el debate, qué significa la palabra debate o cuál es su contenido conceptual, para su posterior explicación y aplicación en el ámbito particular de interés, el primer elemento auxiliar que se tiene es el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, de cuya consulta extraña no encontrar la definición común: “Acción y efecto de debatir”, como sucede con frecuencia al efectuar una indagatoria de esta naturaleza; el diccionario solo proporciona los siguientes sinónimos: controversia, discusión, contienda, lucha y combate.
Sin embargo, como la voz debate deriva de la palabra
debatir, al indagar el significado de esta se obtiene mejor resultado, al ser definida como “Dicho de dos o más personas: discutir un tema con opiniones diferentes”, en tanto que “discutir” se define como: “Dicho de dos o más personas: examinar atenta y particularmente una materia”. De su segunda acepción se dice “Contender y alegar razones contra el parecer de alguien”. La voz controversia es definida como “Discusión de opiniones contrapuestas entre dos o más personas”.
Combate significa “Pelea entre personas o animales” y “Lucha o batalla interior
del ánimo”. Finalmente, de la palabra “luchar” se afirma que es el “Dicho de dos personas: contender a brazo partido”; igualmente significa “Disputar, bregar, abrirse paso en la vida”. Sus voces sinónimas son pelear y combatir.
De los estudios relativos a los métodos de enseñanza-aprendizaje se conoce que
el debate es una técnica para analizar o discutir, entre dos o más personas, verbal, argumentativa, formal, respetuosa y públicamente, un tema o temas interesantes, polémicos, oportunamente determinados, conocidos y estudiados, caso en el cual los participantes deben postular y defender su personal convicción, como especialistas o conocedores de la materia. El debate es una competencia intelectual; se sustituye la lucha, el combate, la pelea física, por los argumentos.
Para celebrar un debate se deben establecer reglas previamente; sobre todo de
respeto recíproco, de intercomunicación, no agresión, no descalificación, de orden en las intervenciones, número de participantes, número de oportunidades para argumentar y contra argumentar, tiempo de cada participación, que debe ser breve, sucesiva y no simultánea, además de especificar el tiempo que ha de durar todo el acto.
A fin de garantizar el adecuado, puntual y eficaz
desarrollo del debate, se debe designar un moderador o coordinador, idóneo, prudente, objetivo e imparcial, con autoridad moral y profesional, quien debe imponer orden y no limitarse a conceder el uso de la palabra a los debatientes.
En síntesis, el debate es una forma disciplinada,
metódica y respetuosa, de analizar, entre dos o más personas, con la intervención de un tercero imparcial o moderador, uno o más temas comunes, trascendentes o al menos interesantes, previamente seleccionados y conocidos o estudiados, que sean motivo de controversia, discusión o diferente apreciación, conforme a la personal forma de pensar, ser y actuar, de cada uno de los participantes, con la finalidad de proponer conclusiones o soluciones, en su caso, las cuales pueden ser coincidentes o divergentes, pero siempre razonables, lógicas, sustentables y factibles.
El debate puede ser acalorado, vehemente, pero no irrespetuoso. Para vencer
se debe convencer, con argumentos lógicos; no se ha de insultar, zaherir o menospreciar. Las intervenciones de los oradores deben estar a la altura de la dignidad humana; no más, pero tampoco menos.
¿Qué es un panel de discusión?
Un panel de discusión es un formato de
discusión de cara a un público o en privado, en el que existe una mesa o panel de invitados cuya opinión sobre una materia específica y determinada se desea escuchar. Estos invitados se denominan panelistas. Los panelistas hablan por turnos, de manera organizada, en torno a un tema en el cual pueden aportar diferentes perspectivas y razones. Suelen ser coordinados por un mediador o moderador que por lo general no manifiesta su opinión o se reserva un punto medio o neutro.
El público, así mismo, se abstiene generalmente de participar en el debate, a
menos que en el mismo se les brinde una opción (por lo general al final) de preguntas o de comentarios. Los paneles de discusión son frecuentes en debates políticos, en medios de comunicación o en debates especializados, y en ellos pueden abordarse temáticas de toda índole: científica, legal, moral, etc.
¿Para qué sirve un panel de discusión?
En un panel de discusión se debaten distintas perspectivas acerca de un tema.
Los paneles de discusión son espacios amigables,
seguros, pero a la vez formales, de abordaje de temas que bien pueden ser polémicos y en otros sentidos resultar difíciles de abordar.
En un panel de discusión se reúnen voces oportunas para el debate y pueden
realizarse preguntas. Respetando el tiempo de respuesta, se intenta exponer la materia a partir de puntos de vista que pueden bien ser muy distintos o contradictorios entre sí.
Estructura básica de un panel de discusión
Los paneles de discusión suelen estar
formados por de tres a cinco integrantes, siendo siete el máximo aceptable para que el debate sea operativo y no se desorganice.
Se estima que un panel de discusión
dure alrededor de dos horas, en las que cada panelista tiene una misma cantidad de tiempo disponible (entre 10 y 15 minutos), para exponer su perspectiva lo mejor posible. Para ello, deben evitar desvíos y divagaciones.
Luego de la fase de presentación, se da inicio a una fase de discusión o de
debate, en el que se formulan preguntas (por el moderador, el público o los propios panelistas). Se permite el intercambio de opiniones, la interrupción y la réplica, siempre y cuando se respeten las normas de intercambio organizado de ideas.