Está en la página 1de 5

La baja autoestima, la inferioridad e inseguridad son factores detonantes

para que una persona sufra este padecimiento

CIUDAD DE MÉXICO (13/FEB/2011).- La dependencia en una relación y, en


algunos casos, la obsesión por no vivir en soledad provocan que más de una
persona se convierta en un “adicto al amor”.

La baja autoestima, la inferioridad e inseguridad son factores detonantes para que


una persona sufra este padecimiento, aseguró la especialista Alejandra López de
la Sociedad Psicoanalítica de México.

"Claro que tiene que ver con inferioridad, de inseguridad, de bajo autoestima.
Entonces ya estamos hablando de una depresión y si se llega a tener una relación
con una u otra persona reaccionan a no darse un espacio para superarlo, porque
tienen miedo a la soledad", dijo López.

La psicoanalista especificó que la sensación que llegan a tener estas personas es


de estar enamorados aun cuando no tengan ese sentimiento de manera real, pero
las contradicciones de este estado pueden ser malas.

"Son personas que no pueden vivir sin una pareja siempre están en busca de
tener algún novio o una relación pasajera, pueden llegar a casos muy extremos
como llegar a chantajear a la persona si ella amenaza con irse, puede amenazar
incluso con el suicidio.

"Estas personas voltean toda su atención en justificar ciertas necesidades que les
dé la otra persona, sin que ellos realmente tengan ese comportamiento parcial. A
ellos les agrada mucho la sensación de estar enamorados, porque sienten que
son una misma persona", aseguró la especialista.

Alejandra López comentó que los miedos son el combustible ideal para este tipo
de personas que no saben estar solas, pero que cuando se cansan o aburren de
la persona con la que están, buscan a alguien más.

"Consta mucho del miedo, miedo a depender, miedo a perder la autonomía, miedo
a de que si te acercas demasiado a persona y te conoce bien tal vez ya no puedas
ser parte de esa persona", manifestó. "Siempre buscan una pareja para lograrlo,
entonces cuando ya no lo sienten, deciden buscar a alguien más, prefieren
abandonar que ser abandonados".
La sensación de estar enamorado para el adicto del amor, mientras le dura, puede
traerle grandes niveles de satisfacción y energía, aunque podría ser desafortunada
para quien se encuentra a su alrededor.

Esto puede ser una sensación desafortunada, como ciertas sustancias como las
endorfinas, esa sensación de estar enamorado hace sentir extasiado, con energía
y hasta creativo, esto les agrada demasiado a este tipo de personas".

Alejandra López manifestó que la mejor opción para salir de una situación así es
tomar terapia, tanto el adicto al amor como la pareja, porque es una etapa difícil
para ambas partes

Lo más recomendable es tomar una terapia, tanto el adicto al amor como la


pareja, ya que no es algo sano porque se hace una relación dependiente, porque
la pareja sabe porqué estar con esa persona y el adicto al amor puede ver eso e
intentar cambiar", finalizó.

Introducción

El proceso normal del enamoramiento es cuando una persona comienza sintiendo


simpatía por otra persona para después pasar a una atracción inocente, se
comienza a idealizar hasta llegar a convertir al otro en un ser divino. Entonces el
individuo se cierra al amor cegándose. Podríamos decir que el amor es ciego
cuando incapacita para hacer un análisis realista de la situación, cuando se
proyectan en la otra persona todas las ilusiones, cuando creemos que es la única
persona que nos puede dar la felicidad. Si este proceso es muy rápido, se le
denomina flechazo amoroso, lo cual es síntoma de inmadurez afectiva porque la
evolución madura es lenta y progresiva. Sea como fuere, este debe ser un
proceso pasajero para culminar en un amor maduro entre dos personas
independientes que se respetan y mantienen la fidelidad. Sin embargo, existen
personas que no superan la etapa de la ceguera, como por ejemplo las personas
dependientes.

Obsesionarse por una persona o una relación es síntoma de adicción. Puede


darse porque el individuo se siente tan necesitado, tan inseguro que se aferra a
esa persona como si fuera su salvación. No es el deseo normal de unión sino de
un hambre poderosa, insaciable, que distorsiona su sentido de la realidad. Esto le
lleva a una relación obsesiva de superposesión, donde cualquier pequeña
discusión es un profundo rechazo. La adicción al amor es sufrimiento.
Normalmente son personas que han desarrollado en su vida un profundo miedo al
abandono, y por eso a la hora de enamorarse son posesivas y celosas, con
excesiva sensibilidad a la crítica y al rechazo. Esto explica algunos casos de
maltrato, donde la mujer es capaz de soportar cualquier vejación antes que ser
abandonada. Las personas con baja autoestima son más proclives a la
dependencia, y a la necesidad de "pegarse" a alguien para sentirse seguros.

Formas De Adicción Al Amor

 A una persona: Puede ser un amante, un hijo, ... Este tipo de adicción
conlleva el no poder vivir independientemente de la otra persona, sentir que
es posesión. Este tipo de adicción es santificada por nuestra cultura (¡cómo
le quiere!), cuando en realidad no es más que egoísmo camuflado. Si
realmente buscas el bien de otra persona, le dejas ser independiente que
es lo necesario psicológica y biológicamente. El padre sufre este tipo de
adicción hacia su hijo se molesta por su independencia y piensa que es un
desagradecido.

Si esta dependencia es recíproca, es muy difícil evolucionar en la vida, como el


hijo que vive con su madre toda la vida.

 A una relación: Hay personas adictas a la idea de tener una relación. Están
más enamorados de la idea de tener pareja que de la persona. Existen dos
tipos, los que rompen y reinician relaciones, y los que se aferran a los
efectos reforzantes de su relación ("Te odio pero no puedo dejarte").
Muchas parejas se mantienen unidas por muchas otras razones que por
amor.
 Al romance: Estos individuos viven tentados por el romance, la aventura, la
pasión. Se preocupan por los rituales románticos: citas, cenas, sexo en
lugares poco comunes, ... toda la parafernalia tentadora del romance
pasajero. Está adicción suele ser el resultado de la fantasía, el infantilismo,
el subdesarrollo afectivo. Buscan la seducción, la conquista, pero luego se
cansan. Son inmaduros que suelen ser considerados ídolos sociales. Un
claro ejemplo de adicto al romance era Don Juan, y normalmente a quien
así se le denomina coincide con este perfil.
La mayoría de los seres humanos hemos pasado por el proceso de
enamoramiento, el cual ocurre, a veces repetidamente a lo largo de nuestra
existencia. Algunos rememoramos el primer beso, la primera cita y las canciones
románticas que nos acompañaron en esa época.

El proceso de enamoramiento inicia con un sentimiento de simpatía por otra


persona, lo que luego se convierte en atracción.

Durante esta etapa, idealizamos a la persona objeto de nuestra simpatía; la


transformamos dándole cualidades casi divinas. Incluso tendemos a pensar que
es y será la única persona que nos puede hacer felices; es entonces cuando
decimos "nos flecharon". Esta etapa anteriormente descrita es el inicio de lo que
debe pasar a otra etapa en el proceso de evolución afectiva con el cual se obtiene
un amor más maduro que implica el respeto, la independencia y la fidelidad .

Hay personas que durante este proceso, no logran superar la etapa inicial y se
obsesionan por la persona o por la relación, dando como resultado la adicción.

Dentro de estos parámetros podemos encontrar personas inseguras y


dependientes. Se aferran a la relación o a la persona como si fuera su única
salvación e incluso se llega a distorsionar el sentido de la realidad. Este tipo de
adicción hace sufrir mucho a la persona que lo padece ya que manifiesta miedo al
abandono, al rechazo y a la crítica de la persona amada. Dentro de las
características de estas personas podemos encontrar que son posesivas y muy
celosas, con manifestaciones de baja autoestima. Este puede ser el caso de las
personas que se encuentran sumergidas en una relación de maltrato o violencia
intrafamiliar.

Como ejemplos de algunas formas de adicción al amor podemos mencionar:


- Adicción a una persona: la cual puede ser un hijo, el amante o esposo en la cual
la persona siente que no puede vivir sin la otra.

- Adicción a una relación: son las personas que entran y salen de una relación a
otra de forma repetitiva.

- Adicción al romance: sueñan con romance y pasión, con rituales cargados de


fantasías, buscan la conquista para luego aburrirse y buscar otra (Don Juan).

También podría gustarte