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Este poema describe escenas de violencia y opresión en la Edad Media, incluyendo caballeros galopando sobre cráneos humanos, siervos siendo azotados, y mujeres siendo perseguidas por perros con sus vestidos hechos jirones. También menciona bosques sombríos donde hombres son golpeados y brujas son acorraladas, y alude a épocas turbulentas marcadas por estandartes rojos y cabezas de guerreros envueltas en trapos negros. El poema expresa una nostalgia por los tie
Este poema describe escenas de violencia y opresión en la Edad Media, incluyendo caballeros galopando sobre cráneos humanos, siervos siendo azotados, y mujeres siendo perseguidas por perros con sus vestidos hechos jirones. También menciona bosques sombríos donde hombres son golpeados y brujas son acorraladas, y alude a épocas turbulentas marcadas por estandartes rojos y cabezas de guerreros envueltas en trapos negros. El poema expresa una nostalgia por los tie
Este poema describe escenas de violencia y opresión en la Edad Media, incluyendo caballeros galopando sobre cráneos humanos, siervos siendo azotados, y mujeres siendo perseguidas por perros con sus vestidos hechos jirones. También menciona bosques sombríos donde hombres son golpeados y brujas son acorraladas, y alude a épocas turbulentas marcadas por estandartes rojos y cabezas de guerreros envueltas en trapos negros. El poema expresa una nostalgia por los tie
Oigo caballos sin freno galopando Sobre los cráneos de los muertos, Las crines mojadas por la lluvia Y el sonoro latigazo de los ijares: Los cascos enrojecidos Al regreso de la fiesta. Oigo La castigada piel de los siervos Como un golpe seco sobre almohadones De sangre. Miro los bosques lastimeros Donde los perros persiguen A un hombre apaleado O acorralan a la hechicera sediciosa De cabellos de fuego, Junto al río nocturno que atraviesa La aldea mordida por el miedo. Miro los rojos estandartes De las carnicerías, los tiempos que regresan Con la cabeza del guerrero Envuelta en trapos negros. La aldea del mundo arde en mi sopa.
La noche de las sogas
Los orines espesos de la yegua
Junto a la alta empalizada que oponía la noche (Cuando los señores del sueño bebían vino de oscuridad), Sonaban en la calle con rumor de pieles o de gasas. Por esos mismos parajes el sueño señoreaba Junto al árbol que cantaba por el pico de un pájaro rojo Donde colgaba el ahorcado viento En la noche de las sogas En aquella noche que vertía un agua lechosa Y la mujer perseguida por los perros (Su vestido blanco hecho jirones) Tropezaba con cercados de sangre Esta es la larga noche de mi país La larga noche Con el cuerpo cubierto de algas y cuchillos Tal como aparecen en el grabado -aparecen sin título- en los grabados
Memoria de negras cacerías
Por los corredores del tiempo oigo caballos
Sin freno galopando sobre los cráneos de los muertos. Las crines mojadas por la lluvia y el sonoro Latigazo en los húmedos los ijares: Los cascos enrojecidos al regreso de la fiesta. Oigo la castigada piel de los siervos Como un golpe seco sobre almohadones de sangre. Miro los bosques lastimeros donde los perros Persiguen a un hombre apaleado O acorralan a la hechicera sediciosa de cabellos de fuego, Junto al río nocturno Que atraviesa la aldea mordida por el miedo. Miro los rojos estandartes de las carnicerías Los tumultuosos tiempos que regresan Con la cabeza del guerrero envuelta en trapos negros. La aldea del mundo arde en mi sopa.
...falta averiguar el título…
Entre la fronda he visto al caballo de los sueños
Con sus belfos de espuma, escuchando la música solar. Caballos góticos espoleados por el hambre, caballos Sucios de patria pastando lentamente sobre la sangre de sus muertos. Ah, y esos caballos untados de luna Corriendo entre jardines secretos cuyo rojo galopar es cosa de leyenda, Delirantes caballos que llegan deshojando a su paso La flor de los días estivales. Por espesos boscajes Ladrones de gallos y reses rondan los establos Con cuchillos ornados de negras crines Y por el bosque lluvioso chapotean las yeguas. De donde llega El caballo en llamas que recorre la planicie No lo sé. Pero vuela sobre la flor coagulada de los homicidios, Sobre las rotas banderas de las viejas banderas cuyo Arsenal de heridos también pone a galopar mi corazón Al que alguien clava espuelas de vidrio