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Contenido
3 Presentación
M Dinorah Rivera
Escogida
y amada
Revista especial para la mujer
4 Eres escogida
Mónica Díaz
8 Eres amada
M Dinorah Rivera
Inter-American Division Publishing Association®
2905 NW 87 Ave. Doral, Florida 33172, EE. UU.
tel. 305 599 0037
¡Reír es vivir! mail@iadpa.org — www.iadpa.org
10 Julie Guirgis
Directora de Ministerios de la Mujer
M Dinorah Rivera
Asistente
12 Detecta y actúa Cory Villarreal
Amanda y Germán Rodríguez
Edición del texto
Mónica Díaz
3 preguntas sobre Diseño
15 el cáncer de mama Kathy Hernández de Polanco
Elías Peiró
Copyright © 2019 Inter-American Division Publishing Association®
8 maneras de ayudar cuando 1ª edición: agosto 2019
16 un ser amado tiene cáncer Procedencia de las imágenes: © iStock, © Shutterstock
Victor M. Parachin Está prohibida y penada por las leyes internacionales de protección de la pro-
piedad intelectual la traducción y la reproducción total o parcial de esta obra
(texto, imágenes, diseño y diagramación), su tratamiento informático y su trans-
misión, ya sea electrónica, mecánica, por fotocopia, en audio o por cualquier
Hábitos para prevenir otro medio, sin el permiso previo y por escrito de los editores.
19 En esta obra las citas bíblicas han sido tomadas de la versión Dios Habla
el cáncer Hoy: DHH © SBU. También se ha usado la Reina-Valera, revisión de 1995:
RV95 © Sociedades Bíblicas Unidas (SBU), la revisión de 1960: RV60 ©
SBU, la Nueva Versión Internacional: NVI © Bíblica, la Nueva Traducción
Viviente: NTV © Tyndale House Foundation, la versión de Torres Amat
(Petisco): TA, la Biblia de las Américas: BA © The Lockman Foundation, la
Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy: NBLH © The Lockman Foundation
20 ¿Qué hacer? Aplica las cuatro erres y la Traducción en Lenguaje Actual: TLA © SBU. En todos los casos se ha
R. Magali Dunn unificado la ortografía y el uso de los nombres propios de acuerdo con la
RV95 para una más fácil identificación.
En las citas bíblicas, salvo indicación en contra, todos los destacados (cursivas,
negritas) siempre son del autor o el editor.
«Sujetas a sus esposos». Las citas de las obras de Elena G. de White se toman de las ediciones actuali-
21 ¿Es la Biblia la enemiga de la igualdad zadas caracterizadas por sus tapas color marrón, o, en su defecto, de las edi-
ciones tradicionales de la Biblioteca del Hogar Cristiano de tapas color grana.
entre el hombre y la mujer? Melody Tan Dada la diversidad actual de ediciones de muchos de los títulos, las citas se
referencian no solo con la página, sino además con el capítulo, o la sección, o
la página más el epígrafe en el caso de Consejos sobre alimentación.
Impreso por
22 Sí, hay esperanza para el cáncer Panamericana Formas e Impresos, S.A.
M Dinorah Rivera Impreso en Colombia
Printed in Colombia
Antes
de comenzar
M DINORAH RIVERA
Ser mujer hoy no es lo mismo que era serlo en el pasado. Un cambio cultural e
histórico se ha venido produciendo para nosotras en gran parte del mundo, y con
ese cambio vienen de la mano adaptaciones y retos que debemos hacer y afrontar.
Y qué bueno es que, para lograrlo, contemos con revistas variadas, interesantes y con
rigor como la que tienes en tus manos. Por eso, los artículos que leerás en estas
páginas han sido escritos por gente empapada del mundo femenino, como psicó-
logas, consejeras familiares, abogados, especialistas en violencia de género y autoras
de libros para mujeres.
Es tanto lo que se podría escribir en relación con el mundo de la mujer, pero dada
la naturaleza de una revista de 24 páginas, hemos elegido los dos temas que nos parecen
más significativos y de mayor interés hoy por hoy: la violencia de género y el cáncer de
mama. Muchas veces, las mujeres que padecen estas situaciones difíciles de la vida, se
ven rodeadas de un entorno de silencio, vergüenza, lobreguez y soledad que solo pue-
de romperse a través de un medio silencioso pero altamente eficaz: la página impresa.
A través de esta publicación deseamos:
3 e nseñarte las claves para detectar la violencia de género y los primeros pasos
que hay que dar para combatirla;
3 p roveerte ideas prácticas para superar la violencia de género, si la estás sufriendo
en tu hogar, o para que puedas ayudar a esas personas cercanas que la sufren;
3 r esponder de forma directa y sencilla las preguntas básicas que te haces sobre
el cáncer de mama, y darte las claves para superar esa enfermedad o para ayu-
darte a comprender a un ser querido que la está padeciendo;
3 e nseñarte los hábitos de vida científicamente probados que ayudan a prevenir
el cáncer;
3 r ecordarte la importancia de la salud mental, y particularmente del optimismo
vital y de la risa;
3 despejar dudas sobre la posición de la Biblia respecto a la «sujeción» de la esposa
al esposo, para demostrar que las Escrituras no son enemigas de la igualdad entre
el hombre y la mujer, sino todo lo contrario;
3 yque queden para siempre grabados en tu memoria dos conceptos vitales:
Dios te ama y te ha escogido para un propósito.
Es mi deseo, en definitiva, motivarte a vivir una vida plena de propósito y sig-
nificado; darte la certeza de que sí, hay esperanza, tanto para el cáncer como para
romper ciertos círculos viciosos de violencia y sometimiento; y a descubrir la im-
portancia de ese regalo diario que recibimos de Dios y que se llama vida.
e
MÓNICA DÍAZ
3
ee diariamente las Sagradas Escrituras, pues en
L
ellas encontrarás las verdaderas virtudes cristianas
y te sentirás motivada a llevarlas a la práctica.
esarrolla hábitos positivos para tu salud física,
3 D
como una buena alimentación, ejercicio y descanso.
uida tus emociones, desarrollando un nivel de cons-
C
ciencia, y de conciencia, sobre tus actitudes que te
muchos otros propósitos —también valiosos—, pero como
evite caer en extremos y te permita ser equilibrada.
persona única y original que eres, solo a través de ti podrá
ejercer cierta influencia en el mundo. ¿Aceptas el reto? 3 vita a esas personas que son física, mental o espiri-
E
tualmente tóxicas, pues la relación con ellas te invita-
Por supuesto, Dios no te ha elegido porque seas perfec-
rá a conductas que rebajen tus valores, te impedirá
ta, ni santa, ni goces de una salud plena o tengas un entor-
seguir el camino que te has trazado y te obstaculizará
no ideal. Es a través de personas de carne y hueso —con
cumplir el propósito para el que has sido llamada.
dificultades, problemas y defectos— como Dios llega a per-
sonas de carne y hueso. Es a través de ti, como Dios llega a 3 otencia las relaciones personales con quienes bus-
P
los tuyos, si así se lo permites. Por eso, te ha escogido. can a Dios y desean tu bien.
Haciendo conscientemente los esfuerzos que estén
Escogida para desarrollar en tu mano para llevar a la práctica estas directrices,
las virtudes que Dios te ha dado verás cómo fluirán de ti, cada vez más y más frecuente-
No importa cuál sea nuestra posición en la vida, ni mente, palabras y obras que dejan una huella especial.
la religión que profesemos, ni la cultura de donde pro- Para dejar esa huella especial que solo tú puedes dejar en
vengamos o ideología que tengamos, nuestra influencia el mundo, Dios te ha escogido.
viene determinada por nuestra manera de comportar-
nos y de relacionarnos. Si perdemos de vista al Creador, Escogida para cumplir su voluntad
nuestras palabras y obras serán de tal naturaleza que «Hágase tu voluntad en la tierra, así como se hace en
ejercerán una influencia negativa en nuestro entorno; el cielo», repetimos en el Padrenuestro. Para que se haga
en cambio, si dependemos de él cada día, permitiendo esa voluntad divina en nuestro planeta, algunos de los
que cumpla en nosotras su propósito, nuestra conducta seres que lo habitamos debemos hacernos eco de ella y
será de tal naturaleza que generará un entorno positivo. enseñarla a quienes nos rodean.
¿Cómo se logra esa conducta que resulte en una in- Jesús dejó claro en su oración modelo que orar conlle-
fluencia para bien? La primera parte ya la hemos dicho: va mucho más que llevar a Dios una lista de peticiones sin
manteniendo la vista fija en Dios; la segunda tiene que ver fin: Se trata de pasar tiempo con él para conocer su volun-
con el desarrollo del carácter. Hemos de desarrollar, con la tad y, entonces, poder darla a conocer a través de un cora-
ayuda de Dios, ese carácter que dé un buen testimonio de zón lleno de compasión, sensibilidad y agradecimiento
él. Para lograrlo, he aquí algunos requisitos indispensables: por lo que hace por ti, a pesar de lo malo que pueda estar
de género
der de transformar a las personas y reconstruir sus vidas.
A continuación, te sugerimos tres ideas prácticas:
1. Inicia el día con una conversación a solas con el Creador.
Cuéntale tu historia y tus frustraciones. Repite este paso
hasta que estés lista para contar tu historia a otros. Esto per-
mite que vayas tomando el control de tu vida hasta adqui-
rir la confianza y la seguridad de compartir tu experiencia
sin amargura, resentimiento y enojo. «Alejen de ustedes la
amargura, las pasiones, los enojos, los gritos, los insultos y
toda clase de maldad» (Efesios 4: 31).
2. E
stablece relaciones positivas sólidas. Un estudio reciente, presentado en la conferencia anual de la British Psycho-
logical Society’s Psychology of Women Section’s, concluyó que las relaciones sólidas y saludables con otros miem-
bros de la familia pueden aumentar la autoestima y reducir la ansiedad en algunas víctimas de violencia doméstica.
Alejarse mental y emocionalmente de una relación violenta es un proceso, y la familia puede ser de gran utilidad.
Gran parte de las mujeres salen y regresan a sus hogares, en repetidas ocasiones antes de activar los mecanismos de
defensa de la negación, callar, ignorar o darse cuenta de su situación. Por eso, establecer un vínculo familiar psico-
afectivo cristiano constituye un apoyo fundamental que le permitirá ir reconstruyendo la memoria traumática de
manera sana y segura. La Biblia describe una relación similar entre Job y sus familiares: «Entonces fueron a visitarlo
todos sus hermanos, hermanas y amigos, y todos sus antiguos conocidos, y en su compañía celebraron un banque-
te en su casa. Le ofrecieron sus condolencias y lo consolaron» (Job 42: ll).
3. A
póyate en esa gran red social que constituye la iglesia. Está bien documentado que la mujer víctima de
violencia de género cae en un estado de parálisis progresiva, que degenera en el síndrome de indefensión
aprendida, con su consecuente pérdida del control, baja respuesta conductual e identificación con el agresor,
entre otras consecuencias. El Dr. Boris Cyrulnik habla de la resiliencia neuronal que se adquiere cuando el
cerebro está en constante interacción con un ambiente social afectivo, sano y nutritivo. La resiliencia permite
la recuperación del estado de anulación cerebral que puede producir la violencia de género. La iglesia se cons-
tituye en la red social por excelencia para recibir apoyo, lo cual permite transformar la agonía mental generada
por el trauma y el sufrimiento en un cerebro con todas sus actividades motoras en pleno funcionamiento. «Así
que entonces, hagamos bien a todos según tengamos oportunidad, y especialmente a los de la familia de la fe»
(Gálatas 6: 10, RV95).
M DINORAH RIVERA
12
AMANDA Y GERMÁN RODRÍGUEZ
1. Detecta
Los malos tratos son algo más que una relación infeliz o poco
saludable; es un patrón de conducta seguido por una persona
para afirmar su poder o asegurar su control sobre otra. Aunque
comúnmente se describen como abusos físicos o sexuales, los
patrones abusivos también incluyen lo mental, emocional, fi-
nanciero e incluso espiritual. Las víctimas a menudo sufren en
silencio, sin saber cómo ni dónde buscar ayuda. Por desgracia,
muchas de las que la piden solo reciben consejos que perpetúan
los malos tratos o las traumatizan doblemente.
https://www.scielosp.org/article/rpsp/2002.v12n2/141-143/
VICTOR M. PARACHIN
Ante una información como esa, la mujer necesita el
apoyo de la familia, los amigos y, lo más importante, de
su esposo o su novio. La Biblia observa atinadamente:
«Mejor dos que uno, pues obtienen mayor recompen-
sa en sus fatigas» (Eclesiastés 4: 9, LPH).
He aquí ocho maneras mediante las cuales se puede
ayudar a una mujer que padece cáncer de mama.
1 Mantente a su lado
Es de destacar
Tomado de Jorge D. Pamplona Roger y Ester Malaxetexbarria,
250 recetas que previenen y curan que al menos
(Doral/México: IADPA/GEMA, 2015), p. 263.
tres de estos
hábitos
se refieren
a los hábitos
alimentarios.
Quizá estás experimentando violencia y eres de las que desean que termine esa pesadilla
en la que te encuentras hundida; sueñas con paz, tranquilidad y bienestar, con un cam-
bio en tu vida, y, sin embargo, no sabes cómo salir de esa situación que te agobia. Si estás
viviendo sujeta al maltrato, te recomiendo que pongas en práctica las cuatro erres:
1. Reconoce que necesitas ayuda. Reconoce y acepta que estás atrapada en un círcu-
lo de violencia. Negarlo te impedirá encontrar la ayuda que necesitas. Cuando acep-
tes que no es «normal» la manera en la que te tratan, ya sea con violencia física,
acoso, hostigamiento o intimidaciones verbales, entonces podrás comenzar el camino
hacia la liberación y la recuperación.
2. Rompe el silencio. Por lo general, cuando una persona es abusada o maltratada, el
temor se apodera de ella. La angustia, la desesperación, la incertidumbre, la culpa y
la vergüenza no la dejan vivir en paz. Si quieres derrotar tu miedo, debes romper el
silencio y, en primer lugar, hablar con Dios. Ora como el salmista David: «Mírame,
Señor, y ten compasión de mí, porque estoy solo y afligido. Mi corazón se aflige más
y más; líbrame de mis angustias» (Salmo 25: 16-17). En segundo lugar, habla con
psicólogos, psiquiatras, consejeros, pastores o guías espirituales, familiares o amigos
de confianza; ellos podrán ayudarte a superar esa dolorosa situación. En tercer lugar,
recuerda que existen leyes para protegerte y que garantizan tu bienestar. No dudes en
acudir a los centros de denuncia, a la policía, al hospital o llamar a algún número de
ayuda al ciudadano. ¡Rompe el silencio! ¡Háblalo!
3. Recuerda que naciste para ser feliz. Pase lo que pase en tu vida, puedes estar
segura y confiada de que Dios desea tu bienestar y felicidad. La Biblia declara: «Yo
sé los planes que tengo para ustedes, planes para su bienestar y no para su mal, a
fin de darles un futuro lleno de esperanza. Yo, el Señor, lo afirmo» (Jeremías 29:
11). Te vendría muy bien aferrarte a estas promesas bíblicas: «A todo puedo hacer-
le frente, gracias a Cristo que me fortalece» (Filipenses 4: 13). «Él sana a los que
tienen roto el corazón, y les venda las heridas» (Salmo 147: 3).
4. Responde al reto de vivir una vida con propósito. Los momentos difíciles cons-
tituyen una oportunidad para que Dios manifieste su amor y su poder. «Sabemos
que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, a los cuales él ha
llamado de acuerdo a su propósito» (Romanos 8: 28). Dentro de sus planes maravi-
llosos, «él nos consuela en todos nuestros sufrimientos, para que nosotros podamos
consolar también a los que sufren, dándoles el mismo consuelo que él nos ha dado
a nosotros» (2 Corintios 1: 4).
Dios quiere y puede ayudarte. ¡Ánimo! No estás sola. Dios es tu mejor amigo.
ESPOSOS»
ONU a favor de la igualdad de género)», escribe Johanna Harris Tyler
para The Drum, un programa de análisis de la actualidad.
La sujeción bíblica de una esposa a un esposo no tiene que ver con
ceder poder o anular la igualdad entre ambos. Me someto a mi marido
porque se ha ganado mi respeto como alguien que es suficientemente ¿Es la Biblia la enemiga
equilibrado para poder tomar las mejores decisiones para la familia, sufi-
cientemente humilde para solicitar mi opinión y valorarla debidamente, de la igualdad
y suficientemente comprensivo como para resolver nuestros desacuerdos entre el hombre y la mujer?
sin que me presione ni intente manipularme. Pero sobre todo me someto
a él porque él se someterá de buena gana a mí si alguna vez una situa-
ción lo requiere. Somos compañeros en nuestra relación, creados am-
bos a imagen de Dios (ver Génesis 1: 27).
De hecho, al centrarse tanto en Efesios 5: 22, que pide a las esposas
que se sujeten a sus maridos, muchos han pasado por alto el versículo
precedente, donde la instrucción general es: «Estén sujetos los unos a Bajo ningún concepto exige
los otros, por reverencia a Cristo» (versículo 21). la Biblia permanecer
«El matrimonio bíblico tiene que ver con someterse mutuamente el en una relación de malos tratos,
uno al otro e individualmente y juntos, a Cristo, de manera directa y no sean físicos, emocionales
a través de ningún canal o agente terrenal y corruptible. El respeto mu- o espirituales
tuo, bajo la común sumisión a Dios, de este tipo de matrimonio no
concede ningún permiso basado en el sexo para que domine la esposa
o el esposo», escribe Tyler.
M DINORAH RIVERA
Cuando la «C» llega a nuestra vida —y no me estoy refiriendo
a la vitamina C—, lo último que se nos ocurre es darle gracias a
Dios o alabarlo por ello. Al contrario: Tras el choque emocio-
nal inicial, se suceden una serie de preguntas dignas de una
fiesta de victimismo, suficiencia propia, ego herido y desáni-
mo. Preguntas como: «¿Por qué a mí?» o «Señor, ¿por qué me
haces esto?». Seguidas de las consabidas frases: «Pero si yo
soy cristiana» o «Con lo mucho que me cuido»… Se nos ol-
vida que, mientras estemos en este mundo, sufriremos las con-
secuencias del pecado que lo gobierna. Todo es imperfecto aquí
abajo y, como tal, a personas imperfectas nos suceden cosas
que causan dolor. Nadie se libra.