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INVESTIGACIÓN
YALPAY. HISTORIA,
TERRITORIO Y
POLÍTICA
Conceptos básicos
para el análisis
ecológico
Ecosistema
Ecosistemas Latinoamericanos
Ecosistemas insulares
• Las islas del Caribe, Atlántico y Pacífico
Ecosistemas acuáticos epicontinentales
• Los sistemas de corrientes
Los ecosistemas marinos
Ecosistemas pelágicos
• La plataforma continental
• Golfos y Bahías
Ecosistemas bentónicos
• El ecosistema bentónico
– La plataforma continental
– El mar profundo
• Las ventilas hidrotermales
Criterios para la clasificación de ecosistemas
Clasificación de hábitats
• Terrestre
• Acuático
• Aéreo‐Terrestre
• A su vez, cada uno de ellos tiene subclasificaciones
Procesos ecológicos de los ecosistemas
• Individuo
• Especie
• Población
• Comunidad
• Los estudios y procesos ecológicos se realizan a diferentes
niveles de jerarquía, o niveles de organización ecológica, los cuales
incluyen: individuo, especie, población, comunidad y ecosistema.
Individuo
• Es todo ser vivo presente en la naturaleza por ejemplo, planta,
árbol, bacteria, hombre, perro, una flor, etc.
Especie
• Son los individuos que se reproducen entre sí, donde sus crías
son fértiles, existen casos en que dos individuos de diferente especie
pueden reproducirse, pero en este caso sus crías no son fértiles, por
ejemplo, el burro con una yegua el resultado es una mula pero esta
no es fértil o sea no produce descendencia.
Población
• Es un grupo de organismos de la misma especie que se cruzan
entre sí y habitan en un área geográfica particular en un tiempo
determinado. Son ejemplos de poblaciones, los humanos,
manzanos, búfalos, etc.
COMUNIDAD
• Como todos los seres vivos requieren de otros seres vivos
iguales a ellos o de otras especies, surge la Comunidad o Biocenosis
que corresponde al conjunto de poblaciones, animales y vegetales
que se relacionan entre sí en un lugar determinado.
• En toda biocenosis existe una estructura y una dinámica
Estructura y dinámica de la comunidad
• Estructura de una comunidad biológica.
• Está determinada por la clase, número y distribución de los
individuos que forman las poblaciones. En la estructura de una
comunidad biológica se distinguen tres aspectos fundamentales:
composición, estratificación y límites.
• Dinámica de una comunidad biológica.
• La estructura física y biológica no es una característica estática
de la comunidad, ya que cambia temporal y espacialmente.
Dinámica de la comunidad
• La estructura vertical de la comunidad cambia con el tiempo,
conforme los organismos que la forman nacen, crecen y mueren.
• Las tasas de natalidad y mortalidad de las especies varia en
respuesta a los cambios ambientales, cambiando el patrón de
diversidad y dominancia de las especies, lo que lleva a lo largo del
tiempo y en el espacio a un cambio en la estructura de la comunidad,
tanto física como biológica, este cambio en el patrón de la estructura
de la comunidad es lo que se llama dinámica de comunidades.
• Dentro de la dinámica podemos encontrar tres puntos
fundamentales: las sucesiones ecológicas, las fluctuaciones y las
interacciones que se desarrollan entre las poblaciones.
Ambiente
• El ambiente (al que también llamamos medio ambiente) son
todos aquellos factores que nos rodean (vivientes y no vivientes) que
afectan directamente a los organismos (como nosotros).
Biomas marinos
• Bioma costero
• Plataforma continental
• Mar profundo
Regiones biogeográficas
• Las regiones biogeográficas, identificadas originalmente por el
ornitólogo inglés Philip L. Sclater (1829‐1913) y el botánico alemán
H.G. Adolf Engler (1844–1930), son grandes extensiones con flora y
fauna particular debido a su aislamiento durante la deriva
continental.
• Alfred Russell Wallace (1823‐1913), naturalista inglés,
contribuyó grandemente a la biogeografía con su libro “La
Distribución Geográfica de los Animales” en 1876.
• En principio se identificaron seis regiones: Paleártica (Europa y
Asia), Neártica (Norteamérica), Neotropical (México, Centro y
Sudamérica), Etiópica (África), India (Sureste de Asia, Filipinas,
Indonesia) y Australiana (Australia y Nueva Guinea). Actualmente se
reconocen ocho: se añadió Oceanía (Polinesia, Fiji y Micronesia) y
Antártica.
Siete ecosistemas bogotanos arrasados por
la urbanización
Fuente: Fundación Humedales Bogotá
Fecha de publicación: Agosto 25 de 2016
«Un sitio bueno y acomodado, sin selvas inhóspitas, sin plagas, alimañas o
fieras». Esta fue la frase utilizada por Gonzalo Jiménez de Quesada para
expresar su agrado y el de otros colonos hacia la Sabana de Bogotá, una tierra
donde cualquier cosa que fuese cultivada crecía rápidamente y donde se veía
agua brotando por todas partes. En total, las lagunas, humedales y chucuas
existentes en aquella época sumaban 50000 hectáreas. Para el año 2016, el
área ocupada por los humedales dentro del casco urbano se había reducido a
725 hectáreas (humedales reconocidos como PEDH) y el área verde promedio
con la que cuenta cada habitante es de tan solo 4,3 mts2.Una cama doble tiene
una superficie de 2,6 mts2.
Algunas de las funciones de los actuales ecosistemas bogotanos son las
siguientes: albergan cuerpos de agua que evitan inundaciones en épocas
lluviosas, son el hogar de paso de aves migratorias y de especies endémicas de
flora y fauna en vía de extinción, y además son pulmones urbanos que mejoran
la calidad del aire que respiramos, elevando así la calidad de vida de la
ciudadanía.
Para nadie es un secreto que los cimientos de gran parte de los barrios actuales
han sido construidos sobre el lecho de antiguas lagunas y humedales. Y pese a
que el daño ya esté hecho, es necesario que los bogotanos refresquemos la
memoria y le rindamos un homenaje a todos esos ecosistemas que fueron
arrasados para procurar no seguir cometiendo los mismos errores en el futuro.
Comencemos.
Parque Lago Gaitán
Foto publicada por La Prensa Colombiana, autor desconocido.
El sector El Lago aún conserva vestigios de un antiguo parque y lago, y me
refiero por supuesto al nombre del barrio y a un número considerable de
edificios que se encuentran inclinados hacia algún lado debido al subsuelo
húmedo.
Este parque fue bautizado en 1922 por los hermanos José, Domingo y Rafael
Gaitán. El primero de estos adquirió el terreno donde había un lago formado
por las corrientes subterráneas de la sabana. Los tres hermanos idearon una
zona de recreación y esparcimiento, y para ello dispusieron para los visitantes
ruedas de Chicago, restaurantes e incluso alquiler de caballos. Durante sus
doce años de funcionamiento el Parque Gaitán fue uno de los destinos
predilectos de las familias, las parejas y los extranjeros que llegaban a pie o en
tranvía.
El crecimiento de la población trajo consigo la necesidad de construir nuevas
viviendas, y dada la privilegiada ubicación del parque, surgió en los dueños la
tentación de venderlo. Eventualmente lo hicieron, numerosos constructores
fueron quienes rellenaron el lago y construyeron encima de él las edificaciones
donde actualmente se encuentran tiendas tecnológicas, centros comerciales,
universidades, tiendas de moda y mucha congestión.
Humedal de la Zona Industrial de Montevideo
Foto tomada por Bryan Calvachi Zambrano y publicada por Jorge Emmanuel
Escobar Moreno.
En el costado sur de la Terminal de Transportes, en medio de la contaminación
habitual de una zona donde pululan bodegas y parqueaderos, existía un
pequeño oasis que contrastaba con su sector. Se ubicaba en la intersección de
la Calle 21 con el canal San Francisco y desde la Avenida Boyacá hasta la
Carrera 70.
Por muchos años fue el pulmón de la zona, allí convivían diversas especies
como tinguas pico rojo, tinguas moteadas, tinguas azules y fochas, además de
la flora típica de un humedal. Sin embargo, en 1995 empezó su proceso de
desecación para reemplazarlo por otro parqueadero, dejando esta zona
completamente uniforme, monótona y sin ningún encanto.
Humedal del Aeropuerto el Dorado
Reserva Forestal del Norte Thomas Van Der Hammen. Fuente: El Tiempo.
Quién visite los humedales y demás pulmones urbanos se dará cuenta
fácilmente que la perdida es incalculable. El placer de encontrar calma y
tranquilidad en medio del ajetreo y caos diario de la urbe es invaluable y el
hecho de que albergue tanta diversidad ecológica debería servir de motivación
para que las autoridades ambientales preserven estos mágicos lugares, y que
prohíban que sigan haciendo negocios con nuestro patrimonio ambiental, el
de todos los bogotanos y bogotanas.