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INSTITUTO DE INVESTIGACIONES AGRO -FORESTALES

CODIGO DE PARCELA DE MUESTREO


PERMANENTE.

Autores: Juan Miguel Montalvo


José Antonio Bravo
Ada Rosa Casanova
Juana Teresa Suárez
INDICE Pág.
1. INTRODUCCION: EL PROBLEMA DE LA PREDICCION DEL 1
CRECIMIENTO Y EL RENDIMIENTO
1.1 Razones para predecir crecimiento e investigación del rendimiento 1
1.1.1 Planificación de la producción 1
1.1.2 Investigación silvicultural y planificación 1
1.1.3 Investigación ecológica y manejo ambiental 1
1.2 La metodología de la predicción del crecimiento y rendimiento 2
1.2.1 La estimación de crecimiento y rendimiento 2
1.2.2 La construcción de un modelo matemático y su ajuste a los datos de crecimiento y 2
rendimiento
1.2.3 Prueba del modelo para su validación 2
1.2.4 La aplicación del modelo para el uso final requerido 3
2. DISEÑOS DE ESTUDIOS PARA LA PREDICCION DEL 4
RENDIMIENTO
2.1 Aspectos especiales en la estimación de los parámetros de regresión 4
2.2 Diseños del muestreo para la construcción del modelo 4
2.2.1 Parcelas temporales 5
2.2.1.1 Inventarios forestales 5
2.2.1.2 Estimación del crecimiento por medio de anillos anuales 5
2.2.1.3 Muestreo para obtener relaciones alométricas 5
2.2.1.4 Muestreo de regeneración 5
2.2.2 Parcelas de Muestreo Permanentes (PMP) 6
2.2.2.1 Cantidad de PMP requeridas (Intensidad de muestreo) 6
2.2.2.2 Ubicación de las PMP 6
2.2.2.3 Tamaño de las PMP 7
2.2.2.4 Formas de las PMP 8
2.2.2.5 Frecuencia y época de las mediciones 8
3. PROCEDIMIENTO PARA LA RECOLECCION DE DATOS 9
3.1 Delimitación en el terreno de las PMP 9
3.1.1 Ubicación 9
3.1.2 Identificación en el terreno de las PMP 9
3.1.3 Mediciones de lados y ángulos 10
3.1.4 Determinación de los árboles del borde 11
3.1.5 Marcaje de los árboles 11
3.1.6 Mapeo de los árboles de la parcela 12
3.1.7 Identificación de los árboles de ingreso 12
3.2 Formato para la toma de datos de las Parcelas de Muestreo 12
3.2.1 Modelo No. 1 13
3.2.2 Modelo No. 2 14
3.2.3 Modelo No. 3 15
3.2.4 Modelo No. 4 15
3.2.5 Modelo No. 5 16
3.2.6 Modelo No. 6 17
3.2.7 Modelo No. 7 18
3.2.8 Chequeo final 19
4. PROCESAMIENTO Y REGISTRO DE DATOS 19
4.1 Generalidades 19
4.2 Factor de estimación (FE) 20
4.3 Número de árboles 20
4.4 Área basal 20
4.5 Área basal promedio (gp) 20
4.6 Diámetro medio (dm) 20
4.7 Diámetro de área basal promedio (dg) 20
4.8 Diámetro mayor (Dm) 20
4.9 Altura total promedio (hp) 20
4.10 Altura dominante (ho) 21
4.11 Diámetro de copa 21
4.12 Porciento de copa (% Cp) 21
4.13 Longitud de copa (Lc) 21
4.14 Densidad 22
4.15 Volumen con corteza (Vcc) y Volumen sin corteza (Vsc) 22
4.16 Porciento de corteza (% Cort) 23
4.17 Cociente de forma 23
4.18 Coeficiente mórfico (f) 24
4.19 Incremento médio anual (IMA) 24
4.20 Incremento corriente anual (ICA) o periódico anual (IPA) 24
4.21 Índice de sitio (IS) 24
4.22 Edad (t) 24
5. MEDICIONES SUCESIVAS 25
5.1 Frecuencia de las mediciones 25
5.2 Arboles derribados por el viento y/ o faltantes 25
5.3 Raleos y talas rasas 25
6. SISTEMA DE INFORMACION GEOGRAFICA 26
6.1 Subsistema del SIG 27
6.2 Campos de aplicación 28
6.3 Factores de éxitos de un SIG 30
7. BIBLIOGRAFIA CONSULTADA 31
8. ANEXOS 33
 
 
 
 
AUTORES:

ƒ Ing. Juan Miguel Montalvo Guerrero. Investigador Agregado. Instituto de


Investigaciones Agro - Forestales. Cuba.

ƒ Dr. C. José Antonio Bravo Iglesias. Investigador Auxiliar. Instituto de


Investigaciones Agro- Forestales. Cuba

ƒ Ms. C. Ada Rosa Casanova Hernández. Especialista Forestal. Zoológico


Nacional de Cuba

ƒ Dr. C. Juana Teresa Suárez Sarria. Investigadora Titular. Instituto de


Investigaciones Agro- Forestales. Cuba
 
CODIGO DE PARCELA DE MUESTREO PERMANENTE.

1. INTRODUCCION: EL PROBLEMA DE LA PREDICCION


DEL CRECIMIENTO Y EL RENDIMIENTO
1.1 RAZONES PARA PREDECIR CRECIMIENTO Y RENDIMIENTO
Para poder entender las razones de la diversidad de métodos que están siendo utilizados
para predecir el crecimiento y el rendimiento de un bosque, primero es conveniente
examinar, aunque sea someramente, por qué las predicciones de crecimiento y
rendimiento son necesarias.
1.1.1 PLANIFICACION DE LA PRODUCCION
Un manejo forestal efectivo implica la aplicación de un sistema de tratamientos para el
control de la masa forestal de modo tal, que el incremento en valor económico y/o social
de dicha masa sea más rápido que el interés acumulado del costo de los tratamientos.
Al mismo tiempo, todas las operaciones de explotación, disminuirán la masa futura en
mayor o menor grado. Una tasa de explotación demasiado severa traerá como
consecuencia final la liquidación del recurso forestal; una tasa muy ligera puede privar
de recursos inmediatos a la comunidad y reducir el potencial del crecimiento futuro del
bosque.
Solamente podrán tomarse decisiones racionales sobre intensidad y épocas de raleos y
explotaciones, si la respuesta de los bosques a estas operaciones puede cuantificarse.
Los estudios de crecimiento y rendimiento son los medios utilizados para lograr este fin.
1.1.2 INVESTIGACION SILVICULTURAL Y PLANIFICACION
Aunque el objetivo primario de los estudios de crecimiento y rendimiento es la
cuantificación de la producción forestal, como respuesta a los tratamientos y
explotaciones, existe una marcada relación dual entre estos estudios y practicas de
investigaciones silvícolas. Es una relación dual porque:

• La silvicultura de una especie puede determinar el tipo de modelo a utilizar para


predecir su crecimiento, y puede suministrar una base lógica para agrupar especies
en bosques complejos. Los aspectos silvícolas que más resalten de una especie
sugerirán relaciones que deben ser incluidas en un modelo cuantitativo, si se desea
que dicho modelo sea efectivo.

• Un modelo cuantitativo que contenga relaciones adecuadas puede ser usado para
probar hipótesis silvícola y para sugerir diseños experimentales y tratamientos que
probablemente suministraran relaciones útiles.
1.1.3 INVESTIGACION ECOLOGICA Y MANEJO AMBIENTAL
Los modelos cuantitativos para predecir crecimiento y rendimiento pueden interactuar
con las necesidades de la investigación ecológica y planificación ambiental de diversos
modos. Por ejemplo:

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• Un modelo forestal puede indicar la cantidad de luz que llega al suelo en las
diferentes épocas del ciclo de crecimiento.

• Un modelo forestal puede adaptarse rápidamente para mostrar la biomasa y la tasa


de producción de una cosecha de árboles.

• La duración del ciclo de crecimiento durante el cual la cosecha forestal está


disponible para los grandes herbívoros es una información importante para el
manejo de la fauna.
1.2 LA METODOLOGIA DE LA PREDICCION DEL CRECIMIENTO Y
RENDIMIENTO
Esta metodología abarca cuatro fases principales:
1.2.1 LA ESTIMACION DEL CRECIMIENTO Y RENDIMIENTO
Esta estimación implica dos tipos de problemas. Uno es la definición del término
rendimiento, que puede ser el volumen de los árboles de una cosecha, el volumen de los
árboles de un grupo particular de especies o, también, algún producto no maderable tal
como corteza, follaje, resina, etc. El énfasis mas común en los países tropicales esta en
la predicción del volumen y clasificación de todos los productos maderables, incluyendo
madera para aserrío, para pulpa, postes y leñas. Como la composición de especies
afecta la utilidad del producto, el rendimiento no puede considerase aislado de esta
composición de especies en los bosques mixtos.
La medición del rendimiento y crecimiento es relativamente fácil una vez que se han
hecho las definiciones apropiadas. Las dificultades mayores son de índole práctica y
están relacionadas con la accesibilidad del bosque, delimitación y medición de parcelas
y el mantenimiento de parcelas permanentes durante varios años.
1.2.2 LA CONSTRUCCION DE UN MODELO MATEMATICO Y SU AJUSTE A
LOS DATOS DE CRECIMIENTO Y RENDIMIENTO
Una vez que se dispone de datos, puede construirse un modelo matemático y ajustarlo a
dichos datos. No está de mas resaltar que se trata de ajustar el modelo a los datos, no
los datos al modelo. Un modelo matemático consiste en un conjunto de ecuaciones o
gráficos que muestran las relaciones cuantitativas entre varias variables.
El procedimiento de ajuste de un modelo puede ser estadístico, usando por ejemplo
regresión lineal o no lineal, o puede ser subjetivo, trazando líneas a través de los datos
ploteados en gráficos. Si se requiere, estas líneas hechas a mano pueden expresarse
posteriormente como ecuaciones.
Los tipos de curvas dibujadas o de ecuaciones ajustadas pueden basarse en alguna ley
natural de crecimiento o pueden ser empíricos, en cuyo caso las funciones o ecuaciones
de ajuste se escogerán, únicamente, por su habilidad para representar una forma
determinada.
1.2.3 PRUEBA DEL MODELO PARA SU VALIDACION
Una vez que el modelo ha sido construido y ajustado a los datos, debe ser probado para

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determinar su validez y precisión. Esta operación es preferible hacerla con un segundo
conjunto de datos que no haya sido utilizado para ajustar algunas de las funciones del
modelo. El modelo se usa para predecir el comportamiento de los rodales que han
suministrado los datos de la comprobación y los resultados se comparan con las
observaciones reales.
Frecuentemente es necesario repetir el proceso de validación varias veces, ajustando y
corrigiendo el modelo, debido a las anomalías que se presentan en cada etapa. Hay una
serie de razones por las cuales los modelos pueden presentar problemas cuando se
validan:

• El conjunto de datos originales puede representar un patrón de comportamiento del


crecimiento diferente al del conjunto de datos con el cual se prueba.

• Puede darse el caso que se utilice en la construcción del modelo, métodos


inapropiados de ajuste de las ecuaciones.

• Algunas de las funciones pudo extrapolarse durante la comprobación, con lo cual los
datos de la validación han entrado en un intervalo donde son imprecisos.

• Si el modelo abarca un sistema de ecuaciones puede volverse inestable cuando se


trata como conjunto, a pesar de que cada una de las funciones en forma aislada
puede ajustar los datos adecuadamente.

• Pueden haber varias clases de errores humanos durante la transcripción o aplicación


de las diferentes ecuaciones o gráficos.
Estos aspectos se exponen con tanto detalle, con el fin de hacer énfasis en la
importancia que tiene el probar cualquier modelo antes de aplicarlo a la planificación o
a la investigación.
1.2.4 LA APLICACIÓN DEL MODELO PARA EL USO FINAL REQUERIDO
Los modelos de crecimiento y rendimiento pueden ser aplicados en una de las tres
formas siguientes:
1. Como una simple tabla, un gráfico, un conjunto de tablas o gráficos. Estas pueden
ser utilizadas directamente por los planificadores forestales o pueden alimentar en
forma tabular a un computador para mantener al día conjuntos de datos de
inventario.
2. Como un programa para un computador que pueda producir una tabla o gráfico de
crecimiento y rendimiento para un conjunto particular de tratamientos. Esto es
apropiado cuando el modelo tiene suficiente flexibilidad inherente y no es posible
definir todas las predicciones en un sólo conjunto de datos.
3. Como un programa de computación en forma de subrutina, contenido en un
programa general de planificación forestal y al cual puede incorporarse una base de
datos de información de inventarios y varias funciones restrictivas de tipo
económico o técnico sobre operaciones de explotación y tratamientos.

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2. DISEÑOS DE ESTUDIOS PARA LA PREDICCION DEL
RENDIMIENTO.
2.1 ASPECTOS ESPECIALES EN LA ESTIMACION DE LOS PARAMETROS
DE REGRESION.
Los diseños experimentales y de muestreo para estudios de crecimiento y rendimiento
deben condicionarse al tipo de modelo de ajuste de los datos a obtenerse que,
usualmente, sea alguna clase de modelo de regresión.
Al respecto, deben tenerse en cuenta los siguientes aspectos:

• Cuando se sabe que el modelo a ser ajustado es lineal, los tratamientos


experimentales o el muestreo deben concentrarse en los dos extremos de la línea.
Para un plano de regresión relativo a tres variables se hará un muestreo en las cuatro
esquinas extremas.

• Con frecuencia la forma precisa de la función a ajustar es desconocida y,


posiblemente, será alguna curva. Una buena práctica, en este caso, es dividir el
intervalo de la variable predictora (independiente) en cinco secciones iguales y
efectuar muestreos de igual intensidad en cada sección.

• La intensidad de muestreo en cualquier parte del intervalo debe ser proporcional a la


varianza de las muestras con respecto al modelo. Esto es particularmente
importante cuando se predice el volumen.

• El muestreo aleatorio o sistemático por superficie, que es muy apropiado para


inventarios forestales, es ineficiente como basamento para la construcción de
modelos de crecimiento y rendimiento, pues significa una intensidad de muestreo
demasiado alta en la parte central del intervalo de respuesta y demasiado baja en los
extremos. Se debe ejercer una cierta selectividad, de manera que el muestreo cubra
todas las condiciones posibles en las cuales crece el bosque.

• En los diseños experimentales para predicción de crecimiento y rendimiento siempre


deben incorporarse los tratamientos extremos, especialmente los relacionados con la
densidad del rodal. Esta práctica puede añadir mucha precisión al modelo.
2.2 DISEÑO DEL MUESTREO PARA LA CONSTRUCCION DEL MODELO
El muestreo es una alternativa de la experimentación en situaciones donde las variables
que entran en el modelo no pueden ser controladas por el investigador. En estudios de
crecimiento y rendimiento esta condición se aplica, principalmente, a las variaciones de
sitio. Los tipos de bosque pueden controlarse al seleccionar las áreas experimentales o
al establecer los deseados; la densidad de los rodales puede ser controlada por
operaciones de silvicultura y de explotación.
Los experimentos son generalmente más eficientes y, por lo tanto, menos costosos que
el muestreo para una determinada exactitud y precisión de la predicción; sin embargo,
se necesitan datos de ambos tipos si las variaciones de sitio van a incluirse
efectivamente en el modelo.

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2.2.1 PARCELAS TEMPORALES
Se usan, en esencia, para la estimación de relaciones independientes del tiempo. Sin
embargo, existe la posibilidad de determinar relaciones dependientes del tiempo con la
información de los anillos de crecimiento, en situaciones donde éstos existan.
2.2.1. 1 Inventarios forestales
Los diseños de inventarios forestales están orientados, sobre todo, para obtener
estimaciones confiables de las masas boscosas con relación a las superficies que
ocupan. No obstante, mucha de la información obtenida puede ser útil en estudios de
crecimiento y rendimiento.
Generalmente, es ineficiente requerir mediciones de variables en todas las parcelas del
inventario forestal para predecir el crecimiento y el rendimiento; es preferible
seleccionar un conjunto de parcelas para mediciones mas detalladas.
2.2.1. 2 Estimación del crecimiento por medio de anillos anuales
Donde los anillos anuales estén claramente presentes, pueden realizarse los estudios en
parcelas temporales en lugar de parcelas permanentes. En general, la estimación del
incremento por medio de anillos anuales es más difícil y cara que el uso de parcelas
permanentes para este fin, sin embargo, se obtienen resultados mucho más rápido.
2.2.1. 3 Muestreo para obtener relaciones alométricas
Una relación alométrica es la que se establece entre dos mediciones de un árbol. Por
ejemplo, la relación entre el diámetro de la copa y el diámetro del fuste, o entre la altura
total y la altura del fuste. Las relaciones alométricas pueden ser importantes en algunos
modelos; los datos necesarios, a menudo, no se obtienen en forma utilizable de un
inventario forestal, de modo que es conveniente hacer un programa de muestreo para
determinar las relaciones.
La unidad básica del muestreo es, usualmente, el árbol individual, pero por
conveniencia se establecen parcelas y se miden todos los árboles de ellas. El número de
muestras dependerá de las relaciones a estudiar; un buen procedimiento es analizar los
datos a medida que se van obteniendo y terminar el muestreo una vez que se ha
alcanzado el grado de exactitud requerido. Una tarifa de volúmenes de los árboles es un
ejemplo particular de una relación alométricas.
2.2.1. 4 Muestreos de regeneración
En bosques mixtos tropicales o en cualquier tipo de bosques no coetáneos, o en bosques
uniformes que se regeneran por germinación directa, la estimación de la regeneración
puede ser una parte importante de los modelos de predicción del rendimiento.
Las parcelas de muestreo de la regeneración son pequeñas. Pueden ser subparcelas
dentro de las parcelas de inventarios forestales convencionales o pueden basarse en un
diseño de muestreo diferente, que se lleva a cabo de tres a cinco años después de una
explotación. Comúnmente, las parcelas se dividen en cuadrados, en cada cuadrado se
observa la presencia o ausencia de las especies. Puede efectuarse un conteo de árboles
sobre un cierto diámetro o altura.

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Tamaños típicos de estas parcelas son 100 m2 (10 m x 10 m) ó 400 m2 (20 m x 20 m)
subdivididas, según el caso, en cuadrados de 1 m2 ó de 4 m2.
2.2.2 PARCELAS DE MUESTREO PERMANENTES (PMP)
Muchos forestales consideran los datos obtenidos de PMP como la contribución más
importante para los modelos de crecimiento y rendimiento. Aunque esto es verdad en
muchos casos, los experimentos (diseños experimentales) deben considerarse como una
adición necesaria para introducir tratamientos extremos que no se encuentran en el
bosque.
2.2.2. 1 Cantidad de PMP requeridas (Intensidad de muestreo)
No es posible definir, desde un punto de vista puramente estadístico, el número de PMP
necesarias. La precisión de un modelo ajustado a datos de PMP dependerá de la
localización de las parcelas, de la duración de las mediciones posteriores, así como de
las covarianzas de las diferentes variables predictoras (independientes) y coeficientes en
el modelo ajustado. La experiencia sugiere que un aproximado de 100 parcelas, que
cubran las variaciones de sitio y el desarrollo histórico del rodal, pueden ser suficientes
en un determinado tipo de bosque o en una plantación, a menos que haya evidencia de
diferentes patrones de crecimiento en una parte de la zona en estudio. Ahora, es más
importante lograr una cantidad adecuada de parcelas que acometer una intensidad de
muestreo premeditada, cualquiera que sea la variabilidad de la masa boscosa.
Para conocer la cantidad de parcelas que se requiere para cada uno de los estratos en que
se divida el área en estudio, se debe establecer entre cinco y diez en cada estrato con el
fin de determinar el número necesario de parcelas que permita estimar los parámetros
dasométricos de interés dentro de un deseado margen de error. La fórmula a utilizar es:

n=
(Cv * t )2
2
E
donde:
n = número de parcelas necesarias;
Cv = coeficiente de variación;
t = valor de Student para un nivel de significación dado;
E = error máximo que se desea permitir.
Tanto el coeficiente de variación como otros estadísticos pueden ser calculados por la
aplicación Microsoft Excel.
2.2.2. 2 Ubicación de las PMP
La selección del sitio para la ubicación de las PMP está regida por los objetivos que se
persigan, debido a ello no puede establecerse una regla general. Puede decirse que, para
casi todos lo fines las parcelas deberían establecerse en bosques totalmente poblados y
con crecimiento razonablemente uniforme. Pero, lo que al final se debe tener en cuenta,
es que las parcelas que se establezcan tienen que ser representativas del bosque en
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estudio, por lo que hay que ubicarlas de manera que describan toda la variabilidad del
mismo.
Entonces podemos decir, que las PMP deben establecerse con igual frecuencia en:

• sitios pobres

• sitios promedios

• sitios buenos;
en:

• rodales de baja densidad

• rodales de densidad promedio

• rodales muy densos


y en:

• rodales jóvenes o recientemente explotados

• rodales a mitad del ciclo o turno de corta

• rodales a la edad de rotación o al fin del ciclo de corta.


Esto probablemente conlleve a una desigual distribución espacial de las parcelas y
parece ser proporcionalmente deficiente para los rodales promedios. Sin embargo, éste
es el método más eficiente de muestreo para determinar los parámetros de regresión de
acuerdo a lo señalado en el epígrafe 2.1.
El tipo de estratificación implícito en lo dicho anteriormente, puede no ser posible
debido a falta de conocimientos de las condiciones de crecimiento del bosque, en este
caso las parcelas se ubican según un muestreo sistemático o usando una estratificación
geográfica para obtener una cobertura uniforme. En este caso se requerirá un mayor
número de parcelas que si se usa el tipo de estratificación, más efectivo, descrito
anteriormente.
2.2.2. 3 Tamaño de las PMP
En general, el tamaño de las PMP está determinado por el tipo de bosque, la
homogeneidad de la masa forestal y la distribución de las especies. En bosques mixtos
tropicales un tamaño de una hectárea es usualmente apropiado. Puede ser conveniente
dividir la parcela en cuadrados de
10 m x 10 m. En bosques uniformes se usan normalmente parcelas de 500 m2 (0,05
ha). Estas cifras pueden variar por motivos diversos; para experimentos son más
comunes establecer parcelas de mayor tamaño. La tabla siguiente propone algunas
sugerencias al respecto, aunque los tamaños indicados no deben ser tomados de manera
muy estricta:

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Tamaño de las parcelas permanentes

Tipo de bosque Mixto Uniforme


Parcela de muestreo 1 – 2 ha 0,04 – 0,08 ha
Experimentos 1 – 5 ha 0,08 – 0,12 ha
Estudios de operaciones de 1 – 10 ha 0,1– 0,5 ha
cortas reales

En investigaciones realizadas en la República de Cuba se ha llegado a determinar que se


pueden lograr estimaciones con una buena exactitud con PMP de las siguientes
dimensiones:

Tipo de bosque Tamaño de la PMP


Plantaciones de coníferas 0,04 – 0,07 ha
Plantaciones de especies latifoliadas 0,08 – 0,1 ha
Bosque natural de confiera 0,12 – 0,16 ha
Bosque natural de especies latifoliadas 0,17 – 0,25 ha

2.2.2. 4 Forma de las PMP


Las PMP pueden ser rectangulares o circulares. En inventarios se han utilizado otras
formas, por ejemplo cruces y conglomerados de parcelas circulares, que tienen ventajas
específicas para muestreo de bosques, pero no son útiles para parcelas de muestreo
permanentes.
Las parcelas circulares son más rápidas de establecer que las rectangulares para tamaños
inferiores a 0.1 ha en rodales poco densos y 0.05 ha en rodales densos. También se
recomienda en bosques cuyas líneas de plantación no están bien definidas.
Las parcelas rectangulares son mas adecuadas para tamaños mayores de 0.1 ha. La
relación entre la longitud y la altura de estas parcelas puede ser variable; en terrenos
con pendientes es preferible una relación alta, hasta de 5 a 1, con la longitud siguiendo
la curva de nivel y la anchura a favor de la pendiente.
2.2.2. 5 Frecuencia y época de las mediciones
La frecuencia de las mediciones de las PMP dependerá de la tasa de crecimiento de los
árboles. En las parcelas nuevas es provechoso efectuar la segunda medición después de
un lapso de tiempo más corto que el normal, con el fin de utilizar los datos de
crecimiento que suministren lo más rápido posible. En líneas generales puede decirse
que mientras mayor sea el lapso de tiempo entre las mediciones, con mayor exactitud se
podrá determinar el incremento de los árboles.
En una organización responsable de un gran número de PMP es una buena idea alternar
las mediciones de manera que, quizás, sólo un tercio de las parcelas se midan en un año.
A continuación se indican intervalos aproximados entre dos mediciones sucesivas:

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Tipo de bosque Intervalo entre mediciones (año)
Plantaciones jóvenes en los trópicos 1
Plantaciones viejas u otro tipo de bosque 2-4
uniforme en los trópicos
Bosque mixto tropicales 3-5

La época de las mediciones debe tomar en cuenta los efectos estaciónales. Si existe una
estación de crecimiento definida, las mediciones deben efectuarse después de dicha
estación. En cualquier caso, una parcela concreta debe medirse siempre en el mismo
mes, cuando las mediciones son anuales, para permitir comparaciones y estimaciones de
crecimiento anuales. Con lapsos mayores y climas menos estaciónales la época de
medición es menos crítica. En algunos casos, la época de medición puede estar
restringida por consideraciones de accesibilidad o posibilidad de trabajar sólo en
determinadas fechas.

3 PROCEDIMIENTO PARA LA RECOLECCION DE DATOS


3.1 DELIMITACIÓN DE LAS PARCELAS DE MUESTREO
3.1.1 UBICACIÓN
Se necesita que las PMP estén localizadas con exactitud en los mapas forestales y que se
pueda determinar su posición puntual en el bosque con el uso de brújula y cinta.
Además, es útil dejar hitos de referencia de piedra o de concreto en los caminos
forestales cercanos, mostrando la distancia y rumbo de la parcela. Es conveniente
también, que estén localizadas en los mapas de trabajo, pero el grado de exactitud
requerido es menor.
3.1.2 IDENTIFICACION EN EL TERRENO DE LAS PMP
Las PMP deben delimitarse permanentemente en el terreno:

• Las parcelas circulares se marcarán en el centro con un poste de madera durable, de


concreto o de metal, indicando el número de identificación. Este punto central se
señalará por medio de dos zanjas perpendiculares de 30 a 50 cm. de profundidad y
aproximadamente 2,5 m de largo; con esto se tiene una marca estable en el suelo en
caso de que el poste central sea destruido. Aunque se tiene conocimiento de la
situación de lo escaso de la mano de obra, como las parcelas son permanentes, debe
hacerse todo lo posible para cumplir con todo lo dicho.

• Las parcelas rectangulares se demarcarán con postes en las cuatro esquinas, uno de
los cuales llevará el número de identificación. También se recomienda hacer zanjas
que se intercepten en las esquinas de cada parcela.

La identificación de la parcela debe pintarse, de forma visible, en un árbol cercano al


poste central o a un poste esquinero, ya sea de forma circular o rectangular,
respectivamente. En un árbol dominante cerca de la entrada principal de la parcela o
cerca del árbol No. 1 de la misma y utilizando una plancha de zinc o aluminio (es
preferible de aluminio) se pinta el número de la parcela, el tratamiento a aplicar y, en
caso de repeticiones, el número del bloque a que pertenece.

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Las parcelas rectangulares subdivididas en cuadrados pueden tener postes en la
intersección de los mismos, aunque deben ser de menor tamaño para evitar
confusiones.
A todos los árboles que estén dentro de la parcela se les eliminan las ramas hasta una
altura de dos metros, así como los bejucos y otras malezas. En toda el área de la parcela
se realiza una chapea de los arbustos y hierbas que puedan molestar todo el trabajo
posterior a realizar en la misma. Recordar que se debe hacer el registro tanto de
bejucos, hierbas como arbustos.
3.1.3 MEDICIONES DE LADOS Y ANGULOS
En el establecimiento de parcelas rectangulares los lados se miden con una cinta métrica
hasta la aproximación de 0,1 m y los ángulos entre los lados con una brújula, aunque se
puede utilizar la escuadra óptica.
Para asegurar la exactitud de la medición, la parcela se mide en dirección de las
manecillas del reloj; si las variaciones de la lectura exceden de medio grado en ángulo
y 0,1 m en longitud, la parcela se medirá nuevamente, en sentido contrario, hasta que se
obtenga la exactitud requerida.
En caso de no contar con los instrumentos necesarios, se puede establecer el área de la
parcela mediante una soga de 90 m de longitud, para una parcela de 25 m x 20 m (0.05
ha ó 500 m2). El tamaño de la soga dependerá de las dimensiones de la parcela a
establecer. Los ángulos de las esquinas se hacen por el método de Pitágoras, o sea, los
catetos de 3 y 4 metros y la hipotenusa de 5 metros. La soga se pasa por estacas
clavadas en los puntos internos de loa ángulos y los extremos se hacen coincidir para
cerrar el rectángulo.
Cuando las parcelas a establecer son circulares el radio a medir, según el área, será:

Área en hectárea Área en m2 Radio en metros


0,04 400 11,25
0,05 500 12,62
0,08 800 15,96
0,10 1000 17,84
0,125 1250 19,95
0,15 1500 21,85
0,16 1600 22,57

Si la parcela se establece en una pendiente que exceda los cinco grados, las longitudes
de los lados se corrigen a sus equivalentes horizontales por cualquiera de los métodos
siguientes:

• Donde la pendiente no es uniforme, midiendo en forma escalonada.

• Donde la pendiente es uniforme, midiendo el ángulo y escogiendo el equivalente


horizontal. Ver Anexo. Tabla 1.

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3.1.4 DETERMINACION DE LOS ÁRBOLES DEL BORDE
Al delimitarse una parcela la mayoría de los árboles estarán claramente dentro o fuera
de la parcela, pero algunos podrían estar interceptando los límites de la misma; estos
últimos serán incluidos si el centro estimado del árbol se halla dentro de la línea de
demarcación y serán excluidos en caso contrario.
La faja de aislamiento debe extenderse, por lo menos, de 10 a 15 metros hacia afuera de
los bordes de la parcela, pero su ancho puede variar. Donde el aclareo de la parcela
difiere marcadamente del aclareo del rodal o de las parcelas adyacentes, el ancho de la
faja de aislamiento debe aumentarse si es posible. También es permisible una
ampliación de la faja de aislamiento cuando la parcela esta cerca de los limites del rodal,
para hacer que el borde de la faja coincida con el borde de la plantación o bosque
natural.
El ancho de la faja no debe reducirse a menos de 10 metros. Los límites externos e
internos de la faja de aislamiento se marcaran, claramente, con anillos de pintura sobre
un número adecuado de árboles limítrofes o con cintas de colores, de forma que el área
total de la parcela pueda verse fácilmente. La vegetación pequeña en el borde puede y
debe ser removida, siempre que no se destruya la regeneración que forma parte de la
masa forestal a estudiar.
3.1.5 MARCAJE DE LOS ÁRBOLES
Los árboles de las PMP deben ser identificados de forma permanente y, para eso, hay
dos maneras de hacerlo:
1. Pintando el número de identificación en el árbol.
2. Utilizando placas de aluminio que se clavan en el árbol. Es preferible de esta forma.
Si el número del árbol se pinta, el sitio de medición debe marcarse también, pintando un
anillo alrededor del árbol. Si se utiliza una placa de aluminio, ésta se clavara a una
distancia fija sobre el punto de medición del diámetro, usualmente 50 centímetros mas
arriba, de manera que pueda ser localizado exactamente en las mediciones futuras. El
punto de referencia para la medición del diámetro normalmente es a una altura de 1,30
m sobre el nivel del suelo y debe medirse, con una vara previamente medida, desde el
nivel superior del suelo.
En árboles que se encuentran en terrenos inclinados, por razones prácticas, el punto de
referencia se mide por la parte superior de la pendiente.
En árboles inclinados el punto de referencia debe medirse paralelo al árbol, no vertical y
en el lado hacia donde el árbol se inclina. La sección de medición debe ser
perpendicular al eje del árbol, no horizontal.
En árboles que tengan protuberancias a la altura de 1,30 metros sobre el nivel del suelo,
los lugares de medición se pintan en puntos equidistantes por encima y por debajo de la
protuberancia; el promedio de las dos mediciones es el diámetro a 1,30 m. En casos
que sólo se pueda hacer una medición, ésta se hace por encima del punto de referencia.
Donde el árbol está ahorquillado o bifurcado, si es por debajo de los 1,30 metros se

  11

 
considera como dos árboles y se hacen dos mediciones, si es por encima se hace una
sola medición.
Y por último, en árboles con raíces aéreas o con aletones por encima de los 1,30 metros,
se hace la medición 30 centímetros por encima del final tanto de la raíz como del aletón.
DIAMETRO DE REFERENCIA.
Una segunda placa de aluminio debe clavarse en el tronco del árbol, cerca del nivel del
suelo. Esto ayuda en la identificación de los tocones cuando se cortan los árboles y
añade seguridad contra la perdida de la otra placa. Las marcas de pintura no deben ser
usadas como medio único de identificación cuando las especies pierden su corteza.
Se marcarán para su medición todos los árboles de la parcela que tengan un diámetro de
3,6 centímetros en adelante. Las marcas deben ser renovadas en cada medición si se
han vuelto borrosas o si se han perdido.
3.1.6 MAPEO DE LOS ÁRBOLES DE LA PARCELA
Cuando sea posible, los árboles deben ser mapeados durante el levantamiento inicial.
En parcelas circulares se anotara la distancia y el rumbo de cada árbol al centro de la
parcela.
Las parcelas rectangulares se subdividirían en cuadrados o rectángulos, cada uno de los
cuales no será mayor de 10 m x 10 m (salvo determinadas excepciones) y se medirá la
distancia del árbol como si fuera un sistema de coordenadas cartesianas en el plano, en
cada cuadrado o rectángulo respectivo.
El mapeo de los árboles es útil tanto para resolver las frecuentes confusiones que
ocurren con la identificación de los árboles como en el análisis de los fenómenos de
crecimiento en las parcelas.
3.1.7 IDENTIFICACION DE LOS ÁRBOLES DE INGRESO
En los bosques naturales es necesario identificar los árboles que ingresan en cada
medición, asignándoles un número de identificación y, el número del cuadrado o
rectángulo y las coordenadas sobre el croquis de la parcela, en caso de que se haya
hecho un mapeo de los árboles.
Se requiere mucha atención para asegurarse de que el número asignado no ha sido
utilizado antes en la misma parcela, incluyendo árboles ya muertos o extraídos en las
etapas iniciarles, de otra manera resulta una gran confusión cuando se procesan los
datos.
3.2 FORMATOS PARA LA TOMA DE DATOS DE LAS PARCELAS DE
MUESTREO
Son esenciales la nitidez y la claridad en la anotación de los datos observados; esto
debe hacerse con lápiz y no con tinta, para evitar tachaduras en caso de equivocaciones
y, simplemente, borrar. Lo primero a hacer en cada modelo es llenar el
encabezamiento.

  12

 
En cada modelo y hoja de campo debe ponerse la fecha con el siguiente formato:
dd/mm/aaaa; por ejemplo, el 16 de diciembre del año 1999 se anotaría 16/12/1999. En
el caso de días del 1 al 9, se anotaría 01; 02; 03; etc. Siempre que sea posible, se
evitaría copiar de un modelo hacia otro.
Cuando haya especies en número suficiente para que la masa sea clasificada como
mezcla, como en el caso de los bosques mixtos tropicales, se miden y se ralean con el
mismo procedimiento que para la especie ( o especies) que se considere principal, pero
utilizando modelos independientes a partir del MODELO No. 4.
3.2.1 MODELO No. 1
Cuando se levanta una parcela permanente por primera vez, es importante registrar los
datos que recoge este modelo. Si los espacios fueran insuficientes se pueden hacer
anotaciones al dorso de la hoja. A continuación se explican algunos de los datos a
observar y registrar:

• Parcela No. : Se anota el número consecutivo de la parcela dentro del lote y el rodal

• Fecha de establecimiento: Todos se anotan con números arábigos y con el formato


dd/mm/aaaa, o sea, dos caracteres para el día y el mes y cuatro caracteres para el
año; por ejemplo, si la parcela se establece el cinco de enero del año dos mil, se
anota 05/01/2000.

• Mapa: Número de la hoja donde se localiza la parcela

• Foto: Anotar el número de la foto.

• Coordenadas: La X significa la longitud y la Y la latitud. Se utilizan las que tienen


las ortofotos del Plan maestro.

• Se registra si es una plantación o un bosque natural; si es una plantación se anota la


fecha en que ésta se realizó. Además, se anota el área de la parcela en hectáreas sin
considerar la faja de aislamiento.

• Altitud: La altura sobre el nivel del mar a la que se encuentra la parcela. Se debe
tomar con un altímetro, teniendo la precaución de calibrarlo antes de usarlo.
• Pendiente: Se registra en porciento y la medición se hace desde el centro de la
parcela.

• Topografía: Se anota la característica de la pendiente según su intensidad por la


siguiente clasificación,

Pendiente en % Clasificación
0 - 15 Suave
15,1 - 35 Ondulada
35,1 - 60 Muy ondulada
Más de 60 Escarpada

• Exposición: Es la situación de la parcela con respecto a los puntos cardinales; se


anota según el azimut en grados. Entre paréntesis se pondrá el valor cardinal, o sea,
norte, sur, este u oeste y sus combinaciones.
  13

 
• Se detallará en que zona de vida está la parcela, pero teniendo en cuenta esa
clasificación.

• Sotobosque: Incluye el estrato herbáceo de la parcela y se evalúa a ojo. Se registra


en orden de frecuencia y según el tipo: arbustos, hierbas y gramíneas, helechos,
bejucos y lianas, etc., si no se conoce con certeza el nombre de las mismas. Se
utiliza la simbología siguiente,
m = muy abundante
a = abundante
f = frecuente
o = ocasional
r = raro

• Cobertura : Se evalúa a ojo y se registra como un decimal; por ejemplo, 1,0 indica
cubierta de copa completa o suelo cubierto completamente por la copa; 0,6 indica
suelo cubierto el 60 por ciento, etc.

• Composición: Las especies y las sumas de las áreas básales que componen desde 2
hasta 5% de la suma total del estrato se anotan en la fórmula de composición con el
signo (+). Si la suma de las áreas básales de las especies constituye menos del 2% de
la suma total de las áreas básales del estrato, antes de señalada la especie se escribe
"aislado". Las especies de igual valor, la suma de áreas básales, las que constituyen
4-6 % de la suma total de áreas básales del estrato y en conjunto cerca del 10 %, se
pueden anotar juntas en la misma fórmula de la composición por ejemplo: 1CoMf,
indica que la suma de las áreas básales del cedro y la jocuma juntos, componen el
0,1 de la suma total del área basal del estrato
Para señalar, la composición de las especies de los árboles existen fórmulas
convencionales en las cuales las mismas se señalan con la primera letra de su
nombre en latín

• Raleado: Se anota si la masa boscosa ha sido sometida a raleo o no. Si ha sido


raleada, registrar la cantidad de tocones encontrados en la parcela.

• Objetivo y tratamiento: El objetivo del establecimiento de la parcela y el tratamiento


silvícola a aplicar deben ser definidos de forma clara y concisa; por ejemplo,
mantener la densidad en 15 m2 de área basal con mediciones cada tres años.

• Índices de tasación: La primera fila se utilizará para anotar las estimaciones visuales
de las características dasométricas que se indican. El área basal puede estimarse con
la regla de Bitterllich. La segunda línea será para los mismos índices ya calculados
en el procesamiento de datos.

• Observaciones: Se anota cualquier dato de interés para los que no hay


encabezamiento apropiado, tales como daños, incendios, plagas o enfermedades u
otros que se consideren. Si es necesario, se escribe en la parte de atrás del modelo.
3.2.2 MODELO No. 2
Este modelo se utiliza para hacer un croquis de la parcela que nos permita y a otros que
lo necesiten o continúen el estudio a localizar la parcela en un futuro. Se traza un plano
  14

 
de la misma, indicándose el norte magnético, la longitud horizontal de los lados, los
ángulos, la dirección de la pendiente y la posición del árbol No. 1, la que debe ser
siempre la misma en todas las parcelas y en la esquina sudoeste. También deben
señalarse los caminos y parcelas más cercanas, así como cualquier accidente natural
importante.
La parte inferior del modelo se utiliza para la descripción del suelo en los casos que se
entienda o se necesite un estudio del mismo, se anota el tipo de suelo según la
clasificación oficial de su país, independientemente que se haga y describa una calicata.
En la descripción de la calicata deben anotarse las siguientes características del suelo,

• Color

• Textura

• ph

• Análisis de nitrógeno (N), fósforo (P), potasio (K), calcio (Ca) y magnesio (Mg).

• Profundidad

• Densidad
Para cada horizonte distinguible del suelo. Las muestras del suelo deben replicarse en
cada parcela, dos muestras serán suficientes, exceptuando parcelas muy grandes y
variadas. Las técnicas analíticas podrán variar de acuerdo a los métodos usuales de
cada país y a las condiciones especiales que se encuentren y deberán ser determinadas
en colaboración con los especialistas en suelos.
3.2.3 MODELO No. 3
A todos los árboles numerados de la parcela se les mide el diámetro en el punto de
referencia (1,30 metros sobre el nivel del suelo) según se explicó en el epígrafe 3.1.4,
preferiblemente con una cinta diamétrica o, en su defecto, con una forcípula pero
haciendo dos mediciones perpendiculares y hallando el promedio. Las anotaciones se
hacen en el MODELO No. 3, el cuál se explica por sí solo.
Es importante que la medición del diámetro se haga con mucho cuidado y atención,
pues la diferencia de un centímetro ocasiona un 5 % de error en el cálculo del volumen
del árbol. El diámetro se registra con una precisión de 0,1 cm.
Cuando se utilizan varias hojas, éstas se numeran consecutivamente; en cada columna o
fecha de medición ésta tiene que anotarse y, al final de la columna, poner el nombre del
que realizó la medición.
3.2.4 MODELO No. 4
Los diámetros registrados en el MODELO No. 3 se trasladan a este modelo,
agrupándose en clases diamétricas de un centímetro de amplitud, en orden ascendente y
utilizando un modelo para cada especie, en el caso de parcelas con varias especies. Una
clase diamétrica va desde 0,6 hasta el 0,5 siguiente; por ejemplo, en la clase diamétrica
6 se anotan los números de los árboles de la parcela cuyos diámetros a 1,30 m sobre el
nivel del suelo midieron entre 5,6 y 6,5 centímetros.
  15

 
En la primera columna se anotan las clases diamétricas existentes en la parcela y en la
segunda los números de los árboles que pertenecen a cada clase; en la tercera columna
se anota la cantidad de árboles de cada clase y en la cuarta el área basal correspondiente
a la suma de todos los árboles de la clase, pero dividida en antes del raleo, área basal
raleada en la parcela y la que queda después del raleo.
El traslado de los números de los árboles y su agrupamiento por clase diamétrica son
necesarios para el cálculo del área basal por clase y total, la selección de los árboles
para la medición de las alturas y de los árboles muestras.
3.2.5 MODELO No. 5
Para la medición de las alturas se seleccionan dos árboles por cada clase diamétrica
existente en la parcela, mediante cualquier método al azar y utilizando como base el
modelo No. 4. Los árboles seleccionados se registran, en orden ascendente según la
magnitud del diámetro, en este modelo, con sus correspondientes números y valores.
También, si se tiene suficiente tiempo o si él que patrocina y financia el trabajo lo
requiere, se puede medir la altura de todos los árboles de la parcela; así se evita le
selección al azar pero se utiliza más tiempo y se debe tener en cuenta que la medición
de la altura del árbol es mas laboriosa, delicada y más sujeta a errores que la medición
del diámetro. A veces es imposible su medición por falta de visibilidad.
Si se requiere la altura de todos los árboles de la parcela, puede construirse una curva
altura – diámetro de la forma siguiente:

h = b0 + b1d + b2 d 2

Donde h es la altura y d es el diámetro medido a 1,30 metros sobre el nivel del suelo.
Deben señalarse algunos puntos especiales:

• Si hay más de una parcela en un rodal, los árboles de muestra de las diferentes
parcelas deben ser tomados en conjunto para ajustar la regresión altura – diámetro.
• Muestras de rodales con densidades o edades diferentes nunca deben tomarse en
conjunto para la determinación de la regresión, a menos que las comparaciones de
las diferentes regresiones muestren diferencias no significativas.

• La regresión ajustada no debe utilizarse para predecir alturas si no se satisfacen las


tres condiciones siguientes:
(1) El valor de F de la regresión es significativo al nivel del 5 %.

(2) El coeficiente b1 es positivo.

(3) El coeficiente b2 es negativo.

• Una vez que se ha calculado la regresión y se ha comprobado que es utilizable, la


altura promedio puede estimarse como la altura que se obtiene cuando en la
regresión se sustituye d por dg.

• De forma similar, la altura dominante h0 se predice cuando el diámetro promedio


  16

 
de los árboles dominantes (los 100 árboles con los mayores diámetros por hectárea)
entra en la regresión en lugar de d.
Cuando no se satisfagan las condiciones que permitan utilizar la curva ajustada por el
análisis de regresión, es más seguro asumir que el promedio de las alturas de los
árboles individuales medidos en la parcela es una estimación de la altura promedio del
rodal.
La altura puede medirse:

• usando un sistema de varas o pértigas telescópicas graduadas que se colocan contra


el árbol. Esto es posible para alturas hasta los 15 metros,

• o, más frecuentemente, por procedimientos ópticos, utilizando un dendrómetro.


Se mide desde la base o cuello del árbol hasta la yema terminal y se registra con una
aproximación de un decímetro (0,1 m) siempre que sea posible. Cuando se usan
dendrómetros, es imprescindible la utilización de la regla para situarse a la distancia
adecuada. En terrenos con pendiente, siempre que se pueda, hacer la medición lo más
horizontal al árbol.
En bosques mixtos o puros muy densos puede hacerse imposible la medición con un
dendrómetro; en este caso se utiliza el sistema de varas, se mide la altura maderable o
se estima a ojo.
También se mide la altura dominante de la parcela, para lo que utilizaremos el criterio
de los 100 árboles más gruesos por hectárea, o sea, cinco en parcelas de 0,05 ha; 10 en
parcelas de 0,1 ha y, generalizando, el número de árboles más gruesos a medir estará
dado por la siguiente fórmula:
Número de árboles a medir = tamaño de la parcela (ha) x 100,
aproximando el resultado al número entero superior.
3.2.6 MODELO No. 6
Este modelo se utiliza para el registro de las mediciones que se les hacen a los árboles
muestras. La selección de estos árboles se realiza por el método de la fracción de
muestreo, que permite sea seleccionado un grupo de árboles representativos de la
parcela y que están en proporción con la cantidad de árboles existentes en cada clase
diamétrica.
El muestreo consiste en dividir la cantidad de arboles marcados y numerados en la
parcela entre el valor resultante de multiplicar el área de la parcela en hectáreas por
100; la cifra obtenida es el intervalo que se utiliza para escoger los árboles muestras. El
primero corresponde a la mitad del intervalo y, a partir de ahí, los demás se escogen a
intervalo completo.
Por ejemplo; en una parcela de 0,05 ha se marcaron y numeraron 80 árboles. Como 80
entre 5 (0,05 x 100) es igual a 16, entonces el primer árbol muestra es él que ocupa la
posición ocho (el octavo en orden numérico) en la segunda columna del MODELO No.
4. El resto de los árboles muestras se elegirá a intervalos de 16 partiendo del primero
seleccionado, es decir, el de la posición 24, la 40, la 56, etc.
  17

 
Después de elegidos los árboles muestras se localizan, en el área de borde de la parcela,
árboles que tengan las mismas dimensiones en diámetro y altura que los árboles
muestras y de características morfológicas similares; éstos son los que se cortan para su
cubicación. La fórmula escogida será la de Smalian, aunque existen otras como las de
Newton-Simpson, de Huber, del cono truncado, etc. Se escoge la más apropiada, de
acuerdo a la forma de la troza, siempre que se diga cuál fue la utilizada.
En la cubicación se medirán las siguientes características:

• Diámetro a 1,30 metros sobre el nivel del suelo.

• Grosor de la corteza a 1,30 metros sobre el nivel del suelo.

• La altura total.

• Las alturas maderables que se consideren en el estudio.

• La altura de la copa inferior (h1), que es la altura hasta la primera rama viva más
baja en el tronco.

• La altura de la copa superior (h2), que es la altura hasta el primer verticilo completo
de ramas vivas.

• El diámetro de las secciones a cada metro.

• El grosor de la corteza de las secciones a cada metro.

• El ancho de la copa, perpendicular al eje del tronco.

• El diámetro a la mitad de la altura total.

• El grosor de la corteza a la mitad de la altura total.

• La longitud de la rabiza.
Cuando un punto de medición coincide con una protuberancia o deformación, es
necesario tomar la medida a distancias iguales por debajo y por encima del punto y
promediar los valores. La medición del diámetro en los árboles derribados es más
práctico realizarla con forcípula.
La longitud de la última sección antes del punto de altura maderable se considera como
tal si oscila entre 0,51 m y 1m; si su longitud es menor se le suma a la sección anterior.
En este caso, la penúltima sección variaría entre 1m y 1,5 m y sería la última.
3.2.7 MODELO No. 7
Es un modelo resumen donde se registran las características dasométricas calculadas por
hectárea, para antes del raleo, para el raleo y para después del raleo y todo por fecha de
medición. Se debe utilizar un modelo para cada especie existente en la parcela, si el
estudio así lo requiere; después se puede hacer un resumen de la parcela, con todas las
especies, en otro modelo si se considera conveniente.

  18

 
3.2.8 CHEQUEO FINAL
Cuando se termina el trabajo de campo, es obligado realizar un chequeo minucioso para
comprobar que ningún dato se ha omitido, así como que estén correctamente registrados

4 PROCESAMIENTO Y REGISTRO DE DATOS


4.1 GENERALIDADES
Todos los datos deben ser presentados de forma tal que puedan se comprendidos por
aquellos que deseen utilizarlos en una fecha posterior, quizás muchos años más tarde.
Para mayor claridad a veces puede ser deseable copiar las mediciones de campo a
modelos limpios, antes de iniciar los cálculos. A menos que los cómputos sigan el
patrón definido por este código, deben darse las fórmulas que se usen en cada etapa,
junto con notas sobre suposiciones fundamentales o aproximaciones que se hagan.
Esta descripción de procesamiento de datos es para realizarla en una calculadora, pero
donde las condiciones lo permitan, puede hacerse mediante programas con equipos
automatizados. Quisiéramos que en un futuro este código incluya el programa para el
procesamiento de datos en microcomputadoras.
Determinadas características se calculan primero para los árboles muestras de forma
individual y se registran en sus modelos correspondientes. A partir de ellos se calculan
los datos para la parcela y para la hectárea.
4.2 FACTOR DE ESTIMACION (FE)
Su determinación es necesaria para la estimación de algunas características por hectárea
a partir de los datos de la parcela. Se calcula dividiendo la unidad entre el área de la
parcela en hectárea, o sea:

1 10000 m 2
Factor de estimación = =
Area parcela Tamaño parcela en m 2

4.3 NUMERO DE ÁRBOLES


Es la suma de todos los árboles a los que se les midió el diámetro a 1,30 metros sobre el
nivel de suelo y que están resumidos y registrados en la columna tres (Cantidad de
árboles) del MODELO No. 4. Esa suma (n) multiplicada por el factor de estimación
nos da la cantidad de árboles por hectárea (N). Es decir:
N = n * FE

También puede hallarse dividiendo n entre el área de la parcela, o sea:

n
N=
Area parcela

  19

 
4.4 ÁREA BASAL
El área basal de cada clase diamétrica de acuerdo a la cantidad de árboles de la misma
se registra en el MODELO No. 4, en las columnas correspondientes según título. La
suma de todas ellas es el área basal de la parcela (g), o sea, el valor total de la columna
“Antes”. Este último valor multiplicado por el factor de estimación nos da el área basal
de la hectárea (G). Es decir:
G = g * FE

Se anota hasta con cuatro cifras decimales para el caso de la hectárea.

4.5 AREA BASAL PROMEDIO (gp)

Se calcula dividiendo el área basal total de la parcela o de la hectárea entre la cantidad


de árboles de la parcela (n) o de la hectárea (N). Es decir:

g G
gp = o gp =
n N
Se registra con cinco cifras decimales.

4.6 DIAMETRO MEDIO (dm)

También llamado diámetro medio aritmético o diámetro promedio aritmético. Es la


media aritmética de los n diámetros medidos en la parcela y se obtiene del MODELO
No. 3. Se calcula mediante la siguiente fórmula:

dm = ∑
di
n

4.7 DIAMETRO DE AREA BASAL PROMEDIO (dg)

Es el diámetro del árbol de área basal promedio de la parcela y es el más recomendado y


utilizado por los especialistas de la FAO y de IUFRO. Se halla por la siguiente fórmula:

dg =10000 g
7854

o utilizar la Tabla 5.
4.8 DIAMETRO MAYOR (Dm)
Es el correspondiente al árbol más grueso de la parcela y puede tomarse del MODELO
No. 3.

4.9 ALTURA TOTAL PROMEDIO (hp)

Es el promedio aritmético de todas las observaciones individuales de altura registradas


en el MODELO No. 5. Para la columna “Raleo” es el promedio de las alturas de todos
  20

 
los árboles raleados medidos; para la columna “Después” se toma el promedio de las
alturas medidas para las clases diamétricas, pero sin considerar las alturas de aquellas
clases que fueron raleadas. La fórmula sería:

hp = ∑
hi
ni

4.10 ALTURA DOMINANTE (ho)

Es el promedio de la altura de los 100 árboles más gruesos por hectárea y, aunque
existen otras definiciones, ésta es la más aceptada. Sólo se calcula para la columna
“Antes del raleo”. Para determinar cuántos de los árboles más gruesos (ng) de la
parcela vamos a promediar, se utiliza la siguiente fórmula:

ng =100 * Area de la parcela

Recordando siempre que es el área de la parcela en hectáreas.


4.11 DIAMETRO DE COPA
Es el promedio de las mediciones del ancho de la copa, hechas a los árboles muestras
escogidos en las PMP en cada fecha de medición y registrados en el MODELO No. 6.
No se calcula para la columna “Raleo” y es el mismo valor para las columnas “Antes
del raleo” y “Después del raleo”.
4.12 PORCIENTO DE COPA (% Cp)
Se calcula de la siguiente forma:

h − 1 (h1 + h 2 )
%Cp = 2 *100
h

Donde: h es la altura total del árbol,

h1 es la altura de la copa inferior,


h2 es la altura de la de la copa superior.
Primero se calcula para cada árbol muestra, registrándose en su correspondiente
MODELO No. 6 y el promedio de todos los árboles muestras de la parcela para una
fecha de medición se registra en el MODELO No. 7. No se calcula para la columna
“Raleo” y es el mismo valor para las columnas “Antes del raleo” y “Después del raleo”.
4.13 LONGITUD DE COPA (Lc)
Se calcula por la siguiente fórmula:

Lc = h − 1 (h1 + h2 )
2
Primero se calcula para cada árbol muestra, registrándose en su correspondiente
  21

 
MODELO No. 6 y el promedio de todos los árboles muestras de la parcela para una
fecha de medición se registra en el MODELO No. 7. No se calcula para la columna
“Raleo” y es el mismo valor para las columnas “Antes del raleo” y “Después del raleo”.
4.14 DENSIDAD
Se toma de la Tabla de densidades y partiendo del área basal por hectárea y de la altura
total promedio, datos que están registrados en el MODELO No. 6. Esta tabla debe ser
elaborada para cada una de las especies con las cuales harán plantaciones.
4.15 VOLUMEN CON CORTEZA (Vcc) Y VOLUMEN SIN CORTEZA (Vsc)
El volumen de cada troza de un metro puede tomarse de la Tabla 6 ó utilizar la fórmula
de Smalian u otra de las que existen, según la forma que tenga la troza.
Los volúmenes totales con y sin corteza del árbol se calculan para cada árbol muestra en
el MODELO No. 6. El volumen total del árbol es la suma de los volúmenes de todas
las secciones. El volumen con corteza se calcula utilizando los diámetros con corteza y
él sin corteza utilizando los diámetros sin corteza registrados en cada MODELO No. 6.
El volumen de la rabiza, o sea, la sección que queda después del diámetro tope que se
considere se calcula por la fórmula siguiente

Volumen rabiza = 0,0000262 * dr 2 *lr

donde: dr es el diámetro inferior de la rabiza, lr es la longitud de la rabiza.

El volumen total para la parcela o la hectárea se calcula usualmente de una tarifa (tabla,
gráfico o curva ajustada por regresión) para árboles individuales entrando con el
diámetro y la altura. Hay dos métodos:

(1) Cálculo del volumen del árbol con diámetro dg y altura promedio hp y multiplicar
por el número de árboles de la parcela (n) o de la hectárea (N).
(2) Cálculo de los volúmenes individuales de todos los árboles de la parcela, sumarlos
y la suma dividirla entre el área de la parcela para obtener el volumen por hectárea.
En este caso si la altura no es conocida para todos los árboles de la parcela, se puede
estimar por una regresión altura – diámetro.
Ambos métodos introducen un error en la estimación del volumen. El primero tiene un
error resultante de la distribución de los diámetros y el segundo de la distribución de las
alturas. El segundo método es generalmente preferible por su precisión, especialmente
si el volumen va a ser estimado hasta un diámetro límite.
El volumen total de la columna “Después del raleo” se calcula por diferencia de los
totales de las otras dos columnas.
Diferentes volúmenes pueden ser calculados, usando diferentes ecuaciones de volumen.
Por ejemplo:

• Volumen total con corteza (VTcc), es decir hasta el tope del árbol.

  22

 
• Volumen total sin corteza (VTsc).

• Volumen hasta un diámetro límite de siete centímetros (V7), cuatro centímetros (V4)
o catorce centímetros (V14).

• Otros tanto como Ud. quiera.


4.16 POR CIENTO DE CORTEZA (% Cort.)
Se calcula mediante la fórmula:

Vcc _ Vsc
%Cort = * 100
Vcc
El por ciento de corteza de cada árbol se registra en el MODELO No. 6 y el promedio
por parcela y fecha de medición se registran en el MODELO No. 7. Este por ciento
promedio es válido para las columnas “Antes del raleo” y “Después del raleo”; para la
columna “Raleo” se calcula con los datos de los árboles raleados.
4.17 COCIENTE DE FORMA
Es un índice que se utiliza para el estudio de la forma del árbol, debido a que el
diámetro de referencia y la altura total no son suficientes para describirla
completamente.
Se calcula mediante el cociente entre cada diámetro medido y anotado en el MODELO
No. 6 y el diámetro de referencia, en nuestro caso el diámetro medido a 1,30 metros
sobre el nivel del suelo. Es decir que para cada uno de los puntos en que se mide el
diámetro la fórmula para hallar el cociente de forma es:

di
Cociente de forma =
d1,30

donde: di es el diámetro medido en un punto.

El cociente de forma del árbol se calcula mediante la fórmula:

∑ di d
Cociente de forma del árbol = 1, 30

Cantidad de puntos medidos

El cociente de forma para la parcela es el promedio del item de todos los árboles
muestras de la parcela.

  23

 
4.18 COEFICIENTE MORFICO (f)
Es el valor resultante de la división del volumen real del árbol entre el volumen del
cilindro calculado con el diámetro a 1,30 metros sobre el nivel del suelo y la altura total
de dicho árbol. O sea:

4 *Volumen real del


f=
π * (d1,30 )2 * h

donde: π es igual a 3,1416....., h es la altura total del árbol.


El coeficiente mórfico de la parcela es el promedio del item de todos los árboles
muestras de la parcela.
4.19 INCREMENTO MEDIO ANUAL (IMA)
Se le determina al área basal, al diámetro, a la altura y al volumen de la parcela; ese
valor se multiplica por el factor de estimación para hallar el de la hectárea y éste se
registra en el MODELO No. 7.
Se calcula dividiendo el estimado del parámetro correspondiente, en una fecha
específica, entre la edad del árbol o del rodal en esa fecha. O sea:

Valor estimado
IMAPAR =
Edad
No se calcula para la columna “Raleo”.
4.20 INCREMENTO CORRIENTE ANUAL (ICA) O PERIODICO ANUAL (IPA)
También se calcula para todos los parámetros que se quiera; es el valor de la
estimación actual menos el valor de la estimación anterior y esa diferencia dividida
entre la diferencia de edades o el tiempo transcurrido entre las dos mediciones, lo cual
es lo mismo. O sea:

Estimación actual − Estimaciónanterior


ICAPAR =
Edad actual − Edad anterior

No se calcula para la columna “Raleo”.


4.21 INDICE DE SITIO (IS)
Como su nombre lo expresa, es un indicador de la calidad del sitio o estación forestal
para una especie determinada. El más utilizado es el valor de la altura dominante a una
edad determinada, aunque se puede utilizar cualquier otra característica dasométrica.
Si se ajustado una familia de curvas de índice de sitio para la especie en estudio, pues se
anota; de lo contrario hay que esperar a tener suficientes observaciones para realizar
dicho ajuste.
4.22 EDAD (t)
Es un dato muy importante para toda predicción del crecimiento e incremento de una
  24

 
masa boscosa. Debe determinarse siempre de una forma u otra. Se registra en años
hasta una cifra decimal.

5 MEDICIONES SUCESIVAS
5.1 FRECUENCIA DE LAS MEDICIONES
Aunque en el epígrafe 2.2.2. 5 ya tocamos este aspecto, aquí queremos aclarar que la
frecuencia establecida para futuras mediciones en la parcela puede ser alterada si en la
misma se va a efectuar un raleo. Esto último puede evitarse si se hace coincidir la fecha
del raleo con la fecha de la medición.
Las parcelas deben ser establecidas en los períodos de seca y deben volver a medirse en
esa misma fecha, o al menos en el mismo mes.
Siempre que se visite una parcela para volver a medirla se deben hacer y registrar las
siguientes observaciones:

• Especie: debe ser la misma que cuando la parcela fue establecida, excepto que la
masa boscosa se haya convertido en monoespecífica o en una mezcla como
resultado de los aclareos.

• Edad: nunca debe olvidarse este importantísimo dato.

• Fecha: es necesario registrar la fecha en que se hace la nueva medición y, además, el


nombre de quién la realiza.

• Sotobosque: se registra cualquier cambio ocurrido en las especies del sotobosque o


el la frecuencia de las mismas.

• Condiciones de la masa boscosa después de un raleo: se registra cualquier cambio


importante ocurrido en la masa boscosa como consecuencia de algún raleo
planificado o debido a otra situación.

• Otras observaciones: se registran los puntos de interés para los cuales no hay
encabezamientos apropiados, así como los cambios realizados en los establecidos,
dando las razones por las que se hicieron dichos cambios. Se puede anotar aquí
cualquier recomendación dada por otros profesionales.
5.2 ARBOLES DERRIBADOS POR EL VIENTO Y / O FALTANTES
Los árboles derribados por el viento se miden como si fueran árboles raleados. Si al
volver a medir una parcela notamos que faltan árboles, el diámetro de cada uno de ellos
se calcula mediante el incremento promedio de la parcela en el lapso de tiempo entre las
dos mediciones; estos árboles se tratan como si hubieran sido raleados.
5.3 RALEOS Y TALAS RASAS
Cuando la cantidad de árboles raleados en una parcela sobrepasa la cifra de 20, se
escogen dos por cada clase diamétrica ara ser cubicados como si fueran árboles
muestras.
En las parcelas sometidas a tala rasa se hace una medición total final; esto implica la
  25

 
medición del diámetro a 1,30 metros sobre el nivel del suelo a todos los árboles de la
parcela. Se aprovecha y se cubican como árboles muestras todos los que sean
necesarios para completar la representatividad de la muestra para la confección de una
tarifa.
Debe tenerse presente siempre que a las parcelas permanentes de muestreo se les da el
mismo tratamiento silvícola que a la masa boscosa donde están establecidas. Lo
importante es avisar a los que las establecieron, para que hagan las mediciones que sean
necesarias.

6. SISTEMA DE INFORMACION GEOGRAFICA


La gran necesidad de elaborar mapas que se puedan actualizar fácilmente, además de ser
precisos, claros y que incorporen contenidos cada vez más complejos, exige la adopción
de medios tecnológicos que respondan a estas exigencias y que permitan el desarrollo
de operaciones a menudo largas y costosas.
La determinación de producir mapas con propósitos especiales como por ejemplo, la
conveniencia física de un área para plantar determinada especie forestal y la
identificación de áreas susceptibles a la erosión, implica la cuantificación de
información de diferente orden y la realización de operaciones analíticas en una o dos
dimensiones.
En las entidades gubernamentales e investigativas como son institutos geográficos,
militares, forestales, hidráulicos, agrícolas, el mapa es una herramienta indispensable
para el conocimiento del territorio y un soporte para el diseño y la aplicación de
programas de desarrollo integral; así mismo es un auxiliar práctico y esencial para
representar fenómenos ligados a unidades territoriales (provincias, municipios), y
relacionarlos con la evolución continua de los recursos naturales, sociales, económicos,
culturales e institucionales que interactúan en un espacio geográfico.
La computadora y los Sistemas de Información Geográficos son herramientas de trabajo
y no en si mismos el fin de la cartografía o de otras ciencias, que hacen uso de estos con
propósitos prácticos y operativos.
En el desarrollo y uso de las bases de datos cartográficas de los SIG, la computadora es
usada para agilizar y mejorar el análisis de los datos geográficos.
Para hacer mapas con apoyo de una computadora se requiere de los siguientes
componentes: Programas, equipos e información o datos primarios. La calidad de los
mapas depende de la destreza y habilidad del ejecutante.

• Programas. Son requeridos para estructurar y procesar los datos seleccionados


para la confección del mapa. Existen programas específicos para tratar datos
gráficos como por ejemplo AutoCAD y Corel DRAW, desarrollados principalmente
para el diseño y el dibujo; asociados a ellos, existen programas para el manejo de la
información descriptiva o de atributos, tales como DBASE y FoxPro, entre oteros.
Para el procesamiento de datos alfanuméricos y gráficos simultáneamente se han
desarrollado programas como MAP MAKER y ACE entre otros. En la diversidad de
programas para SIG se mencionan entre los mas conocidos: ILWIS, IDRISI,
INFOCAM, ARC/INFO; SPANS GIS.

  26

 
• Los equipos. Los estándares son: Dispositivos para captura o entrada de datos
(Tableros o mesas digitalizadoras y scanners), Unidad de procesamiento
(computadora) y dispositivo para la salida de datos (Impresoras o plotters).

• Los datos. Conceptualmente un SIG es una tecnología de procesamiento de datos


ubicados en el espacio. La principal fuente de datos corresponde a los documentos
gráficos analógicos (documentos fotogramétricos, levantamientos de campo, mapas,
foto mapas etc.), además de aquellos obtenidos directamente con ayuda de
instrumentos digitales, de percepción remota, de sistemas de posicionamiento global
(GPS) y de digitalizadores o scanners. La base de datos una vez creada, debe
permitir su mantenimiento y actualización para que se puedan satisfacer las
necesidades inmediatas y futuras del usuario.
Un SIG. Puede definirse como un sistema computarizado que permite la recolección,
entrada, almacenamiento, manipulación, análisis, representación y salida eficiente de
datos espaciales y no espaciales, de acuerdo con especificaciones y requerimientos
concretos planteados por los usuarios dentro de un contexto de toma de decisiones.

El SIG tiene la habilidad de integrar datos georeferenciados, además de realizar


procesos de análisis que se pueden ejecutar sobre ellos para obtener nueva información.
Es una tecnología de integración en la que concurren diversas disciplinas dentro del
flujo de una relación multitemática para el desarrollo de proyectos.
6.1. Subsistemas del SIG.
Los subsistemas de un SIG son: la entrada de datos, el almacenamiento y
administración de los datos, el modelamiento y análisis de los datos y la presentación de
los datos.

• Entrada de datos: convierte los datos desde su formato original, análogo o digital,
a uno que puede ser usado por el SIG. Los datos a que se hace referencia se
encuentran generalmente en forma de mapas, tablas de atributos, fotografías aéreas,
imágenes de satélite, observaciones de campo, entre otros.

• Almacenamiento y administración, o de manejo de datos, incluye aquellas


funciones que son usadas para almacenar y recuperar los datos desde la denominada
base de datos.

• Modelamiento y análisis de datos, determina la cantidad de información que


puede ser generada por medio del SIG. La calidad de la información obtenida a
través del SIG, depende en gran parte de la calidad y precisión de los datos
introducidos al sistema. El sistema tiene la capacidad de generar diversos modelos
de simulación, de precisión y de decisión que pueden ser utilizados para realizar
proyecciones con base en situaciones reales.

• Presentación de resultados. Pueden presentarse en forma de mapas, tablas,


textos, valores y otros, tanto en forma analógica (impresa), como digital.
El contexto general de un SIG consiste en una organización de personal (usuarios),
instalaciones (procedimientos logísticos), equipos (hardware), programas (software) e

  27

 
información (datos), bajo una administración central y de relaciones bien definidas de
acuerdo con los objetivos planteados. (Figura 1)

Fig. 1 

El componente mas importante de un SIG, son las personas responsables de su


conceptualización, diseño, aplicación y uso. Se requiere de personal entrenado en
diferentes disciplinas y con una visión amplia de las necesidades, sin lo cual, no
importa que tan simple sea el proyecto este tiende a fracasar.

Existen tres etapas para el desarrollo de un proyecto de SIG, las cuales se resumen en el
establecimiento de la base de datos, la realización de procesos de análisis y la
presentación de resultados.

6.2. Campos de aplicación.


Actualmente los SIG son usados para diferentes aplicaciones en diferentes esferas de la
vida incluyendo la investigación; cubren un amplio rango de aplicaciones, desde el
análisis de los recursos ambientales, la planificación del uso de la tierra y la
planificación de la infraestructura, hasta los análisis demográficos, de mercado y los
estudios arqueológicos. Este rango continúa creciendo debido a que cada vez los SIG se
constituyen en sistemas más eficientes, más comunes y menos costosos. Dentro de las
más recientes aplicaciones se encuentran, entre otros, los proyectos de análisis de
cambios climaticos y la planificación de respuestas a emergencias.
Para la actividad forestal en nuestro país se emplea el sistema integrado SIFOMAP, que
constituye la integración de una aplicación de un SIG con el Ordena V2.0 (sistema en
MSDO para el trabajo de la Ordenación Forestal) y está destinado para usuarios con
posibilidades tecnológicas y de tenencia de los datos cartográficos fundamentales. La
aplicación fue desarrollada en ARGYS V8.3 enlazados con las interfaces creadas en
Borland Delphi V6.0. Los datos cartográficos fundamentales fueron creados con el
AutoCap MAP 2000.
Confección de Mapas Temáticos. En ellos se plasman todos los detalles de interés en
las denominadas capas: una capa de viales, una de suelo, uno de la red vial, una de
vegetación entre otras, de acuerdo al mapa resultante que se desee lograr. (Figura 2).

  28

 
Fig. 1 Mapas de diversos objetivos elaborados con un SIG

  29

 
6.3. Factores de éxito de un SIG.
El éxito es determinado por cuatro factores: el conjunto de datos, la organización de los
datos, el modelo y el criterio de decisión.

• El conjunto de datos. Los aspectos mas importantes de la calidad del dato son: que
contengan información sobre su fuente y sobre el procesamiento utilizado para
producirlo; que este ubicado geográficamente en forma precisa; que sea correcto y
represente la realidad; que sea preciso en relación con la escala usada; que se
especifique el periodo en el cual fue recolectado; que este actualizado, que este
completo y que tengan una relación lógica consistente unos con otros.

• Organización del dato. El dato tiene valor si está en el lugar y tiempo correcto. Debe
organizarse de acuerdo con los requerimientos específicos de información, la cual en un
SIG se presenta básicamente como mapa y como tabla.

• El modelo de decisión. Un buen modelo es claro y predice correcta y


consistentemente el comportamiento del mundo real para el fenómeno de interés.

• Validez del criterio. Los factores que intervienen en el éxito de un SIG se reflejan en
el grado de satisfacción del usuario. El criterio usado por el tomador de decisiones, será
el mismo usado por quienes se deben satisfacer.

  30

 
BIBLIOGRAFIA CONSULTADA
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Israel, Ltd. Traducido del ruso por N. Kaner. Editado por C. Porter. Israel. 450 pp.

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Forestal y de la Fauna. Dirección General del Inventario Nacional Forestal. México.
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Teledetección y los SIG en la Gestión de Recursos Naturales. Curso de
Especialización. Zschortau. Alemania. Soporte Magnético.

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(1): 111 – 121.

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Forestales. La Habana, 140 pp.

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Forestales. La Habana, 8 pp.

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  31

 
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Ciencia Forestal, (33): 27 – 42.

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aclareo y rendimiento en plantaciones forestales. Boletín Instituto Forestal
Latinoamericano de Investigación y Capacitación. Mérida. Venezuela, (27 – 28): 3 –
17.

  32

 
MODELO No.1 ESTABLECIMIENTO

Provincia________________ Empresa_________________

Unidad Silvícola_______________ Lote______ Rodal______

Especie(s)_______________________________________________

Fecha de establecimiento__________ Mapa________ Foto________

Coordenadas X (longitud)______________ Y (latitud)___________

Plantación_____ Fecha_________ Bosque natural____ Área de la parcela_______

Altitud (msnm)__________ Pendiente___________

Topografía_______________ Exposición__________

Sotobosque_______________________________________________________________________________
______________________

Cobertura_______________ Composición_____________________

Raleado______ No raleado_________ Número de tocones_______

Objetivo y tratamiento_____________________________________

INDICE DE TASACION

Altura total Altura Diámetro Area basal Volumen total


dominante
Observado
Calculado

Observaciones____________________________________________________________________________
_________________

Evaluador:

  33

 
MODELO No.2 CROQUIS DE UBICACIÓN DE LA PARCELA

Provincia________________ Empresa_________________

Unidad Silvícola_______________ Lote______ Rodal______

Especie(s)___________________________________ Fecha__________

Croquis

Calicata

  34

 
MODELO No.3 DIAMETRO

Provincia________________ Empresa_________________

Unidad Silvícola_______________ Lote______ Rodal______

Especie(s)___________________________________ Hoja No_________

Arbol Fecha Fecha Fecha Fecha Fecha Fecha Fecha


No.

Evaluador:

  35

 
MODELO No. 3 A DIAMETRO

Empresa: _____________________ Provincia: _____________________Municipio:_______________

Unidad Silvícola: _____________________ Lote: _______________ Rodal: ______________

Parcela No. _________________ Hoja No. _______________

Árbol Especie Fecha Fecha Fecha Fecha Fecha Fecha


No.

  36

 
MODELO No.4ARBOLES Y AREA BASAL POR CLASE DIAMETRICA

Provincia________________ Empresa_________________

Unidad Silvícola_______________ Lote______ Rodal______

Especie(s)___________________________________ Hoja No_________

Area basal
Antes Raleo Después
raleo

Evaluador
Total (ha) _________ ________ _______ _______ ______

Total (ta) _________ _________ _______ _______ _____

g media____________ dg ________________

  37

 
MODELO No.5 ALTURA

Provincia________________ Empresa_________________

Unidad Silvícola_______________ Lote______ Rodal______

Especie(s)___________________________________ Hoja No_________

Fecha Fecha Fecha


árbol diámetro altura árbol diámetro altura árbol diámetro altura

Altura dominante Altura dominante Altura dominante


Evaluador Evaluador Evaluador

  38

 
MODELO No.6 ARBOL MUESTRA

Provincia________________ Empresa_________________

Unidad Silvícola_______________ Lote______ Rodal______

Especie(s)___________________________________ Hoja No_________

Altura Diámetro Diámetro Diámetro Cantidad Diámetro Otras medidas


(m) con corteza sin nudos nudos
corteza (cm) corteza (cm)
(cm) (cm)
d1,30

dcort1,30

htotal

long copa

ancho copa

d0,5total

h4

long rabiza

h1

h2

  39

 
MODELO No.7 RESUMEN

Provincia________________ Empresa_________________

Unidad Silvícola_______________ Lote______ Rodal______

Especie(s)___________________________________ Hoja No_________

Fecha Fecha
Antes Raleo Post Antes Raleo Post
raleo raleo raleo raleo
Factor de estimación (FE)
Número de árboles (N)
Diámetro área basal promedio (dg)
Area basal (G)
Area basal promedio (gp)
Incremento medio anual (I.M.A.g)
Incremento corriente anual (I.C.A.g)
Diámetro área basal promedio (dg)
Incremento medio anual (I.M.A.dg)
Incremento corriente anual
(I.C.A.dg)
Diámetro promedio aritmético
Diámetro mayor
Altura total promedio
Incremento medio anual (I.M.A.h)
Incremento corriente anual (I.C.A.h)
Altura dominante (ho)
Volumen total con corteza (VTcc)
Incremento medio anual
(I.M.A.VTcc)
Incremento corriente anual
(I.C.A.VTcc)
Volumen total sin corteza (VTsc)
Por ciento de corteza
Diámetro de copa
Longitud de copa
Por ciento de copa
Cociente de forma
Coeficiente mórfico
Densidad
Indice de sitio
Edad

  40

 
Tabla 1. Equivalencias horizontales según grados de pendientes

Distancias en metros
5 10 15 20 25 30 35 40 45
6-9 5,05 10,10 15,15 20,20 25,25 30,30 35,35 40,40 45,45
10-12 5,10 10,20 15,30 20,40 25,50 30,60 35,70 40,80 45,90
13-15 5,15 10,30 15,45 20,60 25,75 30,90 36,05 41,20 46,35
16-17 5,20 10,40 15,60 20,80 26,00 31,20 36,40 41,60 46,80
18-19 5,25 10,50 15,75 21,00 26,25 31,50 36,75 42,00 47,25
20 5,30 10,60 15,90 21,20 26,50 31,80 37,10 42,40 47,70
21-22 5,35 10,70 16,05 21,40 26,75 32,10 37,45 42,80 48,15
23 5.40 10,80 16,20 21,60 27,00 32,40 37,80 43,20 48,60
24-25 5,45 10,90 16,35 21,80 27,25 32,70 38,15 43,60 49,05
26 5,50 11,00 16,50 22,00 27,50 33,00 38,50 44,00 49,50
27 5,55 11,10 16,65 22,20 27,75 33,30 38,85 44,40 49,95
28 5,60 11,20 16,80 22,40 28,00 33,60 39,20 44,80 50,40
29-30 5,65 11,30 16,95 22,60 28,25 33,90 39,95 45,20 50,85
31 5,70 11,40 17,10 22,80 28,50 34,20 39,90 45,60 51,30
32 5,75 11,50 17,25 23,00 28,75 34,50 40,25 46,00 51,75
33 5,80 11,60 17,40 23,20 29,00 34,80 40,60 46,40 52,20
34 5,85 11,70 17,55 23,40 29,25 35,10 40,95 46,80 52,65
35 5,90 11,80 17,70 23,60 29,50 35,40 41,30 47,20 53,10
36 5,95 11,90 17,85 23,89 29,75 35,70 41,65 47,60 53,55
37 6,00 12,00 18,00 24,00 30,00 36,00 42,00 48,00 54,00
38 6,05 12,10 18,15 24,20 30,25 36,30 42,35 48,40 54,45
39 6,10 12,20 18,30 24,40 30,50 36,60 42,70 48,80 54,90
40 6,15 12,30 18,45 24,60 30,75 36,90 43,05 49,20 55,35
41 6,25 12,50 18,75 25,00 31,25 37,50 43,40 49,60 55,80
42 6,30 12,60 18,90 25,20 31,50 37,80 44,10 50,40 56,70
43 6,35 12,70 19,05 25,40 31,75 38,10 44,45 50,80 57,15
44 6,40 12,80 19,20 25,60 32,00 38,40 44,40 51,20 57,60
45 6,45 12,90 19,35 25,80 32,25 38,70 45,15 51,60 58,05
46 6,55 13,10 19,65 26,20 32,75 39,30 45,85 52,40 58,95
47 6,60 13,20 19,80 26,40 33,00 39,60 46,20 32,80 59,40
48 6,65 13,30 19,95 26,60 33,25 39,90 46,55 53,20 59,85
49 6,70 13,40 20,10 26,80 33,50 40,20 46,90 53,60 60,30
50 6,80 13,60 20,40 27,40 34,00 40,80 47,60 54,40 61,20

  41

 
Distancias en metros
50 55 60 65 70 75 80 85 90
6-9 50,50 55,55 60,60 65,65 70,70 75,75 80,80 85,85 90,90
10-12 51,00 56,10 61,20 66,30 71,40 76,50 81,60 86,70 91,80
13-15 51,50 56,65 61,80 66,95 72,10 77,25 82,40 87,55 92,70
16-17 52,00 57,20 62,40 67,60 72,80 78,00 83,20 88,40 93,60
18-19 52,50 57,75 63,00 68,25 73,50 78,75 84,00 89,25 94,50
20 53,00 58,30 63,60 68,90 74,20 79,50 84,50 90,10 95,40
21-22 53,50 58,85 64,20 69,55 74,90 80,25 85,60 90,95 96,30
23 54,00 59,40 64,80 70,20 75,60 81,00 86,40 91,80 97,20
24-25 54,50 59,95 65,40 70,85 76,30 81,75 87,20 92,65 98,10
26 55,00 60,50 66,00 71,50 77,00 82,50 88,00 93,50 99,00
27 55,50 61,50 66,60 72,15 77,70 83,25 88,80 94,35 99,90
28 56,00 61,60 67,20 72,80 78,40 84,00 89,60 95,20 100,80
29-30 56,50 62,10 67,80 73,40 79,10 84,75 90,40 96,05 101,70
31 57,00 62,70 68,40 74,10 79,80 85,50 91,20 96,90 102,60
32 57,50 63,25 69,00 74,75 80,50 86,25 92,00 97,75 103,50
33 58,00 63,80 69,90 75,40 81,20 87,00 92,80 98,60 104,40
34 58,50 64,35 70,20 76,05 81,90 87,75 93,60 99,45 105,30
35 59,00 64,90 70,80 76,70 82,60 88,50 94,40 100,30 106,20
36 59,50 65,45 71,40 77,35 83,30 89,25 95,20 101,15 107,10
37 60,00 66,00 72,00 78,00 84,00 90,00 96,00 102,00 108,00
38 60,50 66,55 72,60 78,65 84,70 90,75 96,80 102,85 108,90
39 61,00 67,10 73,20 79,30 85,40 91,50 97,60 103,70 109,80
40 61,50 67,65 73,80 79,95 86,10 92,25 98,40 104,55 110,70
41 62,00 68,20 74,40 80,60 86,80 93,00 99,20 105,40 111,60
42 63,00 69,30 75,60 81,90 88,20 94,50 100,80 107,10 113,40
43 63,50 69,85 76,20 82,55 88,90 95,25 101,60 107,95 114,30
44 64,00 70,40 76,80 83,20 89,60 96,00 102,40 108,80 115,20
45 64,50 70,95 77,40 83,85 90,30 96,75 103,20 109,65 116,10
46 65,50 71,50 78,60 85,15 91,70 98,25 104,80 111,35 117,90
47 66,00 72,60 79,20 85,80 92,40 99,00 105,60 112,20 118,80
48 66,50 73,15 79,80 86,45 93,10 99,75 106,40 113,05 119,70
49 67,00 73.70 80,40 87,10 93,80 100,50 107,20 113,90 120,60
50 68,00 74,80 81,60 88,40 95,20 102,00 108,80 115,60 122,40

  42

 
Distancias en
metros
95 100
6-9 95,95 101,00
10-12 96,90 102,00
13-15 97,85 103,00
16-17 98,80 104,00
18-19 99,75 105,00
20 100,70 106,00
21-22 101,65 107,00
23 102,60 108,00
24-25 103,55 109,00
26 104,50 110,00
27 105,45 111,00
28 106,40 112,00
29-30 107,35 113,00
31 108,30 114,00
32 109,25 115,00
33 110,20 116,00
34 111,15 117,00
35 112,10 118,00
36 113,05 119,00
37 114,00 120,00
38 114,95 121,00
39 115,50 122,00
40 116,85 123,00
41 117,80 124,00
42 119,70 126,00
43 120,,65 127,00
44 121,60 128,00
45 122,55 129,00
46 124,45 131,00
47 125,40 132,00
48 126,35 133,00
49 127,30 134,00
50 129,20 136,00

  43

 
Tabla 2 Equivalencias entre grados y % de pendiente

Grados %
2 4
4 7
6 11
8 14
10 18
12 21
14 25
16 29
18 33
20 36
22 40
24 45
26 49
28 53
30 58
32 63
34 68
36 73
38 78
40 84
42 90
44 97
45 100

  44

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