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SAMUEL HUMBERTO PALACIO I.

Q UDES U R O L O G I A

ANESTESIA:

Es un acto médico controlado en el que se usan fármacos para bloquear la sensibilidad táctil y
dolorosa del paciente, sea en todo o en parte de su cuerpo y sea con o sin compromiso de la
conciencia.

CONSIDERACIONES GENERALES

En los últimos años, los avances más importantes de la cirugía urológica han sido la litotricia, los
ureteroscopios flexibles de alta calidad que permiten la endoscopia del tracto urinario superior y la
cirugía laparoscópica urológica. Frecuentemente el paciente urológico suele ser de edad avanzada
y presentar patología acompañante como bronquitis crónica, hipertensión, cardiopatía isquémica,
insuficiencia renal o paraplejia, por lo que es importante realizar una meticulosa visita
preoperatoria, para valorar su estado y el riesgo anestésico realizando las pruebas
complementarias que sean necesarias y tratar las carencias o deficiencias detectadas.

ANESTESIA REGIONAL

Desempeña un papel importantísimo en urología, por ser la mayoría de las intervenciones en el


abdomen inferior y periné. Sin embargo, algunos pacientes además requieren sedación o
anestesias generales superficiales suplementarias, por la posición forzada o por alargarse el
procedimiento.

Los pacientes sometidos a cirugía genitourinaria sufren una incidencia mayor de trombosis de las
venas profundas de las piernas, se ha demostrado que el bloqueo epidural disminuye este riesgo
en relación a la anestesia general. La anestesia epidural puede ser útil en la cirugía renal menor
(nefrostomías, etc.) pero para otros procedimientos resulta muy incómoda para el paciente.
Además, la cirugía mayor renal conlleva el riesgo de problemas cardiovasculares y respiratorios y
el peligro de apertura de la pleura, por todo ello es preferible la anestesia general.

La anestesia epidural ofrece algunas ventajas sobre la intradural, como son la instauración más
moderada del bloqueo simpático que no provoca cambios fisiológicos tan bruscos, la posibilidad de
poder graduar con mayor precisión el nivel del bloqueo, etc. Por contra requiere más tiempo y tiene
un mayor índice de fallos.

ANESTESIA PARA PROCEDIMIENTOS URETRALES Y VESICALES

Los exámenes endoscópicos de la uretra, y vejiga son unos de los procedimientos urológicos más
frecuentes que se realizan frecuentemente ambulatoriamente, para el diagnóstico de la hipertrofia
prostática, de tumores vesicales y su exeresis y posterior seguimiento, el tratamiento de las
estenosis uretrales, y la cateterización de los uréteres. La anestesia para estos procedimientos
varía desde la simple anestesia tópica para la uretra peneana hasta la anestesia general, y la
espinal. Cuando se elige la anestesia general, una buena posibilidad en estos procedimientos, es
utilizar anestésicos de vida media breve y recurrir al uso de la mascarilla laríngea.

Algunas consideraciones a tener en cuenta en estos procedimientos son las siguientes:

(1) Marcapasos: Cuando se utiliza el electrorresectoscopio puede interferir la función de los


marcapasos a demanda, aunque la mayoría (pero no todos) revierten a un ritmo asincrónico fijado
en caso de interferencia eléctrica. La interferencia electromagnética puede ocasionar bradicardia, si
el marcapasos permaneciera inhibido por la corriente del resectoscopio, se puede colocar un imán
sobre el marcapasos para pasarlo al ritmo prefijado.

(2) Uso de colorantes: Para identificar los uréteres durante la cistoscopia (también durante la
prostatectomía abierta), se puede administrar indigo carmín al 0,8% (5ml) e.v. o azul de metileno al
1% (1ml) e.v. que coloreará la orina. El primero tiene efectos alfa miméticos por lo que puede
causar aumento de las resistencias vasculares e hipertensión, el segundo puede provocar
hipotensión.

(3) Priapismo: En ocasiones, al intentar introducir el resectoscopio, se produce priapismo que


impide la realización del procedimiento y puede ser motivo de diferir la intervención. Se han
referido diversas soluciones a esta complicación como la administración endovenosa de ketamina y
diazepam, otra posibilidad es administrar en un cuerpo cavernoso de 2-4 ml de una dilución de 1
mg de etilefrina (Efortil) en 10 ml de suero fisiológico.

(4) Estimulación del nervio obturador por el resectoscopio: en ocasiones se puede producir la
perforación de la pared vesical porque el resectoscopio estimula el nervio obturador, que discurre
contiguo a la pared lateral de la vejiga, provocando una contracción brusca de los músculos
abductores y un desplazamiento de la vejiga que ocasiona la perforación. Para evitarlo hay dos
posibles soluciones, la anestesia general con relajantes musculares o el bloqueo percutaneo del
nervio obturador, cualquier otra técnica anestésica por si sola no previene esta complicación.

ANESTESIA PARA INTERVENCIONES EN LOS GENITALES EXTERNOS

Cuando se utiliza anestesia general, dada que la zona es muy reflexógena, se requiere
frecuentemente un plano profundo para prevenir la aparición de hipertensión o laringospasmo. Los
bloqueos nerviosos peneano, caudal, silla de montar, o epidural bloquean esas respuestas. Otra
ventaja de las técnicas regionales es que proporcionan una analgesia postoperatoria más
duradera.

Los procedimientos quirúrgicos sobre escroto, testículos, epidídimo y las reconstrucciones de los
vasos deferentes se pueden realizar con anestesia intradural o epidural. La cirugía urológica
pediátrica del hipospadias, la circuncisión y orquidopexia se pueden realizar bajo anestesia general
ligera complimentada con un bloqueo caudal (1,25-1,5 mg/Kg de bupivacaina al 0,25%), o peneano
según el caso, inmediatamente después de dormir al niño.

ANESTESIA GENERAL

La anestesia general hace que el paciente permanezca inconsciente durante la cirugía. El


medicamento se administra ya sea, por inhalación a través de un tubo o una máscara de
respiración o a través de una línea intravenosa - un tubo de plástico delgado insertado en una vena
(usualmente en el antebrazo del paciente).

Un tubo de respiración puede insertarse en la tráquea para mantener la respiración apropiada


durante la cirugía. Una vez terminada la cirugía, el anestesiólogo cesa el anestésico y el paciente
se despierta en la sala de recuperación. Cirugías de alta envergadura o cuando lo convenga el
anestesiólogo según la patología o el tipo de paciente.

SEDACIONES:

Los sedantes son medicamentos administrados para evitar que un paciente pueda sentir y/o
conscientemente recordar el dolor. Los sedantes se administran, por lo general, en forma
intravenosa, a través de un catéter intravenoso (IV).
La sedación profunda podría ser administrada por un anestesiólogo o anestesista, y en algunos
casos, por un profesional calificado que no es anestesiólogo. Cuando un anestesiólogo o una
enfermera anestesista administran sedación profunda, se denomina anestesia bajo monitoreo. Un
paciente que está bajo sedación profunda, por lo general, puede respirar por sí mismo, sin la
asistencia de una máquina para respirar.

La sedación profunda tiene como objetivo aliviar el dolor y disminuir la incomodidad y los
recuerdos, en un paciente que está siendo sometido a un procedimiento doloroso. Existen
diferentes niveles de sedación. Antes de alcanzar o entrar en el estado de sedación profunda, un
paciente pasa a través de niveles mínimos y moderados de sedación. Estos estados de sedación
no siempre son administrados por un anestesiólogo. El nivel de sedación refleja la capacidad del
paciente para sentir y responder frente al dolor y las instrucciones orales.

POSICIONES QUIRURIGICAS:

La colocación adecuada del paciente  en la mesa de intervenciones quirúrgicas forma parte de la


asistencia, que es igual de importante como los cuidados preoperatorios. Todo esto necesita que el
personal tenga conocimientos en anatomía así como fisiológicos, y saber identificar el equipo que
se ha de utilizar. Ayuda en la intervención quirúrgica a la cual se procederá.  La vía de acceso
previamente escogida por el cirujano y favorece la técnica elegida para la administración de la
anestesia. Intervendrán factores como la edad, la talla y  el peso total del paciente.
1.-POSICION SUPINA O DORSAL
El paciente será colocado con la espalda hacia abajo, su cabeza debe estar alineada de acuerdo al
cuerpo, los brazos y las manos deben estar  a un costado del cuerpo en un apoyabrazos
ciertamente en un ángulo menor de 90° en relación al cuerpo, se deben de tomar medidas de
seguridad es decir con el apoyo de abrazaderas para evitar la caída o la movilidad del brazo y
tener consecuencias como luxación.
El apoyo sobre la mesa será en tres puntos:
Una almohada pequeña debajo de la cabeza para fomentar la relajación de los músculos. 2. Una
almohada pequeña en el área lumbar para evitar complicaciones (lumbalgias). 3. Una almohada
pequeña debajo de la rodilla para que sea flexionada.
Intervenciones: Intervenciones en el abdomen, ginecológicas, urológicas, de cara y cuello, de
tórax, de hombros vasculares y ortopédicas
Variaciones  de la Posición Supina:

1)Trendelenburg invertida : El paciente reposa en la mesa en posición supina. La mesa


emergerá  para que la cabeza quede más baja que el tronco. Las rodillas reposan a la altura la
articulación de la mesa esta se fractura en la parte inferior  de tal modo que los pies caen sin
obstáculos. Se debe de colocar una faja para fomentar la fijación de las rodillas.
2)Trendelenburg invertida :
Se usa en intervenciones de cabeza y cuello. Sirve de apoyo en  procesos que involucran el
diafragma y la cavidad abdominal superior, y permite que el contenido vaya en dirección caudal
(hacia los pies).       

2. POSICION DE LITOTOMIA:
Es una posición indicada en cirugía vaginal, perineal, urología y rectal. El paciente se encuentra en
posición supina, los glúteos deben restar alrededor de 3 cm del límite de la mesa. Las piernas
reposan en los estribos o pierneras  de mayor grosor, siendo protegidas con una almohadilla para
evitar la fricción de las mismas con el metal.  
3. POSICION DECUBITO PRONO O VENTRAL:
Previamente anestesiado el paciente se voltea sobre su abdomen. Este procedimiento se realizará con
Lentamente  y brindando seguridad. 
Se vigilará que las vías respiratorias se encuentre libres de secreción, se flexionan los brazos hacia
Adelante por encima de la cabeza, bajo el tórax, hacia los costados se  apoya con almohadillas para
Permitir un buen funcionamiento pulmonar y  pueda resistir el peso del cuerpo, los pies y los tobillos
Se apoyan sobre un cojín para prevenir presión sobre los dedos; se sugiere bajo las rodillas colocar
Una Correa de seguridad.
Usos de la posición prona:
Intervenciones en la parte superior del tórax 
Intervenciones en el tronco
Intervenciones en  piernas
Intervenciones  de columna
Intervenciones de cocxi
Intervenciones de cráneo.
3. POSICION DE SIMS O LATERAL:
La posición básica lateral se cambia  en intervenciones específicas de tórax, riñón y uréteres.
La colocación  de los brazos se modifica según el sitio y la extensión de la incisión torácica. 
Para mejorar el estado de la posición se utilizan de apoyos extras  como cojines en intervenciones que
involucran el tórax y riñones.
4. POSICION DE KRASKE O NAVAJA SEVILLANA:
En paciente se encuentra en posición decúbito prono. La mesa se quiebra a nivel de la cadera, en un
ángulo que puede ser moderado o severo dependiendo de la necesidad del cirujano. Se utiliza en:
Cirugía rectal
Coxígea
INCISIONES QUIRURIGICAS
Una incisión es un corte a través de la piel que se hace durante una cirugía. También se denomina
herida quirúrgica. Algunas incisiones son pequeñas y otras largas. El tamaño de la incisión
dependerá del tipo de cirugía a la que se ha sometido.
Algunas incisiones quirúrgicas

En la anterior imagen falto la incisión de lumbotomia importante en nuestra especialidad para


realizar nefrectomías-

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