Está en la página 1de 23

;

IDEOLOGIAS
EMPRESARIALES y ;

LA INVESTIGACION
EN LAS FACULTADES ;

DE ADMINISTRACION
EN COLOMBIA.

Respuesta al reporte
1
de la Misión de Ciencia y Tecnología

Eduardo Sáenz Rovner

n 1993, di una charla en el Congreso Nacional

E
Hay una tendencia fuerte a asumir que afirmacio-
nes apacibles a favor del statu quo son "objetivas" y de ASCOLFA (Asociación Colombiana de Fa-
que cualquier otra cosa es una forma de "retórica" ... cultades de Administración) titulada "Historia
En cualquier sociedad los grupos dominantes son de las historias, reflexiones de un historiador
los que tienen que esconder lo más sobre la manera en una escuela de administración". Esa charla, con
como funciona la sociedad. algunas modificaciones, la repetí en el seminario
Muy a menudo, los análisis verídicos están destina- profesoral del Departamento de Gestión Empresarial
dos a tener un tono crítico que los hace aparecer de la Universidad Nacional de Colombia en febrero de
como denuncias ... 1994. En esas conferencias (basado en mis vivencias
Barrington Moore, Jr. como investigador y profesor de historia empresarial
Social Origins o,
Dictatorship and Democracy 2 en facultades de administración en Colombia y en los
Estados Unidos), formulé una serie de inquietudes
que me habían venido preocupando durante años so-
El intelectual [independiente] formula preguntas
bre diversos temas que tenían que ver con las escue-
embarazosas para hacer frente a la ortodoxia y a
las de administración. Esas inquietudes se relaciona-
los dogmas (en vez de producirlos); es alguien que
no puede ser fácilmente cooptado por los gobiernos
ban con temas tales como los vínculos entre los
o por los empresarios. empresarios y la academia, la participación de los
trabajadores en la gestión, la obediencia y las jerar-
Edward Said
Representations o, the lnteüectuel?
quías, los "milagros" extranjeros que se colocan como
ejemplos para nuestro país, el método del caso y,
dada la disciplina que trabajo, el papel de un historia-
La cosa más radical que existe, es la verdad sobre dor en una escuela de administración y la relevancia y
algo. En un mundo de muchas clases de mentiras, calidad de la historia empresarial tal como se entiende
forzadas, compulsivas y deliberadas ... en las mismas facultades de administración en Colom-
John Womack, Jr. bia. Pude entonces darme cuenta que las inquietudes
Visions o,
History+. que yo presenté en las charlas eran compartidas (y

1 La investigación bibliográfica para este artículo fue hecha en autor asume la responsabilidad por el contenido e interpreta-
las bibliotecas de varias universidades norteamericanas ciones de este artículo.
(Lemoyne, Syracuse y UCLA). La traducción de las citas, ori- 2 Barrington Moore, Jr., Social Origins of Dictatorship and
ginalmente en inglés, fue realizada por el autor. Democracy, Beacon Press, Nueva York, 1967, pp. 522-523.
Los profesores Mauricio Avella, Hernando Ceballos, Manuel
3 Edward Said, Representations of the Intellectual, Pantheon
Gutiérrez, Luis Fernando Macías, Carlos Martínez Fajardo,
Books, Nueva York, 1994, p. 11.
Bernardo Parra, Francisco Rodríguez y Rafael Suárez leyeron
y comentaron borradores de este escrito en diferentes etapas. 4 Henry Abelove, compilador, VisionsofHistory, Pantheon Books,
8 A todos ellos mis agradecimientos. Como de costumbre, el Nueva York, 1983, p. 249.
GESTiÓN

discutidas) por otros profesores. Esto me motivó a Estas opiniones ya habían sido expresadas por
profundizar en los temas que había tratado inicialmen- uno de los autores del reporte en un escrito en 1980,
te, y así surgieron tanto la investigación como las revisado y reimpreso en una colección de artículos
reflexiones resultantes que se le presentan al lector en una década después. En ese trabajo el autor afirma
el curso de este artículo. que los indicadores en la "crisis" de la educación en
las escuelas de administración en Colombia se expre-
Las críticas a las escuelas y a los profesores de
saban en:
administración no son nada nuevo. Por ejemplo, en la
primeras seis décadas del siglo XX hubo una serie de "... [una] calidad académica lamentable, [un] creci-
severas críticas a las facultades de administración en miento vertiginoso del número de programas acadé-
los Estados Unidos. Estos cuestionamientos prove- micos y de estudiantes de administración [...], la aver-
nían no sólo del sector académico, sino también de sión a la teoría, la preponderancia de 'profesionales
observadores y de algunos empresarios. prácticos', la ausencia de actividades investigativas, el
aferramiento a estereotipos como el del 'ejecutivo mo-
Decidí entonces tomar como punto de partida en la
investigación tanto los cuestionamientos como se ha- derno' y la aceptación sin beneficio de inventario de la
retórica que en varios sectores no universitarios existe
bían planteado inicialmente en los Estados Unidos,
acerca de la educación en administración". Agregaba
así como un reporte relativamente reciente sobre las
facultades de administración en Colombia e igualmen- que los estudios de administración en Colombia eran
"mediocres" y se caracterizaban por una "lamentable"
te crítico sobre la calidad de la educación y la investi-
gación en este tipo de instituciones universitarias en el y "muy baja calidad" académica. Criticaba la educa-
ción universitaria -especialmente en administración-
país. Este último reporte, preparado para la Misión de
Ciencia y Tecnología y publicado en 1990, tomó un vista como un negocio e instaba a las escuelas de
grupo representativo de las facultades y departamen- administración a realizar investigación "crítica e inde-
pendiente" 6.
tos de administración en Colombia. Bien vale la pena,
resumir algunos puntos claves de ese trabajo. Entre Ante un panorama tan desolador, el autor señaló
las deficiencias de las escuelas de administración los con alivio que "hay unas contadas universidades a las
autores del reporte señalaron las siguientes: cuales no se aplica en grado máximo esta generaliza-
- El muy bajo número de profesores con título de Ph.D. ción sobre las deficiencias académicas de la educa-
era señalado como una "debilidad central". ción en administración" 7.

- El rápido crecimiento en el número de programas y Las reacciones en contra del reporte de la Misión
de estudiantes no había tenido un desarrollo cualitati- de Ciencia y Tecnología no se hicieron esperar. Las
vo paralelo. Muchos de estos programas eran noctur- respuestas de profesores de diferentes universidades
nos y de muy baja calidad. fueron generalmente airadas mientras sugerían que el
reporte podía tener un aire de arrogancia y autocom-
- La producción intelectual de calidad era muy escasa. placencia. Sin embargo, la mayoría de los críticos no
- Buena parte de los profesores eran egresados de se detuvieron a analizar con cabeza fría la situación en
programas de magíster en administración. Estos últi- sus propias escuelas, aún menos a cotejar la produc-
mos, en palabras de los autores, eran "muy poco ción académica de la facultad a la que pertenecían los
aptos para formar docentes universitarios, y menos autores del reporte, probablemente porque percibían
aún, para formar investigadores". dicha facultad como el modelo de escuela de adminis-
tración en el país".
- La enseñanza se basaba en best-sellers "general-
mente difundidos con criterios comerciales antes que Invito, pues, al lector de este artículo, no sólo a
de calidad académica" 5. mirar comparativamente los problemas y las críticas a

5 El reporte fue publicado inicialmente como: Manuel Rodríguez Rodríguez Becerra y Romero ni siquiera tenían título de maes-
Becerra, Carlos Dávila Ladrón de Guevara y Luis Ernesto tría, aún menos de doctorado.
Romero Ortiz, "Estado actual y perspectivas de la educación
6 Carlos Dávila Ladrón de Guevara, Ensayos sobre la educa-
y la investigación en el área de Administración", en, Misión de
ción en administración en Colombia; Monografías, Facultad
Ciencia y Tecnología, La conformación de comunidades cien-
de Administración, Universidad de los Andes, Bogotá, no. 24,
tíficas en Colombia, Bogotá, 1990, vol. 3, tomo 11,pp. 985-
mayo de 1991, pp. 21, 39-40, 46, 53.
1052.
7 Dávila, mayo de 1991, Op. cit., p. 37.
En este artículo se citarán las páginas correspondientes a la
reedición del reporte; véase Manuel Rodríguez Becerra, Car- Además de la Facultad de Administración de la Universidad
los Dávila Ladrón de Guevara, Luis Ernesto Romero Ortiz, de los Andes donde enseña Dávila, para dicho autor también
Gerencia privada, gerencia pública, educación en crisis, Una se "salvan" los programas de Ia Facultad de Estudios
empresa docente, Facultad de Administración, Universidad Interdisciplinarios (FEI) de la Pontificia Universidad Javeriana,
de los Andes, Bogotá, 1992, pp. 14-15, 17-18,21-22,34,37, entidad en la cual él también trabajó en el pasado. Véase:
52. Dávila, mayo de 1991, Op. cit., pp. 86-88.
Los mismos autores habían experimentado algunos de los 8 Algunas de estas reacciones aparecen en Rodríguez, Dávila
problemas sobre calidad que ellos mencionan. Por ejemplo, y Romero, Op. cit., pp. 105-134 9
las escuelas de administración norteamericanas en el simbiosis entre comunidad científica, universidades,
pasado, sino también a ponderar los temas motivo de gobierno y corporaciones, aumentó". Desde la Segun-
preocupación de las charlas ya mencionadas, espe- da Guerra Mundial se consolidó el matrimonio entre el
cialmente las conexiones entre las ideologías empre- mundo académico norteamericano y la investigación
sariales y la investigación en las facultades de admi- del Pentágono para la guerra. Por ejemplo, a través del
nistración. Para profundizar en dichos temas, tomaré Stanford Research Institute la industria militar realizó un
como referencia una buena parte de la producción buen número de lnvestiqaciones".
académica en la Facultad de Administración de la
Hasta hoy hay una fuerte relación entre universida-
Universidad de los Andes, facultad que, después de
des y corporaciones; éstas dan dinero para investiga-
todo, era la sede de los autores del reporte preparado
ción y como consecuencia se formulan y ejecutan
para la Misión de Ciencia y Tecnología.
proyectos de acuerdo a sus necesidades. En especial,
Espero que una vez leído este artículo, y discutida el mundo empresarial está directamente ligado a algu-
la producción académica de la facultad mencionada, nas escuelas y departamentos como agronomía, ad-
el lector pueda además reflexionar sobre una de las ministración e inqenierta".
afirmaciones hechas por los autores del reporte y
Ya a comienzos de este siglo el economista Thorstein
donde se establece muy tajantemente:
Veblen escribió sobre los peligros de ver reflejados los
"Si alguien intentase publicar una selección de los valores de los empresarios norteamericanos sobre las
trabajos de investigación de calidad producidos en las universidades de los Estados Unidos. Veblen, quien
facultades de administración en los últimos veinte años, vivió en una época en que las grandes empresas con-
seguramente tendría que trabajar muy ardua e imagi- solidaban su poder, también advirtió sobre el carácter
nativamente para conformar unos pocos volúmenes'": autocrático y jerárquico interno de los trusts. Esto podía
ir en sentido contrario a la libertad académica en las
universidades, requisito indispensable para la docencia
Empresarios y universidades, y la investigación. Anotaba Veblen: Esos detalles de la
en los Estados Unidos inteligencia humana y de la iniciativa que van a consti-
tuirse en la búsqueda del conocimiento [...] no se pres-
En los Estados Unidos, en contraste con la firma tan para un informe cuantitativo, y no se pueden hacer
pequeña del empresario innovador del siglo XIX la aparecer en una hoja de balances. Tampoco la iniciati-
corporación de comienzos del siglo XX estaba va y la propensión intelectuales, que se constituyen
burocratizada, lo que dificultaba cualquier tipo de inno- como la fuerza y el motivo indispensables en la búsque-
vación. Los directivos se habían convertido en adminis- da del conocimiento, pueden ser reducidos a cualquier
tradores de tiempo completo y necesitaban una división término conocido de subordinación, obediencia y direc-
dentro de la corporación que estimulara el cambio, ción autoritaria [...] Una libertad exenta de trabas es el
especialmente el tecnológico, y que estuviese al tanto primer y permanente requisito del trabajo erudito y cien-
de los nuevos desarrollos científicos y sus aplicaciones tffico".
al proceso de producción. De ah í nació la necesidad del Agregaba Veblen que si se sometía al mundo aca-
laboratorio industrial. Para finales de la década de los démico a la "aprobación de los empresarios", y a
años 20, el laboratorio industrial moderno, con sus "aceptar y confirmar las convicciones en boga", se
científicos portadores de títulos de Ph.D., se había tendría como consecuencia que "cualquier investiga-
convertido en parte de la corporación norteamericana. ción que no conduzca a corroborar las opiniones de
Como resultado de la Segunda Guerra Mundial, la moda ... es condenada como falsa y terca?",

9 Rodríguez, Dávila, Romero, Op. cit., p. 78. Domhoff y Thomas R. Dye, compiladores, Power Elites and
10 Louis Galambos y Joseph Pratt, The Rise of the Corporate Organizations, Sage Publications, Newbury Park, California,
Commonwealth, Basic Books, Nueva York, 1988, pp. 80-81, 1987, pp. 162, 166.
84,171. 13 Thorstein Veblen, The Higher Learning in America. A
11 Sidney Lens, The Military-Industrial Complex, Pilgrim Press, Memorandum on the Conductof Universities by Businessmen,
the Nathional Catholic Reporter, Filadelfia, capítulo 7. Ann C. Sagamore Press, Nueva York, 1957, pp. 62-63 (Publicado por
Bauer & Harry M. Cleaver, "Minority Reports", Campus Report primera vez en 1918).
Supplement, Stanford University Relations Office, no. 5, abril Un buen número de rectores universitarios hicieron parte
14 de 1969; en, Charles Perrow, compilador, The Radical Attack de la National Civic Federation, fundada en 1900. Los
on Business. A Critical Analysis, Harcourt Brace Jovanovich, empresarios tenían una importancia central en la Federa-
Nueva York, 1972, pp. 136-149. ción. Esta partía de supuestos tales como la defensa del
Para el periodo contemporáneo, véase: Jonathan Feldman, sistema de libre empresa y la negación de conflictos de
Universities in the Business of Repression. The Academic- clase. Esta era una manera de legitimar a las corporacio-
Military-Industrial Complex in Central America, South End nes ante el resto de la sociedad. Véase James Weinstein,
Press, Boston, 1989. The Corporate Ideal in the Liberal State, Beacon Press,
Boston, 1968, pp. 3, 7.
12 Elizabeth L. Useem, ''The Limits of Power and Commitment:
10 Corporate Elites and Education in the 1980's"; en William G. 14 Veblen, Op. cit., p. 132.
Por último, la racionalidad de los negocios entraría
a reñir con el mundo universitario. La insistencia de los
empresarios en lo supuestamente "práctico", no era
más, según Veblen, que aquello "útil para la ganancia
privada, no necesariamente algo en servicio del bien
común":",

Varias décadas más tarde, el sociólogo C. Wright


Milis observó cómo un buen número de profesores se
convierten en un "apéndice de la élite administrativa". tienen estrechas relaciones con el sector privado, no van
y agregaba, "algunos profesores se especializan en a producir resultados que no reflejen los valores y los
vender el conocimiento que otros han creado, y aun gustos de los empresarios y "patrocinadores". Además,
otros adaptan su trabajo intelectual para satisfacer estos profesores no entrenan a sus estudiantes simple-
directamente al mercado". Lo que Milis escribía hace mente en "técnicas administrativas" sino también en la
unos 40 años cobra actualidad en el medio colombia- ideología, los valores y los propósitos de la empresa".
no tanto en facultades de administración como en Lo que en una época se decía de las universidades
otros campos donde la investigación es remplazada norteamericanas podría decirse hoy en día de muchas
por la consultoría contratada: instituciones de educación superior en Colombia:

Entre los profesores de ciencias sociales y de admi-


La dirección que el sistema de educación formal
nistración ... el nuevo modelo empresarial de éxito
tomó ... fue dictada por el poder de los intereses
está bien consolidado. Uno escucha en esos cen-
empresariales y por la ideología triunfante del "ge-
tros que el profesor hace de todo, menos enseñar.
rente eficiente" [...] "Métodos gerenciales" en los
Es consultor de las grandes compañías, de las
establecimientos educativos quería decir que sus
lonjas de propiedad raíz, de los comités de negocia-
directores serían reclutados de las filas de los políti-
ción entre empleados y patrones; ha construído su
cos y especialmente de los empresarios, antes que
propio taller de investigación desde el cual vende
de los educadores profesionales, y se orientarían a
servicios y el prestigio de la imparcialidad tradicio-
cortar costos y a controlar más bien que a [mejorar]
nal de su universidad. Se convierte en un personaje
la calidad de la educación. Los métodos gerenciales
con staff -y con overhead-. Su alto overhead combi-
también significaban que el profesor sería reducido
nado con el sistema de honorarios para ciertos tipos
a la condición de un simple operarlo".
de trabajos ocasionan su frenesí empresarial [...]
algunas carreras académicas se vuelven depen-
dientes de los rasgos del negociante buscavida ... '6
Las críticas a la calidad académica
de las Escuelas de Administración
Loren Baritz sostuvo que "los gerentes, como ge-
rentes, están en las empresas para ganar dinero. Sólo en los Estados Unidos
en la medida en que los científicos sociales industria-
les puedan ayudarles en el logro de esta meta serán ... uno de los más condenables ejemplos de mate-
empleados por los gerentes". Así, el académico "prác- rialismo ... es la Escuela de Administración de Nego-
cios, en Harvard ... cuando paso por sus alrededo-
tico" se limitaría a resolver "los problemas específicos
res miro en otra dirección. Si no estoy equivocado,
de su empresa, incluyendo aquellos que amenazan el
[la Escuela] habla de los negocios como "la más
control gerencial". Esta clase de "científico social" acep- nueva de las artes, y la más antigua de las profesio-
taría "las normas de la élite dominante" y haría "lo que nes". Si esto es así, ambas afirmaciones son erró-
le dijesen que hiciera" 17. neas. Con seguridad hay otra profesión que es la
más antigua.
Según Ralph Miliband, otro reconocido académico,
las escuelas de administración, donde sus profesores George William Apley (1866-1933)20.

15 Ibid., p. 141. consejos superiores de las universidades norteamericanas.


16 C. Wright Milis, White Collar. TheAmerican Middle Class, Oxford Un estudio de 1936 anotaba que en las universidades privadas
University Press, Nueva York, 1956, pp. 133-134. de los Estados Unidos, el porcentaje de banqueros en los
consejos superiores subió entre 1860 y 1930 deI4.6% al 20.3%.
17 Loren Baritz, The Servants of Power. A History of the Use of Otro estudio de 1947 demostró el alto porcentaje de empresa-
Social Science in American Industry, Wesleyan University rios en los consejos superiores, especialmente en las univer-
Press, Middletown, Connecticut, 1960, pp. 194-198. sidades privadas. Véase Robert M. Maclver, Academic
18 Ralph Miliband, The State in Capitalist Society, Basic Books, Freedom in Our Time. A Study Prepared for the American
Nueva York, 1969, pp. 251, 253. Academic Freedom Project at Columbia University, Gordian
19 Samuel Bowles y Herbert Gintis, Schooling in Capitalist Press, Nueva York, 1967, pp. 77-78.
America. Educational Reform and the Contradictions of 20 Appley era de la élite de Boston, empresario y educado en
Economic Life, Basic Books, Nueva York, 1977, p. 44. Harvard. Citado por John P. Marquand, The Late George Apley.
El poder de los empresarios sobre el mundo académico nor- A Novel in the Form of a Memoir, C. Little, Brown and Company,
teamericano podía notarse a través de la composición de los Boston, 1947, p. 330. 11
La primera y más importante influencia destructiva académica de sus estudiantes, "superados" -por ma-
en [la Universidad de] Pensilvania de la atmósfera los- únicamente por los estudiantes de educación físi-
importante para el sustento de las ciencias huma- ca y de economía del hoqar".
nas es la Wharton School of Finance and Commerce
[...] La Wharton ... le ha dado a la vida extracurricular En una afirmación, que hoy en día nos resulta tan
y social de los estudiantes de pregrado una atmós- familiar en Colombia, un observador recordaba que
fera que usualmente no es intelectual [...] Un cuerpo también se "lavaban" diplomas: "Las universidades que
estudiantil donde la mitad de sus miembros tienen no califican para una acreditación de sus programas de
intereses claros de naturaleza materialista y no aca-
pregrado, ofrecen y publicitan títulos de posqrado'?'.
démica está atado a crear un clima que refleja poco
menos que entusiasmo por las ciencias naturales y Pero incluso en los Estados Unidos, los mismos
las ciencias sociales. empresarios y directivos de las escuelas de adminis-
The Daily Pennsylvanian, tración reconocían que estas instituciones recibían
14 de enero de 195521.
estudiantes de baja calidad. Un empresario concluyó
que una "característica de la vida moderna de los
Durante décadas los profesores de las escuelas de negocios [es] el sentido de complacencia y de satis-
negocios eran mirados por encima del hombro por los facción con la mediocridad" 25.
académicos de otras facultades. Incluso en épocas
más recientes, para muchos académicos norteameri- Herbert Simon, quien ayudó a construir la Facultad
canos sólo mencionarles escuela de negocios era de Administración en Carnegie University, advirtió so-
usar una mala palabra. Para un analista, mientras los bre los peligros del "vocacionalismo" en las escuelas
profesores de administración percibían al resto de los de negocios, y enfatizó sobre la necesidad de dar un
académicos como personas carentes de sentido prác- entrenamiento en diferentes disciplinas básicas en las
tico y encerrados en su torre de marfil, estos últimos escuelas de administración. Además, Simon insistió
suponían que los profesores de negocios sólo se en que los profesores de administración debían ser
interesaban "en los dólares yen el Club Rotario"22. personas que hubieran seguido una carrera académi-
ca y no simples gerentes 26.
La pregunta sería, ¿por qué estos prejuicios? En
parte podría ser ignorancia. Pero, de todas maneras, De las críticas a las escuelas de administración
puede ser interesante examinar si tal vez hay algún surgieron las sugerencias de educadores, funciona-
grano de verdad en estas frases. rios del gobierno y hasta empresarios, no sólo de
reforzar académicamente al profesorado, sino tam-
Con la explosión de las matrículas universitarias en
bién de desarrollar habilidades analíticas en los estu-
la posguerra, en un año típico de la década de 1950 de
diantes a través de las humanidades, las ciencias
dos millones de estudiantes universitarios en progra- sociales y las ciencias naturales 27.
mas de pregrado y posgrado en los Estados Unidos,
250.000 estaban en escuelas de negocios y comercio. A pesar de las reformas de tipo académico, buena
De ahí que uno de cada siete títulos otorgados por las parte de los estudios de management seguían refle-
universidades norteamericanas a finales de esa déca- jando los intereses de los empresarios, no sólo en
da era en business. La masificación de las escuelas aumentar la productividad, sino también en mantener
de administración corría paralela con la baja calidad sistemas de control sobre sus subordinados. La próxi-

21 Citado por William H. Whyte, The Organizatian Man, Simon Don't Businessmen Read Books?" Fartune, mayo de 1954,
and Schuster, Nueva York, 1956, p. 85. pp. 116, 150, 152.
22 Duncan Norton-Taylor, "Business Schools: Pass or Flunk?", En España, un estudio de los años 60 era bastante crítico de
Fartune, junio de 1954, p. 238. Herbert Simon, Administrative las facultades de administración: "... la calidad del profesorado
Behaviar. A Study ot Oecisian-Making Pracesses in de las escuelas de Dirección de Empresas está en agudo con-
Administrative Organizatian, The Free Press, Nueva York, traste con las excelentes edificaciones de las mismas"; véase
1976, p. 346. G. L. Bach, "Business School Faculties: W.C. Frederick y C.J. Haberstroth, La enseñanza de dirección
Potential New Sources", en American Association of de empresas en España. Management Educatian in Spain,
Collegiate Schools of Business, compilador, Faculty edición bilingüe, Moneda y Crédito, Madrid, 1969, p. 214.
Requirenments and Standards in Callegiate Schoois a' 24 Norton-Taylor, junio de 1954, Op. cit., p. 113.
Business, American Association of Collegiate Schools of
25 Dause L. Bibby, Whase Business Is Business Educatian?,
Business, 1956, pp. 116-117.
University of Texas, Ausiin, 1962, p. 12.
23 Norton-Taylor, junio de 1954, Op. cit., p. 112. RobertA. Gordon 26 Simon, 1991, Op. cit., p. 139. Simon, 1976, Op. cit., pp. 343-
y James E. Howell, Higher Educatian tor Business, Columbia 344.
University Press, Nueva York, 1959, pp. v, 324-325. Frank C.
27 Bibby, Op. cit., p. 12. Howard G. Bowen, "Liberal Educationfor
Pierson, The Educatian ot American Businessmen, Mac Graw
Business"; en Roy W. Holsten, compilador, A Sympasium.
Hill, Nueva York, 1959, p. 55.
Views on Business Educatian, The American Association of
Los empresarios no se quedaban atrás. Además de leer nove- Collegiate Schools of Business y The School of Business
las de policías y ladrones, los libros de su lista de lecturas Administration, University of North Carolina, Chapel Hill, 1960,
incluían títulos como: Haw I Made the Sale that Oid the Mast p. 41. Gordon & Howell, Op. cit., pp. 142,324-325. Whyte, Op.
12 tor Me y Haw to Talk Well, véase Duncan Norton- Taylor," Why cit., p. 88.
GESTiÓN

ma sección de este artículo trata este tema. Después Wobblíes) lideraron los movimientos, con el sabotaje
analizaremos cómo este tipo de ideología ha tenido como una de sus tácticas más ímportantes=.
repercusiones en la producción de estudios en temas
Incluso con el boom económico que siguió a la
administrativos en Colombia, en particular en aquellos
Segunda Guerra Mundial, el descontento con el traba-
trabajos realizados por los profesores de la Facultad a
jo en las plantas continuó, llegando éste a su pico en la
la que pertenecían los autores del reporte comentado
década de los años 60. No sólo la literatura académica
en la introducción de este artículo.
de izquierda y la prensa laboral reflejaban este fenó-
meno. También el gobierno norteamericano era cons-
Del taylorismo al rediseño del trabajo ciente de este tipo de problemas. De ahí que el Depar-
tamento de Salud, Educación y Bienestar (Department
Con el taylorismo, el conocimiento de los trabaja- of Health, Education and Welfare) publicó un reporte
dores del proceso de producción -herencia de la era oficial en 1973 titulado Work in America. A pesar de
del maestro artesano- sería apropiado por los admi- reconocer la insatisfacción de los trabajadores con el
nistradores de las fábricas. Estos últimos controlarían proceso de trabajo en los Estados Unidos, la filosofía
el proceso de trabajo, harían la planificación, estable- del reporte se concentró definitivamente en formular
cerían la intensidad del trabajo, y gradualmente des- recomendaciones para bajar los costos, aumentar la
truirían la habilidad del trabajador para diseñar y eje- productividad y las qanancias",
cutar. Cualquier clase de solidaridad entre los El reporte norteamericano recomendó la implemen-
trabajadores sería eliminada al destruir los grupos tación de programas de "rediseño del trabajo" que crea-
primarios en los que se asociaban para trabajar. Los rían equipos de trabajadores para resolver sus proble-
trabajadores más militantes serían multados e incluso mas cotidianos de motivación y toma de pequeñas
despedidos del empleo por cualquier talta=. decisiones rutinarias, pero que al mismo tiempo au-
La aplicación del taylorismo, además de ser un mentaría la productividad y reduciría los costos. El re-
sistema de control, bajó los costos de producción per- diseño del trabajo dejaba muy en claro quien seguía
mitiendo a los empresarios norteamericanos tener una mandando en las empresas, ya que las decisiones de
porción más grande del mercado mundial. El precio coordinación seguirían en manos de la directiva".
pagado por los trabajadores en los Estados Unidos en En los años 70, Andrew Zimbalist describió las
términos de "las condiciones de trabajo ... escandalizó estrategias de "humanización del trabajo" y de
frecuentemente a observadores venidos del movimiento "rediseño" (dentro de las cuales se encuentra el repor-
laboral europeo". Así, Frederick W. Taylor pudo pro- te del gobierno norteamericano) como "modificaciones
clamar que los Estados Unidos "podían competir en
cosméticas", ya que "la iniciativa y dirección de los
términos más que ventajosos" con sus rivales". programas permanecen con el capitalista". Además
A pesar de los aumentos en la productividad en las promovían "la identificación de los operarios con el
primeras décadas del siglo XX, los trabajadores se iden- capital, fortaleciendo el control" del empresario. Sin
tificaban cada vez menos con la empresa. Además, los embargo, variaciones de este tipo de estrategias em-
obreros perdieron cualquier iniciativa como innovadores presariales se han divulgado e implementado por los
y se fortificó la tradición de ver al capital y al trabajo empresarios en Colombia apoyados por sus consulto-
como rivales. Una ola de huelgas fue la respuesta de res de cabecera. Una de estas estrategias es la de los
muchos sindicatos a la aplicación del taylorismo. Los círculos de calidad que utiliza rótulos como los de
Industrial Workers of the World (conocidos como los "gerencia democrática" y "participación" 33.

28 Mike Davis, "The Stop Watch and the Wooden Shoe: Scientific Martin Glaberman, "Black Cats, White Cats, Wildcats: Auto
Management and the Industrial Workers of the World", en Workers in Detroit", en Radical America, enero-lebrero de 1975,
Radical America, enero-febrero de 1975, pp. 71-72. Harry p. 28. Bill Watson, "Counter-Planning on the Shop Floor", en
Braverman, Labor and Monopoly Capital. The Degradation of Radical America, mayo-junio de 19'11,pp. 79-80. Special Task
Work in the Twentieth Century, Monthly Review Press, Nueva Force tothe Secretary 01Health, Education, and Wellare, Work
York, 1974, pp. 68,113-114,118-119. in America, The MIT Press, Cambridge, Massachusetts, 1973,
Para conocer un punto de vista alternativo, véase Michael pp. 11,22, 27.
Piare y Charles F. Sabel, The Second Industrial Divide: 32 Work in America, Op. cit., pp. 91, 104. El reporte toma como
Possibilities for Prosperity, Basic Books, Nueva York, 1984. ejemplo la empresa General Foods. Allí se crearon "grupos
Para conocer un análisis de los trabajos de Braverman, Piore autónomos" de trabajo. Así, no sólo se aumentó la productivi-
y Sabel, véaseStephen Wood, compilador, The Transformation dad sino que también se pudo prescindir de una tercera parte
of Work, Unwin Hyman, Londres, 1989. de los trabajadores; véase Work in America, Op. cit., pp. 96-99.
29 Davis, Op. cit., p. 72. Frederick W. Taylor, The Principies of
33 Andrew Zimbalist, "The Limits 01 Work Humanization", en
Scientific Management, 1911, p. 75.
Review of Radical Political Economics, 1975. Para un excelen-
30 Galambos y Pratt, Op. cit., pp. 78-79. Davis, Op. cit., p. 74. te estudio sobre el discurso gerencial, véase Stephen Barley
31 Dan Georgakas y Marvin Surkin, "Niggermation in Auto y Gideon Kunda, "Design and Devotion: Surges 01 Rational
Company Policy and the Rise of Black Caucases", en and Normative Ideologies 01Control in Managerial Discourse",
Radical America, enero-febrero de 1975, pp. 34-35, 37. Administrative Science Quarterly, vol. 37,1992, pp. 363-369. 13
Los círculos de calidad, así como otras ideologías
empresariales, donde se predica un supuesto método
de democratización en las empresas, se han enraizado
en Colombia gracias al apoyo de muchos empresarios
y a la literatura de los consultores. Entre este tipo de
trabajos se encuentra el libro Gerencia japonesa y
círculos de participación, experiencias en América La-
tina, de Enrique Ogliastri, consultor y profesor en la
Facultad de Administración de la Universidad de los
Andes".
Ogliastri empieza describiendo un escenario ideal:
"La empresa japonesa es un mundo fascinante y com-
plejo, donde las contradicciones más radicales pare-
cen resolverse sin conflictos. [Es un mundo] de autori-
dad pero también de participación ..." La clave se
La "Gerencia Democrática" y otras modas encontraría en la aplicación de los círculos de calidad,
donde "la autoridad viene de abajo hacia arriba, y [hay]
... el mundo está atestado hoy más que nunca con una cohesiva organización de los grupos de trabajo" .
profesionales, expertos, consultores, en otras pala- El papel de la alta gerencia de la empresa no podría
bras, con intelectuales cuyo principal rol es propor- ser más encomiable, ya que ésta, según el autor,
cionar su trabajo a [quienes detentan] el poder ... "tiene como responsabilidad y labor central ser guía
espiritual, entender la empresa dentro de un contexto
Edward Said de valores sociales y proporcionar un sentido de direc-
Representations of the tmenectuet" ción en cuanto a ética, moral e ideología" 38.

En un esquema como éste, el autor sostiene en


Los puntos de vista del científico social sobre los repetidas ocasiones que los trabajadores ejercerían el
trabajadores y el sindicalismo nos agregan mayor "autocontrol", tendrían "más autonomía" ya que éste
profundidad a nuestro entendimiento de su compro- sería un sistema de "gerencia participativa y democrá-
miso arrollador con los gerentes.
tica". Los trabajadores no serían obreros o emplea-
Loren Baritz dos, sino que el autor los describe con el eufemismo
The Servants of Power 35 de "colaboradores" 39.

Escribiendo sobre una empresa mexicana, Ogliastri


Los críticos pueden señalar los intereses económi- recuerda cómo los trabajadores serían, según el, de-
cos subyacentes, la interacción continua y la fami- masiado ingenuos y desconfiados para poder entender
liaridad con la gerencia como explicaciones del tono sus propios intereses: "Desde el comienzo del progra-
generalmente a favor de los patronos en la literatura ma, los directivos del sindicato fueron informados acer-
académica sobre las organizaciones. ca de sus objetivos concretos, y de los beneficios que
Gideon Kunda tanto los trabajadores como la empresa obtendrían;
Engineering Culture. Control and Commitment in a asimismo fueron invitados a participar en ellos. Pero la
High- Tech Corporation 36 oposición fue cerrada desde el principio" 40.

34 Said, Op. cit., p. xv. sociedades ingenuas y bien intencionadas a buscar la exce-
35 Baritz, Op. cit., p. 202. lencia. La cultura desempeña en las empresas el mismo papel
que la religión en la sociedad. Establece normas de conducta
36 Gideon Kunda, Engineering Culture. Control and Commitment
y un código de moral, pero sobre todo, profiere 'órdenes difusa'
ina High- Tech Corporation, Temple University Press, Filadelfia, a menudo ataviadas como esloganes publicitarios ..." Véase
1992, p. 255.
Jean-Paul Sallenave, La Teoría L. Manual de antigerencia,
37 Enrique Ogliastri, Gerencia japonesa y círculos de participa- Tercer Mundo Editores, Bogotá, 1995, p. 37.
ción, experiencias en América Latina, Grupo Editorial Norma, 39 Ogliastri, 1988, Op. cit., pp. 9, 27-29, 53,104,171,180-181,
Bogotá, 1988.
188,193.
Para conocer una crítica a las modas en administración en el
En una obra clásica, Reinhard Bendix había discutido este
mundo de habla inglesa, véase Mike C. Jackson, "Más allá de
tipo de ideologías administrativas que justifican la subordina-
las modas administrativas. El pensamiento sistémico para los
ción de los trabajadores y las relaciones de autoridad y que
administradores", en INNOVAR, revista de ciencias adminis-
además buscan identificar los intereses de los trabajadores
trativas y sociales, No. 4, julio-diciembre de 1994, pp. 6-21.
con los de la empresa; véase Reinhard Bendix, Work and
38 Ogliastri, 1988, Op. cit., pp. 1-3, 5. Authority in Industry. Ideologies of Management in the Course
Conviene aquí recordar las palabras de un observador: "La of Industrialization, Harper Torchbooks, Nueva York, 1963,
cultura es una impostura inventada por los consultores en pp, ix-xii (Esta obra fue publicada inicialmente en 1956).
14 administración, alrededor de los años 80, para incitar a las 40 Ogliastri, 1988, Op. cit., p. 161.
GESTiÓN

Así pues, habría sindicatos que verían los círculos No sólo el tono sino también el contenido de lo que
de calidad como una "estratagema de la gerencia". escribe Mandel no tiene nada que ver con las afirma-
Para calmar las prevenciones sindicales, Ogliastri ar- ciones de Ogliastri. Sostiene Mandel: "Es por lo tanto
gumenta que teóricos marxistas como Antonio Gramsci, urgente definir el significado y las implicaciones del
Ernest Mandel y Richard Edwards, estarían de acuer- control por parte de los trabajadores, mostrar su valor
do con los círculos de calidad. Sin embargo, una cosa en la lucha por el socialismo, y distinguirlo de sus
es que Gramsci, Mandel y Edwards estuviesen de variantes reformistas: la codeterminación y la 'partici-
acuerdo en la cogestión de las fábricas como un paso, pación'. El control por parte de los trabajadores es una
según ellos, hacia la toma del poder por parte de los demanda de transición, una reforma estructural
trabajadores, y otra cosa es malinterpretar sus escri- anticapitalista por excelencia. Esta demanda surge de
tos y pretender que éstos estarían a favor de los las necesidades inmediatas de las masas y les lleva a
círculos tal como se entienden hoy en día en la ideolo- lanzar luchas que retan la existencia misma del siste-
gía empresarial. Independientemente de que el lector ma capitalista ..." 43
esté de acuerdo o no con las ideas de Gramsci, Mandel
y Edwards, éstas son utilizadas en una forma acomo- Sin embargo, hacia el final del libro Ogliastri reafir-
dada en el libro en mención. De ahí que sea interesan- ma que "... esto de los círculos es de lo mejor que se
te cotejar las opiniones de Gramsci, Mandel y Edwards han inventado en el mundo, porque verdaderamente
con lo afirmado por Ogliastri 41. beneficia a los trabajadores. Ponerse contra el progra-
ma de círculos es oponerse a algo progresista ..." Ante
Ogliastri malinterpreta los escritos y las acciones esta afirmación, podríamos citar las ideas de Mandel,
políticas de Antonio Gramsci (quien murió en la cárcel después de todo uno de los pensadores progresistas
bajo el régimen de Benito Mussolini). Los Consejos de más importantes en la segunda mitad del siglo XX.
Fábrica de los trabajadores en Turín (1919-1920) eran Mandel concluye tajantemente que las ideologías que
vistos por Gramsci como una forma de organizar a los buscan establecer un consenso en las fábricas son
trabajadores "para que se educasen a sí mismos, para "endulzar la píldora, [representan] una doctrina
acumulasen experiencia, y adquirieran una conciencia hipócrita [...] Los sindicatos y los trabajadores deben
responsable de los deberes propios de las clases que rehusar a hacer la mínima concesión al 'espíritu de
tienen el poder del Estado". equipo' que los patronos proclaman" 44.
Según Gramsci, el capitalista como dueño y como
Ogliastri también cita a Richard Edwards, un econo-
administrador ya no era necesario, y los trabajadores
mista norteamericano de izquierda, para justificar los
podían manejar las fábricas y Colectivizarlas. Decía
círculos de calidad. De nuevo, el autor cita de una manera
Gramsci en un lenguaje categórico: "El capitán de
parcial ya que para Edwards los empresarios ofrecen
industria se ha convertido en un caballero de industria,
"una autogestión limitada dentro del [contexto] de la
escondido en los bancos, clubes, bolsas y corredores
empresa autoritaria"; y estos experimentos son liquida-
de los ministerios y del Parlamento. El dueño del
dos "no por razones de eficiencia" sino cuando "la de-
capital se ha convertido en una rama muerta en el
mocracia se les sale de las manos" a los patronos" 45.
campo de la producción ... No es indispensable, ya que
sus funciones históricas se han atrofiado". La construcción del discurso mitológico sobre Ja-
Gramsci percibía los Consejos de Fábricas como pón como arquetipo y panacea para resolver
una réplica de los sóviets instaurados por Lenin en la mágicamente los conflictos en Colombia y el resto del
Unión Soviética. Tal como afirmaba Gramsci: "La for- continente tiene su corolario en el reciente libro del
mación de un sistema de Consejos [de Fábrica] repre- mismo Ogliastri titulado El sistema japonés de nego-
senta la primera declaración concreta de la revolución ciación. Las experiencias de América Latina. Este tra-
comunista en Italia" 42. bajo podría además ser parte de los manuales de

41 Ogliastri, 1988, Op. cit., pp. 34-35, 54. 45 Ogliastri, 1988, Op. cit., p. 35; Richard Edwards, Contested
Terrain. The Transformation of the Workplace in the
42 Citado por John M. Cammet, Antonio Gramsci and the Origins
Twentieth Century, Basic Books, Nueva York, 1979, pp.
of Itafian Communism, Stanford University Press, Stanford,
155-156.
1967, pp. 78-79, 83, 92, 94. Véase también Antonio Gramsci,
Selections from the Prison Notebooks, Intemational Publishers, Para otro libro generalmente apologético sobre los círculos
Nueva York, 1971. Es interesante recordar el papel de los de calidad en Colombia, véase Camilo Gaitán García, Car-
"intelectuales orgánicos" tal como los definió el mismo Gramsci. los Dávila Ladrón de Guevara y Luis Armando Zarruk,
Estos son utilizados por los empresarios para "organizar [sus] Productividad y participación: la experiencia de los círculos
intereses, conseguir más poder, obtener más control"; citado de participación en empresas colombianas, Cámara de
por Said, Op. cit. p. 4. Comercio, Bucaramanga, 1985. Dávila ha sido consultor
gerencial en el área de recursos humanos; Gaitán era
43 Emest Mandel, 'The Debate on Workers' Control", en Gerry
funcionario de la Fundación Grupo Social y Zarruk en ese
Hunnius, G. David Garson y John Case, compiladores, Workers'
entonces era gerente financiero de Hilanderías del Fonce.
Control. A Readeron Laborand Social Change, Random House,
El libro surgió del Primer Foro Nacional de Círculos de
Nueva York, 1973, p. 345.
Participación organizado por el sector privado en
44 Ogliastri, 1988, Op. cit., p. 169. Mandel, Op. cit., pp. 352-354. Bucaramanga en 1983. 15
"self-improvement", apropiado para cierto tipo de pú- ponsabilidad que corresponde a todos los miem-
bros de una organización, en nuestro caso la uni-
blico ávido de literatura providencial y de consejos. El
versidad, y no solo la obligación de quienes por una
libro parte de la ideología del "milagro" japonés: eso
u otra circunstancia dirigen en un momento dado.
es, todo iría muy bien si fuésemos o nos comportáse- De allí que en una universidad el consejo superior,
mos como japoneses, pero ya que no lo somos, por lo el rector, los vicerrectores, el consejo directivo, el
menos hagamos negocios con ellos. Los casos que consejo académico, los decanos, los profesores,
presenta son simples anécdotas, aunque en la intro- los alumnos, los empleados administrativos y el
ducción el autor anuncia que se hará un "análisis personal de servicio, es decir, todas y cada una de
profundo". las personas que conforman la comunidad universi-
taria, asumen una función y una responsabilidad en
El escrito está lleno de lugares comunes y de este-
la administración de la institución ..Y
reotipos. Pregunta a los empresarios japoneses sobre
qué cosas similares y diferentes hay entre la cultura
japonesa y la "latina". Aunque el autor pretende que el Sin embargo, Serna nos introduce rápidamente en
libro es académico, abundan las afirmaciones tales el lenguaje propio de los empresarios y del poder:
como aquella de que los mexicanos ponen la música a "... el control se convierte cada vez más en una tarea
un volumen muy alto y los japoneses no, o que estos fundamental de la gerencia participativa. Sin mecanis-
últimos son puntuales y los latinoamericanos son in- mos de control oportunos y eficientes, la participación
cumplidos 46. se convierte en caos, en permisividad. Diseñar un
sistema adecuado de control apoyado por los siste-
Dentro de la misma línea de Ogliastri se encuen-
mas de información es una tarea de la gerencia rno-
tran los escritos de Humberto Serna, otro consultor
derna"48.
que también enseña en la Facultad de Administración
de la Universidad de los Andes. y Serna admite la necesidad de una estructura jerár-
quica: "Una estructura jerárquica con una clara defini-
Serna empieza utilizando la retórica de la armonía
ción de funciones es, sin duda, una herramienta muy
y la participación: "La dinámica misma de las organiza-
importante para lograr una adecuada coordinación" 49.
ciones, la modernización de la sociedad y la evolución
del pensamiento administrativo cuestionaron esta con- El nivel académico del escrito de Serna refleja los
cepción verticalizada, introduciendo conceptos tales best-sellers y manuales de turno. De ahí que Serna
como el de autoevaluación de gestión, el autocontrol cita el escrito de T.J. Peters y R.H. Waterman, En
administrativo, la gerencia participativa [...] dentro de busca de la excelencia, quienes "identificaron las siete
este nuevo esquema, la administración se define como creencias administrativas básicas que reflejan las
una empresa cooperativa". Serna va mas allá y trata creencias de los ejecutivos en las compañías exitosas".
de aplicar esta retórica a las universidades: Estas "creencias administrativas", propias del sector
privado le parecen muy apropiadas a Serna para ser
... en la universidad ... las formas y mecanismos de aplicadas a las universidades" .
participación en la gestión son más antiguos y han
tenido más aceptación que en la empresa comercial El lenguaje de Serna se vuelve entonces "ejecuti-
[...] Con este marco de referencia se impone una vo". Así, las universidades deben tener "imagen cor-
nueva concepción de la administración en la que se porativa", "posición competitiva", "portafolio de progra-
establezca que administrar es una tarea y una res- mas", etc". Serna plantea entonces lo que llamaríamos

46 Enrique Ogliastri, El sistema japonés de negociación. La expe- 49 /bid., p. 332.


riencia de América Latina, McGraw-Hill, Ediciones Uniandes, 50 Estas creencias administrativas sor¡ relacionadas por Serna:
Bogotá, 1992, passim. A propósito de su metodología, el autor
nos cuenta sobre sus descubrimientos en la China, aunque "Creencia en ser el mejor.
reconoce que en ese país "no hice un estudio sistemático de Creencia en la importancia del trabajo bien hecho y de calidad.
grandes negociaciones, y apenas pude contar con la intuición Creencia en la importancia de las personas como individuos.
y la experiencia de tratar con vendedores ambulantes y Creencia en la calidad del servicio.
microempresarios ..." Regresando al Japón, nos ilustra sobre Creencia en que los miembros de la organización deben ser
las peripecias de su peculiar metodología de investigación: "... innovadores ...
las principales dificultades que yo tuve ese día fueron comer Creencia en la informalidad para manejar la calidad.
el sushi con una mano, tomar la sopa con la otra, y apuntar en Creencia en la importancia de las utilidades y el crecimiento
un cuaderno lo que me decían mientras me balanceaba sobre económico". Serna, Op. cit., pp. 292-293.
los tobillos donde estaba sentado"; Ogliastri, 1992, Op. cii., pp.
51 Serna, Op.cit., p. 300. No es de extrañar que Serna figure
xvi, 70.
como profesor de un seminario basado en best-sel/ersde moda
47 Humberto Serna, "Elementos para un modelo de administra- para el proyecto de doctorado propuesto por su facultad. La
ción de la educación abierta y a distancia"; en Luis Enrique ideología empresarial (y sus consecuencias en términos aca-
Orozco, Rodrigo Parra y Humberto Serna, ¿La universidad a démicos tal como se discutió para los Estados Unidos), logra-
la deriva?, Tercer Mundo Editores, Ediciones Uniandes, Bo- ría así encarnarse en dicho proyecto. Véase "Cursos del Doc-
gotá, 1988, p. 280. torado en Administración", Facultad de Administración, Uni-
16 48 Ibid., p. 287. versidad de los Andes, sin fecha, fotocopia, p. 2.
GESTiÓN

el modelo universidad-negocio. No sólo enfatiza la puntos fuertes de la Iglesia Católica, y se preguntan


"creencia en la importancia de las utilidades", sino que sobre las "oportunidades" y "amenazas" que le trae a
además agrega lo siguiente: "El presupuesto, herra- la Iglesia el siglo XXI. El lector interesado en la vida
mienta por excelencia para medir en términos cuanti- monástica y la teología (sobre esta última uno de los
tativos los resultados de una gestión y la evaluación autores del caso tiene una larga experiencia) encon-
presupuestal; métodos de control financiero como los trará en el escrito los anexos titulados "Código de
estados de pérdidas y ganancias, que permiten con- Derecho Canónico, Título XXI", "Decreto sobre la for-
trolar y evaluar los resultados económicos de una mación sacerdotal Optatam Totius Ecclesiae", y "Algu-
gestión; indicadores y métodos no financieros de con- nos principios y supuestos del método vivencial en
trol gerencial que alimentan igualmente el proceso grupos" 54.
decisorio, como índice de ausentismo, deserción y
En la próxima sección discutiremos literatura crítica
retención; satisfacción en el trabajo; clima organiza-
sobre los temas del Control Total de Calidad, los círcu-
cional; índices de estabilidad y rotación de personal,
los de calidad y la participación. Sin embargo, podría-
etc." 52
mos concluir esta parte del escrito retomando la obra de
Termina Serna con una pregunta para sus lectores: Baritz. Tal como él escribe: "Ya que tantos científicos
"¿Es un sueño el gerente universitario -administrador- sociales han estado dispuestos a servir al poder antes
líder y estratega? Su respuesta objetiva y crítica será que al intelecto, ellos tienen en sí mismos un estudio de
muy importante para reconstruir esa universidad con caso de manipulación por consentimiento" 55.
ganas de futuro eficiente y eficaz que todos anhela-
mos". El autor también recomienda la "planeación es-
La "Gerencia Democrática" y sus críticos
tratégica" en las universidades para que éstas identifi-
quen sus "fortalezas" y sus "debilidades", las
"oportunidades" y las "amenazas". El escrito trae "al- Graham Sewell y Barry Wilkinson, basados en sus
gunos consejos prácticos" y ofrece clisés para animar investigaciones ofrecen una interesante crítica a la
al acucioso aspirante a gerente universitario: "El gerencia del Control Total de Calidad, de la cual hace
estratega es prudente en la operación pero imaginati- parte, según ellos, los círculos de calidad. Toman de
vo en la acción" 53. Sin comentarios. Michel Foucault el concepto del Panóptico, un modelo
de prisión en forma cilíndrica concebido en el siglo
La planeación, en manos de los gerentes, contribu- XVIII. Según Foucault, el Panóptico, ya sea como
ye al proceso de control en las empresas. Así, los prisión, reformatorio o fábrica, induce en el individuo
consejos de manual son también ofrecidos por Ogliastri "un estado consciente y permanente de visibilidad que
en su Manual de planeación estratégica. Entre los garantiza el funcionamiento automático del poder [...]
casos del manual se encuentra uno sobre un semina- El Panóptico es una manera de disociar la pareja ver-
rio católico (escrito por Ogliastri, Mauricio Ferro y Jairo ser visto: en el anillo periférico, se es totalmente visto,
García), donde se intentó que los aprendices acepta- sin ver jamás; en la torre central, se ve todo, sin jamás
ran las jerarquías propias de la Iglesia, internalizando ser visto" 56. La clave del Panóptico es que el individuo,
la autoridad ellos mismos, algo "desde adentro y no aunque consciente de ser vigilado, no puede saber
impuesto desde arriba". Los autores formulan pregun- exactamente en qué momento lo hacen, lo cual facilita
tas al final del caso sobre los puntos débiles y los el control. Así, la analogía del Panóptico es aplicada

52 Serna, Op. cit., pp. 293, 337. Universidad Nacional, los profesores del Departamento de
Así, a finales de 1993, Raúl Sanabria, el decano de la Facultad Sicología fueron sometidos a igual procedimiento reciente-
de Administración de la Universidad de los Andes, presidió mente. Seguramente si a Sigmund Freud y a sus discípulos los
una reunión de profesores donde el informe de fin de año se hubieran conminado a programar su producción científica de
limitó básicamente a reportar los ingresos y egresos, y las acuerdo a los postulados empresariales de la planeación es-
ganancias producidas. El "éxito" de la gestión dependía del tratégica, hoy no tendríamos ni la literatura ni las técnicas del
balance económico a 31 de diciembre. psicoanálisis!
53 Serna, Op. cit., pp. 295, 314, 329, 343. 55 Baritz, Op. cit., p. 210.
Para una crítica al discurso de los gerentes, véaseJean-Pierre Véase también Stephen R. Barley, Gordon W. Meyer y Debra
Le Goff, Le mythe de I'enterprise. Critique de I'idéologie C. Gash, "Cultures of Culture: Academics, Practicioners and
managériale, L'Hartmattan, París, 1992, passim. the Pragmatics of Normative Control", Administrative Science
Quarterly, vol. 33, 1988, pp. 24-66.
54 Enrique Ogliastri, Manual de planeación estratégica, Tercer
Mundo Editores, Ediciones Uniandes, Bogotá, 1988, pp. 81- Para una comparación con intelectuales colombianos a suel-
83, 183-191, 194-197. do en los años 40 con los consultores contemporáneos,
Ahora se pone de moda la planeación estratégica en las uni- véase Eduardo Sáenz Rovner, La ofensiva empresarial. In-
versidades. Los profesores de la Facultad de Humanidades y dustriales, políticos y violencia en los años 40 en Colombia,
Ciencias Sociales y del departamento de Sicología de la Uni- Tercer Mundo Editores, Ediciones Uniandes, Bogotá, 1992,
versidad de los Andes tuvieron que sobrellevar a los instruc- capítulos 3 y 4.
tores llegados de la Facultad de Administración, que fueron a 56 Michel Fóucault, Vigilar y castigar. Nacimiento de la prisión,
hacerles la "planeación estratégica". Entendemos que en la Siglo XXI, Ciudad de México, 1993, pp. 204-205. 17
por Sewell y Wilkinson al Control Total de Calidad y al prevención rebelde de algunos trabajadores. Contrario
sistema Justo a Tiempo. En estos últimos hay una a la afirmación hecha por Ogliastri de que "... la partici-
asimetría de poder entre el observador y el observado, pación [en los círculos] es voluntaria", pertenecer a los
entre el patrono y el obrero 57. círculos no necesariamente ha sido un proceso entera-
mente voluntario, incluso en el Japón. Aún más, para
El Control Total de Calidad, donde el control estra- varios estudiosos del tema, los círculos de calidad
tégico de la firma es centralizado, conlleva dos fuerzas llevan incorporados elementos de lavado de cerebro,
disciplinarias y de control: en primer lugar, la vigilancia disminución de las actividades sindicales, ideología
que realizan mutuamente los trabajadores, con un conservadora inducida por los patronos, y presiones en
permanente escrutinio de control colectivo (el proceso
contra de los disidentes que no confían mucho en el
horizontal de control). Segundo, a través de sistemas
supuesto sistema de "consenso" recomendado por los
de informática más sofisticados, los gerentes pueden
consejeros de cabecera de los patronos".
vigilar en detalle el rendimiento y conducta de los
trabajadores (el proceso vertical de control). Como En un estudio de Guillermo Grenier (profesor en
escriben Sewell y Wilkinson: Florida International University) sobre el establecimiento
de los círculos de calidad en la empresa Ethicon-
Albuquerque, una subsidiaria de Johnson & Johnson
... el desarrollo y el continuo refinamiento de los
en los Estados Unidos, se encontró una serie de he-
sistemas electrónicos de vigilancia utilizando tecno-
logía basada en la informática puede proveer los chos cuando la gerencia inició un proceso para esta-
medios por los cuales la gerencia puede lograr los blecer la llamada "participación democrática":
objetivos que se derivan de la delegación de res-
- Los círculos se establecieron como una de las estra-
ponsabilidad a los círculos de trabajadores, mien-
tegias para evitar la consolidación del sindicato,
tras que conserva la autoridad y el control discipli-
nario a través de la posesión de la estructura de lográndose la expulsión de varios trabajadores.
vigilancia y la información que recoge, guarda y - La gerencia utilizaba su poder para contratar y can-
divulga. Existe ahora la posibilidad de crear un
celar contratos y así homogeneizar una fuerza de
Panóptico electrónico donde el ojo separado del
cuerpo puede superar las limitaciones de la arqui-
trabajo dócil.
tectura y el espacio para cubrir con su mirada vigi- - Se estigmatizaba a los trabajadores con sentimientos
lante la esencia misma del proceso de trabaio".
a favor del sindicato como "descarriados", donde sus
problemas eran supuestamente personales y no tenían
El taylorismo trajo problemas de desmotivación que nada que ver con la estructura de poder en la fábrica.
dieron como resultado problemas que incidieron en - La empresa, a través de un psicólogo industrial,
bajas en la productividad y en una relación más hostil realizaba encuestas donde en una forma velada se
entre los empleadores y los trabajadores. Con el nue- trataba de detectar qué obreros estaban dispuestos a
vo sistema de control, la información recogida es mu- unirse al sindicato.
cho más confiable, se elimina el grupo de burócratas y
capataces de control (la estructura piramidal del - La empresa, a través de un consultor, rotulaba a los
taylorismo) y se tiene un sistema de control e informa- trabajadores como "ganadores" o "perdedores" de-
ción mucho más eficiente. Así, con el Control Total de pendiendo de sus antipatías o simpatías gremiales.
Calidad y con los círculos de calidad el control estraté-
- La gerencia fragmentaba la solidaridad de los traba-
gico se centraliza aún más. Y al contrario de describir-
jadores como grupo al dividirlos en círculos de calidad.
los como una tendencia a la llamada "gerencia demo-
crática", éstos "representan una reafirmación de las - Los círculos eran utilizados como una cortina de
prerrogativas de los gerentes" 59. humo para cubrir un proceso de manipulación,
intimidaciones y cooptación.
Las reservas sobre las bondades del sistema del
Control Total de Calidad y de los círculos de calidad van - La libertad de expresión era supeditada a los cáno-
entonces mucho más allá de la supuesta ignorancia y nes aceptados en los ctrcutos".

57 Graham Sewell y Barry Wilkinson, "Someone to Watch Over 29,30,35. Martin Glaberman, "Afterword", en RadicalAmerica,
Me: Surveillance, Discipline and the Just-In-Time Labour vol. 18, No. 2-3, 1984, p. 37.
Process", en Sociology, vol. 26, No. 2, mayo de 1992, p. 274. El "consenso" en Matsushita, una firma japonesa, se construía
El artículo de Sewell y Wilkinson aparece publicado en caste- alrededor de los "Siete Valores Espirituales" predicados por la
llano en este número 5 de la revista INNOVAR. gerencia: (1) "Servicio nacional a través de la industria", (2)
58 Ibid., pp. 280, 283-284. "Honradez", (3) "Armonía y cooperación", (4) "Esfuerzo y
mejoramiento", (5) "Cortesía y humildad", (6) "Adaptación y
59 Ibid., pp. 275-277, 279, 289.
asimilación", (7) "Gratitud"; véase Itoh, Op. cit., p. 29.
60 Ogliastri, 1988, Op. cit., pp. 27-28.
61 Guillermo J. Grenier, Inhuman Relations. Quality Gire/es and
Eichi Itoh, "Labor Control Through Small Groups. Japanese Anti-Unionism in American Industry, Temple University Press,
18 Labor Today", en Radical America, vol. 18, No. 2-3, 1984, pp. Filadelfia, 1988, passim.
GESTiÓN

El autor concluye que los círculos de calidad Si esto sucede, la autoridad puede proclamar que la
"representan una amenaza sustancial en contra de desobediencia es un pecado y la obediencia una
los esfuerzos serios para democratizar el ambiente virtud; y una vez proclamado esto, los muchos pue-
den aceptar la obediencia porque es buena, y de-
de trabajo ... La participación [es] permitida sólo en
testar la desobediencia porque es mala, más bien
aquellas áreas que no afectan el control de la geren-
que detestarse a sí mismos por ser cobardes.
cia" 62.
Erich Frornrn
El libro de Grenier está muy bien sustentado y es
Sobre /a desobediencia y otros ensayos 64.
apasionante. Empezó como el trabajo de campo de
una tesis doctoral en una universidad norteamerica-
Gareth Morgan parte del supuesto de que una
na. Cuenta Grenier cómo antes de iniciar su estudio
organización se puede percibir -y construir- como un
él era un creyente en los círculos de calidad, y escri-
proceso de dominación cuando las metas de unos
be: "Mis ideas sobre la revolución gerencial, como las
pocos se alcanzan a través del trabajo de la mayoría.
de la mayoría de la gente, habían sido formadas por
Morgan se basa en Max Weber para estudiar los
los medios de comunicación. Entré al proyecto con-
procesos de dominación. Esta última puede resultar
vencido de que los círculos de calidad y sus deriva-
del uso de la fuerza y de las amenazas. O puede darse
dos eran esencialmente técnicas en favor del trabaja-
la dominación en formas más sutiles, donde los que
dor [y] diseñadas por los gerentes convencidos de
mandan creen tener el derecho de mandar, y los su-
que un trabajador feliz es mejor y más productivo. En
bordinados creen tener la obligación de obedecer 6S.
el caso de Ethicon-Albuquerque, en verdad [inicial-
mente] yo compartía con la opinión pública senti- Los ideológos de los empresarios sugieren que en
mientos de esperanza y gratitud con un empleador una organización, sus miembros -a todos los niveles-
tan progresista y que se había establecido en la tienen metas comunes. Esto "tiende a desaprobar la
región". Una vez que Grenier, a través de su trabajo discusión o a atribuirle motivos políticos. En resumen,
empírico, "perdió su inocencia" sobre los círculos de la política es vista como una palabra vulgar". Para
calidad, él y su familia empezaron a ser hostigados Morgan la política entendida como "un medio de crear
por la empresa 63. orden en medio de la diversidad para evitar formas de
La supuesta ideología del consenso termina cuan- gobierno autoritarias" es un aspecto esencial de la
do alguien se atreve a disentir y a cuestionar la retóri- vida de las organizaciones. Vista así, la política sería
ca de quienes ejercen el poder. Esto nos lleva al una forma de reconciliar las diferencias a través de la
siguiente tema sobre los conflictos, las jerarquías y la consulta y la negociación, reconociendo intereses di-
obediencia en las organizaciones. ferentes y evitando crear un orden social coercitivo 66.

Los conflictos de intereses son algo normal en


Conflictos y armonía en las organizaciones cualquier tipo de organización. Estos conflictos pue-
den ser explícitos o latentes. Sin embargo, los conflic-
tos tienden a entenderse por parte del poder como
Sin duda, la obediencia puede establecerse por la
algo "disfuncional", atribuible a circunstancias desafor-
mera fuerza. Pero este método tiene muchas des-
ventajas [...] Por ello la obediencia que sólo nace tunadas o a problemas de personalidad. Para el direc-
del miedo de la fuerza debe transformarse en otra tivo incapaz de reconocer el conflicto y la política
que surja del corazón del hombre. El hombre debe dentro de las organizaciones, "la autoridad formal [es]
desear e incluso necesita obedecer, en lugar de la única fuente legítima de poder, y por tanto reconoce
sólo temer la desobediencia. Para lograrlo, la autori- raramente el derecho o la habilidad de otros a influir en
dad debe asumir las cualidades del Sumo Bien, de el proceso administrativo". Este tipo de aproximación
la Suma Sabiduría: debe convertirse en Omnisciente. no sólo impide el normal flujo de ideas sino que tam-

62 /bid., p. 194. El mismo autor cita una serie de estudios tanto Para otros trabajos críticos sobre los esquemas de "participa-
empresariales como académicos que reportan que en muchas ción" propuestos por los patronos y sus consultores de cabe-
ocasiones, los círculos de calidad no necesariamente aumen- cera, véase Martin Glaberman, "Is it Quality or is it Control in
tan la productividad. Lo que los círculos sí logran es incrementar the Quality Control Circles?", en Labor Notes, No. 26, agosto
el control de la gerencia sobre los trabajadores; véaseGrenier, de 1981, pp. 9-10; W. Hansen, ''True Confession: My Life in a
Op. cit., pp. 9-10. Quality Circle", en Labor Notes, No. 26, agosto de 1981, pp.
8-9; Mike Parker, /nside the Circ/e: A Union Guide to QWL,
63 Incluso un detective privado, quien en el pasado había traba-
South End Press, Bastan, 1985; Mike Parkery Jane Slaughter,
jado en el FBI, merodeaba por su casa; véaseGrenier, Op. cit.,
compiladores, Choosing Sides: Unions andthe Team Concept,
pp. xvi, 147-148.
South End Press, Boston, 1988.
El libro de Grenier fue muy bien recibido por la comunidad 64 Erich Fromm, Sobre/a desobediencia y otros ensayos, Edicio-
académica; véase Jerry Lembcke, "Review", en /nternationa/
Journa/ o, Comparative sociotoqy, vol. 29, No. 3-4, 1988,
pp. 292-296; Y Nicole Woolsey Biggart, "Review", en 65
nes Paidós Ibérica, Barcelona, 1987, pp. 16-17.
Gareth Margan, /mages o,Organization, Sage Publications,
American Journa/
842-844.
o,Sociotoqy, vol. 95, No. 3, 1989, pp.
66
Beverly Hills, 1986, pp. 275-276.
/bid., p. 142. 19
bién lleva a percibir los sindicatos y cualquier tipo de miento católico de derecha. El libro enaltece las virtu-
agremiación como una "calamidad" que entra a reñir des del Evangelio, condena el aborto como algo "malo",
no sólo con la autoridad sino también con un supuesto se preocupa por comprobar la inmortalidad del alma y
clima de armonía polltica'", la existencia de Dios, y resalta cómo el hombre peca
pero la Divina Providencia lo saca adelante".
Hay formas de pensamiento que tienden a negar el
conflicto, en la medida en que este último representa Que un escrito como el de Polo sea un texto central
un reto al poder y a las jerarquías. Gustavo González - utilizado por González para sus cursos sobre Gestión
quien también ha sido profesor de la Facultad de Pública no pasaría de ser un ejercicio que tendrían
Administración de la Universidad de los Andes, y hoy que aceptar los estudiantes. Pero la aparente ingenui-
en día es vicerrector de la misma institución- en su dad de este texto "espiritual" -y sus implicaciones en la
escrito ¿ Proyección social de la universidad? ¿ O del formación de los estudiantes de Administración- toma
país sobre la universidad?, mezcla el neoliberalismo materia cuando Polo trata los temas del poder y la
económico en boga con los postulados de una vertien- obediencia. Escribe Polo:
te en particular del catolícísrno".
González anhela la armonía entre el capital y el Otra tendencia humana que tiene que ver con la
trabajo. Esta armonía puede ser felizmente lograda ética es el poder. Tomas de Aquino señala que sin
obediencia no hay sociedad posible. Se entiende
-según él- bajo el empresario "virtuoso". El empresa-
por obediencia la tendencia del hombre a cumplir
rio, a su vez, tiene la opción de ser "virtuoso" o "vicio-
órdenes. Esta tendencia se corresponde con la exis-
so", dado que el ser humano está "internamente dividi- tencia de órdenes. En la sociedad hay quien manda
do y dotado de tendencias, las que por sus hábitos, y quien obedece y, por tanto, no hay vida social sin
libremente adquiridos, torna en vicios o virtudes". Se- poder",
gún González el mejor camino para alcanzar la "virtud"
es buscar la "verdad", aquella que ha sido, según él,
El libro de Polo, profesor de la Universidad de
"corroborada y elevada a su más alta expresión gra-
Navarra, entidad fundada por el Opus Dei, fue publica-
cias a la Revelación".
do por Ediciones Rialp, empresa que a su vez edita los
Después de citar los Evangelios, presentar una trabajos del Opus Dei en España". Dada la cercanía
versión del mundo dividido entre el "vicio" y la "virtud", entre el Opus Dei y grupos de empresarios, esto nos
defender el statu qua bajo la comandancia de los lleva a presentarle al lector algunas notas sobre la
empresarios "virtuosos", González termina exhortan- Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz y del Opus Dei,
do al lector a aceptar "las limitaciones del conocimien- conocida simplemente como el Opus Dei (o la "Obra").
to humano", defiende la tradición y cuestiona la heren-
El Opus Dei fue fundado en España en 1928 por el
cia filosófica que "echa por tierra todo el pasado", y
cura José María Escrivá de Balaguer. El Opus Dei
justifica el poder ya que éste se puede ejercer "como
servicio" 69. apoyó la dictadura de Primo de Rivera, y después,
durante la República e influido por Acción Española,
González reconoce la fuente intelectual que le per- un grupo de derecha, confirmó su posición promonar-
mitió ordenar sus argumentos alrededor de esta visión quista y antidemocrática. El Opus Dei fue uno de los
del mundo. Escribe él: "El haber caído en cuenta ... se lo pilares de la larga dictadura de Francisco Franco.
debo al curso que dictó el profesor Leonardo Polo sobre Varios de los más influyentes ministros del Generalísi-
antropología trascendental (Universidad de la Sabana, mo eran miembros de esta orqanización".
1991) ya su libro reciente Quién es el hombre" 70.
Hay integrantes del Opus Dei que echan gotas de
El trabajo de Leonardo Polo, que influyó tan decisi- agua bendita en la cama antes de acostarse para
vamente sobre González, se sitúa dentro del pensa- evitar las tentaciones de la carne. Así las cosas, no es

67 Ibid., pp. 155, 187. 73 Véase Michael Walsh, Opus Dei. An Investigation into the
68 Gustavo González C., ¿Proyección social de la universidad? Secret Society Struggling for Power within the Roman Catholic
¿ O del país sobre la Universidad? (Ensayo sobre ética y edu- Church, HarperCollins Publishers, Nueva York, 1992, pp. 12,
cación superior); Monografías, Facultad de administración, 36.
Universidad de los Andes, No. 37, mayo de 1994. El libro de Walsh sobre el Opus Dei, bastante revelador,
69 Ibid., pp. 6-9, 13, 15-16. mereció una airada respuesta por parte de esta organización
donde lamentaron no haber podido demandar al autor y a la
70 Ibid., p. 8, nota 6.
editorial, después de haber intentado, sin éxito, evitar la
71 Leonardo Polo, Quién es el hombre, Ediciones Rialp, Madrid, publicación del trabajo crítico; véase William O'Connor, Opus
1991, pp. 88, 112, 117, 170-171, 193,200,224 Y ss. Dei. An open Book. A Repply to The Secret World of Opus
72 Polo, Op. cit., p. 118. El corolario a lo anterior lo encontramos Dei by Michael Walsh, The Mercier Press, Dublin, 1991,
en la siguiente frase: u¿A quién se debe piedad? En especial passim.
a Dios, a los padres y a la patria"; véase Polo, Op. cit., p. 132. 74 Norman B. Cooper, Catholicism andthe Franco Regime, Sage
Otros trabajos de Polo son El ser: la existencia extramental y El Publications, Beverly Hills, 1975, pp. 20-21, 27. Walsh, Op.
20 acceso al ser, ambos publicados por la Universidad de Navarra. cit., pp. 15, 133-135.
GESTiÓN

de extrañar que su fundador haya muerto "en olor de los centros que dependían de la Universidad de Na-
santidad" 75. El agua bendita, sui generis protección varra".
ante los trucos del demonio y la carne, sería inocua si
Así las cosas, es interesante notar cómo diversas
la autocensura no incluyese los tipos de lectura reco-
ideologías de derecha llegan por diferentes medios a
mendados a los buenos católicos. Tal como ordena la
los estudiantes de administración en las universidades
Máxima 339 de Camino, la guía espiritual preparada
colombianas. En las próximas secciones pasaremos a
por Escrivá de Balaguer para sus seguidores:
analizar como diferentes metodologías dejan un vacío
Libros: no los compres sin aconsejarte de personas académico considerable en la enseñanza y la investi-
cristianas, doctas y discretas. Podrías comprar una gación en administración.
cosa inútil o perjudicial. Cuántas veces creen llevar
debajo del brazo un libro ... y llevan una carga de
basural". El método del caso
Escrivá de Balaguer es muy claro sobre sus con-
ceptos en cuanto a la obediencia y las jerarquías. Sus El método del caso fue una aplicación directa a
máximas sobre estos temas rezan así: adultos inteligentes y bien preparados de algunos
de los métodos [utilizados] con niños y con retarda-
Obedeced, como en manos del artista obedece un dos.
instrumento -que no se para a considerar por qué Charles W. Eliot,
hace esto o lo otro-, seguros de que nunca se os Rector de la Universidad de Harvard
mandará cosa que no sea buena y para toda la entre 1869 y 1909 79.
gloria de Dios.
Jerarquía. Cada cosa en su lugar.
[El método del caso] no provee una forma ideal de
Obedecer, camino seguro. Obedecer ciegamente al
comunicar conceptos y métodos analíticos.
superior, camino de santidad. Obedecer en tu
apostolado, el único camino: porque, en una obra
de Dios, el espíritu ha de obedecer o marcharse 77. Derek Bok,
Rector de la Universidad de Harvard,
Reporte anual de 1977-197880•
La Universidad de Navarra se fundó por parte de
Escrivá de Balaguer en 1952. Años después, en 1958,
el Opus Dei fundó en Barcelona el Instituto de Estu- El método del caso fue desarrollado en la Escuela
dios Superiores de la Empresa -IESE- como uno de de Derecho Harvard en la década de 1870. Se imple-

75 Andrew Byrne, "Opus Dei", Gran Enciclopedia Rialp, Edicio- ciones Científicas (CSIC) de 1939 a 1966. A través del CSIC
nes Rialp, Madrid, 1981, tomo 17, p. 347. Walsh, Op. cit., pp. se distribuía dinero para la educación superior y se podía
15,27. escoger estudiantes con una ideología favorable al régimen
76 José María Escrivá de Balaguer, Camino, Impresora Insur- de Franco. La ideología del Opus concilia el autoritarismo
gentes, Ciudad de México, 1949, p. 120 (Camino fue publicado político y las jerarquías con el/aissez-faire en economía.
por primera vez en España en 1939). Véase Martin Edwin Andersen, Dossier Secreto. Argentina's
77 Máximas 617,624,941, en Escrivá de Balaguer, Op. cit., pp. Desaparecidos and the Myth ofthe "Dirty War",Westview Press,
214,323. Boulder, 1993, pp. 54, 185. Cooper, Op. cit., pp. 22-23, 26.
Abraham Guillén, La "élite" del poder en España. La sociedad
La derecha latinoamericana también ha estado muy influida secreta del "Opus Del', Editorial Aconcagua, Montevideo, 1973,
por el Opus Dei. En esto han participado grupos de laicos pp. 124-125. Mauro F. Guillén, La profesión de economista. El
afiliados al Opus, así como miembros de la jerarqu ía eclesiás- auge de economistas, ejecutivos y empresarios en España,
tica. Hay autores que argumentan que las dictaduras militares Editorial Ariel, Barcelona, 1989, pp. 203-204. Martin Lee, "Their
en Chile y en Argentina han tenido nexos con el Opus Dei. Por Will Be Done", en, MotherJones, julio de 1993, p. 36. Penny
ejemplo, Patria y Libertad y el Opus Dei trabajaron conjunta- Lernoux, Cry of the People. The Struggle for Human Rights in
mente en los movimientos de oposición a Salvador Allende en Latin America, Penguin Books, Nueva York, 1982, pp. 305,
Chile; el general Juan Carlos Onganía dio un golpe de estado 307. Charles A. Reilly, "Latin America's Religious Populists",
en Argentina en 1966 después de haber realizado un retiro en, Daniel H. Levine, compilador, ReligionandPoliticalConflict
"espiritual" patrocinado por el Opus Dei (varios miembros del
in Latin America, The University of North Carolina Press, Chapel
gabinete de Onganía pertenecían a esta organización). Tam- Hill, 1986, p. 51. Brian H. Smith, The Church and Politics in
bién se ha reportado de militares, quienes han hecho parte de
Chile. Challenges to Modern Catholicism, Princeton University
la lucha contraguerrillera en el continente y que han tenido
Press, Princeton, 1982, pp. 140,338. Walsh, Op. cit., pp. 132,
nexos con el Opus Dei. 135.
El Opus Dei ha tenido mucha influencia en el sistema educa-
78 Carlos E. Eguía, "Navarra, Educación y Enseñanza", en Gran
tivo de varios países. Después de la purga de profesores pro-
Enciclopedia Rialp, Op. cit., tomo 16, p. 648.
gresistas en la Universidad Católica en Santiago, miembros
del Opus se volvieron muy influyentes en diferentes facultades 79 Charles Eliot, A Late Harvest. Miscellaneous Papers Written
de esa universidad. Así el Opus tuvo una gran influencia tanto Between Eighty and Ninety, The Atlantic Monthly Press, Boston,
en el gobierno como en el sistema educativo del Chile de 1924, p. 53.
Pinochet. En España, José María Albareda Herrera, del Opus 80 Citado por J. Paul Mark, The Empire Builders: Inside the Harvard
Dei, fue Secretario General del Consejo Superior de Investiga- Business School, William Morrow, Nueva York, 1987, p. 55. 21
mentó en la Escuela de Negocios de Harvard desde hacerle injusticia al carácter intrínseco de la historia
1908 tomando prestados algunos casos utilizados en como disciplina" 84.
la Escuela de Derecho. El método del caso se ha Para ilustrar el punto anterior, tenemos el caso
utilizado en las escuelas de negocios y de derecho escrito por Enrique Ogliastri y titulado Cien Años de
como una herramienta pedagógica para mejorar la Cerveza Bavaria. Ogliastri desconoce la literatura bá-
habilidad de los ejecutivos y de los estudiantes en la
sica en historia económica. El caso está escrito en un
toma de decísíones'".
tono apologético sobre esta empresa monopólica. Su
Su carácter supuestamente democrático y partici- cubrimiento de los asuntos laborales es superficial y
pativo ha sido cuestionado desde dos ángulos: patronal y se enmarca en la literatura que busca la
armonía en las organizaciones; de ahí que pretenda
(1) El método del caso toma el statu quo por garan-
explicar cómo los conflictos se resuelven simplemente
tizado, como una norma a la cual hay que adaptarse.
con "laboratorios vivenciales en la empresa". El escrito
Supone que el profesor es políticamente neutral. Pero
gira en torno a analizar la política de negocios, aproxi-
como escribió Ralph Nader, el método del caso de
mación que sería criticada por historiadores como Barry
Harvard crea "gigantes analíticos pero pigmeos mora-
Supple quien calificaría dicho enfoque como "estre-
les". Cuando se utiliza con ejecutivos, el método del
cho" 85.
caso no cuestiona ni sus valores ni las políticas de sus
empresas": El método del caso, aunque académica y política-
mente cuestionable, puede ser muy rentable. Tal como
(2) En el método del caso, de todas maneras el
escribe un estudioso del tema: "... los programas para
profesor desempeña un papel directivo que influye en
ejecutivos en ejercicio y la utilización del método del
los argumentos de los estudiantes. Esta influencia va
caso, que requiere realizar trabajo de campo en em-
de "moderada", a la de convertir al profesor en la
presas, cumplen la función latente de proporcionar a
"atracción estelar". En el método del caso "el profesor
los profesores de las escuelas de negocios contratos
domina las interacciones en el salón de clases" 83.
de asesoramiento" 86.
El asunto se complica aún más cuando se preten-
de hacer investigación a través del método del caso.
Para Barry Supple, intentar escribir historia a través La historia empresarial y la histioria
del método del caso no contribuye mayor cosa para como disciplina
que se pueda entender la dinámica de cambio del
mundo de los negocios. Además, según otro académi- A menudo, los directores [de las empresas] fracasan
co, "... los casos no son buena historia. Pueden ser en apreciar que la historia empresarial es una tarea
metodológicamente erróneos, ya que su utilización de altamente especializada que puede ser emprendida
fuentes primarias y secundarias a menudo parece exitosamente por escritores entrenados en este cam-
po de estudio. Una vez que la Junta [directiva] coloca
selectiva y diseñada para sacar a relucir algunos te-
la tarea en manos no experimentadas, los resultados
mas en particular. Como consecuencia, carecen de
desafortunados acontecen inevitablemente.
perspectiva". Otros historiadores concluyen que "... el
estudio de caso -una forma favorita de presentar el T. C. Barker,
material en la educación en administración- puede "Business History and the Business-man" 87.

81 Amy R. Mc Aninch, Teacher Thinking and the Case Method. El facilismo intelectual y la búsqueda de resultados económi-
Theory and Future Directions, Teachers College Press, Nueva camente "prácticos" se ven reflejados en otro manual: "Nues-
York, 1993, pp. 63-64, 74-76. Pearson Hunt, ''The Case Method tro propósito no es preparar eruditos o bibliotecas ambulantes
of Instruction", en Harvard Educational Review, vol. 21, No. 3, sino hombres de acción a los que se va a medir por resultados
1951, p. 176. que obtengan y no por el cúmulo de conocimientos que po-
82 Hunt, Op. cit., p. 190. Mc Aninch, Op. cit., p. 67. Chris Argyris, seen". Y "Un buen caso, si corto, dos veces bueno [...] por
"Some Limitations of the Case Method: Experiences in a disciplinados que sean los estudiantes no preparan suficien-
Management Development Program", en, Academy of temente los casos de más de treinta páginas, lo que es un
Management Review, vol. 5, No. 2, 1980, p. 291. desastre para la sesión, para el curso y para el aprendizaje".
Para cada una de las citas, véase Manuel Rojo Alejas, "El
83 Arch R. Dooley y Wickham Skinner, "Casing Case Methods", método del caso", y Enrique Ogliastri, "Cómo escribir un caso?",
en, Academy ofManagement Review, vol. 2, No. 2,1977, p. ambos en Enrique Ogliastri, compilador, Casos sobre casos;
281. Argyris, op. cit., p. 292. Argyris agrega: "... Ios profesores Monografías, Facultad de Administración, Universidad de los
se pueden comportar de una manera que no concuerda con lo Andes, Bogotá, 1993, pp. 77,156.
que predican y esta disonancia no es discutible en el salón de
ciase ... la teoría del aprendizaje predicada por los profesores 85 Enrique Ogliastri, Cien Años de Cerveza Bavaria; Monografías,
es significantemente diferente a sus acciones ..."; véaseArgyris, Serie Casos, Facultad de Administración, Universidad de los
Op. cit., p. 295. Andes, No. 16, febrero de 1990, passim; Barry Supple, "The
Uses of Business History", en Business History, volA, No. 2,
84 A.M. Bourn, "Business History and Management Education", junio de 1962, p. 82.
en Business History, vol. 17, No. 1, enero de 1975, p. 20.
Graeme Holmes y Henri Ruff, "The Perils of Entrepreneurial 86 Mauro F. Guillén, Op. cit., p. 230.
History", en Business History, vol. 17, No. 1, enero de 1975, p. 87 T. C. Barker, "Business History and the Business-man", en
22 40. Business History, vol. 1, No. 1, diciembre de 1958, p. 17.
GESTiÓN

El especialista en historia empresarial es primero y misma universidad". El grupo de académicos adscri-


por encima de todo un historiador. tos al Centro tenían una formación bastante sólida en
Graeme Holmes y Henri Ruff, teoría económica y en historia económica.
"The Períls of Entrepreneuríal History" 88.
Entender el problema del contexto económico y
una formación como historiador son claves en la
En nuestro medio los intentos de hacer historia historia empresarial. Un simple "análisis del entorno"
por parte de aficionados son bastante comunes. Los (tal como se formula en algunas facultades de admi-
resultados no son los mejores. De ahí que el historia- nistración) y una narrativa espuria serían insuficien-
dor Charles Bergquist señala las falencias de este tes. De ahí que tanto en Europa como en los Estados
tipo de producción: no se hace una revisión exhausti- Unidos, hoy día, los especialistas en historia empre-
va de la literatura secundaria, no se realiza un trabajo sarial son historiadores profesionales. Incluso, aca-
juicioso de archivos -después de todo, la démicos que trabajan el campo en facultades
materia prima- y se fracasa en estable- de administración en los Estados Unidos, como
cer interrelaciones entre diferentes as- el mismo Alfred Chandler, han recibido su
pectos de la realidad. Además, entrenamiento profesional como historia-
Bergquist señala la rigurosidad con dores. Chandler, por ejemplo, recibió
que son preparados los estudiantes sus títulos de pregrado, maestría y
de historia en los programas docto- doctorado en los departamentos de
rales en los Estados Unidos, lo que historia de las universidades de
contrasta con el carácter poco pro- Harvard y North Carclina".
fesional de buena parte de lo que
Regresando al caso colombiano, los
se pretende hacer pasar como his-
autores del reporte de la Misión de Cien-
toria en nuestro país".
cia y Tecnología sobre las facultades de
Las críticas a la historia no Administración en Colombia anotan: "...dis-
profesional también provienen de poner de profesorado de alto nivel prepa-
los especialistas en business rado específicamente para realizar inves-
history. Para Barry Supple, una his- tigación [en historia empresarial] debe ser
toria no profesional tiene el riesgo una prioridad de primer orden". Además
de terminar "en historia de folleto ... la uno de los autores del reporte, en otros
cual combina elogios ilimitados con escritos, anuncia que existe un proyecto
listas cronológicas y especificaciones en historia empresarial en la Universidad
de productos" 90. de los Andes y advierte sobre "el papel pionero de
[esta universidad] en este campo no solo en Colombia
A finales de la década de los años 40, Thomas sino en América Latina", recordando que la historia
Cochran y Leland Jenks fueron invitados a Harvard empresarial "será una de las áreas de trabajo para el
como profesores visitantes en historia empresarial. Ph.D. en Administración" en su facultad. Esfuerzos tan
Estos esfuerzos fueron canalizados a través de la encomiables merecen ser comentados en esta sec-
creación de un Centro de Historia Empresarial en la ción. Sin embargo, tenemos serias reservas, no sólo

88 Graeme Holmes y Henri Ruff, Op. cit., p.27 90 Supple, Op. cit., p. 84.
89 Charles Bergquist, "En nombre de la historia: Una crítica dis- 91 "The Origins of the Harvard Research Center", Explorations
ciplinaria de la Historia Doble de la Costa de Orlando Fals in Entrepreneurial History(en adelante, citado como E.E.H.),
Borda", en Anuario Colombiano de Historia Social y de la vol. 1, No. 1, enero de 1949, p. 2; Robert F. Hebert y Albert
Cultura, No. 16-17, 1988-1989, pp. 205-229. N. Link, The Entrepreneur, Praeger, Nueva York, 1982, p.
Sobre el oficio del historiador y su formación, véase Bernard 86.
Bailyn, On the Teaching and Writing of History, Montgomery
Endowment, Darmouth College, Hanover, New Hampshire, El Centro de Historia Empresarial de Harvard atrajo rápida-
1994; L. P. Curtis, Jr., Eltal/erdel historiador, Fondo de Cultura mente un buen número de académicos de renombre. Véase
Económica, Ciudad de México, 1975; Peter Novick, The Thomas K. McCraw, "Introduction: The Intellectual Odyssey of
"Objectivity Question" and the American Historical Profession, Alfred D. Chandler, Jr.", en Thomas K. McCraw, compilador,
Cambridge University Press, Cambridge, 1988. The Essential Alfred Chandler. Essays Toward a Historical
Theory of Big Business, Harvard Business School Press,
La preparación de un historiador profesional (orientado hacia Boston, 1988, pp. 6-7.
la docencia y la investigación en el mundo universitario) tiene
en los Estados Unidos la misma rigurosidad que podrla tener 92 T.C. Barker, Op. cit., p. 17; Mc Craw, en McCraw, Op. cit., pp.
la formación de un médico o la de un científico en cualquiera 3-6; Supple, Op. cit., pp. 87-88; Peter L. Payne, Rubber and
de las ciencias naturales. En el medio colombiano, mientras Rai/ways in the Nineteenth Century: A Study of the Spencer
existen muchas prevenciones contra el "tegua" o "matasanos" Papers, Liverpool University Press, Liverpool, 1961, p. viii;
que pretende pasar por médico, todavía se entienden las cien- Peter L. Payne, "The Uses of Business History: A Contribution
cias sociales y las humanidades como aficiones o simple "cul- to the Discussion", en Business History, vol. 5, No. 1, diciem-
tura general". bre de 1962, pp. 14, 17.
23
sobre las pretensiones ya mencionadas de liderazgo a Además, Hagen no
nivel nacional, aún más continental, sino también so- pretendió que su estudio ........ _ ........
bre la posibilidad de construir un área de historia em- fuese definitivo. Tal como
presarial como uno de los ejes de un programa de él señala, le llamó la aten-
Ph.D. basándose en pretensiones y no en realidades, ción (como sucedió y su-
tal como discutiremos a continuación en detalle". cedería con académicos
de diferentes generacio-
Carlos Dávila publicó un libro titulado El empresa-
nes) la preponderancia de
riada colombiano, una perspectiva histórica, donde
empresarios de origen an-
cubre un grupo de empresarios de la Sabana de Bogo-
tioqueño en Colombia.
tá y del Valle del Cauca y discute el tema del empresa-
Hagen creyó identificar en
riada en el desarrollo económico de Antioquia. En este
el prototipo del burgués
último tema, Dávila ataca las ideas del economista
antioqueño al empresario
Everett Hagen. Para Dávila las hipótesis de Hagen
innovador schumpeteria-
sobre Antioquia merecen varios calificativos: "simplis-
no. Tampoco es cierto que
tas", no están sustentadas "mediante la investigación
Hagen haya desechado de "un brochazo" como anotó
(histórica) rigurosa", presentan "falta de rigor en el uso
Dávila, los diferentes factores económicos y sociales
de la información", no precisan los periodos históricos,
que hicieron parte del desarrollo económico de la re-
lo llevan a formular una "afirmación alegre y no docu-
gión antioqueña. Así Hagen haya visto una significa-
mentada", y tratan "de forzar la realidad dentro de una
ción especial en factores psicológicos y patrones de
explicación traída de los cabellos" 94.
socialización familiar (los cuales no pueden ser recha-
Sin embargo, Dávila no aporta nada nuevo y con- zados por ningún académico serio), él analiza diferen-
tundente a las críticas académicas al trabajo de Hagen tes explicaciones y concluye que sólo la combinación
que ya habían sido formuladas por historiadores nor- de factores psicológicos, económicos y sociales expli-
tearnericanos". Sin embargo, sus comentarios y des- ca "la preponderancia [de los antioqueños] en las em-
calificaciones del trabajo de Hagen y de otros científi- presas económicas" 97.
cos sociales no son siempre bien fundamentados y
merecen una discusión detallada. Para empezar, pre- Los académicos que trabajaron sobre la historia
tender -como lo hace Dávila- que el trabajo de Hagen empresarial y las conexiones entre cultura y desarrollo
era simplemente el resultado de los planes norteame- económico en el Centro de Historia Empresarial de
ricanos de modernización del continente a imagen y Harvard en el periodo de la posguerra (Alexander
semejanza de los Estados Unidos, sería simplificar Gerschenkron, Osear y Mary Handlin, Leland Jenks,
demasiado e ignoraría otras influencias intelectuales David Landes, John Sawyer, entre otros) discutieron
muy importantes sobre Hagen: no sólo las teorías de estos temas independientemente de los planes norte-
Max Weber y Talcott Parsons, sino también las ideas americanos de modernizar al mundo a su imagen y
del concepto del empresario innovador de Joseph semejanza. Sólo casi diez años después de haber
Schumpeter y los estudios psicoanáliticos de Erik sido fundado el Centro empezaron a efectuarse estu-
Erikson'". dios históricos sobre el Tercer Mundo, entre ellos el

93 Rodríguez, Dávila y Romero, Op. cit., p. 59. Dávila, mayo de Development;a Study, Irwin, Homewood, 1963; TheEconomics
1991, Op. cit., pp. 91-92. Carlos Dávila, memorando, "Historia ofDevelopment, Irwin, Homewood, 1975 (este último libro fue
empresarial en la Facultad de Administración de Uniandes. Un publicado inicialmente en 1968).
curso, unas investigaciones y unas oportunidades", marzo 23
95 Véase Frank R. Safford, "Significación de los antioqueños en
de 1993, Area de Gestión, fotocopia. "Cursos del Doctorado
el desarrollo económico colombiano: Un examen crítico de la
en Administración", Op. cit., pp. 2-4.
tesis de Everett Hagen", en Anuario Colombiano de Historia
En el medio colombiano son frecuentes las críticas a la calidad Social y de la Cultura, No. 3, 1965, pp. 49-69. Ann Twinam,
de los programas de pregrado y maestría. Ahora la "feria de los "Enterprise and Elites in Eighteenth-Century Medellín, en,
doctorados" en diversas disciplinas (sin bibliotecas adecua- Hispanic American Historical Review, vol. 59, No. 3, agosto de
das, sin doctores o con eternos "candidatos" a doctor, y con 1979. pp. 444-475; "From Jew to Basque, Ethnic Myths and
profesores enseñando en campos ajenos a su preparación Antioqueño Entrepreneurship", en Journal of Inter-American
académica), entra a hacer parte de la oferta de ilusiones que Studiesand WorldAffairs, vol. 22, febrero de 1980, pp. 81-1 01;
brinda el "mercado" académico. Miners, Merchants and Farmers in Colonial Colombia, The
94 Carlos Dávila Ladrón de Guevara, El empresaria do colom- University of Texas Press, Austin, 1982.
biano. Una perspectiva histórica, Pontificia Universidad 96 Dávila, 1986, Op. cit., pp.143-144.
Javeriana, Bogotá, 1986, pp. 97-98, 100, 102-103, 105-
106, 108. Everett Hagen, On the Theory of Social Change: El mismo Alfred Chandler reconoce su deuda intelectual con
How Economic Growth Begins, Dorsey Press, Homewood, la sicología y la sociología. Véase Alfred Chandler, "Comment
1962. ron the New Economic History)", y "Business History as
Institutional History", en McCraw, compilador, Op. cit., pp. 294,
Hagen fue uno de los economistas más respetados de su
304.
generación. Además del trabajo ya mencionado, entre sus
obras se encuentran las siguientes: Handbook for Industry 97 Dávila, 1986, Op. cit., p. 98; Hagen, 1962, Op. cit., pp. 364,
24 Studies, Free Press, Glencoe, 1958; Planning Economic 367-368,372-379.
GESTiÓN

clásico escrito por el historiador de izquierda Stanley qué bases hace el profesor del M.I.T. esta afirma-
Stein sobre una región cafetera del Brasil. Desde un ción?", no merecería más comentarios".
comienzo, los académicos del Centro fueron influidos
por trabajos de teóricos como Joseph Schumpeter, Dávila también critica el trabajo de historia económi-
quien, a su vez, era heredero de la escuela histórica ca de Paul McGreevey. En su crítica tampoco hay nada
alemana. El pensamiento económico e histórico ale- nuevo, ya que este trabajo ya había sido discutido por
mán del siglo XIX y comienzos del XX evolucionó en un grupo de historiadores y economistas nacionales y
formas diferentes de como lo hizo en Inglaterra y extranjeros. Otro académico norteamericano, Aaron
Francia. La escuela histórica alemana enfatizaba el Lipman, recibe igual tratamiento por parte de Dávila.
estudio de la sicología del individuo para entender la Para este último, Hagen, McGreeveyy Lipman "dejaron
conducta de los agentes económicos'". una herencia muy negativa que aún hoy en día pesa
sobre la temática de la actividad empresarial como objeto
Dávila cuestiona las observaciones de Hagen so- de estudio". Obviamente, no compartimos una afirma-
bre la "necesidad de agresión" (Uneed aggression') en ción tan apresurada. Lipman, quien escribió un libro en
Colombia, particularmente en Antioquia. Sin embargo, el cual planteaba una discusión sobre el papel de los
una lectura cuidadosa y abierta de Hagen en este empresarios extranjeros en Colombia, también propu-
tema sería también muy apropiada. Él escribió que la so hace tres décadas un campo de estudio que ha sido
"necesidad de agresión ... es tan conspicua que esto ignorado en las universidades colombianas: el papel de
debe señalarse". Además, indicó varios ejemplos de los empresarios de origen extranjero en el desarrollo
agresión, descomposición familiar y violencia cotidia- económico de Colombia y por qué los inmigrantes y sus
na en el Medellín de 1957 (jhace casi 40 años!). descendientes, siendo una proporción ínfima de la po-
Aunque, desafortunadamente, Hagen no profundizó blación del país, tienen tanto peso en la clase empresa-
en este tipo de observaciones, éstas resultan en ver- rial. Esta pregunta es señalada por autores como
dad interesantes, sobre todo si se tiene en cuenta que Salomón Kalmanovitz quien sugiere que el tema mere-
en la década de los años 50 (y hasta hace muy poco ce una serie de estudios empiricos'?'.
tiempo), se consideraba que la violencia en Colombia
era un fenómeno rural y se idealizaba a Medellín como La discusión de Dávila sobre los empresarios del
"la tacita de plata". Por tanto, la pregunta que se hizo Valle del Cauca y la Sabana de Bogotá se limita a un
Dávila sobre estas observaciones de Hagen: "¿sobre número muy escaso de fuentes secundarias. Varias

98 Véase Arthur H. Cole, compilador, Change and Entrepreneurship, La edición castellana fue publicada poco después: Historia
Harvard University Press, Cambridge, Massachusetts, 1949, económica de Colombia, 1845-1930, Ediciones Tercer Mun-
passim; Alexander Gerschenkron, "Social Attitudes, do, Bogotá, 1975. Las críticas al trabajo de McGreevey fueron
Entrepreneurship, and Economic Development", en EE.H., vol. recogidas en Instituto de Estudios Colombianos, compilador,
VI, No. 1, octubre de 1953, pp. 3-5, 11; Osear Handlin, "A Note Historia económica de Colombia. Un debate en marcha, Bi-
on Social Mobility and the Recruitment of Entrepreneurs in the blioteca Banco Popular, Bogotá, 1979. En una visión más
United States", en EEH., vol. VIII, Suplemento de Invierno, equilibrada, el historiador David Bushnell considera que el
1956, p. 3; Osear y Mary Handlin, "Ethnic Factors in Social trabajo de McGreevey, a pesar de sus "descuidos ... en deta-
Mobility", en E.E.H., vol. IX, No. 1, octubre de 1956, pp. 4-5; lles" es "perspicaz" (insightful); véase David Bushnell, The
David S. Landes, "A Noie of Cultural Factors in Entrepreneurship", Making of Modern Colombia. A Nation in Spite ofltself, University
en E.E.H., vol. 1. No. 1, enero de 1949, p. 8; David S. Landes, of California Press, Berkeley, 1993, p. 313.
John E. Swayery Alexander Gerschenkron, "Research Notes", Aaron Lipman, El empresario bogotano, Ediciones Tercer
en EE.H., vol. VI, No. 4, mayo de 1954, pp. 245-297, passim; Mundo, Bogotá, 1966. Para el tema de los empresarios
Hebert y Link, Op. cit., pp. 73-79, 86; Stanley Stein, Vassouras: extranjeros en Colombia, véase la sección "La burguesía
A 6razilian Cortee County, 1850-1890, Harvard University Press, inmigrante", en Salomón Kalmanovitz, Economía y nación.
Cambridge, Massachusetts, 1957, passim. Una breve historia de Colombia, Cinep, Universidad Nacio-
Sobre la vinculación de Stein ai Centro de Historia Empresarial nal de Colombia, Siglo XXI Editores, Bogotá, 1985, pp.
en Harvard, véase Arthur H. Cole, Business Enterprlse in Its 323-325.
Social Setting, Harvard University Press, Cambridge, Los países de América Latina que han recibido una conside-
Massachusetts, 1959, p. viii. rable inmigración extranjera han merecido un buen número de
estudios al respecto. Sobre inmigración, empresariado, y com-
Para las discusiones iniciales de los historiadores del Centro
paraciones entre criollos e inmigrantes, en términos de movi-
de Historia Empresarial sobre el mundo no Occidental, véase
lidad social, véanse, entre otros: Thornas C. Cochran y Rubén
Kee II Choi, "Tokugawa Feudalism and the Emergence of the
Reyna, Capitalism in Argentine Culture. A Study of Torcuato Di
New Leaders of Early Modern Japan", en EEH., vol. IX, No.
Tella and S. I.A. M. , Universityof Pennsylvania Press, Filadelfia,
2, diciembre de 1956, pp. 72-90; Khodadad Farmanfarmaian,
1971, passim; Thomas H. Holloway, Immigrants on the Land.
"Social Change and Economic Behavior in Iran", en EE H.,
Coffee and Society in Sao Paulo, 1886-1934, The University of
vol. IX, No. 3, febrero de 1957, pp. 178-183; William W. Miller,
North Carolina Press, Chapel Hill, 1980, pp. 140, 144, 164-
'The C.A.T. Company: A Case in Arab Entrepreneurship", en
166; Victor A. Mirelman, Jewish Buenos Aires, 1890-1930,
EEH, vol. IX, No. 2, diciembre de 1956, pp. 91-9.
Wayne State University Press, Detroit, 1990, pp. 42-43; Eugene
99 Hagen, 1962, Op. cit., pp. 379-380; Dávila, 1986, Op. cit., p. 100. F. Sofer, From Pale to Pampa. A Social History of the Jews in
Buenos Aires, Holmes and Meier, Nueva York, 1982, pp. 93,
100 Dávila, 1986, Op. cit., pp. 20,110-114.
110; Carl E. Solberg, Immigration and Nationalism. Argentina
William Paul McGreevey, An Economic History of Colombia, and Chile, 1890-1914, The Unversity of Texas Press, Austin,
1845-1930, Cambridge University Press, Cambridge, 1971. 1970, pp. 33, 47-49, 62-64, 82, 86-87, 91. 25
de estas últimas son trabajos apologéticos y escritos cluye su reseña sobre el libro de Dávila anotando que
por parientes o antiguos empleados de los hombres éste no "agrega nada significativo a nuestro conoci-
de negocios, trabajos que Dávila acepta sin mayor miento de los empresarios colombianos" 103.
beneficio de inventario. Su cubrimiento de la historia
El alcance de los argumentos de Dávila se reve!a en
intelectual y política es también superficial y se basa
otro trabajo titulado Historia Empresarial de Colombia:
e~ tra?ajo~ de aficionados a la historia. Por ejemplo, al
Estudios, Problemas y Perspectivas. En este trabajo
discutir la Ideología de Miguel Samper, ¿por qué ba-
hace un recuento de las investigaciones en el tema sin
sarse simplemente en Alfonso López Michelsen y no
mayor beneficio de inventario, incurriendo en confusio-
en el trabajo serio de Jaime Jaramillo Uribe? Además,
nes y contradicciones. Reitera sus "interrogantes sobre
la visión de Dávila sobre Miguel Samper peca de
la existencia de fracciones de clase diferenciadas den-
provincial ya que es incapaz de colocarlo en el contex-
tro de la burguesía colombiana" basándose en su estu-
to la!ino~mericano de la época; así, Miguel Samper
d!o de segunda mano sobre los "negociantes" de Bogo-
podna situarse dentro del grupo de liberales latinoa-
ta y el Valle del Cauca al que ya se hizo referencia en
mericanos antihispanistas del siglo XIX, admiradores
este artículo. Sin embargo, si hubiera leído con mayor
de los empresarios ingleses y norteamericanos lo mis-
cuidado I?s trabajos que reseña, habría notado argu-
mo que del sistema educativo y de la democracia
mentos bien sustentados que contradicen su "tesis".
jeffersoniana en los Estados Unidos. También la dis-
Erróneamente adscribe al estudio de Juan José Echa-
cusión de Dávila sobre Alfonso López Pumarejo se
varría la tesis de que los industriales antioqueños diver-
basa en el trabajo lleno de alabanzas del periodista
sificaban, cuando el mismo Echavarría señaló esa su-
Hugo Latorre Cabal y no en las investigaciones de
puesta tesis como algo erróneo en el estudio de Dávila
historiadores serios'?'.
de 1986. Dávila tampoco hace una lectura cuidadosa
Después de mencionar las actividades económi- del libro de Fernando Botero Herrera, ya que este tra-
cas del empresario vallecaucano Hernando Caicedo bajo refutaría sus ideas. A diferencia de Dávila, Botero
(de nuevo basándose en un limitado uso de fuentes Herrera sí realiza un estudio serio de fuentes secunda-
secundarias), Dávila concluye: "Don Hernando, enton- rias y de archivos. Por último, Dávila hace un elogio de
ces, quedaría por fuera del alcance de las abstraccio-
nes que enfrentan el agro a la industria y que hablan
de un supuesto enfrentamiento entre las fracciones
agrícolas, industrial y financiera de la burguesía del
país". Esta es una conclusión apresurada sin mayor /
f~ndamento empírico que se contradice con trabajos
bien fundamentados sobre diferentes países del conti-
nente (incluída Colombia), los cuales demuestran la
fragmentación de la burguesía en diferentes fraccio-
nes de acuerdo a sus actividades económicas y su
reflejo en conflictos polfticos'?".

En resumen, el libro de Dávila no hace un estudio


exhaustivo de las fuentes secundarias (incluso varias
de las que utiliza no son necesariamente las más se-
rias), no realiza un trabajo cuidadoso de archivos tra-
bajo que quizás le hubiese impedido el haber formulado
concl~si?nes y juicios tan apresurados, y las pocas
apreciaciones con alguna lógica que hace ya habían
sido presentadas por otros autores en el pasado. Con
muy buenas razones, el historiador David Sowell con-

101 Dávila, 1986, Op. cit., parte 1, passim. and the State in Latin American History, Praeger Publishers,
102 Dávila, 1986, Op. cit., pp. 75-76. Nueva York, 1988; Mónica Peralta-Ramos, The Political
EconomyofArgentina. PowerandClassSince 1930, Westview
Para trabajos sobre América Latina y Colombia, con una base Press, Boulder, 1992; Sáenz Rovner, 1992, Op. cit., passim;
empírica seria, y que contradicen la afirmación de Dávila Peter Smith, Politics and Beef in Argentina: Patterns of Conflict
véanse, e~tr~ otros: David G. Becker, The New Bourgeoisi~ and Change, Columbia University Press, Nueva York, 1969;
and the Umits of Dependency: Mining, Class, and Power in Thomas C. Wright, Landowners and Reform in Chile. The
"Revolutionary" Perú, Princeton University Press, Princeton Sociedad Nacional de Agricultura 1919-40, University of IlIinois
1983.;Mauricio A. Font, Coffee, Contention, and Change in th~ Press, Urbana, 1982; Maurice Zeitlin, The Civil Wars in Chile
Makmg of Modern Brazil, Basic Blackwell, Cambridge, (or the bourgeois revolutions that never were) Princeton
Massachusetts, 1990; Nora Hamilton, The Limits of State Univerity Press, Princeton, 1984. '
Autonom~. Post-Revolutionary México, Princeton University
Press, Pnnceton, 1982; Joseph L. Love and Nils Jacobsen 103 David Sowell, The Hispanic American Historical Review, vol.
26 compiladores, Guiding the Invisible Hand. Economic Liberalis~ 69, No. 1, febrero de 1989, p. 142.
GESTiÓN

su propio trabajo afirmando que un informe suyo sobre la alta gerencia ..." Esto lo repite en términos profanos
los británicos en Colombia en el siglo XIX utiliza "diver- al querer convencer a los ejecutivos sobre las bonda-
sas fuentes secundarias, varias de ellas virtualmente des de lo que él considera historia empresarial: "Una
desconocidas en el medio colombiano". Esta es una investigación aplicada sí puede mejorar su empre-
afirmación que no se ajusta a la realidad; probablemen- sa ..." 105.
te este tipo de literatura sea desconocida para quienes
El interés por las ciencias sociales en general y por
se guían por los best-sellers en administración, pero
la historia en particular en las facultades de Adminis-
cualquier académico serio no encontraría nada nuevo
tración en el país, es significativo y debe ser apoyado.
al respecto sino lugares comunes ya cubiertos por la
Esto no quiere decir que los profesores especialistas
historiografía 104.
en temas administrativos deban convertirse en "aca-
Peter Mathias es bastante crítico de aquellos que démicos orquesta" que pretendan ser expertos en cual-
pretenden que la historia empresarial enseñe leccio- quier campo. Cuando se criticaron las debilidades de
nes sobre toma de decisiones en el pasado para las escuelas de administración en Estados Unidos en
educar a los ejecutivos del presente y brindarles "la el periodo de la Posguerra, tenemos que recordar que
respuesta exitosa". Estamos de acuerdo con el argu- éstas optaron por apoyarse en académicos provenien-
mento de Mathias, autor de importantes obras de tes de diferentes disciplinas y no por convertir a sus
historia económica y empresarial. Pretender que la antiguos -y cuestionados- profesores en pseudoex-
historia sirva como lección para los ejecutivos, ade- pertos en temas donde no harían mayores contribu-
más de no tener mayor sentido metodológico, es parte ciones y donde no tendrían el respeto de los académi-
de la tendencia actual de hacer la educación rentable cos serios en otros campos. Así, el interés por la
y "práctica". Un ejemplo de lo anterior lo encontramos historia no debería convertirse en Colombia en refugio
en el mismo Dávila, para quien la historia empresarial del dilettante ni en la fuente de recetas para el aspiran-
ayuda en "la formulación de la política y estrategia de te a gerente106.

104 Carlos Dávila Ladrón de Guevara, Historia Empresarial de El escrito de Enrique Ogliastri sobre historia de Santander en
Colombia: Estudios, Problemas y Perspectivas; Monografías, el siglo XIX presenta una serie de temas ampliamente supe-
Universidad de los Andes, No. 20, enero de 1991, pp. 18, 23- rados por la literatura desde hace dos décadas; igualmente, no
24, 27, 30-31, 37, 58, 65; Carlos Dávila Ladrón de Guevara, incorpora un trabajo serio de archivos.
"Empresarios y aventureros británicos y la élite local en Co- Luis Ernesto Romero también se ha aventurado en temas
lombia durante el siglo XIX", fotocopia, 1991 ; Fernando Botero históricos. Su trabajo, "La administración en la sociedad
Herrera, La industrialización en Antioquia. Génesis y consoli- muisca", revela un desconocimiento tanto de la literatura his-
dación 1900-1930, CIE, Facultad de Ciencias Económicas, tórica como de la antropológica; igualmente, el autor trata de
Universidad de Antioquia, Medellín, 1984; Juan José justificar la precaria calidad del escrito anotando que éste tiene
Echavarría, External Shocks and Industrialization. Colombia, un "carácter preliminar"; por último, en un curioso tourde force,
1920-1950, Tesis doctoral no publicada, Universidad de Oxford, Romero advierte que su trabajo prodría tener una aplicación
1990. 'práctica' y escribe: "Cuán importante sería para la formación
El balance sobre historia empresarial que publica Dávila y el desempeño de los empresarios y administradores de
presenta un buen número de inconsistencias. También es nuestra sociedad moderna el retomar estos valores descri-
interesante resaltar que entre los recursos que él utiliza en tos ... sobre la sociedad Muisca". En otro trabajo suyo sobre
sus revisiones bibliográficas se encuentran las reseñas Miguel Samper y el siglo XIX, el autor no contribuye mayor
preparadas por sus estudiantes de segundo semestre del cosa a la literatura relevante. Así, sus discusiones sobre los
pregrado en Administración; tal como él escribe: "Como muiscas y sobre el escrito de Samper, La miseria en Bogotá,
trabajo individual de investigación a lo largo del semestre, podrían ser resumidas, parafraseando a un pensador muy
en éste, los estudiantes deben preparar una reseña crítica importante del siglo XIX, como "La miseria de la historia
sobre un libro de historia empresarial de Colombia. Esto [amateur}" .
permite por una parte, examinar libros recientes; por otro Véanse Manuel Rodríguez Becerra, El empresario industrial
lado, los mejores trabajos pueden contribuir a una investi- del Viejo Caldas, Universidad de los Andes, Bogotá, 1983.
gación en marcha desde hace varios años"; veáse Carlos Enrique Ogliastri, "Clases sociales y desarrollo empresarial en
Dávila, "Historia empresarial en la Facultad de Administra- Santander. Apuntes sobre la econom íapolítica de Bucaramanga
ción de Uniandes. Un curso, unas investigaciones y unas en el siglo XIX", fotocopia. Luis Ernesto Romero, "La adminis-
oportunidades", Memorando, Area de Gestión, marzo 23 tración en la sociedad muisca. Apuntes para una historia del
de 1993, fotocopia. pensamiento administrativo colombiano", en Revista de la
105 Peter Mathias, "Business History and Management Education", Escuela de Administración de Negocios, No. 1, septiembre/
en Business History, vol. 17, No. 1, enero de 1975, pp. 3, 5. diciembre de 1986, pp. 6-15, Y No. 2, enero/abril de 1987, pp.
Dávila, mayo 1991, Op. cit, pp. 52, 92. Entrevista a Carlos 12-23; "Don Miguel Samper: la ética y el espíritu de empresa
Dávila por Gustavo Riveros, La República, junio 27 de 1994, en el siglo XIX", en Revista de la Escuela de Administración de
p.3B. Negocios, No. 4, enero/abril de 1988, pp. 21-37.
106 No sobra mencionar entonces otros ejemplos. El trabajo de Varios profesores de la actual planta de docentes de la Facul-
Manuel Rodríguez sobre el Viejo Caldas es el resultado de su tad de Administración de los Andes, Carlos Dávila, Enrique
tésis de pregrado en Estudios Gerenciales y no representa Ogliastri, Manuel Rodríguezy Elvira Salgado (ninguno de ellos,
una contribución importante a la literatura; además, la segun- historiador) han enseñado los cursos de historia empresarial
da edición, publicada por la misma Facultad de Administración en dicha facultad. De la producción de los tres primeros ya se
de la Universidad de los Andes, no incluye trabajos de los han hecho referencias en este artículo; de la última, no hay
últimos diez años. ningún escrito académico que podamos comentar. 27
Educación y "apertura" en Colombia el sistema educativo debe ayudar "a mejorar los nive-
les de competitividad ... de las demás organizaciones"
Lo "práctico" se ha convertido también en el dis- para así poder "competir internacionalmente". El pro-
curso político actual en Colombia. Esto refleja los blema, por encima de todo, es aumentar la productivi-
intereses de los empresarios y sus ideólogos de ca- dad con el encomiable fin de elevar "la calidad de vida
becera. En escrito reciente, el empresario Hernán de los colombianos" 109.
Echavarría Olózaga condena a la universidad colom- La Comisión utiliza el lenguaje propio de cualquier
biana por estar supuestamente "impregnada de mar- cursillo de extensión sobre Gerencia a la moda. En-
xismo", y exagerar la "orientación académica" no diri- contramos los siguientes términos: "organizaciones que
gida a la solución de "los problemas prácticos de la aprenden", "tecnologías de gestión", "globalización",
vida". Agrega además que, "debemos tener cuidado "modernización", "capacidad competitiva", "oportuni-
en que la preparación de nuestra juventud no se dades de inversión", "educación para un milenio nue-
pierda en los extensos campos de la literatura y la vo" 110.
lexicografía" 107.
En cuanto a las universidades, la Comisión reco-
Para satisfacción de Echavarría Olózaga, dudo mienda lo siguiente:
mucho que la universidad colombiana de hoy en día
esté "impregnada de marxismo" (si de algo está "im- Incorporar en las organizaciones educativas lo más
pregnada" sería de derechismo). Aún más, podríamos avanzado de las técnicas en gestión .... se diseña-
cuestionar la supuesta "orientación académica" de rán y desarrollarán programas de preparación de
muchas facultades, especialmente en las universida- los rectores y miembros de los Consejos Directivo y
des privadas. Pero lo más cuestionable en su argu- Académico de dichos establecimientos, y de los
docentes mismos, en los principios y técnicas de
mentación es su énfasis en lo supuestamer.te práctico
gestión y manejo actualizados.
que, en última instancia, acaba por convertirse en una
justificación de la ganancia individual sobre el bien Buscar la asesoría y colaboración de las empresas
común y en una exaltación de las jerarquías dictadas más destacadas de la región para la adaptación de
por los empresarios en su deseo de someter a la enfoques y prácticas de gestión empresarial o de
innovaciones tecnológicas que puedan ser aplica-
academia al unanimismo del servicio incondicional a
bles a las organizaciones educativas'!'.
los hombres de neqocios!".
El lenguaje sobre lo "práctico" no viene solamente El académico habrá de convertirse entonces en un
de los empresarios. La Misión de Ciencia, Educación y ejecutivo moderno, de bolsillo y a la medida. Los crite-
Desarrollo nombrada por el gobierno de César Gaviria rios de la empresa privada son entronizados por la
reflejaba criterios similares. La "comisión de sabios", Misión. Creemos haber ilustrado con bastantes ejem-
como la calificaban sectores de la prensa, sostuvo que plos cómo estos criterios, justificados por los intelec-

107 Hernán Echavarría Olózaga, Macroeconomía y partido liberal, 1995. En este artículo se citará de la revista Consigna como
Legis Editores, Bogotá, 1994, pp. 264, 281, 296. "Misión".
108 Lo "práctico" tiene sus efectos en el continente. Según la La modernización como resultado de simples políticas eco-
CEPAL, "El porcentaje de hogares que viven en la pobreza y nómicas es criticada por Claudio Véliz. Escribe Véliz: "... las
la indigencia en Latinoamérica es hoy más alto que a fines de políticas económicas, a diferencia de los analgésicos o la
los años setenta [...] La situación más difícil se presenta en penicilina, necesaríamente no tienen ni aplicación universal
Bolivia, Colombia, Honduras y Panamá [...] en Colombia, Bra- ni efectos predecibles. La misma reforma fiscal que estimu-
sil, Costa Rica, Guatemala, Brasil, Costa Rica, Guatemala, lará a los habitantes de Flandes, Yorkshire o Massachusetts
Honduras y Panamá la incidencia de la pobreza urbana subió a una actividad febril, puede dejar a los porteños y a los
fuertemente respecto de los años ochenta ..."; véase El Espec- serranos impasibles; la misma transformación agraria que
tador, Noviembre 26 de 1994, p. 5B. hará que el desierto israelí florezca o que exprimirá unas
cosechas abundantes de las terrazas taiwanesas puede cau-
A la pauperización, agréguese la situación de violencia y las sar angustia y confusión entre aquellos que cultivan la tierra
continuas violaciones de los derechos humanos en Colom- en Arequipa, Temuco o Popayán". Véase Claudio Véliz, The
bia; véase Americas Watch, La violencia continúa. Asesina- New World of the Gothic Fox. Culture and Economy in English
tos políticos y reforma constitucional en Colombia, Tercer and Spanish America, University of California Press,
Mundo Editores, IEPRI, CEI, Bogotá, 1993; Americas Watch, Berkeley, 1994, p. 195.
Estado de guerra. Violencia política y contrainsurgencia en
Colombia, Tercer Mundo Editores, IEPRI, CEI, Bogotá, La idea del "progreso", del crecimiento económico ilimitado
1994; Amnistía Internacional, Violencia política en Colom- para satisfacer supuestas necesidades insaciables, una idea
bia. Mito y realidad, Editorial Amnistía Internacional, Ma- que tomo raíz en el pensamiento de Occidente desde el siglo
drid,1994. XVIII, también ha sido criticada recientemente por académi-
cos norteamericanos. VéaseChristopher Lasch, The True and
109 Misión de Ciencia, Educación y Desarrollo, "Colombia: al Only Heaven. Progress and Its Critics, Norton, Nueva York,
filo de la oportunidad", en Consigna, No. 440, segundo 1991 , passim.
trimestre de 1994, pp. 8-9. El reporte fue reproducido
110 Misión, Op. cit. pp. 9-11.
como: Misión de Ciencia, Educación y Desarrollo, Al filo de
la oportunidad, Cooperativa Editorial Magisterio, Bogotá, 111 Ibid., p. 12.
28
GESTiÓN

tuales orgánicos de turno, contribuyen a reforzar las universitario). Escribe Orozco: "Por ética, sería funda-
jerarquías, racionalizar la arbitrariedad del poder y la mental para Colombia que exista transparencia sobre
obediencia incondicional y, finalmente, en cuanto a qué puntos de las conquistas de Fecode son importan-
producción académica e intelectual se refiere, los re- tes para permanecer en la ley y en cuáles aspectos la
sultados no podrían ser más pobres!". Federación debe ceder en orden al bien común". Aquí
cabría anotar que las ideologías empresariales y jerár-
La implementación de esta agenda se facilita ya
quicas, al ser introducidas y aceptadas en las universi-
que hay miembros de las burocracias universitarias
dades, también cumplen el papel de reforzar el rol
que oportunamente siguen las ideas en boga. Por
jerárquico de los burócratas universitarios por encima
ejemplo, Luis Enrique Orozco, vicerrector de la Uni-
de los intereses y derechos de los académicos!".
versidad de los Andes y exprofesor de la Facultad de
Administración en la misma institución, escribió: Este tipo de mentalidad se refleja en la propuesta
de escalafón "académico" en la misma Facultad de
En Colombia, la nueva Constitución y el actual con- Administración de la Universidad de los Andes. En
texto de apertura económica, incorporan nuevas dicha propuesta se da igual importancia a las aseso-
tareas para la educación [... ] ¿Hasta dónde somos rías que a la investigación. La investigación viene
conscientes de los nuevos escenarios en los cuales
amarrada a "temas relevantes para la Facultad". Para
debe desarrollarse la educación? Nuevos escena-
ser profesor asociado cuenta tener "reconocimiento
rios relacionados entre otras cosas, con el nuevo
en el medio empresarial, económico y gubernamental
papel del conocimiento en la producción. Actual-
mente si el país no posee la capacidad de incluir
del país [...] asesorías, consultarías, pertenencia a
masivamente el desarrollo científico-tecnológico en juntas directivas"; además, el título de magíster o doc-
los procesos productivos, se comprometen la pro- tor "podrá ser compensado en casos excepcionales
ductividad y competitividad internacional de las na- con una destacada y reconocida trayectoria tanto aca-
ciones, y esto no puede tenerse si los criterios de démica como profesional [...] Tener el reconocimiento
formación de recursos humanos no se modifican!". de la Facultad en asesorías ... membrecía en juntas
directivas [...] Tener reconocimiento en el medio em-
La ideología del consenso, de la armonía impuesta
presarial, económico y/o gubernamental del país". Para
desde arriba, lleva a Orozco incluso a condenar los
ser profesor titular el doctorado se puede compensar
logros del gremio de los educadores en escuelas y
"por una maestría acompañada de una destacada y
colegios, conquistas logradas con un altísimo numero reconocida trayectoria tanto académica como profe-
de maestros asesinados (además, el estatuto docente sional [...] asesoría y/o consultoría" 115.
de los maestros seguramente representa un mal ejem-
plo para el modelo de "profesor universitario - ejecutivo Hemos cerrado así el círculo propuesto al comienzo
moderno" y a la "flexibilización" del mercado de trabajo de este artículo. Las inquietudes que teníamos cuando

112 Como bien señala un observador: "Y el nuevo sistema exige, " ... la docencia tendría que incorporar al arte; ¿no hay acaso
en principio, producción, eficiencia y rentabilidad. Ciencia sin belleza en la construcción intelectual de cada disciplina?; ¿no
aplicabilidad es sospechosa y corre el riesgo de perecer. Hay hay goce en el descubrir, en el entender y conocerse mejor a
que vincularse al sector productivo, buscar nexos con la em- sí mismo con la ayuda de gigantes que nos han precedido?
presa privada, poner la inteligencia y la creatividad de los cien- Parecería que hay una regla de juego que nos acerca a esta
tíficos al servicio del sector productivo". Véase Sergio Fajardo, posibilidad: ser sensibles a la belleza del intelecto en acción; a
"Ciencia, tecnología y sector productivo", en Texto y Contexto, la arquitectónica de la razón desplegada en sus operaciones".
No. 20, enero a junio de 1993, p. 22. Sin comentarios.
113Luis Enrique Orozco Silva, "Comentarios a la importancia de Véase Luis Enrique Orozco, "El destino de la docencia. Hacia
la reforma educativa", en Planeación y Desarrollo, vol. 24, No. la imaginación o la decadencia", en Colegio Mayor de Nuestra
3, septiembre a diciembre de 1993, pp. 48-49. Señora del Rosario, Especialización en docencia universita-
A lo anterior se podría aplicar el siguiente comentario: "La ria. Módulo 1,Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario,
cantidad de discursos que se pronuncian en tonos solemnes Bogotá, 1994, pp. 87-88, 91.
y contritos, alrededor de ciencia y tecnología es abrumadora.
115"Borrador documento ordenamiento profesoral en la Facultad
El contenido, por lo general, ínfimo". Véase Fajardo, Op. cit.,
de Administración", Facultad de Administarción, Universidad
p.18.
de los Andes, 1994, fotocopia, pp. 4-7.
1140rozco, 1993, Op. cit., p. 51.
El documento refleja criterios de los sectores empresarial y
Orozco no entra a discutir quién define el "bien común" y qué político. Esto se podría entender, en buena parte, como resul-
entiende él por "ética". Sin embargo, en otro escrito critica al tado de los nexos con esas esferas de poder y que relegan lo
"docente autoritario ... carente de imaginación". Presenta en- académico a un plano secundario. Este documento fue redac-
tonces su propio modelo de docente imaginativo, seguramen- tado por una comisión donde figuraban, entre otros, Carlos
te incorporado al problema de la "competitividad de las nacio- Dávila, Raúl Sanabria y Javier Serrano. Trabajos de Dávila ya
nes": han sido discutidos en este artículo. Sanabria, proviene del
" ... el carácter y temple de la docencia se origina en los hom- sector del cuero y ha sido ajeno a la producción intelectual y
bres que la desempeñan. El problema es contar en nuestra académica. Serrano, además de profesor, ha sido consultor y
'ciudad del sol' con hombres capaces de conducir a otros, hombre del sector financiero; su nombramiento como decano
porque en su personal experiencia el fuego sagrado de la vida de la facultad en 1991 fue saludado por la sección "Publicidad
intelectual jalona y otorga sentido a su tarea" y Negocios" de la Revista Semana. 29
empezamos esta investigación han sido ilustradas in- Las universidades [enseñan] una dosis muy grande
vestigando sobre la literatura relevante. Aún más, las de teorías económicas bajo el supuesto fuerte de
críticas hechas a las facultades de administración en el que, gracias al avance y desarrollo de la ciencia
país se aplican en formas muy similares a la misma económica, la contribución que le corresponde al
economista para el progreso y mejoramiento de la
entidad que realizó el reporte para la Misión de Ciencia
sociedad la puede aportar desde su escritorio: ya sea
y Tecnología. De ahí que la tajante afirmación de en la forma indirecta de 'hacer teoría', o en la forma
Rodríguez, Dávila y Romero sobre la calidad de la más directa de recoger información y analizarla para
investigación en administración se aplicaría muy apro- indicar qué es lo que 'debe hacer' un gobierno, unos
piadamente a los trabajos discutidos en este articulo!". gremios, unos empresarios, o cualquier otro de los
agentes sociales que tienen suficiente poder econó-
mico y político para influir en una u otra forma en el
Para concluir desarrollo económico de la socíedad'".

Hoy en día, el mundo académico es visto por mu- Las escuelas de administración norteamericanas se
chos como un escalón de ascenso económico y político encontraban desprestigiadas en los años 50 mientras
en Colombia (esto es, de arribismo). Desafortunadamen- otros campos académicos marcaban el liderazgo en el
te, este asunto no tiene que ver únicamente con los pro- mundo. Obviamente éste no es el caso en Colombia
fesores de Administración. En Historia, por ejemplo, hoy en día en las ciencias sociales, donde éstas no
varios académicos de la Nueva Historia se cobijaron bajo solamente están a la zaga de desarrollos en Estados
los políticos y entraron a hacer parte de la vieja burocra- Unidos y en Europa, sino incluso de desarrollos en los
cia. Así, en la actualidad se está escribiendo una nueva países más avanzados de América Latina. Además, un
historia oficial por parte de un buen número de historia- número considerable de científicos sociales colombia-
dores colombianos y uno que otro extranjero!". nos, especialmente en las universidades privadas pero
Los economistas son críticos hasta cierto punto también en las públicas, se ha supeditado a criterios de
-varios de ellos incluso tienen un pasado izquierdista. rentabilidad política y monetaria. En un
Desafortunadamente, la capacidad crítica de muchos medio que, además de subdesarrolla-
se reduce cuando el gobierno de turno los llama a do, exige resultados "prácticos" al mun-
"colaborar". Como en las escuelas de administración, do universitario, y donde los científicos
la consultoría contratada remplaza a la investigación sociales no han sido capaces de man-
independiente en las facultades de economía. Mien- tener una autonomía vis-a-visel poder,
tras que los profesores de administración internalizan tenemos un largo camino por recorrer,
los valores de los empresarios, los economistas camino donde la excelencia académi-
internalizan la ideología del gobierno de turno (y los ca no sea un simple discurso retórico y
intereses que éste representa). Esto último bajo el donde la calidad intelectual no se juz-
supuesto de que el "conocimiento" otorga y justifica el gue únicamente por lo que demande el
poder. Como escribe Alejandro Sanz: "mercado". O

116 Si se hacen comparaciones con el mundo universitario norte- (1891-1976)", en Historia Crítica, No. 6, enero-junio de 1992,
americano, la situación de calidad académica sería aún más pp. 109-112.
grave. Así, no es de extrañar que no se le haya otorgado la Los colegas historiadores podrían tomar como ejemplo a William
acreditación a la Universidad de los Andes por parte de la Appleman Williams. Williams, autor de trabajos clásicos y crí-
Southern Association of Colleges and Schools de los Estados ticos sobre historia diplomática norteamericana, fue persegui-
Unidos. Entre una larga lista de falencias, esta entidad consi- do en el periodo macartista. Después se le ofreció puesto en
deró que el número de profesores de la Universidad de los la administración Kennedy como consejero en asuntos cuba-
Andes con doctorado (incluyendo la facultad de Administra- nos y no aceptó para mantener su independencia. El Comité
ción) era muy bajo. Aún más, la Asociación conceptuó que de Actividades Antinorteamericanas del Congreso trató de
aquellos profesores con doctorado estaban enseñando cur- confiscar su siguiente manuscrito; como no se pudo, el
sos en temas que no tenían nada que ver con su preparación hostigamiento continuó a través de citaciones del Internal
académica (cosa inadmisible en una institución académica Revenue Service (la administración de impuestos en los Esta-
seria norteamericana). Se criticó también el hecho de que una dos Unidos).
proporción muy alta de los profesores eran egresados de la
Williams, sin embargo, no optó por el camino "práctico" y pre-
misma Universidad de los Andes. Para empeorar las cosas, la
firió seguir siendo un académico independiente y serio. Véase
Asociación anotó cómo casi la mitad del profesorado en la
William Rice-Maximin, "William Appleman Williams", en Mary
mencionada universidad ni siquiera tenía título de maestría.
Jo Buhle, Paul Buhle y Harvey J. Kaye, compiladores, The
Véase Carta de E. Jean Walker, Ph.D., Associate Executive
American Radical, Routledge, Nueva York, 1994, pp. 305-
Director, Southern Association of Colleges and Schools,
311.
Commission on Colleges, a Arturo Infante Villarreal, Rector,
Universidad de los Andes, junio 17 de 1994. Esta carta fue 118 Alejandro Sanz de Santamaría, Teoría y conocimiento econó-
hecha pública por los profesores de la Universidad de los Andes. mico: política y prácticas democráticas?; Monografías, Uni-
versidad de los Andes, No. 23, abril de 1991, p. 10.
117 Véase Alberto Aguirre, "La historia de [Malcolm] Deas es puro
cuento", en Revista Universidad de Antioquia, vol. LXIII, No. Véase también Jairo Sánchez, "La economía y los economis-
235, enero-marzo de 1994, pp. 33-46. Eduardo Sáenz Rovner, tas: Las palabras y los hombres", en Cuadernos de Economía,
30 "A propósito de la historiografía sobre Mariano Ospina Pérez No. 8, primer semestre de 1985, pp. 51-71, passim.

También podría gustarte