Razón de la existencia del derecho internacional privado
El derecho nace como respuesta a diversas circunstancias
sociales, políticas, económicas, históricas e incluso culturales, nace en virtud de una realidad con problemas a los que se pretende enfrentar con soluciones jurídicas diversas, se nace como necesidad de regular las relaciones jurídicas de individuos en las que se transponen las fronteras, se dedica a regular relaciones entre particulares que por los elementos que presentan (reales, personales o referidas a los actos), están relacionados con diversos sistemas jurídicos por lo que el primer aspecto a resolver es la determinación de derecho aplicable a las mismas. Por lo tanto el derecho internacional privado surge en función de distintos factores, a saber, político, jurídico, económico y sociológico, de los cuales los más evidentes son el jurídico y el económico.
Factores políticos es la lucha por el poder la que determinó la
división territorial del mundo, base sobre la cual se sustenta la diversidad de sistemas jurídicos, simultáneamente el Derecho Internacional Privado moderno es elaborado, en el marco de una cooperación internacional a fin de regular las relaciones privadas internacionales.
Factores jurídicos Derivados precisamente de los factores políticos,
se presentan como factores para la existencia de Derecho Internacional Privado, derivado por la diversidad de sistemas jurídicos en el mundo, debido a la afectación o posible afectación que tiene una relación concreta por la conexión con dos o más sistemas jurídicos.
Factores económicos La actual realidad económica mundial
establece una interdependencia y globalización de la economía, los países no están aislados en el mundo, por ende, tampoco las personas que en sus territorios habitan, el comercio internacional es factor determinante para buscar la adecuada regulación a las relaciones privadas internacionales y los conflictos derivados de las mismas. Este fenómeno es de magnitud compleja, pues también están incluidos los procesos de integración económicos.
Factores sociológicos Referidos al conflicto de leyes, basados en
los movimientos migratorios, la movilidad de las personas de un país a otro en función de factores diversos que pueden ir desde motivos de recreo hasta necesidades económicas, ocasionados, estos últimos, por factores de oferta y demanda del mercado laboral internacional. Es a partir de estos factores que el Derecho Internacional Privado encuentra su razón y existencia, al concurrir factores políticos y jurídicos condicionantes de diversos ordenes jurídicos distintos en cuanto a contenido y alcance, y la relación de personas por factores económicos y sociológicos surge la necesidad de determinar la solución que habrá de darse a los posibles conflictos surgidos de las relaciones privadas internacionales.
Por lo tanto la importancia que ha adquirido el Derecho
Internacional Privado en el mundo contemporáneo va más allá de lo que comúnmente destaca la doctrina apontocada en un enfoque generalista. Es evidente entonces que el Derecho Internacional Privado se perfila como un instrumento dotado de pluralidad de funciones, pese a la ingénita modestia que surge de ser, en esencia, sólo un método, un método llamado a solucionar casos con elementos extranjeros. Y no obstante su emplazamiento a nivel de los derechos estatales el Derecho Internacional Privado, entre otras funciones internacionales desempeña las relevantes de:
Asegurar el respeto de la personalidad del hombre en un mundo
jurídicamente fragmentado por las soberanías estatales.
Coadyuvar de un modo activo a la consolidación de la paz
internacional.
Desempeñar un papel no sólo informativo sino formativo en la
educación de los operadores jurídicos y en la comprensión del mundo que los rodea.
La razón de su existencia tiene como Finalidad del Derecho
Internacional Privado. Su fin es armonizar la diversidad de leyes, garantizar su aplicación sobre la base del respeto y el ejercicio pleno de la soberanía de cada uno de los Estados. Su fin principal es: a) señalar con claridad que ley debe aplicarse cuando leyes de diferentes Estados reclaman aplicación; b) señalar qué jurisdicción debe de conocer de un problema referente a una relación jurídica que podría en principio someterse a jurisdicciones diferentes. En conclusión, no son normas sustantivas, ni adjetivas propiamente dichas, son normas indicativas, porque su fin es "indicar, señalar" (Montero D. 2008.) , Como ya se ha aclarado el derecho internacional privado tiene como objeto los conflictos de jurisdicción internacional, los conflictos de ley aplicable, los conflictos de ejecución y el determinar la condición jurídica de los extranjeros, por lo que el derecho internacional público es quien regula las relaciones entre los diferentes países del mundo y la forma o formas en que pueden celebrarse tratados internacionales. (López I 2014), el derecho internacional privado tiene como principal función dirimir y solucionar conflictos que supongan el enfrentamiento entre distintas jurisdicciones ante determinadas situaciones. Es común por ejemplo que, ante un delito cometido por un individuo de nacionalidad extranjera, sea difícil determinar cuál es el tipo de legislación o derecho que le rige: el de su propio país o el del país en el que cometió el delito. El derecho internacional privado tiene entonces la función de establecer cuál es la legislación que regirá en cada caso teniendo en cuenta las situaciones particulares que este tipo de condiciones puede generar.
Así mismo el derecho internacional privado tiene su razón de ser la
existencia de una pluralidad de ordenamientos jurídicos en un determinado negocio y la necesidad de determinar qué ley será aplicable a las relaciones jurídicas internacionales.
Existe relación entre la formación de las normas y la creación de
derechos y obligaciones internacionales. Si bien son las normas, convencionales o consuetudinarias, las que constituyen el derecho objetivo en el orden internacional, de ellas se derivan, subjetivamente, derechos concretos y obligaciones jurídicas para sus destinatarios. Pero estos derechos no sólo surgen de tratados o costumbres internacionales, sino de actos jurídicos internacionales o de actos obligatorios adoptados por las organizaciones internacionales.
El DIPr exige y requiere de una ley o un código especial donde se
sistematicen todas y cada una de las materias que se incorporan por su objeto, donde se puedan encontrar soluciones que abarquen cada aspecto en particular con normas que respeten la internacionalidad y las necesidades del mundo hiperconectado y globalizado.
Por lo que se hace entonces necesario, aunque sea
con entidad de excepción, aplicar la ley extranjera. Lo que supone e implica el reconocimiento de una serie de normas o criterios, que determinan cuál de las leyes, que entran en conflicto, debe aplicarse. Porque una solución racional y razonada de los problemas de relación no puede sustituirse por un capricho, más o menos racionalizado, acerca de la norma que se considerará para solventar el choque de intereses.
Realmente, parece difícil que el Derecho Internacional privado
sea internacional, pues sus normas no se dictan por entidades supra estatales, sino por los propios estados. Su carácter de trascender las propias fronteras no oculta que, siendo los acuerdos internacionales efectivos cuando se aceptan por el derecho interno, cuando el juez lo aplica, aplica derecho propio. Lo que no significa, naturalmente, reconocer que es cada vez mayor la tendencia a reconocerle un sitio en el Derecho Internacional, incluso a su reconocimiento completo como rama del derecho.
Por esta razón, algunos autores lo califican de derecho indirecto, a
diferencia del derecho directo que comprendería no sólo el llamado derecho sustancial, sino también el procesal o adjetivo.
El derecho internacional privado nace como consecuencia de la
existencia de relaciones y situaciones jurídicas, en las cuales entran en conflicto diferentes legislaciones internas, que parecerían aplicables a dichas relaciones y situaciones.