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CUANDO YA NO TE VUELVA A VER

¿Si fuera la última vez que te viera, que te diría?

Haciendo caso omiso a las razones por las cuales ya no te volvería a ver (creo que sería algo
triste). Respiraría hondo, tomaría valor (del que tú y yo sabemos que tengo muy poco), y
evitando cualquier contacto visual contigo, para evitar hacer dramas, te diría lo siguiente:

Si pudiera comprar más tiempo en algún lugar para poder estar contigo, un par de horas extra,
lo haría. Pero simplemente no es posible, mis minutos asignados se acabaron y no hay nada
que yo pueda hacer para cambiarlo. Si lo pienso creo que fue un trayecto muy escaso, más del
que me imagine que pudiera haber pasado contigo.

Podría decirte que tal vez no te ofrecí el amor y el cariño necesario, que pudiera haberte
ofrecido más. Pero eso no sirve de nada.

Te amo demasiado y lo sabes, llegaste a mi vida y de verdad jamás pensé que la relación que
llegáramos a tener significaría tanto para mí. Los días que pase contigo, te lo juro solo quise
hacerte feliz, tanto como tú me hacías feliz a mí.

No puedo evitar sonreír cuando recuerdo nuestros días juntos, las risas, los besos, las caricias,
y que hablar de las noches que pase contigo. Todas las noches contigo fueron especiales, pero
te digo en secreto hubo dos en concreto que me llenaron totalmente de dicha, nuestra primera
noche juntos. Y la noche en la que estaba segura de lo que sentías por mí era verdadero, esa
noche no hubo otro pensamiento en mi mente que no fuera NOSOTROS.

Me siento muy orgullosa de decir que compartí parte de mi vida con un hombre como tú.
Diferente, ÚNICO.
Recuerdo que a veces pedía encontrar a mi príncipe azul (todas las niñas sueñan con eso).
Pero sabes algo encontré algo mejor, algo real, verdadero. Que pude sentir y disfrutar, que
cada día me impulsaba a ser alguien mejor. Alguien que valiera la pena.

Te amo. Y cuando te digo TE AMO. Te lo digo con todo el significado que la palabra engloba y
sé que solo es una palabra. En estos tiempos no se puede fiar de solo palabras, pero espero
que las horas que te regale pudieran palpar en tu corazón lo que tus oídos me escuchaban
repetir una y otra vez.

Sé que ya no te voy a ver, sé que va ser duro no verte, no escucharte, pero viviré contenta
sabiendo que hay hombres buenos en este mundo. HOMBRES MARAVILLOSOS como tú. Que
a donde quiera que vallan pintan de colores, las noches grises.

Y sé que seguirás coloreando más vidas en el transcurso de tu camino.

Antes de que ya no te pueda volver a ver, solo deseó escuchar decir de tu boca TE AMO
AMOR. Por última vez.

TE AMO AMOR.

Hay historias que te marcan, y la nuestra lo hizo.

“No quiero dejar aquellas dulces horas atrás. Dignas de colgar en un cuadro, si tan solo fuera
posible plasmar los buenos recuerdos en algún sitio, donde los puedas mirar una y otra vez
con la misma intensidad vivida en el instante de los hechos. Pero no, los recuerdos son eso,
instantes fugases”

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