
tiempos cortos. Sin embargo, la mejor manera de comer estos vegetales es en forma cruda
para obtener los beneficios para la salud completos de la clorofila.

Beneficios de la clorofila

Hay varias razones por lo que los alimentos verdes son considerados extremadamente
beneficiosos para la sangre y esto es debido a la similitud en las estructuras de los dos
pigmentos de color, la hemoglobina roja y la clorofila verde.

A continuación le mostramos los beneficios para la salud que podemos obtener de la

clorofila:

1. La clorofila es la mejor ayuda para problemas gastrointestinales.

Refinada, baja en fibra y grasas de origen animal  contribuye a aliviar las principales
enfermedades que comienzan en el colon. Los problemas gastrointestinales pueden tratarse
mejor, mejorando la digestión y asimilación. Entre los nutrientes naturales que curan el
tracto intestinal están las verduras con alto contenido en clorofila.

2. La clorofila promueve la formación de la hemoglobina y los glóbulos rojos.

La hemoglobina es la sustancia que contiene hierro y que proporciona a las células rojas de
la sangre su pigmento rojo y transporta el oxígeno a los tejidos del cuerpo. De hecho, no
nos damos cuenta de que nuestra sangre se compone de 75 % de hemoglobina. Si el átomo
central de los glóbulos rojos es de hierro, ¿cómo la clorofila ayuda en la formación de las
células de la sangre? Es debido al magnesio, a medida que se digieren los alimentos verdes,
el magnesio ayuda en la reconstrucción y reposición de las células rojas de la sangre que se
encarga de impulsar nuestra energía.

3. La Clorofila trata mal aliento.

El mal aliento es causado por las bacterias orales que residen en la boca de una persona y
que excretan productos de mal olor. Los compuestos de azufre de los productos de desecho
por lo general se encuentran en la raíz de los problemas de ese mal aliento. Con la doble
acción de la clorofila actúa como desodorante que eliminan el mal olor y reduce el fuerte
olor de orina, heridas infectadas y heces.

4. Elimina las toxinas que causan cáncer.

Las investigaciones han encontrado que los genes dañados causados por las sustancias
cancerígenas pueden ser prevenidos por clorofilina, un derivado de la clorofila en la que se
elimina el magnesio y se sustituye con el cobre. Se reduce la unión de carcinógeno de los
alimentos como productos cárnicos cocidos que dañan el ADN y otros órganos del cuerpo,
particularmente en el hígado.

5. Beneficiosa en la asimilación de calcio y otros minerales pesados .

La clorofila es muy fácil de absorber y asimilar. La forma en que entra en el torrente

sanguíneo es rápida y con la menor cantidad de digestión, lo que ahorra más energía vital.
No sólo eso, si no que en los casos de cataratas en donde el paciente no puede ver bien, la
clorofila ayuda  a la asimilación de calcio.

6. La clorofila combate las infecciones.

Además de ser un antioxidante produce efectos antiinflamatorios, gracias a su contenido en

vitamina A, C y E que son responsables de reducir la inflamación. En relación a esto, se
informó de los aspectos curativos de la clorofila en 1940 por el Dr. Benjamín Gruskin. Con
estos experimentos in vitro, se mostró que la clorofila posee propiedades bactericidas. Aún
más, las propiedades antisépticas de la clorofila tiene la capacidad de eliminar los gérmenes
estimulando el sistema inmunitario.
Ingesta diaria recomendada de la clorofila

La clorofila se encuentra disponible en forma de comprimidos, líquidos y extractos en

polvo, infusiones y tinturas. Algunos profesionales de la nutrición recomiendan que 100 mg
de clorofila se deban tomar al menos de 2 a 3 veces al día. Es necesario aclarar que la
clorofila no se considera como un nutriente esencial. Sin embargo, las personas que carecen
de alimentos verdes en su dieta diaria carecen de suficiente clorofila y por lo tanto se
aconseja añadirla en su dieta.

Con tantos años de investigación, los beneficios para la salud que nos brindan los vegetales
con clorofila no se ponen en duda.  Esta ayuda a que los elementos nutritivos sean
absorbidos y ayudan a la sangre a generar la necesaria cantidad de hemoglobina. Si bien es
cierto que el verde es frecuente en la naturaleza y debería ser muy frecuente en nuestros
platos, en la práctica esto no sucede y mi recomendación es consumirlo en forma de
suplementos del tipo del Alga Chlorella, Espirulina o Extractos de Cebada.