¿Qué tipos de control existen?

Existen tres tipos de control administrativo:

1. Preventivos
2. Concurrentes
3. De retroalimentación

Cada uno de estos es relevante en una fase diferente del ciclo de las actividades de
entrada – operación – salida de la organización, y todos cumplen un papel muy
importante en la búsqueda de actividades a largo plazo y desempeño elevado.

Control preventivo: También llamado controles preliminares, se realizan antes de que

se realice una actividad de trabajo, asimismo aseguran que los objetivos sean claros y
que establezcan e rumbo adecuado y que estén disponibles los recursos apropiados.
El control preventivo es la responsabilidad exclusiva de cada organización, como parte
integrante de sus propios sistemas de control interno, asimismo, el control preventivo
siempre es interno.

Controles concurrentes: Son los que se realizan mientras se desarrolla una actividad,
la forma más conocida de esta forma de control es la supervisión directa, un ejemplo
de esta tenemos en la actualidad, los sistemas computarizados, pueden ser
programados para brindar al operador una respuesta inmediata. Si comete un error, o
si se ha procesado una información equivocada, los controles concurrentes del
sistema, rechazarán la orden y le dirán donde se encuentra el error.

Control de retroalimentación: se implementan después de que el trabajador está

terminando. Se concentran en la calidad de los resultados finales y no en la entrada de
los procesos [CITATION Rey13 \l 10250 ].

Suárez (como se cita en López y Ortiz, 2005) tipifica el control en la Administración

pública fijándose en distintos aspectos. En función del momento en que se produce el
control, éste puede ser previo, concomitante o consuntivo. Si se observa quien realiza
la acción de control, se distingue el control interno del externo, mientras que si se fija
la atención en el tipo de prueba utilizada podemos diferenciar el control formal del
material. Para terminar, según la finalidad, el control puede ser de legalidad o
cumplimiento, financiero o de regularidad y, por último, control de eficacia.