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LA INVOLUCIÓN
DE LA MASA Y
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OTROS
RETRASOS
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Por Luz Elena Moreno
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[Seleccione la fecha]

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Luz Elena Moreno

INDICE

Prólogo……………………………………………….7
Capítulo 1
Lo que éramos sin el internet…………………...10
Capítulo 2
La Relatividad de la Moral……………………….22
Capítulo 3
La revolución del maquillaje…………………….34
Capítulo 4
La pérdida del tiempo…………………………….45
Capítulo 5
No se viven las experiencias, se publican…….53
Capítulo 6
Los humanos que han perdido el
aprecio por su vida…………………………………61
Capítulo 7
Las redes sociales como puntos
de blindaje...…………………………………………66

1
Luz Elena Moreno

AGRADECIMIENTOS Y DEDICATORIA.

Agradezco a Dios, al Creador, al Gran Arquitecto, antes que

a nada, por tan hermosa oportunidad de escribir.

Antes que cualquier otra clase de ciencia o de aplicación

numerológica, el homo sapiens se dedicó a dejar impresas
en las rocas la representación de su propia vida, de su
mundo material y espiritual, dejándonos una cantidad de
enseñanzas a través del tiempo y del espacio, que nos
permiten hoy, entender nuestra propia evolución.

Si el hombre de antes no hubiese escrito, nada se sabría

acerca de lo que fuimos en el pasado. Solo así entendemos
hoy nuestro presente y seguimos en nuestra labor de
evolución hacia el mejor camino que conduce a la felicidad
plena, no aquella dineraria ni del mundo material, esa no;
pues esa nos mantiene inmersos en el espejo de la vanidad,
del narcisismo, de la irracionalidad, de la ira y del desprecio
por los demás, que es lo que precisamente hoy critico al

2
Luz Elena Moreno

interior de este pequeño discurso, el cual me fue dado por la

conciencia para compartirlo con todos ustedes.

Así pues que, después de dar gracias a Dios por su guía de

iluminación y la creación de la escritura a través de la
evolución, siguen las gracias a mi familia: María José, Linda
Salomé, Samuel Andrés, mi esposo y mi madre. Ellos son la
fuerza que me mantiene al pie del cañón, convencida de que
este es un paso que me avoca a hacer lo correcto: Escribir.
Toda mi vida he escrito: escribí cuentos desde los 8 años,
poesías, historias y luego pinté. En algún momento del
camino, todo ese amor al arte, a la escritura y a la lectura, se
perdió convirtiéndose en Derecho Penal.

Pero en mi travesía por el Derecho Penal también escribí;

escribí mucho de hecho, para mí y para otros. Hoy puedo
decir con absoluta convicción que hice siempre lo correcto y
convencida de que aplicaba a cabalidad el propósito del
Juez: impartir justicia. Es triste ver a aquellos que tienen la
oportunidad de impartir justicia y que no la vean; ¿que no
vean qué? Dirán ustedes, y yo les responderé: QUE NO
VEAN LA JUSTICIA! Se van por las ferrovías de la ley

3
Luz Elena Moreno

simple y pura, como si ella fuera aplicable a todos los

asuntos utilizando la objetividad de los conceptos y
olvidando el de la relatividad de Einstein. Las cosas son
relativas porque el objetivo es visto desde distintos sujetos,
así de sencillo. La Justicia por eso no puede ser una sola y
objetiva para todos los congéneres y aunque no es relativa,
lo que sí preciso es que se advierte única y verdadera una
vez enfocada desde el sujeto que la necesita. Ella, la
Justicia, de la mano de la verdad se convierten en todo, y del
todo, nada hay por fuera.

Para finalizar debo decirles a mis lectores que hoy me decidí

a escribir por mí y para ustedes, quienes quieran leerme. A
éstos últimos también van dirigidos mis agradecimientos,
respetuosos y afectivos agradecimientos.

La autora.

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Luz Elena Moreno

¿Qué es la vida? –pregunta el maestro-. La vida es la

existencia misma. Crecemos y existimos, eso es vida -
respondió el estudiante-.

No, -dijo el maestro-. La vida no es crecer y existir

porque sería entonces, tan solo la mera materialidad de
la carne en movimiento. La vida es vivir con
consciencia, porque si vivimos sin ser conscientes de la
vida, seriamos solo un mero disfraz.

Luz Elena Moreno.

5
Luz Elena Moreno

A mis hijos.

6
Luz Elena Moreno

PRÓLOGO.

Nuevamente enfrentada al prólogo, lo único que tendría para

decir es que este es un discurso originado de la
concientización y el despertar interno al que me veo avocada
con premura. Es cierto, el tiempo apremia y muchas son las
dificultades para terminar lo que realmente quiero decirle al
mundo, aunque si lo pienso mejor, sería sencillo: la
tecnología nos está deshumanizando.

El internet fue creado para la evolución de las personas en lo

que atañe a su estudio, trabajo y comunicación, pero como
todo en la historia de la humanidad, cuando se crea algo
para fines que nos enriquecen el alma y nos permite avanzar
como personas, terminamos malográndolo. Es una historia
que se repite a través del tiempo: Los aeroplanos, creados
por los hermanos Wright, muy seguramente con la idea de
acortar distancias y darle al planeta una forma de vuelo más
segura, total, cualquier otra cosa, menos para convertirlos en
un arma mortal que luego sería llamada As de cazas o peor
aún, aviones más grandes con disposición para albergar

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Luz Elena Moreno

bombas incendiarias que aniquilaron gran parte de la

población europea en la Segunda Guerra Mundial, como por
ejemplo, cuando se hizo uso del bombardeo sobre civiles
alemanes y el lanzamiento de las 2 bombas atómicas sobre
Hiroshima y Nagasaki en Japón. Y este es solo un ejemplo
de muchos.

Es por esta razón, que evidenciando lo que el internet está

haciendo con la humanidad, es que finalmente decidí escribir
este corto discurso sobre las formas en que nos
deshumanizan e involucionan a un grupo de razas,
digámosle, las iracundiosas. Sí, eso son: se sientan al frente
a su ordenador y buscan donde atacar; donde atacar con ira,
donde atacar con odio, donde atacar con humillación, donde
atacar con envidia, donde atacar.

Esta extraña raza de personas que actualmente hacen uso

de su computadora y concretamente del internet, son las que
han sido víctimas de la involución y fueron sumergidas en el
mar de los retrasos. La masa encefálica no se acrecienta
como lo hizo el ser humano a través de la historia con los
números, la sabiduría sagrada, los textos, la escritura, la

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Luz Elena Moreno

lectura, los poemas, la pintura, la filosofía, la metafísica, etc.,

por el contrario, retrocede a la torpeza del materialismo, del
activismo pacífico (son izquierdistas desde sus asientos
frente al ordenador), leen y se dedican memes, se atacan
bruscamente por sus diferencias sociales, son violentos de
lengua y maltrechos de corazón.

En estas condiciones, este es un abrebocas a lo que creo

que nos induce a la deshumanización y seguidamente
propongo una clave para transformar este apocalipsis.
Existirán muchos más ciber-problemas sociales que tal vez
ustedes mismos, en su despertar de conciencia, vean más
de lo que yo veo hasta hoy y si eso es así, me alegra
sobremanera. Les invito a que lo escriban y alguna vez lo
compartan conmigo. Shejiná.

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Luz Elena Moreno

LA INVOLUCIÓN DE LA MASA Y OTROS

RETRASOS.

Capítulo Primero

Lo que éramos sin el internet.

Antes de los años noventa las personas teníamos una

codificación natural totalmente diferente.

La única guía que recibíamos para superar los tropiezos

existenciales, eran nuestros padres, abuelos, maestros y los
propios amigos de infancia.

A ellos les comunicábamos con total sinceridad lo que en

algún momento nos oprimía, al punto que hacíamos liturgias,
sobre todo con los amigos, de la forma en que podíamos
superar la falla y seguir adelante.

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Luz Elena Moreno

Los juegos, ¡esos si eran de extremo! Pintábamos en la

mitad de las calles con tiza de colores las reglas de cada
juego, como también la forma en que éste se llevaría a cabo.
Así nació el stop, la lleva, la rayuela, el puente está
quebrado, el caucho, el ponchao, la verdad o se atreve,
mezú, saltar la cuerda, carreras de patinetas, patines o
bicicletas, y en fin, un cúmulo de ritos en campo
pavimentado que exigía nuestro contacto humano, así como
las discusiones, las disculpas y el descanso en las aceras
para debatir los resultados finalizados.

Ese contacto humano no era ajeno a los adultos. Por su

parte, ellos se reunían cada 8 o 15 días en la casa paterna
para celebrar lo que fuera. La comida era opulenta, así como
los discos de vinilos que acompañaban el agasajo y por eso
conocíamos la totalidad del trabajo musical de un solo
artista, porque nadie se pararía a cambiarlo cada 5 minutos
que duraba una canción. A lo mucho, lo harían para
cambiarlo al lado B.

Este conglomerado de personas y el contacto humano diario

hacía de nosotros buenas personas. No digo que ahora no lo

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Luz Elena Moreno

seamos, lo que digo es que ese diario trasegar humanístico

nos devolvía a las raíces de Confucio. Este sabio chino no
vio que la construcción de un imperio respetado por su
pueblo, y viceversa, estuviese en el autoconocimiento y el
entendimiento de las antiguas sabidurías para acrecentar el
alma, sino en lo externo. ¿Y qué es lo externo? Lo externo
son el conjunto de nuestras acciones diarias que no van en
contravía de la propia humanidad. Decía que cualquier ser
humano no podía resistirse a la calamidad de un niño. Por
eso, ejemplificaba su enseñanza con la persona que ve un
niño inclinado hacia un río para verter su dedo y la
preocupación que le causa dicha situación. Decía que
cualquier persona iría hasta donde el niño para retirarlo del
peligro.

Esta enseñanza, según Confucio, era un claro ejemplo de la

bondad en todos los seres humanos. Para regresar a ese
estado de bondad se requería de acciones, como la de la
persona que retira al niño del peligro; estas acciones eran
simples, y las mencionaba como la bondad, la tolerancia, el
amor al prójimo, la lealtad, el respeto a los mayores y a los
antepasados. Estas virtudes las explicaba a los gobernantes,
porque tomando el ejemplo del padre al hijo, si el padre se

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Luz Elena Moreno

comporta de manera recta, el mismo camino tomará el hijo

en su afán de imitarlo. En cadena, supondría una
proliferación de las buenas costumbres y por eso llamaba al
“justo medio” como todas las acciones de las personas que
deben asumir tanto en lo público, como en lo privado.

Este pensamiento sintetizado del Confucionismo, me

recuerda una historia de un hombre que actualmente se
dedica a dar charlas a las multitudes, pero que no encaja en
el positivismo, porque, según dice, no es un guía positivo. Es
jocoso su punto de vista porque sus historias terminan
dando una lección de vida a cada persona, dependiendo de
lo que estemos buscando. Se llama Yokoi Kenji, y en una de
sus historias de los viajes que tuvo a Japón (aunque
Confucio era Chino), me dejó retumbando el cerebro desde
el día que lo escuché a través de youtube. Y bueno, ustedes
dirán ¿Y no estás criticando aquí el internet?, mi respuesta
será que estás en lo cierto, pero más tarde explicaré la
forma de daño al que me refiero.

Regresando a Yokoi Kenji, contaba que una vez estaba

afanado por llegar a su casa y corría con rapidez por las
calles de Tokio, cuando de repente llegó a un semáforo. El

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Luz Elena Moreno

semáforo estaba en verde para los carros pero al mirar hacia

la autopista no veía que se acercara ninguno, por lo que
pensó que podría pasar, ya que no corría peligro su
integridad y nadie lo estaba viendo. Pero cuenta que tan
pronto iba a pasarse una persona se paró a su lado a
esperar el cambio del semáforo, y cuando miró hacia arriba
vio que era su padre. Su padre era un arraigado japonés de
costumbres antiguas, y tengo que mencionar, que Yokoi
nació en Colombia, hijo de madre colombiana y criado en las
calles de un humilde barrio en la ciudad de Bogotá.

Así que cuando vio a su padre le dijo: papá no viene ningún

carro, pasemos. Su padre le señaló el semáforo en verde
para los carros, y Yokoi le insistió: pero nadie nos está
viendo. A lo que su papá le respondió inmediatamente:
PERO YO SÍ ME ESTOY VIENDO.

Una parábola que para muchos tendría distintos significados,

yo la quise plantear en este pequeño discurso orientado al
enceguecimiento de las personas frente a lo que deben y
quieren SER; no como lo que nos vende el internet a diario,
NO, allí solo nos muestran frasecillas de cajón con las que
los oradores ganan miles de dólares en una carrera

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Luz Elena Moreno

sanguinaria donde despojan a los demás de lo mínimo que

resguardan para sobrevivir, y ¿con qué finalidad? con la de
venderles palabras de crecimiento personal –cuando el ser
grandes y el camino se nos avienen solos desde el
nacimiento-, ya que hinchados por el ego, creen que saben
todos los secretos para la elevación, y terminan
enriqueciéndose a expensas del afán de respuestas que no
tienen.

Así, el internet ha creado una bola de nieve que veo con

preocupación, imparable. Cada día nos alejamos de quienes
somos, de quienes amamos, del contacto humano y las
relaciones fraternales, con preferencia al hundimiento de la
cabeza posando los ojos frente una pantalla inerte e
involucionando, por contera, en el habla, en la escucha, en
el tacto, en la mirada e incluso, en el olfato. En el habla
porque ya no nos hablamos, nos escribimos; en la escucha,
porque ya no nos llamamos, nos enviamos “emojis”; en el
tacto, porque ya no nos abrazamos, nos mandamos “un
abrazo” simbólico; en la mirada, porque ya no vemos con
quienes “hablamos”; y en el olfato y el gusto, porque ya no
nos invitamos a comer, sino que posteamos lo que “estamos
comiendo” en soledad.

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Luz Elena Moreno

Volviendo a la parábola de Yokoi, todo este cúmulo de

acciones que hemos permitido a la máquina hacer por
nosotros, nos alejó de sí mismos. Lo único que importa es
cómo nos ven a través de las redes sociales los demás y
bajo ese norte, la naturaleza de la raza humana se está
perdiendo. ¿Cuál naturaleza de la raza humana?, dirán
unos; y la única respuesta que llega a mi cabeza es la de
relacionarnos, ayudarnos, colaborarnos y todo lo que atañe
a una correspondencia directa, cara a cara sin la máquina,
que nos eleva a la realidad del SER.

Como el título de este capítulo se llama “lo que éramos sin el

internet” entonces abordemos la máquina del tiempo y
mirémonos: dije antes que éramos un grupo de niños,
jóvenes y adolescentes corriendo por las calles
pavimentadas (algunas) de los barrios, relacionándonos con
los juegos de temporada. Nos despedíamos con la señal del
grito de nuestra madre y sabíamos que al día siguiente
tendríamos un nuevo encuentro nocturno de palabrerías,
juegos y secretismo.

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Luz Elena Moreno

Luego, a medida que crecimos los juegos se detuvieron, sin

embargo, las tertulias en las esquinas o andenes no lo
hicieron. Recuerdo que, ya entrados en la jocosa
adolescencia, el juego de carreras se convirtió en “la verdad
o se atreve”. Se atreve a darle un beso a un participante, de
timbrar en casa ajena o saludar a un desconocido, etc., y la
verdad de declarar un amor o irle a contar a tu madre quien
fue el que quebró ese jarrón que tanto quería.

En fin, las risotadas de los niños y adolescentes en las

calles, con la aparición del internet, un día se acallaron. Salió
el chat por salas siendo el más famoso LatinChat, aunado a
la red social Hi5. Con estos dos fenómenos en Colombia, lo
que se empezó a ver en las calles fueron su vacío y las
salas de internet atiborradas. Era el boom del momento
escribirse con personas desconocidas de otros países,
quedando en el olvido los conocidos de nuestro barrio. Y así,
de un momento a otro, pasamos por Myspace, al chat de
Hotmail, al LatinChat, a Facebook, a Twitter, a Instagram y lo
que vendrá, conferencias o llamadas con un holograma.
Mientras toda esta revolución del internet pasaba en este
país, crecimos, nos alejamos, nos silenciamos y cuando
levantamos la cabeza del ordenador, los amigos de la

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Luz Elena Moreno

infancia se habían mudado, otros se habían casado, unos

más se fueron a estudiar lejos, mientras que el resto seguía
viviendo en tu misma cuadra, pero se convirtieron en
absolutos desconocidos.

No me malinterpreten, no estoy tachando de diabólica la

internet, como tampoco criticando una herramienta que para
muchos es de gran ayuda, pero considero que nos
desfasamos en la intención de la tecnología permitiéndole
escoger a nuestros amigos, a nuestros enemigos y dejando
en el olvido a nuestros hermanos de infancia.

Es tan degradante lo que ha hecho con nosotros mismos,

que se convirtió en el escondite de criminales y además, de
personas hirientes que aprovechan las debilidades de un ser
humano que está al otro lado del mundo para atacarlo frente
a su aspecto físico, su credo, sus ideales políticos o su
conducta humana en general. Ahora tenemos más
observadores que los propios de nuestro barrio, de tal
manera que estamos expuestos a una cantidad de personas
inimaginables que pueden hasta bajar tus fotos a su
ordenador, crear perfiles, utilizarlas con distintos fines y no
solo personas del común, sino también las grandes

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Luz Elena Moreno

empresas que aprovecharon estos filtros mediáticos para

saber qué vendernos, a qué precio y cómo ponernos un
anzuelo para despojarnos de nuestro dinero.

Es tan simple que si yo llevo semanas diciéndole a mi

esposo que quiero comer pescado, de forma extraña mi
teléfono celular empieza a sugerirme una cantidad de
restaurantes de comida de mar en cada propaganda de
Youtube y Facebook. Así que, concluyo, no es tan
descabellada la idea de muchos teóricos de la conspiración
que hablan sobre la existencia de un grupo malévolo que
nos ve y escucha a través de este tipo de redes, o nuestros
propios celulares (El Gran Hermano)1.

Así entonces, sobre este capítulo solo tendré para decir, en

aras de no alargarme de tal manera que aburra a mis
lectores, es que lo que éramos antes se simplifica así:
Humanos. Y como humanos sosteníamos relaciones
humanas con nuestros seres más cercanos a través de
distintas formas que nos hacían evolucionar con las artes; la
escritura era una de ellas e importantísima, pues las cartas
nos exigían escribir de forma hilvanada para expresar lo que

1
Libro “1984” de George Orwell.

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Luz Elena Moreno

realmente queríamos y de paso, le agregábamos pinturas de

nuestra propia creación. El uso de los colores era un
imperativo insoslayable y el resultado nos enorgullecía,
porque era una mezcla de vibrantes pinceladas, que
particularmente, delimitaba con negro en cada figura y
sellaba con colbón para que se viera un muy brillante
paisaje.

Hoy, con el uso desmedido del internet, los celulares, las

tablets y las computadoras, a los niños les da pereza pintar.
Me di cuenta cuando revisando los cuadernos de mi hija
mayor solo podía verle dibujos a lápiz, dibujos que hasta la
fecha se niega a pintar -pese a que pide la compra de los
más deslumbrantes colores-, porque lastimosamente se
acostumbraron a usar un solo dedo. Sí, un solo dedo es
necesario para subir y bajar la pantalla; para crear trazos en
Paint y para enviar un “emoji” como respuesta a: ¿cómo
estás hoy?

Es tan increíble como que la noticia del día en redes

sociales, hablando de emojis, y ello sí me causó en gracia,
sea la programadora colombiana de Google que crea más
de no sé cuántos emojis y el de la “caca”.

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Luz Elena Moreno

Pienso realmente, y esto lo digo con honestidad, que puede

ser una mujer inspiradora para muchos colombianos porque
creó la “caca” en emoji para Google y Apple, pero insisto en
que esa no es la forma más acertada de inspiración en la
actualidad; de un lado, porque nada me dice que más
adelante, muchos años más adelante, al ser humano se le
olvide como se escribe “caca” en español -o cualquier otro
idioma-, dado que un “súper cerebro” que hace parte de la
nómina de Google lo abrevió con un “señor mojón”; y de
otro, porque se envía el mensaje a la sociedad, sobre todo a
la juventud, de que mientras menos pienses mejor, mientras
menos leas mejor, mientras menos escribas mejor.

De tal manera que, espero con absoluta fe que este “súper

cerebro” de Apple y Google, tenga muchísimas más
capacidades que las de crear basura y que esté siendo
sometida a un control mental de MkUltra para idear un emoji
representativo de la mierda.

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Luz Elena Moreno

CAPÍTULO SEGUNDO

La relatividad de la moral.

Siempre he tenido estos pensamientos extraños, frente a la

necesidad de abordar la capacidad de las personas para
enfrentar su caos de distintas maneras.

Pienso que, si conocen en síntesis la Teoría de la

Relatividad de Einstein, deben saber entonces que la misma
significa la relación de los objetos o de las cosas respecto al
sujeto que las visualiza. Es decir, el movimiento y el estado
de los objetos son relativos dependiendo del sujeto que los
observa; o mejor, la velocidad y dirección de una bola de
beisbol, por ejemplo, son diferentes para cada sujeto que se
encuentre en puntos determinados y distintos.

Es por ello que en tanto la moral puede ser relativa, ello se

debe al concepto de moral que te hayan inculcado en tu

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Luz Elena Moreno

entorno sociocultural. Pensemos: si juntas a dos jóvenes,

uno de clase media y otro de clase marginal, y éste último se
cría entre vándalos y el caos, creerá que lo moralmente
adecuado es vengar la muerte de su mejor amigo
ocasionando más muertes; mientras que el de la clase
media dirá que no, que matar es inmoral sea por la causa
que sea, teniendo en cuenta que su sistemas de creencias
sea contrario. Hay dos clases de moral para cada uno
dependiendo del entorno socio cultural en que se
desenvolvieron que determinará su concepto de moral, y no
podrán, entre ellos, convencerse el uno al otro de lo que es
su sentido original y puro, porque cada uno tiene un
concepto de moral diferente.

Lo mismo pasa con los puntos de vista. La verdad absoluta

no existe, cada uno es dueño de su verdad, dependiendo de
la vida que asume como propia, así que tratar de convencer
al otro de su concepto de verdad, resulta inocuo.

Si tenemos en claro estos conceptos, la vida en la red sería

sencilla y humana; las disputas por diferentes puntos de
vista, los enfrentamientos sobre ideales y la concepción de

23
Luz Elena Moreno

concretas vivencias actuales del mundo, no existirían al

interior de este cúmulo de circuitos interconectados que
pretende deshumanizarnos, creyéndonos portadores de la
única verdad divina. De hecho, el mundo está lleno de
críticos, más no de pacifistas ni elogiadores.

Se nos olvidó entonces que somos seres humanos

desarrollados en distintos matices climáticos, territoriales,
sociales, laborales, culturales y familiares. De tal suerte que
teniendo tanta influencia de estas circunstancias vivenciales,
evidentemente no podemos pensar igual, ni tener la única
verdad.

¿Qué hacer entonces? Lo más adecuado para cuando se

den estos enfrentamientos conceptuales es callar. Cuando
callamos le decimos al otro una de dos cosas: le decimos
que tiene la razón, o que no la tiene pero que se la
respetamos, de tal manera que ante la presencia de una
acción sin reacción por parte nuestra, el caos se acaba. Si
no contestamos al concepto de verdad que tiene la otra
persona tratando de convencerla de la nuestra (verdad),
terminamos la discusión y pasamos a otro nivel de

24
Luz Elena Moreno

conciencia; este nivel de conciencia es el de respeto mutuo y

por lo tanto, el de humanización.

Precisamente lo puse a prueba: un video que representaba a

una mujer golpeando a un hombre minusválido y le gritaba si
quería “violar mujeres”, fue compartido en la red social de
Facebook por uno de mis amigos –que no es imaginario
porque lo conozco-, por lo que le pregunté si sabía lo que
había ocurrido con antelación entre esas dos personas del
video, pero mi pregunta fue contestada por otro hombre que
simplemente me dijo si no veía que se trataba de una “cosa
feminazi” abusando de una persona discapacitada.

Pues bien. Nada contesté. En otras épocas, y eso debo

admitirlo, me habría enredado en una discusión sin fin con el
hombre, pero decidí callar. Finalmente, seguí con mi
comentario diciéndole a mi amigo no imaginario de
Facebook, que lo preguntaba porque alguna vez tuve un
proceso de una persona minusválida que en ese estado,
pudo dispararle en la cabeza a un joven de 16 años. Me
despedí cordialmente y abandoné el tema del video.

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Luz Elena Moreno

Más tarde vi que el hombre aquel que llamó “cosa” y

“feminazi” a la mujer del video, me había escrito un mensaje
interno en el que pedía permiso para compartirme un
documental de youtube muy interesante, que se titulaba algo
así como La Extinción de la Mujer Sabia, acompañándolo
con una explicación de que no pensara que no respetaba a
las mujeres, que con mucho respeto me escribía y sin ser un
hombre avezado del verbo o un erudito en estos temas,
tenía un gran respeto por todas las mujeres.

Es evidente que cuando me quedé callada frente a sus

aseveraciones respecto del video, le di la oportunidad a esta
persona que reflexionara y diera cuenta de las fallas que
estaba cometiendo al escribir despectivamente de una mujer
que ni siquiera conoce y además, como lo dije en esa
oportunidad, yo no estoy de acuerdo con ninguna forma de
violencia, pero me preocupaba que sin saber los
antecedentes del video se estuvieran justificando ambas
formas de violencias, situación que muy seguramente
entendió desde mi punto de vista, aunque no la estuviera
compartiendo. De manera formal le agradecí el documental y

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Luz Elena Moreno

luego de verlo le hice saber lo interesante que me pareció,

dándole los respectivos saludos fraternales. Fue así como se
acabó una discusión que nunca di pie para que se iniciara y
tampoco quedamos enfrentados por un video donde
aparecían dos personas desconocidas. Esta es la
importancia de guardar silencio. La paz propia y la de los
demás.

Ahora, no solo vibraciones tan elevadas como la paz y la

tranquilidad se avienen con el silencio, sino también la unión
con nuestros comunes bajo el entendimiento de los
diferentes puntos de vista que tenemos, como dije atrás, los
cuales dependen de estados climáticos, sociales, familiares
y hasta laborales; por lo tanto, la única verdad no se
identifica dentro de lo subjetivo o lo intangible como la moral,
la ética, el amor, la muerte, el tiempo, etc., lo que sí ocurre
con los bienes tangibles, donde la verdad tendría que ser
absoluta por su objetividad e identificable a través de los
sentidos, como los colores (a no ser que sea daltónico), las
fragancias, las superficies de las cosas o los sonidos,
aunque aceptémoslo; el mundo de hoy solo quiere estar en
desacuerdo con los demás y mantenerse en su única

27
Luz Elena Moreno

verdad, que hasta lo objetivo se ha vuelto relativo y por

ende, discutible.

Una de las variables de esta relatividad, diría yo es la ética.

Es cierto que filósofos antiguos la han establecido como la
ciencia que estudia la moral, última que comporta la rectitud
en la conducta de los seres humanos. Empero, como lo dije
anteriormente, la moral ostenta patrones de relatividad
dependiendo del sujeto que la vive y si lo anterior es así, la
ética no podría ser la ciencia que encierra estas formas de
comportamiento, pues ella, emana del carácter del ser
humano en su estado natural y puro sin las influencias
ambientales o sociales que luego transforman el alma. El
estado del niño.

Miremos los comportamientos de un niño o niña sin las

influencias de las que hablo: comparten sin esperar nada a
cambio, no critican a nadie, no envidian, no insultan, no
atacan, no culpan a nadie de sus problemas, si ven a otro
niño o un adulto en dificultades ayudan, no se toman nada
personal, nada los perturba, se desprenden fácilmente de los

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Luz Elena Moreno

obstáculos y se reinician. Superan el límite y lo vuelven a

intentar.

¿Quién conoce a un niño con depresión? ¿Quién ha visto un

niño medicado por ansiedad, depresión o estrés?

Mi vida ha transcurrido en su mayoría por el camino oscuro

de la depresión. No era una niña cuando empecé a
padecerla, sino que entraba en la pre-adolescencia y hoy en
día he identificado por qué sucedió. Pienso que la raíz de
ese problema fue el hecho de ser rara; digo rara porque en
el camino que elegí recorrer con este cuerpo me enfrentaba
a un sin número de obstáculos emocionales, que a esa
edad, ya no somos capaces de manejar, mientras que en el
estado del niño las cosas eran totalmente diferentes.

Cuando eras un niño la vida solo fluía. Ninguna autogestión

frente a nosotros mismos, como tampoco hacia los demás,
florecía en nuestras almas, por el contrario, el estado de
consciencia del niño es aquel que se mantiene sereno frente
a las acciones de otros, pues se mantiene conectado con su

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Luz Elena Moreno

propia naturaleza, con su propio yo. Luego, una serie de

circunstancias empiezan a inyectarles a los niños patrones
de conducta, que se originan en los propios pensamientos
cuando se adentra en la convivencia con los adultos. Y así,
las acciones de los adultos empiezan a influir en sus
pensamientos, variándolos de manera completa y por
contera, sus acciones. En definitiva, a partir de los 3 años o
más, nos convertimos en lo que vemos de cara a las
actividades de los adultos que nos rodean.

Lo mismo sucede frente a la utilización del internet. Pues

superado el estado del niño, como de la repetición de los
patrones que asumen los adultos con los que convivimos, lo
que hacemos es adentrarnos en un mundo repleto de redes
sociales que, entre informaciones, parodias, noticias
sangrientas, noticias buenas y demás, empiezan a
determinar nuestra forma de pensar, como de actuar. Puedo
asegurar, inclusive, que las emociones se ven afectadas por
las proyecciones de nuestros ordenadores y teléfonos
celulares, ya que no es lo mismo ver una serie de buenas
noticias, las cuales incluyen las acciones formidables de
toda una comunidad, que malas noticias con
concentraciones de masacres, maltrato animal, política o

30
Luz Elena Moreno

violaciones a los derechos humanos. Yo misma he vivido

este cúmulo de sentimientos ansiosos, que como dije atrás
me sumieron en la depresión, a causa de las noticias que
me afligían sobremanera.

Lastimosamente, como lo que trata este pequeño capítulo,

es la relatividad de la moral, cierto es entonces que lo que
me afecta a mí, a otro morbosamente puede satisfacerle.
Hay para quienes es adecuado, y de hecho importante, la
actualización de información sobre una serie de malas
noticias donde exaltan las insensibles acciones de unos
pocos, que los buenos actos de la mayoría de las personas
en el trato de los animales, los niños o la propia naturaleza.
Es más, muchos se jactan de lo bueno que va a estar un
informativo televisivo, dependiendo del grado de violencia
que incluya. ¡QUE LAMENTABLE!

La moral es relativa. Para unos, dependiendo del medio en

que se han desarrollado, es de extrema relevancia el internet
con un alto grado de noticias fatales, mucho más que las
buenas noticias. Todo depende del medio en que te has

31
Luz Elena Moreno

desenvuelto y si no, depende del modelo que has decidido

romper.

¿Qué quieres ver? ¿Malas o buenas noticias? Rompe el

patrón, rompe la programación inculcada desde el abandono
del estado del niño; decídete solo a ver lo bueno que te
podría aportar el internet e inclusive, no solo los
pensamientos se reprograman para la bonanza, sino
también tus emociones y tu propio futuro. Algo que he
comprobado desde que decidí romper mi patrón, es que la
realidad de mi mundo ha cambiado totalmente; dejé de
seguir, como de buscar las noticias malas que emulan los
peores comportamientos de los demás, y los cambié por
informativos alegres, llenos de buenas acciones realizadas
en distintas partes del mundo, denotando que mi vida se fue
transformando de la misma manera. Empecé a vibrar con lo
que realmente quiero ver y aunque algunas personas me
digan que me mantengo “alejada de la actualidad”, un año
de tranquilidad supera, en exceso, la necesidad de ver solo
lo peor de los demás. Aceptémoslo, hay más personas
buenas que malas, lo que pasa es que nos contaminan con
lo que les interesa que veamos: únicamente lo malo,
únicamente lo perverso, únicamente lo desestabilizado,

32
Luz Elena Moreno

únicamente el sufrimiento para que pensemos, que el

planeta en su totalidad, vive en un absoluto caos.

Rompe el patrón.

33
Luz Elena Moreno

CAPITULO TERCERO.

La revolución del maquillaje en las redes

sociales.

"Y 'Asa'el enseñó a los hombres a fabricar espadas de

hierro y corazas de cobre y les mostró cómo se extrae y
se trabaja el oro hasta dejarlo listo y en lo que respecta
a la plata a repujarla para brazaletes y otros adornos. A
las mujeres les enseñó sobre el antimonio, el maquillaje
de los ojos, las piedras preciosas y las tinturas. (La
revolución del mundo)”-

Libro de Henoc. 8.1.

Amo el maquillaje. Para nadie es un secreto que amo el

maquillaje. Pero una oleada asesina se cierne sobre él.
Hombres y mujeres nos hicimos adictas a las compras de las
paletas, tanto caras como económicas, enriqueciendo a un

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Luz Elena Moreno

sinnúmero de personajes que ni siquiera se maquillan en su

realidad.

Pero con una insensibilidad acomodada, lo que hicieron fue

instalarnos en nuestras mentes que cada producto
revolucionario que sale al mercado, bien sea paletas de
sombras, iluminadores, labiales o pestañas postizas, deben
ser nuestras a toda costa. Y el costo que muchas pagamos
ha sido devastador. En efecto, yo misma lo sufrí pensando
que a raíz del trabajo tan pesado que diariamente realizaba
dentro de mi profesión, me merecía todo un cúmulo de
maquillaje innecesario y a cambio de hacerme feliz, lo que
hizo de mí fue la peor versión que jamás haya visto. La
adicción.

Una de las cosas que las personas creen, es que la adicción

o los vicios, solo se circunscriben a aquello que está
prohibido por los Estados. Mentira. No solo los sicotrópicos
como la marihuana, la cocaína o la heroína son los únicos
vicios en los que las personas podrían fenecer, sino también
todos aquellos que nos empobrecen y resultan inútiles en
nuestras vidas. Un ejemplo de esta situación es el

35
Luz Elena Moreno

maquillaje. Empecé a detectar que me estaba convirtiendo

en una adicta del maquillaje y todo, por la proliferación
mediática de las empresas dedicadas a esta industria que te
atiborran de propagandas sobre sus últimos productos. Se
han sumado a esta campaña sangrienta, mujeres y hombres
igualmente adictos, que crearon una revolución en las redes
con videos donde se maquillan utilizando los productos de
estas gigantescas empresas, con la única finalidad de recibir
gratis la totalidad de este tipo de elementos y más adelante,
hacerse a una carrera en la misma industria con su propia
marca o haciendo parte de una poderosa empresa que le
solucione su vida monetaria.

La cantidad de páginas, personas y empresas que han

atiborrado el internet con sus productos, no son más que un
ejemplo claro de la necesidad de estos empresarios que
desean y SE HACEN!, ricos a costa de los demás, no
proveyendo un servicio para la humanidad, sino
despojándola de su propia vida que se ve succionada por la
maleta repleta de productos de maquillaje que nunca usan
por falta de tiempo y desconocimiento de dicha labor. Me
encontré con muchas mujeres que decían tener más de 300

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Luz Elena Moreno

paletas de sombras con un solo uso, que no eran capaces

de despojarse de ellas y que QUERÍAN MAS!!

Tengo que aceptar que en esta revolución del mundo a

través de maquillaje, también caí yo; acumulé un total de 30
paletas de maquillaje, labiales e iluminadores que nunca
usaba, por falta de tiempo y desconocimiento, con la
absurda actitud de querer más. Mis días se convirtieron en
un trasegar sobre las páginas de Instagram y Facebook
mirando los nuevos videos de jóvenes, que sin ser
maquilladores profesionales, se aventuraron a usar todo tipo
de productos que a la mayoría de mujeres no nos funciona
igual, únicamente con fines publicitarios desinteresándoles si
en realidad estaban dando un servicio a la comunidad, o si
solamente ayudaban a la macabra labor de empobrecernos
cada día más.

Vendí la totalidad de mis paletas a precios absurdos

quedándome únicamente con una que me funciona y por la
que tengo un cariño especial. Tuve una cantidad de
mensajes donde me decían “las tiendas te van a odiar”, dado
que empecé a concientizar a las mujeres de que no

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Luz Elena Moreno

necesitaban tantas paletas. Y es que, piénsalo, ¿para qué

30 paletas de sombras? ES ABSURDO!, te aseguro que
solamente usarás 1 o 2, ocurriendo lo mismo con las
brochas y todo lo demás. Si te pones a ver la mayoría de
dueños de tiendas de maquillaje, como los fabricantes,
tienen grandes fortunas acumuladas, transitan en carros de
lujo, tienen sus propios aviones y lo más ridículo, es que no
necesitan a las youtubers que compran sus productos,
porque ellos mismos ejercen las acciones mediáticas
maquillándose, opinando de otras compañías y presumiendo
de sus excelentes vidas, mientras tú, que compras todo ello,
te mantienes en el anonimato y en la pobreza.

La revolución del maquillaje mueve el 3% de la riqueza

mundial y eso es muchísimo. Significa entonces que la
mínima cantidad que se dedica a esta industria, está
elevando imperios que solamente pueden detenerse si tú
dejas de comprar. RECAPACITA!, el dinero que le entregas
a estas mujeres y hombres que se han dedicado a vender
maquillaje, puedes usarlo sabiamente ahorrando, invirtiendo
o simplemente paseando con tu familia. Cometimos el error
de inyectar todas nuestras finanzas a personajes, que sin un
mínimo de altruismo, lo que están haciendo es empobrecer a

38
Luz Elena Moreno

las masas. Hay personas que ya son ricas de nacimiento y

no obstante ello, se dedican a la industria del maquillaje
apoderándose aún más del dinero que fluye en el planeta.
Contenedores que atraviesan los mares, llegan repletos de
productos de maquillaje a las costas de países
suramericanos, europeos y norteamericanos, elaborados
con un mínimo de esfuerzo e inversión porque China
intervino con su mano de obra más barata, lo que significa
que la mayoría de estos productos ni siquiera valen el precio
al que lo venden, obteniendo ganancias de hasta el 200%.
ES INCREIBLE!!

Aquí no tengo anotaciones de orden investigativo, sino de

simples visualizaciones adoptadas cuando fui una adicta al
maquillaje. Desperté de este sueño cuando estaba casi
arruinada y gastaba gran cantidad de dinero en este tipo de
productos, que ni siquiera tenía tiempo de usar, advirtiendo
que la promoción de videos por internet lo que estaba
haciendo de mi era convirtiéndome en una esclava de la
súper industria dedicada a lo banal. Lo más absurdo y
estúpido del mundo que una mujer u hombre pueda pensar,
es que necesita de esta serie de elementos adheridos a tu
piel en gruesas capas, pestañas que no son las tuyas y de

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Luz Elena Moreno

productos que ni siquiera sabes de su contenido en la

elaboración. No digo que esté mal, y de hecho lo apoyaría si
se tratara de vernos diferentes un día especial haciendo uso
de estas herramientas del maquillaje, pero en lo que no
estoy de acuerdo es que nos atiborremos de cosas que
jamás vamos a usar, mientras los más astutos se enriquecen
por nuestra idolatría.

Tuve la sensación de sentirme engañada en muchas

ocasiones cuando tenía en mis manos una serie de
productos nuevos, pese a que ni siquiera había empezado a
utilizar los que ya tenía en mi maleta. Es increíble. Hay
empresas que han gastado una gran cantidad de dinero en
China comprando elementos que llenarían una gigante
bodega, solamente para instalarnos en las consciencias que
los necesitamos. Basura. Solo basura. Basura producida en
cantidades para todo el planeta, que incluye maquillaje a
precios irrisorios que nos venden con una ganancia neta del
200%, sino diría que más. Las mujeres caemos en el ardid
de que todo cuanto venden es necesario para nuestras
vidas, hasta he visto el lema “LO NECESITAS EN TU VIDA”,
que de manera jocosa lo que hace, es que el cerebro
realmente capte el mensaje, también de forma divertida, y

40
Luz Elena Moreno

termines comprándolo. Si sumaras todo el dinero de

compras absurdas que has hecho en estas tiendas de lo
absurdo, te asombrarías de la gran cantidad con la que has
enriquecido a sus dueños. A mí me sucedió.

Sumé casi la totalidad de paletas de sombras, rubores e

iluminadores que vendí, dándome cuenta que perfectamente
habría podido viajar con mis hijos y mi esposo con ese
mismo dinero. Es una pena lo que hacemos con aquello que
nos cuesta ganar; pero no solo sucede con la industria del
maquillaje, sino que también pasa con otras cosas como la
ropa, zapatos, bolsos, carteras, adornos, etc. Un sinnúmero
de mercancías que permanecen expuestas en las vitrinas de
todos los centros comerciales y ahora del internet. Si tienes
una cuenta de Facebook o de Instagram, no te escapas a los
anunciadores de chucherías que nos meten por los ojos. Si
tenemos dinero de más, no dudamos mucho y en efecto, las
compramos.

La mediación del internet ha sido importantísima para llegar

a más gente con tus productos. No lo niego. Pero la batalla
que nos gastamos las personas con tendencia a la

41
Luz Elena Moreno

acumulación de cosas innecesarias, es imparable. Es

curioso de hecho. Te sigue a todas partes aquello que te
gusta y es como si el celular leyera tu mente consiguiendo
todo lo llamativo; de un momento a otro, llegan a ti
precisamente el día en que te pagan, una vasta serie de
propagandas que tienen que ver con tu punto débil: en mi
caso, el maquillaje.

Ahora, todas las mujeres que ves en las redes quieren

ganarse la vida maquillándose, lo hagan mal o bien, no
importa. Lo importante es figurar entre un montón de
féminas que se dedicaron a gastar inmensas cantidades de
dinero con el fin de recibir luego los obsequios de las
grandes industrias dedicadas a esto. Este tipo de
inspiraciones emanan de mujeres que están en la cima de la
picota pública y que recorrieron este mismo camino. No
niego que hay muchas de ellas ahora dedicadas a labores
sociales y a la ayuda de sus compatriotas, de tal manera que
se aprovechan de la reacción mediática que han obtenido.
Eso es aplaudible. Lo que no sé y siento sospechar, es que
se trata de otra de las manipulaciones del medio para
deshumanizar al resto de personas; en una pelea a muerte

42
Luz Elena Moreno

por obtener la estrella, se empobrecen familias a causa de

una industria cada día más rica.

Esta crítica, como las demás que he hecho a ciertos grupos

de humanos deshumanizados y su utilización del internet,
está guiada a la mesura. De ninguna manera tacho la bella
profesión del maquillista, de hecho conozco a varios que son
extraordinarios y que inclusive saben medirse a la hora de
comprar sus implementos de trabajo; pero esta diferencia
con la de las niñas y niños que no son maquilladores
profesionales, sino empíricos y artísticos, nos ha mostrado
un mundo de lo más banal y absurdo, que muchos quieren
imitar. Por esta razón, el uso de este tipo de “blogueros” o
“youtubers” como son llamados, fue ampliamente
aprovechada por las industrias que no cortos con lo que
estaban haciendo, vieron la gran oportunidad que se les
abrió al no tener que pagar propaganda, porque muchos se
la hacían gratis usando sus productos a gran escala. Estas
personas que compran una paleta, la usan una sola vez en
un video y la archivan, son los que median entre el público y
la compañía: dependiendo de cuantos seguidores tenga esta
persona mediática, terminan enviándole gratis toda su
basura a cambio de que la enseñen a las 2 millones de

43
Luz Elena Moreno

almas que se endulzan con una paleta, por ejemplo, que ni

siquiera saben usar. De todos modos, esto no les importa al
youtuber ni a la industria, la idea es que se pague el precio
del vicio y se enriquezca al jíbaro.

Es importante que abramos los ojos y nos demos cuenta que

lo que hacen los youtubers famosos, como las industrias, es
contribuir a un millonario negocio del que se aprovechan
arrebatándonos el dinero; poco les importa la humanidad, su
relación con la familia o el daño que hacen a los hogares con
su mediación avasalladora; no necesitamos 30 paletas para
maquillarnos, ni 120 brochas, 40 labiales y 15 iluminadores,
no. Véndelos y quédate con aquellas cosas que cumplan su
función para ti. NO COMPRES MAS.

44
Luz Elena Moreno

CAPITULO CUARTO.

La pérdida del tiempo.

¿Qué ha pasado con tu dinero y con tu tiempo desde la

llegada del internet?

Una pequeña cantidad de personas aprovecharon esta

interacción mediática para ganar dinero, mientras pasan su
tiempo en internet. Pero este reducido grupo del 3% orientó
sus capacidades para ayudar a los demás y ayudarse a sí
mismos, mientras que otros, como en el acápite anterior,
deshumanizaron a los humanos.

“Muchos humanos, poca humanidad”, escuché en una

melodía cantada por un español que recorre el mundo en su
motocicleta, tratando de despertar a los miles de millones de
dormidos que creen que el planeta es tal y como lo pintan.
Desasociados con su verdadero yo, una cantidad de
personas se apoderaron de la red y no solo venden cuanta

45
Luz Elena Moreno

basura termina en el mar –contaminándolo-, sino también

lanzando su propia basura hacia los demás.

En esta rueda de la osadía, nos vimos envueltos en un

momento de nuestras vidas agachándonos a la desgracia de
las redes y visualizando solo lo malo del mundo; terremotos,
inundaciones, masacres, bombardeos, homicidios, maltrato
infantil, maltrato animal y política. Estos son algunos de los
ejemplos que inundan las redes y en las que perdemos el
tiempo preciado de vida que se nos ha dado por el Creador,
sumiéndonos en una absoluta tristeza para luego culpar a
otros diciéndonos: “por lo mal que está el mundo”.

Pero ante la sola proyección de todo lo malévolo del planeta,

creemos que así es en todos los rincones del mismo; si
hubiesen solo buenas noticias en las redes, la vida de las
personas sería distinta; en efecto, yo lo he comprobado
(nada de lo que he dicho aquí no ha sido experimentado por
mí), pues me limité a seguir solo las páginas y personas que
esparcen alta vibración en las redes, a tal punto que ningún
canal de noticias veo en casa como tampoco escucho
información tóxica. Obviamente, ha sido imposible alejarse

46
Luz Elena Moreno

completamente de este caos, ya que el total de hermanos

con los que compartimos nuestras vidas mantienen al tanto
de esta amalgama de putrefacción informática y la relatan a
viva voz, o nos preguntan sobre ella, pero afortunadamente
conmigo no encuentran respuestas y deben cambiar el tema.
SI VIENES A MI CONTÁNDOME LO MALVADO DEL
MUNDO, TE DIRÉ QUE SOLO VEO LO BUENO QUE SE
DA EN ÉL.

Entonces, como el título de este capítulo es “La pérdida del

tiempo”, evidentemente a donde voy es que con el
seguimiento de estas caóticas noticias, se nos escapa el
tiempo viéndolas todo el día. Cuando se pierde tiempo,
también se pierde dinero. Tiempo en el que podríamos estar
ocupados creando bella poesía, novelas, cuentos, ensayos,
música o pintura, se la dedicamos a la desinformación de las
redes sociales. En épocas pasadas cuando no existían estos
medios, las personas dedicaban su vida a crear bellas obras
en todos los sentidos y ahora me pregunto: ¿Y si usáramos
la red para estas mismas creaciones? ¿Y si compartimos la
benevolencia del Mundo y de las personas que ayudan a
otros? ¿Si compartimos los buenos tratos que muchos

47
Luz Elena Moreno

animales reciben de personas caritativas? ¿Si inyectamos fe

al planeta?

Si nos reprogramamos y reprogramamos la red, el tiempo de

nuestra vida no se iría de la forma en que lo está haciendo.
Además, muchas personas pierden este valioso elemento
con el que se cuenta para la creación de un sistema
diferente que nos aventaría hacia la felicidad, no hacia la
infelicidad. He notado en varios de mis allegados, que el
problema político y gubernamental que vive el país en la
actualidad gracias a los políticos de turno, los tienen
padeciendo distintas enfermedades como la ansiedad, la
depresión, la ira y la intolerancia. ¿Tanto vale esta cadena
enfermiza de información que prefieres padecerla que
alejarte de ella?

No solo las personas se ven envueltas en esta manipulación

mediática para que bajen sus vibraciones, sino también para
enfrentarnos unos a otros. Lo cierto es que el concepto de
mal Gobierno, también es relativo. Muchos ciudadanos
adeptos a este enfermizo estado gubernamental, lo aplaude
y apoya; mientras que otros lo desacatamos, lo señalamos y
estamos en su contra. Pero déjame decirte que esto no se

48
Luz Elena Moreno

corrige siguiendo todas las comunicaciones malsanas para

“mantenernos informados”, concepto del que discrepo
totalmente. Nos han inculcado que es importante mantener
al tanto de toda esta putrefacción informativa, dizque para
estar actualizados, lo cual es una completa locura. ¿A quién
le interesa estar informado? ¿Y cómo sabes que lo
informado es la verdad? ¿Cómo cambias al mundo si
mantienes al tanto solo de lo negativo? ¿En qué le sirvió
para su crecimiento personal y espiritual la información
noticiosa a Buda, a Lao Tze, a Jesús, o a Gandhi, por
ejemplo? Por el contrario, lo que hicieron fue una labor de
introspección a las afueras de su pueblo o adentro, ayudaron
a otros, escucharon sus problemas y les ofrecieron una
solución.

Si descanalizas todo ese flujo informativo de porquería, le

quitas el poder de incidir dentro de ti a lo externo y los
sentimientos de ansiedad, de intranquilidad, impotencia, ira,
intolerancia y muchos más, se van desvaneciendo poco a
poco. Es cierto, el país en el que vivimos atraviesa un
desastroso gobierno, para algunos, para otros glorioso, pero
esta ambivalencia no se acaba atacándonos los unos a los
otros, insultándonos, maltratándonos, desuniéndonos y

49
Luz Elena Moreno

señalándonos. En cambio, si nos unimos en algo que

verdaderamente nos haga sentir plácidos con la vida en que
vivimos y procedemos a barrer toda la basura con la que nos
atacan desde las redes sociales, reprogramamos nuestro
cerebro para realizar una real acción que permita rebelarnos
en contra de lo que no estamos de acuerdo. Mantener con la
vista puesta en las redes sociales encolerizándonos, no
acabará con el problema; lo hará en las urnas, lo hará
ejerciendo activismo ciudadano y haciendo uso de la
Constitución Política con una revocatoria del mandato, pues
no se olvide: aparentemente nosotros los elegimos.

Ahora, se dirá que este concepto jurídico no aplica para el

Presidente de la República, por ejemplo. Pero en un
salvamento de voto emitido por un magistrado de la Corte
Constitucional en la sentencia C-179 de 2002, se dijo:
“Tratándose de la revocatoria del mandato, la
Constitución no contiene regulación alguna que precise
su contenido o determine su alcance. Además de la
enunciación que de ella se hace en el artículo 103, el
artículo 40 se limita a señalar que entre los derechos de
participación política que tiene los ciudadanos se
encuentra el de "Revocar el mandato de los elegidos en

50
Luz Elena Moreno

los casos y en la forma que establecen la Constitución y

la ley." Es claro, entonces, que respecto de la
revocatoria del mandato, la Constitución no ha
establecido un determinado modelo de participación y
que por el contrario, de manera expresa, defiere a la ley,
en general, la reglamentación del mecanismo, y en
particular, el señalamiento de los casos en los que el
mismo procede, así como de la forma en que habrá de
operar”, lo cual significa que podría alcanzarse la
revocatoria de un Presidente a través de una Ley, sin olvidar
las funciones del Congreso de la República que podrían
hasta destituirlo si lo hallase responsable de malas
conductas, decisiones, indignidad o delitos. Todas estas
posibilidades deben agotarse con el activismo político, no a
través de las redes sociales compartiendo noticias que
solamente nos provocan una serie de enfermedades y que
nos succionan la energía.

Dejando atrás la política, como solo un ejemplo, existen

otras circunstancias con las cuales las personas cada día se
entristecen más como lo son los maltratos infantiles y de
animalitos. De igual manera, hay formas de ser activistas
para derrotar estos flagelos, pero por favor, no te envenenes

51
Luz Elena Moreno

más con la basura de información, pues ello te enferma.

ELEVA TU VIBRACIÓN, SI DEBES ACTUAR, ACTÚA, SINO
DEJA ATRÁS Y TRABAJA EN TU CRECIMIENTO
PERSONAL. AYUDA A OTROS. AYUDANDO A OTROS
PODEMOS DAR INICIO A UNA BOLA DE NIEVE, QUE AL
PASO, ADHIERE AL CAMBIO.

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Luz Elena Moreno

CAPITULO QUINTO.

No se viven las experiencias, se publican.

Fotografiar y publicar en redes sociales lo que comes, lo que

haces, lo que lees, tus idas al gimnasio, tus salidas, tus
vacaciones, tus relaciones, tus compras, tus caminatas y
viajes, lo único que hace es privarte de vivir las experiencias
al máximo.

Las personas se están centrando más en publicar todo

aquello cuanto hacen con el afán de aprobación de los
demás. Ni siquiera proceden de esta forma para ufanarse
con sus amigos irreales de la Red, sino para tener la
satisfacción de los “me gusta” o “me encanta”, seguido de
mostrar la grandiosa vida que están viviendo. Tal vez no se
esté haciendo de manera consciente con estos propósitos,
pero lo cierto es que te estás perdiendo todo el placer del
instante que conlleva una grandiosa comida al lado de tu
pareja, las hermosas vacaciones, el paisaje de los lugares a
donde viajas, la compañía de tus amigos reales y tu familia,

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Luz Elena Moreno

porque después de la foto, viene el agachamiento de

cabeza, la elección de los filtros para verte mejor, el mensaje
inspirador y finalmente, la publicación. Si haces el ejercicio
después de un mes o una semana, intenta recordar esas
bellas vacaciones en las que te mantuviste sumergido en la
publicación de fotos y recuerda el momento: ¿No puedes
verdad? ¡Qué lástima! Te lo perdiste.

Vivir los momentos importantes de tu vida implican que te

mantengas al tanto de tu hoy, de tu ahora. Por esta razón,
cuando decides que no experimentarás cierta vivencia, sino
que la fotografiarás y la publicarás, te la pierdes. De eso no
hay ninguna duda. ¿Cuál es el afán de llenarte de fotos en
vez de recuerdos? Tengo que aceptar que yo lo hacía y
como lo dije atrás, todo lo que aquí expongo es porque lo he
vivido. Hay momentos en los que intento volver atrás y no
puedo. Entonces me concienticé que ello obedeció a mi
despreocupación por realmente vivir los momentos
agradables de mi existencia; de una u otra manera me perdí
de muchos instantes en mi vida por fijarme en mostrarlos al
mundo en que nos tienen en-RED-ados y otros tantos en
razón a mantener la mente en el pasado o en el futuro.

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Luz Elena Moreno

Ese es otro problema con el que nos identificamos.

Experimentar momentos grandiosos pero pensando en el
trabajo del lunes, o el regaño que el jefe te hiciera el martes,
te desvincula totalmente de lo que estás viviendo.
Mantenerte en el hoy y en el ahora, es crucial para que el
tiempo no se te vaya a la ligera, como tampoco los
recuerdos de tus vivencias.

Ahora, es importante en estas circunstancias pensar en los

demás: ¿Tengo una amiga que trabaja duramente y está
alejada de sus hijos en otro país? ¿Tengo un amigo con una
difícil situación financiera que no logra superar? ¿Tengo a un
primo que lucha cada día por salir adelante para pasear con
sus hijos y tener la vida que desea?

Muchos tenemos allegados en situaciones difíciles y aunque

el crecimiento personal nos enseñe que no debemos
compararnos con los demás, existen otras personas en el
mundo que aún lidian con sus circunstancias siendo posible
que se sientan mucho peor si alardeas de tu espectacular

55
Luz Elena Moreno

vida en la red. Siempre he pensado que antes de hacer

cualquier cosa, lo que sea, debes ponerte en los zapatos de
los demás. Cuando hago este ejercicio, me abstengo de
decir cosas hirientes, de maltratar a otros o de actuar de
formas que podrían hacer sentir mal a quienes atraviesan
dificultades. Mi esposo me contaba recientemente que uno
de sus amigos visitó su ciudad natal y se reencontró con otro
al que la vida le premiaba; este último, lo único que hizo en
escasos minutos, fue hablar de sus ganancias en dólares y
sus viajes a Europa. El primero se sintió desilusionado con
su propia vida al tener al frente a uno de sus compañeros,
de la misma edad, que llevaba una existencia de lujo. Viendo
luego a través de la Red las fotos de sus extraordinarios
viajes, la ropa de marca que llevaba puesta y recordando
sus ganancias en dólares, se preguntó entonces que había
hecho él todo este tiempo con su vida.

Su esposa, su hija y su trabajo ya no tuvieron ningún valor

de cara al fanfarrón que alardea de su superación. ¿Qué
tiene en la cabeza una persona que le desinteresa los
sentimientos de los demás? ¿Por qué hacen esto sin
preocuparse de que el otro se sienta mal? ¿Es más
importante demostrarle al otro lo bien que me ha ido, en vez

56
Luz Elena Moreno

de escucharlo y callar? Mi esposo le recordó a su amigo

derrumbado que tenía una familia por la cual sentirse
orgulloso y una gran vida, lo cual le devolvió las esperanzas,
pero definitivamente la toxicidad del alardeador le abrió una
herida.

Las redes sociales nos han deshumanizado. La vida misma

se ha acostumbrado a que no nos importe lo que piensen
otros, siempre que yo esté bien. Pero resulta que el Universo
no funciona así. Si te fijas en la naturaleza y en los animales,
te darás cuenta que todos tienen una función de servicio
hacia lo demás. Cada planta, cada flor, cada árbol, cada
pez, cada insecto, cada gota de agua, está conectado y
ostenta una acción de servicio hacía la unidad. Lo mismo
pasa con los seres humanos, si no programamos nuestra
vida para servir a otros, el propósito no se activa y tampoco
se nos retorna el beneficio que el Universo nos tiene
preparado.

En conclusión, LA VIDA DEBES VIVIRLA, NO

PUBLICARLA. Está bien mostrar algunos momentos, para
aquellos que así lo necesiten, pues la verdad yo dejé de

57
Luz Elena Moreno

hacerlo. Decidí vivir, no demostrar que vivo. Pero la clave del

cambio es concientizarse de que esta transformación se da
dentro de ti, no afuera. No necesitas demostrar quién eres,
tu diploma de especialización, tu carnet de donante de
órganos, tu pasaporte, tus zapatos Gucci, tus bolsos Furla,
tu viaje al extranjero, tu comida elegante, no, realmente no lo
necesitas y mucho menos publicarlo en la red; piensa un
momento: ¿Esto en qué me beneficia? ¿En qué beneficia a
otros? ¿Para qué demuestro lo que tengo? ¿O es que no lo
tengo? El problema de esta conducta nos ha enseñado que
somos lo que tenemos. Si tienes un título especialista o de
doctorado, dicen las reglas humanas que eso eres … pero
¿realmente lo eres? ¿Sabes tanto cuanto aprendiste?, ¿No
será mejor estudiar a consciencia, investigar, aprender,
aplicar y escalar cada día en el tema hasta dominarlo?

Si tienes ropa de marca o un carro, ello indica,

presuntamente, que estás progresando. ¿En qué estás
progresando? ¿Tus relaciones laborales, sociales y
familiares están bien? ¿Eres un ejemplo para otros y para tu
familia? ¿Todo lo que te adorna, lo debes? ¿Eres esclavo
del Banco para verte mejor? ¿No será mejor ser lo que eres,
por lo que eres? ¿No será mejor progresar en tu desarrollo

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Luz Elena Moreno

personal, espiritual y mental? ¿Las cosas materiales definen

lo que eres?

Estas interrogantes tienen como fin que la mirada hacia

nuestro interior nos permita vivir; vivir a plenitud, es
realmente vivir, enfocarse en tus maravillosas experiencias
que no obtendrás jamás porque esta vida en particular es
irrepetible, te centra en el ahora y te invita a reflexionar
sobre tu existencia única. La verdad es que no necesitas
alardear de lo que posees, porque ya lo tienes, ¿Qué más
da? Vestirte como ejecutivo no te hace ejecutivo, el hecho
de que te vistas así es para mostrarle a otros que eres un
ejecutivo cuando lo realmente importante es que conozcas
los temas a cabalidad. Una vez le explicaba a un músico que
quería un bajo mucho mejor del que tenía, que el bajo no
hace al músico; por el contrario, el músico hace al bajo. Esta
persona no comprendía; decía que era 50/50 porque si tenía
un bajo mejor sonaría mucho más profesional de lo que
suena ahora. Yo entiendo, en el campo de los músicos, que
se quiera un sonido particular para determinado género de
música, pero jamás podrá decirse que el cambio del
instrumento hará que suene mejor. Me daba esta persona el
ejemplo de un ingeniero de sistemas con una computadora

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Luz Elena Moreno

antigua y otra nueva; concluía que sería mucho mejor

ingeniero con la nueva dada sus capacidades y su
actualización. Tampoco es cierto. Un ingeniero de sistemas
no es bueno por la computadora que tiene, es bueno por lo
muy bueno que sea en su campo, en una u otra. El ingeniero
hace al ordenador, no al contrario. Es tanto así que le daba
la proyección, en su mismo ejemplo, del ingeniero sin
aptitudes con la computadora moderna. ¿Será que el uso de
esta lo haría un buen ingeniero? No. Como dije atrás,
distintas son las adecuaciones de las máquinas a tus
necesidades frente a la aptitud que tengas para manejarlas.

Por lo tanto, vive y sé. Vive tus experiencias y hazte el mejor

en tus profesiones u ocupaciones; cuando esto te sucede,
no necesitas demostrárselo al mundo, porque simplemente
ERES.

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Luz Elena Moreno

CAPITULO SEXTO

Los humanos que han perdido el aprecio

por su vida.

Dentro de todos los problemas que he visualizado y que

traté brevemente en este discurso, considero que el más
increíble es la inconcientización de las personas en el uso de
las redes. No he logrado entender que hay dentro de la
cabeza de un ser humano que se escribe por whatsap con
otro mientras conduce el automóvil. O que revisa sus redes
sociales mientras maneja su motocicleta o su bicicleta. O
que atraviesa la calle a la par que chatea con más personas.
¿Hasta qué punto de concientización por la protección de
nuestra vida, y la de otros, se ha dormido el sentido común
para llegar a estas acciones?

He pensado que un lazo invisible ata el sentido común con la

conciencia2. Cuando el sentido común nos indica que al

2
Conciencia: Tener claridad de las diferencias entre lo que está bien y
lo que está mal en el orden social, familiar o ético.

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Luz Elena Moreno

manejar un vehículo debemos tener la totalidad de los

sentidos alerta, nos concientizamos de que este tipo de
acciones se asumen con el propósito de proteger nuestra
vida y la vida de los demás. ¿Qué pasó entonces con estos
dos valores adheridos al hemisferio izquierdo del cerebro?
¿El lado racional quedó tan dormido como el creativo?
¿Involucionó? ¿se retrasó?

Un sentido de pertenencia por lo que nos une en el mundo

ha desaparecido de alguna manera. Nuestros antepasados
constantemente ejecutaban acciones que no pusieran en
riesgo a su comunidad o a su familia. Hoy pasa todo lo
contrario. El uso de las redes sociales de una manera
reiterada, de alguna forma, nos está adormeciendo el lado
izquierdo de la masa encefálica que actúa de manera lógica
y racional. ¿No es lógico que si conduzco mientras agacho
la cabeza para leer un mensaje, puedo causar un accidente
y perder la vida? O lo que es peor, ¿acabar con la vida de un
transeúnte o de los pasajeros? ¿Tan poco vale la vida hoy
que no nos hacemos estos interrogantes?

Consciencia: El conocimiento de sí mismo.

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Luz Elena Moreno

Transitar ahora en un taxi conducido por este tipo de

personas, nos sume en una crisis momentánea de ansiedad
y miedo. En mi caso, ya me privo de mirar hacia la ventana
para beneficiarme del paisaje que adorna mi ciudad, porque
mi cerebro me dice que haga uso de los ojos que no está
utilizando el conductor. Lo más sorprendente es que si le
pides que se enfoque en la actividad de conducción y aparte
el celular, se enfurecen. Un consejo que es por nuestra
propia seguridad, los enfurece. Qué triste. En una
oportunidad, cuando era transportaba por otro taxista junto
con mi familia, su distracción casi nos causa lesiones por
una colisión con otro vehículo que estaba parqueado;
simplemente agachó su cabeza para responder los
mensajes de la red social y no se percató del automotor que
iba adelante, el cual se detuvo para recoger una pasajera. Mi
grito lo alertó de manera automática y frenó. Este piloto se
concientizó del error y pidió disculpas por su acción, no
obstante, habría podido evitarla con un mínimo de sentido
común.

Así entonces, la deshumanización de la masa a causa del

mal uso que se le ha dado al internet y a las redes sociales
nos tiene al borde del colapso. El desinterés por la integridad

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Luz Elena Moreno

y la de otros ha quedado al final de los valores racionales,

sustituyéndoseles por la necesidad de contestar los
mensajes y mirar el Facebook. Estudios han indicado que
ahora existen más accidentes de tránsito que en antaño, a
causa de la utilización del internet en las actividades de
conducción de vehículos. Esta es la razón por la que cuando
te subes a un rodante conducido por una persona de la
tercera edad, no tiene ni siquiera un celular que lo distraiga
de su pilotaje porque sabe que está en juego su vida, su
integridad personal y la del pasajero; este instinto de
conservación ya no lo tienen desarrollado los conductores de
joven y mediana edad ya que son precisamente este tipo de
personas las que viven absortas por el internet, que ni
siquiera se detienen a pensar en los riesgos que producen
sus acciones.

¿Qué hacer? Aquí no puedo decir que callar y mucho menos

tolerar. La idea de la concientización para este tipo de seres
humanos es hablar, así se enfurezcan. He probado que mis
indicaciones respetuosas sobre mantenerse concentrados
en la conducción, pese a su desaprobación, terminan
aceptándolas y alejan el celular. Existirán casos en los que
no lo aprueben e insistan en la peligrosa actividad dual de

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Luz Elena Moreno

manejar y estar al pendiente de sus redes sociales, en este

caso, considero que lo mejor es desabordar el vehículo que
pone en riesgo tu vida.

A los conductores que tal vez estén leyendo este corto

escrito el consejo es simple: dos cosas no se pueden hacer
a la vez, y menos si requieren de tu absoluta concentración;
tu vida y la de tus pasajeros tiene valor propio no por ti, sino
por quienes te esperan de regreso.

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Luz Elena Moreno

CAPITULO SEPTIMO.

Las redes sociales como puntos de

blindaje.

El irrespeto, los insultos y las burlas son el pan de cada día

en las redes sociales, como en el internet en general.

La deshumanización ha llegado a nuestras vidas de formas

inimaginables. Estas reacciones mediáticas se hacen bajo la
protección del anonimato o la distancia. Burlarse de una
persona por su sobrepeso mientras ella vende accesorios y
alhajas, indica cuanto mal estás de la cabeza, ocurriendo lo
mismo con los acostumbrados memes que se viralizan ante
la toma de una carita graciosa de una niña o un niño; nadie
se pregunta si más adelante esto le afectará
emocionalmente.

La diferencia entre nosotros y los animales es la

consciencia. Se supone que nos fue dada para tratarnos con

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Luz Elena Moreno

amor y respeto, pero el hecho de tenerla dormida ha

promovido que los insultos, las burlas o los maltratos
verbales, estén a la orden del día. Ello ocurrió, porque las
redes sociales le ofrecen a cada una de las personas un
blindaje especial: nadie responde por nada, puede tratarse
de un perfil falso o puede ser alguien que actúa desde el otro
lado del planeta, revestido de completa impunidad social.

Debe entenderse querido lector, que desde mi punto de vista

plasmado en este pequeño discurso no tiene como finalidad
atacar el internet y mucho menos las redes sociales; lo que
intento es llamar al buen uso de estas herramientas de las
que personas supremamente inteligentes creyeron que
cambiaría el mundo para bien, no para mal. No supongo que
hayan pensado que los usuarios se enfermarían, se
insultarían, se atacarían, dejarían de vivir o se manipularan a
través de las industrias. Lo que pensaron, conceptúo yo, fue
llegar a más personas de formas asombrosas y darle el
adecuado uso para la investigación, la diversión y el
aprendizaje. Pero lastimosamente, como lo dije en mi
prólogo, siempre terminamos malogrando lo que se nos ha
dado con amor.

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Luz Elena Moreno

Acudo a ustedes con este discurso para reflexionar estos

temas, y muchos más que vendrán a sus mentes, que son
tan grandes como el Universo mismo con la esperanza que
se toquen el corazón: hacer uso de estas herramientas para
ayudar a los demás y tratarnos con respeto, crean caminos
al progreso emocional, espiritual y hasta tecnológico,
incluyendo el apoyo mutuo de las creaciones que
compartimos con cariño. Es inaudito que una página de
Facebook orientada a las artes plásticas no tenga más de
100 seguidores, ni comentarios ni apoyo alguno, cuando lo
que se ve en ella es una gran labor de una profesora que
cultiva el arte y enseña tácticas de dibujo a sus estudiantes,
mientras que las compañías de maquillaje chino, obtengan
más de 12 mil seguidores que mantienen al tanto del
contenido basura que registran y que además les SACA LA
PLATA!

ESTE MUNDO SE ESTÁ CENTRANDO EN LA BANALIDAD

DE LA MATERIALIDAD Y CON ELLA SE PIERDE, SE
DESHUMANIZA. SOMOS MÁS DE SIETE MIL MILLONES
DE PERSONAS CAMINANDO AL MISMO RITMO Y HACIA

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Luz Elena Moreno

EL MISMO DESTINO: EL DESAGUE. NOS UTILIZAN,

USAN NUESTRA ENERGÍA, SE PIERDE EL TIEMPO, NOS
INSULTAMOS, NOS MALTRATAMOS, NOS
ENFERMAMOS Y AL FINAL, ¿QUÉ GANAMOS?

Un abrazo querido lector.

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