Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
A RT ÍCU LO D E I N V E S T I G ACI Ó N
Fecha de recepción: 1
6 de junio de 2014 Fecha de aprobación: 15 de agosto de 2014
Este artículo está publicado en acceso abierto bajo los términos de la licencia Creative Commons
Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 2.5 Colombia.
| Vol. 9, n.º 18 julio - diciembre 2014 · ISSN impreso 1909-230X · EN LÍNEA 2389-7481 /Pp. 157-180 157
Karen Lorena Linares Ardila y Aura María Sierra Acero
Resumen
El presente artículo indaga sobre la violencia sexual hacia las mujeres como arma de gue-
rra en el marco del conflicto armado colombiano. Toma como referencia el caso de la región
de los Montes de María y enfatiza en los repertorios de acción del paramilitarismo en la zona.
Da cuenta de cómo el control de la vida, del cuerpo y del pensamiento de las mujeres, así como
la transgresión de las prácticas de la vida cotidiana han sido instrumentos utilizados por el
paramilitarismo para generar un total dominio territorial, de tal manera que el cuerpo de las
mujeres ha sido catalogado como botín de guerra. Además, analiza la transgresión como prác-
tica política desde el ámbito del feminismo, entendida como las transformaciones y resisten-
cias que hacen las mujeres a las prácticas de la cultura patriarcal que las subordina y violenta.
Abstract
This article explores sexual violence against women as a weapon of war in the context
of the colombian armed conflict, particularly in the region of Montes de Maria, emphasizing
on paramilitary violent repertoires. Control of women’s life, body and mind and the trans-
gression of everyday life practices have been used as tools by paramilitarism to generate total
territorial control. As a consequence, the bodies of women have been listed as spoils of war.
Furthermore, transgression is analyzed as a political practice from a feminist perspective,
understood as transformations and resistance against patriarchal culture that subordinates
and abused women.
158 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
Introducción
Una de las problemáticas que se han estudiado en la Licenciatura
en Educación Básica con Énfasis en Ciencias Sociales de la Universidad
Pedagógica Nacional es la violencia sexual como arma de guerra que em-
plean los grupos paramilitares para deshonrar y debilitar al enemigo, en
función de las necesidades que tienen las multinacionales y los terrate-
nientes de limpiar el territorio, así como de sus propias necesidades de
fortalecer y perpetuar su poder sobre la población. Las acciones parami-
litares en la región de los Montes de María han sido de las más sanguina-
rias y violentas en Colombia, ya que se utilizaron distintos mecanismos
de terror y tortura, de los cuales se destaca la violencia sexual.
En el presente artículo se analizan los principios y las prácticas dis-
criminatorias como resultado de la reproducción de la cultura patriarcal,
reconocidas en la región de los Montes de María, para así reflexionar en
torno al panorama de violencia sexual contra las mujeres tanto en el es-
pacio público como en el privado (hogar). Además, se indaga sobre los es-
pacios y lugares en los cuales las mujeres se han formado políticamente,
haciendo énfasis en el papel de la organización y en la “transgresión” o
ruptura realizada por las mujeres en contra de las prácticas de guerra im-
puestas por los actores armados. Para esto se trabaja desde la perspectiva
de la transgresión como práctica política a partir del ámbito del feminis-
mo, entendido como las transformaciones y resistencias con las que las
mujeres enfrentan a las prácticas de la cultura patriarcal que las subor-
dinan y violentan. Una mujer transgresora rompe mandatos patriarcales
impuestos y gana en autonomía y ciudadanía.
Metodología
El trabajo se planteó como una investigación con trabajo de campo,
en el cual se utilizó el método etnográfico y como principal herramienta
las entrevistas. Se entrevistaron diez mujeres, entre las que se encuen-
tran: mujeres líderes de procesos organizativos de víctimas en la región;
mujeres de base o campesinas de la región que han tenido poco acer-
camiento a procesos organizativos, y mujeres profesionales en el cam-
po de las humanidades, tales como psicólogas, trabajadoras sociales y
licenciadas.
En el trabajo se les dio relevancia a las voces de las mujeres líderes
porque han acompañado muchos procesos y a las de las mujeres en con-
dición de víctimas y sus testimonios, pues recogen la experiencia y la
voz misma de todas aquellas mujeres con las que han podido compartir
su lucha como mujeres víctimas en una región dominada totalmente por
las lógicas patriarcales. Asimismo, se trabajó especialmente de la mano
con la representante de las mujeres víctimas del Departamento de Bo-
lívar por el delito de violencia sexual, también integrante de la Mesa
Municipal de Víctimas de Carmen de Bolívar, ya que su representación le
ha permitido conocer el panorama de las mujeres víctimas de violencia
sexual en la región y ha acompañado a muchas de ellas en sus procesos
de exigibilidad de derechos.
También es importante resaltar que debido a la imposibilidad de tra-
bajar directamente con mujeres víctimas de violencia sexual (ya que no
tenemos los elementos profesionales necesarios para hacerles una aten-
ción psicosocial), fue necesario hacer la investigación con líderes como
la mencionada en pro de un análisis reflexivo y transformador.
Finalmente, cabe anotar que trabajar con esta clasificación de las mu-
jeres nos permitió reconocer diferentes perspectivas en torno a la violen-
cia sexual, su naturalización y preponderancia en el marco del conflicto
armado, así como a los tratamientos necesarios para la exigibilidad de
sus derechos.
Resultados
160 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
razón, el grueso de la población víctima con vida son las mujeres, pues
los hombres en su mayoría son víctimas fatales por formar parte de las
filas de los ejércitos; las mujeres llevan a cuestas el peso de la guerra, lo
cual ha violentado totalmente su cuerpo y las ha convertido en botín de
guerra en el contexto del conflicto armado colombiano.
La violencia sexual es un mecanismo para transgredir a las comuni-
dades porque es parte de la “ruta del terror” determinada por los para-
militares para lograr fines de exterminio y expansión, lo cual conlleva
el empleo de medios para violentar a las poblaciones y de esta manera
lograr sus objetivos. La violencia sexual se determina como un medio
para mandar un mensaje al enemigo, es decir, el cuerpo de las víctimas
se convierte en un transmisor en el cual el mensaje debe impregnar a la
población de terror y miedo.
Las prácticas discriminatorias derivadas de la cultura patriarcal, la cual
es construida en el mundo relacional, además de ejercer sumisión y humi-
llación a las mujeres, se refuerzan en un contexto de guerra utilizando el
cuerpo de las mujeres como territorio en disputa para los actores armados.
Esto último se afianza a partir de las prácticas de batalla y de guerra, las
cuales estimulan en los varones las acciones agresivas e intensifican en
su entrenamiento y acciones militares los estereotipos “machistas”, en los
que cualquier muestra de debilidad es asociada con lo femenino.
Frente a las prácticas de la cultura patriarcal inmersas y reforzadas
en el conflicto armado, la autora feminista Olga Amparo Sánchez (2008)
expresa:
[U]na de las prácticas de guerra más cotidianas y difundidas desde que
la guerra existe es la violación y el abuso sexual sistemático de mujeres
y niñas, la cual revela el peso simbólico que deposita la cultura en la in-
tegridad sexual de los cuerpos femeninos y, por consiguiente, en la posi-
bilidad de que sean utilizados como arma y como botín de guerra. (p. 65)
162 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
1. El valor diferencial
La sociedad inmersa en un sistema socio-sexual patriarcal se ha or-
ganizado en relaciones de poder, las cuales anteponen a un ser sobre el
otro desconociéndolo y señalándolo a través de juicios discriminatorios.
Por ello se reconoce que la cultura patriarcal establece un sistema de va-
lores que se ha naturalizado históricamente en el mundo relacional. Tan-
to ha marcado a la sociedad colombiana este sistema, que ha generado
un conjunto de beneficios para los varones por encima de las mujeres, en
donde el ejercicio de poder abusivo por parte del hombre ha violentado
de diferentes formas a las mujeres.
En los distintos principios discriminatorios presentes en la cultura
patriarcal, tanto en el espacio público como en el privado, existen valo-
res diferenciales, es decir, las prácticas en donde las mujeres son relega-
das a oficios determinados por la cultura patriarcal que se evidencian en
los distintos roles que se les asignan a las mujeres y a los varones. En el
espacio privado, su papel y posición política, cultural, social y religiosa
son desconocidos y solo se les determinada para oficios en el hogar y
para el cuidado de otros. En el espacio público, las mujeres son minimi-
zadas en relación con los varones de manera intelectual y económica,
además de afrontar diversas situaciones, tales como la violencia ejercida
en el transporte público, en el ámbito educativo e incluso en espacios de
participación política y ciudadana.
En el valor diferencial uno de los argumentos preponderantes es la “de-
bilidad de las mujeres”; con este prejuicio se busca justificar el ejercicio de
poder y la fuerza desmedida en contra de las mujeres por sus condiciones
físicas y actitudinales. Las mujeres de la región de los Montes de María
adoptan la idea de que uno de los motivos por los cuales se ejerce violen-
cia contra ellas se debe a su supuesta debilidad —considerando debilidad
al estado físico medido en fuerza o la aptitud que la mujer presente frente
a una situación—, pero además reconocen cómo las mujeres deben seguir
en un juego de fuerzas en donde el que pegue más duro es el que manda.
Evidencia de esto es lo expresado por una mujer líder de la región:
Nosotras las mujeres siempre tenemos la parte más débil que los hom-
bres porque si el hombre por ejemplo es celoso, lo levanta a uno a puños
y ahí viene el maltrato y el maltrato claro que muchas veces no lo hace
uno y de pronto un hombre que me pegue todos los días, me reviente los
ojos, la cara por todas partes me pegue y de pronto de la noche a la maña-
1 Concepto aceptado y socializado culturalmente para designar a los hombres que tie-
nen actitudes y pensamientos discriminatorios hacia las mujeres.
2 En el año 2012 se reportaron 1.719 casos de maltrato y 26 feminicidios en seis departa-
mentos de la Costa. Sucre es el departamento con mayor índice de maltratos hacia la
población femenina. Son 677 casos de violencia contra las mujeres y seis homicidios
(“Mujeres, víctimas de una sociedad violenta”, 2012).
164 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
2. El cuerpo y la sexualidad
Históricamente, la especie humana ha sido diferenciada por el cuer-
po y la sexualidad, aspectos que biológicamente han sido identificados
como mujeres y hombres. Los cuerpos y la sexualidad que desarrollan
enmarcan un conjunto de valores, costumbres y acciones que son nor-
mativizados por la cultura patriarcal. El cuerpo de las mujeres, en la cul-
tura patriarcal, es reconocido como un objeto para los hombres, lo cual
ha llevado a que las mujeres estén al servicio de los varones por medio
de su cuerpo y de su sexualidad.
El valor diferencial ha agudizado el problema del poder abusivo de
los hombres sobre las mujeres, relación que las ha sujetado, esencialmen-
te a su cuerpo, como principio discriminador. Esto ha sido expresado por
muchas mujeres con quienes trabajamos en los Montes de María, en don-
166 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
168 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
170 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
3 Véase los informes sobre violencia sociopolítica contra mujeres, jóvenes y niñas en
Colombia. Mesa de trabajo Mujer y Conflicto Armado.
172 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
174 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
176 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
Conclusiones
La región de los Montes de María se constituye como un territorio de
vulnerabilidad para las mujeres, de un lado, porque es una zona que se dis-
putan diferentes actores armados por los beneficios económicos y políti-
cos que les ha generado, en donde las mujeres se convierten en el punto de
movilización por medio del desplazamiento y en el objeto de control so-
cial. De otro, por las prácticas y los principios discriminatorios que presen-
ta debido a su construcción socio-cultural, los cuales legitiman algunas
acciones que han sucedido allí, es decir, a lo que culturalmente se define
como “machismo”, el cual se presenta de manera aguda en la región. A este
se suma tanto la falta de atención por parte del Estado a la situación de las
mujeres y la omisión en los procesos de justica para aquellas que son vícti-
mas del conflicto armado, como las dificultades que enfrentan las mujeres
a causa de su dependencia económica, la cual es a su vez consecuencia de
los diferentes principios discriminatorios de la cultura patriarcal, en espe-
cial del valor diferencial basado en la falta de oportunidades educativas,
laborales e inclusivas dentro de las políticas públicas.
Las mujeres en los Montes de María sufren un ciclo de violencias co-
metidas contra ellas por su condición de mujeres. Esta situación se agrava
porque se encuentran en un contexto de enfrentamiento bélico, en el cual
los actores armados retoman las prácticas de discriminación de la cultu-
ra patriarcal contra las mujeres como una estrategia de guerra en la que
ejercen un dominio sobre sus vidas, cuerpos y pensamientos, tanto en el
espacio público como en el privado. Esperan tener un control social sobre
la región por medio de la victimización de mujeres, niños, niñas y varo-
nes, limitando, regulando e influyendo los procesos de construcción de
la identidad y, específicamente, controlando la sexualidad de las mujeres.
Es así como en el trabajo de campo encontramos que las prácticas de
discriminación contra las mujeres sobrepasan el ámbito privado (hogar)
como consecuencia del conflicto en la región, cuyas dinámicas trans-
gredieron las prácticas de la vida cotidiana de las mujeres. El parami-
litarismo ha instaurado un orden social que no solo afecta a los demás
178 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política
Mujeres transgresoras…
Ã
Reconocimientos
El presente artículo de investigación científica presenta apartes de los resultados de
nuestro trabajo de grado investigativo para optar al título de Licenciadas en Educa-
ción Básica con Énfasis en Ciencias Sociales en la Universidad Pedagógica Nacional,
el cual se titula “Ya nos cansamos de callar” Violencia sexual contra las mujeres como
arma de guerra del paramilitarismo en la región de los Montes de María, que fue finan-
ciado por las autoras.
Ã
Karen Lorena Linares Ardila
Estudiante de Licenciatura en Educación Básica con Énfasis en Ciencias Sociales (LE-
BECS), Universidad Pedagógica Nacional, Bogotá, Colombia.
Ã
Aura María Sierra Acero
Estudiante de la Licenciatura en Educación Básica con Énfasis en Ciencias Sociales
(LEBECS), Universidad Pedagógica Nacional, Bogotá, Colombia.
Referencias
Beauvoir, S. D. (1987). El segundo sexo. Madrid: Universidad de Valencia / Instituto de
la Mujer.
Centro de Memoria Histórica (CMH). (2010). La masacre de Bahía Portete. Mujeres
Wayuu en la mira (Informe). Bogotá: Taurus.
Mendoza, N. C., Torres, A. & Barragán, D. (2006). “Aquí todo es educativo”: Saberes
pedagógicos y prácticas formativas en organizaciones populares. Folios:
Revista de la Facultad de Humanidades, 23, 15-28.
“Mujeres, víctimas de una sociedad violenta en la Región Caribe”. (9 de junio
de 2012). El Heraldo. Recuperado de http://www.elheraldo.co/region/
mujeres-victimas-de-una-sociedad-violenta-en-la-region-caribe-70597
Restrepo, E. (2007). Identidades: planteamientos teóricos y sugerencias
metodológicas para su estudio. Jangwa Pana, 5 (julio), 24-35.
Rodríguez, S. P. & Mendoza, C. (2007). Subjetividad, formación política y
construcción de memorias. Pedagogía y Saberes (Universidad Pedagógica
Nacional, Facultad de Educación), 27, 77-85.
Sánchez, O. A. (2006). Las rutas de los feminismos, pacifismos y resistencias. Bogotá:
Ruta Pacífica de las Mujeres.
Sánchez, O. A. (2008). Las violencias contra las mujeres en una sociedad en guerra.
Bogotá: Ruta Pacífica de las Mujeres.
180 Universidad Nacional de Colombia • Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales • Departamento de Ciencia Política