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http://www.lafm.com.co/audios/ivan-dario-moreno-piraquive-y-
153593#ixzz2r2P8bCDi
Este marte, como lo reveló la emisora La FM, se conoció otro lío
que envuelve a la familia Moreno Piraquive, fundadores del
partido Mira y dueños de la Iglesia Ministerial de Dios
Jesucristo Internacional. Se trata de una denuncia que interpuso
Iván Darío Moreno Piraquive contra su madre la pastora María
luisa Piraquive por la muerte de su padre.
La denuncia, conocida por la emisora, se interpuso el 3 de marzo
de 2006. El joven -quien fue expulsado por su familia de la
iglesia tras revelar que tenía preferencias homosexuales- solicitó
a la Fiscalía que exhumara el cuerpo de su padre Luis Eduardo
Moreno, ya que en el momento de su muerte la pastora
Piraquive no permitió que se le realizara necropsia alguna.
El argumento de María Luisa Piraquive era que su esposo lo iba
a resucitar el Espíritu Santo. Moreno Piraquive también pidió al
CTI que esclareciera las verdaderas causas de la muerte de su
padre.
Pero los señalamientos de Iván Moreno Piraquive contra su
familia no quedaron ahí. En la misma denuncia también solicitó
que se realizara una prueba de ADN para establecer que su
hermano menor, Carlos Eduardo Moreno, no era hijo de sus
padres, sino de su hermana mayor, la senadora Alexandra
Moreno Piraquive.
Asimismo, se logró establecer que en la investigación que
actualmente adelanta la Fiscalía contra María luisa Piraquive
por enriquecimiento ilícito y lavado de activos se tienen dos
hipótesis. La primera es que varios de los dineros que ingresan a
las iglesias de los Moreno Piraquive, especialmente la a Iglesia
Ministerial de Dios Jesucristo Internacional, vendrían de la
banda criminal Los Urabeños.
La segunda es que a través de los registros financieros de sus
iglesias, María Luisa Piraquive, al parecer, habría estado
lavando dineros de narcotraficantes a través de propiedades en
Estados Unidos y Argentina. Por esta razón, la Fiscalía se
reunirá con autoridades de ambos países para esclarecer los
hechos.
Esta es la denuncia conocida por La FM en la que se pide
investigar la muerte de Luis Eduardo Moreno:
“Yo, Iván Dario Moreno Piraquive, mayor, vecino de Bogotá,
identificado con la cédula 79'599.902 de Bogotá, ante usted con
el debido respeto me permito denunciar una posible falsedad en
documento público y otros.
1. El año pasado me enteré que mi madre, la señora María Luisa
Piraquive de Moreno, con cédula 41'473.168 de Bogotá, había
registrado a Carlos Eduardo Moreno Piraquive como su hijo en
el registro civil, teniendo en cuenta que él es realmente hijo de
mi hermana Alexandra Moreno Piraquive con cédula de
ciudadanía número 39'548.433 de Bogotá.
Hasta ese entonces, solo se sabía que mi hermana Alexandra
había tenido a Carlos Eduardo (nombre dado en Colombia) en
Panamá hacia el año de 1990 y a causa del testimonio de la
Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional (de la cual
la señora María Luisa es dueña, fundadora y representante
legal) a Carlos Eduardo le dieron los apellidos de Alexandra
Moreno Piraquive.
Sin embargo, nunca me imaginé que lo habían registrado en
Colombia como hijo de mi madre, la señora María Luisa
Piraquive de Moreno, y además, me enteré que los testigos
fueron las señoras Hermencia Piraquive Corredor y Beatriz
Piraquive Corredor. Según el código penal, la falsedad de un
documento como el registro civil y una declaración juramentada
falsa por parte de los testigos constituye un delito. Además, este
hecho está interfiriendo en mi patrimonio, pues en la liquidación
de la herencia de mi padre, que se encuentra en proceso, Carlos
Eduardo aparece como un hermano más."
2. En el curso del proceso de la liquidación de mi herencia, tuve
que adjuntar el acta de defunción de mi padre, el señor Luis
Eduardo Moreno Moreno, y con sorpresa me di cuenta que el
certificado fue expedido por un médico que yo nunca conocí
como médico de la familia, el cual decía que la causa del deceso
había sido por una enfermedad coronaria que supuestamente mi
padre sufría.
Como hijo y testigo presencial del hecho puedo decir que mi
padre no sufría de alguna enfermedad coronaria, pero no
entendí por qué no se le practicó una autopsia para establecer la
causa de su fallecimiento. Hace poco me entere por mi primo,
Óscar Jair Bedoya Piraquive, que a mi padre no le fue
practicada la autopsia por cuanto la señora María Luisa
Piraquive había argumentado en ese momento que el Espíritu
Santo lo iba a resucitar, pero que era imprescindible no dejarlo
llevar al CTI, porque si la realizaban la autopsia, entonces no
podría resucitar (argumentos religiosos).
Entonces ella le ordenó a Óscar Jair ir donde una familia amiga
y pedirles el favor de que si tenían un médico amigo para que le
firmara el certificado de defunción argumentando que era el
médico de cabecera del difunto, y que sufría de una enfermedad
coronaria. Todo esto por la negativa del dueño de la clínica
Rojas de expedir un certificado por cuanto del señor Luis
Moreno había llegado a este lugar muerto.
Teniendo en cuenta las acciones de la señora María Luisa
Piraquive, presumiblemente al margen de la ley, quisiera que
estos hechos sean investigados por la Fiscalía y/o las autoridades
competentes y que sea exhumado el cuerpo de mi padre y le sean
practicados los exámenes pertinentes para establecer la causa de
su deceso y además, que sea realizado un examen de ADN para
demostrar que Carlos Eduardo Moreno Piraquive no es mi
hermano, ni hijo de María Luisa Piraquive y de Luis Moreno,
sino hijo de Alexandra Moreno Piraquive, y que sea solicitado
por las vías jurídicas, una copia autentica del registro de Carlos
Eduardo de la ciudad de Panamá, todo esto con el fin de
esclarecer los hechos anteriormente descritos.
Aporto copia del registro civil de Carlos Eduardo Moreno
Piraquive, copia del registro de defunción de mi padre Luis
Eduardo Moreno y copia de la representación legal de la Iglesia
de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional.”
F. B.: La habré visto una vez, pero (María Luisa) no sabía bien
quién era yo. Le prohibía muchas cosas (a Perla). Nuestra
relación fue más que todo de novios a escondidas. Ella descarta a
las personas si no hacen parte de la iglesia.
Semana.com: ¿Cuándo?
F. B.: Perla me dice que quiere verme, pero que tiene que ser a
escondidas de la mamá o si no le quita el apoyo (económico) y los
deja en la calle, y que eso con el niño sería terrible. Yo le dije
que la entendía, porque la quería mucho, entonces empezamos a
vernos a escondidas. Duramos así los siete años de relación que
tuvimos.
F. B.: Claro.
F. B.: Todo iba bien hasta que María Luisa se dio cuenta, otra
vez, de que estábamos juntos y la empezó a amenazar con
quitarle todo. Luego me amenazó directamente a mí. Mandó a
una señora amiga de ella y a unos señores a decirme que me
tenía que ir de EE. UU., que tenía que alejarme del niño, que el
niño no era mío y que me olvidara de él y de Perla.
Semana.com: ¿María Luisa cómo supo que estaban juntos?
F. B.: Perla me dijo que María Luisa una vez soñó conmigo
desnudo y que eso era terrible. Para ella, soñar con una persona
desnuda significa, prácticamente, que es el diablo. Ahí empezó la
guerra más fuerte contra mí.
Semana.com: ¿Y ahora? ¿Qué quisiera decirle a María Luisa?
F. B.: Darles como una profecía a las personas que llegan nuevas
y se sientan en la parte de adelante. Uno les dice para qué los
llevó el Señor allá, cuál es su finalidad, por qué fueron escogidos
por Dios y que son personas especiales. Pero todo es una farsa y
una mentira porque yo mismo me inventaba lo que decía.
Supuestamente los mensajes me los estaba mandando Dios, pero
todo es un engaño para hacer más creyentes y más plata. Esa es
la verdad. Pero la gente se deja influir por eso. Ese es el gancho
de la iglesia: por medio de la profecía, engañar a las personas
diciendo que Dios habla a través de nosotros -los profetas-, pero
es una mentira porque es lo que piensa el supuesto profeta en ese
momento.
Bernal cuenta que, una vez en EE. UU., Perla comenzó un grupo
en el que daba misas y predicaba que “Dios no castiga y permite
disfrutar la vida”. En un audio conocido por Semana.com, se
oye a Mónica, una amiga cercana a la pareja, describir por vía
telefónica lo que hace Perla en EE. UU. y la reacción de María
Luisa.
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20 enero 2014
“María Luisa Piraquive me arrebató a mi hijo”
ENTREVISTAFélix Bernal y Perla Moreno Piraquive tuvieron
un bebé. ¿Qué pasó con el niño? Esta es la dramática historia.
“María Luisa Piraquive me arrebató a mi hijo”. Foto:
www.hermanamarialuisa.com
Foto: www.hermanamarialuisa.com
Una nueva y sorprendente revelación toca a la Iglesia de Dios
Ministerial de Jesucristo Internacional. En concreto, a María
Luisa Piraquive, quien mantiene un férreo control de esta
comunidad religiosa con importante influencia política en
Colombia a través del partido MIRA.
F. B.: La habré visto una vez, pero (María Luisa) no sabía bien
quién era yo. Le prohibía muchas cosas (a Perla). Nuestra
relación fue más que todo de novios a escondidas. Ella descarta a
las personas si no hacen parte de la iglesia.
Semana.com: ¿Cuándo?
F. B.: Perla me dice que quiere verme, pero que tiene que ser a
escondidas de la mamá o si no le quita el apoyo (económico) y los
deja en la calle, y que eso con el niño sería terrible. Yo le dije
que la entendía, porque la quería mucho, entonces empezamos a
vernos a escondidas. Duramos así los siete años de relación que
tuvimos.
F. B.: Claro.
F. B.: Todo iba bien hasta que María Luisa se dio cuenta, otra
vez, de que estábamos juntos y la empezó a amenazar con
quitarle todo. Luego me amenazó directamente a mí. Mandó a
una señora amiga de ella y a unos señores a decirme que me
tenía que ir de EE. UU., que tenía que alejarme del niño, que el
niño no era mío y que me olvidara de él y de Perla.
F. B.: Perla me dijo que María Luisa una vez soñó conmigo
desnudo y que eso era terrible. Para ella, soñar con una persona
desnuda significa, prácticamente, que es el diablo. Ahí empezó la
guerra más fuerte contra mí.
Semana.com: ¿Y ahora? ¿Qué quisiera decirle a María Luisa?
F. B.: Darles como una profecía a las personas que llegan nuevas
y se sientan en la parte de adelante. Uno les dice para qué los
llevó el Señor allá, cuál es su finalidad, por qué fueron escogidos
por Dios y que son personas especiales. Pero todo es una farsa y
una mentira porque yo mismo me inventaba lo que decía.
Supuestamente los mensajes me los estaba mandando Dios, pero
todo es un engaño para hacer más creyentes y más plata. Esa es
la verdad. Pero la gente se deja influir por eso. Ese es el gancho
de la iglesia: por medio de la profecía, engañar a las personas
diciendo que Dios habla a través de nosotros -los profetas-, pero
es una mentira porque es lo que piensa el supuesto profeta en ese
momento.
Bernal cuenta que, una vez en EE. UU., Perla comenzó un grupo
en el que daba misas y predicaba que “Dios no castiga y permite
disfrutar la vida”. En un audio conocido por Semana.com, se
oye a Mónica, una amiga cercana a la pareja, describir por vía
telefónica lo que hace Perla en EE. UU. y la reacción de María
Luisa.
Asegura la mujer que Iván Darío llegó a decir que él era cristo,
que había venido al mundo por segunda vez, y buscó cambiar los
estatutos de su iglesia para permitir que los homosexuales
fueran admitidos en la congregación.
En los primeros meses del año 2003, fui inducida por el señor
Iván Darío Moreno Piraquive, quien se desempeñaba en los
cargos directivos de la iglesia en los Estados Unidos para que le
apoyara en la preparación como nuevo supervisor general
internacional, manifestando que su señora madre, María Luisa
Piraquive de Moreno, quien desempeñaba dicha dignidad,
moriría en el mes de mayo de ese año y que por consiguiente él
la sucedería en el cargo, para lo cual necesitaba preparar
predicadores para sacar adelante la iglesia en Colombia y en el
exterior puesto que a la muerte de su señora madre
sobrevendría un caos que sería necesario afrontar.