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Introducción

La intención de este capítulo es ofrecer un resumen que refleje los aspectos más
significativos de la cultura teotihuacana. Creo que es necesario explicar los rasgos
de la economía Teotihuacana, cuáles fueron las principales actividades de la
economía teotihuacana y su situación turística
Rasgos de la economía Teotihuacana

La economía teotihuacana integró los aspectos religiosos, políticos, sociales y


comerciales, en un solo sistema en el más robusto de Mesoamérica.

Evidentemente, la economía teotihuacana figura entre los grandes ejemplos de la


actividad comercial exitosa en la historia de la humanidad.

En este sentido, la ciudad de Teotihuacán se convirtió en el principal escenario


regional, bajo un modelo de producción doméstica independiente, pero
interconectada con un sistema económico gubernamental de carácter ritual y
ceremonial.

Adicionalmente, los pueblos vecinos se convirtieron en aliados y copartícipes de


este mecanismo, creando una perspectiva productiva que se dirigió a diferentes
escalas, ya que involucraba, tanto a las élites sociales, como a la población
común. Productivo, que se convirtió

Por otra parte, esta economía contó con la combinación de las condiciones
geográficas del altiplano central mexicano, como los manantiales, un valle que
extendiéndose hacia las costas sirvió de corredor de mercancías, y los suelos con
yacimientos minerales o recursos lacustres, las cuales fueron propicias para el
desarrollo del patrimonio de la cultura teotihuacana.

El impulso de la economía teotihuacana se generó principalmente con la actividad


agrícola, de esta manera, lograron implementar técnicas, como las chinampas o
cultivos flotantes, las siembras en terrazas y los huertos con irrigación proveniente
de los ríos, para producir los alimentos que permitían cubrir las necesidades
alimenticias de la población, y vender el excedente a otras localidades menos
agrícolas.
Del mismo modo y como complemento nutricional, cazaban animales, tales como
venados, conejos y aves, o también domesticando a otros, como el pavo o el perro
xoloitzcuintle, a los cuales se les extraían las pieles, para luego ser vendidas en
los mercados, a precios que abarcaban todos los estratos sociales.

En cuanto a la explotación de recursos naturales, los teotihuacanos monopolizaron


la producción de obsidiana, lo que les les otorgó un poder de negociación sobre
las pocas mercancías que no producían, además, les permitió crear armas y tallar
esculturas o figurillas, tanto para la veneración como para los rituales.

Esta floreciente actividad comercial de Teotihuacán, que recibía vendedores de


todas partes de la región, realizando una gran cantidad de intercambios, se
mantuvo durante unos cuatro siglos del periodo clásico.

Así, la economía teotihuacana, no solo logró el auge y el apogeo de los primeros


mercados mesoamericanos, sino que también, una importante circulación de
personas por su territorio, interesadas tanto en el comercio, como en las
monumentales celebraciones religiosas.

El hecho de saber que la ciudad fue uno de los más grandes asentamientos con
más de 125. 000 habitantes, permite entender que su economía fue un aspecto
crucial para su sobrevivencia.

Una de los rasgos más característicos de esta civilización es sin duda el uso de
“chinampas”, barcazas cubiertas de tierra que les permitían sembrar incluso en
zonas pantanosas.

Se cree, con fundamento, que este tipo de técnica agrícola influyó fuertemente en
su desarrollo económico, pues al poder aprovechar las zonas lodosas o de
cuerpos de agua, muy abundantes en la región, se podían cosechar durante todo
el año productos que eran difíciles de encontrar en otras zonas.

La alimentación no era el único beneficio de la caza o crianza, también existía el


comercio de pieles.
Principales actividades de la economía teotihuacana

1- Agricultura

El florecimiento de la cultura y su supervivencia se debieron principalmente a la


agricultura, ya que la mayor parte de los alimentos obtenidos se destinaban a
cubrir las necesidades de todos los habitantes.

Como se mencionó anteriormente, el número ascendía hasta más de 120.000,


además de los comerciantes y viajeros que visitaban el mercado de trueques.

La cantidad de alimentos proveídos por las cosechas permitían que incluso los
sectores pobres de la sociedad sobrevivieran. Además de tener lo suficiente para
alimentarse y vender el resto, los teotihuacanos también “exportaban” productos a
otras civilizaciones con menos recursos agrícolas.

Una de los rasgos más característicos de esta civilización es sin duda el uso de
“chinampas”, barcazas cubiertas de tierra que les permitían sembrar incluso en
zonas pantanosas.

Se cree, con fundamento, que este tipo de técnica agrícola influyó fuertemente en
su desarrollo económico, pues al poder aprovechar las zonas lodosas o de
cuerpos de agua, muy abundantes en la región, se podían cosechar durante todo
el año productos que eran difíciles de encontrar en otras zonas.

2- Caza y crianza de animales

Para completar la alimentación, los teotihuacanos cazaban animales de carne


blanda, tales como el venado, conejo y aves. También se dedicaron a la
domesticación y crianza de animales, el más común era el guajolote y, el más caro
y exquisito, era el perro xoloitzcuintle.
La alimentación no era el único beneficio de la caza o crianza, también existía el
comercio de pieles. Estas aumentaban de valor según los tratamientos con las que
se curaban, lo que hacía que el mercado de pieles tuviera productos accesibles
para todos los presupuestos. Esta fue una más de las ventajas que favorecieron la
afluencia de comercio en la ciudad.

3- Explotación de recursos naturales

Esta cultura está caracterizada por su estrecha relación con el trabajo de la


obsidiana, un mineral muy abundante y resistente que les permitió crear armas y
tallar esculturas, además de aprovechar la arcilla del suelo, la cual permitió la
creación del revestimiento de las pirámides y su posterior adorno con pinturas
característica de esta zona.

Aunque se pueda creer que la creación de esculturas y utensilios de obsidiana era


algo poco trascendental, la realidad es que era piedra angular en las culturas. La
religión politeísta predominante permitía una demanda constante de dioses y
figurillas, tanto como para veneración como para rituales.

Lo anterior tuvo un impacto invaluable a la hora del desarrollo económico de


Teotihuacán. Los teotihuacanos eran los únicos “dueños” del monopolio de
obsidiana, por lo que cualquier civilización por pequeña o grande que fuera debía
negociar con ellos por el precioso material.

Debido a la ley de oferta y demanda, esto les dio un poder inmenso en


negociaciones de los pocos productos que no producían o explotaban.

4- Comercio

Al ser el centro de comercio más grande de las culturas de Mesoamérica,


Teotihuacán recibía vendedores de lugares lejanos, tales como el norte del actual
México o incluso de Guatemala.
El número de trueques que se llevaban a cabo en un día en el mercado era
comparable al de civilizaciones que conocemos por su grandeza y diversidad, por
mencionar una, Roma.

Muchas de las esculturas de arcilla y piezas de obsidiana encontradas en el norte


de México o América del Sur, son fácilmente rastreables hasta la civilización que
habitó Teotihuacán. Esto hace pensar en la influencia que su mercado y comercio
tuvieron sobre las culturas circundantes.

Por todo lo anterior, entender cómo una cultura que no contaba con los recursos
de transporte y tecnología que hay en la actualidad pudo llegar a tener tal auge y
apogeo, permitirá saber cómo se originaron los primeros mercados, instituciones
comerciales, moneda y transacciones.

Teotihuacán fue un centro de reunión para el comercio. Con raíces multiculturales,


muchas de las familias de artesanos que la habitaban eran originarias de tierras
tan lejanas como Guatemala, además era un punto central de Mesoamérica por el
que la mayoría de las rutas atravesaban.

En la actualidad, una economía próspera tiene varios factores que le permiten la


sustentabilidad, como la fácil obtención y explotación de recursos naturales, rutas
de comercio diversidad y exportación de productos, así como la demanda de
éstos. Teotihuacán los tenía todos.

Aunado a lo anterior, cabe mencionar su estructura social, pues parte de su


economía se debía a que se cree que era gravemente influenciada por los brujos
que llevaban a cabo los rituales ceremoniales.

Como resultado de esto, existían dotes o impuestos que mantenían a las clases
sociales altas, lo cual es una muestra de administración económica considerable
en una población de más de 120.000 habitantes.
Conclusión:

La cultura de Teotihuacán es una cultura que existió hace muchos años la cual se
desarrolló en la civilización de Mesoamérica Teotihuacán fue una urbe
cosmopolita en cuyo florecimiento se vieron involucrados grupos de diverso origen
étnico, se conoce acerca de sus antiguos constructores, creencias religiosas, o el
idioma. La ciudad de Teotihuacán se convirtió en el epicentro de la cultura y el
comercio de la antigua Mesoamérica, superando a la antigua Roma en tamaño.

La ciudad de Teotihuacán fue uno de los centros religiosos más importantes de


Mesoamérica. Su horizonte estaba dominado por dos enormes pirámides que los
aztecas llamaban la "Pirámide del Sol" y la "Pirámide de la Luna", ambos unidos
por una ancha avenida .Algunas de sus ciudades mas importantes son: Tikal y
Monte Albán, entre otros sitios que tuvieron una importante relación con los
teotihuacanos.

Bibliografía

https://heraldodemexico.com.mx/mer-k-2/teotihuacan-una-zona-que-seduce/
https://www.lifeder.com/economia-teotihuacana/

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