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El linfoma canino, uno de los tumores cutáneos menos frecuentes en la práctica diaria,  se

clasifica en dos grupos: el Linfoma Cutáneo no Epiteliotrópico, y el Linfoma Cutáneo


Epiteliotrópico (LCE), constituido fundamentalmente por Linfocitos T.

El LCE a su vez se subdivide en tres categorías:

a) Micosis fungoides, con cuatro presentaciones clínicas:

 Eritrodermia exfoliativa, con eritema, prurito generalizado y escamas, el que


usualmente es mal diagnosticado como alergia, sarna o seborrea.
 Presentacion mucocutánea, con eritema, depigmentación y ulceración, comúnmente
diagnosticada como Enfermedad Autoinmune.
 Placas o nódulos cutáneos solitarios o múltiples , y
 Enfermedad oral, con la mucosa ulcerativa e infiltrativa, mal diagnosticada como
estomatitis crónica.

b) Síndrome de Sézary, con eritrodermia exfoliativa generalizada, prurito, linfoadenopatía


periférica, múltiples placas y nódulos y leucemia linfocítica.- Prácticamente es similar a la M.
Fungoides, incluso histopatológicamente, y se piensa que ambas patologías son variantes del
mismo Linfoma T.

c) Reticulosis Pagetoide, en su forma localizada (Woringer-Koloop) o generalizada,( Ketron-


Goodman) siendo esta última la mas frecuente en caninos. Se presenta como pápulas
eritematosas, placas, erosiones, úlceras en las uniones mucocutáneas, mucosa oral,
almohadillas, abdomen, con metástasis.

Materiales y Método.
CASO CLÍNICO 1: Canino, macho, 6 años,  raza indefinida.

Desde hace un año se encontraba en proceso de desensibilización por enfermedad atópica.

Hace unos 6 meses atrás el propietario notó la aparición de lesiones induradas, rojizas, firmes,
con algunas áreas de ulceración y exudación, costrosas,  que afectaban abdomen, cabeza,
pabellones auriculares, manos y patas (Fotos 1 a 6).- El prurito, que en un principio había
cedido al tratamiento desensibilizante, había retornado dramáticamente.

Ante la sospecha de estar ante una patología neoplásica, se indican análisis sanguíneos de
rutina (los que no revelan más que una leve neutrofilia), y una biopsia cutánea, con un
diagnóstico presuntivo de linfoma cutáneo.

El resultado de la biopsia fué: “Hiperqueratosis ortoqueratosica epidérmica, áreas de ulceración


epidérmica marcada, acúmulos focales de linfocitos atípicos y pleomórficos dentro de la
epidermis (microabcesos de Pautrier).Núcleos de linfocitos  con proyecciones de aspecto dedos
de guante (células de Sézary).- Dermatitis liquenoide compuesta de células linfóideas
pleomórficas, células plasmáticas, neutrófilos y eosinófilos, se observa en la dermis superficial 
y en forma periadnexial.

Diagnóstico: Micosis Fungoides Canina.

Con este diagnóstico, el paciente fue derivado al servicio de Oncología.

CASO CLÍNICO 2: Canino, macho, 12 años, Cocker Spaniel.

Desde hace 12 meses atrás comenzó con lesiones cutáneas que se observan en la consulta
presente como lesiones alopécicas,  dermatitis exfoliativa, escamas blanquecinas sobre el
tronco, eritema y úlceras en abdomen, depigmentación y úlceras en nariz y  labios, y
estomatitis.(Fotos 7 a 10).

El aspecto clínico, muy sugerente de neoplasia, indicaba la toma de muestras para biopsia
cutánea, lo que se hizo en este caso.

Los resultados histopatológicos fueron prácticamente similares al primer caso, con un


diagnóstico final de LINFOMA EPITELIOTROFICO.-

En este caso, el paciente fue derivado al servicio de Oncología.

Tratamiento:
Los animales fueron medicados según el presente protocolo:

 Lomustina, 80 mg/m2. cada 3 semanas (3 aplicaciones).


 Metilprednisolona, 1era. Semana 40 mg/m2./día, y continuar con 20 mg/m2. c/48 hs.
Indefinidamente.
 Tiempo de sobrevida estimado: 10 meses a 1 año.

Discusión.
Quizás la Micosis Fungoides sea la presentación cutánea más frecuente del linfoma canino
epiteliotrópico. En ambos casos observamos presentaciones distintas: en el Primer caso, se
observan lesiones en forma de placas y nódulos ulcerados, mientras que en el Segundo caso se
aprecian eritrodermia exfoliativa, lesiones mucocutáneas y enfermedad oral, es decir que en
ambos casos se resumen las presentaciones más frecuentes de la Micosis Fungosa Cutánea
Canina.- Desgraciadamente, no se ha logrado una sobrevida mas allá del año, luego de iniciada
la quimioterapia.

Conclusiones
Es de esperar que la evolución de los pacientes tratados con este nuevo protocolo de
Lomustina/Prednisolona, aparentemente más efectivo, con efectos secundarios menos severos
y una mejor tolerancia por el paciente que el tradicional protocolo de Ciclofosfamida, Vincristina
y Prednisolona, les asegure una mejor calidad de vida y una progresión mas lenta y menos
agresiva de esta patología que, lamentablemente, sigue siendo fatal.

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