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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN UNIVERSITARIA,


CIENCIA Y TECNOLOGÍA
UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL RÓMULO GALLEGOS
ÁREA DE CIENCIAS DE LA SALUD PROGRAMA DE MEDICINA
NÚCLEO – MONAGAS

ASPECTOS SOCIO-CULTURALES Y
ÉTICO DE LA RELACIÓN MÉDICO
PACIENTE

 PROFESORA :  BACHILLER:

DRA. MARIA HURTADO C. I: 27.917.414 LORANT, CAMILA

SECCIÓN #02

ASIGNATURA: MEDICINA
GENERAL I

SEPTIEMBRE DE 2020
ASPECTOS SOCIO-CULTURALES Y ÉTICO DE LA RELACIÓN

MÉDICO PACIENTE.

ASPECTOS SOCIO-CULTURALES DE LA RELACIÓN MÉDICO - PACIENTE.

La relación médico-paciente es una modalidad de las múltiples relaciones


interpersonales que realiza el hombre. Esta permite al enfermo satisfacer su
deseo y necesidad de salud y al médico, cumplir con una de sus funciones
sociales más importantes.

Los aspectos socio - culturales están presentes en todo problema


relacionado con la salud del hombre y de la sociedad, según el ámbito o caso
concreto, en cuanto a la relación médico – paciente además del bienestar del
paciente, puede predominar lo social o lo cultural.

Estos aspectos resultan imprescindibles para la interpretación correcta de


las causas y mecanismos de producción de las enfermedades del hombre.

Constituyen un elemento de orientación metodológica fundamental para


alcanzar el propósito de preservar y mejorar la salud de la sociedad.

La ideología influye en el bienestar y proceder tanto del médico como del


paciente. El ambiente social no es solo un “medio” en el que se establece la
relación entre el “agente” y el “huésped”, es también un generador de causas que
pueden afectar, por su carácter específico, a un individuo o a un grupo de
individuos.

La interpretación psicológica de las variables sociales del ambiente pueden


contribuir a la modificación del potencial agresivo de la relación médico –
paciente, aunque todas las enfermedades tienen una determinación multicausal,
las variables del ambiente social pueden ser más relevantes en el origen y
evolución de algunas enfermedades que en otras.
La cultura de una población o de un paciente tiene una influencia marcada
sobre la relación médico – paciente los procesos de salud-enfermedad y sobre el
nivel de salud del individuo y de las poblaciones.

La cultura influye en la salud de las siguientes maneras:

o Por la forma como el paciente entiende lo que es la salud y enfermedad, lo


que significa estar sano o estar enfermo. El concepto de salud y enfermedad
puede ser distinto en cada cultura.
o Las diferentes culturas atribuyen diferentes causas o factores para la
aparición de las enfermedades.
o Las diferentes culturas tienen diferentes maneras de vivir las enfermedades
(vivencia de la enfermedad).
o cada cultura tiene diferentes estrategias y recursos para enfrentarse y tratar
las enfermedades (tratamiento).

Existen seis puntos clave para comprender esta relación desde el ámbito
sociocultural, como lo son:

1. Los prejuicios del profesional médico


2. Las normas culturales y religiosas del paciente
3. Los problemas de comprensión del idioma del paciente
4. Las diferencias culturales en el significado que da el paciente a las
enfermedades
5. Las diferencias culturales a la hora de enfrentarse al conocimiento del
diagnóstico, del pronóstico y de las opciones de tratamiento
6. La repercusión de los cambios sociales bruscos en las sociedades : el shock
cultural
ASPECTOS ÉTICO DE LA RELACIÓN MÉDICO - PACIENTE

La bioética trata acerca de la ética médica, pero no se limita a ella. La ética


médica, en su sentido tradicional, trata de los problemas relacionados con valores
que surgen de la relación entre el médico y el paciente. La bioética constituye un
concepto más amplio, expresado en cuatro aspectos importantes:

1. Comprende los problemas relacionados con valores que surgen en todas las
profesiones de la salud, incluso en las profesiones afines y las vinculadas
con la salud mental.
2. Se aplica a las investigaciones biomédicas y sobre el comportamiento,
independientemente de que influyan o no de forma directa en la terapéutica.
3. Aborda una gama de cuestiones sociales
4. Relativas a la vida de los animas y las plantas.

No se puede decir que haya existido una verdadera ética médica si por esta
se entiende la moral autonomía de los médicos y los pacientes; por el contrario, a
lo largo de la historia existió otra cosa, en principio heterónoma que se podría
denominar “ética de la medicina”. Esto explica porque los médicos no han sido
competentes en cuestiones de “ética”, quedando reducidos su actividad al ámbito
de la “ascética” (como formar al buen médico o al médico virtuoso) y de “etiqueta”.

El panorama actual es muy distinto, la relación médica más simple se ha


convertido en autónoma. Los factores de la relación médico-paciente pueden
reducirse a tres: el médico, el enfermo y la sociedad. Cada uno de ellos tiene una
significación moral específica. El enfermo actúa guiado por el por el principio moral
de la autonomía; el médico, por el de beneficencia, y la sociedad, por el de justicia.
Naturalmente, la familia se rige, en relación con el paciente, por el principio de la
beneficencia; en tanto que la dirección del hospital y las leyes tendrán que mirar,
sobre todo, por salvaguardar el principio de la justicia. Siempre es necesario tener
presente estos tres principios, ponderando su peso en cada situación concreta.
En 1969, cuando las organizaciones de consumidores entraron en contacto
con la Asociación Americana de Hospitales, a fin de que su nuevo reglamento
recogiera las opiniones y deseos de los pacientes de su red hospitalaria,
redactados en forma de catálogos de derechos, surgió el primer código de
derecho de los enfermos, cuya aparición coincidió, y no por azar, con la puesta en
práctica de ciertas tecnologías sanitarias.

Ante tales dilemas, los pacientes ejercieron la reivindicación de su derecho a


conocer lo que iba a hacerse con ellos y a decidir si querían o no someterse a
determinadas pruebas diagnósticas y/o a determinado tratamiento.

Los últimos años parecen haber demostrado que la autonomía de los


pacientes no es el remedio de todos los problemas de la relación médico –
paciente y que el autonomismo conduce a paradojas tan insufribles como el propio
paternalismo. Frente a ambos extremos, cada vez se ve con mayor claridad que el
médico debe aportar a esta relación una beneficencia pura, exenta de cualquier
tipo de paternalismo; el paciente, por su parte, debe abandonar su anterior actitud
de obediencia ciega y poner en juego los recursos de la autonomía. Se sustituye
el binomio por beneficencia – autonomía, con lo que la relación médico - paciente
gana en madurez.

La atención del médico ha de comenzar de manera verbal, bajo forma de


información al paciente sobre lo que sucede y debe hacérsele .durante muchos
siglos la medicina ha sido silenciosa; en los últimos años, el medico ha empezado
a ser consciente de que el primer deber de la beneficencia es la información.
Relacionado con ello está el derecho del enfermo a la información, de ahí que el
mismo sea el nuevo rostro de la relación médico paciente.

Este cambio en la visión de la relación puede traer problemas o conflictos,


por lo que se hace necesaria la adecuada formación del personal sanitario en tales
cuestiones y construir, en los hospitales y diferentes áreas de salud, comités que
intenten mediar en los posibles conflictos éticos que genera la nueva relación
médico – paciente.

La relación entre el médico paciente se ha modificado y se requiere realizar


una reflexión crítica en torno a los procesos de salud y enfermedad en los diversos
escenarios en que éstos se producen para desarrollar una nueva cultura sanitaria.
En este contexto, la Bioética y sus principios favorece una manera diferente
de entender la relación entre el médico y el paciente, en donde se privilegia el
derecho que tiene el paciente como persona con autonomía en la toma de
decisiones sobre su salud y se reconoce una responsabilidad compartida que
considera el impacto de factores biológicos, sociales, culturales, económicos,
psicológicos y éticos sobre la atención médica y el cuidado de la salud. Se hace
necesario el aporte de la Filosofía, la Bioética y Ética Médica para investigar y
estudiar la relación médico paciente en sus diferentes dimensiones: ética, médica,
social y moral; fortalecer las bases éticas y legales de los médicos, lograr que
sean capaces de analizar y hacer propuestas que lleven a la solución de los
conflictos y dilemas que se generan con el desarrollo, la innovación del
conocimiento y la aplicación de la tecnología en los seres humanos, y en todos
los seres vivos.

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