Está en la página 1de 5

El Maná y el Baraka: soplo de vida.

"Mana es la fuerza por excelencia, la verdadera eficacia de las cosas. En quien reside toda
eficacia y toda vida."

"El que se conozcan pocos ejemplos de esta noción de fuerza-medio mágica no debe hacernos
dudar de que haya sido universal. Estas nociones pueden haber existido y no haber sido nunca
expresada: un pueblo tiene la misma necesidad de expresar una idea semejante que de
enunciar las reglas de su gramática"

Marcel Mauss.

"En la mayor parte de las cosmovisiones aborígenes, se establece una relación muy estrecha
entre el universo y el hombre. Bajo esa concepción cosmogónica, el cuerpo está conformado
por infinidad de caminos y está a su vez asociado a la voluntad de la Madre Tierra (...)" Ronny
Velázquez, antropólogo.

"Por debajo del totemismo, subyacía la noción de que un poder o fuerza impersonal se
encarnaba en los hombres y en los fenómenos naturales. Se trataba de un principio casi divino,
inmanente al mundo, noción que Durkheim identificaba como un dios impersonal" Brian
Morris, antropólogo.

"Entre los piapoko, Jiwi y los piaroa, en sus relaciones con cada esfera de la realidad juegan un
papel importante la fuerza, soplo o principio vital (denominado "icháini" en idioma cháse,
"pesaï" en hiwi, o "uhuru" en wóthïja) la energía que le proporciona y mantiene la vida. Esta
energía está presente en cada elemento del universo." Pedro J. Ribas, antropólogo.

En algunas culturas, este soplo de vida o fuerza vital se intercambiaba con los otros a modo de
saludo. Como los maoríes de Nueva Zelanda, que apretaban la nariz y la frente a la vez a otra
persona en un encuentro (saludo "hongi") para traspasar y mezclar el "ha" o el "aliento de la
vida". O los inuit y la práctica del "kunik", una especie de resoplido de afecto.

Marcel Mauss explicaba "El que se conozcan pocos ejemplos de esta noción de fuerza-medio
mágica no debe hacernos dudar de que haya sido universal. Estas nociones pueden haber
existido y no haber sido nunca expresada: un pueblo tiene la misma necesidad de expresar una
idea semejante que de enunciar las reglas de su gramática"
"Todo induce a pensar que los distintos manas son una misma fuerza repartida entre los seres,
hombres o espíritus, las cosas, los acontecimientos, etc. Mana es la fuerza por excelencia, la
verdadera eficacia de las cosas. En quien reside toda eficacia y toda vida."

"Este tipo de noción puede encontrarse también fuera de Melanesia. Entre los malayos de los
Estrechos recibe el nombre de Kramât. Más al norte, en la Indochina francesa, los bahnars
dicen que la hechicera es una persona Deng, que ella tiene deng y ella deng las cosas. En toda
Madagascar la reina era masina y tenía Hasina. Entre los hurones (iroqueses) se les designa
con la palabra Orenda. El orenda es poder místico."

Orenda significa literalmente "alma tribal en el camino justo" y así se les llama a cada una de
las divinidades que personificaban las fuerzas de la naturaleza.

Entre los Sioux, el término semejante es Vaconda o wakan, Este término describe a toda
criatura y objeto como sagrado o con aspecto sagrado.

El alma vuduizante de las cosas es el Nanm en Haiti.

Tsav es para los tiv, y significaba tener un corazón fuerte. Era una sustancia real y biológica que
otorgaba su encanto, energía o poderes de persuasión. El problema era que también era
posible aumentar esta sustancia... consumiendo carne humana.

Ingisu es para los papues,

Tondi, de los batak en Sumatra.

Newen entre los mapuche.

Náma entre los dogones.

"Ah! todo tiene ch'ulel, no vayas a pensar que no sienten tu corazón, si tienes dos o dividido el
corazón o tienes mucha histeria, coraje o envidia, también lo sienten. Se requiere estar en
armonía con uno para estar en paz con todo y así buscar y lograr una buena vida." cuenta Juan
lopez Intzín que le dijo Don Alonso López de Tenejapa, un hombre maya de Chiapas.

Praná aparece en el Rig-veda (el texto más antiguo de la India, de mediados del II milenio a.
C.), y significa ‘respiración’ en el sentido de ‘vida’.
En la mitología inuit , el innua o inua existe en todas las personas, los animales, los lagos, las
montañas y las plantas. Para la gente del Ártico, humanos y animales son iguales, y la
naturaleza tiene vida: todas las cosas tienen innua. Por eso, la caza se basa en el respeto y la
reciprocidad. El cazador sólo tendrá éxito si el animal elige dar su vida como un don a cambio
de la conducta moral y respetuosa por parte de toda la comunidad. El cazador, después de
cazar al animal, vierte agua en su boca para que no tenga sed y hable a los demás innua del
respeto que le han mostrado. Cuando un innua se hace personal, se convierten en torngak.

Chi, quizás más conocido, en China, literalmente "aire, aliento, disposición de ánimo: "es un
principio activo que forma parte de todo ser vivo y que se podría traducir como "flujo vital de
energía".

Al igual que Prana, aire inspirado, en la India...o Shakti, que significa "poder" o
"empoderamiento", la primordial energía cósmica y la personificación del poder creativo de la
divinidad femenina.

o Ruach en hebreo: aire o fuerza vital.

Los algonquinos de Canada lo llaman Manitú: todo tiene su propio Manitú, cada planta, cada
piedra e incluso cada máquina. Los Manitús están conectados para conseguir un efecto
deseado, como las plantas Manitús para curar o el búfalo Manitú para una buena caza.

Arewá, "Si no la tienes, te mueres". El hombre raramuri posee tres de esa arewá. Las mujeres
tiene cuatro por ser las dadoras de vida.

Para los Ongee (Islas Andamán) la fuerza vital es el olor. La palabra para crecimiento es
"genekula", significa "un proceso de olor".

En las mitologías mesoamericanas, un nahual o nagual o incluso nawal (en náhuatl, "lo oculto",
"lo escondido", "lo interior") es un elemento del individuo que se considera un vínculo con lo
sagrado, y que por ello es sagrado él mismo.

En el psicoanálisis occidental, la líbido es según Freud y Jung la fuerza o energía psíquica, una
pulsión o energía mental indeterminada que mueve el desarrollo personal general de un
individuo.
Marcel Mauss, ya en 1903, explicaba que este concepto nada tenía que ver con la conciencia
de los individuos, sino que el grado místico de algo dependía del lugar que ocupaba en una
sociedad.

"Esta noción no existe en la conciencia de los individuos, sino en razón de la existencia misma
de la sociedad, a la manera de las ideas de justicia o de valor; nos inclinamos a creer que es
una categoría del pensamiento colectivo. El valor mágico de las cosas depende de la posición
que ocupan en la sociedad o respecto de ella"

Y es que algunos lanzan la plegaria árabe Baraka: suerte divina o suerte sobrenatural, de
donde proviene la palabra "baraja", como los que barajan la vida para tener suerte.

Como cantan Ojos de Brujo en su canción Baraka:

"Encrucijada / oculto en los portales / pensando en la madre / que le vio nacer / y es que está
lejos / ya no la siente / aunque a veces la piensa / y al anochecer...

Hakim no tiene papeles / ni número de identidad / pensando en esta carrera / no divisa un


horizonte / siente un cansancio tan grande / y un descuido del pasado / "tal vez mejore el
presente / si resisto esta plegaria / cultivo una gran amistad / virgen de los imposibles / tal vez
mejore el presente / si resisto esta plegaria... Baraka."

Baraka también se llama una película puramente visual de Ron Fricke:

Otros, como el escritor Eduardo Galeano, a lo que llevamos dentro lo llama fueguito, que se
enciende más con el soplo vital, y quien se acerca...:

"Un hombre del pueblo Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al alto cielo.

A la vuelta, contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana. Y dijo que
somos un mar de fueguitos.

El mundo es eso- reveló-. Un montón de gente, un mar de fueguitos.


Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay
fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que
ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas.

Algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman; pero otros arden la vida con tantas
ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acercan, se enciende."

(El libro de los abrazos)

También podría gustarte