Siempre que sea posible en función del presupuesto será recomendable la

aplicación de Variador de Velocidad.

El Arrancador Suave es una alternativa de menor costo frente a un Variador de

Velocidad, con exageradas desventajas en cuanto a performance.

El Arrancador Suave regula solamente la tensión aplicada al motor, mientras que

el Variador de Velocidad controla la frecuencia y la tensión. Por lo tanto el
Arrancador Suave, expone al motor a una situación de desmagnetización
soportable solamente durante un período acotado. El Variador de Velocidad en
cambio, puede mantener en servicio continuo los parámetros de diseño del
motor, logrando una performance absolutamente superior, tanto en el arranque
como en cualquier otra circunstancia.

La diferencia de performance entre estos dos productos es apreciable muy

simplemente observando la corriente de arranque del motor. Accionado con un
Arrancador Suave el motor necesita normalmente entre 3,5 a 4,5 veces la
corriente nominal para arrancar. En cambio el mismo motor accionado con
Variador de Velocidad demanda en el peor de los casos 1,5 veces la corriente
nominal, pudiendo arrancar normalmente con corriente igual o inferior a la
nominal.