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LA MORALIDAD EN EL MUNDO PROFESIONAL

El contador público juega un papel decisivo en la dinámica cambiante de la economía


globalizada, teniendo que mantenerse en constante actualización para fortalecer las
competencias y el desarrollo profesional continuo.

La conciencia moral, la actitud de honestidad en lo profesional, y la independencia mental,


constituyen la esencia espiritual del contador público. Son aspectos importantes que sirven
para llevar a cabo su trabajo con la transparencia que se requiere.

En consecuencia, el contador público, en todas sus actuaciones debe considerar, estudiar y


analizar al usuario de sus servicios como ente económico separado e independiente,
relacionarlo con las circunstancias particulares de su actividad, sean estas internas o
externas y observando en todos los casos los principios de:

INTEGRIDAD MORAL • Se espera de él, rectitud, honestidad, conciencia moral, lealtad,


veracidad, justicia y equidad

OBEJTIVIDAD E INDEPENDENCIA MENTAL • Ser imparcial y actuar sin prejuicios, especialmente


cuando se trata de analizar, emitir dictámenes y opiniones sobre los estados financieros.
Demostrar independencia mental y de criterio con respecto a cualquier interés que pudiere
considerarse incompatible.
RESPONSABILIDAD • Promueve la confianza en los usuarios de los servicios. • En la
medida en que se adquiere un mejor comportamiento y buenos hábitos la responsabilidad
mejora.

CONFIDENCIALIDAD • Se habla de secreto profesional. • El uso y manejo de la


información debe fundarse en un compromiso responsable y leal, de acuerdo con las
recomendaciones de los clientes.

COMPETENCIA Y DILIGENCIA PROFESIONAL • Mantenerse actualizado de acuerdo a


los cambios que se van presentando en el ejercicio de la profesión y actuar con
entusiasmo, cuidado, prontitud y eficiencia en el desarrollo de las actividades.

CONDUCTA ETICA • El trabajo profesional para que sea ético, tiene que reunir
condiciones de calidad. La ética y el control de calidad, son temas que han preocupado
permanentemente a los profesionales y organismos que regulan esta actividad.

La moral y la ética van de la mano. La moral es el conjunto de hechos sicológicos que dignifican
la vida, y la ética es la ciencia aplicada al arte de vivir (es un conjunto de conocimientos
sistemáticos, metódicos y racionales, basados en la experiencia y fundados en principios). La
conciencia moral, la actitud de honestidad en lo profesional, y la independencia mental,
constituyen la esencia espiritual del contador público. Son aspectos importantes que sirven
para llevar a cabo su trabajo con la transparencia que se requiere.

En consecuencia, el contador público, en todas sus actuaciones debe considerar, estudiar y


analizar al usuario de sus servicios como ente económico separado e independiente,
relacionarlo con las circunstancias particulares de su actividad, sean estas internas o externas y
observando en todos los casos los principios de: a) Integridad moral. Se espera de él, rectitud,
honestidad, conciencia moral, lealtad, veracidad, justicia y equidad. b) Objetividad e
independencia mental. Ser imparcial y actuar sin prejuicios, especialmente cuando se trata de
analizar, emitir dictámenes y opiniones sobre los estados financieros. Demostrar
independencia mental y de criterio con respecto a cualquier interés que pudiere considerarse
incompatible.

c) Responsabilidad. Promueve la confianza en los usuarios de los servicios. En la medida en que


se adquiere un mejor comportamiento y buenos hábitos la responsabilidad mejora. d)
Confidencialidad. Se habla de secreto profesional. El uso y manejo de la información debe
fundarse en un compromiso responsable y leal, de acuerdo con las recomendaciones de los
clientes. e) Competencia y diligencia profesional. Mantenerse actualizado de acuerdo a los
cambios que se van presentando en el ejercicio de la profesión y actuar con entusiasmo,
cuidado, prontitud y eficiencia en el desarrollo de las actividades. f) Conducta ética
(comportamiento profesional). El trabajo profesional para que sea ético, tiene que reunir
condiciones de calidad. La ética y el control de calidad, son temas que han preocupado
permanentemente a los profesionales y organismos que regulan esta actividad. Se pretende
que el contador deba abstenerse de realizar cualquier acto que pueda afectar negativamente
la buena reputación de la profesión.

La actitud moral fundamental es un modo de ser que la persona desarrolla


consciente e inconscientemente a lo largo de su vida. Esta actitud, determina
los valores éticos que la persona acepta como tales. Si esta orientación es
sana, le será fácil aceptar verdaderos valores que los desarrollará con agrado,
pero, si es mala, será fácil desarrollar antivalores. Para saber si esta actitud
moral fundamental es sana, se deberán ver sus frutos y conocer que es lo
que más se quiere en esta vida, si nos sentimos atraídos por las virtudes o
por los vicios. Este concepto, también se describe como el motor de una
persona, porque es lo que lo empuja a tomar un determinado rumbo en su
vida. Esta actitud es susceptible de modificación, tanto para bien como para
mal. Moralmente el cambio de actitud de una persona, si se dirige a suplir lo
malo por lo bueno, es totalmente aceptable; puesto que, por el hecho de ser
seres humanos y no dioses, con frecuencia cometemos grandes errores con
nosotros mismos y con los demás; errores que implican faltas a los valores
morales existentes; y, por esa razón de ser humanos, tememos pues, el
derecho de un cambio en nuestra actitud moral fundamental; es decir, sumar
a aquellos pocos valores morales que poseemos, otros más, para que de esta
manera dirijamos la actitud moral fundamental a ser lo más sana posible; ello
implica, que posea mayor contenido axiológico.
El profesional contable y sus valores
El comportamiento ético de un Contador Público debe ser tan simple y sin
complicaciones que se pueda distinguir sin el imperativo necesariamente de
desarrollos epistemológicos o académicos entre lo que está bien y lo que está
equivocado.
Kant: "Reconoce que todo ser racional posee un valor absoluto por eso existe la moral
"las personas tienen "dignidad" y "obligaciones morales" "la clave de todos los valores
morales sigue siendo el valor absoluto y las personas". De estos valores surgen
obviamente, principios morales universales que orientan la conducta hacia su
promoción y respeto, más allá del relativismo".
Toda persona tiene una dignidad intrínseca y valores inalienables y cada cual tiene
también una responsabilidad ineludible hacia lo que hace o no hace, todas nuestras
decisiones, acciones, omisiones y nuestros errores tienen consecuencias.
El Contador Público tiene que "propugnar y trabajar por mantener y mejorar los
niveles técnicos y éticos sobre los que se desarrolla la carrera" que implica mantener
una actitud en que el beneficio personal está subordinado a las exigencias de la
moralidad objetiva. La actitud moral fundamental de la persona determina los valores
éticos que acepta como tales.
El profesional contable debe saber cómo protegerse contra la seducción profesional,
es decir, los pequeños favores, la invitación social, los regalos y el lento compromiso
de su independencia y objetividad.
La investigación es primordial e importante que permite incrementar el conocimiento
y por consiguiente el desarrollo científico y técnico que nos acerque a la verdad y
consecuentemente al máximo grado de satisfacción individual y social.
Es cierto que para cambiar al mundo tenemos que empezar a cambiar nosotros
mismos; el hombre es el fin supremo de la sociedad.

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