La didáctica, según el enfoque cognitivo, es el proceso de construir los contenidos
y procedimientos a aprender de una manera significativa. Este concepto se
construyó bajo los estudios de Piagiet, Vigotsky, Ausubel, Novak, Bandura y Feuerstein sobre “procesos cognitivos”, y es por ello que transformar la práctica a través de la didáctica, proporcionará mejores resultados.
“El planteamiento central en cuanto a la metodología didáctica que se sugiere para
el estudio de las matemáticas, consiste en utilizar secuencias de situaciones problemáticas que despierten el interés de los alumnos y los inviten a reflexionar, a encontrar diferentes formas de resolver los problemas y a formular argumentos que validen los resultados. Al mismo tiempo, las situaciones planteadas deberán implicar justamente los conocimientos y habilidades que se quieren desarrollar.” (SEP, Plan y Programas de estudios 2011, Pág. 27)
Visto desde la concepción anterior, es importante dirigir el aprendizaje hacia el
proceso de descubrimiento, haciendo énfasis en el constructivismo, filosofía de Immanuel Kant quien propuso una síntesis entre racionalismo y empirismo; es decir combinar los conocimientos previos con los factores externos que se han de descubrir, para ello Kant planteó al constructivismo como filosofía crítica que examina el alcance que tiene el conocimiento, sustentado en las facultades de: la intuición sensible, el entendimiento y la razón.
Jean Piaget retomó esta filosofía y la constituyó de manera psicológica y
pedagógica, afirmando que el individuo es el principal constructor de su propio conocimiento, por tanto como docente debo facilitar las herramientas que permitan al alumnos ir haciendo sus propias estructuras cognitivas, dejando de lado la enseñanza directa en la que el docente da la solución a las problemáticas sin permitir que el alumno pueda desarrollar su pensamiento crítico y reflexivo.
Haciendo referencia a la pedagogía, Montserrat Moreno también plantea su
concepción sobre la pedagogía operacional que en la que también fundamento el trabajo a realizar. En cuanto a la constitución de la Pedagogía Operatoria Moreno, M. (1983), identifica cuatro ejes esenciales para el desarrollo de la misma, los cuales se mencionan a continuación:
Primero. El pensamiento operatorio que refiere la Pedagogía Operatoria, inicia
en los siete u ocho años hasta los once o doce años, teniendo un avance relevante en el desarrollo del pensamiento infantil. Durante el período se considera que se inician por primera vez las operaciones mentales relacionadas a situaciones concretas.
Segundo. La Pedagogía Operatoria tiene como su principal fundamentación que
el conocimiento es una construcción que realiza el educando por medio de su actividad con su entorno, a su vez, para lograr comprender la realidad, se apoyará en las experiencias que posea, de tal modo que el objetivo principal de la Pedagogía Operatoria es el inducir al educando para que construya sus propios mecanismos de pensamiento.
Tercero. Se debe generar el desarrollo de la deducción propia del niño, de la
ejecución de sus actos, para que se inserte en el conocimiento de los objetos y fenómenos de la realidad, sin que el docente la transmita como algo concluido.
Cuarto. La Pedagogía Operatoria otorga la jerarquía fundamental al error en que
el alumno incurre al formarse juicios respecto de su entorno. Éste o estos errores no se catalogan como un retroceso, por el contrario, son considerados como secuencias propias del proceso constructivo, puesto que infiere en el desarrollo de su conocimiento en base a la concientización de que las fallas son propias de la interpretación del entorno.
producción, mejorando mi práctica docente y por lo tanto dando mejores
resultados. Por ello retomaré como referente, la metodología didáctica de las matemáticas que plantea Guy Brousseau desarrollada en la “Teoría de Situaciones”. Se trata de una teoría de la enseñanza, que busca las condiciones para una génesis artificial de los conocimientos matemáticos, bajo la hipótesis de que los mismos no se construyen de manera espontánea. Guy Brousseau (1999) afirma que:
“(...) La descripción sistemática de las situaciones didácticas es un medio más
directo para discutir con los maestros acerca de lo que hacen o podrían hacer, y para considerar cómo éstos podrían tomar en cuenta los resultados de las investigaciones en otros campos. La teoría de las situaciones aparece entonces como un medio privilegiado, no solamente para comprender lo que hacen los profesores y los alumnos, sino también para producir problemas o ejercicios adaptados a los saberes y a los alumnos y para producir finalmente un medio de comunicación entre los investigadores y con los profesores.”